Estudio: “La protección y defensa de los derechos de la infancia en Internet”. Principales conclusiones Internet es un espacio de aprendizaje integral donde se debe de saber navegar de una manera crítica entre la sobreabundancia de datos e informaciones que han sido originados con distintos objetivos comunicativos. La forma de aprender y desarrollarse socialmente está marcada por este nuevo entorno y la naturaleza del ciberespacio como una red fácilmente accesible desde cualquier punto de enlace así como las infinitas posibilidades de comunicación interpersonal plantea nuevos interrogantes y desafíos para la configuración de la sociedad del siglo XXI. Los niños y jóvenes tienen la capacidad de ser productores de su propio contenidos y distribuirlo globalmente, lo que puede conllevar problemas en cuanto al derecho al honor y a la intimidad del menor al exponer información sobre sí mismo públicamente, pero también pueden incurrir en faltas al publicar contenidos que puedan estar sujetos a derechos de propiedad, por ejemplo. Es importante tener en cuenta la perspectiva Internet + dispositivos de acceso, ya que cuando hablamos del uso de Internet, no sólo nos referimos al acceso por medio del ordenador personal, sino también a través de otros dispositivos como los teléfonos móviles (hacer una foto o grabar un vídeo para distribuirlo en internet es cuestión de segundos), y las consolas de videojuegos, ampliamente utilizados por los niños en un mercado que, además, prevé una gran expansión en los próximos años. Adicionalmente, la evolución de Internet (la llamada “Web 2.0” ) potencia cada vez más las posibilidades que ofrece la Red para la creación colaborativa de aplicaciones online y se apoya además en servicios de publicación colectiva de fotografías (Pikasa o Flickr), vídeos (Youtube) y textos (Blogs y wikis) que son gratuitos y sencillos de utilizar, así como los servicios de mensajería instantánea con espacios para publicar fotos, música y textos en páginas web interactivas con posibilidad de comentarios. 1 Potenciales riesgos en el uso de Internet por parte de los niños Contenidos: hay que distinguir entre los contenidos ilegales, que son aquéllos que están prohibidos por la legislación vigente y contenidos nocivos, que son aquéllos que están permitidos, son legales, pero no son recomendables para niños y adolescentes por entrañar un riesgo para su desarrollo integral. Las fuentes de acceso a contenidos nocivos pueden llegar por distintas vías: webs estáticas, ventanas emergentes de publicidad intrusiva, spam por correo electrónico, spyware , etc. Mientras que los contenidos ilegales cuentan con un cauce de control estable, cabe el riesgo de encontrarse con los segundos de forma voluntaria o involuntaria. Comunicación: el gran potencial de socialización, interactividad y aprendizaje cooperativo entraña a su vez un riesgo en la posibilidad de que haya adultos que , apoyados en el anonimato, contacten con menores para obtener información personal, teniendo también en cuenta el riesgo que supone que los menores compartan su intimidad a través de las webcam y teléfonos con cámara integrada, generando un contenido que puede ser grabado sin su consentimiento y distribuido en otras redes o bien que se utilicen para agredir a otros menores, como ha ocurrido con los vídeos de bullying. Estrategias comerciales: desde una perspectiva comercial, Internet une marketing y venta final con gran atracción y potencial para la venta de productos y servicios. En el caso de los menores existe un riesgo de que éstos sean abordados con publicidad no deseada y nociva para su edad (spam, pop-ups) y de que, además, incurran en compras de productos no adecuados o estafas (software , spyware..). Adicción psicológica: el tiempo dedicado por los menores a Internet se ve incrementado a medida que se van haciendo mayores. Si ese tiempo no es controlado con moderación, pueden incurrir en situaciones de adicción como ludopatías de juegos en Red, apuestas electrónicas, adicción a la descarga de música, a la compra de productos y servicios, etc. 2 Principales recomendaciones del Estudio a las familias Comunícate con tus hijos, ayúdales a comprender las diferencias existentes entre la realidad y los temas de ficción que nos llegan a través de los medios (Internet, videojuegos, películas, etc) cuyos contenidos tan sólo incluyen una representación virtual de la realidad, pero nunca la realidad misma. Plantea los elementos positivos de la Red en el campo del conocimiento, a comunicación y el entretenimiento, pero también los aspectos negativos tales como la facilidad de ocultar la personalidad y actuar con impunidad. Negocia con tus hijos el tiempo de uso del ordenador así como los servicios que desean obtener de él. Enséñales a hacer un uso racional de las nuevas tecnologías e intenta que el uso de las mimas no les aparten del tiempo libre y de las actividades y juegos al aire libre. Adviérteles sobre la poca fiabilidad de ciertas informaciones publicadas en la Red, ya que cualquiera puede introducir datos, sin que estos pasen por ningún filtro que garantice su autenticidad o rigor. Instala los ordenadores o aparatos audiovisuales fijos donde puedas controlar su tiempo y franjas de uso; en el caso de los dispositivos portátiles, esta vigilancia es aún más necesaria. Enséñales que comunicarse a través de Internet o el teléfono con una persona cuya identidad desconoce supone tanto como hablar con un extraño en plena calle. Descubre los riesgos que entrañan facilitar datos personales a desconocidos, no sólo para los menores, sino para la propia seguridad de la familia (como por ejemplo nombres, direcciones, tarjetas de crédito, cuentas bancarias, fotos personales, lugares de trabajo, asociaciones, etc). Adviérteles sobre los peligros de encuentros con desconocidos, comprueba el uso de los teléfonos móviles y presta atención a las conversaciones telefónicas. Promueve el uso de los limitadores de contenidos y filtros para realizar una selección de páginas web, foros y chats cuyos temas puedan ser lesivos. Estos limitadores no sólo pueden ayudar a bloquear sitios peligrosos, sino también a restringir descargas y a limitar el tiempo de navegación. También es conveniente visitar las páginas que visitan para conocer sus contenidos y los riesgos que su uso continuado puedan suponer. Presta atención al uso de las webcams y adviérteles de la posible vulneración de los derechos al honor, la intimidad y a la propia imagen por el mal uso de esos contenidos por parte de terceros. 3 Anímales a comunicar cualquier contenido detectado en la Red que pueda ser percibido por ellos como molesto o incómodo por su lenguaje o contenido. Recomiéndales que nunca faciliten a nadie su password, ni siquiera a los amigos más íntimos. Asimila el argot con el que los menores se comunican a través de los chats y foros en Internet, por su peculiaridad (en ocasiones se utilizan siglas )y y por el empobrecimiento del lenguaje que supone para su aprendizaje. Infórmate sobre los juegos de contenido violento o inadecuado que los menores puedan descargarse de la Red y que pueden estar almacenados en la memoria del ordenador o en cualquier dispositivo portátil. Impide que los menores introduzcan claves en el ordenador que eviten que la familia pueda conocer los contenidos almacenados y las páginas visitadas. Documento elaborado por el Departamento de Responsabilidad Corporativa de ONO sobre el Estudio realizado por UNICEF España en colaboración con las Universidades Autónoma y Carlos III de Madrid. 4