Vo l u m e n 1 5 • F a s c í c u l o 6 3 • A b r i l 2 0 1 4 • issn 0329-43 07 Alberto C. Taquini y el 75º Aniversario del descubrimiento de la Angiotensina 70º aniversario de la fundación del Instituto de Investigaciones Cardiológicas Cardiología e hipertensión noticias del instituto de investigaciones cardiologicas “Prof. Dr. Alberto C. Taquini” • Facultad de Medicina • uba - conicet Director Científico Prof. Dr. José Milei Secretarios de redacción Dra. Matilde Otero-Losada Dr. Gustavo Risso Diseño Mariana Milei Dr. Jorge González Zuelgaray (bs. as.) Dra. Liliana Grinfeld (buenos aires) Dr. David Hearse (londres) Dr. Elías Hurtado Hoyo (buenos aires) Dr. Emilio Kuschnir (córdoba) Dr. Hideo Kusuoka (osaka) Dr. Jorge Jalil (sgo. de chile) Dr. Mario Lado (montevideo) Dr. Julio Lázzari (buenos aires) Dr. Jorge Lerman (buenos aires) Dr. Jaime Levenson (parís) Dr. José L. López Sendón (madrid) Dr. Mario F. C. Maranhão (curitiba) Dr. Mario Marzilli (pisa) Dr. Lionel Opie (cape town) Dr. Andrés Perez Riera (san pablo) Dr. Agustín Ramírez (buenos aires) Dr. William C. Roberts (houston) Dr. Ramiro Sánchez (buenos aires) Dr. Edgardo Schapachnik (buenos aires) Dra. Jutta Schapper (bad nauhein) Dr. Samuel Sclarovsky (israel) Prof. Emérito Dr. Roberto E. Sica. (bs. as.) Dr. Rubén Storino (la plata) Dr. Norberto Tavella (montevideo) Dr. Jorge Toblli (buenos aires) Dr. Manuel Vázquez Blanco (bs. as.) Dr. Alberto Villamil (buenos aires) Dr. Alberto Zanchetti (milano) Comité Editorial Dr. Giuseppe Ambrosio (perugia) Dr. Francisco Azzato (buenos aires) Dr. Adrián Baranchuk (ontario) Dr. Claudio Bellido (buenos aires) Dr. Horacio Carbajal (la plata) Dra. María Inés de Aguirre (bs. as.) Dr. Fernando De la Serna (tucumán) Dr. Horacio E. Cingolani (la plata) Dr. Raúl Domenech (sgo. de chile) Dr. Saúl Drajer (buenos aires) Dr. Marcelo Elizari (buenos aires) Dr. Miguel Falasco (bs. as.) Dr. Roberto Ferrari (ferrara) Dr. Ricardo J. Gelpi (buenos aires) Dr. Hernán Gómez Llambí (bs. as.) Auspiciado por: - Secretaría de Estado de Ciencia y Tecnología de la República Argentina - Consejo de Hipertensión Arterial (Sociedad Argentina de Cardiología) - Comité de Hipertensión Arterial (Federación Argentina de Cardiología) noticias del instituto de investigaciones cardiologicas “Prof. Dr. Alberto C. Taquini” • Facultad de Medicina • uba - conicet Director: Prof. Dr. José Milei Cardiología e hipertensión. noticias del instituto de investigaciones cardiologicas “Prof. Dr. Alberto C. Taquini” • Facultad de Medicina • uba - conicet. Editor: Prof. Dr. José Milei. Diseño y edición: dosvecesm. Publicación bimestral. Derechos reservados. No se permite la reproducción total o parcial del contenido sin autorización expresa y escrita del Editor. Marcelo T. de Alvear 2270 (C1122AAJ); Tel +54 +11 4508-3888/3836; Fax +54 +11 4508-3888. Ciudad de Buenos Aires; e-mail: [email protected] Cardiología e hipertensión noticias del instituto de investigaciones cardiologicas “Prof. Dr. Alberto C. Taquini” • Facultad de Medicina • uba - conicet Indice Página 2 Editorial Página 4 Arritmias en enfermedades sistémicas Página 13 Bigeminia Escape-Captura Página 16 Miguel Ángel y la Gota Página 17 Presentacion de Libro Página 19 Artículos Selectos Figura de tapa: Integrantes del grupo de investigadores argentinos cuya labor culminó con el descubrimiento de la angiotensina (año 1940). De izquierda a derecha, sentados: J. C. Fasciolo, J. M. Muñoz, B. A. Houssay y L. F. Leloir. De pie: A. C. Taquini y E. Braun Menéndez. Editorial El Instituto de Investigaciones Cardiológicas hoy El Instituto de Investigaciones Cardiológicas (ININCA) está unido a la figura de quien fuera, desde su fundación en el año 1944, director por más de 50 años: Alberto C. Taquini. Allí se desarrolló, y se desarrolla, investigación, docencia y asistencia. Se estudiaron desde el inicio, la hipertensión arterial, la hipoxia y las adaptaciones hemodinámicas, la fisiología del riñón y los electrolitos, la pared arterial, el metabolismo cardíaco, la farmacología del miocardio y el papel regulador del sistema nervioso central en la circulación. Asimismo, la figura de Taquini está indisolublemente unido al descubrimiento de la angiotensina (hipertensina) en el año1939. En efecto, el grupo magníficamente liderado por Houssay va más adelante en los tiempos y dejando atrás las célebres primeras investigaciones sobre la hipófisis, suprarrenales y el páncreas endócrino, se adentra en una etapa que comprende a los momentos que preceden y siguen a la Segunda Guerra Mundial, época de perseverancia, audacia y romanticismo, en el que el descubrimiento de la angiotensina constituyó el suceso mayor. 2 Este extraordinario logro debió haber merecido un Premio Nobel, mucho más si lo evaluamos con la perspectiva actual. Desde el mismo aspecto, podemos comprender la enorme trascendencia que ha tenido el descubrimiento en la comprensión de los mecanismos que llevan a la elevación de la presión arterial y en la influencia que ejerció al generar líneas de investigación que permitieron el hallazgo de medicamentos que logran un control adecuado de la hipertensión arterial. Siguiendo a De Bold, “...los políticos y legisladores argentinos debieran recordar que cuando toman sus medicaciones antihipertensivas, están ingiriendo el fruto de la investigación básica hecha por investigadores argentinos, quienes contra las adversidades se mantuvieron brillantes e hidalgos”. Además si tenemos en cuenta que actualmente existe en nuestro país un consumo anual de alrededor de 33 millones de envases conteniendo algún inhibidor o bloqueante de la angiotensina con ventas anuales por aproximadamente 2.169 millones de pesos, es decir unos 270 millones de dolares, podemos darnos cuenta de la importancia económica del descubrimiento. En este sentido, Taquini realizó investigación original y mantuvo activo el Instituto durante más de 5 décadas, con lo que esto representa: conseguir los medios económicos, investigadores dedicados y capaces, armonizar las relaciones interpersonales y superar todos los escollos de los vaivenes políticos que debió sufrir la Universidad de Buenos Aires, y sin perder el norte de una carrera dedicada a la ciencia. Desde 1972 el Instituto se asoció al CONICET constituyéndose en una de sus Unidades Ejecutoras y desde el año 2012 fue incorporado a la Red de Hospitales de la UBA. Forman parte del mismo, alrededor de 60 agentes entre investigadores de carrera del CONICET y de la UBA, becarios, miembros del personal de apoyo, médicos clínicos y especialistas y personal administrativo. Se publican alrededor de 25 trabajos en revistas de mediano y alto impacto por año y se asisten anualmente a casi 10.000 pacientes. Taquini expresó: “Muchas veces he repetido con cierto dejo de protesta que el tiempo paulatinamente debilita y silencia lo perecedero. Que ajeno a la comprensión primaria de los hombres, del científico, sólo queda en los anaqueles lo útil a los demás: la obra, valioso expediente al servicio de todos, legado vigoroso, sin dudas, pero frío e impersonal”. La obra, su “obra” sigue su ejemplo vivo y continúa su camino. Prof. Dr. José Milei Director del Instituto de Investigaciones Cardiológicas, “Prof. Dr. Alberto C. Taquini” (UBA-CONICET) 3 Arritmias en enfermedades sistémicas Dr. Gustavo Daniel Risso1 Dr. Francisco Azzato2 1 Becario. Instituto de Investigaciones Cardiológicas “Prof. Dr. Alberto C. Taquini”. UBA. CONICET 2 Prof. Titular de Medicina Interna. Hospital de Clínicas. Facultad de Medicina, UBA. Caso clínico: Paciente de 38 años, oriunda de Bolivia, sin antecedentes patológicos de relevancia, consultó al servicio de emergencias por presentar episodios de palpitaciones asociados a disnea de clase funcional IIIIV de 48hs de evolución. En el interrogatorio refirió comenzar con diarrea, pérdida de peso (10 kg) y debilidad generalizada hace aproximadamente 8 meses, agregándose palpitaciones aisladas y disnea en el último mes. Presentaba un ritmo menstrual regular hasta 3 meses previo a la consulta, con amenorrea desde entonces. En el examen físico se evidenció paciente ansiosa, adelgazada y taquicárdica. TA 150/80 mmHg, FC 160 lpm, FR 22 rpm, Sat O2 98% (aire ambiente), afebril. En la región del cuello se palpó tiroides con ambos lóbulos de tamaño aumentado, de superficie irregular, sin dolor a la palpación o adenomegalias (Figuras 1 y 2). Aparato cardiovascular: pulso irregular, R1 conservado con soplo sistólico 2-3/6 foco mitral, R2 conservado, yugulares 3/3 con colapso parcial inspiratorio, edemas 2/6 en miembros inferiores. 4 Aprato respiratorio: buena mecánica ventilatoria con crepitantes bibasales. El electrocardiograma mostró ritmo de fibrilación auricular de alta respuesta ventricular a 160 lpm (Figura 3). En la radiografía de tórax se observó: índice cardiotorácico adecuado con leve congestión hiliar a predominio derecho y signos de redistribución de flujo (Figura 4). Laboratorio: Hto 26% (VCM 84 fL) no%), Hb 8.4 g/dL, Plaq 148000/µL (no 148000 mm3) GB 3500/µL (íd correcc. plaquetas), Cr 0.4 mg/dL, urea 25 mg/ dL, TGO 41UI/L, TGP 53/dL. Tirotrofina (TSH) <0.05 µUI/mL (VN 0.4-4 µUI/mL). Triyodotironina (T3) 322 ng/dL (VN 70-170 ng/dL). Tiroxina(T4) 13.9 µg/dL (VN 4.5-12.5 µg/dL). Tiroxina libre (T4L) 2.2 ng/dL (VN 0.8-1.9 ng/dL). Se realizó ecocardiograma doppler (Figura 5) donde se observó función sistólica del ventrículo izquierdo conservada con leve dilatación de la aurícula izquierda (área 22 cm2). Figuras 1 y 2. Bocio difuso. Obsérvese la tumoración en la parte ántero-inferior del cuello compatible con bocio difuso. Figura 3. Fibrilación de alta respuesta ventricular. 5 Figura 4. Radiografía de tórax frente. Figura 5. Ecocardiograma Doppler. Vista apical de 4 cámaras. Se observa leve dilatación auricular izquierda. 6 Figura 6. Electrocardiograma posterior a la administración de 25 mg de atenolol. La vasodilatación es consecuencia de un efecto directo de la triyodotironina (T3) en las células del músculo liso vascular que promueve su relajación1 provocando disminución del volumen arterial efectivo. Ésto estimula la liberación de renina con activación del sistema renina-angiotensina-aldosterona (SRAA) resultando en incremento de la absorción renal de sodio y del volumen plasmático. Las hormonas tiroideas (HT) también estimulan la secreción de eritropoyetina. Los efectos combinados de estas dos acciones ocasionan incremento del volumen sanguíneo y la precarga, aumentando aún más el gasto cardíaco2,3 (Figura 7). La paciente presentó mejoría de los síntomas y fue dada de alta hospitalaria en tratamiento con propanolol 80 mg cada 8 hs, en plan de interconsulta con endocrinología para estudio y tratamiento de hipertiroidismo. Efectos cardiovasculares del Hipertiroidismo El hipertiroidismo tiene importantes efectos a nivel del músculo cardíaco, la circulación periférica y el sistema nervioso simpático. Ésto ocasiona cambios hemodinámicos como incremento de frecuencia cardíaca y de contractilidad miocárdica con aumento del gasto cardíaco (hasta x 2.5 veces), aumento de la presión sistólica y media en la arteria pulmonar, aumento de la relajación diastólica y mayor consumo miocárdico de oxígeno, con reducción de la presión diastólica y la resistencia vascular sistémica. Las acciones a nivel celular de las HT son mediadas por la unión de la T3 a receptores nucleares. Esta hormona se transporta dentro del cardiomiocito donde la unión del complejo T3-receptor al ADN regula la expresión de genes, especí- 8 ficamente los que regulan el ciclo del calcio4. Esta hormona también puede tener acciones no nucleares por mecanismos no bien conocidos5. Algunas de las acciones de la T3 en el corazón son similares a la estimulación beta adrenérgica6, demostrada por la capacidad de los beta bloqueantes para aliviar los síntomas del hipertiroidismo. Algunos de estos efectos podrían involucrar un incremento en la densidad de los receptores adrenérgicos, aumento en la expresión de la proteína estimulante de unión de nucleótidos de guanina (proteína G) y la reducción en la síntesis de isoformas cardíacas específicas de la subunidad catalítica de la adenilciclasa. No está claro si en los pacientes con hipertiroidismo está aumentada la sensibilidad a las catecolaminas, pero parece que los efectos de la T3 en el corazón podrían ocurrir independientemente de la estimulación de los receptores beta adrenérgicos7-9. Disminución de la resistencia vascular sistémica Incremento en la termogénesis tisular Disminución del volumen de llenado arterial efectivo Triyodotironina Incremento del Gasto Cardíaco Incremento de la reabsorción renal de sodio Incremento del inotropismo y cronotropismo cardíaco Incremento del volumen sanguíneo Figura 7. Efecto de las hormonas tiroideas en la hemodinamia cardiovascular. Extraído y modificado de Klein I, Ojamaa K. Thyroid hormone and the cardiovascular system. N Engl J Med 2001; 344:501. Figura 8: Sitios de acción de la triyodotironina (T3) en el miocardiocito. La T3 entra a la célula posiblemente por mecanismos de transporte específicos para luego unirse a receptores nucleares. El complejo se liga a Elementos Sensibles a Hormonas Tiroideas regulando la transcripción de genes de varios constituyentes celulares incluyendo los Ca+2 ATPasa y fosfolamba del retículo sarcoplásmico, miosina, receptores beta adrenérgicos, adenilciclasa, proteínas ligadoras de nucleótidos de guanina, intercambiados NA+/Ca2+, Na+/K+ ATP asa y canales de K+ activado por voltaje. Las acciones no nucleares de la T3 en los canales iónicos de sodio NA+, K+ y Ca++ son indicados en la membrana. Extraído y modificado de Klein I, Ojamaa K. Thyroid hormone and the cardiovascular system. N Engl J Med 2001; 344:501. 9 El hipertiroidismo incrementa la frecuencia cardíaca y la contractilidad con aumento del gasto cardíaco y la fracción de eyección ventricular izquierda. Estos cambios son probablemente el resultado de un aumento en la expresión del retículo sarcoplásmico dependiente de calcio de ATP, una disminución en la expresión de sus inhibidores (fosfolamba) y una disminución en la resistencia vascular sistémica8,9 (Figura 8). La administración de antagonistas del receptor beta adrenérgico disminuye la frecuencia cardíaca pero no modifica el rendimiento contráctil sistodiastólico9,10, confirmando así que las hormonas tiroideas actúan directamente en el músculo cardíaco11-13. Algunos de los signos y síntomas cardiovasculares del hipertiroidismo incluyen14: • Taquicardia: en reposo y exagerada durante el ejercicio. • Palpitaciones: debido a la taquicardia y al aumento de la contractilidad miocárdica. • Precordio hiperdinámico: secundario al aumento de la contractilidad. • Hipertensión sistólica con ensanchamiento de la presión de pulso15. • Disnea de esfuerzo: por debilidad de los músculos respiratorios más que por disfunción cardíaca. • Angina de pecho: ocurre más frecuentemente en mujeres con cambios isquémicos en el electrocardiograma. Es debido a vasoespasmo coronario y tienen buena respuesta al tratamiento con bloqueantes de los canales de calcio. • Aumento en el índice de masa ventricular izquierda con hipertrofia ventricular izquierda16,17. • Incremento en la irritabilidad ventricular, especialmente en pacientes tratados con amiodarona con historia previa de ectopia ventricular18. • Aumento en el metabolismo de la vitamina K que lleva a un incremento en la sensibilidad de la anticoagulación con warfarina19. • Incremento del riesgo para desarrollar fibrilación auricular (FA), insuficiencia cardíaca (ICC), hipertensión pulmonar y angor. Fibrilación auricular La fibrilación auricular (FA) es la arritmia cardíaca más frecuente en la práctica clínica, afecta 1-2% de la población constatándose un incremento en la incidencia y prevalencia en relación con la edad. Además de las alteraciones hemodinámicas que ocasiona, su principal complicación es la embolia arterial. Se sabe que la FA presenta un marcado aumento del riesgo de accidentes tromboembólicos arteriales (2 a 7 veces mayor que en los pacientes sin FA) y además se asocian a mayor morbimortalidad y recurrencia que en población general. En la mayoría de los casos, la FA se asocia con enfermedad cardiovascular (causas cardíacas) tales como: hipertensión arterial, enfermedad arterial coronaria, miocardiopatías y valvulopatías (principalmente estenosis e insuficiencia mitral), cirugía cardíaca, miocarditis o pericarditis. Las causas extracardíacas incluyen: ejercicio, consumo de alcohol u otras drogas, patologías pulmonares incluyendo tromboembolismo de pulmón, apnea obstructiva del sueño e hipertiroidismo20. Hipertiroidismo y Fibrilación auricular La taquicardia sinusal es la arritmia más común en pacientes con hipertiroidismo. Sin embargo la presencia de fibrilación auricular tiene mayor relevancia clínica y ocurre en el 5 a 15% de los pacientes con hipertiroidismo21,22-24. Las tasas de prevalencia más altas son obtenidas de estudios de pacientes de edad avanzada con presencia o sospecha de enfermedad cardíaca25,23. En un estudio se encontró que menos del 1% de los casos de fibrilación auricular de reciente inicio, tuvieron como causa al hipertiroidismo26. Por lo tanto aunque la concentración de tirotrofina sérica (TSH) debe medirse en todos los casos en que haya una FA de reciente diagnóstico, esta asociación es infrecuente en ausencia de síntomas y signos de hipertiroidismo26. No obstante hasta un 13% 10 de los pacientes con FA de causa no explicada tienen diagnóstico bioquímico de hipertiroidismo23. Las complicaciones de la FA en pacientes con hipertiroidismo incluyen la insuficiencia cardíaca (ICC) y el tromboembolismo. La ICC es más frecuente como consecuencia de la FA coexistente. Un estudio mostró que sólo el 6% de los pacientes con hipertiroidismo tenían ICC, la edad promedio fue de 66 años, 94% de ellos tenían FA coexistente y 47% presentaban disfunción sistólica del ventrículo izquierdo27. En otros casos es el resultado de una taquicardia sinusal marcada. Los signos y síntomas de ICC se resuelven cuando se normaliza la frecuencia ventricular, se retorna al ritmo sinusal y el paciente está eutiroideo6,7,27. En otro estudio, solamente 6% de 591 pacientes con hipertiroidismo presentaban ICC, la mitad de éstos tenía disfunción sistólica con fracción de eyección del ventrículo izquierdo <50% y 85% y tuvo resolución de la disfunción sistólica luego de lograr el eutiroidismo17. Se cree que la ICC en ausencia de enfermedad cardíaca subyacente o arritmia refleja algún grado de miocardiopatía, el cual desaparece cuando se trata el hipertiroidismo. No existe una clara correlación histopatológica de esta miocardiopatía y el tratamiento apunta principalmente al control de la frecuencia cardíaca con bloqueantes beta adrenérgicos7. La hipertensión pulmonar puede producir signos aislados de ICC derecha con aumento de la presión venosa central, ingurgitación yugular y congestión hepática28. El hipertiroidismo también se asocia con un aumento del péptido atrial natriurético en pacientes sin ICC29. El NT-proBNP (del inglés: N-terminal pro-brain natriuretic peptide) se correlacionó positivamente con el diámetro telediastólico del ventrículo izquierdo y el grosor del tabique interventricular y negativamente con la fracción de eyección del ventrículo izquierdo29. La anticoagulación en pacientes con hipertiiroidismo y FA es controver- sial, por lo tanto deberá individualizarse en cada paciente, valorando el riesgo de sangrado por el tratamiento anticoagulante vs el riesgo de embolización24. En un estudio retrospectivo de 610 pacientes con hipertiroidismo fue la edad, y no la presencia de FA, el principal factor de riesgo de embolias (30). En otro estudio de 11354 pacientes con hipertiroidismo, 288 de ellos tenían FA, de los cuales 6 presentaron embolias sistémicas. Cinco de los seis pacientes tenían más de 50 años cony FA de más de 6 meses de evolución y 4 de ellos presentaban ICC. En pacientes más jóvenes con hipertiroidismo y FA que no presentan otra enfermedad cardíaca, hipertensión o factores de riesgo independientes para embolización, el riesgo del tratamiento anticoagulante posiblemente sea mayor que el beneficio24. Contrariamente, en pacientes de edad avanzada con sospecha o diagnóstico de enfermedad cardíaca o que pre- senten FA crónica, se deberá comenzar con tratamiento anticoagulante. El tratamiento del hipertiroidismo frecuentemente se asocia con reversión a ritmo sinusal. En un estudio, se observó la reversión a ritmo sinusal en el 62% de 163 pacientes entre 8 a 10 semanas luego del retorno al estado de eutiroidismo31. En pacientes mayores, con o sin cardiopatía o FA de mayor duración, la tasa de reversión a ritmo sinusal fue menor21,25,31,32. En ausencia de reversión espontánea, la cardioversión eléctrica o farmacológica se deberá intentar cuando el paciente se encuentre eutiroideo. El hipertiroidismo subclínico se caracteriza por concentraciones bajas de TSH y concentraciones normales de HT y en personas mayores a 60 años se asoció con casi una triplicación del riesgo para desarrollar FA en un período de seguimiento de10 años. La FA se desarrolló en el 21% de los pacientes con concentraciones de TSH definidamente bajas (≤0.1 mU/l), en comparación con el 12% de los pacientes con concentraciones ligeramente bajas (0.2-0.4 µUI/ mL) y un 8% de los pacientes con concentraciones de TSH normales39. De acuerdo con estos resultados, se ha planteado si debería tratarse a los pacientes que presentan concentraciones séricas de TSH definitivamente bajas para prevenir la FA. El tratamiento podría consistir en drogas antitiroideas, yodo radioactivo o alternativamente antagonistas de los receptores beta adrenérgicos33. Los antagonistas de los receptores beta adrenérgicos disminuyen la frecuencia cardíaca y, en un número pequeño de pacientes con hipertiroidismo subclínico causado por la terapia con tiroxina, impiden el desarrollo de la FA34. Esta observación puede ser especialmente importante para los pacientes con cáncer de tiroides, en los que el tratamiento con tiroxina se utiliza deliberadamente para suprimir la secreción de Tirotrofina. Referencias 1.Klein I, Ojamaa K. Thyroid hormone and the hyperthyroidism. Endocrinologist 1994; 4:391. cardiovascular system. N Engl J Med 2001; 8. Klein I, Danzi S. Thyroid disease and the 344:501. heart. Circulation 2007; 116:1725. 2. 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Caso clínico Se analiza el electrocardiograma obtenido durante la internación de un varón de 63 años, hipertenso, diabético tipo II, ex-tabaquista, obeso y sedentario. Comenzó una semana previa a la consulta con angor en clase funcional II que progresó a la clase funcional IV. La cinecoronariografía mostró lesión severa de una rama pósteroventricular de la coronaria derecha, lesión severa segmentaria de la descendente anterior y lesión proximal del 100% en la circunfleja. Luego de una angioplastia primaria fallida en la circunfleja, fue derivado para cirugía de revascularización. A su ingreso, presentaba tos y expectoración y, como único dato positivo en el examen físico, se puede consignar la presencia de rales crepitantes en la base derecha. El ECG de ingreso mostraba ritmo sinusal con infradesnivel del segmento ST en las derivaciones de la cara inferior. En la RX de tórax se observaba cardiomegalia de grado I con un infiltrado de tipo alveolar en la base derecha. El laboratorio mostró 15.040 glóbulos blancos, 11g/dl de hemoglobina, 32% de hematocrito, glucemia de 172 mg/dl, troponina T ultrasensible de 1479 pg/ml (VN: <14) y CK-MB (masa) de 116 ng/ml (VN: 0,10-4,94). El ecocardiograma mostró dilatación auricular izquierda (área de 40 cm2), auricular derecha (32,5 cm2) y ventricular izquierda (con hipocinesia anterior basal y medial, acinesia lateral medial y fracción de eyección del 55%). Se observó además disfunción diastólica de grado II e insuficiencia tricuspídea leve con PSAP de 40mmHg. En su evolución presentó en dos ocasiones fibrilación auricular con alta respuesta ventricular, que respondió a la amiodarona endovenosa en una ocasión y requirió cardioversión eléctrica en la segunda oportunidad. Finalmente, fue sometido a cirugía de revascularización miocárdica en forma exitosa y sin complicaciones. En el ECG que nos ocupa se observa un ritmo bigeminado en el que un latido de escape de la unión es seguido por una captura sinusal. El ritmo sinusal (las ondas P se distinguen en la derivación V1) tiene un ciclo promedio de 1640 mseg, lo que constituye una frecuencia notablemente lenta. Luego de cada captura sinusal se observa en forma reproducible un latido de la unión AV con un intervalo de escape de 1000 mseg, ambos conducidos normalmente. Discusión La bigeminia escape-captura consiste en un ritmo bigeminado en el que un latido de escape es seguido 13 por un latido conducido. Es de infrecuente aparición ya que se requiere un ritmo de base bradicárdico y un ritmo de escape ligeramente más rápido. Esta entidad fue descrita en 1958 por Bradley y Marriott en un caso de bloqueo sinoauricular1. Siete años más tarde, Schamroth y Dubb publicaron casos de bigeminia escape-captura secundarios a bloqueo AV de segundo grado de tipo Wenckebach y a ecos auriculares2. En 1975, los mismos autores dieron a conocer un nuevo mecanismo a partir de extrasístoles auriculares bloqueadas3. El latido capturado puede originarse en el nodo sinusal, en la aurícula, en la unión AV o en los ventrículos. A su vez, el latido de escape puede provenir de la aurícula, de la unión AV o de un marcapasos ectópico. Se cumple en el presente trazado la condición establecida por Dubb y Schamroth3 hace casi medio siglo para la ocurrencia de bigeminia escape-captura: que la diferencia entre la duración de los ciclos sinusal y del foco de escape sea tal que el intervalo sinusal exceda la suma del intervalo de escape y de la refractariedad que sigue al latido de escape. En nuestro caso, la bigeminia ocurre en el contexto de una bradicardia sinusal de base. Transcurrido un lapso considerable desde la descripción original de este fenómeno, cabe destacar que la bigeminia escape-captura tiene interés electrofisiológico y, al igual que otros fenómenos (como la parasistolia, las arritmias ventriculofásicas y la bigeminia y trigeminia ocultas), no es suficientemente conocida por las nuevas generaciones de médicos. En el momento de su descripción solo se disponía de la electrocardiografía de superficie como método diagnóstico, por lo que estas especulaciones -posteriormente confirmadas en estudios experimentales- merecen genuina admiración hacia quienes elaboraron tan magistrales análisis. Referencias 1. Bradley SM, Marriott HLJ. Escape-capture bigeminy. Report of a case of A-V dissociation initiated by 2:1 S-A block with resulting bigeminal rhythm. Am J Cardiol 1958; 1:640-3. 2. Schamroth L, Dubb A. Escape-capture bigeminy. Mechanisms in S-A block, A-V block, and reversed reciprocal rhythm. Br Heart J 1965; 27:667-9. 3. Dubb A, Schamroth L. Escape-capture bigeminy caused by blocked atrial extrasystoles. Br Heart J 1975; 37-890-1. 14 Miguel Ángel y la Gota Dra. Susana Vila Jefa de Consultorio de Nutrición del Instituto de Investigaciones Cardiológicas “Prof. Dr. Alberto C. Taquini”. UBA. CONICET Se trata de un grupo heterogéneo de enfermedades que ofrece una serie de particularidades. Primero que nada la gota está casi prácticamente en extinción del punto de vista de la Reumatología. Pero es de gran importancia desde el punto de vista de la nutrición y de prevención. Justamente las medidas dietéticas son las que han impedido el desarrollo de las secuelas de la enfermedad, es decir: la artritis tofacea y la urolitiasis gotosa. Desde el punto de vista del conocimiento popular es una enfermedad mítica y mal conocida por el común de la gente en la actualidad. Sin embargo en la Historia de la Medicina, abundan las descripciones de la gota entre las que se encuentran las de Hipócrates, Galeno y Sydenhan. Este último, médico, la padeció y a él se debe una de las descripciones más completas de la enfermedad. Figura 1. Figura 2. Sófocles (dramaturgo griego) en una de sus tragedias, Philoctetes, éste sufre episodios recurrentes de dolor en uno de sus pies debido a la mordedura de una serpiente venenosa. Sin embargo, los críticos coinciden en que los episodios de dolor están tan bien descriptos que Sófocles, cuatro siglos antes de Cristo estaba describiendo su propia gota. Esta enfermedad fue llamada "La enfermedad de los Reyes" en los siglos XVI y XVIII, porque algunos consideraban que daba categoría social a los que la padecían, pues 16 era frecuente entre Reyes y cortesanos, debido a que los banquetes eran pantagruélicos en cuanto a la comida y la bebida. En la Historia de la Medicina abundan las descripciones de esta enfermedad. El Papa Julio II (el mismo que le encargó a Miguel Angel la pintura de la Capilla Sixtina) le pidió a Rafael para decorar su Biblioteca el fresco que se representa en la Figura 1. Se denominó la “Escuela de Atenas” y reúne a los filósofos griegos. En el centro del mismo aparece una persona de mediana edad, vestido de época, pensativa y recostada sobre un bloque de mármol que no es otro que Miguel Angel y en la Figura 2 se observa en detalle su rodilla derecha, con la presencia de varias formaciones, sin signos de inflamación, de aspecto duro, sugestivo de “tofos”. El mismo Miguel Angel en una de sus cartas reconoce haber sufrido de un episodio de anuria y de haber expulsado arenilla y fragmentos de piedras, por lo que existe acuerdo entre los historiadores en atribuírle a la gota las deformaciones pintadas por Rafael en el cuadro. Seguramente éste habitualmente despreciado por Miguel Ángel, quiso honrar la figura del genio, quizás para prestigiar el cuadro con su grandiosidad. Presentación de libro Alberto C. Taquini y el 75º Aniversario del descubrimiento de la Angiotensina Guillermo Jaim Etcheverry Ex Decano de la Facultad de Medicina, UBA Ex Rector de la Universidad de Buenos Aires La ciencia argentina registra algunas historias de éxito que le han asegurado una posición relevante en la consideración internacional. Tal vez una de las contribuciones más significativas de nuestros investigadores haya sido la identificación de la angiotensina hace ya 75 años. El grupo principal de científicos que participaron en ese descubrimiento estuvo integrado por Bernardo Houssay y Luis Federico Leloir, quienes más adelante recibirían el Premio Nobel, así como por Eduardo Braun Menéndez, Juan Carlos Fasciolo, Juan M. Muñoz y Alberto C. Taquini. Se abrió entonces un nuevo campo de estudio de la fisiología que culminaría varias décadas después con el diseño de fármacos destinados a modificar el funcionamiento del sistema renina-angiotensina cuya utilización ha alcanzado una escala global. Una vez más la saga de la angiotensina confirma el hecho de que estudios básicos impulsados por el interés en conocer el funcionamiento de la naturaleza terminan abriendo posibilidades hasta entonces impensadas para el tratamiento de enfermedades, en este caso, la hipertensión arterial. Entre quienes participaron en los estudios pioneros sobre el sistema renina-angiotensina se encuentra Alberto Taquini cuya destacada carrera científica se desarrolló fundamentalmente desde el actual “Instituto de Investigaciones Cardiológicas” (ININCA) de cuya fun- dación se cumplen 70 años. De allí la oportuna publicación de este volumen que conmemora ambos hechos, el hallazgo de la angiotensina y la creación del ININCA. En los distintos capítulos que lo integran se analiza el aporte de Taquini a la investigación en el campo de la hipertensión arterial y de la función cardiovascular, su tarea como médico clínico, su actuación como profesor universitario y su participación en la creación de organizaciones científicas tanto en el campo de la cardiología, la fisiología y la investigación clínica como en el ámbito de la gestión de la ciencia en la Argentina. De la lectura de estas páginas surge con claridad la trascendencia que Taquini ha tenido para el avance de la ciencia entre nosotros cuya importancia para el desarrollo del país planteó permanentemente a la sociedad. Su actuación como la de otras grandes figuras de su generación, fue decisiva para promover el desarrollo científico de la Argentina, tarea que no siempre resultó sencilla ya que el ambiente era muchas veces hostil para la labor de investigación. Fue gracias a la tenacidad y la persistencia de investigadores como Taquini que se pudieron echar los cimientos de las instituciones científicas con las que hoy contamos. En varios capítulos del libro se recogen pinceladas que permiten 17 que el lector reconstruya la imagen de la persona que habitaba el bronce. Quienes tuvimos el honor de conocerlo pudimos apreciar su agudeza intelectual, la profundidad de sus conocimientos, la sutileza de su incisivo humor. Taquini fue uno de los últimos exponentes de “gentleman criollo” y cada oportunidad de contacto con él era garantía de goce intelectual. En el libro se incluyen las palabras que pronunció en oportunidad de celebrarse los 30 años de la desaparición de Eduardo Braun Menéndez. En ese entonces me desempeñaba como decano de la Facultad de Medicina y me propuse recordar a Braun Menéndez que es, en mi opinión, una figura clave en la recuperación de la Universidad de Buenos Aires. Taquini acompañó con entusiasmo la idea y tuve el privilegio de que me relatara oralmente durante varios encuentros lo que luego expresó en ese acto recordatorio. Volver la mirada al pasado permite valorar en su auténtica dimensión el aporte de quienes fueron nuestros maestros y comprender la magnitud de nuestra deuda para con ellos. 18 De allí la importancia que adquiere la publicación de este volumen en oportunidad de dos circunstancias tan trascendentes como las recordadas. Hallazgo, persona y creación institucional merecen que detengamos un momento nuestras existencias, hoy demasiado aceleradas, para reflexionar sobre lo que fue posible hacer en la Argentina en circunstancias mucho más complejas que las actuales. Nos permite, además, apreciar la dimensión científica y humana de quienes, como el profesor Alberto Taquini, concretaron esos logros. Artículos selectos PRATO-ACS: rosuvastatina a dosis altas administrada precozmente para la prevención de la nefropatía inducida por contraste en el síndrome coronario agudo Estudio presentado por la Dra. Anna Toso (Milán, Italia) en el último ACC 2013, realizado en San Francisco, Estados Unidos, los días 9, 10 y 11 de Marzo. Antecedentes Los fármacos hipolipemiantes, con sus propiedades pleotrópicas (antioxidantes, antiinflamatorias y antitrombóticas), pueden tener un efecto nefroprotector al mejorar la función endotelial y reducir el estrés oxidativo. Sin embargo, no se conocen el tipo, la dosis, el momento de administración ni la población diana para su uso. El objetivo del estudio es determinar si la administración temprana de una dosis alta de la estatina hidrófila rosuvastatina, añadida a las medidas preventivas estándar (hidratación y N-acetilcisteína), ejerce efectos favorables contra la lesión renal aguda inducida por contraste (LRA-IC) en pacientes con síndrome coronario agudo sin elevación del segmento ST (SCASEST) no tratados anteriormente con estatinas y programados para tratamiento con una estrategia invasiva temprana. Métodos Entre julio de 2010 y agosto de 2012, se reclutó a todos los pacientes ingresados con SCASEST consecutivos y no tratados anteriormente con estatinas, para los que se programó tratamiento con estrategia invasiva temprana. Se incluyó a 543 pacientes, a los que se asignó aleatoriamente la administración de rosu- vastatina 40mg en dosis de carga y 20mg/día (n=271) o un tratamiento estándar (n=272) antes de aplicar la estrategia invasiva. Objetivo primario: incremento de la creatinina ≥ 0,5mg/dl o ≥ 25% en un plazo de 72h tras la exposición. Objetivos secundarios: LRA-IC definida por otros criterios, LRA-IC en subgrupos preespecificados y acontecimientos adversos clínicos a los 30 días. El tratamiento antiagregante plaquetario consistió en ácido acetilsalicílico (AAS) 300mg en dosis de carga y 100mg/día y clopidogrel 600mg en dosis de carga y 150mg/ día. Se administró hidratación por vía intravenosa con solución salina isotónica y N-acetilcisteína oral (2.400mg/día) antes y después del contraste. Se utilizó un medio de contraste isoosmolar dimérico no iónico, con inyector de potencia. Al alta, se mantuvo el tratamiento con clopidogrel 75mg/día y AAS 100mg/ día; en el grupo de rosuvastatina, se continuó con la administración de rosuvastatina 20mg/día, y en el grupo de control, con atorvastatina 40mg/día. valo de confianza del 95% [IC95%], 0,22-0,74; OR ajustada=0,38; IC95%, 0,20-0,71; número de pacientes que es necesario tratar [NNT]=12). Conclusiones En pacientes con SCASEST no tratados anteriormente con estatinas en los que se había programado el uso de una estrategia invasiva temprana, rosuvastatina en dosis altas al ingreso produce efectos preventivos adicionales frente a la LRA-IC (conjuntamente con hidratación y N-acetilcisteína) y se asocia a un mejor resultado clínico a corto plazo. Este estudio indica que se debe administrar estatinas en dosis altas antes de las técnicas angiográficas para reducir las complicaciones renales tras la administración de un medio de contraste. Resultados De los pacientes que cumplían todos los criterios, el grupo de rosuvastatina (n=252) presentó menos LRA-IC que los controles (n=252) (p=0,001; odds ratio [OR] bruta=0,41; inter- 19 Análisis comparativo de la actividad antioxidante del nebivolol en pacientes con insuficiencia cardíaca crónica, con o sin diabetes tipo 2 concomitante Belenkov iun, Privalova EV, Chekneva IS, Zheleznych EA, Khiazeva LV, Azizova OA, Aseĭchev AV, Baranova OA, Shvachko AG. Cardiología. 2011;51:5-10. La activación neurohormonal del sistema simpático-adrenal en pacientes con insuficiencia cardíaca crónica (ICC) e hiperglucemia contribuye al desarrollo del estrés oxidativo, uno de los mecanismos patogénicos más importantes de la disfunción endotelial. Propósito Estudiar el efecto del nebivolol con respecto a la modificación de los indicadores y parámetros clínicos y hemodinámicos del estrés oxidativo en pacientes con ICC con o sin diabetes mellitus tipo 2 (DM2) concomitante. Material El nebivolol fue utilizado como terapia compleja de la ICC en 82 pacientes, que padecen de NYHA clase I - III CHF (FE <50%) de etiología isquémica, con o sin DM2, la edad promedio fue de 63,2 + / - 8,2 años. Resultados Después de 8 meses de terapia se observó una mejoría significativa del estado clínico en ambos grupos, la tolerancia al ejercicio aumentó (reducción significativa de la clase funcional de la ICC en el grupo con DM2 de 2,5 + / - 0,58 a 2,125 + / - 0,71, p = 0.001 , y en el segundo grupo de 2,3 + / - 0,5 a 1,9 + / - 0,4, p = 0.01). También se observó en ambos grupos aumento de la resistencia oxidativa plasmática (reducción de la intensidad de destello rápido en la peroxidación lipídica h de 7 a 6 mm, p = 0.016, y de 8 a 6 mm, p = 0.03, respectivamente) y aumento de la protección antioxidante plasmática (aumento de grupos SH 154,19 a 182,4 mmol / 1, p = 0.00035, y 176 a 205, p = 0.004, respectivamente). Conclusión El nebivolol es un moderno modulador neurohormonal, que contribuye a reducir la evolución de los cambios oxidativos en pacientes con ICC e hiperglucemia. Estudio "LOTHAR": evaluación de la eficacia y la tolerabilidad de la combinación fija de amlodipina y losartán en el tratamiento de la hipertensión esencial Kohlmann O Jr, Oigman W, Mion D Jr, Rocha JC, Gomes MA, Salgado N, Feitosa GS, Dallaverde E, Ribeiro AB. Arq Bras Cardiol. 2006;86:39-51. Objetivo El estudio LOTHAR evaluó la eficacia a mediano y largo plazo (un año) de la eficacia, tolerabilidad y los efectos metabólicos de la combinación fija de amlodipina y losartán comparado con amlodipina o losartán solos. Métodos Estudio multicéntrico, randomizado, doble ciego y comparativo realizado con 198 pacientes en estadio 1 y 2 de hipertensión arterial esencial. Resultados La combinación fija tuvo mayor eficacia antihipertensiva mantenida a largo plazo, con muy bajo porcentaje de hipertensión arterial no controlada. Comparativamente, este porcentaje fue más bajo que el de los dos regímenes de monoterapia. A largo plazo, más del 60% de los pacientes tratados con la combinación fija se mantuvo con PAD <o = 85 mmHg y el efecto antihipertensivo, evaluado por MAPA, persistió durante 24 horas con una relación tasa pico de 76,7%. La frecuencia de eventos adversos fue bastante baja en este grupo y la incidencia de edemas de miembros inferiores a largo plazo fue aproximadamente cuatro veces menor que el obser- 20 vado con amlodipina sola. La combinación fija no cambió la glucemia ni el metabolismo de los lípidos a mediano o largo plazo. Conclusión Basado en estos resultados, la combinación de amlodipina y losartan es una excelente opción para el tratamiento de pacientes con hipertensión arterial.