Villar del Río, abril de 2007 Estimados amigos y simpatizantes de Villar del Río: La Junta directiva de la Asociación ha creído oportuno, aprovechando las fiestas de Semana Santa, y que somos muchos los que nos encontramos en el pueblo, el redactar estas líneas que no tienen más objetivo que el de dar a conocer a todos los vecinos los importantes homenajes y reconocimientos que se le están ofreciendo a un hijo ilustre de nuestro pueblo: Padre Cosme Muñoz Pérez. Queremos haceros llegar una breve síntesis de su biografía para que todos lo reconozcamos, lo sintamos como hijo importante del pueblo, que lo es, y lo vayamos sintiendo más cercano a nosotros, más nuestro. Probablemente sea uno de los más importantes hijos del pueblo de toda su historia. Cosme Muñoz Pérez nació en Villar del Río en 1573 el día en que el santoral celebra la fiesta de San Cosme y San Damián. Sus padres fueron Juan Muñoz y Antonia Pérez. Dice su biografía que eran nobles, no ricos. Esto favoreció que Cosme recibiera una completa educación a partir de los cinco años. A los dieciséis años partió hacia Málaga para realizar la carrera militar poniéndose al servicio del Rey. Una salud quebradiza hizo que tuviera que abandonar el ejército y trabajar de escribano en Málaga. Como su salud empeoraba y no encontraba remedio, acudió a encomendarse a Nuestra Señora de la Victoria. Al instante, cuenta el biógrafo, nuevas fuerzas corrían por su cuerpo. Aquí nació su compromiso con la Virgen. Regala todo lo que posee a los pobres y decide comenzar su vida religiosa. Se dirige a Córdoba donde pide ser admitido en el convento franciscano de la Arruzafa que gozaba de gran prestigio en aquellos tiempos. La negativa con que fue respondido le llevó a buscar los consejos del jesuita Miguel Pérez. Éste le aconsejó que iniciara los estudios para ser sacerdote. Tras un breve espacio de tiempo es ordenado en 1607. Por aquellos años, en Córdoba, era muy famosa la sierva de Dios llamada Isabel de la Cruz. Entre otras cosas porque había formado un colegio en el que se recogían las niñas huérfanas cordobesas. El colegio se sustentaba de las limosnas y de los trabajos que a mano ellas realizaban. La muerte de Isabel hace que el obispo cordobés Fray Diego de Mardones, con el fin de que el colegio siguiera hacia delante, pidiera a Cosme, que ya dirigía el monasterio de la Recogidas, se encargara de su cuidado. Era el año 1607. A partir de esa fecha el único motor de su vida era el colegio Nuestra Señora de la Piedad. La educación de “sus angelitos” para poder ofrecerles una dote de 200 ducados con los que poder rehacer su vida dignamente una vez fuera del colegio. Si os dais cuenta han pasado justamente 400 años. Un largo periodo de tiempo que muchas instituciones no llegan a vivir y que, muy al contrario, la obra que inició el P. Cosme, hoy en día, está vigente en Córdoba y es dirigida por la Congregación de las Hijas del Patrocinio de María que tienen como fundador de la misma al P. Cosme Muñoz Pérez junto al P. Luis Pérez Ponce. Los frutos son visibles en la sociedad cordobesa y se nota a simple vista si os acercáis a la capital andaluza. Es por tanto que en el presente año 2007 celebramos el 400 aniversario de su ordenación sacerdotal y de la fundación del Colegio Nuestra Señora de la Piedad. Las hermanas de la Congregación han puesto gran entusiasmo en celebrarlo por todo lo alto y a lo largo de todo el año. Ya se han celebrado varios actos en Córdoba, Colombia y Venezuela: inauguración del centenario, inauguración de una calle, la celebración de un congreso con 250 congresistas sobre su figura y su obra. También es de resaltar la apertura de un centro socio-cultural para la promoción de la mujer en un barrio marginal de Venezuela, La Ceiba, financiado por los colegios y amigos seguidores del carisma del P. Cosme. Pero las hermanas pretenden, y están ilusionadas, por realizar alguno en el pueblo natal del P. Cosme en el verano próximo. Es por esto que nos piden ayuda y colaboración. Nos toca ahora a nosotros, sus paisanos, reconocer su vida, su obra y vanagloriarnos y entusiasmarnos por su figura y por lo que él llevó a cabo en Andalucía. Los actos se están programando en la actualidad. Se os pondrán en conocimiento lo antes posible. Se sabe que serán el 23 de agosto. Esperamos que por esas fechas el pueblo esté dispuesto a recibir, con los brazos abiertos, las muchas personalidades que tienen prometida su presencia. Para finalizar indicaros que la Hijas del Patrocinio de María, están intentando abrir un proceso de beatificación del P. Cosme y quién sabe si el día de mañana, nuestro pueblo Villar del Río, podrá contar con un hijo suyo como santo, beato o siervo de Dios. Esto glorificará al pueblo. Como habéis podido comprobar el Padre Cosme Muñoz Pérez, hijo ilustre de Villar del Río, es una importante figura y desconocida por nosotros hasta hace pocas fechas. Por ello merece un digno reconocimiento por parte de sus paisanos, e incluso, de toda la provincia de Soria. Su figura y su obra se lo merecen. Este centenario es el momento oportuno para ofrecérselo. La Junta directiva