La Iglesia Católica Reformada de Venezuela no es

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La Iglesia Católica Reformada de Venezuela no es católica
Sectas, apologética y conversos / Magisterio Paralelo - Personas y grupos disidentes
Por: Miriam Díez i Bosch | Fuente: Zenit.org
La agrupación religiosa “Iglesia Católica Reformada” no goza de ningún tipo de reconocimiento por parte de la Iglesia Católica, es más,
está considerada herética y disidente.
Tampoco está reconocida por la Comunión Anglicana, que ha emitido un comunicado en la que se desmarca de esta agrupación,
presentada oficialmente en el 2008 en Venezuela.
El Presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), monseñor Ubaldo Santana, ha manifestado su desacuerdo por el uso
del nombre de “católico” dentro de "Iglesia Católica Reformada", el grupo que se ha formado con miembros favorables a Hugo Chávez y
pertenecientes a varias iglesias, entre ellos dos sacerdotes católicos.
En declaraciones al periódico “El Universal”, monseñor Santana ha precisado que "cada quien puede plantear su propuesta religiosa, lo
que me parece es que es una usurpación que se hayan colocado el título de católicos y manifiesto mi extrañeza de que el Ministerio de
Interior y Justicia haya permitido registrar una nueva denominación con este título".
El 25 de junio de 2008, el sacerdote católico Jon Jen Siu García, el pastor luterano Enrique Albornoz y el pastor luterano Alexis Bertis,
presentaron públicamente esta nueva “Iglesia”, llamada Iglesia Católica Reformada de Venezuela.
El domingo 29 de junio del mismo año, se realizó una ceremonia, en el Templo Luterano San Pablo de Ciudad Ojeda, en la que tres
obispos, Dale Climie, Arzobispo de la Iglesia Anglicana Conservativa de Estados Unidos; Leonardo Marín, primado de la Iglesia
Anglicana Latinoamericana y Jorge Pérez, obispo de México, consagraron a los tres venezolanos, antes mencionados, como obispos,
para así fundar la “Iglesia Católica Reformada” de Venezuela.
Los dos sacerdotes católicos que forman parte de la nueva agrupación pertenecen uno a la diócesis de Cabimas y otro a la archidiócesis
de Maracaibo.
Ante esta nueva Iglesia, el obispo de la diócesis venezolana de Cabimas, monseñor William Delgado, el Consejo Presbiteral y los
sacerdotes en general, rechazan categóricamente la fundación de la Iglesia Católica Reformada de Venezuela.
Por su parte, la archidiócesis de Maracaibo ha emitido un comunicado en el que dice que “esta nueva agrupación religiosa pretende
erigirse en una alternativa a la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, a la vez que utilizar la misma simbología, indumentaria,
nomenclatura, títulos y servicios sacramentales y litúrgicos que la Iglesia Católica. También pretenden llamarse católicos sin estar unidos
por la obediencia ni al Papa ni a la Jerarquía Católica, simulando incluso la ordenación de nuevos obispos sin el expreso mandato del
Romano Pontífice”.
Monseñor Ubaldo Ramón Santana Sequera, arzobispo de Maracaibo y monseñor Cástor Oswaldo Azuaje Pérez, obispo auxiliar,
recuerdan a los fieles que el grupo es “cismático” y “herético” y incurre en excomunión a tenor del canon 1364 del Código de Derecho
Canónico.
“Exhortamos a todos los católicos a mantenerse alertas para no dejarse dividir ni arrastrar a confrontaciones religiosas, a empeñarse en
fortalecer la unidad interna de la Iglesia Católica y a favorecer un clima de respeto y de convivencia entre todos los venezolanos”, han
alentado.
El cardenal Urosa también se ha pronunciado: “Con respecto a la creación de una supuesta Iglesia nueva que abusivamente se quiere
llamar "Católica Reformada" permítanme expresar aquí mi rechazo a la participación de cualquier católico, y mucho más, de cualquier
sacerdote, en esa supuesta nueva "iglesia católica reformada"”.
“Esta nueva agrupación es un grupo heterogéneo formado por disidentes de varias iglesias históricas: hay luteranos, y de otras
confesiones cristianas, así como algunos católicos”, ha expresado el cardenal.
Por parte de los fieles católicos, “adherirse a esa nueva agrupación disidente es una acción cismática, es decir, de ruptura de la unidad
eclesial, que está penada con la excomunión”, recuerda el purpurado.
Arquidiócesis de Maracaibo. Comunicado Oficial
El pasado jueves 26 de junio de 2008, fue presentada en la ciudad de Maracaibo una nueva agrupación religiosa, denominada IGLESIA
CATOLICA REFORMADA. Pretende erigirse en una alternativa a la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, a la vez que utilizar la misma
simbología, indumentaria, nomenclatura, títulos y servicios sacramentales y litúrgicos que la Iglesia Católica. También pretenden
llamarse católicos sin estar unidos por la obediencia ni al Papa ni a la Jerarquía Católica, simulando incluso la ordenación de nuevos
Obispos sin el expreso mandato del Romano Pontífice.
Entre los promotores de esta nueva agrupación hay dos sacerdotes provenientes de la Iglesia Católica que abandonaron su ministerio
en momentos diversos y ambos han renegado públicamente de la recta fe católica con sus actitudes y palabras. Uno de ellos proviene
de la Diócesis de Cabimas, y el otro de la Arquidiócesis de Maracaibo. Este último contrajo matrimonio civil, emitiendo hace meses
declaraciones en la prensa que provocaron escándalo, dolor y confusión entre los que fueron sus feligreses.
Ante estos hechos, el Arzobispo de Maracaibo, acompañado por su Obispo Auxiliar y por los miembros del Consejo Presbiteral,
salvaguardando la unidad de la Iglesia, manteniendo el respeto a las personas, disipando confusiones, y evitando que los fieles sean
engañados en su buena fe, hacen la siguiente declaración:
1. La llamada IGLESIA CATOLICA REFORMADA no forma parte de la IGLESIA CATOLICA, APOSTOLICA Y ROMANA, ni se deriva de
ella.
2. Uno de los sacerdotes católicos que se han enrolado en ella desde hace tiempo había sido suspendido de sus facultades
ministeriales, con prohibición expresa de celebrar cualquier sacramento. El otro sacerdote, con esta pretendida ordenación episcopal, ha
incurrido en la sanción más grave que tiene la Iglesia Católica para cualquiera de sus miembros, como es la de la excomunión.
3. Invitamos a todos los católicos a estar muy atentos y a no dejarse confundir por esta nueva agrupación que pretende mantener un
culto y la administración de los sacramentos, la estructura organizativa, los títulos, la simbología y la indumentaria de la Iglesia católica.
Se trata de una usurpación irrespetuosa y engañosa.
4. Recordamos a todos los fieles católicos, tanto clérigos como laicos, que se unan y acepten las disposiciones y creencias de un grupo
cismático o herético como la denominada IGLESIA CATOLICA REFORMADA que incurren en ex comunión a tenor del Canon 1364 del
Código de Derecho Canónico.
Exhortamos a todos los católicos a mantenerse alertas para no dejarse dividir ni arrastrar a confrontaciones religiosas, a empeñarse en
fortalecer la unidad interna de la Iglesia Católica y a favorecer un clima de respeto y de convivencia entre todos los venezolanos.
Maracaibo, 1 de julio de 2008.
+ Mons. Ubaldo Ramón Santana Sequera
Arzobispo de Maracaibo
+ Mons. Cástor Oswaldo Azuaje Pérez
Obispo Auxiliar de Maracaibo
Diocesis de Cabimas. Declaración Oficial
Ante el hecho público en torno a la persona del P. Jon Jen Siu, quien recientemente se ha asociado a la llamada “Iglesia Católica
Reformada de Venezuela”, en el ejercicio de nuestra “… obligación de defender la unidad de la Iglesia universal, promover la disciplina
que es común a toda la Iglesia, y por tanto exigir el cumplimiento de todas las leyes eclesiásticas, así como de vigilar para que no se
introduzcan abusos en la disciplina eclesiástica, especialmente acerca del ministerio de la palabra, la celebración de los sacramentos y
sacramentales, el culto de Dios y de los Santos…” (Cf. c. 392 §§ 1 – 2), y para evitar confusiones entre nuestros fieles, consideramos
nuestro deber emitir la siguiente declaración:
1. El padre Jon Jen Siu fue ordenado el 16 de diciembre de 1995 en Cabimas, incardinación a la diócesis de Cabimas. Hasta Junio del
2007 fue Párroco de la Parroquia de Santa Lucia e Ciudad Ojeda. Desde entonces gozó de un año sabático siendo capellán de acción
social de Ducolsa, filial de PDVSA. El 25 de Junio presentó su renuncia al ministerio sacerdotal, siendo exhortado a revisar su actitud y
volver a la vida sacerdotal en la diócesis.
2. El pasado 29 de julio el P. Jon Jen Siu se asoció a un movimiento ajeno al sentir de la Iglesia, llamado “Iglesia Católica Reformada de
Venezuela ”, violando la normativa del Código de Derecho Canónico según la cual los clérigos católicos deben abstenerse de “…
constituir o participar en asociaciones cuya finalidad o actuación sean incompatibles con las obligaciones propias del estado clerical o
puedan ser obstáculo para el cumplimiento diligente de la tarea que les ha sido encomendada por la autoridad eclesiástica competente”
(Cf. c. 278 §3).
3. Ese movimiento llamado “Iglesia Católica Reformada de Venezuela”, está integrado por un grupo de ministros disidentes de diversas
iglesias históricas, como la católica, la luterana. Las enseñanzas de este movimiento están en franca contraposición con las de la Iglesia
Católica, rechazando, además de principios de fe y costumbres, la comunión con la Iglesia Católica en la persona del papa, sucesor de
Pedro y por ende con el Colegio Episcopal.
4. Este movimiento no tiene derecho alguno a llamarse católico toda vez que el Código de Derecho Canónico sanciona que “Ninguna
asociación puede llamarse «católica» sin el consentimiento de la autoridad competente…” (C. 300).
5. El 29 de Junio de 2008 el P. Jon Jen Siu, en el templo Luterano San Pablo de Ciudad Ojeda, recibió una supuesta consagración
episcopal de parte de un grupo de “obispos” disidentes de la comunión anglicana que forman parte del movimiento llamado “Iglesia
Anglicana Latinoamericana”. Al respecto hay que señalar que ese acto, el cual genera confusión en los fieles carece de validez alguna;
el P. Jen Siu no ha recibido la consagración episcopal, no participa de la sucesión apostólica y por consiguiente, su “consagración” no ha
sido más que la simulación de un sacramento. Por ende cualquier acción ministerial por parte del falso obispo Jon Jen Siu no será más
que la simulación de sacramentos; delito sancionado por el Código de Derecho Canónico, según el cual “Quien, fuera de los casos de
los que se trata en el can. 1378, simula la administración de un sacramento, debe ser castigado con una pena justa” (C. 1379).
6. El P. Jon Jen Siu, al haberse adherido públicamente a un movimiento que atenta abiertamente contra la comunión en la Iglesia
Católica, ha incurrido además en dos gravísimos delitos sancionados por el Código de Derecho Canónico (Cf. cc. 751; 1364 §1), a
saber:
Herejía, que consiste en la negación pertinaz, después de recibido el bautismo, de una verdad que ha de creerse con fe divina y católica.
Cisma, que consiste en el rechazo a la sujeción al Sumo Pontífice o de la comunión con los miembros de la Iglesia a él sometidos.
7. La doctrina sobre el Primado de Pedro, que es verdad de fe divina y católica, y la sujeción a sus legítimos sucesores, los Papas,
resulta gravemente lesionada por el movimiento llamado “Iglesia Católica Reformada de Venezuela ”, por lo que al haberse dado la
pública adhesión del P. Jon Jen Siu a esa agrupación, ha incurrido en el delito de herejía y cisma, generando grave escándalo para los
fieles e incurriendo en la sanción de excomunión latae sententiae, es decir, ha contraído la pena ipso facto, con el mismo hecho público
de su adhesión a esa iglesia.
8. La pena de excomunión, a tenor del c. 1331 § 1, comporta principalmente para el P. Jon Yen Siu las siguientes prohibiciones:
Tener cualquier participación ministerial en la celebración del Sacrificio eucarístico o en cualesquiera otras ceremonias de culto;
Celebrar los sacramentos o sacramentales, y recibir los sacramentos;
desempeñar oficios, ministerios o cargos eclesiásticos, o realizar actos de régimen.
9. Exhortamos a nuestros fieles a no dejarse desorientar por el movimiento llamado “Iglesia Católica Reformada de Venezuela”, y a
permanecer unidos en la Iglesia Católica, en la cual subsiste la Iglesia fundada por Nuestro Señor Jesucristo. Así mismo les exhorto a
elevar incesantes plegarias a Cristo Pastor Supremo, para que preserve a su Iglesia de los gérmenes de división y toque el corazón de
aquellos hermanos confundidos para que vuelvan a la Iglesia que han abandonado
Mons. Francisco Gil
Vicario General
Mons. William Delgado
Obispo de Cabimas
Visita Conferencia Episcopal Venezolana :http://www.cev.org
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