¿EXISTE UN CONSENSO EN MACROECONOMÍA PRÁCTICA EN EL QUE TODOS NOSOTROS DEBERÍAMOS CREER? 1.- ¿Existe un Consenso de Macroeconomía Utilizable En Que Nosotros Deberíamos Creer? Por M ROBERT. SOLOW Se ha observado que las fluctuaciones alrededor de la tendencia alcista del rendimiento real en las economías capitalistas más avanzadas son contenidas en una estrecha brecha, pero ¿por qué son así?. La respuesta podría reflejar algún proceso de equilibrio natural, o reflejar la intervención automática o discrecional del gobierno: la política, como también podría ser una mezcla de ambas. El consenso que creo, comúnmente utilizable en la macroeconomía es que el movimiento de tendencia es predominantemente determinado por la oferta (factores de producción y la productividad de factor total) y que la herramienta apropiada para analizar el movimiento de tendencia es algún modelo de crecimiento, preferentemente el mío. Ahora, ¿qué hay acerca de las fluctuaciones de la trayectoria del producto potencial? Se considera una tasa de desempleo que tiende a estar entre un 5 a 10 por ciento, usando la ley de Okun, puedo estimar que las fluctuaciones del PIB real tienen una amplitud del 8 a 10 por ciento.Otro consenso que creo es comúnmente utilizable de macroeconomía, es qua aquellas fluctuaciones son determinadas por los impulsos de demanda agregada predominantemente; y la herramienta apropiada para el análisis es algún modelo basado en las fuentes del gasto. Estoy consciente que el objetivo general de la " teoría del ciclo real del negocio" es la afirmación que estos movimientos de corto plazo en la economía son provocados por la oferta. Pero mi opinión consiste en que esta explicación ha sido un fracaso empírico. Ellos tienen dos posibilidades. En cuanto a la primera, es que los seguidores de la escuela del ciclo real del negocio, como M. Eichenbaum, se den cuenta de este fracaso y que encuentren la manera de incluir, en sus bases, que aquellos impulsos de corto plazo de demanda jueguan el papel dominante en las fluctuaciones macroeconómicas, sólo así, esta teoría podrá ser una base en la macroeconomía. La segunda posibilidad es que se argumente que las fluctuaciones de corto plazo según esta teoría, son los ajustes óptimos ante los shocks sorpresivos de la tecnología. En aquel caso, pienso que están equivocados. Yo todavía propondría que el origen de la mayor parte de las fluctuaciones de corto plazo son determinadas por la demanda agregada sin embargo, debo reconocer que existe todavía desacuerdo en aquella proposición. Si las fluctuaciones en la demanda agregada determinan las variaciones de corto plazo en la rentabilidad real, ello debe ser porque algunos salarios y precios no son bastante flexibles para equilibrar sus mercados. Para explicar esta situación, se han usado métodos econométricos y analíticos, encontrando aclaraciones sobre cuál es el modelo apropiado para explicar la macroeconomía de demanda agregada a corto plazo. Hay dos opciones principales. El modelo de mi elección debería contemplar la mayoría de los componentes de demanda agregada más o menos de una manera oportuna. Por la expresión "de una manera oportuna" quiero decir que empíricamente funcione. Por "más o menos" quiero expresar que existan funciones de consumo, inversión, e importación, y que permitan la explicación de un modelo económico agregado. La otra opción impone una estructura de maximización de utilidad intertemporal desde el principio. En ella, las únicas funciones de gasto admisibles son aquellas similares a las condiciones de primer orden claramente definidas en el problema de optimización de las familias. A no ser que haya noticias recientes, este argumento todavía no es seguro. Yo propondría que lo necesario para una base macroeconómica cualquier conjunto de ecuaciones que describan la demanda agregada de forma razonable y empíricamente comprobadas. La mayor parte modelos macros se modifican o amplían sus versiones de algo como el IS-LM ya sea porque los economistas aprenden a hacer mejor estas cosas o porque el modelo de comportamiento subyacente en realidad se cambia. Supongo que debería decir que el principal, quizás el único, mérito de las hipótesis de expectativas racionales en el campo macro parece ser su carácter decisivo. La pregunta es si esto debería ser pensado como un aspecto positivo o negativo. Puedo ver un papel para las expectativas racionales en el modelo de equilibrio duradero. Sin embargo, en el corto plazo, las hipótesis de expectativas racionales parecen tener pocas razones para incluirlas. Una debilidad principal en el consenso de macroeconomía es la carencia de una conexión real entre el corto y largo plazo, ya que el LP y el CP se combinan el uno al otro y no pueden ser completamente independientes. Una pregunta interesante es determinar la influencia de la demanda en el crecimiento del producto potencial. ¿La demanda puede crear su propia oferta? Los datos sugieren que esto sería muy difícil de ocurrir ya que requeriría generar la suficiente inversión que proporcione la capacidad necesaria para solventarla. En circunstancias especiales esto podría suceder en una economía que tenga un fondo de trabajo (rural, extranjero) que pueda movilizar. Ello podría funcionar también si una fuerte demanda agregada induzca a un aumento en la productividad total del factor. La historia del crecimiento de la demanda conducida me parece bastante inverosímil bajo las condiciones comunes; pero esto es un ejemplo de la clase de pregunta, que tiene que ser hecha. 2.- Un Consenso de Macroeconomía Práctica Jhon B. Taylor.* La macroeconomía siempre ha sido un área de gran controversia y debate. Ejemplo: hace más de 150 años, David Ricardo discutió con Thomas Malthus sobre la importancia de la oferta versus la demanda en el crecimiento y las fluctuaciones, así también, los economistas de ciclo real del negocio han discutido con monetaristas y Keynesianos. La revolución Keynesiana de los años 30 y la revolución de expectativas racionales de los años 70, han sido dos de los episodios más discutibles en la historia de pensamiento económico. En mi opinión, hay un set de claves principales (bases) de la macroeconomía sobre las que hay un amplio acuerdo. Esta base es la consecuencia de muchos debates recientes sobre Keynesianismo, monetarismo, la teoría de crecimiento neoclásica, la teoría de ciclo real del negocio, y expectativas racionales y es práctica en la medida que tiene un efecto beneficioso sobre la política macroeconómica, especialmente la política monetaria, en los últimos 15 años. Los modelos econométricos han comprobado la eficacia de estas teorías. Aunque haya modos diferentes de caracterizar este consenso o base, yo pondría en una lista cinco claves principales: a.- Según el crecimiento económico a largo plazo y el lado de la oferta, en el largo plazo, el crecimiento de la productividad del trabajo depende del crecimiento del capital por hora de trabajo y del crecimiento de tecnología, más precisamente, de los movimientos que se producen a lo largo de la función de producción, como Robert Solow advirtió hace muchos años. Si uno añade a este crecimiento de productividad de trabajo una estimación deL crecimiento de mano de obra, se obtiene una estimación del índice de crecimiento de largo plazo del PIB real, o también llamado, crecimiento de PIB potencial. Este principio, la esencia de la teoría de crecimiento neoclásica, proporciona un modo de estimar y discutir las fuentes de crecimiento económico a largo plazo dentro de una estructura organizacional contable. Las preguntas claves son por qué el crecimiento de PIB potencial ha disminuido y qué puede hacerse para fomentarlo. ¿Este primer principio es práctico? Sí. De hecho, es utilizado por las instituciones que rigen las políticas públicas y privadas. Desde luego existen los debates sobre cómo aplicar este principio: ¿Existen disminuciones al capital de la información? ¿Cuánto seria el impuesto fundamental que reformaría el aumento de la razón capital-trabajo? ¿Cuánto aumenta la oferta de trabajo ante una reducción de tarifas marginales fiscales? Pero estos son cuestiones más cuantitativas, concernientes al tamaño de elasticidades, más que al principio mismo. b.- No existe una relación a largo plazo entre las tasas de inflación y las tasas de desempleo. Una conclusión de lo anterior es que ante un aumento en la tasa de emisión de dinero, sólo producirá una mayor inflación a largo plazo, manteniéndose constante la tasa de desempleo. Ejemplo: En l960's la inflación era baja. Y el desempleo estaba entre el 5 por ciento y el 6 por ciento; en los años 1970 la inflación era alta y el desempleo no era inferior; y en los años 1990 la inflación es baja otra vez, y el desempleo no ha aumentado. Hay dos calificaciones a este principio: (i) La evidencia internacional de diferentes países indica que las altas tarifas de inflación parecen reducir el crecimiento de PIB potencial. (ii) Una tasa muy baja de inflación, en particular una deflación, puede ser un impedimento a la operación fluida de mercados Ambas situaciones se producen debido a que existe un límite bajo en la tasa de interés nominal y porque existen precios y salarios pegajosos. Este segundo principio ya ha tenido un impacto práctico, principalmente en las políticas del Banco Central, el que debe escoger una inflación objetivo a largo plazo y mantenerla. c.- Existe un trade-off entre la inflación y el desempleo a corto plazo. En mi opinión esta relación se puede describir mejor a través de la variabilidad de la inflación y la del desempleo. Sin embargo, existe un debate del motivo de este trade-off. Una explicación es que la teoría de “precios pegajosos / sueldo fijo”, la que favorezco; pero hay también una teoría sobre la base de información propuesta por Robert Lucas. Hay también un debate en la transmisión de los mecanismos monetarios: ¿la política monetaria funciona a través de un canal de dinero, un canal de crédito, o por un canal financiero de precios (tasas de intereses y tasas de cambio)? A pesar del debate anterior, la existencia de un trade-off de corto plazo tiene implicancias prácticas para la política: la política monetaria debería mantener un crecimiento estable de demanda agregada para prevenir fluctuaciones en la rentabilidad real y en la inflación. De hecho, las mejoras de política monetaria durante los 15 años pasados han conducido a condiciones macroeconómicas mucho más estables. Una estabilidad mayor de política monetaria, incluyendo discusiones explícitas y acciones compatibles con el objetivo de mantener la inflación baja ha sido responsable en gran parte de esta estabilidad macroeconómica. Cada recesión, desde los años 1950, ha sido precedida por un alza de inflación, pero al impedirse que se eleve la inflación, las posibilidades de tales recesiones se han visto disminuidas. d.-Las expectativas de los pueblos son sumamente sensibles a la política, aún más, las expectativas importan para evaluar el impacto de las políticas fiscales y monetarias. El modo empírico más factible de modelar esta sensibilidad es a través del modelo de las expectativas racionales, aunque sean necesarias modificaciones para tomar en cuenta los grados en que se diferencian en credibilidad. Introduciendo expectativas racionales en el modelo de estimaciones econométricas y luego, simulando los modelo para políticas diferentes, la respuesta de las expectativas ante los cambios en las políticas es razonablemente aproximada a la realidad ¿Este cuarto principio tiene un impacto sobre la práctica? Sí. Por ejemplo, el modelo macroeconómico con expectativas racionales ahora en uso por la Fed han permitido estimar los efectos sobre las tasas de interés de un plan de largo plazo, para reducir el déficit presupuestario futuro. Este modelo puede ayudar a dirigir decisiones de políticas monetarias sobre tasas de interés cuando se planifique una reducción de déficit presupuestario. La evidencia adicional para la importancia práctica de este principio es el gran énfasis colocado en la credibilidad actual en los Bancos Centrales Según el modelo de expectativas racionales, existen las ventajas a la credibilidad en la política monetaria y la política fiscal. Por ejemplo, una desinflación tendrá gastos de corto plazo inferiores si la política es creíble. Asimismo un plan de reducir el déficit presupuestario tendrá en corto plazo un efecto menor de contracción si esto es creíble. e.- Evaluando la política fiscal y monetaria, no se debe pensar en términos de un cambio aislado de los instrumentos de política, sino como una serie de cambios unidos por un proceso sistemático. Existe un debate en la forma de regulación de las políticas. Ejemplo: ¿Deben ser la tasa de interés o la oferta del dinero instrumentos para la regulación? ¿El instrumento debería reaccionar a la tasa de cambio o únicamente a la inflación y la rentabilidad real? ¿Cuán grande debería ser la reacción de política de inflación? ¿La regulación es una pauta o esto debería ser legislado y usado para añadir la responsabilidad a la formulación de la política a seguir por un partido? Recientemente se ha aumentado el interés práctico en la regulación de política. Por ejemplo, Janet Yellen declara "... La regulación proporciona un patrón simple pero útil para evaluar el ajuste de política monetaria en un ambiente muy complejo e incierto económico. " En conclusión, quiero enfatizar que esta definición de un consenso de macroeconomía práctica no quiere decir que todo está establecido en la macroeconomía. Al contrario, todavía existen grandes debates sobre: el tamaño de elasticidades, el papel de crédito en el mecanismo de transmisión monetario, la importancia empírica de modelo de crecimiento "endógeno", si el modelo determinante de los precios con expectativas racionales satisface las correlaciones dinámicas que caracterizan el proceso de inflación en los Estados Unidos, y muchas otras cuestiones. Una pregunta que seguirá siendo discutida durante muchos años es cuánta optimización formal es apropiada para proporcionar un apoyo sólido a la macroeconomía. Muchos de los modelos macroeconómicos a los que me referí en esta discusión son modelos de equilibrio general que tienen ecuaciones de precios pegajosos como parte de su estructura. El esfuerzo actual de incorporar el dinero y precios pegajosos en el modelo de ciclo real de negocios apresurará el momento en que exista un modelo óptimo para ser usado en la formulación de políticas. Creo este trabajo añadirá mucho al entendimiento de los economistas de los principios macroeconómicos resumidos en esta discusión, pero mientras tanto, hay un consenso sólido de principios macroeconómicos que es útil con el trabajo práctico, de política. 3.- Algunos pensamientos prácticos en política de estabilización. Por Martín Eichenbaum Desde la perspectiva de políticas de estabilización, sí hay un núcleo práctico de macroeconomía. Si bien, la mayoría de lo que se ha aprendido en el pasado en esta profesión ha estado en pugna, el resultado neto ha sido un cambio fundamental en la metodología y creencias sobre la política de estabilización, de hecho, el cambio más crítico en la metodología ha sido pensar en la política de estabilización como un problema teórico más que un problema de teoría de control. Este cambio en la sustancia involucra un cambio fundamental en la practica económica. Existe ahora un acuerdo generalizado de que la política fiscal discrecional cíclica no es deseable ni políticamente factible, las discusiones prácticas son casi exclusivamente sobre la política monetaria, refiriéndose a las siguientes propuestas: 1. Excluyendo efectos anticipados de inflación, la política monetaria y la curva de Phillips es neutra a largo plazo. Que se correlaciona alta inflación con tasas de interés altas. 2. La inflación persistente es siempre un fenómeno monetario. 3. La política monetaria no es neutra a corto plazo. 4. La mayoría de las fluctuaciones económicas agregadas no son debido a choques de política monetaria. Sobre las dos primeras propuestas, el objetivo primario de política monetaria debe ser la estabilidad en el LP o por lo menos un promedio bajo de inflación. Sobre las ultimas dos propuestas, hay un papel de benefactor para ayudar en choques económicos. ¿Como puedo lograr el segundo objetivo sin comprometer el primero?, comprender esto es central para interpretar las propiedades cualitativas de la política monetaria real, evaluar sus efectos, y pensar en otras instituciones que la maneje mejor. La Fed dice que para lograr el primer objetivo de política monetaria, una baja inflación, es bajar el crecimiento de dinero cuando la inflación comienza a subir. Desde luego, hay presiones considerables para atacar antes de que pase. Ahora, si la inflación persistente se trata siempre de un fenómeno monetario, ¿por que la política monetaria solo trata de rectificar equivocaciones propias pasadas? ¿acaso esto se produce porque se confunden los cambios transitorios en el nivel de precios con la inflación persistente? La investigación en proceso, de V. V. Chari, Lawrence J. Christiano, y M. Eichenbaum, señala que los ataques preventivos contra la inflación eliminarían la posibilidad de episodios persistentes de inflación evitando grandes recesiones, dependiendo de que se aplique correctamente la política monetaria. El problema político es la tarea de seleccionar reglas predecibles estables y diseñar instituciones que sean capaces de tomar estos resultados de equilibrio como reglas. Sin instituciones creíbles en que se puedan apoyar, las reglas no serán relativamente permanentes. La incapacidad de encontrar una manera satisfactoria de formular política fiscal y tener un conjunto de instituciones prácticas para apoyar esto, ha llevado a la mayoría de los Keynesianos a ser escépticos en el uso de política fiscal para estabilizar ciclos de negocios. Es curioso que los Keynesianos y el ciclo real de negocio (RBC) concuerden en que en un principio, el aumento en el gasto del gobierno y la disminución en impuestos distorsionadores, aumenta el rendimiento y empleo agregado, por lo menos a corto plazo. Más aún que la mayoría de los economistas concuerdan en el aumento del rendimiento a corto plazo pero en la probable disminución a largo plazo . La mayoría de los Keynesianos cree más en la política fiscal cíclica, que en estabilizadores automáticos. El problema es que la política fiscal cíclica tiene que ser implementada dentro de un ambiente institucional particular. Sin embargo, los retrasos inherentes en las instituciones pueden hacer que nunca suceda o que no suceda en la cantidad o en el plazo deseado. La discusión política de estabilización se centra en la política monetaria. La discusión puede conectarse con algunas verdades empíricas fundamentales sobre política monetaria documentada de 28 años atrás. Primero, la política monetaria no afecta en el LP la tasa de crecimiento. Segundo, la política monetaria no es neutra a CP. Tercero, hay acuerdo generalizado sobre los efectos cualitativos de perturbaciones exógenas a la política monetaria. Específicamente, hay evidencia persuasiva que, después de una política monetaria contractiva, el nivel agregado de precio responde muy poco, el rendimiento agregado cae, alza a CP la tasa de interés, y los salarios reales bajan un poco. Es claro que la política óptima involucrará algún grado de shocks en la economía, La política monetaria real en los Estados Unidos se basa en la regla de Taylor y se aplica cuando las tasas de inflación o el crecimiento del PIB no corresponden a las de la regla. No obstante, al aplicarla, la Fed presiona para levantar el valor federal de los fondos tan pronto como la inflación real o pronosticada comienza a subir, porque el desempleo se ha acercado al valor de consenso de NAIRU (valor no acelerado inflacionista de desempleo). La política monetaria contractiva induce a contracciones en la actividad económica, que producen altos costos sociales. Aún los políticos parecen bastante dispuestos a comprometerse en ataques preventivos contra la inflación o al movimiento transitorio en la tasa de inflación. Contradictoriamente, es seguro que nadie de la Fed cree que el desempleo se produce por una inflación persistente. La llave para resolver el acertijo es contestar la pregunta de por qué los políticos a veces escogen a inflación. A veces ellos son llevados por consideraciones fiscales. Y a veces, la autoridad monetaria puede empujarse a políticas inflacionistas perseguidoras a causa de las expectativas del sector privado sobre inflación futura. Este es el tipo de situación se refiere a una trampa de expectativas llamado “Dilema de acomodación”. El temor a tal escenario esta en el corazón de la Fed y la lleva a lanzar ataques preventivos contra la inflación. La idea de que las expectativas de los privados pueden llevar a episodios inflacionarios es simple. Las expectativas privadas sobre las futuras acciones de política monetaria afectan sus decisiones actuales. Las políticas deben considerar esto. Por ejemplo, deben suponer que los agentes privados esperan inflación futura. Esta expectativa los lleva a subir los sueldos y precios inmediatamente. Pero hay siguiente dilema: acomodar las expectativas inflacionistas o sufrir una recesión. Debería encontrar como óptimo el acomodarse. Sino se cae en una trampa de expectativas. En el modelo de Chari, como en la mayoría de los modelos teóricos, la expectativa perfecciona el equilibrio. Un cambio institucional hacia un Banco Central comprometido, eliminaría trampas de expectativas. Imagine el escenario de que un shock en la economía genere un alza transitoria en la tasa de inflación, o que un shock adverso de producto o un shock político, cause mercados estrechos y un aumento en sueldos nominales, cualquiera sea la causa del movimiento inicial en precios, esto lleva a creer en un valor esperado de inflación, y tan pronto como esto sucede, se llega a una trampa de expectativas. Los niveles altos de inflación esperada se traducen en precios y sueldos nominales altos. Nuevamente el Fed se enfrenta con el dilema de complacer expectativas inflacionistas u ocasionar una recesión. Los cambios transitorios en el nivel de precio rápidamente se traducen en episodios de inflación persistente. Lo que piensan los políticos es que la única manera que pueda ocurrir tal escenario, es con una recesión tan dolorosa y larga que modifique las expectativas de inflación. Para evitar este escenario, la autoridad monetaria escoge contraer enérgicamente a las primeras señales de inflación. En conclusión, sin considerar las formaciones de expectativas, es posible construir una defensa plausible de ataques preventivos contra la inflación, a pesar de que existe un gran costo social asociado. Este es el precio que debe pagarse para pedir para que se realice las dos tareas (ayudar a la economía a ajustar choques y mantener un valor bajo de inflación). Pero puede haber arreglos institucionales que lo evitarían. Soy optimista de que es posible que surjan tales instituciones. 4.- ¿Existe una base en la práctica macroeconómica, en la cual, todos debamos creer? (Por Alan Blinder) Yo creo y espero que exista un modelo elemental, aunque por muy perfecto que sea, también creo que dejará muchas preguntas sin responder y será objeto de errores de tipo aleatorio, sin embargo, será muy útil en el análisis de políticas, para lo cual necesita ser adecuado con la realidad y también ser aproximado a cómo los estudiantes ven la macroeconomía en sus inicios. Describiré, a continuación, algunos elementos prácticos que creo que debemos estar de acuerdo, independiente de las teorías en que se apoyan. a) Curva IS: Representa la relación entre el producto real y la tasa de interés real, la cual resulta del comportamiento de los determinantes del gasto total como son el ingreso, otras tasas de interés, presupuesto del gobierno, etc. Si bien, existen teorías que dicen que el principal determinante de la elasticidad del interés del gasto es la inversión fija, aunque no se tengan evidencias empíricas de esto, puedo asegurar que la Reserva Federal toma sus decisiones sobre políticas monetarias en base al comportamiento la curva IS con pendiente negativa, dada la pequeña noción histórica de que a mayores tasas de interés ha existido un menor gasto. Existe una paradoja: Mientras se pone en duda la sensibilidad del gasto de inversión frente a las tasas de interés, la relación supuesta por la curva IS entre la Dda. Ag. con las tasas de interés parece estar explicada por esa sensibilidad. En la práctica, sospecho que la curva IS pueda tener más relación con el tema de la construcción o la compra de bs. durables, que las teorías de inversión. b) Curva LM: Normalmente se usa esta curva al juntar su pendiente positiva con la negativa de la curva IS, relacionando el producto real con la tasa de interés “nominal” . Desafortunadamente, la LM ha sido golpeada fuertemente por las inestabilidades de la oferta y demanda del dinero, lo cual ha generado desconfianza para utilizarla en los análisis de políticas, por lo cual ha sido suplantada por el supuesto de que el Bco. Central controla la tasa de interés nominal a CP. Sin embargo, presumiblemente es la tasa nominal a LP la que afecte más al gasto, por lo que todavía falta por trabajar. c) Oferta y Demanda Agregada: Para obtener el equilibrio macroeconómico a CP, este modelo intersecta una Dda. Ag obtenida de la curva IS y una oferta basada en el modelo de los salarios nominales pegajosos, por lo tanto, supone que el nivel de precios se ajusta de manera rápida para igualar la demanda con la oferta, mientras los salarios están rígidos. Esto último no se ve en la realidad, en cambio, se ve que tanto los precios como los salarios se encuentran muy pegajosos. Más aún, modelos prácticos, usados en el análisis de políticas de CP, usan la curva de oferta ag. con pendiente inelástica y no resuelven el nivel de precios en el mercado, lo suponen dado. Sin embargo, los precios y salarios se encuentran generalmente predeterminados en el CP, y a través de las “ecuaciones de ajustes dinámicos” (Curva de Phillips) es posible describir su evolución en el tiempo. El producto, finalmete es determinado al introducir los precios y salarios predeterminados en la ecuación de Dda Ag. Aún así, no es posible responder a la pregunta de por qué los precios y salarios son tan pegajosos. d) Curva de Phillips: Relaciona la inflación del salario o del precio con el nivel de la utilización del recurso. Mientras la curva LM ha colapsado en los últimos años, y los aspectos claves de la IS todavía se discuten, empíricamente la Curva de Phillips ha funcionado bien en EEUU. Esto, porque presenta altos grados de inercia (ajustes lentos) y tiene la propiedad de que es vertical en el LP, basándose según las evidencias empíricas encontradas, lo que la hace más cercana a la realidad. e) Ley de Okun: Es aún más anti-teórica que la Curva de Phillips, y relaciona el cambio porcentual del producto con el cambio absoluto en la tasa de desempleo, la cual está determinada, entre otras cosas, por la productividad, la fuerza laboral, etc. Si bien, parece contradictoria a la concavidad de la curva anterior, es capaz de interpretar, fielmente, la relación entre el crecimiento real del producto y los cambios en el desempleo. En conclusión, el modelo básico debe considerar 4 creencias básicas: 1) En el CP, los precios y salarios están predeterminados y evolucionan de acuerdo a las ecuaciones dinámicas de Phillips. 2) En el CP, el producto es determinado por la Demanda. 3) La Dda. Ag. responde directamente a las políticas fiscales y a la sensibilidad que tenga con las tasas de interés, de esta manera es afectada por las políticas monetarias, las que establecen las tasas de interés en el CP. 4) La ley de Okun determina una relación entre el crecimiento del producto y los cambios en la tasa de desempleo. A continuación, discutiré sobre dos elementos necesarios para poder vincular la tasa de interés nominal de CP, establecida por la política monetaria, con la tasa real de LP, ya que es probablemente ella la que influye en la Dda. Ag. a) La estructura de las Tasas de interés. La teoría de las expectativas permite relacionar las tasas de interés de corto y largo plazo, siendo la tasa de interés de LP el valor promedio de la tasa actual con la futura esperada en el corto plazo, mas un cierto error. Lamentablemente, este modelo ha fallado las pruebas empíricas, y la ausencia de un modelo usable, que defina una estructura en las tasas de interés, perjudica la conducta de la política monetaria, la cual sólo puede trabajar a CP. b) El modelar expectativas: A partir de los 70, el concepto de las expectativas racionales se integró al comportamiento económico. Anteriormente, sólo las incorporaban de manera exógena o como evolucionando de acuerdo a fórmulas de expectativas adaptativas. La aparición de este nuevo concepto supuso mejorar el pronóstico de la economía y proveer un modelo más realista, sin embargo, empíricamente su comprobación ha dado resultados pobres, donde las expectativas que han podido medirse, no parecen ser racionales. Por último, algunas relaciones empíricas, incluso con los términos de la estructura de las tasas de interés, han demostrado trabajar mejor con las expectativas adaptativas que con las racionales. El esclarecer estos elementos permitiría explicar el comportamiento de la inflación esperada, la cual aparece al lado derecho de la Curva de Phllips, y es la diferencia entre las tasas de interés nominal y real. Concluyo con un tema que ha adquirido importancia en los últimos años: ¿Cuáles son los efectos de un futuro déficit presupuestario esperado? Ha existido la creencia común de que producirá un multiplicador fiscal positivo, el que deterioraría a la economía, sin embargo, actualmente ha tomado fuerza la presunción opuesta: un cambio creíble en la política fiscal, que asegure la disminución futura del déficit presupuestario, estimularía a la economía produciendo una disminución a LP de las tasas de interés reales corrientes. Se me ocurren 2 posibles explicaciones a esto último: a) Basado en Keynes y su argumento del flujo-equilibrio, la promesa de una futura contracción fiscal crea expectativas racionales que disminuyen a CP la tasa de interés, lo que afectará los términos de su estructura y derivará a una actual disminución de su tasa de LP. b) Utilizando el argumento del óptimo de equilibrio de LP, las expectativas de una deuda gubernamental futura menor conducirá a una disminución en las tasas hoy. A lo anterior necesito hacer tres aclaraciones: a) Son sólo posibles teorías, enfatizando las palabras “creíble”, “futuro” y “expectativas” nos damos cuenta que son imposibles de medir directamente los argumentos teóricos. b) Las explicaciones utilizan el modelo de las expectativas racionales, el cual sabemos que es errado. c) En la primera explicación se asume que la tasa de interés de CP futura cae porque el gasto futuro disminuirá, sin embargo, esto es así, mas bien, por un intercambio en la Dda que por un estímulo fiscal. 5.- ¿Existe una base en la Macroeconomía utilizada comúnmente? (Por Olivier Blanchard) Mi respuesta es un sí ambiguo, basada en dos proposiciones dadas por Samuelson: a) En el CP, los movimientos en la act. económica son dominados por los movimientos en la Dda Ag. b) A través del tiempo, la economía tiende al crecimiento natural del estado estacionario. Estas proposiciones caracterizan muy bien los efectos de los shocks y las políticas macroeconómicas, ya sea en el corto como en el largo plazo, por ejemplo: en el CP, un gran déficit presupuestario puede aumentar la inversión y el producto, pero en el LP, disminuye el capital y el producto. Partiendo de lo que no se tiene un consenso, analizaré las bases según los plazos. 1) Mediano y Largo Plazo: La trayectoria del ”steady-state” (E° estacionario, óptimo) del crecimiento no coincide con la de los modelos simples con mercados competitivos, porque existen imperfecciones en el mercado que afectan el nivel y la pendiente de ella. Es por esto que , por ejemplo, no podemos decir que la investigación y dsllo. (R&D) es el principal determinante de la productividad. En el último tiempo han aparecido teorías que desarrollan mejor el análisis del progreso tecnológico y del desempleo, una de ellas es la nueva teoría del crecimiento, que abarca tanto el rol humano como el físico (capital). Esta teoría ha relacionado el proceso de creación y destrucción de trabajo con el los flujos del mercado laboral, mejorando el entendimiento de los determinantes del desempleo. Sin embargo, todavía no sabemos por qué hay diferencias en las tasas de crecimiento de la productividad, ya sea entre periodos como entre países (ej: no existe un consenso todavía de las causas del alto desempleo en Europa hace 15 años, ni de las diferencias en las experiencias vividas entre los mismos países europeos), creo, no obstante, que las dificultades para usar nueva información eficientemente, pueden provocar retrasos en el crecimiento y por lo tanto, explicar en parte estas diferencias. Mientras mi fe por los modelos de ajustes lentos decae, la evidencia indica que un alto y sostenido desempleo cambia a la gente, las actitudes sociales y a los programas gubernamentales, lo que conduce a una más alta tasa natural de desempleo. Si el LP dependiera de los movimientos en la actividad de CP, provocaría la eliminación de la diferencia entre el óptimo invariable del crecimiento y las fluctuaciones alrededor de él, lo que respalda la base propuesta. Otro asunto que también debe ser explicado son los cambios en la distribución de la riqueza, a lo largo de los años. El culpar a la preferencia de progreso tecnológico ante el comercio, del aumento en las diferencias de la distribución, sería bastante limitado e incorrecto. Tampoco la macroeconomía sabe por qué ocurren cambios en los movimientos de capital y trabajo, aunque son los que más han ocurrido y que afectan a la distribución del ingreso. Según mi visión, una causa podría ser por el comportamiento de la inflación, el retorno de capital es alto cuando la inflación es baja, aunque esto genera más dudas que respuestas. 2) El Corto Plazo. En el CP, se ha confiado en la teoría de Keynes, donde los movimientos en la demanda Ag. afectan al producto, y existe rigidez en los precios. Los retrasos en el ajuste de precios nominales y de salarios individuales evitan que el nivel de precios y el tipo de interés se ajusten rápidamente. Esta rigidez nominal y sus implicancias en el producto de CP pueden provocar grandes diferencias en los resultados de asuntos económicos. Los “neokeynesianos” han demostrado que pequeñas rigideces pueden conducir a grandes efectos, pero no existe confianza plena en estos resultados. Un intento por explicar el comportamiento económico, sin caer en las rigideces nominales, ha sido el sencillo modelo del ciclo real del negocio enfocado a las fluctuaciones, al cual luego de 15 años de haber aparecido, los hechos hicieron que las rigideces nominales fueran introducidas en él. La razón fundamental de esta intreoducción, es que los modelos obtenidos de la oferta y Dda. Ag., como el IS-LM o el Mundell-Fleming, han probado ser útiles al analizar las fluctuaciones y los efectos de las políticas, por ejemplo aquellas como la deflación de Volver y el déficit de Reagan, en EEUU. Según el modelo de Mundell-Fleming, el aumento en la emisión de dinero produjo altas tasas de interés nominales y reales, una gran recesión y una apreciación del dollar, y el déficit de Reagan condujo a una expansión del producto, altas tasas de interés reales, valorización del dollar y déficits permanentes. Ahora, basándose en el modelo IS-LM, los intentos de los consumidores a ahorrar, llevaron a la recesión de 1990-1991 y la política expansiva del FED rápidamente lo terminó. Empíricamente se ha demostrado el gran poder que tienen las políticas monetarias y de intercambio para afectar la actividad real, de hecho, estudios, ya sea usando la metodología del estudio de las variables o del estudio del evento, han mostrado que los mecanismos monetarios descritos por Modigliani están presentes en la realidad. Por ejemplo, un estudio mostró que un decrecimiento en las tasas del FED en 100 ptos. bases, genera un incremento en el producto del 0.8% después de un año, y desaparece después de 2 o 3 años; en contraste, la respuesta del nivel de precios es gradual, incluso, insignificante después del implante de la medida. También se ha demostrado que las tasas de largo plazo varían menos que las tasas de corto plazo, y una disminución de las tasas de CP genera una depreciación del dollar. Sin embargo, todavía quedan interrogantes, por ejemplo, en estos estudios se ha visto que, mientras la tasa nominal vuelve al nivel normal dentro del año, los efectos en el producto se expanden por más tiempo. Actualmente, la sabiduría estándar macroeconómica se ha puesto en juicio dado que las políticas fiscales han vuelto a recobrar fuerzas en los países europeos que intentan cumplir con los objetivos del tratado de Maastricht y con su autoimpuesto objetivo de mantener un presupuesto balanceado. Una explicación de esto es que los efectos de las expectativas podrían revertir los efectos de políticas keynesianas, incluso en el CP, por ejemplo, si una disminución del gasto gubernamental logra convencer al mercado financiero de un mejor futuro, lograría conducir a un boom en la actividad económica, en vez de a una contracción, sin embargo, no hay confianza en estos resultados. Otro estudio que pone en tela de juicio el modelo estándar, es elaborado por Peroti y yo, basándonos en el estudio de la identificación de variables usadas para analizar los efectos en políticas monetarias, pero esta vez, las usamos para analizar las políticas fiscales. En nuestros resultados hemos visto que no es tan clara la evidencia tradicional que de que el aumento en los impuestos genere una contracción en el producto por algún tiempo, de hecho, generalmente no encontramos un efecto significativo en el producto. En conclusión , falta mucho por hacer.