LA BLANCA CACEREÑA : PATRIMONIO HISTÓRICO '^ ^ ' ^ UNA DURA SUPERVIVENCIA La Blanca Cacereña se considera un claro ejemplo de raza en peligro de extinción, cuya supervivencia, hoy día, se debe principalmente al trabajo llevado a cabo por el CENSYRA y el Colegio oficial de Veterinarios de Cáceres para su selección y diferenciación animal. A la hora de intentar explicar las principales causas que han llevado a la Blanca Cacereña a la práctica desaparición, la mayor parte de los expertos coinciden en señalar como punto de inflexión la introducción de la raza Charolesa en la Península. De idéntica capa blanca, su cruzamiento con el objetivo de mejorar los rendimientos productivos, ha sido una práctica habitual y descontrolada, hasta llegar a la situación límite actual. Es imprescindible señalar la importancia de la vacada de Blanca Cacereña que la familia Muñoz ha mantenido en pureza y gracias a la cual se ha podido empezar a seleccionar y a fijar caracteres de la misma. ORIGEN Y DIF[JSIÓN DE LA RA7.A El origen de esta raza es realmente in*:Ingeniero Agrónomo ** Ingeniero Agrónomo, Ingeniero Técnico Agrícola ^ 1 cierto. Según Fernando Bullón su procedencia puede ser norteafricana, concretamente del desierto Libio. Su extensión pudo deberse a la expansión del Imperio Romano, y tras su decadencia quedaron restos de estos animales en España y Francia. La presencia de estos animales parece deberse a manifestaciones y prácticas religiosas y al desaparecer éstas, la presencia de estos animales disminuyó en una gran manera. Se ha polemizado ampliamente sobre el parentesco de esta raza con el Charolés, pero parece demostrado que mientras la raza gala procede del Bos taurus desertorum, la Blanca Cacereña se remonta en su procedencia al Bos indicus y al uro asiático. Estudios genéticos Mediante una recopilación de estudios, realizada por Vallejo et al (1994) y González Sevilla et al (1994), sobre marcadores genéticos no influidos por factores ambientales fenotípicos, se ha demostrado mediante ciertas pruebas que la blanca cacereña tiene un origen más cercano a las razas asiáticas que a la europeas. Según estos estudios, los marcadores Ke, Cp y Tf se muestran mayorita- riamente monomórficos en la Blanca Cacereña y polimórficos en otras razas tanto de la península como del resto de Europa; así mismo, se ha observado que el marcador HbB , que tiene una alta frecuencia en razas asiáticas, está presente, también en esta raza. E1 marcador A1F aparece en estos animales con una frecuencia de alrededor del 50^/0, mientras que en el resto de razas españolas tiene un porcentaje de aproximadamente e190%. Este y otros marcadores como el Cas , el Als y el Cp^ , que están presentes en la Blanca Cacereña y en otras razas de origen asiático, han llevado a la conclusión de que no desciende de los bóvidos europeos, sino que lo hace más directamente que otras razas europeas del Bos taurus primigenius, antecesor del bóvido europeo. Peculiaridades morfológicas Una de las características que parecen demostrar este carácter primitivo son las características craneanas de esta raza, diferentes a las de las razas europeas con una situación geográfica cercana. Es una raza con cráneo ancho y frente plana, cara larga y estrecha y morro acuminado. Los cuernos nacen en la lí- nea de proyección del cráneo y la prolongación de la nuca, siendo fuertes en la base con un gran desarrollo horizontal, se proyectan hacia delante con las puntas hacia arriba, con un color gris decolorado uniforme, sin intensificación en la punta. Otra de sus características es un cuello fuerte y estrecho, con una papada larga y desarrollada en pocos pliegues. EI tronco es longiformis y presentan grupa recta con elevación del hueso sacro, la cola es de nacimiento anterior y alto, presentando un poblado borlón hasta el suelo. Las ubres son pequeñas y de coloración rosácea, siendo los pezones negros signo de falta de pureza. El carácter morfológico más importante de esta raza es el color blanco de la capa. Los terneros al nacimiento son completamente blancos y se observa cierto viraje al salmón al aumentar la edad. EI 95^Io de los efectivos tienen unas mucosas claras, la aparición del negro indica un cierto cruzamiento con el charolés. Proyecto de difusión de la raza Dado que a lo largo de la historia ha sido una raza prácticamente desconoci- da, su extensión geográfica se ha centrado, exclusivamente, en las provincias extremeñas, sobre todo en la provincia de Cáceres. Además es una raza estacionaria sin tradición trashumante, lo que ha acentuado que su distribución por las provincias limítrofes sea prácticamente inexistente. Por otra parte, su bajo censo se debe básicamente a que los cruces realiza- dos deben ir encaminados a evitar la consanguinidad. En 1995 había 214 reproductores, de los cuales 32 eran toros y 182 eran vacas, repartidas en 9 ganaderías. Gracias a los esfuerzos del CENSYIZA y del Colegio oficial de Veterinarios de Cáceres, este censo se ha incrementado, y en el año 1999 el número se ha llegado hasta 285 animales repartidos en 13 ganaderías, de los cuales 36 eran toros y 249 vacas. Gracias a su rusticidad, son animales que se defienden bien en terrenos pésimos con diferencias extremas de temperaturas y alta radiación solar. Debido a esto, el sistema habitual de explotación es extensivo en dehesa, formando rebaños de 25 a 30 vacas con un toro utilizado para la cubrición, aunque al estar estos rebaños incluidos en el programa de mejora genética las cubriciones deben realizarse mediante inseminación artificial con toros testados y valorados en el CENSYRA. Las vacas suelen llegar a la pubertad entre los 14 y los 16 meses de vida, cubriéndose por primera vez a los 18 meses aproximadamente. La gestación suele ser más corta que en el resto de la especie, entre 274 y 276 días, causa que puede ser debida a la alta consanguinidad de los rebaños. Los partos suelen ser fáciles y rápidos con un peso de los terneros al nacimiento de aproximadamente 28-29 kg, con un intervalo entre partos de 407 ± 80 días. Los terneros se mantienen con la madre alrededor de seis meses hasta su venta..Su crecimiento diario en esta etapa es de aproximadamente 800 gramos diarios, llegando a alcanzar un peso a los seis meses de 160 kg en la hembras y 200 kg en los machos. Normalmente son animales que se ceban, ya que su aprovechamiento actual es el cárnico, con una calidad de carne excelente. Antes, el aprovechamiento, además de cárnico era como animal de tiro y cabestros. La mejora genética va encaminada a la multiplicación de esta raza en peligro de extinción y a la producción de carne de altísima calidad. Es un trabajo arduo que se va realizar con lentitud debido a los pocos efectivos con los que actualmente cuenta esta raza, aunque esperamos que este trabajo no se trunque y que el CENSYRA y los Veterinarios del Colegio Oficial de Cáceres no cejen en su empeño de recuperar una raza con un patrimonio genético tan importante como ésta.