Los preliminares de la paz. La repatriación de las tropas españolas.

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ADM]KIiTRA.ClÓIí: CALLE DE LA LIBERTAD. I I
y *n lai prinápale* libvHas de Madrid y jprovineioB
P a r ! » . — M M . Biyveaut et Chevillet, rúe de It j
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línea rn cuarta pinna.
Extranjeros y reclauíos, precios conveoclontle».
ParÍM.—Ag«ncía Jlavas, place de U Bonrse, 8, qtle ]
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APARTADO NÚM. 101
ÉLTIMOS TELEGRAMAS \ NOTICIAS DE LA TARDE
-j*~'^Tt=
Tienen para nuestro país capital itnportancla todos los puntos comprendidos en los preliminares
para la paz, conforme al texto, no oficial ni acaso
delínitlvo, que conocemos; pero entre aquéllos ninguno aparece tan complicado y oscuro ni de tanta
gravedad como el que se refiere á la,cesión permanente á los Estados Unidos de la ciudad y bahía de
Manila y á las obligaciones que los mismos pretenden imponernos respecto del régimen y gobierno de
los territorios que en el arcliipielago nos queden reservados.
Hemos de reconocer que en el estado actual, verdaderamente embrionario, del asunto no hay datos
suficientes, ni, sobre todo,fidedignossobre qué fundar el análisis; en particular, practicando nuestro
Gobierno un sistema de reserva y silencio llevado á
la exageración.
Sabemos, no obstante, por la prensa extranjera,
comenzando por la norteamericana, lo que basta para
juzgar de los sacrificios que la paz, muy necesaria, va
á costar á España; y particularmente, de las anomalías, oscuridades y peligros que entrañan las cláusulas de los preliminares referentes á Filipinas.
A diferencia de lo que ocurre con la evacuación ó
cesión de las Antillas, que si,ofrece dudas y requiere
aclaraciones es únicamente sobre casos concretos,
susceptibles de ser tratados aisladamente, tales como
la aceptación de la Deuda cubana, la apropiación ó
indemnización del material de guerra, etc., y que,
fuera de eso, no revisten ningiin aspecto internacional, por estar prejuzgadas y descontadas por las grandes potencias; ai tratarse de las Filipinas, ei aspecto
internacional es muy importante.
Las causas y los orígenes de la presente guerra no
hacían prever, ni remotamente, que los Estados Unidos rompiesen de tal modo con su historia diplomática, dejándose arrastrar por el espíritu de conquista,
que aspirasen á anexionarse de modo permanente la
parte central, la más rica y poblada de la isla de
Luzón.
Conformo á los citados preliminares, de los que
no tenemos todavía an texto auténtico, los Estados
Unidos asumen en la Oceania el carácter de libertadores de las razas indígenas, puesto que, suponiendo erróneamente que España las oprimía, afirman el
derecho que, á su juicio, les da la guerra, para intervenir en la solución del régimen y gobierno futuro de dichas colonias por la metrópoli.
'
Desconociendo el estado social de las Filipinas y
la historia de nuestro dominio en las mismas, no
pueden los Estados Unidos saber que dentro de las
leyes de Indias, el tagalo ó visayo era, realmente, el
ser más libre y más feliz de la tierra, mientras que las
limitaciones y las excepciones se guardaban para el
castüa. Falta base, por consiguiente, al pap^l de
«libertador» que los norteamericanos pretenden atribuirse; pero, de todos modos, ¿qué tiene qué ver
tal papel con ios motivos y orígenes de una guerra
emprendida ÚDícamentc, segiin los mensajes y proclamas del Presidente Mac-Kinley,¡para asegurar la
independencia de Cuba?
Las potencias marítimas de Europa no pueden
menos de mirar, y miran, en efecto, con gran desconfianza y con temor el que los Estados Unidos
aparezcan en el remoto Oriente,ial paso que bajo el
aspecto de conquistadores, bajo el de emancipadores de las razas indígenas, no preparadas ni con aptitud para darse Gobiernos estables, ni para vivir
pacíficamente.
Son de tal magnitud y trascendencia los problemas que en el gran archipiélago asiático, en la misma India británica y en el mar de la China suscita el
sorprendente y brusco cambio verificado en la política exterior y en la colonial de la Unión americana,
que las grandes potencias no podrán menos de intervenir en ellos, como ya se anuncia, y como la seguridad de sus propias colonias requiere.
De aquí el riesgo de complicaciones y dilaciones
antes de llegar España á la paz definitiva.
No le ofrece menor, si no para la paz al presente,
para la seguridad de la misma en lo futuro, el carácter de arbitros entre España y los insurrectos tagalos
que, conforme á los preliminares, anuncian los Estados Unidos. En esa calidad de arbitros, ó ejercienciendo un verdadero protectorado, nos impondrán el
deber de aplicar lo que llaman el pacto político de
Biacnabató, negado ha poco por el que se supone su
autor, juntamente con el de dar al archipiélago un
régimen autonómico, para el que allí se carece, en
absoluto, de elementos.
Que prosiguiendo nuestro país en el dominio de
las Filipinas ha de verificar en su gobierno y administración reformas transcendentales, aprovechando
las duras lecciones de la experiencia, es cosa que
está en la Península reconocida y descontada hace
mucho tiempo y que estaría ya planteada de no haber sobrevenido la guerra exterior. Pero una cosa
es que libremente y por motivos de orden interior y
de justicia em()renda España esas reformas, sin que
se excluya la de establecer, oyendo á los interesados, el derecho común para las Ordenes religiosas, y
otra cosa muy diversa será hacer de tales reformas,
muy dificiles, un compromiso internacional, vigilado y garantido por un Estado poderoso, cuya diplomacia se distingue por lo exigente y ruda, y cuyo
espíritu anexionista actual crea un problema internacional, inicia un nuevo estado de cosas en todo el
globo que asusta aun á las naciones que poco ó nada
tienen que ver con la guerra presente.
Por eso escribíamos ayer, y no nos cansaremos de
repetir, que la paz es necesaria á España, comenzando por el armisticio, que no debe diferiree; que será
un bien supremo, ante el que los sacrificios de amor
propio y de extensión territorial deben ceder; pero
que poco conseguiriamos, si, en el Tratado que se
firme, no evitásemos e« absolutoXos, motivos o pretextos de complicaciones y de futuros rozamientos
con los Estados Unidos.
Ya es mucho riesgo y eventualidad temible haber
de tenerlos por vecinos en el centro de la isla de
Luzón; pero ese riesgo de una nueva ruptura se
multiplicaría por veinte si, á más de tal peligrosa
vecindad, contrajésemos para coa esos atados la
obligación de hallar y de establecer en Filipinas un
régimen de gobierno perfecto, que no diese lugar á
ninguna queja de los naturales, ni á la menor insurrección.
Caminemos muy despacio y con mucho pulso y
reflexión en lo que á esa parte de los preliminares se
refiere, ya que, afortunadamente, el determinar la
sut-rte futura de las Filipinas admite plazos y no impide el armisticio ni el acuerdo de las dos naciones
acerca de los puntos que han de facilitar el restablecimiento de la paz.
£1 primer aaíTersarío de
la wm\& de Cáaovas.
Como y a dijimos, fueron muchos y m u y expresivos
los testimouioij da pésame que recibió ayer Itt seüora
duquesa de (%aovas del (^asiillo.
.%4"i»*¡> : ? . • • •
LA ePOGA
No se devuelven los originales.
FILIPINAS Y LA PAZ FOTORA
N^m. 17.305
Martes 9 te Agosto te 1898
A ñ o Xi
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MADRID.~ Un mee, 4 pesetas; trim«»tre, 1 2 ; íeme»tre, 2 3 ; nilo^ 4 6 .
FROVKCIAS.—IJn niei, 5 ptas.; trimestre, 1 2 , 5 0 :
semestre, 2 4 ; un año, 4 8 .
Unión poütal.—üuba. P u e r t o Rico y Plliolna8.—Lín mes, 7 pesetas; trimeütre, 2 0 ; semestre, 4 0 ;
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Portugal. Gibraltar y Marruecos, el mismo preci»
de provincias.
Número del di», 1 5 céntimos.—Atrasado, 2 5 .
La corresp indencla de Admrnistracióu á D . F r a n cisco H o r o n a t .
R e d a c c i ó n y A d m i n i s t r a c i ó n : L i b e r t a d , i6
^^^p II
La noMe señora fué por la mañana al convento de
las Sierras de María, y allí permaneció hasta última
hora d9 la tarde.
Los deudos y amigos del insigne político enviaron
á la tumba de éste algunas coronas y abundantísima
cantidad de ñores, muchas de las cuales procedían de
M6laga.
Blalealdede dicha capital andaluza ha dirigido &
la auquésti de Cánovas un sentidísimo mensaje de
pésame.
Todos los ministros dejaron sus tarjetas en la ^1ler•
ta. SI SI*. B a g f i ^ púmplió con este, deber personal.ÍQetite.
S,M. la Reina expresó de nuevo su sentimiento á
la duquesa de O&novas por la muerte de su ilustre
esposo.
Los bonos que repartió entre los pobres la noble
viuda del inolvidable estadista fueron muchos.
Bn Zaragoza y en Sevilla celebráronse solemnes funerales por el eterno descanso del alma de Cánovas.
Presidió la ceremonia en la capital de Aragón el ex>
ministro Sr. Castellano.
En uno y otro funeral hi^bo numerosísima concurreucla.
También se celebraron honras fúnebres en VólezM&laga.
La señora duquesa de Cánovas saldrá en breve para
Zaragoza, donde pasará unos días en casa del señor
Ca!«teUano.
Después irá á tomar unas aguas medicinales.
El Diario de Zaragoza, y la Monarquía, de Sevilla,
dedican su número de ayer lunes á ia memoria del
Sr. Cánovas del Castillo.
Ambos colegas publican el retrato del insigne estadista y varios interesantes artículos consagrados á
dicha coamemoraoión.
NEGOCIACIONES DE PAZ
L a n o t a espaAola.
Bl Embajador de Francia en Washington, M. Camben, recibió ayer la nota en que el Gobierno español
contesta k la norteamericana que contenía lai proposiciones de paz.
M. Cambon la entregó á M. Day, guardando absoluta reserva acerca del contenido.
Inmediatamente que llegó á manas de Mr. Mac-Kinley, éste llamó á los ministros de la Guerra y Marina,
MMrs. Alger y Long, los cuales conferenciaron largo
rato.
Después Mac-Kinley llamó & otro político inñuyoute.
Varios periódicos de Washington dicen que el Gobierno de Bspaña h a aceptado Tas condiciones de paz
propue($,ta^ por los Estados unidos y que la suspensión de hostilidades se firmará en breve.
Kl armiaticlo.—lia evaeaación d e C o b a .
Telegraflátí de Washington que Mr. Day y M. Gamboa conferenciaron ay§r largamente sobre U forma T
algunos detalles del protocolo de loJs preliminares de
la paz.
La cuestión dol armisticio no será incluida en este
primer protocolo, sino en el caso de que lo pida España.
Los periódicos americanos afirman que en las condiciones de paz propuestas por los americanos y aceptadas por Bspaña se consigna que la evacuación de
Cuba comience un mes después de firmados los preliminares de paz y terminará en el plazo de cuatro
meses.
Se autoriza á España para que recoja los cañones,
armas y municiones que actualmente hay en la Habana; pero no se permitirá la demolición de los
fuertes.
Li«B pIenipotenciari«a americanos.—LiOH
«JIngoea» y F i l i p i n a s .
Bl Presidente Mac-Kinley llamó ayer & Casa Blanca, para consultarle sobre la paz, al senador Mr. Foraker, á quien llaman en los Estados Unidos por el apodo de La campana de alarma á causa de su política
ruidosa y exaltada.
Se considera probable que Foraker sea uno de los
miembros de la comisión híspano-americana para tratar la paz, y es partidario encarnizado de la anexión
de Filipinas.
Se dice también que el presidente de dicha comisión
por parta de los americanos será el general Woodford, ex Embajador en Madrid, y miembro de la misma Mr. Olney, ex ministro de Negocios Extranjeros.
La extrema jingoe del Senado, capitaneada por Foraker, Thurston, Chandler, Davis y Morgan, está llevando acabo una activa campaña contra la soberanía
de Bspaña en Filipinas.
¿Protocolo?
Bl corresponsal del Times en Nueva York dice:
«Otra afirmación tiende á tranquilizar la opinión
pública, á saber: que se espera que las negociaciones
tomen tal forma, que eviten la necesidad de convocar
ahora una reunión extraordinaria del Senado.
Bl convenio en virtud del cual deben cesar las hostilidades no será u n Tratado, y por lo tanto no necesitará la ratificación d«l Senado.
Se hará un protocolo y no será necesario someter
nada al Senado hasta que los comisionados que h a n
de hacer el Tratado hayan terminado su trabajo en
París ó donde sea.
Bsto podía darse por sobreentendido, pero se deseaba que se pubiloara una declaración explícita á ese
efisoto^ se ha publicado.»
P r o c l a m a del g e n e r a l B l a n c o .
Telegrrafían de Washington á Bl Imparcial:
«Dorante la pasada noche se ha recibido un telegram a de la Habana que ha persuadido á los Incrédulos
de que la terminación de la guerra entre España y
los tfstados Unidos es un hecho.
Se tórma en el despacho que el capitán general de
Cuba h a publicado una proclama, en la cual dice que
el Gobierno de Bspaña se ha visto obligado á pedir la
paz ante la presión de las grandes potencias europeas.
Indica el general Blanco que los insurrectos cubanos no deben ser tratados en adelante como enemigos
por laa fuerzas españolas, y ofrece una amnistía general á los presos políticos.
Han sido puestos y a en libertad más de 150 cubanos
que estaban detenidos por sospechas de que habían
conspirado ó hecho armas contra España.»
KJn r u m o r .
LoNDHBS 8.—Algunos corresponsales particulares
han telegrafiado á Nueva York diciendo que el señor
Sagasta ha telegrafiado directamente á Washington
la aceptación de las condiciones de paz del Gobierno
americano. Aquí no se presta crédito á este rumor.
(Las noticias que no son oficiales deben ser
acogidas con reserva.)
"
•
i
I I — « . « — i ^ — I
II
El conflicto anglo-ruso en China.
Insisten los periódicos londinenses en que aumenta la posibilidad de un confiicto entre Rusia é Inglaterra, con motivo de la cuestión de jos ferrocariles
del Norte de China.
En esencia, íos orígenes en la disputa no pueden
ser más sencillos; se trata de la concesión de un feITocarril chino en el Norte del Imperio, sobre la cual
juegan ahora las dos influencias europeas que ejercen mayor presión sobre la corte de Pekín.
Sabido es que las potencias europeas han inaugurado en China un sistema de conquistas pacificas por
virtud de concesiones de lineasítín-oviarias. Los representantes de las citadas potencias reclaman incesantemente del Gobierno chinq concesiones de ese
género á favor de sus respectivos países, y protestan
de que se otorguen á los demás.
La China quiere prolongar hasta el puerto libre de
New-Chang, el más importante del golfo de LeaoYong, la línea de Tien-Sin á Chan-Hai-Wan. El director de la misma, M. Hue, se ha diri|:ido al Banco
inglés de Hong-Kong, comanditario de la sección ya
construida, pidiendo fondos para dar término á los
trabajos.
Dicho establecimiento baneario aceptó la petición
y acordó facilitar el capital necesario; mas cuando
el director Hue iba á firmar el contrato, se halló con
que el representante de Rusia en Pekín, M. Paulof,
se oponía á esa transacción, apoyada, por otra parte,
con todas sus fuerzas por el representante de la Gran
Bretaña, sir Claudio Mac-Donald.
Así las cosas, el 22 de Julio último lord Salisbury
informa al Gobierno chino que Inglaterra prestará
su apoyo al Imperio si trata de resistir la fjresion de
cualquier potencia que pretenda oponerse á las concesiones hechas en favor de otra.
En realidad, las palabras del primer ministro inglés no son sino una amenaza directa á Rusia, la
cual pretende tener perfecto derecho á proceder
como lo hace, pues alega le fué concedida la linca
de Ki-Rin á Port-Arthur y Ta-Líen-Wan bajo condición de que ninguna otra potencia, á excepción de
China, podría ser autorizada á construir una linea
concurrente en el mismo distrito. Claro es que el ferrocarril á New-Chang, aunque de propiedad china,
pertenecía de hecho á Inglaterra desde el momento
que se hacía en su totalidad con capitales ingleses y
bajo la inspección de ingenieros británicos.
Entretanto los periódicos conservadores ingleses
preguntan si locd Salisbury ha hecho promesas á
China con intención de mantenerlas, declarando que
en caso contrario Inglaterra quedaría humillada, sin
lograr impedir por eso la guerra con Rusia.
Hallándose esta naciónfirmementedecidida á sostener la protesta de su representante, como anuncian
los periódicos Novosti y Novoe Wremya, no es
aventurado vaticinar un rompimiento anglo-ruso si
las declaraciones de Salisbury se han de sostener al
pie de la letra.
Sin embargo, acaso tenga solución pacífica el conflicto, pues basta recordar que si bien Inglaterra
protesta enérgicamente contra toda intervención
ajena en regiones sobre las cuales tiene proyectos,
suele después inclinarse ante el hecho consumado;
política que conviene más que ninguna otra á una
nación eminentemente comercial é industrial y que
sólo puede conseguir talesfinescon la paz internacional.
(DB LA ACFBMOIA VABSA;
Heunión de industriales.
PALMA 8,—LOS industriales de esta capital han sido
convocados á una gran reunión, cuyo objeto principal es elevar una exposición al Gobierno pidiendo la
suspensión de los nuevos derechos de exportación y la
apertura de nuevos mercados extranjeros.
No se fundan grandes esperanzas en esta reunión,
dadas la inacción de nuestra Cámara de Comercio y
la indiferencia de las autoridades, censurada vivamente por la prensa periódica.
Los preliminares de la paz.
La entrevista que ayer celebró el señor duque de
Almodóvar con el Sr. Sagasta tuvo por objeto dar
cuenta al presidente de un telegrama del Sr. León y
Castillo, acusando recibo de la nota del Gobierno de
España, contestando á la del Gabinete de Washington sobre las negociaciones de la paz.
Como ya dijimos ayer, nada se sabe aún sobre la
fecha de la reunión de Cortes. Un ministro indicaba
que podrían reunirse á primeros de Septiembre, pero
nada hay seguro.
Sobre el nombramiento de delegados ó plenipotenciarios para tratar de la paz, dice la prensa ministerial que tampoco hay nada resuelto, pero se
eres que figurarán entre los de España el Sr. León y
Castillo y el Sr. Merry del Val. Algunos periódicos
citan al ministro de Estado, pero según nuestras
noticias, esto es inexacto.
Un colega indica que las conferenAs para la paz
se celebrarán en París, asistiendo cinco delegados
españoles y cinco norteamericanos. Uno de éstos será Mr. Woodford. También se cita á Mr. Olney, el
anterior secretario de Estado, y á los jurisconsultos
Sres. Edwards y Tracy.
La evacuación de Cuba y Puerto Rico no inspira,
al parecer, cuidados al Gobierno, que cree no ocurrirá incidente alguno en la Habana ni en la capital
de la pequeña Antilla. Donde so temen dificultades
es en la cuestión de Filipinas, y no sólo por lo que
pretendan los Estados Unidos, sino quizás por las aspiraciones que pudiera tener alguna ó algunas otras
potencias.
«Oficiosamente se habla—dice El Liberal—de que
al encuentro de mal disimuladas ambiciones, pueden
salir Alemania, Rusia y el Japón, ampliáudose do ese
modo el carácter internacional de la cuestión.»
Creemos que en esto hay un error, pues evidentemente se alude á Inglaterra,fy hay completo acuerdo
entre los Gabinetes de Londres y Tokio.
Otro punto oscuro es el de la deuda de Cuba.
Nada se sabe sobre esto, y por consiguiente, no pueden señalarse límitesuibasesdeliquidación. Creemos,
sin embargo, que lo que más habrá de discutirse
por los representantes de España será la deuda cubana anterior á la insurrección actual.
———ma-»^^.—————i-.
La repatriación
de las tropas españolas.
E l cAlicante.»
Anteayer llegó á Santiago de Cuba el vapor Alicante y ayer empezó el embarque de las tropas españolas.
IVo bay diflcultades.
No tienen n i n g ú n fundamento las noticias de procedencia americana, según las cuales habíanse presentado importantes dificultades para que la Compañía Trasatlántica española llevara á término su compromiso de repatriar á la Península las fuerzas del
ejército comprendidas en la capitulación de Santiago
de Cuba."
La Compañía Trasatlántica no ha recibido hasta la
fecha ningún aviso oficial de Washington que dificultara los preparativos hechos aportunamento para realizar el transporte de las citadas fuerzas.
Por su representante en los Estados Unidos tuvo colategrifilaa y carlistas.
nocimiento de los trabajos que realizaban varios arEl Siglo Futuro niega que el Sr. Nocedal haya sido
madores yaííAew á fln de conseguir la anulación del
llamado á consulta por el presidente del Consejo. La
contrato que, en virtud de concurso, firmaron el minoticia no es nuíva. pero merecsn consignarse los térnistro de Marina de la República americana y la Compañía española; pero esos trabajo» lleváronse á efecto
minos en que la da dicho periódico.
sin lograr el propósito que se porsiguía.
«Todavía hay clases—escribe;—y el Sr. Sagasta
El Gobierno americano, según los informes á que
puede llegar y llega hasta los carlistas, porque al fin
se hace referencia, no estimó procedente atendsr dey al cabo de ellos no los separa más que una cuestión
manda alguna, por lo cual no ha pedido la rescisión
de derecho y forma en que nosotros no entramos ni
del contrato.
salimos; pero de nosotros les separa el abisnio InsonLa Compañía Trasatlántica traerá, pues, á bordo de
dable de las doctrinas, en toda su integridad y con
sus buques todas las fuerzas que se encontraban bajo
toda su intransigencia.»
el mando del general Toral.
Añade El Siglo Futuro que el Sr. NDcedal es partidario de la guerra á todo trance.
Los transportes.
Respecto á los carlistas, parece que como durante la
Mañana
llegarán
á Santiago los tres primeros vapoausencia del marqués de Cerralbo y del Sr. Barrio y
res que salieron de Cádiz, y algunos días después los
Mier quedó encargado de la dirección del partido el
ocho restantes que zarparon del mismo punto y con
Sr. Sanz, le ha molestado á este señor que el presidenigual destino.
te del Consejo se dirigiera al Sr, Barrio y Mier y no
Desde luego, y conforme á lo estipulado en el coná él.
trato, las fuerzas que vienen á la Península quedarán
También parece que no hay conformidad de opiembarcadas del 10 al 20 del actual.
nión entre el Sr. Barrio y Mier, partidario de evacuar
Con estos informes quedarán desvanecidas las espela «onsulta, y el Sr. Sanz, partidario de abstenerse.
cies infundadas que vienen circulando á propósito de
El Correo Español lo demiente, pero la forma en que
la repatriación de los soldados españoles, que y a sólo
lo hace confirma la falta de armonía de los carlistas.
aguardan en Santiago á que lleguen los buques que
«El Sr. Barrio y Mier—dice—no envía por escrito al
han de devolverlos á sus hogares.
Sr. Sagasta ningún juicio sobre eita cuestión palpiM e d i d a s sanitariaN.
tante, y de esto tenemos absoluta seguridad, pues para
este caso el Sr. Sanz tenia y tiene la repreíeníación de
Dice El Tiempo:
los tradicionalistas.»
«La ley de Sanidad previene que los buques proceEs decir, que el Sr. Barrio y Mier no debe enviar al
dentes de las Antillas, puertos del golfo do Méjico y
Sr. Sagasta ningún juicio,'Jtc, puesto que á quien
otros puertos del Ecuador, sufran cuarentena de rigor
corresponde el asunto es al Sr. Sanz.
en los lazaretos sucios á la litigada á los puerto» de la
Pero, }j si lo envía?
Península, siempre que hayan salido do los expresados en los meses de Mayo á Septiembre.
Los generales Polavicja y IVeyler.
Pero con la repatriación de los soldados que capituBl Heraldo da la siguiente noticia misteriosa:
laron en Santiago de Cuba habría que tomar la mis«Aunque la prensa no ha dado importancia á las
ma precaución sanitaria, porque en los vapores que
visitas que ayer hicieron á la Reina los generales Pohan de conducirlos á España embarcarán enfermos
lavieja y Weyler, parece que la tienen.
de fiebre amarilla.
Uno y otro, lo tenemos por seguro, no habrán oculNunca se han cumplido en nuestros lazaretos, con
tado nada de su pensamiento á S. M., pues la deben
la minuciosidad que ta ley exige, IHS medidas sanitaEstas noticias son de origen «yankee» y nece- lealtad en todos sus actos.
rias prevenidas para los buque» quo llegan con accisitan confirmación oficia''.
Recordando palabras que hemos oído en días antedente á bordo, por deficiencias del material en unos
riores,
podemos
asegurar
que
en
a
l
g
u
n
a
de
esas
conde aquellos centros, por la carencia absoluta en otros
MJOM b a q a e s d e g n e r r a «apatt^le*.
ferencias se han dicho cosas de verdadero interés, que
y, en una palabra, por el descuido que en todo tiemEs probable que se llegue pronto á un acuerdo con
no habrán de traslucirse, por ahora al menos, pero
po se ha tenido con ese ramo de la Administración
los Estados unidos para ei regreso á la Península d e
que basta con que be hayan dicho.»
pública.
los buques conde de Venadiio, Marqué dt la Bmm<tEl único lazareto que se halla mejor acondicionado
da. Infanta Isabel. Nueva España, Terror, Vicem té^
es el de Mahón, que desde el año 1884 y con motivo
ñez Pinzón, Marti» Alonso Pinzón y demás buqués
del cólera que azotó á Francia en dicho año, se le meque prestan servicio en las Antillas.
joró el material; pero es el caso que precisamente á
(DI LA AQKNCnA'VAAaA.)
ose lazareto no va ninguno do los vapores que han de
transportar tropas de Cuba.
L a n o t a d e l ftoblerao eupaflol.
(BU. SBBVIOIO PAKTIOÜLAH DB «LA KPOOA»)
P*Bl8 8 ( 6 t a r d e ) . - ( E e c í b l d o e l 9 . ) - E l Sr. León y
Pero si, tratándose de un buque de pasaje, se obserL a catáfitrofe d e V l l l a m e d i a n a .
Castillo ha entregado eütá mañana al ministro de Nevan esas faltas, no hay que decir lo que ocurrirá con
PALBNOIA 9 (9,20 mañana).—El gobernador civil,
gocios Extranjeros la respuesta de Bspaña á los Estaesos trasportes que llevarán cada uno 1 000 ó 2.000
dos unidos, la cual ha sido inmediatamente telegrah mbresy llegando, con muy p icos días de diferencia
ante todas las autoridades, hizo ayer en Villamediafiada al Bmbsgador de Francia en Washington.
tres o cuatro de aquellos vapores.
na el reparto dé donativos del Sr. Gamazo.
WA»HINOTOJS8 (Vía cable Londres-Bimo).—(Reci, El peligro de la invasión de una epidemia, después
Se
han
dado
250
pesetas
á
Torquemada
y
2.250
á
bido con gran retraso.)-El Sr. Camban, Embajador
de la desdicha de la guerra, es por lo tanto inminenVlllamediana.
de Francia, recibió hoy á las dos y cuarenta de la tarte, y sobre ello llaoaamos la atención del Kaal Consejo
de la impuesta del Gobierno de Madrid i la n o t a d e
de Sanidad á fin de que, conociendo, como debe conoSe organizan los trabajos en este último punto, toMr. Mac-Kinley.
cer, los medios de que puede disponerse en los lazaremando parte los soldados de Isabel II á quien se les ha
tos de Santander y la Coruña, se adopten las precauComo el documento es bastante largroyen descifacilitado
albergue
con
objeto
de
que
pernocteu
en
diciones necaarias para evitar que detrás de una calafrarlo y traducirlo se empleará macho tiempo, es procho punto.
midad suframos otra tan terrible como lo es una epibable que hai^ta mañana no pueda ser entregado al
demia.
Gobierno i^mericano.
Se espera la llegada de los ingenieros militares.—C,
I ^ S C0ia'SX7LTAS
Despachos telegráficos.
Partida en Alcalá de Chisvert.
Bl t e l e g r a m a oflciai.
Anoche se dijo que la previa censura no consentiría
lajpublicación do noticias relativas á la aparición de
una partida armada en los campos de Alcalá de Chisvert, por cuya causa nos abstuvimos de insertar lo que
sabíamos sobre el particular. Estábamos equivocados,
pues varios periódicos pudieron publicar la noticia.
He aquí el tetegram«i que se facilitó á la prensa en
el ministerio de la Gobernación:
«8 Agosto.—klc^láe. de Alcalá de Chisvert telegrafía quo á las siete do la mañana de ayer, los veclnfia
de aquel pueblo Joaquín Daniel, Manuel Hort, Antonio Floch, Melquíades López, Avilio Bosch y dOs más.
cuyos nombren se desconocen, dieron el grito de ¡viva
laRispúblical en el caserío de Alcocebre, llevándose
cinco fusiles de los carabineros de aquel puesto y una
carabina de un guardia municipal.
Además obligaron á éste y á otros individuos á que
les siguieran, lo que hicieron hasta q ue les fué posible escapar y presentarse á las autoridades.
Ninguno de los sujetos citados es conocido como
carlista ni republicano de acción.
Otras referencias dicen que ia partida es de 20 hombres y que la persiguen, además de ia Guardia civil,
algunas fuerzas del ejército.»
Mota d e ampliación.
Esta madrugada so facilitó en el ministerio de la
Gobernación la siguiente nota:
«La partida de Alcalá de Chisvert salió capitaneada
por Joaquín Bort: sólo consta de nueve hombres, uno
de los cuales, conocido por el apodo del Rohero, se
presentó anoche en Alcocebre.
Al apoderarse de las armas de los carabineros dieron gritos de viva la República, no obstante ser todos
de ideas carlistas.
Se ignora la dirección que han podido tomar y el
paradero de uno de ellos, llamado Ismael (a) Merelo,
soldado regresado de Cuba que se hirió al cortar los
hilos del telégrafo.
Continúa la persecución por la Guardia civil.
IVoticias p a r t i c u l a r e s .
Telegrafían de Valencia que la partida se compone
de 25 hombres, los cuales desarmaron á u n sargento,
Uü cabo y cuatro carabineros del puesto de Alcocebre
y dos guardas de campo de Alcalá de Chisvert,
marchando luego en dirección de Vinaroz y San
Mateo.
La vía férrea, la línea telegráfica y la telefónica interurbana fueron cortíidas por los sediciosos entre Torreblanca y Alcalá.
, Las comunicaciones fueron restablecidas á los pocos momentos.
Por un carretero llegado de Torreblanca á Castellón
se sabe que uno de los sublevados, hermano del jefe
de la partida, está herido.
Al cortar los postes del telégrafo se le cayó el hacha, seccionándole dos dedos de un pie.
Al carretero por que se saben estos detalles, y que
entonces pasaba por un sitio cercano, se le obligó &
que condujera al herido á una masía, donde le dejaron.
El conductor del carro, u n a vez libre, encontró en
su camino á una pareja de la Guardia civil, & la que
contó el hecho, tomando los individuos da'la benemérita las señas del lugar en que quedaba el herido y
otros detalles.
C a r á c t e r de la p a r t i d a .
Los carlistas protestan de la aparición de la partida, negando que los individuos que la forman isean
tradicionalistas.
El periódico Bl Clamor, de Castellón, órgano de
los republicanos, protesta con gran energía de la supuesta intervención de su partido en este movimiento.
Niega que éste tenga carácter republicano, afirmando que es carlista.
L a persecaclón.
La Guardia civil de la provincia de Castellón se ha
internado en los montes de Alcalá de Chisvert para
perseguir á los sediciosos.
De Valencia ha salido un escuadrón del regimiento
de Sesma, y de Castellón una compañía de Infantería
de Otumba.
Estas fuorias, unidas á las de la Guardia civil, forman varias columnas.
Los carabineros sorprendidos en Alcocebre que han
llegado á Castellón dicen que cuando se prasenttvron
los sediciosos estaban aquellos en la iglesia del pueblo
oyendo misa.
Illsolaelón d e ia p a r t i d a .
(TELEGRAMA OFICIAL)
CASTELLÓN 8 (8 noche).—No hay rastro ni noticia alg u n a de la partida de Alcalá de Chisvert, lo cual hace
suponer que se haya disuelto.
*
• «
El Gobierno no concede importancia alguna á esta
partida.
La opinión en ei extranjero.
C o m e n t a r l o s de «Le T e m p s . »
Dice el citado periódico quo en la actual guerra
hispano-americana todo ha presentado un carácter
extraño, terminando con una verdadera sorpresa.
«El Gabinete Sagasta-dice,—que tuvo por conveniente no consultar á nadie antes de afrontar los peligros de una lucha desigual, siente la imperiosa necesidad de pedir consejo á todo el inundo y do compartir las responsabilidades con un tercero, cuando
llega el momento de restablecer la paz.»
No menos extraño es &l pronunciamiento sanitario
del ejército de Shafter. Los gtinerales americanos han
adoptudo t)l acuerdo de dirigir á su Gobierno una esp^icia do iotiiuación pidiendo s« repatríe inmediatatamente el ejército de Santiago, para queno s u c u m b a
víctima de la fiebre amarilla.
Por muy fundada que pueda sor osa petición, no
nos parece que ae halla en armonía con ia conducta
de un soldado ante el enemigo.
La historia, que muchas voces ha registrado en sus
páginas el aniquilamiento do numerosos ejércitos por
efecto de enfermedades, cuyos progresos era imposible atajar ó provenir, no ofnicorá oiro caso de deliberaciones sostenidas hujo las armas y de un plebiscito
higiénico en pleno campo do batalla.
CUBA
«Vnnkccs» q u e vnclwen.
Un barco transporto, con 550 soldados, zarpó anteayer de Santiago para Nueva York.
Tres transportes han salido ayer y hoy saldrán
otros dos.
, '
L o s enfermas.
La comunicación del estado sanitario del ejército
americano en Santiago de Cuba acusa 3.(i81 enfermos, de los cuales 2.C3H padecen el vómito.
Añádese que las tres cuartas partes de estos enfermos, cuya gravedad es evidente, adquirieron el mal á
consecuencia de las terribles fatigas de las tres primeras semaniis d'i campaña, con un tiempo horroroso
y una alimentación invariable, compuesta exclusivamente de carne, pan y café.
Calixto Cíarcía y Shafter.
El Warli publica un cablegrama de Santiago de
Cuba en el cual se dice que Calixto García, con 1.200
insurrectos á sus (ird'^rio.-í. so ha nagado á aceptar los
víveres que le suministraban los norteamericanos.
ií
LiA £EPOCA. Martes 9 de Agosto de 1096
El cabecilln, con sus partidarios-añade el despaCbo,—ha abandonado la provincia de Santiago para
ir & reunirse con M&xiino Oóiliez.
Su intención es continuar la guerra, aunque se
proclame el armisticio.
Los insurrectos de Calixto Clarcfa elevarán al Congreso americano una protesta contra tihafter por haberse nflgado k entregar á los cubanos la administración local de Cuba,
C'rnccroH ñ not«.
La Compañía de salvamento marítimo Chapman,
encargada do poner á (lito el crucero español María
Ttresa, asegura que este buque podrá ser utilizado
como barco de guerra, siempre que so hagan en él
grandes reparaciones.
En el mismo caso se encuentra el Cristóbal Coldn.
Cuanto al Vizcaya y el Oquendo, según los expertos
de la Compañía mencionada, forman una masa informe de tablones y hierros retorcidos, y no será posible extraerlos.
I.a anexión.
La Nm York Trihune declara que el grito de «Cuba
para los cubanos» es hoy completamente ilusorio.
«Los insurrectos no han tenido nunca—dice—ni un
gobierno civil que merezca el nombre de tal, ni fuer-zas militares que representen nada apreciable.
Los americanos—añade—ocuparán la isla hasta su
completa pacificación.
El artículo de La Irihuna termina diciendo que
cuando el Presidente Mac-Kinley adquirió voluntariamente el compromiso de obtener la independencia cubana, lo hizo en la creencia de que la isla de Cuba tenía una existencia civil.
Si ahora—concluye—resultan falsas las bases en
que fundó su compromiso, ;.pu6de lógicamente pedírsele su cumplimiento:*
Opiniones análogas se imprimen en toda la prensa
newyorkina, y especialmente en la qun pasa por recibir inspiraciones de los amigos del Gobierno y del
Presidente.
U n a c a r t a del e a p i t á n Sf a h a n .
El capitán Mahan, miembro del comité naval estratégico do los Estados Unidos, y gran autoridad técnica, lia escrito una carta al Stin sobre el combate naval de Santiago.
En ella dice que Sampson aseguró la victoria vigilando estrechamente durante la noche la salida del
ÍJuerto
De este modo obligó á Cervora á que hiciese la tentativa de escapar durante el día, porque así sus barcos tenían más probabilidades de romper el bloqueo,
por estar de día los buques americanos á alguna mayor distancia de la salida del canal.
< «piraórito dice el capitán M a h a n - d e obligar al
enemigo á combatir en condiciones desventajosas pertenece á Sampson, y éste fué el punto decisivo de la
Victoria.»
CRÓNICAS
BRETES
M. el cochero.
Vamos, señores cocheros, un buen arranque, ó un
«buen movimiento,» como diría un traductor de folletines. (A los .nmones madrileños me dirijo.)
Los ftacres de París han rebajado su tarifa, y en la
ciudad del Sena la.«( carreras de coche cuestan sesenta
céntimos en lujarar de un franco cincuenta córitimos
sin contar la propina.
'
Por sesenta céntimos nada más se puede ir hoy en
Fifís desde la callo Drouot á la Magdalena. Que es
una carrera más líirga que la de muclios estudiantes
provmcianosde Madrid, cuyas carreras no s< ncaban
nunca.
No hay que decir si el público de París estará cont(into con la innovíición.
Pues t)i0n; lo que es más raro, aún están más contentos los cocheros. Con las nuevas tarifas están ganando un dineral. Y París dentro de poco tendrá un
gran parecido con Manila antes de la guerra: todo el
mundo irá en coche.
Bl que los cocheros estén contentos es la mejor garantía para la estabilidad de las nuevas tai ifas SI
el público hubiese sido el único satisfecho, la reforma
duraría m u y poco.
Pero lá qué se debe esta magnánima concesión de
los cocheros parisiensosV ¡Ah! no ha sido tan esoontánea como pareco.
La arrolladora competencia de bicicletas, pelroletas
y coches automóviles ha sido la causa determinante
de la rebaja.
Porque es inverosímil el desarrollo alcanzado en
Parfs para tales medios de transporté.
Las primeras bicicletas fueron miradas como un iuguete; cuando llegaron á 100, como una curiosidadai pasar de 1.000 se empezó á advertir que el aspecto
de la población cambiaba por comideto Hoy los ci
distas constituyen allí una verdadera legión. Además, atropellan á los transeúntes como los atropellan
los cocheros.
Son, pues, un medio de locomoción como otro cual
quiera.
Una cosa m u y semejante ha ocurrido con los carruajes automóviles.
Los primeros fueron recibidos con prevención
Hoy son innumerables los que, de todas clases v
sistemas, circulan por las calles de París.
Se ha realizado, pues, la profecía do Hamos Carrión
y de Carlos Cootlo en su famosa zarzuela El siglo me
viene.
'
Y en cuanto á la velocidad que se obtiene con el
napvo sistema de coches sin caballos, camino llevamos do que se realice también aquella gasconada que
se cantaba, no hace mucho, en un teatHllo de París:
«tan rápida será la carrera que los vinjeros llegarán á
su destino la víspnra del día de su partida.»
Todo esto, y el anuncio de que una sociedad extranjera trataba d) poner en circulación unos automóviles de alquiler, han producido la rebuja de las tarifas
de los ñacres.
VentDjas <lf< la competencia.
Además, y esto es muy importante, los Cüchoros
franceses, deseosos de ganarse de nuevo las simpatías
del público, están ahora amablcw y complaciuutes co'mo nunca.
Con la sonrisa en los Iwbios acogen siempre á los
viajeros, sin que nunca les conttísten, al propovierle.s
una carrera larga, con Hquellüs palabras que tantas
veces hemos oído los madrileños:
—Ahora no puedo. Voy A relevar.
Ka una palabrü, el püOljco parisiense, por la fuerza do las circunstancias, b;,i l('j,'rado ii)ipon.;r la ley á
los cocheros.
La fusta siííue reinando, ns vordufi, pero ol público
está ya ilel lud', dei mango.
S. M. el cochero, sintiéndose vacilar en su trono, h,i
tenido que pactar con sus subditos.
Por algo se empieza.
Ahora lo que i'sdr» ile.seares que nuestros co^ih ^ros
madrileños, virtiKlo pelar las hurhas leí vecino, ñongan en remnjo las yuyüs.
Y si no bMJhU .'<U3 tíiVilas, y\m bajen sus humos, cuando menos.
^ Si así lo liHcerj, niorecíráu nuestros aplausos entusiastas y podrán cantur con sobrado motiví- aqueila
frase que en su revisti Los cuatro sacristanes puso Ricardo Vega á ia música do la Marsellesa:
¡Lograremos hHC'Toos simpáticor!,
como ya lo han logrado en l'arÍ!:!
R C.
El patriotismo de los enlistas.
Muy oportuno es el recuerdo que liace El Dia en
los siguientes pái'i'íifos:
«La 'JorrespMulence Polilique. ¡nternaiionale daba
cuenta, allá porol mhs de Aórll último, de unn inter
view que su corresponsal había calebrado con 1). Carlos, en la cual le había dicho;
«El día f)ue suene el primer caiionazo entre España
y los Eataúiis Unidos, estoy dispuesto á dar la prueba material liel patriotismo que inspira todos mis
actos.»
Alguien—nosotros no—esper(> esta prueba de patriotismo, que no pareció por ninguna parte.
Hubo quien llegó hasta el absurdo en su» suposiciones, pensando que al romperse las hostilidades,don
Carlos presentaría al (robierno el contingente de sus
batallones para que los destinase donde (¡reyera útiles
sus servicios. Quién daba por hecho que 1). Alfonso
de Borbón, al frente de numerosos partidarios y por
orden expresado su hermano, invadiría el territorio
' de Texas por la frontera mejicana ó desembarcaría en
la costa del Norte, poniendo en aprieto á nuestros enemigos. Quién, por Un, que ios fondos recaudados entre los legitimistas europeos vendrían á sumarse á la
suscripción nacional en vez de ir á depositarse en las
cajas de las fábricas de armas'del extranjero.
Todo esto y mucho más se dijo y se pensó; todo se
ha convertido en farsa inicua, en lo que necesariamente había de ser tratándose de este partido.
D. Carlos mismo lo ha dicho por boca de Melgar:
sólo espera que se tlrme la paz para aifrastrarnos á una
nueva guerra civil. Este es su patriotismo, esa la
prueba inequívoca de su amor á España que un día
nos anunció desde las columnas de La Correspondance.»
F u e r t e Bloc.
ü o U c i a dudfttia. —Atiiqne á S a n J o a n .
Telegrafían de Ponce con fecha 7 que por la mañana empezó el avance general de las tropas americanas del ala derecha, mandadas por el general Brooke,
que marcha desde Ouayama hacia el Norte con 1.000
hombres.
De Nueva York telegrafían con fecha 8 que el día 7
empezó el ataque general á San Juan de Puerto Rico
por cuatro columnas que se dirigieron contra el fuerte de San Antonio.
El/oMraizi de Nueva York dice que ayer no se había confirmado el rumor del ataque á San Juan.
L.08 b a n q u e r o s «yankeet.»
Los banqueros que componen el sindicato americano formado para explotar y obtener concesiones territoriales en Puerto Rico han salido de Nueva York
para Ponce.
nfegativa del g e n e r a l iMile*.
Dice el Journal des Debates que el general Miles ha
rehusado el concurso de la Junta separatista portorriqueña, que le ofrecía organizar guerrillas auxUiaifés del ejército americano.
El citado general ha basado su negativa en querer
evitar diferencias análogas á las que existen en Cuba
entre las fuerzas de Calixto (Jarcia y el ejército de
Shafter.
lío hay e«nflrmaci«ki.
NuRvx YORK 8 (Recibido con gran retraso).- The
Journal publica un despacho de Washington acogiendo el rumor de haber empezado el bombardeo de San
Juan de Puerto Rico.
En los centros oficiales no se ha confirmado la anterior noticia, dudándose, por consiguiente, de su exactitud.
Los carlistas en el Maestrazgo.
De una correspondencia dirigida por un carlista á
Las Provincias, de Valencia, o p i a m o s los siguientes
párrafcjs, que dan idea de la situación del carlismo
en la región del Maestrazgo:
«Poro hablemos del temido alzamiento carlista en
esta provincia.
Como el Gobierno juzga que merece ser obsequiado
con alguna alteración de orden público, los dedos se
le antojan huéspedes y anda azorado dictando disposiciones que serian tan estériles como tardías, si en
esta reglón la semilla tradicionalista hubiera sido cultivada por hombres espertos y provisores; pero desgraciadamente, en todo el Maestrazgo, muerto Cucala, no queda más elemento prestigioso que él general
Valles, el que he de confesar no se encuentra en condiciones, por su avanzada edad, de reverdacer pasadas energías.
Algún excabocilla de menor cuantía parece sentir
la nostalgia guerrera; pero como han servido varias
vecaspara hacir el juego, lo propio á los republicanos
que á los carlistas, tienen poco predicamento entre los
partidarios de buena fe.
Algunos periódicos, de los que más alarmados aparecen por el temor de un alzamiento carlista, dicen
que los partidarios de «sta causa están organizados
militarmente, y que sólo necesitan recibir la voz de
orden para formar los batallones y salir á campaña.
No sé si en otras partes sucederá esto; aquí, en el
Maestrazgo, no hay sombra ni vestigio de tal organización militar.
De suerte que sin garantizarle á usted deje de haber alguna asonada sin importancia para justificar
los trabííjos realizados, puede casi asegurarse que todo movimiento armado fracasaría aquí por falta de
cabeza y por carencia de recursos, dada la crítica situación económica por q u e atraviesa el Maestrazgo
de alguno» años á estaparte.»
' «...-íwítW^-»*'^
Viaje del "Kaiser" á Oriente,
El Gobierno alemán ha acordado el itinerario definitivo del viaje que en el próximo Octubre han de
realizar el Emperador y la. Emperatriz de Alemania.
Los Soberanos embarcarán el día 13 en Venecia, dirigiéndose directamente á Constantiuopla, desde donde i rán á Bucharest, Constanza y Sinaia, permaneciendo algunos días en la primera de las citadas ciudades.
SJiEl 22 de Octubre embarcarán en Constantinoplacon
dirección á Haifa.
Dasde este punto, donde se organiza-á la caravana
imperial, partirán para Jerusalón, haciendo paradas
eu Cesárea y Jaffa.
fin los primeros días de Noviembre saldrán de Tierra Santa, efectuando su anunciada expedición {á
Egipto.
Créese que la corte estará de regreso á fines de Noviembre.
Marruecos.
HiiU flwhatwcil T o r r e s .
Encuéntrase y a completamente restablecido de su
er.l'ermedad el ministro de Estado del Sultán, Sidi
Mohauíed Torres.
flj» «•HCnadra nineriennn.
Créese en Tánsrer que la escuadra americana, compuesta de ocOo buciiit-s al miindo di^l comodoro Watson, no desi.stiríi. di- visitar aqunl puortn, non cuand<)
sea un hectm la paz entre España y los Estados
Unidos.
S'iin r»M'llfleaelón.
El piíriódico El África, de C.'utu, niogix que sea cierto lo dicho puf La OrdtdC'i áo'l'kiigí^r, do que el g'iIwrnador d<! Meiillii había preguntad.) al Am«l de la
Gu laia, r(ípr..i.-wMittiatc del Sultán t n el v^'c'.no campo,
íii li>s iiiibiliinte» de la pinza podrííui rcfugiars • en el
I.ÜTÍIOSÍU marroquí eo pl caso dn ((U3 aquélla fuese
biinjbn.rd'>nda.
!)i< puso niega tHmbié.i El A&icaqn»<^\ gobernador
militar de Cauta haya rogado á los ex"- i.",j •••:\ obodeciendo al misiuo temor, que saliesen dd la pi^za.
En $',n Ulartín re Valdelglesias.
El ver t»ii. lií» t'xperimjnsado ei-ip i n o ; V'iíias
Oí) -i ') la
transformíií-JOí-jN, i'omo es sabido, y
menos impo^ií! a-, entre i^las, la üi' .tbei Mi'vado
g e n t e de Mitin i, a puntos Mividados,
,ioco xM - I O S ,
h a s t a ahorii
Algunas f-iiiulias madrilíiiíis ijuí» .intes veraneaíiao
en o't.ras poblaciones han ido este año á San Martín
de V-üdeiglesias, y están m u y satisfechas de su elección.
Sa;i Martín se halla en la, n^gii/n más rintoresca de
toda Castilla. Los que tienen formada una triste idea
de la provincia do Madrid por los alrededores rl« la
capital, no creerían, viéndose allí, que no haUiau s.i
lido de ella.
Kl pueblo es bueno. La campiña preciosa y ahondante en riquísima fruta, de la cual es valiosa muestra oí celebrado albillo. El aire puro do la sierra da
nuevos elementos de salud á las personas fatigadas
por la vertiginosa vida de la corte. En los alrededores
abundan los sitios amenos, propios para campestres
jiras. Para baños verdaderamente higiénicos no h a y
aguas mejores que las del río Alberche. Y el Viaje,
desdo Madrid, es breve y m u y cómodo: dos horas y
media en tren, hasta Villa del Prado, y hora y media
en coche por una excelente carretera.
A todo esto hay que añadir algo m u y importante
también.
La gente de San Martín es gente m u y culta y amable, y que se desvive por obsequiar á loa forasteros.
Fotopfías del cadáver d?. BiSBiarck.
Dos fotógrafos alemanes, en complicidad con el cochero y con un guardabosque del palacio de Friedrichsruhe, lograron penetrar en la cámara mortuoria, donde estaba expuesto él cadáver de Bismarck, y
fotografiarlo.
L4S fotografías fugron puestas á la venta hace cuatro días.
E n c u a n t o l a a y i p ^ i C o n d e Herijjerjtp áf> 9i^mrek
se opuso áello, dici9á(i,o que no había autorizado &
nadie para que violara el sagrado do la cámara donde
descansaban los resto» de su padre.
Los fotógrafos se han negado & obedecer.
Bl conde Heriberto los hará procesar por allanamiento de morada.
Tánei entre España y Marruecos.
Un periódico francés dice que hay el proyecto de u n
ingeniero inglés de unir á España y Marruecos pop
úñ túnel.
'
Este tendría una longitud de 14 kilómetros, que es
la distancia más corta entre las dos costas; pero como
el mar tiene por ese lado una profundidad de 500 metros, habrá que desviarlo qn poco hacia el Oeste, entre Tánger y la ensoñada de Vaqueros.
Por este punto la profundidad más grande es de
100, pero la longitud del túnel tendrá que ser de 32
kilómetros.
Como el túnel tendrá que internarse tres kilómetros
en la costa de España y siete en la de Marruecos, la
longitud total sería de 42 kilómetros.
Bl autor del proyecto calcula el coste en tres millones de francos por kilómetro, y sumando también los
fastos de una vía férrea en Marruecos para la milén
al túnel con la vía de Hemcen, cree que ascenderá á
223 millopei.
La duracióú de lo» trabados sería de siete años.
Para la construcción del túnel hay una dificultad.
Que España no tiene interés alguno en su construcción, ni dinero para gastarlo en una obra, cuya utilidad, por el momeáto, po interesaría á España.
De manera que éste no pasará de tal.
Hojeando periódicos.
C o n s e e a e n c l a s de la p é r d i d a d e lao Antillaa,
(Del Seraldo.)
«Aquí, donde todo se hace materia de discusión, ni
el Gobierno, ni las Sociedades Económicas, ni las Cámaras de Comercio, ni la prensa, ni nadie, parece
preocuparse de las múltiples cuestiones que la pérdida de Cuba y Puerto Rico trae aparejadas.
Creemos ya hecha esa liquidación y es ahora cuando comienza.
Apenas se osa abordar el pavoroso problema de la
deuda.
Los mismos industriales de Cataluña, de Baleares y
de Castilla permanecen en silencio, sin dars-j cuenta
de que está y a roto, ó lo estará muy pronto, el siste
ma de relaciimes mercantiles á cuya sombra solvieron
y prosperaron sus industrias.
Pero, con ser tan tristes, ninguno de estos problemas lo es tanto como el de la repatriación de nuestros
ejércitos; ol trágico éxodo que acabará en los puertos
peninsulares; los doscientos mil hombres volviendo
en expediciones de mil ó de mil quinientos, con un
gasto de más do clncuííhta millones de pesetas; numeroso personal de jefes y oficiales condenado á la
ociosidad y gravitando sobre el mezquino presupuesto de lo que fué metrópoli; las escalas paralizadas otra
vez, el reemplazo restablecido, rota de nuevo toda la
máquina de nuestras instituciones militares...
Y Asturias, y Galicia, y la Montaña, y Canarias,
¿es que no van & sejatir también la terrible sacudida
de los intereses creados en Cuba por el trabajo do sus
hijos?
Pues á todo esto parece que asistimos como si no
hubiese tales cuestiones que ventilar, ó como si fueran cuestiones suscitadas en China. Ni aun los accionistas de la Compañía Arrendataria; ni aun los fumadores se dan cuenta de que España, país productor del
mejor tabaco del mundo, no seiá dentro de pocos día»
más que ua mercado de consumo, obligado á recibir
hasta el último cigarrillo de la Habana como producto extranjero.
Gobernantes y gobernados debieran preocuparse
desde hoy, é incesantemente, en estos problemas que
vienen sobre nosotros como consecuencia inmediata
de la paz. A todos interesan, y todos estamos obligados á buscar, no y a la solución, que en muchos de
ellos aún habrán de entender nuestros nietos, sino el
medio de encauzar y regularizar sus efectos; no suceda que, con ol descuido y las imprevisiones de siempre, dejemos que tan enorme caudal de aguas se acumule sobre un punto sin salida y acabe por romper
los diques.>
Liquidación de la d e u d a .
(De El Imparcial.)
«La deuda enorme que pesa y a sobre los abrumados hombros de nuestra infeliz patria, únicamentí
podrá ser conocida de un modo serio y exacto cuando
el ministro de Hacienda presente un completo estado
del Tesoro con todas las negociaciones de crédito qud
el ministerio del ramo ha llevado á cabo desde que la
guerra de Cuba empezó.
De igual suerte el ministro de ultramar es quien
puede proporcionar á las Cortes los medios para formar juicio sobra las cantidades por su departamentí»
recibidas y á los gastos d é l a guerra destinadas. Y
respecto de tales gastos, nadie c imo el ministro de la
Guerra y el de Marina hallaráse en condiciones de informar,
Pero todo ello, si no se dispone y prepara con tiempo, no será factible de ejecución cuando los representantes de la nación lo demanden. Aplazado par» en^
tonces, nada se conseguirá.
Costumbre fué de los primeros Gobiernos constitucionales presentar al Parlamento el día de su apertura sendas Memorias redactadas por los ministros, en
las cuales cada uno de estos exponía la situación de
su respectivo departamento. A la cómoda holganza
do los personaliís políticos, ((ue vinieron d ispués á los
consejos de l;i Corana ó al ejercicio del poder ejecutivo, no agradaba tan pesada tarea, y ésta cayó en
desuso.
Mas por una vez si.)ui'>r>i,, tomando en cnenta lo
enorme de las presentes desdichas da España y la suprema necesidad de nuev.i orientación p'r,. la vida
nacional, parécenüs sincDraiuiíat.) ijae una d'-línninación de ese género á fin de llevar é, la-< Cortes trabajos de esa ípdole, lu'.'go que las Cámaras deseen
ilustrar su opinión, si^niftíuria un sjrande y positivo servicio hecho á la f)atria.»
Un triste SUÍÍBSO en Lssboa.
llvH boU>!4 «i 'meriS;iiitiN. - VnriAiü |iii>rNcinaM ah«^t;d:<N.
L 1, saü i i do Lis]>oa, pai"i r>'srre>ar h ''u p;,í<, del
f^i:.i -o P ••'-id.ill- •
;• la l;.HpÜ'Ml,'a :i 'i If . - I ' ,
rllOr
Campos Sall'i.-, h,- dado origen a uu t^iflt? s>.!C-su, del
cual comunica algunos detalles el corresponsal de
El Imparcial.
El Sr. Campos sn efnb ircó •yi"-, y y;> entrada la
Ti'c.he, dos botes d ' lisniuiti"> iv"' tin" íio acudido
ciiu luciendo geni«li'-i'osadid'!-¡ie(¡:r: , fueron echa'1i>- á pique P'ir II - V .por.
A:iibí)s :• i,i),r. .(• ij !s estdb.i Cir^'.l.is de paiaT . los e-' I' cay • < d a^"-1 f. M :oh lít Hufrleron he.M n du' I • i'w
r:r5!;i)> h TII ,^ ¡i • vi ponerse en
-
IV o .
Ignórasf- i.u
• •. .. noeir. d i - IIID^TI ios. Hasta
la madrugada de hoy no se habí
jcogido más que
un cadáver.
" (DRLA AttBNOlA F A B R A )
LISBOA 9. - S e g ú n las últimas noticias, el número
de víctimas de 1» citft^trnf) asciende á 20 muerto^ y
10 heridos.
La enseñanza oficial en Francia.
Una carta de París que publica El Imparcial contiene datos muy curiosos acerca de los progresos de la
enseñanza en aquel país.
En 18(5!) el número de alumnos de segunda enseñanza Hscendla á 127.330. Hoy pasan de 245.C0O.
En liceos, colegios, escuelas y material de enseñanza se lleva gastado tanto como costó la indemnización
de eruerra á Alemania. El presupuesto reserva
198.312.433 francos para la instrucciíin pública, délos
cuales aplica 23.233.000 á la segunda ens-jñanza dada
en 114 liceos de varones y 40 de hembras, y en 2130
colegios para los primeros y 25 para las segundas;
m
subvencionapdo además con dos y medio millones varias instituciones libres.
Al ejemplo del Estí(do, el Municipio de París dedica
27.694.-^9 francos á la enseáanza pública, figurando
por 1.571/890 francos las subvenciones á los liceos y
fas becas para los alumnos sobresalientes de los doce
liceos de varqnen y cinco de hembras con que cuenta
la capital, edificios grandiosos que honran á la población.
£1 lazareto de Pedresa.
Ante la próxima llegada de los repatriados de Santiago de Cuba á dicho lazareto, un periódico de Santander dirige á las autoridades las siguientes preguntas, basadas en los rumores que circulan ea diekacapital montañesa:
«¿Es cierto—dice—que ^n el lazareto de Pedrosa no
hay a g u a iii para el consumo de los empleados de Sanidad que allí habitanV
j.E3 cierto también que tiene grandes deficiencias,
que loa servicios dejan bastante que desear y que tan
solo 23 individuos que desembarcaran en dicho punto
tendrían motivos de queja y se verían y deBéaríto
para poderlo pausar medianamenteV»
Oreemos que el Gobierno debe enterarse de lo que
ocurre en el lazareto indicado y subsanar—si son
cl«rtos-descuido» y deficiencias cuyas consécuéiñcias no deboñ sufrir los que durante tanto tiempo han servido a su patria eo insalubre^ y lejanas
tierras.
La verbena de San Cayetano.
Anoche hubo gran concurrencia en el popular distrito de la Inclusa, donde se celebraba el tercer día ó,
mejor dicho, la tercera y última noche de la verbena
de San Cayetano.
La il«nn«M« que todos los años or§^nÍEa la Asociación benéfica de aquel distrito estuvo muy lucida.
Situada en un,local de la calle de Fray Ceferino González, se veían multitud de bonitos regalos donados
para la rifa á la sociedad y repartidos por hermosas
mujeres.
Es u n a Asociación esa, que se constituyó el año
1888, que ha hecho muchas obras buenas y que inaug u r a todas sus fiestas como inauguró en la tarde del
viernes último la verbena del santo patrono, repartiendo 1.500 bonos á los pobres.
Componíanse esos bonos de medio kilo de garbanzos, medio de arroz, medio de judías, dos chorizos y
un kilo de pan.
Asistieron al acto el gobernador civil Sr. Aguilera,
que regaló cien bonos en especie y 50 céntimos en
metálico cada uno, los cuales fueron repartidos entre
los pobres que no pudieron alcanzar bonos de la Sociedad; el teniente de alcalde del distrito, Sr. Guevara, y el delegado, Sr. Robles.
No hay para qué decir que las calles todas del distrito, los puestos de torraos y avellanas, los bailes de
farol y las buñolerías so vieron llenas de gente hasta
altas horas de la madrugada.
^
I III—.
m
—
i
L a s ancianas.
Hablando de las ancianas ilustres que por su posisición no pueden ocultar su edad, escribe un cronista:
«La Reina Victoria de Inglaterra cumplió en Mayo
setenta y nueve años, desmintiendo los pronósticos
que, cuando subió al trono el año de 1837, hicieran los
doctores, asegurando que Vivirla m u y poco.
La Reina de Dinamarca ha llegado también á los
setenta y nueve años, y la de Suocia y Noruega tiene setenta y dos.
La Princesa D." Beatriz, madre del Preteadiente don
Carlos, tiene setenta y cuatro años, y vive retirada en
un convento donde procura olvidar los disgustos que
la dio su difunto esposo el infante D. Juan.
La Princesa Matilde Bonaparte, la hija del Rey Jerónimo, que ha sido una de las bellezas más espléndidas de Europa, ha cumplido los setenta y ocho y
todavía conserva las aficiones de recibir y de estar rodeada de hombres de talento, que han sido las dominantes ea su vida.
La Reina Isabel no tiene más que sesenta y ocho.
La condesa de Oñate, viuda del general Zabala, tiene
ochenta y siete años, pues nació en Valencia el 4 de
Junio de 1811 y se conserva admirablemente, escri
hiendo ella misma la numerosa correspondencia que
sostiene con sus parientes y recibiendo todos los días
muchas visitas.
La marquesa de Valmar, cuya salud inspira estos
días alguna inquietud, ti*íne ochenta y nueve.
La condesa viuda de San Luis pasa de los setenta.
' Y no citamos más nombres; pero el curioso due
quiera ver los venerables restos de otra generación,
que vaya á misa de once á las Calatravas, y vestidas
con hábito de estameña y cubiertas con manto de
beatilla neg;ra, podrá vor á algunas que hicieron palpitar de amor el corazón de los polacos y que estaban
en todo el esplendor de su balleza cuando mandaba
Narváez, conspiraba O'Donnell, se bailaba eu la casa
de Montijo y se cenaba alegremente en el colnaado
que un famoso D. Santiago tenía en la parte que se
ha derribado en la calle de Sevilla.
Fábrica de electricidad
del "tranvía lií.lMd."
Anoche se verificaron, con resultado completamente satisfactorio, las pruebas generales de toda la ma*quinaria de la fábrica d» electricidad que la empresa
del tranvía de Madrid ha construido en la calle de
San Bernardo, núm. 115, solar del que fué durante
tantos años Parador de San Rafael.
Al acto asistió numerosa y distinguida concurrencia, que fué obsequiada por el director de la compañía, Sr. Brown, con unr-ífresco.
Los invitados hicieron merecidos elogios de las dependencias de aquel vasto edificio y de toda la instalación <lel mismo.
Después fueron conducidos on ripperts á la estación
del barrio de Salamanca, en donde, repetido e! obsequio, ocuparon los coches preparados para cuando se
plantee el nuevo sistema de tracción, é hicieron algunos viajes de ida y vuelta desde el punto de partida
do la linea htstn la calic d'-> ViUanucVii.
Aunque la empresa ha'iía anunciado que en las
pruebas parciales del tranvía eléctrico se n'imitirían
viajeros, de-ítinándose el producto de los biiíete.'* á varios asilos de Beneficencia, no pudo cumoürse el propósito de la empresa, porque el alcalde, fundi-ndose
en que la línea no se había aún inaugurado para el
sei viiiio del público, prohibió que entraran en los curruHJns las personas qu? no se hallasen oflcialmeute
invitada».
Gaceta de los Tribunales.
C a u s a por leMloncs.
En el pueblo de Morata de Tajuña riñeron los veci
nos Nidoro Iluiz y Pedro Zapilta, interviniendo en la
CUH.vtii'in i)acii poner p.iz V ctnri p ili la Torre.
La cüiiiionda Sii ginoraliZ'), y de Uis pedradas que
se tiraríiri'ri'is ii-cs comb'Vtientes ri'sd'ltiron heridos
Isidoro y P.-dn».
I n s t r u i d a ' a c vrrespondiente c a u í i Cíintra los tres,
por el delüii d > lesiones, se ha cel'<í>-1 lo hoy la vista
de esta cau-1 f'n la Sala segunda de v ic, iciones.
El fiscal Sr. 7, ibala solicitó se ini;)M-i "M á cadaunO
de los tresjjroctísados la pena de dua m^sesy un día
de arresto mayor.
Las defensas de Isidoro Ruiz y Pedro Zapata, á
cargo de los letrados Sres. Cembrano y López Colmenar, alegarun en f^vor de sus patiocinados la eximente de haber obrado en di fensa propia.
líl Sr. Iriarte, defensor del otro pro;vvsado, sostuvo
quf S',) debía absolver á Vlctorlode la Torre, por.cuanto que no había intervenido en la lucha sino para poner paz.
Snapensión d e vit«(a.
Por segunda vez se ha suspendido hoy la vista de
la causa seguida contra Antonio Sánchez Trillo y Julián Zorita, por el delito de disparo y lesiones.
Las dos suspensiones que este juicio ha sufrido han
obedecido á que el procesado Julián Zorito se encuentra en Mahón, sirviendo en el ejército, y no sabemos
por culpa de quién, la citación, ó no se ha hecho, ó no
se ha cumplido.
El perjuicio resulta principalmente para el Otro
procesado.
Vista Interesante.
En Bilbao ha empezado á verse la causa seguida
contra el ex-juez Sr. Pelayo y el ex actuario señor
Ormé, promovida en virtud de querella presentada
por el Sr. Martínez Rivas.
Dioha querella, presentada en el año 1883, se funda
en los delitos de prolongación de funciones y falsedad de documento público, dado que una sentencia
fué firmada después de haber sido trasladado el juez
señor Pelüyo.
En la referida sentencia se condenaba al Sr. Martínez Rivas al pago de un millón de pesetas á D. Natalio Palacios, en un pleito sobre participación en la
mina de la Unión, y además se le condenaba al pago
de costas.
La defensa del acusador privado, Sr. Martínez
Rivas, la tiene el notable abogado de Madrid, el señor
Díaz Cobeña, y de la de los procesados Sres. Pelayo y
Ormé, están encargados respectivamente los letrados
Sres. Rodríguez Parets y Sánchez Guerra.
INFORMACIONES
L a opinión de IVej^ler.
Dice ^l Correo:
«No parace exacto, según nuestros informes, que el
aeneral Weyler sea partidario d« la continuación de
tó guerra, como han indicado varios periódicos.»
ViiUes.
Ha salido para Cestona el señor duque de Tetuán.
T r a b a j o s ca«4hiitas.
Telegrafían á Bl Imparcial desde Roma que Su
Santidad h a dirigido un telegrama al obispo de Madrid exhortándole á que recomiende al clero de la capital que se mantenga fiel á D.]Alfon«o XIII y á la dinastía.
El agente de D. Carlos en Roma desmiente la noticia de que los partidarios del Pretendiente liayari hecho compras de armas. Suponemos que de habar ocurrido lo contrario, no iría á decirlo el susodicho
agente.
IfaUclas d e l a nüaAana.
El presidente del Consejo nos ha dicho después del
despacho con S. M. que no hay noticia alguna importante ni del exterior ni del interior.
—El ministro de Hacienda ha llevadoá la firma coa
Su Majestad los decretos autorizando el aumento de
la circulación fiduciaria á 2.500 millones de pesetas;
reglamentando la forma de pago dil cupón de la
Deuda exterior y autorizando ol cambio de destinos
entre los delegados de Orense y de Huesca.
—El ministro de la Gobernación llevó varios decretos á la "firma referentes á honores de jefes de administración.
—Esta mañana ha cumplimentado á la Reina el presidente del Senado Sr. Montero Ríos con objeto de despedirse.
—El ministro de la Gobernación ha cumplimentado
hoy á la Infanta Isabel.
nombramientos de Hacienda.
Los decretos firmados son los siguientes:
Nombrando delegado de Hacienda de Huesca á don
Ignacio Vizcaíno, que lo es de Orense.
—ídem para esta plaza á D. Salvador Ballus Bonaplata, que lo es de Huesca.
—Concediendo honores de jefe superior de administración á D. Pedro Mingo, que es delegado de Cáceres.
E l €on«>rJo d e S a n i d a d .
Bajo la presidencia del doctor Calleja se ha vuelto
á reunir esta mañana, á 'as diez, el Consejo de Sanidad, quedando ultimado el informe relativo á las precauciones que han de adoptarse á la llegada de los
soldados repatriados de Santiago de Cuba.
Esta noche ó mañana quedará el informe en poder
del Gobierno.
f i r m a d e Cíobernaelón.
El ministro de la Gabernación ha puesto hoy á la
firma de S. M. la Riina dos decretos concediendo honores de jefes saperiores d(> aílnttiiwstra«lón eív*l.
anocfie
Domiciíiaíiófl y coaversiáii del exterior.
He aquí la parte dispositiva del Real decreto que
hoy 80 ha firmado:
«Artículo 1.» Los extranjeros tenedores de títulos
del 4 por 100 exterior que los hayan presentado en el
plazo señalado al efecto por Ifs Reales órdenes de 20
y 25 de Junio últinw», y obtenido el sellado de los
mismos, podrán cobrar el importe del cupón do Octubre y de los sucesivos, en francos, libras esterlinas
ó marcos, sin otro requisito que la manifestación j u rada, óbajo palabra üe honor, de no haber enajenado
los títulos ni los cupones, y de que en ellos no tiene
interés ni participación ningún subdito español.
Art. 2 "> Los tenedores extranjeros que no hayan
presentado sustituios en ei plazo fijado en las Reales
órdenes affltes citadas, o q u e las hayan adquirido ó
las adquieran con posterioridad, podrán presentarlas
en las delegaciones de Hacienda del extranjero, á fin
dequejustifiaada debidamente la condición de extranjero y ia propiedad de dichos títulos, puedan ser
estos sellados y se haga constar en el registro respactivo el nombre y el domicilio del presentador, el númeto y la serie de los títulos y los sellos de circulación extranjera que contengan. Cuando y a estén sellados, se podrán cobrar los cupones de 1.° de Octubre
y sucesivos, en francos, libras ó marco?, á los respectivos vencimientos, previa la manifestación jurada, ó
bajo la palabra de honor indicada en el artículo anterior.
En ningún caso se podrá abonar en moneda extranjera cupones cuyo vencimiento sea anterior á la presentación de los títulos para ser sellados.
Art. 3." No se pagarán en moneda extranjera otros
cupou«s que los correspondientes á los títulos respecto á los que se hayan cumplido los requisitos exigidos en los dos artículos anteriores Las delegaciones
de España en el extranjero pagarán en pesetas los cupones que se presenten al cobro y no correspondan á
títulos selUidos ó respecto á los cuales no se íi;iya hecho la niaiiifestacióu exigida en los arts. 1.° y 2.' de
este decreto.
Art. 4" Ku el caso do que los títulos, después de
sellados, pasan á ser propiedad de personadistiotada
la que los prea<!uti>, el nuevo adquirontf», para continuar cobrando en francos, Ubnis ó marcos, t'iidr»! necesarÍHiii-'!ite qu-i poütrlo en conociiriií'nto li i ii delegHCiiin do 11 icicnda ÍU (jn-si'iitai los a! c-b o d •! cupón, justirlca.-jdo su propuda»! y la condición el;) extranjero.
Art. 5 " Los tx'tTHnjeros r"si(li«níf's i';: Kspaña que
deM'i'n r<d>rar ei¡ francos, ¡i!,i-ris ó iiiaicos los cupones
d'--u-lituli.s, p" Irán crrclijiirl'. r.-initiondo éstos á
cu /;(jir ni á>^ las dtdegacioiics do líHci'-nda en el exti.. j r', cumpliendo los requisitos H qu.3 se refieren
lo,, i,n-. l.oy 2.°, ó aeompañmido A lis títulos u n a
d» clnraci()n suscrita por el propietario, cuya firma
esté dcbidamtMit'i legalizida, en que manifieste que
en los títulos no tiene interés ni participación ningún subdito e-<pañol.
Art. fi," Para selUir los títulos depositados en garaiitÍH«!i ol Banco de Francia, la repreniintación oficial del mismo presentará en la deb-gación de Hacioijda Una relación detallada de los títulos que tenga en depósito, con la declaración siguiente: «Declaramos que en los títulos de la Deuda del t por 100 exterior, cuya relación es wdj unta, liO tiivia interés ni
participación ningún siibdito español, según resulta
de nuestros libros y demás antecedentes.>
Bn virtud de esta deslanición, ol delegado d» HLcienda, dn acuerdo con el Banco, designará d í a y hora
para sellar los títulos, por sí ó dflcgan'lo en uno do
sus empleados en las oficinas d»- : ouel establecimiento.
Iguales facilidades que se conceden al Banco de
Francia para sellar los títulos que tenga depositados
en sus arcas, se conceden á los Bancos oficiales de Inglaterra, Alemania, Bélgica y Portugal, y á los Bancos particulares que el Gobierno español designe.
Art. 7.* El coste de los cupones se hará siempre
por las delegaciones de Hacienda n spectivas, á cuyo
fin se presentarán al cobro unidos a losrfspectivos
títulos, los cuales serán sellados en el acto de su primera presentación.
Art. 8." Los Bancos oficiales del extranjero y los
particulares que el Gobierno español designe, que se
encarguen de cobrar cupones de títulos de exterior
depositados en garantía, estarán dispensados de la
presentación de dichos valores, pero deberán declarar
L.A ÉPOCA. Martes 9 dd A g e s t e M r | 9 Í
que ésto* fe hallan en las cajas del Banco y que los
depositatttes propietarios no son españoles.
Art. 9 / Si con motivo de testamentarías, actas o
contratos, se justifica la existencia de títulos do la
deuda exterior que pertenezcan t españoles y que, no
obstante esto, hayan sido sellados como de extranjeros, se considerará el hecho como defraudación & la
Hacienda, á no justificarse debidamente que la adauislción de los títulos se haya verificado con posterioridad al último cup()n cobrado. Los notarios tendrán obligación de dar conocimiento á la dirección
general de la Deuda de los títulos que so hallen en el
caso determinado por el párrafo anterior.
Art. 10. Si los presentadores de títulos o cupones
faltaren 6 la verdad del juramento ó de la palabra do
honor, las delegaciones do Hacienda denunciarán el
hecho á las autoridades ó funcionarios competentes
dé loa países en que el delito se hubiese realizado, solicitando que insten el oportuno procedimiento para
el castigó, conforme á las disposiciones penales respectivas.
Art. 11. La comprobación del cumplimiento de las
formalidades establecidas en el presente decreto estará 6. cargo de las delegaciones de España en el extranjero, las cuales cuidarán de que, sin causar molestias á los tenedores, y recabando cuantos datos
consideren convenientes, so depure cualquier sospecha que hubiere ó denuncia que se presentare sobre
falsedad de las declaraciones hechas.
Art. 12. El Gobierno se reserva el derecho de nombrar en todo tiempo agentes especiales para investigar los hechos ú omisiones relacionados con el cumplimiento de las anteriores prescripciones.
Art. 13. Con arreglo á lo dispuesto en la autonzacidñ .').* do la ley de 17 de Mayo último, los tenedores
de títulos de la deuda exterior al 4 por 100 podrán
oonvertir^o» ón ios d e j a interior con el beneficio de 10
Jiésetás nominales por cada 100 pesetas de capital nominal que presenten á convertir.
Art. 14. Los tenedores de exterior que quieran realizar la operación con dicho beneficio, podrán presentar sus títulos, tanto en la .dirección do la Deuda como en las delegacioni»s de Hacienda en provincias y
«!n 61 extranjero, desde el día de la publicación de este
decreto, facturándolos en las carpetas que se facilitarán en dichas oficinas, y endosándolos á la dirección
general de la Deuda pública para su conversión en
millos del 4 por 100 interior.
Art. 15. Los títulos de exterior que se presenten a
la conversión llevarán unidos los cupones de los vencimientos posteriores á la facha de la presentación.
Art. 16. Al verificarse ésta y previas las operaciones de reconocimiento y legitimidad de los títulos, se
«ntregará á los interesados una carpeta-resguardo,
con la cual recogerán los nuevos valores que produzca la conversión.
Art. 17. Los títulos del 4 por 100 interior que se
emitan por conversión de los de exterior llevarán
los mismos cupones que éstos; y los residuos representatativos de las fracciones que no lleguen á componer un título, devengarán interés desde el trimest r e á que corresponda el primer cupón que lleven los
títulos entregados.
Art. 18. Los intereses de dichos resguardos no se
abonarán hasta que sean presentados en cantidad suficiente para la emisión de un nuevo título. Al b .cense esta emisión no se expedirán nuevos residuos por
las fracciones que resulten en favor do los presentadores, cuyo importe quedará á beneficio del T'ísoro.
Art. 19. La dirección general de lu Dauda pública
dictará las disposiciones oportunas para el cumplimiento de lo preceptuado en este decreto.» _
LA PAZ Y LA GUERRA
(TELEGRAMA OFICIAL)
l?olaw>.'^(ie«p«>>olH én Fajardo.—enM-aramuia.
SAN JüAi» DE PuEiiro Rico (sin fecha).—MAUKID
9 de Agosto. — CapUdn general d ministro
Guerra:
Ayer, coluraaa mandada por coronel Pinto, entró
fea Fajardo, arriaado bandera americana.
Una partida tratij sorprender avaiizida nuestra
próxima Arecibo; fué perseguida, haciéndole tres
prisioneros. —Maclas.
(DH LA. A.(JBNOIA FABBA)
C/ombate en IHanlla.
LONDMS 9.—Manila, la noche 31 .Tulio, 3.000 españoles hicieron salida plaza atacando briosamente campamento americano; quedaron rechazados grandes
pérdidas.
Los insurrectos filipinos permanecieron neutrales.
No naufrajt;«i.
NaavA YORK 9.—Un despacho de Ponce (Puerto Rico) anuncia que ha llegado á aquel puerto el vapor
filibustero Oassie, que, según telegramas de Santiago de Cuba, había naufragado en aquellas costas.
•luicloH «le «Lir Tempti.i)
. PARÍS 9.—El periódico Le Temps elogia al jefa del
Ministerio español, Sr. S'iga.sta, por su aceptación de
las condiciones de paz, y espera que los Estados Unidos mostrarán moderación en sus exigencias.
Confiesa que España tendrá la recompensa de su
prudencia y energía en un porvenir de sólida prosperidad.
(Adoertímos que están noticias son df- origen norteamericano y no se Uaílan con/ir ¡nadas.)
.i'i
II
III
tfc^^i—••'
I
III
I I '
La partida de Alcalá de Chisvert
Según las últimas noticiáis recibidas en el ministerio de la Gobernación, han sido conducidos á Castellón por fuerzas de Carabineros, y puestos á disposición de la autoridad militar, seis indivi.Iuosde Alcalá
de Chisvert, de los cuales se sospecha han tenido participación en el levantamiento de la partida que salió
de aquel pueblo.
De ésta no se tienen nuevas noticias. La Guardia civil prosigue con actividad sus pesquisas para dar con
ella y batirla.
Junta de tenientes de alcalde.
Bajo la presidencia del conde de Romanónos so ha
celebrado esta mañiina Juntii d" tfMÍoiit"s dn alcfilde
para ocuparse de la cuestión del pan, que tan difícil
es de resolver.
Dio cuenta el alcalde de las justas quejas formuladas por la prensa y ol vecindario, rocoin«ndando á ios
tenientes de alcalde que no dejaran de girar visitas
diarias á las tahonas y efectuar repesos, único medio
de hacer que el fraude tfeí'minc.
Los tenientes do ale ilde manifestanm que ni un
solo día habían dejado d(> visitar las tahonas, y que
en todas ellas el pan tenía el peso justo; poro que luchaban, para salir airosos fie Ui (ímpfe.sa, con la resistencia de la mayoría del páblico, que se negaba á
que los tahoneros le pesasen la mercancía, citando el
caso de una mujer que no quiso llevarse un panecillo
porque se lo pesaron al tiempo de venderlo.
Después discutióse la cuestión de las fracciones,
acordándose que en lo sucesivo el pan se divida en
piezas de 1.000,500 y 200 gramos á 50, 25 y 10 céntimos respectivamente, desapareciendo las de '£>() que
venían fabricándose.
Respecto al pan francés, se toitió el acuerdo de citar
á los fabricantes para, de acuerdo con éstos, determinar el número de panecillos que ha de entrar en kilo.
El alcalde nos rogo que recomendáramos al público
la necesidad de obligará los panaderos á posarel pan,
así como el derecho que tiene k denunciar cualquier
falta á las autoridafles para evitar el fraude, aíuidiendo que él está dispuesto á perseguirlo, empleando los
muchos medios que tiene á sU alcance en beneficio
del Vecindario de Madrid.
£1 sistema métrico-decimal.
En 22 de Junio de 1899 hará cien años que una comisión de sabios presentó á la Asamblea francesa
ol metro, medida de la diezmillonésima parte del
cuadrante del meridiano que pasa por París, á fin
de que sirviera de base á un sistema universal de
pesas y medidas y llamado á facilitar las convenciones entre todos los pueblos del globo.
Es posible que apenas cumplido ese centenario, se
prescriba en Inglaterra el uso exclusivo de ese sistema, abandonando para siempre las yardas y todas las
demás medidas que disputan el predominio al metro.
Si así sucediere, se habría realizado la predicción de
Jonh Quiney Adams, sexto Presidente de la República de los Estados Unidos, quien en 1827 decía; «el me-
ción sobre las cantidades respectivamente fijadas
tro y sus deilvaciónos conquistarán el mundo y se hacomo mínimum. En todo caso, la mitad de las reserblará un solo ImguHJe para pesas y medidas desde el
t a s será en oro.
Ecuador á los Polos.»
. . ,
Art. 2." El Banco de España podrá ampliar el fonEl orden en qun los distintos pueblos han introdudo
de reserva á que se refiere el art. 12 del decreto-ley
cido el sist-ma métrico no puede decirse que es tamde 19 de Marzo de 1874.
bién el de relativa cultura y proporcional adelanArt. 3.» Las operaciones del Banco con el Tesoro
tamiento de los mismos.
,, j ,
. , iQ,n
serán objeto de conveidos especiales, conforme a l a s
En Holanda se introdujo en 21 de Agosto de 1816;
leyes y estatutos por que se rigf' aquél, aun cuande un modo definitivo en 1815(5. Bélgic^i lo había esdo sus condiciones puedan ser diferentes de las estatablecido antes y lo hizo obligatorio con anticipación
blecidas para las quo realice con los particulares.
á Francia, donde no so tomó tal acuerdo husta 1840. • Art. 4.* Ei G.)b¡erno dará cu'^ita á las Cortes del
Grecia, ec 1836; Italia y España, en 1819; los listados
presente decreto.»
Pontificios, en 18rtl; DinamarcH, en 18o2; Suoi-.ia, en
•*.'l»!<l»i
i'ii
1865; Méjico y el Ecuador, en 186Ü; los á^Muda Estados
americanos, en 1802 (con excepción del Brasil, que esperó al año 1875); iíamanía y Portugal, en 1864; los
Estados Unidos, en 180(5; Alemania, en igual focha;
Austria, en 1873, y poco después el Japón y Turquía.
Lo que no han conseguido los desastres que la patria ha experimentado lo ha logrado la noticia de que
hoy publicaba la Gaceta el decreto para la conversión
del.exterior en interior.
Continuando la relación del coronel Cortijo que puEmpieza cotizándose este último valor á 57 por 100
blica Bl Imparcial y extractándola, diremos que al
al contado y fin de mes; pero circulando poco diíspuós
llegar & Atlanta fueron recibidos los prisioneros con
la noticia á que aludimos, baja el contado hasta 50
gritos, silbidos y otras manifestaciones de hostilidad,
por 100 y 55 á fin de mes, quedando á última hora A
que se repitieron al entrar en el fuerte Mac Pherson.
55 50 á fecha; los francos abrieron á 49, pero después
Allí se les registró, no solamente los equipajes, sino
se han hecho operaciones á 53 por 100.
las personas, recogióndolou el dinero y cuantos efectos
llevaban.
En Cayq-Hueso lo habían quitado todos los docufjLTIMO PRECIO
mentos oficiales y papeles particulares que llevaba
FONDOS PÚBLICOS
encima.
Del 8. Del O
En el fuerte le despojaron hasta de un pequeño botiquín dosimótrico, de las tijeras, cortaplumas, cuchi58-40 56 35
4 por Interior
,»-15
llo y tenedor del cubierto.
58.45 50 00
ídem serie E
il.85
«Terminado ese inicuo despojo—sigue el Sr. Corti2 50
ídem fin de mes
58 00 55.50
jo,—se nos condujo á una jaula de hierro con dos comídem próximo
partimientos, separados por una gruesa plancha de hieExterior
65.50 63 .30 t 2.20
rro, fin una quedaron los sargentos y soldados, sin
A mortizablo
61.00 » 1.25
más cama que un jergón en el suelo.
Obligaciones del Tesoro... 100.75 100 65 > 0.10
En el otro nos colocaron á los diez oficiales en pésiídem de A n a á n a s . . . . . . . . .
88 25 88.25 »
mas camas de soldados, y para mayor mortificación,
ídem Filipinas 6por 7 . . . .
70.50 73.50 > 3.00
infestadas de insectos.
Billetes Hlp.»'deduba, 6 %
69 15 68.90
0.25
Así pasamos la noche, y al amanecer del día siídem de 1890, 5 p.»/,
»
54
00
.80
53
?o
guiente un sargento mulato nos hizo levantar.
Banco de E s p a ñ a . . . ;
0.00
389.00
895.00
Nos lavamos, secándonos como pudimos, pues el
Comp.» Arr,* de Tabacos.. 209.00 210.00 .00 »
Gobierno no dio para los veinte prisioneros más que
Céd." B.c°Hipotecario 5 •/, 107 00 107.00
»
una toalla de munición y un baño de hierro,
»
ídem al 4 p. ".•.. ,
, . 100.50
»
El sargento nos condujo al comedor de la tropa,
»
»
ObLAyunt.» de Madrid...
»
»
donde en una mesa de los soldados nos colocaron á
8oc. electr. de Chamberí..
». »
»
*
los diez oficiales, y en otra á los diez individuos de
OOTIZAOIUN DH ?AEÍa
tropa, éstos en unión de los negros guardianes. Allí
Norte
»
»
»
»
se nos sirvió el rancho de los soldados, sin manteles,
Mediodía
,
«
»
sin servilleta ni vusos. Un solo plato, una taza de café,
Riotinto
»
un tenedor y un cuchillo sin corte ni punta formaOAMB108
ban el servicio.
Londres, a l a vista
>
38 25
El tal rancho resulta algunos días comible para la
ídem, á ocho días vista....
»
gente ruda; pero para oficiales es siempre una bazoParís, & la Vista
50 00 51.75 1.15 >
fia asquerosa y repugnante.
ídem, & opbo dífts Tist»....
Mi categoría en un ejército regular de nación civilizada es aquí letra muerta. El Gobierno de la Unión
me ha convertido á mí en un soldado raso por la raEl interior se ha hecho á 57 25. .57 por 100, 56-90,
zón de la fuerza; ha hecho lo mismo con mis oficiales,
70, 60, 50 y 25 al contado, y á .57, 57-25, y 57 por 100,
564)0, £6 por 100, 55-75 y 50 á fin de mes.
y 80 extreman ostensiblemente las medidas de rigor,
de desconfianza, de desdén.
ÍJOS títulos de la serio E á 57,56 95 70 y flO.
Un sargento mulato nos hace formar y nos ordena
El exterior, á 63 50,40 y 30 al contado, y á 63-50 á
desfilar de á dos entre filas de soldados armados, y
fin de mes.
así nos llevan tres veces al día al com'idor, sirviendo
El amortizable, á 65 90, 60 25 y 06 por 100.
de espectáculo á los curiosos el ver un coronel de mi
Las obligaciones del Tesoro sobro la renta de Aduaancianidad en situacióu tan triste.
nas, á í^8..")0 y 2,5.
Ni un detalle de desprecio omiten. Si entra en
Las de Filipinas, á 76, 70 50, 75 por 100, 74 50 y
nuestra jaula un oficial, un sargento ó un soldada, lo
73 50.
hac^n con la cabeza cubierta, aunque nosotros esteLiis Cubas de 1886, á 69-25, 50, 40, 25, 69 por 100 y
mos df;8Cubiertos,
68-90.
Al entrar an el comedor se están los soldados senLas nuevas, á 52-75, 53 por 100, 53 25, 75, 54 por
tados; ninguno se mueve, ninguno hace el qienor
100, 54 25, 10 y 54 por 100.
ademán de respeto.
Líia acciones del Banco de España, á 390, 388 y
Sólo debo hacer const-ir la diferencia de proceder
389.
de dos oficiales jóvenes de los que deben llevar poco
Los de Tabacos á 208, 209 y 210.
tiempo de servicio desde la salida de sus acadeBolaa de P a r i*.
mias.
(TKLKGRA.MA DE LA AGENCIA ITABEA.)
Uno vino á saludarme con respetuosa atención, hablando algunas pnlab ras de e-+pañal y de francés, y
Día 9.—Apertura del exterior espaáol. 43-13.
el otro, que sin duda no habla más que inglés, al pa3 por iOO francés, 000 00.
sar yo en la procesión ridicula ó en el comedor, se
cuadra con respeto y saluda militarmente. Son los
únicos.
La» jaulas de hierro en que vivirnos encerrados están hechas con arte cruel. Las rodea un muro de ladrillo con vcntanaíi altas, por las (lU'i s('»lo se ve un
íia itarticipnolón, apoMar dp !a s"<^rra.—I*reparapeijazo de cielo. Las vonlanas tienen cristales de coUvoN. - E l pabellón ei>paaoi.
rreiara que sólo dejan entrar el aire por una tercera
Según
dice
¡.-Ealair, se preguntan algunos qué
parte de la dimensión de la ventana.
hace la comisión española de la Exposición de 1900
Resulta esta inquisitorial prisiíin horrible por lo soante las graves preocupaciones de la guerra actual.
focante en verano, y debe ser terrible en invierno,
«Los sacrificios que se impone España—dice—para
pues así como no hay ahora medio de defenderse del
sostener el honor de su bandera, ¡(obligarán al Gosol que entra por las ventanas y nos da en la cara esbierno |á renunciar á su participación en nuestra
tando acostados, y nos achicharra, en invierno la
Exposición Universaiy
temperatura debe ser glacial, horrible, con esta huHemos adquirido informes de origen seguro, y pomedad y este piso de asfalto.»
demos asegurar á los amigos do eso país que ño ha
El coronel Cortijo formuló varias protestas por disrenunciado en manera alguna á figurar entre nostintos conductos, pero de ninguna hicieron caso. Se
otros en 1900.
les había dicho que lo» prisioneros podrían escribir
En Madrid la comisión, presidida por el señor duá sus familias; lo hicieron entregando la» cartas abierque de Sesto, se ocupa en organizar la participación
tas y sin decir en ellas Ui.da más sino que estaban
de los expositores españoles, dirige la propaganda y
buenos, y se las devolvieron con la nota de que las
reúne documentos para hacer figurar su país en 1900
cartas de prisioneros españoles ó para ellos no podían
con el mayor esplendor.
circular.
En París, el .«eñor marqués de Villalobar represenPensó el coronel Cortijo dejarse morir do hambre;
ta á la comisión en calidad de delegado regio cerca de
pero el médico Sr. J'ilidn lo disuadió confortándole.
la administración francesa, desplegando 8l más lauPidieron oír Misa, y tras de muchas diñcultudes se
dable celo en el desempeño de sU cargo.
permitióque la d¡j«se un sacerdote francé.s, el cual
En relación constante con el director general de la
les dirigió una plática en su idioma exhortándoles á
explotación y con el comisario general M. Picard, el
sufrir con paciencia y resignación cristiana las pena-marqués de Villalobar espera ver m u y pronto aprolidades presentes, y á qui teniendo en cuenta el estabado el plan del pabellón que ha de construirse en el
do de guerra, que tan peligroso podía ser para sus
muelle de Orsay, en el centro de las edificaciones que
vidas, estuviesen siempre preparados para el paso de
levantarán muchas do las naciones extranjeras.
este mundo áotro mejor.
Este pabellón, cuyo proyecto se debe al arquitecto
Dicho sacerdote consiguió que la guardia de los
españ )l D. J )sé Urioste y Velada, es muy original.
prisioneros formada de negros, cosa én los Estados
Debemos hacer aquí mención de uno denuestroscomUnidos denigrante, fuese sustituida por otra de
patriota», el arquitecto francés A. Marcel, que ha sido
blancos.
agregado á su colega español citado. M. Marcel obtuRefiere dBspué.-} el coronel los p irmonores de su
vo en el salón do í»arís, en )897, la primera medalla
canje con otros prisioneros yanlíees y la visita que le
de la sección de Arquitectura.
hizo un abogado, M. Roushah, quien SH ofreció por
Véase, pues, cómo apesar de sus angustias patriótisi quería poner pleito al Gobierno de Washington por
cas, España se prepara á manifestarnos su simpatía,
los malos tratos sufridos.
acudiendo á figurar dignamente en 1900,»
Un domingo el sacurdote Mr. B izin, dHspués de la
Misa, dijo que el canJH estaba hecho.
L-^s exhorto y felicitó, regalati'lo á cada uno un rosario ,v una mednll«; ¡qué bueno ha sido para iiosotros-^íiiCH el coronol-y cuftnto consuelo nos hii dado
en los dias negros de la prisión!
Al .salir del fuerte se les d.^volvi() el dinero y tf.jctos.
Pudo salvar 7.500 pp.sos (ÍO papiil que conducía uno
de los oHí'i.iles prÍ!,iiin«rov', y de ¡os cuales hiiblaba un
Estamos de acuerdo con un colega en que no es
purioiiifo .rmiiifestaiido deb'ia de incautarse HI Ciobierposible
todavía traducir en números la li(|uidación
no americano de osa •• intidad, pues era muy consided<í la gaenvi, porque se desconoc.Mi á (lunto lijo los
rable para peculio de, un oficial subalterno y dob^ría
gastos hechos y las obligaciones con que tendremos
pertenecer al (íobierno.
que pechar en lo sucesivo.
Para salvar esa cantidad expuso la verdad: que el
Por eso conviene que el Gobierno se ocupe en haoficial e.st:iiba comisionado para llov.ír k oticialo.s de
su batallón sus pobres pagas, qui? esperaban con íifán
cer algo útil en su desdichada gestión: en reunir los
para poder vivir j ' maatener sus familiat; de modo
datos que demui-stren el descubierto del Tesoro y en
que si el (iobierno americano confiscaba ese dinero,
l)re|)arar las soluciones que deban adoptarse por las
nada quitaba al (íobierno osp.\üol, sino sus habereg
Cortes al propio tiempo que votan el Tratado de
particulares á unos pobres olicialcs.
paz.
Aquella tarde quedaron en libertad ol coronel, el
El arreglo del problema económico es urgente, y
médico Sr. Julián y sus asistentes, y se dirigieron á
no debemos aplazar el comienzo de la regeneración
la Habana.
del país.
—^••n».i»-.->Esa es la obra que necesita acometer inmediatamente el ministro de Hacienda, y que suponemos
tendrá estudiadfi. Los grandes mal(!S exigen grandes
(DB LA AaBNOIA.FABBA.)
remiídios, y los hombres de gobierno deben demosI.ÍON niu»ia nía neM de t V c t a .
trar las dotes que poseen cuando el país necesita soPARÍS 9.—LOS musulmanes de la isla de Creta han
lucionéis.
dirigido á los Gobiernos de las potencias una exposición protestando del abandono en que se tienen sus
derechos, y de que2.").00í) f.imilias, con sus propiedaLa noticia, de origen [)articular, de un ataque de
des perdidas ó imposibilitadas para (d tr,ib;ijo y la
los ('Sjiafioies d(! Manila al campamento norteameriproducción, se encu<-ntran f,.!era del territorio y sin
cano, durante el cual han permanecido neutrales los
([ue nadie haya tenido en cuenta el respeto á sus de
insuirectos, no parece verosímil, dadas las circunsrechos civiles y políticos.
ancias esp. cíales en que se halla aquella guarniEu dicha exposición piden á las potencias que gación y el curso general de ios sucesos.
ranticen on el presente y en el porvenir su vida, su
honra, sus bienes materiales y su» derechos.
Es'probable que se trate de alguna fantasía de los
corresponsales ó de una escaramuza.
L A BOLSA
/
•
Un prisionero de los "yankees."
•»
España en la Exposición de 1900.
I T i S DE ÜLTMi HORA
Últimos telegramas.
Ampliación de la circalación fiduciaria.
El Real decreto firmado hoy por la Reina dice así:
«Artículo 1." Se faculta al Banco de España para
aumentar la emisi()n de billetes al portador hasta
2..500 millones de pesutas.
La cantidad mínima que el Bmeo habrá de conservar en sus caja», en metálico ó iiarras de oro ó plata
por al au.rnerito de emisión, será ¡a siguiente:
Si los billetes en circulación exceden de mil quinientos millones y no de dos mil, la mitad.
Si la circulación excede do dos mil millones, las dos
terceras partes.
'
Esta proposición sólo afectará al exceso de circula-
La Bolsa se ha declarado hoy en baja pronunciada, sin saberse á punto lijo la causa en que se funda,
pues mientras unos lo atribuyen á los decretos que
hoy ha lirmado el ministro de Hacienda sobre domiciliaeión y conversión de la deuda exterior, y aumento de billetes del Banco, otros suponen que obedece á la partida levantada en el Maestrazgo, aunque ésta no tiene importancia.
Posible es que hayan inlluído también en la baja
las operaciones á la lecha de mañana que se iiicíeron para casar las del mes anterior.
El jefe de las fuerzas de ^anmición en Castellón ha
telcffráliado hoy al nainistPo de la Guorra participándole qué se le había presentado un individuo de
la partida de Chisvert y que ol resto se había internado en dirección á Cuevas de Vinromá, perseguida
por fuerzas de la Guardia civil y de Carabineros.
El presidente del Senado, Sr. Montero Ríos, tía
estado hoV en la presidéhcia para despedirse del señor Sajíasta, pue& mañana sale para Lourizán.
También ha hablado con el presidente del Consejo ol de la Diputación provincial, Sr. España.
A las seis el Sr. Sagasta salió de la presidencia
para pasear en carruaje por la Moncloa.
Mañana marcharán á Barcelona los coraisionados
del Fomento de la Producción Nacional que vinieron á gestionar la supresión d(;l impuesto de exportación á los productos industriales.
Marchan muy conliados en el logro de sus deseos.
Corao se ha dicho que el Consejo de Sanidad, en
su última reunión, acordó proponer al Gobierno que
se conviertan en lazaretos los buques de los puertos
en quo los soldados desembarquen, creen algunas personas que seria mejor hacerles pasar la cuarentena
en las islas de Ibiza ó las de Cies.
Creemos que el punto debe estudiarse, pues algunas de (jstas islas son muy peciue.ñas y acaso no podrían ser debidamente instalados y atendidos los
soldados.
Lo que ha costado Bismarck.
Un periódico francés, VEconomisle Buropem, p u blica un interesante artículo dé Kdmond Théry, estudiando lo que la política do Bismarck ha costado y
cuesta aún á Europa.
Théry deja á un lado, por la dificultad de calcularlas exactamente, las inmensas cantidades invertidas
por los Estados beligerantes en las tres guerras bisroarckianas, y habla sólo de lo que las diversas naciones gastan anualmente en sostener sus ejércitos y
otras obras de defensa nacional, consecuencia inmediata de la política sangrienta del canciller de hierro.
He aquí algunos datos que resumen todos los demás consignados en el artículo de Théry. Desde 1866,
las nueve naciones cuya Hacienda estudia hato invertido 45.000 millones en gastos de guerra, sin contar en ellos lo invertido en construcción de caminos
estratégicos, créditos extraordinarios, gastos particulares de loa llamado.9 al servicio militar, etc., etc.
Hay, además, otras pérdidas que Thér^ denomina
invisibles y son también de excepcional importancia.
El aumento de los ejércitos en pie de paz—más de
800.000 hombres—representa una pérdida p'or trabajo
inutilizado de cerca de 1.500 millones de francos á
contar desde el mismo año de 1865,
Aparte do estos gastos y de estas pérdidas, áfctaal-,
mente invierte Europa 4.000 millones en diversos servicios relacionados con el mismo objeto.
Tal es la herencia que ei genio de Bismarck lega
á la vieja Europa, tan profundamente tributada y
alterada por él, después de haberla sangrado implacablemente.
Crónica extranjera.
ilanifcnitaclón en i*ari§.
Anteayer tarde se verificó en la capital de la Vecina
República una manifestación ante el monumento de
Etienne Dolé, situado en la plaza Maubert.
Un numeroso ^rupo, presidido por el diputado
M. lienon, depositó en el pedestal del monumento coronas de flores rojas.
Los manifestantes dieron [vivas! al que fué mártir
de la libertad y ¡mueras! á la reacción.
A partir de este momento, la manifestación tomó
carácter tumultuoso, dándose vivas á la Oommtme, la
libertad, Kochefort y también á Zola.
La policía tuvo que intervenir, arrancando un cartelón en el cual se leían estas palabras: «Combatir el
error es afirmar la verdad.»
No cedió son esto el tumulto, y como los manifestantes continuasen alborotando, la policía tuvo qu«
dar algunas cargas, de las cuales resultaron vanos
contusos.
Varios alborotadores fueron detenidos.
J u i c i o s s o h r c la $;uerra h U p a n o - a m e r i c a n a .
La Koelnische Volkszeiltmg (Gaceta Popular de Colonia) publica, con fecha 4 dw Agosto, un artículo sobre
ol conflicto hispano-aiñericano, bajo el punto de vista
de sus relaciones con la cuestión religiosa.
Empieza el colega por rechazar de plano la idea de
que el resultado de la guerra demuestre una vez más
la superioridad del protestantismo sobre el catolicismo. _
«^.Quésigniflea—dice d e s p u é s - q u e la prensa católica norteamericana celebre la conquista da las Antillas, creyendo que la Iglesia obtendrá con ello ventbjas'í
Los intereses generales de la Iglesia nada tienen
que ver con que los yankees, no católicos y superiores
en número, se apoderen de un territorio absolutamente católico de una potencia que también lo es, y como
es natural en las conquistas, traten de asimilárselo,
inglesándolo.
A los ojos de la Iglesia no pueden tener valor esos
supuestos derechos, fundado» en el de la fuerza
bruta.
Disculpa las alocuciones del clero católico yankee, y
se ocupa de la del arzobispo católico Ireland de
S. Paul.
Encuentra justas las observaciones que & las palabras de este prelado hace La Veriie', de París, que ter
minan así-,
«Los sacerdotes, los obispos que simpatizaron con
la tea revolucionaria del siglo pasado tuvieron un fin
triste, si no sufrieron duro escarmiento, y los que al
principio de este siglo halagaron al César triunfante,
no aparecen hoy grandes ante la historia.»
Las
provincias.
Palencla.—Bl Ayuntamiento ha acordado, en vista de las circunstancias, celebrar la feria de San Antolín del 1 al 5 de Septiembre bajo el aspecto puramente comercial, prescindiendo de los fsstejos que
deja á la iniciativa particular.
Itadiiju-/., En toda la provincia se está aerificando
la recolección de la cosecha en excelentes condiciones,
resultando más abundante de lo que se esperaba.
También la del vino será buena, dentro de lo posible, dado el estado de los viñedos, atacados en su mayor parte por la filoxera.
CNtrdoba.—En las cercanías de la villa de Zuheros
se ha encontrado el cadáver del joven, de 21 años de
edad, Pedro Camacho Pérez, que tenía la cabeza horriblemente destrozada. La Guardia civil practicó activas diligencias para buscar al autor del crim.on, y
aquéllas dieron por resultado la captura de Antonio
Cantero Fernández, de 27 años, que se declaró autor
del delito, manifestando que su móvil habían sido antiguos resentimientos.
¡I asesino eqjpleó piedras de gran tamaño, con las
lacho, hasta dequo1 aplastó la cabeza al infeliz Camact
jarlo sin vida.
MaUíca.—Telegrafían á El Imparcial que en el sitio llamado Arroyo Hondo, término de Alhaurín de
la Torre^ encontró la Guardia civil el cadáver de un
niño, al que le faltaban los brazos y la pierna derecha.
Créese que murió de algún ataque epiléptico y lúe
go fué destrozado por los lobos.
Diversiones públicas.
Se ha puesto á la venta el libro de la zarzuelita titulada Lo/tcMquita de Nájera, original del Sr. Jackson
Veyan, que sigue representándose con eitr.aordinarlo
éxito en el teatro de Maravillas.
Con la ópera de I Pagliacci ha debutado en el teatro del Buen Retiro el barítono D. Francisco Sales.
Es buen ari;ista y fué muy aplaudido.
Anocno no se verifloó ei estreno de la ópera de Mascagni, Zaneíío, para dar lugar á más ensayos de dicha
obra.
.^OIKIAS GMRALES
En el Congreso han «mpezaio las obras conducentes á dar más luz á las galerías del pasillo circular del
salón de sesiones.
Ha fallecido eu esta corte el contraalmirante señor
Warleta.
Con este motivo ascenderá á dicho empleo D. José
Gómez Imaz, y á capitalu de navio D. Enrique Saotalu.
Ayer estuvo en Palacio á cumplimentará S. M. y
darle las gracias por el pésame que se dignó enviiirltí
por la muertas do su hermano el comándantn del
Of/uendo el cnpiiha de naivíode primera clasn I). J.aqiiín María Lazaga.
Han contraído matrimonio eu la iglesia dtf !<« .Jerónimos de esta corte D. Pablo Maroto y Aivunz, «ixjuez decano de Madrid y actual presidente dt> Sula do
la Audiencia territorial de Cáceres, con la Srln. doña
Carmen Paes y Cozao.
Ayer tarde se reunió la Junta de aranceles y valoraciones para estudiar las redamaciones de la ooiíiisióndel Fomento de Barcelona relnt;iv«.s á la supi-Bsíón de los derechos de exportacióu á los productos
manufacturados.
Se ha encargado d é l a dirección de Fl Día, por renuncia de nuestro compafiero en la precsa !>. Luis
López Ballesteros, D. Antonio Santouja.
Ha fallecido en San ,luán do Luz 1). Emilio Mora,
tío de nuestro querido compañero de rt-iliiccii'tt; (li.!i
Ramón de Cárden&s.
Enviamos & la familia del finado la expre.si'kn de
nuestro dolor.
Merced al celo y generosidad d«l académico cx»rrespondiente de la Historia, doctor Roso do Lunn, ba sido
enviada para formar parte del Museo Arqueológico
Nacional una losa sepulcral curiosísírTuí, díida íi conocer por él en las fragosidades de las Vi Huercas ó sierras de Guadalupe (Logrosán, CAceres).
Semejante hallazgo, con su grotesco tallndo de un
guerrero, armas y carro de combate, es único o casi
único en ese género y ha llamado poderosamente la
atención de los sabios.
El célebre doctor Hiibner, de Berlín, bien conocido
aquí por haber estudiado á fondo los bronces hispanoromanos, cree se trata de la losa que cubrió el se|iulcro de uno de los guerrilleros de Viriato, lo que supone una antigüedad de má« de dos mil año?.
Emilio Ollivier, el célebre ministro del .segundo
Imperio, que apesar de sus setenta y tres añoM se halla
m u y ágil y da grandes paseos á pie, quiso días pa.sados subir k un tranvía sin mandarle parar, y tropezó
en una manga de riego, que le hizo caer, causándole
una incisión en el labio superior y rompiéndole varios dientes.
Losi médicos que le han reconocido opinan que la
caída no tendrá otras conspcuencias, y que después
de ocho días do reposo podrá dedicarse á sus traliHJus
habituales, entre los que figura la Historia del Segundo Imperio.
El diestro Antonio Olmedo ,' Valentín), herido en la
corrida celebrada en Madrid el domingo último, con •
tinúa en estado relativamente satisf^eíorio.
En uno de los salones del Ayuntamiento de Madrid
están expuestos los tres proy.ctos que aspiran al premio en el concurso abierto para las estatuas que han
de agregarse al dios Niiptuno en la hermo.sa fuente da
este nombre.
Esas estatup.8 serán de las «Nereidas,» y hay hasta
ahora presentados tres proyectos con los .siguientes
lemas: «Mar, Roma y B.»
En breve se reunirá el jurado que ha d*j dictaminar
acerca de estos proyectos.
Escribe Bl Correo:
«Sigue el país aficionado á los toros, divirtiéndose
como en los días más ti-anquilos.
Ayer hubo corrid<>.t) de toros en bastantes pueblos y
capitales, y muchos veraneantes de San Stibaslián,
apesar del calor del día, se abrasaron en Bayona por
ver una corrida más.
En la Plaza de Madrid vienen ocurriendo casi todo»
los domingos desfíracias que deben fijar la atención
de las autoridades.
Toros que no se atreven á matar los diestros más
experimentados, se los echan á los novilleros, y por
la presunción de que habrá cogida, sangre y escándalo, la gente concurre con especial gusto.
El domingo último quedaron los dos espadas fuera
de combate; y de no haber habido un valiente que
salió del tendido para suplirles, la corrida se habría
tenido que suspender.
Ayer hubo otras dos cogidas: la del Sordo y la de
Valentín, esta ú tima sumamente grave; siendo el
caso, que hasta los periódicos más entusiastas de la
bárbara fiesta nacional llaman la atención de las autoridades para que se tomen las debidas precauciones.»
La Revista de Prisiones publica en su último ni'imero interesantes artículos relativos á la Düirilmción de
la fuerza del penal de falladolid, qu« se suprime; á la
Reforma general de las plantillas de Cárceles, y á la Atemoría de D.^ Concepción. Arenal.
Respecto al primer problema, trata el periódico profesional, con gran competencia y conocimiento de la
doctrina y legislación vigente, la conveniencia de
destinar á la Prisión celular de Madrid á los sentenciados á presidio correccional por las Audiencias de
Madrid, Avila, Segovia y Toledo, on conformidad á lo
dispuesto en el Código penal y en la ley de construcción de edificio penitenciario, y según so huela desde
que se inauguró el establecimwnto hasta 180O.
Las consideraciones que se hacen en el arttcuín relativo á la reforma de cárceles son atinadas, y el autor demuestra cabal conocimiento do la iiuiteria; y on
el que dedica á la memoria de 1)." Concepción Arenal
hace justicia á las singulares aptitudes, al profundo
talento y á la fecunda labor de la insi:íj:i.ie pe¡is,i(íora.
Tanto en estos como en otro.s trabiijos qui} viene
publicando la mencionada Revista se evidencia la necesidad de reformar la legislación abigarrada y confusa que rige en el ramo de prisiones; de reorganizar
los servicios y de fomentar el trabajo en estos establecimientos, como elemento el más importante para
la reforma y enmienda de los delincuentes.
Anunciase para m u y en breve el ingreso en un
convento de esta corte de una dama grande, de España.
Procedente de Genova llegó ayer á Gibraltar el crucero argentino Puigredon, de 13,000 fcaballos de fuerza y 250 tripulantes.
•'
A la llegada se cruzaron con la plaza los acostumbrados saludos.
Ayer debió salir de Gibraltar para Vigo el almirante de li», escuadra inglesa.
Los periódicos de Asturias dan la noticia de que se
ha dfttpuesto que uno do los botes de vapor de la fragata Almansa que están al servicio del capitán general del departamento y comamlante general del arsenal del Ferrol, se denomine Villaam.il, como recuerdo
de la gloria do nuestro ilustre compatriota.
SUCESOS
kiEl tren expreso de Andalucía arrolló ayer ce ca
del depósito de máquinas de la estación del Mediodía
á un soldado del regimiento de Cuenca, llamado .fesús Díaz Gutiérrez, que result() con varias lesiones
graves en la cabeza yj)ierna derecha.
—En la Puerta del Sol un carruaje particular atropello anoche á un anciano, llamado Antonio López,
ocasionándole heridas graves en varias partes del
cuerpo.
—Por un balcón del piso principal de la casa n ú m e ro 77 de la calle de Embajadores se cayó anoche á la
calle un niño de tres años, llamado Enrique Blanco,
recibiendo graves contusiones y conmoción visceral.
—También por la caja de la escalera donde tiene
establecidas sus oficinas el periódico El Día so cayó
ayer un muchacho, llamado Daniel Trolio, pr.iduciéndose heridas tan graves, que hubo necssidad de
administrarle la Extremaunción.
—En el Hospital provincial ha ingresado esta tarde
un individuo, al cual el carriS que guiaba le atropello
en el paseo de Areneros, produciéndole algunas contusiones.
l i A ÉPOCA Martes 9 de Agosto de 1898.
i
las ocho do la mañana, no sólo se serviría al público,
sino que la misma compañía del ferrocarril ganaría
con la modiflcación, pues muchas familias de Andalucía y do Extremadura encontrarían ulicirates para
HiiBi.vA U de Afíosto.
veranear en Granada y Ronda, mientras que hoy naMí querifid director: No ob.-itiüiti-.) líi general /justificada quej;» rtiíl público contra ÍHS discrepanciaet en- die se atreve íi afrontar un viaje tan penoso.
Es de esperar que las circunstancias por que atratr<i Ion Uíríuóinotru!', pan-cn iiVt?rígiiarto que el calor
pasudt- li> i criiiitidí).
viesa la nación abrirán los ojos á las compañías ferroviarias, y que eu voz de perjudicarse entre si, los
Así in(Mixi>lico lü itnprudonciii que usted cómate.
administradores responsables buscarán medios de
rotíin íointj ft qiiB Iñ permítalas impresiones da mí
pro,v>:CÍrtdí) viiiji"! 11, -Unlia.
aumentar el tráfico en beneflcio del país productor y
iUonito entretenimiento van á resultar tales cartas de sus propios ingresos, que bien requieren una administración más inteligente que la actual.
para lo.H lectores de LA ÉPOCA! Las últimas epístolas
de osa clasn la» escribí hace exactamente cuarenta
La provincia de Malaga, por ejemplo, ha tenido
ano», con estilo corriente y natural, yr debieron cau- la desgracia do ver agotadas por la filoxera propiedasar Viiinda satisfdcción en el seno de mi familia.
des valiosas que han sido destruidas en pocos anos.
Los infelices labradores, sin acobardarse por esto,
i»twpués de cuarenta años pasados entre mil fatigas
han luchado, intentando cultivar primeurs para el
y desilusiones, emprendo este viaje con más cautela
y redeiión.
mercado de París, hortalizas y frutas tempranas que
Aunque tendré que prevenirme contra los calores de requieren un transporte rápido.
Quinientas pesetas la tonelada por transporte hasta
Septiembre y las f-iria» de Octubre, poco me preocupa
la cuestión de equipaje.
París, y seis á si-ite días entre salida y llegada son
bastantes para hacer que desfallezcan las mayores
Cornil lio tengo ropa, me llevaré un baiíl vacío,
y compraré lo conveniente en el camino. Así me re- voluntades y para ahogar teda iniciativa.
servoel <hilco placer, 6. mi regreso, de defraudar & la
Desde Cádiz á París, viajando por el «Sud express,»
Hacienda nacional, supremo goce de las personas que cuetta el billete 415 pasetas. Una persona ocupa en ua
se creen más inteligentes.
tren de lujo tanto ó m4s volumen que una tonelada
E-jtos viajes, para mí, se componen de tres partos: d^ mercancía, y como constantemente irían muchas
más toneladas <ie mefc«ncía 'que v¡aje;oí, resulta de
loH preparativos, al viaje y lo» resultado» del viaje.
Poiisaudo í»iir dentro de tres ó cuatro semanas, y á aquí que seria una gran ventaja para las Ctmpyñías
Un de que nada se me olvide, he heclio subir hoy mi y para el país productor organizar doi ó tres tenes
cy!<t;.-b iiSlftmi cuarto. Me encanta, al abrir los ojos semanales «Sad-expross,» exclusivamente para merPi>r l;i 111 iñana, lijarlos en el baúl, haciéadomft ya cancías: frutas, legumbres y pescado, que, saliendo
la üusíoíi dequ'' estoy de viaje, para advertir des- d-) Málaga, Cádiz y HuaJTa, reuniónd isu en S villa y
pné.squf' me eticuentro en mi casita confortable, sin
ÜóMoba, hiciesen el trayecto á Paiís en cincuenta
ninfíuria dí< las inoleíftias consabidas de las perogri- horas, lo que equivaldría á poner las fó tih s tierras de
nacíoties por las fondas nacionales é internacio- Andalucía á las puertas de París. Las 500 pesetas por
nales.?
tonelada, que son una tarifa imposible para siete días
tói rísto del equipaje me preocupa bastante masque de cumino, se pagarían con gusto para cincuenta homi baií : >H.'() d" maño, lío de manta», y sobre todo ras de tránsito. ¡Estos son los problemas que interemis iiilorja«, que acabo do encargar nuevas para evi- Sin al país!
tar de.><agradableM observaciones.
Coüfiderando poco apetecible el viaje por tierra á
Ou líú, eu la fonda de París de la capital de Kjpa- Gibraltir, proyecto hacerlo por mar, y ya voró cómo
iiii, me las ileijarori tiradas detrAs de la puerta, supo- me las arredilo. Un día ó dos si hay escala, y dos días
numfii equlvocadmiiente que pertenecían á. algiiu
y medio de Gibraltar á Ñapóles, ó sean cu total cuaconductor <i;' carros
tro ó cinc) días de navegación, para lo qu;i es indisKi contenido esencial ds mi saco de mano se compo- pensable la consabida alfoija que, si á la vuelta sirvo
ne- de dos cestas de mimbre, la primera de las cuales
para traer utensilios modernos á mi cocina, á la ida
contiene, adem&s de jabón, cepillos, etc., una gran es- ha de prestar otro servicio no monos práctico.
ponj 1, «in la cual no puwio vivir ni viajar. No Sfilo la
En Víirias clases de frutas no encuentro otras supecon.struc.'ióa de iacMta permit'» la circulación del
riores á las de mi propia producción, así es que en un
air", inipidioiido lii descomposición de la esponja, sino
lado do las alforjas irá un cesto bien repleto (sin cuiquií su forinn re incida facilita grandemente las opedado alguno, porque para caso de necesidad llevo la
TiH-ione-i iln ln to'UctU en los cuartitos pequeños de los clorodina), y en el otro lado se hai-á el cout rapeso con
coches-cama,
seis botellas de San Cristóbal extra y seis botellas de
L:i olr« cesta lleva las menudencias: saca-corchos,
Bouvier.
tüponetí, perfum», tinta de copiar, cinta de medir,
Medio vaso de San Crlstól)al, otro tanto do agua y
b'újula, alfileres, hilo, tijeras, botones, vela, clo^odimedio azucarillo constituyen el más delicioso refresne, periMarMí'ín-'t'jde potasa, bicarbonato, bramante, co en viaje. No debilita el estómago, y el Bouvier fréc.J :sde fósforos y boquillas para cigarros. A oscuras,
res extradry de Neuchatel-Suiza es el mejor champagde noche, !M/' siempre de esta manera encontrar lo que
ne, dado su costo, que con todos los cambios altos no
me hace f<tlta. La cuestión de botones es para mi tem- pasa de siete pesetas por botella grande.
peiiauoato de gran importancia y mitiga en cierto
Para no dar lugar á sospechas de que me voy á eniiio lo la fatalidad que me persigue con respecto á rala tretener yo solo con doce botellas de líquido, conviene
camisas. No he poiido jamás conseguir media docena
tener en cuenta que haré el viaje en compañía y baj')
de camisas con los ojales iguales, y para no perder
la dirección de la mia /tffUa—la, doncella esta vez
é>aila moiiieuto mi^ecuanimidad, triunfo de la estupi- quedará en casa, con el permiso de acompañarnos...
dez de los camiseros siempre que los ojales correspon- Con el pensamiento, si so siente animada, en un mapa
den uno ív otro, lo que amonudo no ocurre llevando de la guía de ferrocarriles.
una cüleccif'ui do liotone» de nácar de lodos tamaños.
En viajes internacionales resultan las aludidas donOjíiLíi pudiera ULÍO tiiunfar con tant* facilidad do las collas
una impedimenta, considerable. La mayor parto
niulaH artes del gremio de lavanderas, que destrozan
las veces no conocen más idioma que el andaluz, y
los f jales con alfller< s que se oxidan, planchan sin al- de
consiguiente, son incapaces de recoger las bolas y
iriir¡..!i iitiHS veces y otias con tanto, que no parece por
chismes
de sus congéneres sobre sus respectivos
sino que la prenda sale de manos de albaüil.
amos.
Ua-A de las ilusiones de mi vihje es la esperanza de
Como los libros de viajes aconsejan conocer lo esenpü<¡er encontrar camisas bien hechas.
cial de los idiomas del puís que uno proyecte visitar,
Kl 2!i de Aifosto debe salir el vapor de Gibraltar
por precaución he encargado á Fé diccionarios, grapara N'ápoletí. Qufda, pues, por resolver el problema
máticas |y manuales de conversación italiano espado co.tio llegaré fi Gibraltar.
ñoles.
El viiijii por tierra tiene en primer término el InLa miaflglia habla ya algo en el idioma del Dante,
coKvtuiiente del calor, y en segundo lugar el de las pero me suenan sus palabras á frases del Dúo de la
iniil<í.stias y gastos por'falta de enlaces de trene?.
Africana. Yo he aprendido hasta la fecha la frase non
Ivi li!s pHÍ.iiis dvinde se guardan las debidas onsl- ló parjo, que me propongo emplear á menudo como
deracioncs á los rayis pen^ítrnntes del sol, so procura principio de conversación.
liHCr <•! si<rvicio de trenes de viajeros de noche. Si el
Enfin,por esa lado estoy tranquilo con mi media
tren qu'^ sale de Sevilla á las nuevo de la mañana,
biblioteca, que tendrá su colocación en la alforja, una
arriistihiiih) al iiiffliz vicjoro por los campos ardien- vez consumidas las frutas. Así estará á mano en caso
tes del centro de Andalucía, para dejarle en Granada de apuro.
á ír,B (iclio y treinta y tres de la noche, saliera de SeComo complemento de mi equipaje, he empezado á
vllhifelas nueve de la noche llegando k Granada k
escoger en el estanco más próximo cigarros claros de
Impresiones da viaje.
Vn^itm
wtmMtmmmmmrmffs
í(IIWW||pttl
los de á 0,15 de peseta, que son los que exclusivamente fumo desde la subida ci usl do loa cambios. A.llá
en alta mar, con luna llena, cuando después de
comida opípara, medio soñoliento como las boas, deapida á la pura atmósfera <il perfume de los productos
da la Tabacalera, será probable que algún infeliz pasajero tenga que aguantar algún discurso sobre el
cultivo de la animática hierba.
Vengo observandc» qu» en España se d sconoce
completamente todo lo que se retl.re á la industda del
tabaco. Conozco regiones eii Europa en las cuales en
invierno el termómetro desciende á 20* bajo cero, y
donde se cultiva tabaco, se han construido gran numero de fábricas, y entre agricultores y fabricantes
se ganan anualmente muchos milloaes!
Sostengo que en toda España, menos en las cúspides cubieitrt» de eterna nieve, so podía producir tabaco que Europa entera compraría á peso de oro.—Cuando leo en los periódicos que la Tabacalera ó tal ó cual
D.putación han hecho Ó van á hacer ensayos de plantaciones, y por otro lado quo los Carabineros, en llanos y en sierras, han tenido que arrancar 300.000 matas de tabaco, me sublevo.
Hay que esperar que las circunstancias concluyan
por despejar el sentido común de ciertas gentes, y que
alfluterminará p()r completo la época en que U)s intereses generales del país se postergaban á ios intereses particulares.—itucho, muchísimo queda por hacer eu esa dirf'CCión; pero queriendo, como querrán
los hombres de bien, todo se andará, to.io (<e r.-ctiflcará y cada uno queda; á en el sitio que le corresponderá por sus mereciiiiieutos ó por su iiiuiilidad.
Y basta por hoy de impresiones, que irán siguiendo
á medida que vaya haciendo ei viaje de recreo. Aiit>*s
he de emprender varias correrías al iuterior del ¡idis,
y como en éstas lo principal es la vida de posadas, con
mucho polvo y muchas moscas, me abstengo de
más relatos, y únicamente lo referiré mi sorpresa en
el comedor de una fonda en Extremadura, donde el
barbero afeitaba á sus clientes mientras estábamos
almorzando en la misma habitación.
G. G.
Bl veraneo.
Han llegado recientemente á San Sebastián:
Procedentes de Madrid, el sonador del reino y exalcaldo de dicha villa, Sr. Sánchez de Toca, con su familia; el diplomático y literato Sr. Multedo, y los soñores de Hurtado de Amézaga (D. Juan).
De Barcelbna, los Sres. de Arnús.
Da París, la señora viuda de Rute.
Y do Cestona, el barón de Vallvert.
Han salido de Madrid en estos días:
Para el Monasterio de Piedra, los Embajadores de
Alemania y de Austria-Hungría.
Para Betelu, el ex-ministro Sr. Ángulo.
Para Fuentorrabía, los marqueses de Liédena.
Para Segovia, el marqués dn la Pezuela.
Y para Santander, Gijón y Vigo el diputado á Cortes Sr. La Bastida.
La duquesa viuda de Bailón so ha trasladado desde
París á Bagnéres de Luclion.
El ex-director general de Correos señor marqués de
Lema so encuentra en Arechavaleta.
El balneario do Zuazo eaiá muy concurrido.
Allí se hallaban hace pocos días, entre otros muchos bañistas, la marquesa de Mauzanedo y su hija
menor, el duque de Huéscir, los barones de Molinet,
el marqués de Nájera, el do Jerez de los Caballeros, el
presidente de la Audiencia de Logroño, D. Félix de
Prats, y el ex-diputado á Cortes por J iéu D. José do
Bonilla con su señora é hijos.
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Córdoba, t)28,()0.-Coruña, 9.478,70.-Cuenca, 858,32.
I
LOS TIROLESES
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189 8
C a p í t u l o s q u e s e l e o l v i d a r o n á C e r v a n t e s , ensayo de imitación de un libro inimitabie. Obra postuma do! malofírado escritor ecuatoriano D. Juan Montalvo.
U n m u n d o d e s c o n o c i d o ó d o s a ñ o s e n l a L u n a , novela escrita por Fierro de 8eloneñ, con ilustraciones de Gerlier.|
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KLCIBaO (ÁLAVA)
FldftBtt «1 todos loi hotelM y raat&nr&oti.
iiWiftiliWtiiiiirifíiiwiBMOTimiiiwm^
Núm. I.'l
Un ladrón incorregible comparece ante el tribunal,
defendido por un abogado muy joven.
Kl defensor hace esfuerzos sobrehumanos para que
impongan la menor pena posible al acusado.
Cuando el presidento pregunta á éste si tiene algo
que alegar en su defensa, contesta el galopín con mucha frescura:
—Pido al tribunal que sea indulgente, porque mi
abogado es un principiante que no entiende nada del
oficio do ladrón.
• •
Un infeliz poeta entra tímidamente en el despacho
del director de un periódico diario.
—Vengo á traer unos versos que quisiera...
El director, sin dejar de escribir:
—Está bien. Tenga la bondad de arrojarlos usted
mismo al cesto. Ahora estoy muy ocupado.
SBCCIÓN RELIGIOSA
Dí.si 10.—Mlórcoles.-San Lorenzo, diácono y mártir; Santa Paula, virgen y mártir, y Nuestra Señora
del Sagrario.
San Lorenzo.—(Cuarenta Horas.)—Fiesta k su titular; á las siete se expondrá S. D. M., con Misa cantada; á las diez, Misa solemne, en la que predicará el
Sr. Bucos, y por la tarde, á las cinco, Preces y Reserva.
San Millán.—Continúa la novena á Nuestra Señora del Tránsito.
Visita de la Corte de J/a^-ía.-Nuestra Señora del
Sagrario en San Ginés ó de la Vida en Santiago.
Espectáculos para mañana.
Teatro-Jardín del Buen Retiro.—Función 13 de
abono.—Segunda serie.—A las 9.-Zanetto (estreno).
- Intermedios en el jardín por la banda del Hospicio.
Entrada, una peseta.
'8 «atro d« Maravillaa.-A las 8 3[4.—Coro de señoras.—A las 9 3|4.—Los aparecidos.—A las 11.—Las
(1(1 Farandul (estreno).—A las 12.-La chiquita de
Nfijera.
«iraii f'lreo de Warinh.—A las 9 de la noche.—
Compañía internacional gimnástica, acrobática y
ecuestre.
Primera presentación do Joh-Kitchise y de KiangHoc— La pantomima excéntrica cómica titulada cPrimeroy segundo piso,» ter¡n;n¡-.ndo con el Wargraph,
.illiiriii novedad del día.
Tivotntlft d» loi EDJM 1« K. 0. BwBia&M.
lllítrUd, 11 iBpUckle.
Por la noche, muchas veces, esta banda brillante
invadía alguno de los casinos de la playa; pero, por
lo general, bailaban en sus casas ó representaban
OCTAVIO FEUILLET
comedias, tan pronto en los salones de una de aquellas damas, como en los hermosos jardines iluminados á la veneciana.
La galantería más refinada se mezclaba en todas
estas diversiones; así es que aquella vertiginosa vida
era muy agradable para todo el mundo, excepto
para la señora Fitz-Gerald, que la seguía con alguna
lliibií) fn sil despedida un acento tan grave y tan fatiga, y para el señor de Rías, que en absoluto no
lá seguía.
profundo, (iiie la .¡oven comprendió en seguida su
Vivía éste en una casa de campo cerca de París,
íijjiiírn'iii'ióii termioaute. ¡Estaban separados!
según tenía por costumbní, y no hacía á la quinta
Mfüi^i hizo nn gesto de desesperación, y se incorde los Rosales más que algunas cortas y raras visiporó ,i medias, próxima á levantarse, á llamar eon
un grito ;i ÍHJIICI (¡ue se alejaba, á aquel que tanto ha- tas, que tenían por objeto evitar las murmuraciones
del público, y sobre lodo de los criados.
bi.i ainado, y ()ue am.iba aiui sobre todas las cosas...
Dí'S|>iiés. atacada de una aspeeie de convulsión do
No había vuelto á haber entre él y su mujer ni la
dolor, hundió su cabeza en las almohadas, que sofomás pequeña sombra de una explicación; pero lo
e.'iroii sus sollozos.
que era entonces su vida, fácilmeiite se adivina. Era
ese miserable estado de hostilidad sorda y permaX
nente en que están tantos matrimonios, en cuyo hogar no puede ninguno do ellos decir una silaba que
Dos ai'io.s ti«b¡;in pasado.
inmediatamente no sea contradicha por el otro, y en
Di'sde principios de .Itilio, la señora de Rías estaba iiislaladií en Dcaiiviile por toda la estación, con que cada palabra no envuelva más que una pérfida
alusión, un amargo reproche ó un oculto rencor.
su madre v con sos hijos.
La señora do Hias vt ía eon pla'!er desaparecer en
Habitaban la quinta de los Rosales, cuyo jardín se
el horizonte la fisonomía sombría c irónica de su maabría sobre la terraza entre el camino y la playa, de
rido. Eu cambio, la señora de Fitz Gerald hacía tomodo que tenían á su alrededor un gran número de
dos los esfuerzos posibles, agotaba todos sus recuramigos y amigas de París, entre las que se contaban
sos vanamente para retener junto á ella á un yerno
las señoras de (alelíes y de Estreny.
La señora de Cbelles, con quien María de Rías que, ciertamente, no había realizado todas sus esperanzas, pero por el cual conservaba cierto cariño;
hai'ia vuelto á reanudar sus antiguas relaciones, esno dando, por otra parte, gran importancia á sus
taba en Vlilers, y la duquesa en Hougalde.
galantes calaveradas.
Las tres primas estaban casi siempre juntas, y
—Lo que me extraña de mi yerno—deelá confiformaban el niicleo de una coquetería elegante y esdencialmente á la marquesa de "Veylle, que estaba
cogida, ijue no se dejaba seguramente invadir por
también temporalmente en Trourille:—\() que me
la melancolía.
Algunos de sus cnmpafiero.s de baile en el invier- extraña de mi yerno, repito, es su actitud respecto
de mi hija. Que la engañe... pase...; que c'orra deno contribuían, por decirlo asi, á animar el paisaje.
trás de mujeres galantes... puede también perdoEstaban éstos encargado» de inventar y de poner
narse... (y á propósito; parece que lia tcriiiiriado
eu t'seena todos los diua alguna distracción nueva,
cou
esa comediaiita liamada Sylva... y ya veis cóiuo
ya en tierra, ya en agua. Paseos por el mar, partisin quererlo me he acordado al momenio de una de
díis d(í pesca, cabalgatas por el campo, comidas al
sus calaveradas). Pues bien: engañar, correr tras
airc! libre, y lodo, en ün, lo que se puede disfrutar
de mujeres galantes, eso se ve todos los dftis; pero
eu la estaciún veranie^.
me»
ÍMwMpMÚÉ^^
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No nos equivocamos cuando dijimos, no hace muchos diíis, que apesar de los buenos d'spos de! conde
de R,oni"iiOues y de los terminantes extremos del büudo piibiicíído al ef cto de reglamentar el peso del pan
yovitarcl fraude, el bando en cuestión quedaría incumplimentado, y que it-jos de beneficiar al piiblico,
le .sería muy perjudicial, pues daría margen para que
los tahoneros auineiitasen el precio del artículo sin
aumentar el tamaño.
Los hechos huu venido á darnos por completo la
raz^in, y toda la prensa reconoce lo difícil que e» resolver la intrincada cuestión del pan, señalando los
abusos que á diario se coiiieten á ciencia y paciencia
de lus tenientes do alcülde, que sólo se ocupan de
organizar v<M-benas y festejos.
En nuestro deseo de comprobar por nosotros mismo.-. Jos iibiLsos denunciados, esta mañana hemos recorrido, á primera hora, algunas tahonas, y en efecto, en la mayoría de ellas los panecillos tenían 200
gramos de peso y .-le vendían á 11 céntiinos al que lo
pedia do este tami.ño, resultando, por cousiguieate,
que el kilo cuesta 55 en vez de 50.
Los pí(necillü.s franceses se Viinden á 13 céntimos, y
ios punnderos se uiegun á pesarlo, alegando quo esta
clase de pan no puedo darte por kilos.
Además, en las tioudus de comestibles, caruocorías
y hasta cacharrerías, donde se expende petróleo, hay
pun>tos de pan, apesar de prohibirlo tarminautemente el bando.
Los repartidores á domicilio carecen do licencia,
y muy contados son los quo han depositado las 50 pesetas para responder de las multas (saben quo no se
las han do imponer).
Un panadero nos decía esta mañana:
«Es inútil que ustedes, ¡os de los periódicos, se empeñen en hacernos la guerra, porque nada conseguirán y el pan so venderá al precio que nosotros decidamos, porque sería una tri-iste gracia que no fuéramos
á ganar lo que necesitamos para la vida y que lo diera mos sólo por el coste.
La Industria panadera acarrea muchos gastos y
muchas molestias; la vida es hoy muy cara y hay
que ganar para comer.
Además—siguió diciendo, —ni el alcalde-presidente ni los tenientes de alcalde podrán nunca con nosotros, porqaas(jmos un grerai;) muy numeroso y muy
importante en día de elecciones; es más, tengo la
seguridad que si el conde de Romanones se empeñara
en perseguirnos y entregarnos á los tribunales, lográramos hasta que deje la alcaldía, y si no al tiempo, ustedes lo han do ver.
V de los tenientes de alcalde nada temamos.»
"••».*4> '^ V-rtdíK-»-»
Presidencia del Consejo de ministros.—Real decreto,
fecha (Ji ayer, nombrando vocal del consejo do adrninistnvciód d'í la Caja de Inútiles y Huérfanos de la
guerra de la IMuín-sulüy Uitramar al intendente de
ejército, retiñido, 1). Auguro Muiíoz y Madrid.
Ministerio de Estado. -RMII decreto," fecha 1, ascendiendo á D. Pompeyo Díaz Cossío á cónsul de prime-
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Total peseta»
MADRID
La d« hoy contiene las siguiente» resolución»!:
dioma lnKlÁ8. El Revdo. A.
Byan, cura [ árroco áe Brent
ford, recibo un número limittido de a>utTi nos quede sien hprt-nd^T este idioma. T. Be ston Koad,
Brentford, Loulnf. \V.
FOLLETÍN DE «LA ÉPOCA»
—Gerona, .564. — Granada, 6.357,54. — Quadalajara,
535,25.—Hiielva, 02,20.—Huesca, 80,01.
Jaén, t)566,0L-León, 140,30. -Lérida, 60,82.-LoI,A BSC ; B L A C B N T R A L D E AtiTBS Y OFICIOS
I.a51,ñ5. Lugo, 2.340,80.—Málaga, 1.961,46.
Fomento.—RíYcü decreto, ftícha de ayer, aprobando groño,
—Murcia, 83,lJ.—Navarra, 2.682,92—Oronse, 1.709,21
el proyecto de obras formulado por el arquitecto don
-Oviedo, 1.509,93. - P a l ó n ci a, 52. - Pontevedra,
Ricardo Velázquez Bosco, para instalar ¡a Escuela
3.4a),04.-Salamanca, 1.191,56.—Santander, 798,15.—
Central de Artes y Oficios en el edificio quo actualSegovia. 472.41. —Sevilla, 9.137,07. - Tarragona,
mente ocupa el Cüiegio nacional de Sordo-Mudos y
41,40.- Teruel, 1.264,45.-Toledo, 2.836,71.—Valencia,
do Ciego».
3.062,40.—Valladolid, 301,70.-Vizcaya, 419,55.-ZaCLASES PASIVAS DB ULTEAMAH.
mora, 247,97. -Zaragoza, 5.476,50.—Baleares, 1.167,7(5.
Ultramar.—R-Mil orden, focha 4, declarando extenTotal, « 5 . « 9 » . 9 « 5 , 9 5 .
siva la do 14 de Julio último al percibo de todos !•»
*
haberes de Clases pasivas, autorizado con cargo á la
Suma
anterior,
iO.!»Mliy.iai,4S
pesetas.
Caja de esto ministerio, y que aún no se hayan empezado á hacer efectivos, por no haberse recibido los
El salón del Heraldo de Madrid por lo recaudado en
ceses ó relaciones de altas correspondientes.
el mismo, según relación (lista núm. 17), 803.39.—
Una tertulia del cafó de Levante (recaudación de JuA M O E T I Z A C I Ó N D B B I L L E T E S HIPOTBOAHIOS D B C U B A .
67,25.—El habilitado de la dirección general de
- Otra, fecha de ayer, disponiendo que en el 31.* lio),
sorteo de amortizacii'in de lov billetes hipotecarios de la Guardia civil por donativos del cuerpo, 6.133,83.—
Kl cuerpo de Carabineros (donativos del mes antela isla do Cuba, emisión do 1890, que debe verificarse
rior), 7.249,23.
Cu 1.1 primera decena do Stiptiembro próximo, SO
aniorticon 2.900 títulos con las formalidades de cos- TUIMI iit^rritadn hasta hoy en
<>^l Itaiir» d« ExpaAa
lO.SM.S»»,!»
tumbre.
Idi-tti id. id. eu IUM provincial).
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9 (!<• AKOSto.
ra clase, y de.stinándole con esta categoría al consulado do España en Calcuta.
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Torrelii;;uiia, 1 noche.
EHpeciai ú la fonda, i tarde. BÍN|ieciiil de la fonda, 5 m.
Los pedidos de botellas para provincias al administrador del balneario eu el Molar ó Alcalá, líí dupl.", L°, Madrid, 1). E. Martín.
iBBIiMÍMW|jiliR¡i<iw
lo que no concibo es que, además de ofender de esa
manera á mi hija, la trate mal... Y el caso es que es
muy cariñoso para mi, muy simpático... porque
indudablemente, el señor de iiíus es muy agradable
cuando quiere...
—¡Va lo creo que es agradable cuando quiere!...
—murmuró la anciana marquesa.
-Pues bien; para /ni hija es extremadamente
brusco. No contento con ultrajarla noche y día cou
sus devaneos, cuando la ve la trata displicentemente... No negaréis que al hacer todo esto, un hombre
tan espiritual como mi yerno, es una cosa casi incomprensihle... ¿Qué es lo que quiere? ¿Quiere exasperarla basta el puulo de?... ¡Que la engañe tanto
corno le plazca; pero que, al menos, sea cariñoso
para ella!.. ¡Eso es lo elemental! 1).; no hacer esto,
mi hija querida acabará ¡)or perder i>i cabeza...; porque es hermosa, y está iodeada, en esta atmóst'eía
de adulación incesante, de tantos peligros... 'l\;ngo
absolutJ confianza en sus principios; ipero, después
de todo, no es de mármol! .. Apesar de sus errores
indisculpables, quiero mucho á mi yerno, y no me
consolaría nuiu;a de que le sucediese una desgracia...; piiro, verdaderamente, es muy ligero, muy
poco previsor.
-—¡lisia loco!—dijo la marquesa; —os digo que
está loco, y... no me habléis mas de él.
Los peligros que con el doble instinto de mujer y
de madre había previsto la señoi^i de Fitz-Gerald,
eran, por desgracia, justificados.
La señora de Rías li ibia llegado á aquella hora
fatal, que la experiencia de su marido Imbía adivinado. .So liaíiia cansado puro á poco <le .. :Í bulliciosas alegí^ias que habí;in embriagado su juventud. La
agitación mundana, los vestidos, el baile, las pci'|)etuas lieslas de su vida, no la bastaban ya. Su imaginación y su corazón exii^ían, solicüabau que añadiera á esta bulliciosa vida algo más nuevo, más
vivo y más interesante. Ya puede su|)onor el le.;tor
que no faltarían gentes á su alrededor dispuestas á
secundar aquellas iiiteiieiones.
No es raro que l^is excitaciones y las luchas de
la vanidad se unan á los movimientos de las pasiones, para dcteriniíiar la iireforencia de una mi.ji'r
hacia un hombre, lío los grupos de seres reunidos
por relaciones particulares de conveniencia, se en-
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MMMÍaiaHaipii
cuentra bastante frecuentemente algún personaje
que tiene el privilegio de atraer las miradas íémeninas, y cuya coiuiuisla no sea solamente un? salisfaccióij del corazón, sino también un triunfo de la vanidad y del orgullo.
Este distinguido lugar era el que disfrutaba, entre los conociilos de la señora de Rías, el vizconde
Roger de Poulís, que era pariente del duque de Estreny.
Era Roger de Pontis un joven en extremo simpático.
Después de haber disipado su fortuna entre bastidores y en las carreras de caballos, había sentado
plaza, á los veinticinco años, en un regimiento de
húsares, donde se dislinguió bien pronto por su valor y ganó lápídameiite el grado de subteniente.
Luego, y á consecuencia de una herencia inesperada, habííi abandonado la carrera, volviendo á la
vida civil. Sus locuras, su valor, sus aventuras, tanto guerreras corno amorosas, le servían de iiiiiy especial recomendación para el logro de sus proyectos
galantes.
L^is jóvenes pudiera decirse que le amaban, más
qu«; por sus cualidades, por sus vicios. Reunía, ade
más, pnra ellas la rara cualidad de gastar sin medida y bajo todas las formas que puede afectar una
geiiei'osidiid deseitlrtínada.
Hacía cou la mayor naturalidad doce leguas á caballo para comprar una madeja de seda, que luego
arrojaba á los (lics do su amaiia, en un rasgo delicioso de su expansivo y arnbalador carácter.
Lus ííiintaba romanees, daba lecciones de equitación, organizaba charadas, partidas de campo,
lunchs, fuegos artificiales, y, en una palabra, cuanl;is f.ii lasÍHs podían deslumhrar sus caprichosas imaginaciones.
Estaba por eomplelo á su disposición para todo
lo que fuera a,M'adiirlas; (!ra listo y ágil como un
|iaje de las aniigua.s y romáriticas leyendas, y .solapado y ardiente como un tigre: las subyugada con
los extraños iuegos que cliispeaban en sus ojos en
su.'' raptos apasionados.
Hijo estas apariencias de amable loco, Roger, vizcoiid': de Ponlis, ei"t enlnsiasla por el bello sexo, y
lio reconoi'ia ninguna clase de drbcres, por sagrados que fueran, que le hicierau desistir de un pro-
fijñi
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pósito aventurado. Era muy filio, muy espiritual;
pero también sumamente peligroso.
Enamorado de la señora de Rías, la había juzgado
en seguida, y con gran seguridad, al prinaer golpe de
vista. Había comprendido que un Witóirte sólidamente cimentado cou sanos preceptos ÍBorales, no
podía conquistarse por i^na de esas 8br{liresas ijue el
azar proporciona.
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Tenía, pues, que proceder, para la rj?allzaci6n de
sus maliciosos designios, por sabias; maniobras, comenzando, al parec(5r, por ocuparsSe mtiy poco de
ella al principio de su conocimiento, y haciendo ostensiblemente la corte á sus dos primas.
La de Rías, que saiiia que el vizcQOde era la flor
de la n,ás brillante juventud, concluyó por sentirse
contrariada por aquella iluiifereiicia que hacia ella
afectaba, por lo cual, tratando de vengarse, lo devolvía desdén por desdén,
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Este era el primtír resultado s^sfactorio que,
como conocedor profundo de las pas^nes mundanas,
el vizconde creía haber obtenido. ¿
Insidiosamente la hizo comprendef la causa de la
cortés frialdad con que la distinguía cutre tantas bellas á las cuales aparecía rendido.
Era debida al respeto que le inspiraba; no debía
hacer nunca la cort<^ á una mujer tíomo ella. r,Y por
qué? Porque la consideraba por encima de lodfis estas galanterías vulgares... y además, ¿era /jreei.so
decirlo todo? Su hernjosura incomparhtle, ati gr.tcia
elegante, su alma genei-osa reílejaba en la piL^-eza de
aquellos ojos que eneerraban un Inagotable manantial de celi sliales miradas, le infundían un temor
que no podía expücarse. ¡Le causaba miedo! Seria
esto extravagante, una verdadera aberración de su
espíritu; pei-o así era, sin embargo,
lina mujer como ella no podía inspirar más que
una de esas pasiones profundas como el Océano, seria y eterna; eu una palabra: una pasión que pi-ometia más surrimieiitos que dichas, y el señor de Pontis
había dudado siempre aventurarse en un sentimiento de este género, precisamente porqué sabia el teriibie imperio que adquirirla sobre \ú vida. ¡Quizá
estuviera equivocado, porque un sentimiento tal selíj, si» duda alguna, el término de aquella vida disipada de que einpiz.iba á uvergo'nzarse! Sería su reliabititacióü y su salvación...; pero... itenía miedo!