La Fe Y El Halloween Nombre: Leidy Johana Alzate Sandoval

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La Fe Y El Halloween
Nombre:
Leidy Johana Alzate Sandoval
Grado:
11
Materia:
Orientación Espiritual
Profesor:
Virgilio Murillo
Colegio:
Liceo Mixto La Milagrosa
Santiago de Cali, 01 de octubre de 2013
La Fe
Para la mayoría la fe es expresión de inmadurez, es alinearte, infantil, y resultado
de una expresión poco realista e incompatible con la ciencia. A diferencia de esta
creencia se tiene la contraparte que dice que la fe no comienza en el área
religiosa, sino que es una dimensión permanente que hace posible la vida y el
progreso de los humanos y además lejos de ser irracional exige el pensamiento y
lo llama a su verdad. La fe es la confianza original del hombre en la vida, sin esta
confianza no seriamos capaces de dar cualquier paso, además de que nos permite
comunicación ya que nos abre al otro a lo que tiene de indisponible. La única
manera de establecer relaciones con alguien, un hombre, o un Dios si lo hubiera,
es mediante la confianza y la aceptación mutua.
En este apartado nos hace referencia a que sería inhumano que el ser humano
tuviera en su totalidad fe en el mismo ya que es limitado y finito y resulta
contradictorio apoyarse absolutamente en lo limitado, en este sentido cabe decir
que solo Dios es digno de fe. La fe se convierte así en una afirmación permanente
de la voluntad de ser y de vivir.
La fe no se trata de un asunto cualquiera ya que es lo que más puede interesar al
hombre y que este desea alcanzar, como lo es el encuentro con Dios, credibilidad
por lo tanto es uno de los mayores enemigos de la fe ya que un crédulo es quien
elimina el pensamiento de la fe y acepta lo que se le dice sin juicio crítico. La fe se
encuentra ante un difícil equilibrio entre el racionalismo, que limita la capacidad de
lo humano a la pura comprobación empírica y termina desembocando en el
ateísmo y la credulidad.
La fe religiosa, antes que un conocimiento de verdades que no se ven, hay que
entenderla como un compromiso del hombre con la única verdad, el Dios vivo que
nos sale al encuentro. Este encuentro no excluye el conocimiento y la tradición
doctrinal sino que lo integra. Entendida así la fe cristiana es una experiencia y una
vida, un participar de la vida del Dios que se nos da.
La fe es un encuentro personal con Dios. Pero Dios es un misterio por lo que
nunca deja al hombre plenamente satisfecho lo que psicológicamente la fe toma la
forma de una búsqueda constante del que nunca alcanza del todo el objeto de su
búsqueda. Con la fe sucede lo mismo que con amistad, cuando quieres apoderarte
del amigo para estar más seguro de él, manifiestas tu desconfianza y destruyes la
amistad.
De acuerdo a los temas propuestos en la lectura de la fe, deduzco que la fe y el
conocimiento no son opuestos y deben de ir de la mano en el camino del hombre.
El creer en un Dios es por naturaleza un hecho que el hombre debe vivir, ya que
de creer en sí mismo se estaría llevando la creencia a algo finito y con poco
fundamento.
A su vez tenemos que la fe puede causar cuestionamientos y conflictos
psicológicos, ya que uno siempre quiere una manifestación de lo que cree, pero de
ser un verdadero creyente este conflicto puede quedar en segundo término.
Tenemos también circunstancias que pueden afectar el equilibrio de la fe en el ser
humano como lo son los antes nombrados Credulidad, racionalismo y credibilidad,
los cuales pueden presentarse en la naturaleza humana ante ciertas circunstancias.
Por ultimo puedo decir que se tienen suficientes argumentos para deducir que la fe
cristiana es una forma de vida y un crecimiento para el ser humano en todos los
ámbitos de la vida.
El Halloween
La celebración llamada Halloween es el día más satánico en el calendario pagano.
Ningún cristiano debe participar en la celebración de las actividades llevadas a
cabo ese día.
Durante la celebración de Halloween, los niños se visten de brujas, duendes,
fantasmas, pequeños demonios, y adivinos. Todos estos son representantes del
reino de las tinieblas. Los juegos jugados durante Halloween promueven miedo en
los niños y se basan en casas tenebrosas llenas de telas de araña, sangre,
esqueletos, gatos negros, murciélagos, y cuartos oscuros. Pero la celebración no
es completada hasta que no aparece la gitana con su bola de cristal para decir la
suerte de los participantes.
Satanás ha ganado la aprobación para la celebración de esta fiesta haciéndola una
"tradición". Una vez algo se convierte en una tradición, las generaciones futuras no
cuestionan los orígenes, sino que siguen la celebración simplemente porque es
"parte de la tradición". (Marcos 7:13)
Los satanistas celebran la noche de Halloween como el día más "santo" en su
calendario, donde se insta a las sectas satánicas a ofrecer sacrificios humanos y
animales al demonio (¡lo que se desea es sangre!).
Las primeras celebraciones de Halloween nunca fueron llevadas a cabo por la
iglesia, sino por los sacerdotes de una orden llamada Druida. La celebración de
Halloween se hacía en honor a Samhain, el "señor de la muerte", y sus demonios,
cuyo festival caía el 1 de noviembre.
Como cristianos, nosotros tenemos la responsabilidad de no permitir a nuestros
niños que sean expuestos a una celebración, que si bien tiene la intención primaria
de honrar a los muertos, es también usada por grupos paganos para celebrar sus
ritos satánicos. Lo que puede parecer a nuestros niños como juegos inofensivos
pueden convertirse en grandes casos de trasferencias de espíritus que estoy
seguro usted no desea que su hijo traiga a su casa. Esa noche hay más espíritus
inmundos
en
los
aires
que
ningún
otro
día
del
calendario.
Esta celebración introduce a los niños a involucrase en ritos que en el mejor de los
casos no son cristianos y que en definitiva no le dan la gloria a Dios. Cuando a los
niños se les enseña que está bien jugar con la oscuridad, con esqueletos,
máscaras tenebrosas, gatos negros, sangre, brujería, adivinación, etc., también se
le introduce al virtual envolvimiento con ritos ocultistas en el futuro. Cuando las
cosas de Satanás parecen normales para los niños, ¿Qué esperanza tenemos de
que en el futuro estos niños puedan discernir apropiadamente entre el bien y el
mal? Es ese pequeño zorro que puede echar a perder la vida espiritual de nuestros
hijos al ser introducidos a prácticas ocultistas. Como cristianos debemos
concientizar a otros que quizás ignoran a lo que se están exponiendo al celebrar la
tradición de Halloween.
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