ORGANIZACIÓN - PERSONAS - RENDIMIENTO Crear el mejor ambiente de trabajo: El camino para mejorar el rendimiento PABLO PLAZA, Director de Towers Perrin. Recientemente, Towers Perrin ha finalizado un Estudio que cuantificaba la conexión emocional de los empleados con sus puestos de trabajo. Los resultados no sólo han revelado que las personas tienen fuertes sentimientos sobre su trabajo, sino que además la “temperatura emocional” actual es bastante negativa. Las razones, que no deben sorprendernos, incluyen cosas como: sobrecarga de trabajo, ansiedad sobre el futuro del puesto y los ingresos, falta de desafíos en el trabajo, o reconocimiento insuficiente en comparación con el nivel de contribución y esfuerzo del individuo. ¿QUÉ PODRÍA CAMBIAR ESTA FOTOGRAFÍA Y AYUDAR A TRANSFORMAR LAS EMOCIONES NEGATIVAS EN ENERGÍA POSITIVA Y, POR LO TANTO, EN UNA MEJORA DEL DESEMPEÑO? Intentamos averiguar la respuesta a esta pregunta tan importante pidiendo a unos 1.100 empleados que trabajan en diferentes compañías que describieran los elementos de su entorno ideal de trabajo. Las respuestas las agrupamos en cuatro categorías: – Confianza. Los empleados necesitan sentirse orgullosos, optimistas y seguros sobre lo que hacen, cómo lo hacen y para quién lo hacen. – Competencia. Hacer bien tu trabajo te inyecta confianza y asegura tanto a la empresa como al empleado que se alcancen los objetivos individuales y colectivos. Capital Humano 126 – Control. Los empleados quieren controlar su propio destino al máximo posible, especialmente cuantas más responsabilidades y riesgos tomen dentro de su entorno de trabajo. – Comunidad. Las emociones de las personas están fuertemente influenciadas por las personas con las que trabajan todos los días a través de la colaboración, el trabajo en equipo y los objetivos compartidos, y por darle un sentido a su trabajo más allá de la paga. ¿PUEDEN LAS EMPRESAS INFLUIR DE MANERA EFECTIVA SOBRE ESTOS COMPONENTES con los directivos jugando un papel crucial. Pero hay mucho que hacer por parte de las empresas en estas áreas a través de los sistemas de recursos humanos y retribución que pongan en marcha, el apoyo y la formación que den a sus gestores, la cultura que sean capaces de crear y la forma en que se comuniquen a través de la organización. Un primer paso importantísimo es comprender aquello que realmente les importa a los empleados y porqué, para empezar a diseñar un entorno que saque el mejor partido de su gente. A continuación resumimos algunas acciones a considerar al acometer este viaje. DEL ENTORNO LABORAL? La responsabilidad final de crear una experiencia de trabajo positiva es compartida entre la empresa y el empleado, 1. ACCIONES Para crear un ambiente de confianza, es necesario hacer del “ser el mejor” un Nº 182 • Noviembre • 2004 valor imprescindible y promulgarlo de forma tangible: – Crear procesos de selección y perfiles de candidatos con un gran énfasis en el talento y la preparación. – Coordinar e integrar programas de marketing interno y externo para enviar el mismo mensaje a empleados, clientes, accionistas y proveedores: “ésta es la organización ideal para trabajar en ella, invertir en ella y hacer negocios con ella”. – Crear grupos de empleados de alto potencial que permita hacer rotaciones para facilitar el crecimiento profesional. – Usar herramientas de investigación para comprender los factores que influyen en el comportamiento de los empleados. ciar claramente la retribución para los empleados con alto, medio y bajo desempeño. Para construir control es necesario dar a los empleados información, libertad, y reconocimiento por las decisiones que les afecten: – Informar con frecuencia sobre los objetivos que tienen impacto en el negocio, proporcionando herramientas para ayudar a los empleados a tomar decisiones en su día a día que contribuyan a alcanzar los resultados deseados. – Dar a los empleados la flexibilidad (en tiempo y en espacio) para que puedan acometer su trabajo adecuadamente. – Enseñar a los directivos a evitar la microgestión de sus empleados. – Proporcionar programas de mentoring a los directivos para ayudarles a entender cómo tratar los aspectos emocionales del trabajo y a reconocer que éstos son muy importantes para la gente. – Ayudar a los empleados a comprender sus responsabilidades y las de la compañía a la hora de ajustar los costes de los programas de retribución. Para crear competencia hay que enfatizar contribución y resultados en todos los aspectos de la experiencia laboral: – Dar a los empleados mayor autonomía proporcionando un “autoservicio” de recursos humanos usando la tecnología. – Situar a cada empleado en los puestos en los que mejor puedan hacer uso de su talento y preparación. – Crear mapas de carrera que recompensen la contribución individual (por ejemplo, profesional o técnica) tanto como las competencias directivas. – Estructurar niveles que permitan a las personas moverse y avanzar a través de funciones, unidades y geografías. – Crear una mejor visión para que los empleados alineen su trabajo con los objetivos corporativos, proporcionando formación y herramientas que les ayuden a comprender y a hacer cosas que tengan más impacto en los objetivos de su departamento y de la organización. – Reforzar el sistema de gestión del desempeño con métricas claras alineadas con los objetivos del negocio: medir la contribución, no el esfuerzo; diferen- Crear o construir comunidad ayudando a los directivos a instilar una sensación de conexión y propósito a sus equipos de trabajo: – Crear y comunicar una misión, visión y valores claros que lleguen a las emociones y deseos de las personas por encima de los beneficios económicos. – Utilizar métricas de medición del desempeño y programas de recompensa que reflejen los valores y los comportamientos deseados en lo que respecta a trabajo en equipo, respeto e integridad. – Proporcionar a los empleados herramientas que les ayuden a navegar a través de la organización y colaborar interna y externamente. – Asegurarse de que los directivos representan un modelo de esos comportamientos. 2. EJEMPLOS DE MEJORES PRÁCTICAS Muchas organizaciones ya han establecido prácticas concretas para crear una sensación de confianza, competencia, control y comunidad entre sus empleados. Algunos ejemplos: – Establecer programas de recompensa para aquellos empleados que presenten candidatos que cumplan con las competencias y valores establecidos. – Establecer programas de recompensa para que los propios empleados reconozcan a aquellos colegas con comportamientos excepcionales o comprometidos con los valores de la organización. – Crear programas de reconocimiento por parte de los clientes para aquellos empleados que den un mejor servicio. – Lanzar portales o intranets que ayuden a los empleados a comprender el negocio y su propio papel para alcanzar los objetivos de la compañía. – Diseñar programas de incentivos para potenciar la retribución variable ligada al mérito, recompensando a los empleados con mayor desempeño y diferenciándolos del resto. – Establecer sistemas de desarrollo profesional que den a los empleados libertad para mejorar en aquellas áreas de su interés personal. – Lanzar herramientas que ayuden a los empleados a priorizar y estructurar su trabajo. – Lanzar encuestas de opinión entre los empleados e involucrarles en las estrategias y en las acciones derivadas de las encuestas. – Diseñar un programa de orientación que proporcione una “inmersión cultural” a los nuevos empleados. – Proporcionar oportunidades a los empleados para que participen en programas comunitarios a través de programas de voluntariado o acción social esponsorizados por la propia compañía.! Información elaborada por Nº 182 • Noviembre • 2004 127 Capital Humano