¡En ti confío a todas horas! Señor, acuérdate del amor y la ternura que siempre nos has manifestado, pero no te acuerdes de mis pecados ni del mal que hice en mi juventud. Señor, acuérdate de mí, por tu gran amor y bondad. El Señor es bueno y justo; él corrige la conducta de los pecadores y guía por su camino a los humildes; ¡los instruye en la justicia! Él siempre procede con amor y verdad con quienes cumplen su pacto y sus mandamientos. Señor, es grande mi maldad; perdóname, haz honor a tu nombre. Al hombre que honra al Señor, él le muestra el camino que debe seguir; le rodea de bienestar y da a sus descendientes posesión del país. El Señor es amigo de quienes le honran, y les da a conocer su pacto. Siempre dirijo mis ojos al Señor, porque él me libra de todo peligro. discípulo sabe que la historia del amor de Dios para con él pide un desprendimiento hasta el extremo. Por eso suplica: «No abandones, oh Dios, la obra de tus manos. Lleva a feliz término lo que has comenzado en nosotros». Cada uno decimos un estrofa: Te doy gracias, Señor, de todo corazón; delante de los ángeles tañeré para ti, me postraré hacia tu santuario, daré gracias a tu nombre: por tu misericordia y tu lealtad, porque tu promesa supera a tu fama; cuando te invoqué, me escuchaste, acreciste el valor en mi alma. Todos: No abandones, Padre, la obra de tus manos. Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra, al escuchar el oráculo de tu boca; canten los caminos del Señor, porque la gloria del Señor es grande. El Señor es sublime, se fija en el humilde, y de lejos conoce al soberbio. Todos: No abandones, Padre, la obra de tus manos. Mírame, Señor, y ten compasión de mí, porque estoy solo y afligido. Mi corazón se aflige más y más; líbrame de mis angustias. Cuando camino entre peligros, me conservas la vida; extiendes tu brazo contra la ira de mi enemigo, Canto Tu palabra me da vida confío en ti, Señor. Tu palabra es eterna en ella esperare. "proclama", que resume de algún modo todo lo que será su mensaje. Es un texto muy sintético y muy preciso el que nos presenta Marcos. 1. Oración e REFLEXIÓN e CANTO: Si el evangelio no hubiera afirmado taxativamente que Jesús sufrió tentaciones, muchos cristianos hubieran dicho que él no podría haberlas experimentado, por ser simultáneamente Dios. Pero una persona humana que no pueda sentir tentaciones, ¿sería realmente humana? ¿Cómo entendemos la humanidad de Jesús? Si de Ti me alejé, sin luz y sin fe, Señor, ten piedad. (Después de cada párrafo dejamos un tiempo para compartir la reflexión) Si no fui el testigo fiel de tu amor, Señor, ten piedad. Marcos no explicita cuáles fueron las tentaciones que experimentó Jesús. Otros evangelistas nos las señalan de un modo arquetípico. Recordemos cuáles fueron y qué significación tienen fundamentalmente. En la situación actual de nuestra persona, de nuestro grupo, de nuestro mundo ¿cuáles podríamos decir que son las tres más grandes tentaciones con la s que se encuentra todo ser humano y todo cristiano? El evangelio de Marcos que hoy proclamamos incluye el "primer sermón de Jesús", su primera predicación, o, si queremos, lo que fue de algún modo su "manifiesto", su Tú serás nuestra luz, Tú nos salvarás, Tú nos darás la vida. Si al hermano negué la paz que nos das, Señor ten piedad. e PEDIMOS PERDÓN No nos dejes caer en la tentación: hemos reflexionado sobre nuestras vidas. Somos débiles y hemos caído frente a las tentaciones que nos ofrece el mundo moderno. En este momento pedimos perdón. 1. Caemos en la esclavitud del consumo, en el apego al dinero, en el afán de poseer cosas y más cosas.