XI Jornadas Nacionales de Debate Interdisciplinario en Salud y Población Mesa Redonda Salud, comunicación y tecnologías Nombre y Apellido de los autores de la ponencia: Laura Sacchetti, Marcela Belardo, Mario Rovere, Ana Fuks, Analía Bertolotto, Esteban D’Urbano Título de la ponencia: Polio y “Revolución Libertadora”: análisis del discurso periodístico de la epidemia del poliomielitis de 1956. Pertenencia institucional: Universidad Nacional La Matanza Dirección postal y electrónica: Florencio Varela 1903, UNLAM, San Justo. [email protected] y [email protected] Introducción El presente trabajo forma parte de una investigación más amplia que tiene por objeto de estudio las dos epidemias de parálisis infantil que afectaron a la Argentina en 1953 y 1956. El primer brote se dio durante el gobierno peronista, siendo Ministro de Salud el doctor Ramón Carrillo y el segundo brote durante la autodenominada Revolución Libertadora que depuso a Perón. En esta ponencia nuestro análisis está centrado en la epidemia de poliomielitis desarrollada durante el bienio 1955-56, último brote de considerable magnitud antes del descubrimiento de las vacunas de Salk y Sabin. Nuestro objetivo es analizar los modos de abordar la epidemia y los discursos públicos del gobierno de facto partiendo de la hipótesis de que las políticas sanitarias implementadas consistieron en reinstalar el tradicional modo de abordaje de las dolencias propias de la caridad y la filantropía. Basamos nuestro análisis en el cuerpo de información recogido en la prensa gráfica del período 1955-56, fundamentalmente de los diarios El Mundo y La Razón y las revistas Mundo Argentino, El Hogar y ¿Qué sucedió en 7 días? Nuestro análisis discursivo tomará como eje la enunciación, la puesta en escena del enunciado. Esta materialidad se nos presenta como una producción a la que se puede utilizar, combinar, descomponer y recomponer, se inscribe en un entramado, se integra en la circulación de las prácticas y símbolos, entra en el orden de las contiendas y de las 1 luchas, se convierte en tema de apropiación o de rivalidad, al decir de Deleuze (Lopreto, G, 2001). La información aparece bajo la forma de lenguajes textual e icónico, dentro del género periodístico. En nuestro análisis entendemos que el discurso periodístico no es un simple proceso de transmisión de información entre dos polos, sino que opera como un proceso interactivo mucho más complejo que incluye la interpretación de intenciones expresadas en forma directa o velada (Raiter, 1997). Esto implica tomar en consideración a quienes usan estas formas; personas que poseen ideología, una visión del mundo, así como intenciones, fines concretos en cada situación; despliegue de estrategias para lograr tales fines. En una primera aproximación es notable el uso de discursos prescriptivos que imponen a la población normas, pautas, reglas a seguir, y que los inscriben en el marco de un gobierno autoritario. Resulta visible el cambio de signo ideológico que desarticula la fuerte presencia del Estado y las políticas sociales, y las reemplaza con la construcción de un discurso descalificante de la etapa anterior y promotor de un liberalismo a ultranza, en que cada individuo es responsable de sus actos ante sí y ante los demás, retornando a un esquema filantrópico que había sido desechado durante los años del peronismo. Desde el poder surge un discurso autoritario, que está avalado por el medio que lo pone en circulación: lenguaje que simboliza tal autoridad: estereotipización, estigmatización, normatización apuntan a tener consecuencias performativas en el contexto en que circulan. Presentación del corpus El análisis del discurso constituye una forma específica de acceso a los sistemas de representaciones sociales. El lenguaje es expresión de las creencias y valores de sujetos situados históricamente (Raiter, 1999). Nos proponemos abordar las representaciones que los medios de prensa construyeron en torno a la epidemia de poliomielitis de 1956. A partir de un corpus constituido por ejemplares de distintos diarios y publicaciones periódicas detectamos formaciones ideológicas analizando los roles asignados a las instituciones de gobierno y a la sociedad. La prensa diaria y periódica se nos presenta como un recurso necesario para la reconstrucción del tema, que viene a complementar el análisis de los textos provenientes de ámbitos académicos. Un texto no se presenta 2 nunca aislado: responde, refuta, dialoga en fin con otros textos: está inmerso en una red discursiva (Chartier, 2001). Diarios y revistas nos dan información sobre cómo se difundieron (o no) las noticias relacionadas con la poliomielitis, pero no podríamos quedarnos con estos testimonios para reconstruir en su totalidad las relaciones entre la enfermedad y la historia. Analizamos paquetes de sentido compuestos por textos e imágenes, entendiendo que las segundas no son simplemente ilustraciones sino que aportan efectos de sentido a través de su propio lenguaje de formas, composición, color. Con esto queremos llegar a superar cualquier dicotomía entre análisis de forma y de contenido: textos e imágenes aportan sus propios dispositivos de enunciación y tienen formas propias de organizar sus enunciados. A eso le sumamos las convenciones de interpretación propias de una época o una sociedad, lo que constituye la retórica de dicha cultura (Marafioti, 1998). Nuestro análisis se propone identificar los recursos ideológicos puestos en discurso para caracterizar la epidemia y detectar los objetivos performativos de tales enunciaciones. Descripción del corpus: La cualidad del medio, la audiencia a quien está destinado, el dispositivo, en fin, constituye el soporte de la discursividad y por lo tanto es necesario analizarlo desde el circuito de producción hasta el de circulación. Se consideraron para la selección textos con tiradas importantes, que cubrieron el tema de la epidemia. Diarios: o Diario El Mundo (Años 1955, 1956) En 1904 se creó la Editorial Haynes que inició sus actividades con la revista El Hogar; a través de las décadas siguientes llegó a ser una importante empresa que produjo diversas publicaciones que llegaron a circular en el ámbito internacional. Allí se editó el diario El Mundo y varias revistas como Mundo Deportivo, Mundo Agrario, Mundo Rural, Mundo Infantil, Mundo Peronista, que tras la caída de Perón devino en Mundo Argentino. o Diario La Razón, fundado en 1905, fue el primer diario de alcance nacional que se autodefinió apolítico, con un propósito únicamente informativo, para diferenciarse del resto de la prensa a la que juzgaba doctrinaria. Sin embargo, en la práctica su posición fue conservadora; limitaba las opiniones editoriales, 3 comentaba la actualidad con un lenguaje moderno, siendo el vespertino elegido por un público de clase media. Revistas: o Mundo Argentino (enero a julio, 1956) publicación de la Editorial Haynes dirigida por Ernesto Sábato, semanal. o El Hogar (Año 1956) semanario ilustrado. La revista tiene un tono mundano, despreocupado, registra las distracciones de la burguesía, abunda en notas relativas a la elite local. o ¿Qué sucedió en 7 días? (enero a julio, 1956). Fundada en 1946 por Rogelio Frigerio y Baltazar V. Jaramillo, fue una propuesta semanal que implicó un periodismo renovado, apuntando a un público nuevo y con un lenguaje punzante. Teniendo como modelo la publicación norteamericana Time, abordó temas políticos y culturales. Discursividades sobre la polio Según consta en la bibliografía científica, el inicio de la epidemia de 1956 tiene una fecha exacta: el 27 de enero luego de un silencio casi absoluto en los meses de octubre, noviembre y diciembre. Sin embargo, registramos que la prensa gráfica recién reconoce la existencia de la epidemia casi un mes más tarde, el 22 de febrero1. Rugiero, director de la Lucha contra la Poliomielitis y Vilches, médico del Hospital Malbrán y Director de Investigaciones del laboratorio Squibb, dictaron una conferencia en el Hospital Rawson. Según Rugiero (1956) este comportamiento no había acontecido en otras oportunidades cuando se produjo un brote de semejante magnitud. Lo llamativo, dice el autor, es que se produjo de “forma inusitada y grave los primeros instantes y la dificultad de llegar a un diagnóstico antes de que el médico pudiera pensar en esta afección, los síntomas y signos corrían a tanta velocidad que cuando el médico se percibía de la situación el niño o adulto se estaba asfixiando”. Para mediados de febrero los casos sumaban entre 60-70 por día entre los cuales entre 10- 15 enfermos debían ser colocados en un pulmotor. El 18 de febrero solo en el 1 22/2/1956 Declina el brote de parálisis La Razón página 3 4 Hospital Muñiz ingresaron 7 pacientes que debían ser colocados de inmediato en un pulmotor, hecho que nunca se había dado en el país ni siquiera en la epidemia de 1953, relata Rugiero. Nunca en la historia del país se había producido una epidemia de semejante magnitud y con las características que describen los médicos Rugiero y Vilches. Como decíamos anteriormente, la noticia sobre una nueva epidemia de polio aparece en los medios de comunicación a fines del mes de febrero de 1956. En primer lugar señalamos quiénes aparecen identificados como sujetos activos en relación con la temática. Los medios analizados a veces personalizan las acciones de determinados agentes con el fin de instalarlos como responsables de acciones positivas o negativas, como en los siguientes ejemplos: I. Agentes explícitos: El Presidente visita a los niños (La Razón 14/3/56). Ante la epidemia se muestra a un presidente activo que recorre los hospitales, se reúne con los médicos, adquiere nuevos pulmotores en el exterior. El primer mandatario asume esta nueva epidemia como una cuestión de Estado en un intento de diferenciarse del gobierno anterior que es culpado por haber ocultado la cifra de enfermos y no haber arbitrado en tiempo y forma los medios para frenar una epidemia, que tuvo carácter mundial. Las fuentes consultadas no desaprovechan oportunidad de resaltar la falta de previsión y la ineficiencia del peronismo. El gobierno anterior mantuvo criminalmente en secreto el brote de 1953, con fines políticos (La Razón, 23/3/56). La respuesta a las epidemias podría servir como un vehículo para la crítica social, así como una justificación para el control social. Durante la epidemia de 1956 el gobierno de facto actuó estratégicamente por el poder: la búsqueda de culpables buscó legitimar el ascenso al poder del grupo golpista. Monseñor Tato, vicario general del arzobispado de Buenos Aires ha invitado… a elevar oraciones y organizar actos imprecatorios para implorar a Dios el cese del brote poliomielítico (La Razón, 8/3/56). En ocasión de las acciones colectivas, la reunión de fieles en iglesias en jornadas de ayuno y oración, procesiones y demás rituales visibilizaron la solidaridad de la comunidad 5 junto a la Iglesia que venía desempeñando un rol protagónico, tanto en el derrocamiento del gobierno peronista como en el apoyo manifiesto al que surgió del golpe de estado. Las samaritanas enfermeras (El Hogar, 23/3/56) El artículo refiere en estilo directo un supuesto diálogo entre dos enfermeras: - “Le diste la comida a Luis Alberto, el de la camita 21? - “Si, de tan buenito parece un ángel” -introduciendo el tono sentimental más propio de un radioteatro que de las acciones necesarias para la lucha contra la epidemia. En otros casos las enunciaciones aparecen sin agentes: estamos en esos casos ante II. Agentes elididos: Es frecuente el uso del “se”, como en los siguientes ejemplos: Se combate el brote (La Razón 8/3/56) Se completa el arsenal (La Razón 14/3/56) Se sabe inicióse en San Martín (La Razón 16/3/56) La adopción y aplicación de las medidas de salud pública inevitablemente reflejan actitudes culturales. Los pobres y socialmente marginales, por ejemplo, han sido históricamente etiquetados como las probables víctimas de manera desproporcionada de enfermedades epidémicas, y tradicionalmente han sido los objetos de la política de salud pública. Se realizaron fumigaciones en San Martín, La Matanza, Caseros y Ciudadela. A menudo, de hecho, una evidencia empírica ha apoyado tales supuestos; la experiencia así como la ideología han hecho cumplir tal asociación. Estos puntos de vista se han manifestado en variedad de formas. Cuarentenas en el siglo XIX, destrucción de utensilios personales y desinfecciones fueron, por ejemplo, lo que se le impuso a los pobres, y no a los ricos incluso cuando la teoría de los gérmenes estaba bien establecida. La polio es otro ejemplo pertinente: En la epidemia de Nueva York de 1916, las medidas profilácticas se aplicaron en los barrios pobres densamente poblados, y no en los más prósperos suburbios de clase media, con menos gente, y aparentemente más saludables aunque de hecho allí se produjeron muchos de los casos. (Rosenberg, 1992:293) 6 O bien no se identifican los sujetos de enunciación: Con todos los medios combaten (La Razón 10/3/56) Descomponen pulmotores (La Razón 20/3/56) Inferimos que a pesar del anonimato se culpabiliza a partidarios del gobierno anterior; recordemos que la enfermería fue una profesión particularmente movilizada en apoyo del peronismo. En otros casos se recurre a III. Abstracciones y generalizaciones, lo que constituye otro recurso para elidir al sujeto: “Que el país inicie cuanto antes la producción de la vacuna Salk” dice el ministro Francisco Martínez (La Razón, 1/3/56) Todo Buenos Aires se moviliza (La Razón, 12/3/56) La población colabora (Mundo Argentino, 7/3/56) Buenos Aires castigada por la polio (El Hogar, 11/3/56) Mujeres, hombres y niños –terminadas sus tareas diarias- invaden la calle con mangueras, baldes, cepillos, agua y desinfectantes. El “pueblo sabe de qué se trata” y actúa en consecuencia.” Apelando a una expresión histórica que hace referencia al pueblo reunido frente al Cabildo, dice la publicación que este pueblo (generalización) conoce y ejerce sus derechos. (El Hogar, 23/3/56) En relación con la modalización encontramos que es frecuente el uso de imperativos ¡Haga esto! (primera publicidad que tematiza la epidemia, La Razón 12/3/56). En toda oración al contenido de la proposición (dictum) le acompaña un modo (modalización) Esto nos lleva a considerar las modalidades de deber y de poder como dos instancias autónomas y complementarias. El emisor se arroga legitimidad para prescribir determinada acción y el medio ocupa la posición de portavoz o instrumento del poder. Los niños quietos y en casa (La Razón 23/3/56) Levántate y anda (La Razón 29/3/56) Ayudar a vivir a los paralizados (Qué sucedió en 7 días, 4/4/56) En un país como Argentina, sin memoria de conflictos bélicos, tener una población infantil inválida significó hacer frente a una situación inédita, para la que no se contaba 7 con recursos humanos ni técnicos. Pensar en rehabilitar niños con invalidez total o parcial fue una tarea que desafió las competencias del mundo médico-sanitario y abrió el camino para el surgimiento de las profesiones ligadas a la rehabilitación –terapia ocupacional, kinesiología, fonoaudiología, entre otras- . ¡No asustarse por la poliomielitis! (Mundo Argentino, 7/3/56). Nos detenemos en el análisis de este artículo aparecido en la publicación dirigida por Ernesto Sábato que argumenta recurriendo al empleo de un entimema, silogismo de dos proposiciones: Proposición número 1: “Una ola de enfermedades a virus recorre el mundo” Proposición número 2: “El temor es factor negativo en toda enfermedad” Consecuencia: “A no asustarse, pues” La primer proposición parafrasea el enunciado del Manifiesto Comunista (Un fantasma recorre Europa…), la intertextualidad genera la misma inquietud que la ideología considerada peligrosa por los sectores conservadores. Los textos revisados recurren a estructuras argumentativas que se inscriben en ciertas pautas comunes: Inducción: a partir de ejemplos aislados se generaliza. Permite extraer conclusiones a partir de casos particulares. Generalizar es simplificar, caricaturizar. Los ejemplos tienen que ser concretos, fácilmente inteligibles. En el artículo titulado “La parálisis infantil no debe dejar lisiados” (Mundo Argentino, 28/3/56) se recurre a los ejemplos de una tenista de fama mundial y a uno de los hombres más fuertes del mundo, de quienes se dice: “ellos vencieron en algo más que competencias deportivas, vencieron en su niñez, como tantos niños uno de los males más tremendos y desesperantes de nuestra época: la poliomielitis.” Ilustración: puede servir mejor a la causa que se defiende que una serie de razonamientos. En “Buenos Aires castigada por la poliomielitis” (Figura 1) se publica una fotografía del presidente de facto, de guardapolvo blanco, a la usanza de los médicos y el epígrafe dice: “preocupado por la aparición del brote epidémico, el general Aramburu realizó una visita al hospital Muñiz, donde se atienden numerosos afectados de poliomielitis”, con lo que se apela al poder persuasivo del testimonio, en relación directa con la sensibilidad de los lectores de la revista, a quienes se busca impresionar con la 8 actitud humanitaria del militar. Esta fotografía fue difundida por todos los medios consultados. Figura 1 - El Hogar, 11/3/56 En el mismo ejemplar se publica una fotografía de tres niños sonrientes (Figura 2) con el siguiente comentario: “Un balde de cal y las brochas: la cruzada infantil invade las calles. Al paso de estos niños todo se transforma en blanco, hasta los troncos de los árboles”. Nos llama la atención la definición de cruzada, que remite a una guerra de carácter religioso/militar, para estos pequeños que alegremente se disponen a hacer algo divertido. Figura 2, El Hogar 11/3/56 9 También las publicidades se hicieron eco de la poliomielitis: seleccionamos la que inicia toda una serie, que evoca el discurso prescriptivo del régimen con total oportunismo en la promoción de electrodomésticos, al decir: “Ahora más que nunca, haga esto: no levante polvo (compre una aspiradora); mantenga toda la ropa limpia (compre un lavarropas), conserve bien frescos los alimentos (con una heladera); evite fatigas (encere y lustre con una lustradora). Con el estilo de publicidad propio de la época, (Figura 3) el jabón Prosan incluye la fotografía de una niña sonriente con un jabón en la mano y una leyenda donde se lee: Por fin un jabón que nos protege! Y debajo, con letras mayúsculas, “AHUYENTE EL CONTAGIO” Figura 3: La Razón, 11/3/56 En los estudios de estilos de la comunicación mediática se nota que a partir de la década del 40 las imágenes de cuerpos dolientes han sido sustituidas por cuerpos vigorosos: lo característico pasa a ser mostrar un resultado, no las condiciones de un problema. La tendencia en cuanto a qué tipo de ilustración se recurre en los medios gráficos se caracteriza por la adopción de la ilustración americana, lo que se refuerza con la fotografía en reemplazo del dibujo. Este cambio no se reduce solo a los medios gráficos aisladamente, tiene conexiones con la plástica de la época, con los recursos del cine en cuanto a construcción de encuadres y secuencias (historietas, fotonovelas), lo que denota una relación intertextual sobre el conjunto de los medios. 10 Por eso es necesario analizar qué tipo de imágenes fotográficas incluyen las publicaciones: ya hemos señalado que los años 40 asistieron al desplazamiento de un cuerpo en estado sufriente a uno pródigo, un cuerpo objeto del dolor a uno dispuesto al disfrute. Resulta igualmente autoritario el anuncio de Fumetas (hormiguicida líquido): combata los insectos portadores de gérmenes infecciosos y en caracteres destacados: lave, fumigue, mate. Según Van Dijk (Van Dijk y otros, 1993) las propiedades del discurso deberán estar encaminadas a la producción de formas de pensar que vinculen modelos con actitudes. Para imponer el modelo propio en una situación de tensión, los enunciadores apelan a dos estrategias complementarias: la representación positiva del grupo propio al tiempo que una representación negativa de los otros. Así, los artículos se construyen mediante la retórica de oponer acciones positivas (las del régimen militar) a acciones negativas (del gobierno peronista). Conclusiones A través del análisis del discurso detectamos un uso reiterado de prescripciones en lenguaje con resonancias militares, que inscriben estos testimonios en el marco ideológico del gobierno de facto. Para el gobierno militar la poliomielitis fue la gran oportunidad política para detractar al sistema de salud pública fundado por la gestión anterior y al gobierno peronista en su conjunto. Por otra parte, el discurso descalificante del gobierno anterior se complementa con la promoción a todo nivel de un individualismo que responsabiliza a cada persona de sus actos, retornando a un esquema filantrópico que había sido desechado por el peronismo. A través de personalizaciones en algunos casos y de generalizaciones despersonalizantes, los textos trazan un campo de batalla que posicionan a unos y otros en las estrategias para con la epidemia. Referencias bibliográficas Chartier, R. (2001) Escribir las prácticas. Foucault, De Certeau, Marin., Buenos Aires, Manantial. 11 Lopreto, Gladys M. (2001) Enunciación – Enunciado, Cátedra de Lingüística, FPy CS, Universidad Nacional de La Plata. Marafioti, R. (comp.) (1998) Recorridos semiológicos. Signos, enunciación y argumentación. Buenos Aires, Eudeba Raiter, A; Zullo, J; Unamuno, V; Pérez, S; Bannon, M. (1997) Cuadernos de sociolingüística y lingüística crítica 2. El lenguaje como ideología. UBA, FFyL, Cátedra de Sociolingüística, Departamento de Letras Raiter, A; Zullo, J; Pérez, S; Unamuno, V; Labonia, D; Muñoz, I. (1999) Discurso y ciencia social, Bs.As. Eudeba Rugiero, H. (1956) “Características clínicas del presente brote de poliomielitis” Orientación Médica V .16 de marzo, pp. 181-187. Van Dijk, T; Kress, G; van Leeduwen, T; Wodak, R; Matouschek, B: (1993) El análisis crítico. Fundamentos y actualizaciones empíricas. Selección, traducción, adaptación de Discourse and Society, vol 4, n° 2, Londres, Sage Diarios La Razón (1955/56) El Mundo (1955/56) Revistas Mundo Argentino (enero a julio, 1956) Año XLVI El Hogar (Año 1956) Año LII ¿Qué sucedió en 7 días? (enero a julio, 1956). Año II 12