Uruguay “Sembrando salud con Medicina Bioenergética” La Hna. María Teresa Hernández nos comparte su rica experiencia del trabajo que viene realizando desde el año 2000 en el ámbito de la Medicina Alternativa, concretamente en Bioenergética. Un trabajo que ha ido tomando “cuerpo” progresivamente, donde colaboran las hermanas de su comunidad y un valioso grupo de voluntarios que con entusiasmo y entrega disminuyen el sufrimiento de tantas personas. pacientes un día a la semana, y todos los días trabaja en la preparación de las plantas. Intentamos, dentro de lo posible, que los pacientes puedan llevarse las plantas de nuestra casa. Hay un equipo muy lindo dispuesto a seguir donando su tiempo para colaborar en esta obra. Está compuesto de 17 miembros, todos ellos versados en este método: dos médicas, profesores de Yoga, especialistas en masajes, profesores de educación física, delineantes… ¡Una verdadera riqueza! Maria Teresa con su comunidad Inicié esta misión formándome en bioenergética. En 1999 realicé un curso y el 2000 hice otro de tercer nivel. Al año siguiente comenzó el trabajo en la casa Francisco Simón. Quiero iniciar este testimonio de trabajo de BIO, agradeciendo a la Provincia y a mis hermanas de Francisco Simón, por el apoyo incondicional que me dieron para poder lograrlo… Son muchísimas las personas que han pasado por nuestra casa, y también muchos los que se han curado. El tratamiento se hace a base de ‘yuyos’, hierbas medicinales, tierra, arcilla y un cambio en la alimentación que ayuda a la desintoxicación. Todas las hermanas están involucradas de una forma u otra, pero Renée, German y Marta Albarenque son las que en este momento están más directamente involucradas. Marta se ocupa del trabajo administrativo, prepara las historias de los pacientes para el día de la consulta. Renée atiende a los 22 FMM Lugar de Encuentro VII/73 Cuando empezamos estaban en el grupo Adelaida y María Pura. En la comunidad de Florida, nuestra hermana Dorota, sigue este mismo método con un grupo de colaboradores. Es difícil colocar en palabras esta vivencia, por eso van algunos testimonios. Con todo mi afecto y gratitud a cada una de las hermanas del Instituto, María Teresa Hernández V. fmm Algunos Testimonios: Son muchos los testimonios de curación que se van dando con el tratamiento de ‘bio’ a base de plantas, yuyos y tierra o arcilla, como: Diversos cánceres, tumores, diabetes, leucemia, enfermedades de la piel… Aquí van algunos: Primero: “En diciembre 2008 me diagnosticaron un cáncer de recto muy agresivo. Me hablaron de este de julio de 2010 a este lugar maravilloso, justo al día siguiente del 14 cumpleaños de Domi. Compartir con colabores de Bioenergética lugar, y después de hacer un tratamiento con mucha fe, en mayo de 2009 la tomografía que me hicieron solamente daba una alteración en las paredes del recto; el cáncer había desaparecido. Muchas gracias hermanas y a todo ese lindo grupo de bioenergética. Con mucho amor.” Marta Crovetto Con muchas esperanzas de sanar a nuestra hija, después de casi perderla en la Mutua a causa del diagnóstico y tratamiento que le dieron para una “dermatitis atípica infectada”, empezamos el tratamiento los tres. Domi perdió parte de la piel, se le cayó el cabello, se hinchó toda, su piel extravasaba líquidos con un olor fétido horrible. ¡Fue terrible, y sólo Dios y nosotros sabemos lo que fue aquello! Cuando mejoró de esta situación, empezamos con los yuyos y progresivamente se fue recuperando. Fue un largo camino que pudimos vivir gracias a la ayuda, paciencia y amor de este grupo de personas, de terapeutas y amigos. Hoy, a casi dos años de distancia, nos sentimos parte de este grupo que siempre nos apoyó y Segundo: “Pasé 4 años de tratamientos médicos sin ningún resultado; tenía un bulto en el hígado, úlcera gástrica y hernia de hiato. Con la medicina de aquí, con mucha constancia y fe, he sido curada gracias a Dios y a ese lindo grupo. Con mucho agradecimiento.” Gloria García Machado Tercero : Marzo de 2008. “Quiero dar gracias a Dios por haber encontrado este lugar. Vine por primera vez el 1 de junio de 2007, con reflujos, diarreas continuas, heridas en el esófago, quemaduras… perdí mucho peso y los médicos no daban con mi mal. Hoy, en marzo de 2008, después de seguir el tratamiento puedo comer de todo, estoy curada, tengo mucha fe en el Señor y mucha confianza en este lugar; aquí se respira mucha paz y una gran capacidad de escucha. Mil gracias.” Beatriz Nieves Cuarto: Se trata de Dominique. Llegamos a las Monjitas (así las llama la gente) por medio de una terapeuta de medicina china, a la que debemos todo por habernos ayudado tanto, y nos envió un lunes 26 ayudó a los tres, dándonos fuerzas para seguir adelante. Actualmente Dominique tiene casi 17 años, está hermosa, sana y sobre todo ¡Felizzz!!! Nosotros, también estamos orgullosos de haber llegado a este lugar, y damos gracias a Dios por lo que nos pasó, de no haber sido así nunca hubiéramos aprendido todo lo que sabemos y nos enseñaron allí. Así que infinitas gracias a Tere, Dolly, Carlitos, Mónica, Indira, Renée y a todos los que forman este grupo maravilloso. Familia de Dominique La solidaridad como virtud moral y actitud social, fruto de la conversión personal, exige el compromiso de todos aquellos que tienen responsabilidades educativas y formativas. En primer lugar me dirijo a las familias, llamadas a una misión educativa primaria e imprescindible. Ellas constituyen el primer lugar en el que se viven y se transmiten los valores del amor y de la fraternidad, de la convivencia y del compartir, de la atención y del cuidado del otro. Ellas son también el ámbito privilegiado para la transmisión de la fe desde aquellos primeros simples gestos de devoción que las madres enseñan a los hijos. Jornada Mundial de la Paz 2016, titulado ''Vence la indiferencia y conquista la paz'' Enero – Febrero 2016 23 Casa General - Roma Testimonio misionero como persona consagrada Nuestra Parroquia de San Eusebio pidió a la Comunidad Santa Elena de Via Giusti, que algunas hermanas dieran su testimonio como consagradas y misioneras, considerando que estamos en el Año de la Vida Consagrada y en el mes de las Misiones. Cuatro hermanas dieron su testimonio, empezando los días 10, 11 y el 18, día de las Misiones. La Hna. María Carmen Ugarte, el siguiente testimonio. Sintiendo la llamada del Señor para consagrarme a Él y al servicio de los hermanos, entré en el Instituto de las Franciscanas Misioneras de María por los aspectos Franciscano y Misionero de su Carisma a los que me sentía atraída. Más tarde, durante la formación, descubrí el aspecto mariano y el de la adoración Eucarística. La vocación misionera es el sello que marca al Instituto desde sus inicios, somos para la Misión Universal y debemos estar disponibles a ir a cualquier parte del mundo, principalmente hacia los más pobres y alejados. Nuestra Fundadora, la Beata María de la Pasión decía: “nuestra Patria es el mundo”. Dios que vino a hacerse uno de nosotros por amor. Esta experiencia, esta relación que tuvo con Jesús es lo que Juan quiere transmitirnos y comunicarnos. Nosotras, consagradas y misioneras debemos transmitir también esta experiencia con nuestra vida, nuestras palabras. Esta experiencia es un don de Dios que tenemos que hacerlo fructificar a través de la meditación de la Palabra de Dios, la oración, la Adoración Eucarística. ‘Jesús Eucaristía es el Primer Misionero del Instituto’, decía Madre Fundadora. Llevamos a la adoración las preocupaciones, los sufrimientos, las alegrías de nuestros hermanos y hermanas a quienes hemos sido enviadas; allí encontramos luz y fuerza para nuestra vida y la inspiración Siendo aún joven religiosa fui enviada a Brasil donde permanecí durante 14 años de los cuales 9 en el Estado de Amazonas, posteriormente fui enviada a Mozambique, donde permanecí 22 años, hasta el año pasado. Escuela primaria construida por las FMM en colaboración Pero ser misionera ¿por qué y para qué? Quiero con la gente del poblado responder con unos versículos del 1er Capítulo de la 1ª Epístola de Juan que dice: “Lo que existía en el principio, lo que hemos oído, lo que hemos para nuestras actividades, que como María las llevavisto con nuestros ojos, lo que contemplamos y toca- mos a cabo en disponibilidad total a la voluntad del ron nuestras manos acerca de la Palabra de la Vida, Padre, en humildad, sin ruido, llevando Jesús a todas (pues la Vida se ha manifestado), nosotros lo hemos partes. “Id por el mundo como Evangelios vivos” decía visto y os lo anunciamos” (1Jn.1,1-4) nuestra Madre Fundadora. Estas palabras del Apóstol Juan expresan la profunda Quiero compartir con ustedes un poco de lo que he experiencia que tuvo con Jesús, en Él reconoció al vivido en Mozambique. 24 FMM Lugar de Encuentro VII/73 Hna. Adozinda Armando en la clase Mozambique es un bello país, es un pueblo pacífico, acogedor, sencillo. Cuando llegué allí en el año 1991 estaba en guerra; este pueblo pacífico tuvo que soportar 26 años de guerra, iniciada tan sólo 3 años después de la Independencia de Portugal, y motivada por la línea marxista leninista que adoptó el gobierno constituido después de la Independencia, con los consiguientes juicios populares, persecución religiosa, nacionalizaciones, sobre todo de las escuelas Parroquiales e Institutos Religiosos. La Iglesia no podía tener ningún contacto con la juventud. Ante esta actitud del gobierno se formó la Resistencia de los políticos e intelectuales, que no estaban de acuerdo. Así empezó esta guerra civil. Durante los años del comunismo y de la guerra, la vida de fe del pueblo fue sostenida gracias a los religiosos nativos, ya que muchos misioneros extranjeros abandonaron el país, pero sobre todo fueron los Catequistas laicos, que vivían en las pequeñas aldeas los que verdaderamente mantuvieron la fe del pueblo con una donación ejemplar, algunos incluso dando su vida, son mártires. Después de tantos años de guerra, el país quedó destruido, casas, carreteras, puentes, etc. Con la firma del Acuerdo de Paz el 4 de Octubre de 1992 fue necesario iniciar la reconstrucción del país, no solamente una reconstrucción material sino también social, psicológica, moral y en este trabajo se unieron diversas Iglesias Cristianas para trabajar juntas por la reconciliación y el perdón. Una buena parte de mis años en Mozambique los he vivido en la Provincia de Niassa, al Norte de Mozambique, es la provincia más extensa del país pero la menos poblada. Las pequeñas aldeas están muy distantes unas de otras, Los Centros médicos o ambulatorios quedan lejos debido a la dispersión, lo que obliga a la población a caminar Kms para poder obtener el tratamiento de la malaria, enfermedad tan común y a la vez tan peligrosa, inclusive para adquirir una simple aspirina. Ante esta situación la gente de estas aldeas pidió al Obispo que hiciera algo por ellos. La Diócesis entonces, hizo un proyecto que consistía en abrir pequeños ambulatorios con el fin de que los cuidados de salud más elementares estuvieran al alcance de todos. La responsabilidad estaba compartida entre la aldea, el gobierno y la diócesis. Los habitantes de la aldea debían escoger a dos personas para ser formadas en este trabajo sanitario (en general una cristiana y una musulmana), tenían que construir una habitación, con el material local donde se llevara a cabo el servicio. El gobierno apoyaba con la formación y daba los medicamentos, la Diócesis se responsabilizaba de la formación, hacía la supervisión y acompañaba el trabajo de los Agentes Polivalentes de Salud (así se llamaban estas personas formadas). Anualmente solicitaban la apertura de nuevos ambulatorios y de esta manera, poco a poco llegamos a abrir más de cincuenta, donde se podía tratar la malaria y otras enfermedades frecuentes así como la prevención de otras. He recorrido muchos Km. por aquellas carreteras sin asfalto y llenas de agujeros, que en el tiempo de las lluvias el coche se metía en los agujeros cubiertos por el barro, necesitando hacer maniobras para salir, pero muy feliz de haber podido contribuir un poco a mejorar la salud de estas poblaciones. Como dicen en Amazonas, ‘la riqueza del pobre es la salud’. En la Provincia de Nampula, concretamente en Lalaua a 220 km de la capital, donde estuve los 6 últimos años, abrimos una escuela junto con la población en un barrio a las afueras de la ciudad de Lalaua. Muy pocos niños de este barrio iban a la escuela, y ninguno de los pequeños, porque la escuela pública quedaba lejos. Las hermanas entraron en contacto con las familias y se decidió construir algunas salas utilizando barro, bambú y el techo de ramas para que los pequeños pudiesen empezar a estudiar. Se construyeron dos salas para la 1ª y 2ª clase primaria. Una de las hermanas era maestra y se pidió al gobierno que enviase otro maestro y de esta manera se pudo empezar. Los años sucesivos se construyeron otras 3 salas para que pudiesen estudiar hasta la 5ª clase. Este año, el número de alumnos es de 600 con una plantilla de diez maestros. Esta es nuestra vida, servir y amar a todos ayudándoles según sus necesidades; queremos pasar por el mundo haciendo el bien, como se decía de Jesús. Termino con unas palabras del Papa Francisco en su Documento “La alegría del Evangelio”: “Cada cristiano es misionero y lo es en la medida en que se ha encontrado con Cristo Jesús… no somos discípulos y misioneros, sino discípulos misioneros”. María Carmen Ugarte, fmm Enero – Febrero 2016 25 CONGO-KINSHASA Fundación de Basoko en Congo Kinshasa Los Basokos “Este puesto fundado en 1902, tuvo al P. Melchior Goerke por primer misionero, sacerdote del Sagrado Corazón él también. Una estación de primera categoría para el apostolado, porque esta pequeña capital de distrito era “la llave de todo el Aruwimi”, es decir de todo el terri-torio regado por este afluente del Congo sobre una extensión de 800 kms. Dos torres almenadas y un largo muro blanco bordean el río, vestigios del periodo de largas y sangrientas luchas antiesclavistas, dándole la majestad de antigua fortaleza” . Esto gracias a las cinco consistentes capillas florecientes que el valiente misionero había consegui-do levantar y que se abrían a todo el Aruwimi , Llegada de las Franciscanas Misioneras de María La llegada de las Franciscanas Misioneras de María creó un nuevo hogar para obreras: ca-tecumenado, escuela, dispensario, hospital, gota de leche. A pesar de los esfuerzos de los misioneros, los habitantes de los pueblos de alrededor estuvieron todavía largo tiempo bajo la influencia nefasta de la brujería. Población antropófaga, los basokos acusaron a los blancos de hacer otro tanto, afirmando que las latas de conserva de las que se alimentaban, contenían carne humana; mencionaron incluso la víctima: tal joven que se arriesgó tal día fuera de su pueblo, etc. Terrible obstáculo para la evangelización, porque de estos prejuicios nace una desconfianza excesiva, una sorda hostilidad contra las cuales lucha trabajosamente la acción misionera. Si se llega a vencerlas, se tropieza con otra dificultad: los padres aceptan muy difícilmente separarse de sus hijos, de las hijas sobre todo, cuando empiezan a valer algo. Sin embargo, “cinco años después de su fundación, el pequeño puesto de mision extendía su influencia sobre un radio de acción de 250 km., y la ciudad contaba con 367 cristianos y 549 catecúmenos” 26 FMM Lugar de Encuentro VII/73 Sabiendo de Mons. Grison las Franciscanas Misioneras de María llegaban para trabajar en Basoko, el Cardenal Ferrata le escribía el 3 de enero de 1912: “Me ha proporcionado un verdadero gozo al darme agentes del Estado y las factorías. Al llegar a la tantos detalles sobre su misión y al darme a conocer misión los Reverendos Padres nos esperaban con una que la futura casa de las Franciscanas Misioneras de veintena de monaguillos y otro grupo de niños que llevaban banderas María en Basoko se multicolores así encuentra en su como un gran Vicariato. Esto será número de cristiauna verdadera bennos de los alrededición por ambos dores. Los preparalados. Ellas encontivos se debieron trarán en usted el hacer durante la Obispo sincero, noche. Algunos celoso, infatigable basokos se ocupay enteramente conban todavía de limsagrado a la gloria piar el camino con de Dios y a la salsus escobas de paja vación de las que fabrican con almas; y usted una hoja de palmeencontrará en las ra, y a nuestra lleFranciscanas Clase bajo el chimbeck gada, se pusieron Misioneras de en su rango con su escoba en alto a manera de banMaría, religiosas de admirable actividad, de disciplidera. El Padre superior entona el Magnificat que na, de energía, de espíritu de sacrificio. Las conozco todos los niños cantan con mucho entusiasmo, desde hace mucho tiempo. Según esto, es fácil prever que la fundación de la nueva casa en Basoko dará abriendo la boca hasta las orejas. La iglesia está magníficamente adornada como en los días de fiesta graninmensos frutos bajo vuestra paterna protección . de. Es muy grande y nueva. El altar está rematado por “El 19 de noviembre de 1913, fiesta Santa Isabel de un calvario cuyas estatuas son de tamaño natural. La Hungría, llegaban, a las 7 de la tarde, para la funda- puerta del tabernáculo y el expositor son de cobre ción, M.M. du Bx Rizzier, Vicaria provincial, M. cincelado, las gradas de mármol blanco, la hermosa Lodewijk du S.C., superiora, M.M. Ferdinando, asis- iluminación hace brillar todo el decorado . Se canta el tente, M.M.Camille, S.M. Engelmunda, S.M. de St Te Deum. Agradecemos al Buen Dios y pedimos que bendiga y haga prosperar esta hermosa misión en la Véron, S.M. Albertine” . que estamos llamadas a consagrarnos de ahora en adelante para ganarle muchas almas”. Los Padres turbados, vienen a saludar a las recién llegadas y declaran que no pensaban que el barco iba a llegar tan tarde, así que nada estaba dispuesto para la “Después de la bendición, los habitantes vienen a recepción. No importa, se decide que pasarán la admirarnos ya que muchos no han visto todavía religiosas. Cuando se han dispersado un poco, vamos a comer a casa de los padres” El convento no está acabado, los padres nos prestan una de sus dos casas. Comienzan los preparativos más urgentes y lo primero a preparar son los colchones para la noche. También el primer mueble que se saca de las múltiples cajas, es la máquina de coser y las telas necesarias. Los padres, como regalo de bienvenida, ofrecen también la suya a las hermanas que están muy contentas. Rendirá después enormes servicios y desde ahora, para mejorar la ropa de la sacristía. El dispensario noche en el barco y que después de desayunar se dirigirán a la misión. “Al día siguiente con nuestra interminable fila de equipaje, cajas, paquetes y maletas de todas las dimensiones. Seguimos por la gran calle bordeada de antorchas tras las que se ocultaban las casas de los Mientras continuamos la primera instalación, las hermanas van a los pueblos de los alrededores para conocer a los basokos. Primeros contactos “El R. Padre superior desea que vayamos a hacer catequesis incluso en los pueblos y que atendamos a Enero – Febrero 2016 27 Cambiando el café Nuestro Señor, que habíamos dejado todo para venir a instruirles, para curarles sus enfermedades, educar a sus hijos. Al ver la expresión de sus ojos, creímos que habían comprendido y estaban contentos” . La mies crece dulcemente pero la mentalidad cambia lentamente. Un triste acontecimiento parece dar la razón a este aserto; una carta fechada en 1922 cuenta: sus enfermos para atraerlos suavemente. Todos estos buenos indígenas nos rodean, nos miran, nos preguntan, pero, para nuestra sorpresa, los espectadores son hombres, mujeres, chicos, pero ninguna chica. Sin embargo, quisiéramos acercarnos a ellas para hacerlas venir a clase más tarde. Preguntamos a los cristianos y nos responden que las hijas han huido y se esconden porque se dice que vamos a enviarlas a Nueva Amberes donde las matarán, las meterán en latas de hierro blanco para expedirlas a Europa. ¡Pobre gente! Que puedan comprender pronto que no queremos sus cuerpos, sino que son sus almas las que queremos dar a Jesús” . Se acerca la primera Navidad, primeros preparativos, primeras impresiones. “Los cristianos del interior llegan cada vez más “numerosos y nos preguntamos donde se podría alojar a toda esta gente. Pero esto es muy sencillo, los constructores se ponen a la obra y surgen las pequeñas chozas de paja diseminadas un poco por todas partes, como por arte de encantamiento en el terreno de la misión. Quizá, los Hermanos Menores construían así sus cabañas cuando llegaban para el capítulo de las esteras. Muchos de esta gente tan valiente, llevan cuatro o seis días de camino, no habían visto todavía a las religiosas, nos rodean, nos admiran, nos observan, incluso imitan nuestros menores movimientos. Se diría que tienen un talento especial para esto y lo aprovechan para divertirse con ello” . El convento de Ntra. Sra. de Santo Domingo está todavía sin acabar pero habitable. El gran día para entrar en la tierra prometida como dice el Padre Superior está fijado para el 6 de enero, fecha tan querida a todas las Franciscanas Misioneras de María. Solemnemente y en procesión, los padres y los cristianos conducirán al convento a las hermanas. “Llegados ante la casa, el Padre tomó la palabra y explicó a sus oyentes que éramos las Esposas de 28 FMM Lugar de Encuentro VII/73 “Dos antropófagos, que felizmente han sido bautizados antes de morir, han sido ejecutados últimamente. Parecía qué entre los espectadores las opiniones estaban divididas: unos aprobaban el castigo, otros no veían qué mal habían hecho para condenarlos. ¡Creéis que nuestras jóvenes han venido a pedir su vestido blanco para asistir a la ejecución! Estaban admiradas al escuchar que para una circunstancia semejante no se los pusieran. Hay todavía mucho por hacer para inculcar a nuestros neófitos, el espíritu cristiano. No comprenden nunca por qué deben rezar por la conversión de sus hermanos paganos, dicen que si su corazón lo quiere, vendrán a la Iglesia. Esta respuesta se escucha en todo momento. Parece que entre nuestra gente, mientras su corazón no ha hablado, no se llega a convencerlos”. Una carta de agradecimiento por un don recibido de la Propaganda, con fecha del 3 de abril de 1925, muestra que los progresos son reales pero muy lentos. S. Lucie Nzenzili M’Boma “Del periodo de la siembra al enraizamiento del carisma fmm. En Congo_Zaire: 1896-1965” Capítulo III, 4-pp. 93-96 1. Annales fmm, novembre 1925, p.213-214. 2. Annales fmm, idem. 3. Jeanroy, 25 ans de mission au Congo, p.44 4. Transcrit par Mgr. Fataki lors du jubilé de Basoko 5. Journal de fondation de la maison conservé aux Archives provinciales, série X/a, n°3 6.Idem. 7.Idem. 8. Idem. 9. Journal de fondation de la maison, Archives provinciales, série X/a n°3 10. Idem. 11. Chronique intime, décembre 1922, p.125