La Salud de las Mujeres que son Víctimas de la Violencia de Género La violencia de género tiene genera graves consecuencias en la salud de las mujeres que la sufren; informes de la OMS aseguran que la violencia de género es la primera causa de perdida de años de vida saludable ( indicador AVAD) en las mujeres en el mundo. Por ello la intervención sobre la salud de la mujer es un elemento fundamental dentro del Plan de Actuación del Gobierno Andaluz para Avanzar en la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres, tanto en su vertiente de reducir los daños provocados por la violencia como en la prevención y en la detección precoz de la violencia que sufren. La Consejería de Salud se encarga de forma general de la Atención Sanitaria en los Centros asistenciales del Servicio Andaluz de Salud. Los organismos responsables son: 1 • Servicio Andaluz de Salud. • Dirección General de Asistencia Sanitaria. El personal profesional de Atención Sanitaria atiende a la población de Andalucía, con especial atención desde los Centros asistenciales a la prevención de la violencia de género, a la detección precoz, la atención y seguimiento de las personas que la sufran o la puedan sufrir. Para ello, se ha elaborado el Protocolo Andaluz para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género. Además, la Ley 13/2007, de 26 de noviembre, establece que la detección precoz de las situaciones de violencia de género será un objetivo en el ámbito de los servicios de salud, tanto públicos como privados. Recomendaciones sobre la salud → Recomendaciones generales a la víctima de violencia de género. La violencia de género repercute directamente en la salud de la mujer que la sufre en cualquiera de sus formas. Se considera la violencia física, la violencia psicológica, la violencia económica y la violencia sexual o abusos sexuales. Por ello, es muy importante que la mujer víctima de violencia de género pida ayuda. Y puede 2 hacerlo en los centros del sistema sanitario de Andalucía. En esta línea, se hacen las siguientes recomendaciones: • Acudir al Centro de Salud y confiar en la médica o médico de familia, para empezar cuanto antes el proceso de recuperación del estado de salud tanto físico como emocional de la mujer atendida. • Promover hábitos saludables que permitan la recuperación del estado de salud de la mujer. • La violencia de género, al darse de forma habitual en la convivencia, tiene una alta probabilidad de que se produzcan situaciones de riesgo; por ello se recomienda mantener el máximo nivel de alerta posible, desaconsejando el consumo de medicación que no haya sido prescrita por personal facultativo, ya que puede disminuir el estado de consciencia. → Consecuencias de la violencia de género en la salud de la mujer. La violencia de género puede producir efectos en todas las facetas de la salud de la mujer, como consecuencia de la agresión sufrida o de la situación de estrés permanente que suele sufrir la mujer víctima. Pueden ser: 3 • Consecuencias sobre la salud física ▸ Lesiones, que pueden revestir diversos grados de gravedad. ▸ Somatizaciones: molestias físicas recurrentes y mal definidas que no presentan patología orgánica, cefaleas crónicas, trastornos gastrointestinales inespecíficos, dolor precordial atípico, trastornos del sueño, alteraciones de la alimentación, cansancio y agotamiento, síntomas músculos esqueléticos, disnea, mareos. ▸ Enfermedades de transmisión sexual, sida, embarazo no deseado, problemas ginecológicos. ▸ Si la agresión se produce en una mujer embarazada, pueden existir consecuencias para el feto: aborto, parto prematuro, muerte fetal, lesiones en el feto o en el recién nacido. • Consecuencias para la salud mental. Se produce tanto por la violencia psíquica como por el impacto emocional que genera la violencia física, sobre todo si existe sensación de peligro. Comprende: ▸ Trastornos de ansiedad. 4 ▸ Trastornos depresivos. ▸ Trastornos por estrés postraumático complejo. ▸ Destrucción de la autoestima. ▸ Temores generalizados, pánico y fobias. ▸ Dependencia emocional muy fuerte hacia su maltratador. ▸ Ideaciones suicidas. ▸ Tristeza permanente. ▸ Diversas manifestaciones psicosomáticas... ▸ Conductas adictivas: consumo de psicofármacos, alcohol y otras drogas. ▸ Conductas compulsivas: alimenticias, limpieza, compras y juego. • Consecuencias para la salud social. La violencia de género puede originar sobre la mujer: ▸ Aislamiento amigas/os y familia. Interrupción de relaciones íntimas. ▸ Desconfianza. Temor y ansiedad al contacto. ▸ Desvalorización y/o dificultad para entablar relaciones sociales futuras. ▸ Evitación de actividades y de lugares. Ausencia de interés y no participación. 5 ▸ Disminución de habilidades sociales para comunicarse y de las habilidades para resolver conflictos cotidianos: inseguridad, conductas pasivas, condescendientes o ira. El Protocolo Andaluz para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género El Protocolo Andaluz para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género es el instrumento por el que se ofrecen orientaciones al personal sanitario para la atención integral —física, psicológica, emocional y social— a las mujeres que sufren violencia de género y que acuden a un centro sanitario. Es pionero en el estado y está propuesto como modelo para la aplicación en el conjunto del Sistema Nacional de Salud (SNS). Se ha elaborado siguiendo lo establecido por la Comisión contra la Violencia de Género del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), de la que forman parte representantes de todas las Comunidades Autónomas. Establece una pauta de actuación normalizada y homogénea para el Sistema Sanitario Público de Andalucía, tanto para la prevención, la detección y el diagnóstico precoz como para la valoración y actuación ante los casos detectados y el seguimiento de los mismos. 6 Se refiere a cualquier forma de violencia y malos tratos ejercida contra las mujeres mayores de 14 años, independientemente de quién sea el hombre agresor, aunque las actuaciones a las que se refiere están más centradas en la violencia ejercida por la pareja o expareja, por ser la forma de violencia más común en nuestro país. Aborda de forma particular el caso de las agresiones sexuales, puesto que la atención y actuación sanitaria es específica dadas las medidas e implicaciones médico-forenses y legales que conlleva. Además, cuenta con otros objetivos específicos: → Sensibilizar al personal de los servicios de salud sobre la gravedad de la violencia contra las mujeres como problema de salud. → Promover la capacitación de las mujeres que sufren maltrato para el reconocimiento de su situación y para la búsqueda de soluciones. → Contribuir desde el sector salud a la sensibilización de la población general sobre este problema. 7 Atención Sanitaria: recursos sociosanitarios en Andalucía La Dirección General de Violencia de Género trabaja de forma permanente en la puesta en marcha de medidas que permitan una detección precoz, atención y seguimiento de las intervenciones realizadas en el ámbito de la salud, así como la necesidad de reforzar la atención psicológica a las mujeres víctimas de la violencia de género para facilitarles su equilibrio emocional. La violencia de género comporta graves riesgos para la salud de las víctimas tanto a nivel físico como psicológico. El personal profesional sanitario desempeña un importante papel en la prevención, la detección y en el tratamiento de este grave problema de salud en el que es imprescindible su abordaje de forma integral y coordinada con profesionales de otras áreas e instituciones. La atención sanitaria frente a la violencia de género es aquella que se oferta a las mujeres, fundamentalmente a las que presentan signos o síntomas de sufrir malos tratos en el ámbito familiar y/o por parte de su pareja o ex pareja, con el objetivo de detectar situaciones de riesgo y contribuir a la erradicación de la violencia. Esta atención sanitaria garantiza el derecho de las mujeres víctimas de violencia de género a ser aten8 didas de forma inmediata, preservando la intimidad y confidencialidad de las actuaciones. La atención sanitaria se presta en tres niveles: 1. Atención de Urgencias 2. Atención Primaria 3. Atención Especializada El sistema sanitario andaluz incluye las Delegaciones Provinciales de Salud, los Distritos Sanitarios, las Áreas de Gestión Sanitaria, los Hospitales, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias y los Centros de Salud. → Atención Primaria. Los centros de Salud son el primer nivel asistencial, constituye la puerta de entrada al sistema sanitario. La Atención Primaria oferta una atención sanitaria fundamentalmente a mujeres que presentan signos o síntomas de sufrir malos tratos, con el objetivo de detectar situaciones de riesgo y contribuir a la erradicación de la violencia. El personal profesional de Atención Primaria se encuentra en una posición privilegiada para detectar posibles situaciones de violencia de género. El diagnóstico de una situación de maltrato se iniciará con la identificación de la posible existencia de los síntomas y señales. En 9 los casos de sospecha o en el que se aprecien signos y síntomas indicativos de malos tratos, se llevará a cabo una serie de actuaciones que conducirán a la identificación del posible caso. Una mujer maltratada puede acudir a los servicios de Atención Primaria por otro motivo (trastornos inespecíficos,, cefaleas, dolores musculares cambiantes...) ocultando su verdadero estado. En este sentido la labor de detección del maltrato en los casos en que no se presenta de forma evidente es fundamental en estos servicios. Para ello: • Se sigue por parte del personal sanitario el protocolo, plan de actuación, seguimiento y criterios de derivación. • Se informa a las mujeres sobre: ▸ El derecho a presentar denuncia. ▸ Existencia de centros específicos para la mujer donde puede ser informada, facilitando la llamada al Teléfono de Información a la Mujer (900 200 999). ▸ Posibilidad de derivación a la Unidad de Trabajo Social del Centro Sanitario, para la oportuna intervención. 10 • Se valora el estado de salud y las situaciones de riesgo de la paciente: Plan de seguridad. • Se registra en la Historia de Atención Primaria todas las actuaciones con la mujer. • Se cumplimenta el Parte judicial. El seguimiento de la mujer maltratada se realiza por personal socio-sanitario del equipo de Atención Primaria de forma individualizada, donde se evalúa el estado psíquico de la mujer. → Atención de Urgencias. Las mujeres que sufren violencia de género pueden acudir también a los servicios de urgencias. Estos servicios se encuentran ubicados tanto en el ámbito de Atención Primaria como Especializada (Urgencia Hospitalaria). Una mujer maltratada puede acudir a los servicios de urgencias dando explicaciones no reales para las causas de sus lesiones o solicitando ser tratada por otro motivo (crisis de ansiedad, trastorno de pánico…). En este sentido la labor de detección del maltrato en los casos en que no se presenta de forma evidente es fundamental en estos servicios. Los Centros de Salud atienden las urgencias reales que se produzcan en el Centro en horario de 11 apertura de 8:00 a 21:00 horas. A partir de esa hora y sábados, domingos y festivos, en poblaciones de más de 50.000 habitantes, están los Dispositivos de Cuidados Críticos y Urgencias (DCCU). Estos servicios se encuentran ubicados en Centros de Atención Primaria. En los servicios de urgencias es frecuente que las lesiones y síntomas de las pacientes sean más graves. Otro dispositivo extrahospitalario que forma parte de la respuesta a las urgencias y emergencias y que se activan en situaciones de alta gravedad, son los Equipos de Emergencia Terrestre 061. El personal facultativo de urgencia juega un papel fundamental en la identificación de la violencia de género. → Atención Especializada. Los Equipos de Salud Mental juegan un papel importante en la rehabilitación de la mujer maltratada. Esta puede llegar a este servicio derivadas de los Centros de Atención Primaria, urgencias u otros servicios sanitarios que la hayan atendido previamente. Una mujer maltratada puede acudir a los servicios de Salud Mental por otro motivo (ansiedad, cefaleas...) ocultando su verdadero estado. En este sentido la labor de detección del maltrato en estos servicios es fundamental. 12 El Parte Judicial El Servicio Andaluz de Salud utiliza desde 2009 un nuevo modelo de Parte Judicial, que sustituye el tradicional parte de lesiones, en el Sistema Sanitario Público Andaluz. El Parte Judicial es donde el personal de los servicios sanitarios recoge la información sobre su actuación, lo que facilita la actuación judicial posterior. En el nuevo modelo se ha incluido una cuarta copia del parte a las tres ya existentes con objeto de obtener una información más precisa acerca de la magnitud de la violencia y las características de las mujeres que la padecen, atendiendo a los indicadores comunes para la violencia de género en el Sistema Sanitario. Responde a las necesidades planteadas en el Protocolo Andaluz para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género. Está disponible en formato papel y en breve los y las profesionales de la sanidad también podrán cumplimentarlo a través de la Historia Clínica Digital. Los organismos que colaboran en la tramitación de los Partes son las Delegaciones Provinciales de Salud, los Distritos Sanitarios, las Áreas de Gestión Sanitaria, los Hospitales, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias y los Centros de Salud. 13 La Salud de las Mujeres en situación de vulnerabilidad En el artículo 33 de la Ley 13/2007, de 26 de noviembre, se indica que la Consejería de Salud debe considerar de forma especial la situación de las mujeres que puedan tener mayor riesgo de sufrir la violencia de género o mayores dificultades para acceder a los servicios previstos. Entre las mujeres consideradas, están las pertenecientes a minorías, las inmigrantes, las que se encuentran en situación de exclusión social, explotación sexual o las mujeres con discapacidad. Estas directrices afectan a todos los centros sanitarios autorizados en el ámbito de Andalucía. Así, la Administración de la Junta de Andalucía desarrolla instrumentos para prestarles la ayuda que necesitan a esas mujeres víctimas de violencia de género que se encuentran en situación de especial vulnerabilidad y que requieren una atención mayor y de carácter específico. → Las mujeres en las Unidades de Salud Mental Comunitarias. La atención sobre la Salud Mental de las mujeres que sufran o puedan sufrir la violencia de género se deriva de dos situaciones diferenciadas: 14 • Mujeres que sufren violencia de género: el ámbito sanitario debe prestar especial atención a la salud mental de las víctimas, como indica el artículo 34.1 de la Ley 13/2007, de 26 de noviembre. • Mujeres que son tratadas en las Unidades de Salud Mental: las mujeres que siguen tratamiento para su salud mental son un colectivo de especial vulnerabilidad ante la violencia de género, que debe ser tenido en cuenta por el equipo profesional que le hace el seguimiento, según el artículo 45 de la Ley 13/2007, de 26 de noviembre. Para dar una respuesta adecuada, se está elaborando el Protocolo de detección e intervención sobre violencia contra las mujeres para uso en las Unidades de Salud Mental Comunitarias (USMC). Existen grupos de discusión en los que han participado profesionales de dispositivos de Equipos de Salud Mental (Psiquiatría, Psicología, Enfermería y Trabajo Social) de toda Andalucía, así como Asociaciones de Mujeres y mujeres atendidas en estos equipos que habían sido Víctimas de Violencia de Género. → Derivación de mujeres con problemas de adicción. En la Administración de la Junta de 15 Andalucía se trabaja en la detección precoz de la violencia de género y la atención integral de las mujeres con problemas de adicción. Entidades que intervienen: • Consejería de Igualdad y Bienestar Social. ▸ Dirección General de Violencia de Género. ▸ Dirección General de Drogodependencias y Adicciones. ▸ Instituto Andaluz de la Mujer. • Consejería de Salud. • Servicios Sociales Comunitarios. Las mujeres atendidas en los centros de asistencia a personas que sufren drogodependencia o adicción tienen características específicas que requieren una sensibilización especial para detectar los casos de violencia de género y atenderlas para: ▸ Facilitar que la mujer se exprese sobre su situación. ▸ Orientar a la mujer y acompañarla. Si se detectan lesiones, la mujer es derivada al Centro de la red sanitaria correspondiente para realizar el parte judicial. Se hace un estrecho seguimiento del proceso y se adecuan las intervenciones de atención socio-sanitaria y de incorporación social. 16 En caso de que la mujer no vaya al centro sanitario, el personal facultativo de los centros de adicciones debe dar parte judicial de las lesiones observadas, como forma de ayudarla. → Las mujeres con discapacidad. El Plan de Acción Integral para Mujeres con Discapacidad en Andalucía 2008-2013 (PAIMDA 2008-2013) es sensible a la violencia de género sufrida por las mujeres con discapacidad. El objetivo es que las mujeres con discapacidad puedan acceder en igualdad de oportunidades a los derechos, bienes y recursos sociales, y que puedan gozar de una mayor autonomía en todos los ámbitos de su vida. Se parte del hecho de que las mujeres con discapacidad pueden ser también víctimas de la violencia de género, agravada por un déficit de autonomía. Para la prevención, detección precoz y atención de situaciones de violencia que se pueden estar perpetrando contra las mujeres con discapacidad, especialmente en el ámbito familiar: • Se desarrollan herramientas (protocolos, programas y guías). • Se da formación específica al personal profesional que las atiende, entre otros el sanitario, 17 promocionando la especialización en la red de profesionales y servicios para que ofrezcan un tratamiento adaptado a los casos de violencia de género en mujeres con discapacidad. • Se trabaja en la eliminación de las barreras en los centros y adaptación de los materiales necesarios para atender a las mujeres con discapacidad víctimas de violencia. Además, existe un servicio de interpretación para personas sordas, de forma que puedan ser atendidas correctamente en el servicio de atención sanitaria. Formación para la atención sanitaria En los planes y programas de salud, se incluye la formación del personal del Sistema Sanitario Público de Andalucía, para abordar de forma adecuada: — La detección precoz, la atención a la violencia de género en sus múltiples manifestaciones y sus efectos en la salud de las mujeres. — La rehabilitación de las mujeres y la atención a los grupos de mujeres con especiales dificultades. La formación se dirige prioritariamente a los servicios de atención primaria y de atención espe18 cializada con mayor relevancia para la salud de las mujeres. → Actividades Acreditadas de Formación Continuada de las Profesiones Sanitarias. → Formación en Violencia de Género dirigida a profesionales del Servicio Andaluz de Salud (SAS). → Formación específica en el ámbito sanitario, desarrollada para atender a mujeres en situación de especial vulnerabilidad ante la violencia de género. → Red Formma, Red Andaluza de Formación contra el Maltrato a las mujeres, para formación en el Sistema Sanitario Público Andaluz en materia de violencia de género. Investigación sobre la violencia de género La Consejería de Salud promueve la investigación sobre la violencia de género desde el ámbito sanitario. Además, desarrolla mecanismos de seguimiento específicos que permiten la elaboración de estadísticas y la evaluación de los efectos producidos por las situaciones de violencia de género. 19 Importancia de la formación y sensibilización desde la atención sanitaria La Consejería de Salud desarrolla el Programa de Acción Intersectorial Forma Joven en el ámbito educativo en colaboración con la Consejería de Educación, el Instituto Andaluz de la Mujer y el Instituto Andaluz de la Juventud. Se trata de una iniciativa destinada al alumnado de los Institutos de Enseñanza Secundaria (IES) de Andalucía. Mediante el desarrollo de talleres, se aborda, entre otros aspectos, la prevención de la violencia de género, a través de la coeducación y la educación en valores en el alumnado. Son actividades desarrolladas en los propios Institutos de Secundaria que lo solicitan, impartidas por personal sanitario en colaboración con el personal docente y mediadores y mediadoras juveniles. Recomendaciones específicas en caso de lesiones o de agresión o abuso sexual → Recomendaciones en caso de precisar atención médica. Si la mujer víctima de violencia de género precisa atención médica, lo mejor es que acuda a un Centro Sanitario u Hospital cercano. 20 Un examen médico es indispensable, pues quizás haya sufrido daños que hay que tratar. Es importante favorecer que la mujer hable, sin ocultar la verdadera causa o el origen de las lesiones. En su relato de los hechos no conviene callar nada, pues lo que se puede considerar insignificante constituye quizás elemento de prueba. El personal sanitario que le preste asistencia, tiene formación específica y sabrá ayudarle. Realizará un reconocimiento general a la mujer y un examen de las lesiones físicas, valorará su estado emocional y, en caso de que haya sufrido una agresión o un abuso sexual, llevará a cabo una exploración ginecológica. Además, junto con la Médica o Médico Forense, tomará muestras de sangre, exudado vaginal, saliva, etc., para ser analizadas. En los Centros Sanitarios existe un Protocolo, es decir, una serie de instrucciones por las que se regula la Asistencia Sanitaria a mujeres víctimas de agresiones sexuales, que garantizan una adecuada asistencia a las víctimas y facilitan la actuación de la Administración de Justicia. La mujer tiene derecho a la apertura de un expediente que contenga su historia clínica o a la inscripción de los nuevos datos en la historia ya 21 existente, donde quedará reflejada la valoración médica del impacto y del alcance de las lesiones y de los daños. El modelo de informe lleva incluido el oficio de remisión del mismo al Juzgado competente. Se facilitará a la mujer copia del parte médico que describa las lesiones sufridas, los análisis efectuados y el tratamiento aplicado. Es aconsejable fotografiar y fijar la fecha de las lesiones físicas antes de que desaparezcan, para facilitar la tarea de la justicia. La información recogida en el parte médico es muy importante para que los Tribunales de Justicia identifiquen el delito y la pena correspondiente. → Algunos consejos a considerar si se sufre agresión sexual • Si la mujer prefiere no ir sola al centro sanitario, puede pedirle a una persona de su confianza que le acompañe. • No debe lavarse ni cambiarse de ropa hasta después del reconocimiento médico. El agua haría desparecer con toda seguridad una gran cantidad de pruebas del delito. Con la agresión sexual, existe riesgo de embarazo y de contagio de enfermedad venérea. 22 • Aunque es imposible saber inmediatamente si la mujer está o no embarazada, el personal médico puede ofrecerle la administración de la píldora post-coital, que evita el embarazo y que se puede tomar hasta 72 horas después de la penetración. • Para prevenir el riesgo de contagio de enfermedad venérea se administrará a la mujer la medicación adecuada. No debe olvidar las revisiones médicas posteriores. → Efectos psicológicos de la agresión sexual. Los efectos psicológicos de la agresión sexual se conocen con el nombre de “Síndrome postraumático por agresión sexual”. En general suele presentar distintas fases: • Primera fase: el shock. Puede durar días o semanas. La mujer se siente aturdida y confusa. • Segunda fase: La mujer tratará de borrar lo ocurrido y no querrá hablar de la agresión. • Tercera fase: La mujer comenzará a admitir lo que ha pasado y los efectos profundos que le ha ocasionado. A partir de entonces le será menos difícil enfrentarse con los hechos. La duración y gravedad del trauma también va a depender en gran medida de la reacción de 23 familiares, amistades, personal sanitario, policía... En este momento es importante mostrar comprensión y brindar ayuda a la víctima. Prevención de la Mutilación Genital Femenina (MGF) → Qué es la MGF. La mutilación genital femenina, o ablación, es una tradición cultural no religiosa, vinculada a la etnia y no ligada a la posición social. Se practica en unos 40 países (28 africanos, los demás en Próximo Oriente y Asia), sobre todo por conformidad y presión social, en particular en zonas rurales, en los países de origen de las mujeres. Esta práctica se clasifica en cuatro tipologías, pero en todas ellas se trata en realizar cortes en el clítoris y/o labios vaginales de la mujer para que pierda la sensibilidad sexual. Sus consecuencias para la salud de la mujer son tan graves que incluso suponen su muerte. En el mejor de los casos, soportan dolores toda su vida, especialmente durante la penetración y el parto. Afecta cada vez más a los países europeos al crecer la población inmigrante, que quiere de esta manera mantener las tradiciones de su país 24 de origen para reforzar así su identidad cultural. La llevan a cabo en el territorio de su país de residencia o en el territorio de su país de origen (o países fronterizos) aprovechando las vacaciones. La mayoría de las razones para mantener la MGF vigente estriban en consideraciones de género y, por lo tanto, en construcciones sociales que atribuyen ciertos comportamientos y funciones a las mujeres (virginidad prematrimonial, fidelidad, belleza, etc.) y que son en realidad discriminatorias. La MGF no queda legitimada aunque se mejoren las condiciones higiénicas o aumente el número de profesionales sanitarios que la realizan. Como recuerda la UNICEF, “tratar de que la mutilación sea segura no la convierte en algo aceptable”. Se trata de un problema de salud que va más allá de la atención asistencial y judicial. Requiere un abordaje transcultural para evitar prácticas tradicionales que implican el trato discriminatorio, violento, degradante y doloroso hacia las mujeres, y que vulneran los derechos humanos al atentar íntimamente contra la identidad de las personas. → Detección de la MGF: qué hacer. La Junta de Andalucía, mediante el Decreto del 8 de noviem25 bre de 2005 sobre Respeto a la Diversidad, indica entre las funciones del personal sanitario andaluz “la obligación de proteger a las y los menores ante la sospecha o detección de casos de malos tratos, abusos y cualquier práctica cultural o tradicional que perjudique su integridad, con especial referencia a la mutilación genital femenina”, lo que refuerza la necesidad de que estos colectivos profesionales adquieran las habilidades y los conocimientos necesarios para poder luchar de forma eficaz contra esta lacra. Ante la detección de un caso de MGF, ya sea en el ámbito sanitario, social, policial o educativo, existe por parte de estos colectivos la obligación de ponerlo en comunicación judicial. Hay diferentes protocolos que recomiendan comunicarlo al Ministerio Fiscal a efectos de investigación y posterior adopción de medidas cautelares para la prevención. Los protocolos indican los factores o indicadores de riesgo contemplados para estos casos, y existen medidas cautelares en caso de sospecha o riesgo de que pueda ocurrir una MGF. → Sensibilización de profesionales en contacto con la MGF. Los ejes fundamentales de incidencia en los que Junta de Andalucía está trabajando en su afán por erradicar en Andalucía una práctica 26 que perjudica de manera tan grave e irreversible a tantos millones de mujeres en el mundo, son: • Elaboración de un mapa de riesgo específico para Andalucía. • Formación específica de los distintos profesionales que pueden verse implicados en el tema, incidiendo especialmente en las áreas de mayor riesgo. • Existencia de unas directrices claras sobre la conducta a seguir cada vez que se detecte a una niña en riesgo. El conocimiento de esta realidad permite establecer las líneas de intervención desde los Servicios Sociales de un modo más objetivo, tratando de responder a las necesidades de la población inmigrante y andaluza. La investigación ha sido fundamental para el establecimiento de la política social de inmigrantes de la Junta pues conocer la realidad, cuantitativa y cualitativamente, es el paso previo a cualquier intervención. El Gobierno Andaluz en su permanente sensibilización con esta problemática, considera de vital importancia la colaboración entre: • Personal profesional sanitario: matronas, profesionales de la ginecología, pediatría, medicina de familia, etc. 27 • Personas trabajadoras de otras disciplinas: profesionales de trabajo sociales, mediación intercultural, educación, legislación, pedagogía, servicios sociales de atención a menores y a la mujer, policía, asociaciones civiles, etc. Dicha colaboración supone mejorar la comunicación, el asesoramiento, el apoyo y el seguimiento de las familias y comunidades afectadas. Evita obstáculos y permite ser conscientes del importante papel del personal profesional sanitario en la detección y prevención de posibles mutilaciones y en el tratamiento de sus consecuencias. → Sensibilización social. La erradicación de la MGF depende en buena medida de la implicación de las mujeres de las sociedades donde se realiza, las cuales, a su vez, precisan de mucha colaboración en su lucha. Lograr la erradicación de la MGF es, por lo tanto, también una responsabilidad social. La OMS desarrolló el Proyecto Campaña de sensibilización y formación de la población andaluza sobre la Mutilación Genital Femenina destinada a la población andaluza en general y en personal profesional de forma concreta, especialmente aquellas personas en contacto con estos colectivos. 28 Lo más importante es el diálogo con las familias y la sensibilización y apoyo social a las mujeres que luchan contra esta práctica en sus propias comunidades. Además, la Junta de Andalucía promueve la igualdad de trato de la población inmigrante respecto a la española. Se trata de impulsar acciones encaminadas a fomentar actitudes sociales de solidaridad y tolerancia activa, a través de la realización de programas de sensibilización y difusión de material didáctico. El Parlamento Europeo ha aprobado una resolución que contempla crear una estrategia integral para erradicar la mutilación genital. Exige que “persigan, procesen y castiguen” penalmente a cualquier residente de la UE que haya realizado esta práctica, aunque el delito se haya cometido fuera de las fronteras comunitarias, e independientemente de que la mujer haya dado su consentimiento. También se está trabajando en la creación de un Protocolo sanitario común europeo de control y un banco de datos, útil para fines estadísticos y para campañas informativas dirigidas a comunidades afectadas. Igualmente, se estudia cuantificar a las mujeres que están en esta situación en la UE. 29 → La MGF está castigada por Ley en Andalucía. En España se ha modificado la legislación para tipificar la MGF como delito. El Código Penal califica la ablación como un delito de lesiones y la castiga con penas de 6 a 12 años de prisión e inhabilitación especial para el ejercicio de la patria potestad de entre 4 y 10 años. Igualmente, se castiga la conspiración y la proposición para cometer los delitos de lesiones en base al principio de universalidad de la justicia. Existe una obligación legal sobre el personal sanitario (facultativo y no facultativo), en su calidad de personal funcionario público, para que, en caso de que tenga conocimiento de estos hechos, los ponga inmediatamente en conocimiento del Ministerio Fiscal, Juez/a de Instrucción o funcionario/a de policía. Esta obligatoriedad se fundamenta en: • Art. 262 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, Ley 10/1992 de 30 Abril. • Art 355 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, Ley 10/1992, de 30 de Abril. • Art 16,1.a del Código de Ética y Deontología Médica. 30 Marco normativo → Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género (BOE núm. 313, de 29 de diciembre de 2004), artículos 1 sobre derechos de la mujer y artículo 15 de sensibilización y formación en el ámbito sanitario. → Ley 13/2007, de 26 de noviembre, de Medidas de Prevención y Protección Integral contra la Violencia de Género (BOJA núm. 247, de 18 de diciembre de 2007), artículo 1 sobre derechos de la mujer, entre otros la sanidad, artículo 33 sobre planes de salud y artículo 34 de atención sanitaria a las víctimas. → Real Decreto 1030/2006, de 15 de septiembre, por el que se establece la cartera de servicios comunes del Servicio Nacional de Salud (SNS). Incluye el procedimiento para la actualización del Protocolo para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género. → Decreto 3/2011, de 11 de enero, por el que se Crea y Regula el Modelo de parte al Juzgado de Guardia para la Comunicación de Asistencia Sanitaria por Lesiones. 31 ¿Dónde se puede obtener más información? → Teléfono de Información a la Mujer 900 200 999 → Dirección General de Violencia de Género Consejería para la Igualdad y Bienestar Social 955 048 176 http://www.juntadeandalucia.es/ igualdadybienestarsocial/export/ Violencia_Genero/HTML/index.html → Delegaciones de Igualdad y Bienestar Social → Servicio Andaluz de Salud (SAS) Consejería de Salud Distritos de Atención Primaria www.juntadeandalucia.es/ servicioandaluzdesalud → Salud Responde 902 505 060 [email protected] 32