COMPENDIO DE DERECHO PENAL PARTE ESPECIAL José María Luzón Cuesta Ex Teniente Fiscal del Tribunal Supremo Apéndice de actualización a la 18ª edición de 2011 Conforme a la Ley Orgánica 7/2012, de 27 de diciembre, de los Temas 39 (arts. 305, 305 bis, 306, 307, 307 bis, 307 ter, 308, 309, 310 bis y 311), 44 (art. 398), 46 (art. 433 bis) y 59 (arts. 627 y 628) actualizacion 2013.indd 1 09/04/2013 16:50:57 TEMA 39. Desde la página 219 a la 228 el contenido se actualiza. Se transcribe en las páginas siguientes el tema completo con las actualizaciones incorporadas. TEMA 44. Pág. 300, línea 6 intercalar entre por y funcionario, autoridad o, quedando la frase como sigue: Falsificación cometida por autoridad o funcionario público. Página 300. Desde “Con...... “ hasta “... falsa,”, se sustituye por el siguiente párrafo: Conforme a la modificación restrictiva de su aplicación, en este artículo, al que se remite el art. 399, introducida por Ley O. 7/2012, de 27-12, será castigado con pena de suspensión “La autoridad o funcionario público que librare certificación falsa con escasa trascendencia en el tráfico jurídico”, añadiendo, en un segundo apartado, que “Este precepto no será aplicable a los certificados relativos a la Seguridad Social y a la Hacienda Pública”. TEMA 46. Pág. 327, línea 19, despues de ...anterior, sustituyendo el punto por coma, añadir: , y en el art. 433 bis, introducido por la Ley O. 7/2012, de 2712. Pág. 327, después de la última línea, añadir: b) Con la finalidad, según el Preámbulo de la cit. Ley O. 7/2012, de “dotar de la máxima transparencia al sector público y garantizar la confianza en la veracidad de la información que refleja la situación económica de las administraciones y entidades públicas”, en dicho art. 433 bis se castiga: en el apartado 1, con pena de inhabilitación especial para empleo o cargo público, a “La autoridad o funcionario público que, de forma idónea para causar un perjuicio económico a la entidad pública de la que dependa, y fuera de los supuestos previstos en el artículo 390, falseare su contabilidad, actualizacion 2013.indd 2 09/04/2013 16:51:08 los documentos que deban reflejar su situación económica o la información contenida en los mismos”; en el apartado 2, con las mismas penas, a la autoridad o funcionario público que, de igual forma (pero sin hacer referencia al art. 390) “facilite a terceros información mendaz relativa a la situación económica de la misma o alguno de los documentos o informaciones a que se refiere el apartado anterior”; y en el apartado 3, con penas de prisión, inhabilitación especial para empleo o cargo público y multa, “Si se llegare a causar el perjuicio económico a la entidad”. Pág. 328, línea 1, donde dice b) debe decir c) TEMA 59. Pág. 460-461. Se suprimen las cinco últimas líneas de la pág. 460 y las cinco primeras de la 461. Se hace constar que los arts. 627 y 628 fueron derogados por Ley O. 7/2012, de 27-12. actualizacion 2013.indd 3 09/04/2013 16:51:08 TEMA 39 Delitos contra la Hacienda Pública y contra la Seguridad Social. Delitos contra los derechos de los trabajadores. Delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros DELITOS CONTRA LA HACIENDA PÚBLICA Y CONTRA LA SEGURIDAD SOCIAL Constituyen estos delitos el contenido del Título XIV del Libro II, arts. 305 al 310 bis, cuya base se encuentra en la última reforma sufrida por el Código anterior, por Ley de 1995 (Ley O. 6/1995, de 29-6), después de las realizadas en 1977 y 1985, habiendo sido modificados por Ley O. 15/2003, de 25-11, nuevamente por Ley O. 5/2010, de 22-6, añadiendo el art. 310 bis y llamando la atención el «endurecimiento de las penas», según su Preámbulo, «al objeto de hacerlas más adecuadas y proporcionales a la gravedad de las conductas», y soportando una “profunda revisión de los delitos contra la Hacienda Pública y contra la Seguridad Social”, según el amplio Preámbulo de la Ley O. 7/2012, de 27-12, modificadora del Código Penal “en materia de transparencia y lucha contra el fraude fiscal y en la Seguridad Social”, de los arts. 31 bis.5, 305 a 308 y 310 bis, introduciendo los arts. 305 bis, 307 bis y 307 ter, y derogando el art. 309, que refunde en el art. 306 y los arts. 627 y 628. (Un trato similar, respecto a la Unión Europea, en los arts. 305, ap. 3 y 306, se acomoda al Convenio relativo a la Protección de los intereses financieros de las Comunidades Europeas, de 26-7-1995). A) Delito fiscal La sanción penal al incumplimiento del principio general establecido en el art. 31.1 de la Constitución, se encuentra en el art. 305, que, excepto en la adecuación de las penas al sistema del Código, supresión de la calificación de dolosa respecto a la acción u omisión, en cuanto aclaración innecesaria dado el régimen de sanción de las acciones u omisiones imprudentes, conforme al art. 12, adición de un apartado sobre la Hacienda de las Comunidades y otro, con el número 5, por la cit. Ley O. 5/2010, y la salvedad final introducida por la cit. Ley O. 7/2012, es reproducción del art. 349 del Código derogado, con alguna modificación en el uso de los verbos. actualizacion 2013.indd 4 09/04/2013 16:51:08 1.º Tipo básico. En el primer párrafo del apartado n.º 1, ( suprimidos los subtipos agravados de “utilización de persona o personas interpuestas” y de “especial trascendencia y gravedad”, y la referencia a “retribuciones en especie”, respecto a los “ingresos a cuenta”, por la reforma operada por Ley O. 7/2012, de 27-12), es castigado con pena de prisión y multa del tanto al séxtuplo de la cuantía, “salvo que hubiere regularizado su situación tributaria en los términos del apartado 4 del presente artículo”, “El que, por acción u omisión, defraude a la Hacienda Pública estatal, autonómica, foral o local, eludiendo el pago de tributos, cantidades retenidas o que se hubieran debido retener o ingresos a cuenta obteniendo indebidamente devoluciones o disfrutando beneficios fiscales de la misma forma, siempre que la cuantía de la cuota defraudada, el importe no ingresado de las retenciones o ingresos a cuenta o de las devoluciones o beneficios fiscales indebidamente obtenidos o disfrutados exceda de ciento veinte mil euros”. En la anterior descripción, el legislador, según el Preámbulo de la Ley de 1985, pretendió avanzar en la delimitación de la conducta típica del delito fiscal por antonomasia, de modo que dicha conducta no sea tanto la falta de pago de tributos, cuanto la actitud defraudatoria, mediante actos u omisiones tendentes a eludir la cuantificación de los elementos que configuran la deuda tributaria y, por tanto, su pago. En este sentido, la jurisprudencia, tomando en consideración que no se trata de resucitar la antigua prisión por deudas, estimó que lo relevante, a efectos punitivos, es ocultar o desfigurar el hecho tributario o las bases tributarias, con el fin de eludir la obligación de satisfacer determinados tributos y con la evidente intención defraudatoria consiguiente (S. 12-5-1986, Vivas). En lo que respecta a la naturaleza jurídica, la Sala Segunda ha declarado que se trata de un delito socio-económico que atenta a los intereses patrimoniales del Estado o de las entidades locales y autonómicas (SS.12-2 y 12-5-1986, Vivas) o foral, término añadido en la reforma de 1995, y ha reconocido la obligación de tributación, cuyo incumplimiento genera el delito, aunque se trate de rentas de origen delictivo (S. 20/2001, de 8-3, Conde-Pumpido Tourón). Como formas de comisión, a partir del Código de 1995, el tipo se refiere a “acción u omisión”, consagrando así lo que era interpretación jurisprudencial (SS. 2-3-1988, Moyna, y posteriores) de que el delito puede cometerse por quienes, sabedores del deber de declarar, omiten tal declaración. Y, por otra parte, conforme al párrafo segundo del ap. 1 del art. 305, “La mera presentación de declaraciones no excluye la defraudación, cuando ésta se acredite por otros hechos”. “Tanto si se formula declaración como si no, el delito se consuma en el momento en que expira el plazo legal voluntario para realizar el actualizacion 2013.indd 5 09/04/2013 16:51:08 pago” (S. 751/2003, de 28-11, Conde-Pumpido Tourón, con cita de otras). Reiteradamente ha declarado la Sala Segunda que “la definición legal y la naturaleza del delito fiscal impiden la aplicación del delito continuado” (S. 1590/2003, de 22-4, Conde-Pumpido Tourón). En cuanto al término “tributos”, que, a partir de 1985, sustituyó al restrictivo de “impuestos”, comprende tanto éstos como las tasas y contribuciones especiales, conforme al art. 2 de la Ley General Tributaria (Ley 58/2003, de 17-12). Sujeto activo, será la persona que según la Ley resulte obligada al cumplimiento de la prestación tributaria, sea como contribuyente, sustituto o cualesquiera otras de las enumeradas en el art. 35 de la Ley General Tributaria. Respecto a las personas jurídicas será de aplicación el art. 31 del CP. Por último, hay que tener en cuenta que el art. 180 de la Ley General Tributaria reconoce el principio «non bis in idem», que denomina «de no concurrencia de sanciones tributarias». 2.º Sanción complementaria. Con carácter necesario, dispone el tercero (y último) párrafo del apartado n.º 1 que «Además de las penas señaladas, se impondrá al responsable la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante el período de tres a seis años.» 3.º Determinación de la cuantía. Conforme al apartado nº 2 del art. 305, en que la cit. Ley O. 7 /2012 , conservando íntegramente los dos supuestos que contemplaba el texto anterior, los presenta en dos apartados, bajo las letras a) y b), consistiendo la reforma en añadir al primero una salvedad, establece que: “A los efectos de determinar la cuantía mencionada en el apartado anterior: a) Si se trata de tributos, retenciones, ingresos a cuenta o devoluciones, periódicos o de declaración periódica, se estará a lo defraudado en cada período impositivo o de declaración, y si éstos son inferiores a doce meses, el importe de lo defraudado se referirá al año natural. No obstante lo anterior, en los casos en los que la defraudación se lleve a cabo en el seno de una organización o grupo criminal, o por personas o entidades que actúen bajo la apariencia de una actividad económica real sin desarrollarla de forma efectiva, el delito será perseguible desde el mismo momento en que se alcance la cantidad fijada en el apartado 1. b) En los demás supuestos, la cuantía se entenderá referida a cada uno de los distintos conceptos por los que un hecho imponible sea susceptible de liquidación.” actualizacion 2013.indd 6 09/04/2013 16:51:08 Tal cuantía, que para algunos autores es condición objetiva de punibilidad (postura seguida en S. 27-12-1990, Ruiz Vadillo), debe considerarse (SS. 3-12-1991, Moyna, y 24-2 y 9-3-1993, Díaz Palos y Moyna) como elemento típico del delito, que transforma el ilícito administrativo en ilícito penal, bastando en relación con la misma, como entiende Bajo, el dolo eventual, ya que el autor «acepta» o «consiente» la cantidad realmente defraudada. 4.º Delito fiscal en relación con la Unión Europea. En el apartado n.º 3, considerablemente ampliado en 2012 , con la referencia al año natural y otras peculiaridades respecto a personas y cuantías, se establece, en un primer párrafo, que “Las mismas penas se impondrán cuando las conductas descritas en el apartado 1 de este artículo se cometan contra la Hacienda de la Unión Europea, siempre que la cuantía defraudada excediera de cincuenta mil euros en el plazo de un año natural. No obstante lo anterior, en los casos en que la defraudación se lleve a cabo en el seno de una organización o grupo criminal, o por personas o entidades que actúen bajo la apariencia de una actividad económica real sin desarrollarla de forma efectiva, el delito será perseguible desde el mismo momento en que se alcance la cantidad fijada en este apartado”; y, en un segundo, que “Si la cuantía defraudada no superase los cincuenta mil euros, pero excediere de cuatro mil, se impondrá una pena de prisión de tres meses a un año o multa del tanto al triplo de la citada cuantía y la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante el período de seis meses a dos años”. 5.º Regularización de la situación tributaria. En el Preámbulo de la Ley O. 7 /2012, no se oculta la satisfacción por esta regulación, contenida en el Apartado n.º 4, con un primer párrafo parecido al que sustituye, uno segundo nuevo, y un tercero igual, destacando que configura la “regularización de la situación tributaria como el verdadero reverso del delito”, con la que “resulte neutralizado no sólo el desvalor de la acción, con una declaración completa y veraz, sino también el desvalor del resultado mediante el pago completo de la deuda tributaria y no solamente de la cuota tributaria como ocurre actualmente”. Dicho Apartado n.º 4 dispone: “Se considerará regularizada la situación tributaria cuando se haya procedido por el obligado tributario al completo reconocimiento y pago de la deuda tributaria, antes de que por la Administración Tributaria se le haya notificado el inicio de actuaciones de comprobación o investigación tendentes a la determinación de las deudas tributarias objeto de la regularización o, en el caso de que tales actuaciones no se hubieran producido, antes de que el Ministerio actualizacion 2013.indd 7 09/04/2013 16:51:08 Fiscal, el Abogado del Estado o el representante procesal de la Administración autonómica, foral o local de que se trate, interponga querella o denuncia contra aquél dirigida, o antes de que el Ministerio Fiscal o el Juez de Instrucción realicen actuaciones que le permitan tener conocimiento formal de la iniciación de diligencias. Asimismo, los efectos de la regularización prevista en el párrafo anterior resultarán aplicables cuando se satisfagan deudas tributarias una vez prescrito el derecho de la Administración a su determinación en vía administrativa. La regularización por el obligado tributario de su situación tributaria impedirá que se le persiga por las posibles irregularidades contables u otras falsedades instrumentales que, exclusivamente en relación a la deuda tributaria objeto de regularización, el mismo pudiera haber cometido con carácter previo a la regularización de su situación tributaria”. La extinción por prescripción de la deuda tributaria no determina la atipicidad sobrevenida, ni puede incluirse en la examinada exención de responsabilidad criminal, ya que «una deuda prescrita no es una deuda regularizada», y la sentencia condenatoria crea «un título judicial autónomo plenamente eficaz», a efectos de hacer efectiva la responsabilidad civil, pese a «la paralización de las actividades propias de la Hacienda Pública» (S. 1336/2002, de 15-7, Andrés Ibáñez, acorde con varias anteriores). 6.º Coexistencia de delitos. El apartado n.º 5 es novedad introducida por la citada Ley de 2012, cuya conveniencia se justifica en su Preámbulo, en el que se alude también a una exigencia, en tal sentido, del ordenamiento comunitario. Tal apartado, dividido en tres párrafos, establece: “Cuando la Administración Tributaria apreciare indicios de haberse cometido un delito contra la Hacienda Pública, podrá liquidar de forma separada, por una parte los conceptos y cuantías que no se encuentren vinculados con el posible delito contra la Hacienda Pública, y por otra, los que se encuentren vinculados con el posible delito contra la Hacienda Pública. La liquidación indicada en primer lugar en el párrafo anterior seguirá la tramitación ordinaria y se sujetará al régimen de recursos propios de toda liquidación tributaria. Y la liquidación que en su caso derive de aquellos conceptos y cuantías que se encuentren vinculados con el posible delito contra la Hacienda Pública seguirá la tramitación que al efecto establezca la normativa tributaria, sin perjuicio de que finalmente se ajuste a lo que se decida en el proceso penal. La existencia del procedimiento penal por delito contra la Hacienda Pública no paralizará la acción de cobro de la deuda tributaria. Por actualizacion 2013.indd 8 09/04/2013 16:51:08 parte de la Administración Tributaria podrán iniciarse las actuaciones dirigidas al cobro, salvo que el juez, de oficio o a instancia de parte, hubiere acordado la suspensión con dispensa total o parcial de garantías si apreciare que la ejecución pudiese ocasionar daños irreparables o de muy difícil reparación”. 7.º Atenuación de la pena. También novedad de la reforma de 2012, que no se justifica en el Preámbulo, es la introducción de una atenuación facultativa, como apartado n.º 6, al disponer que “Los Jueces y Tribunales podrán imponer al obligado tributario o al autor del delito la pena inferior en uno o dos grados, siempre que, antes de que transcurran dos meses desde la citación judicial como imputado satisfaga la deuda tributaria y reconozca judicialmente los hechos. Lo anterior será igualmente aplicable respecto de otros partícipes en el delito distintos del obligado tributario o del autor del delito, cuando colaboren activamente para la obtención de pruebas decisivas para la identificación o captura de otros responsables, para el completo esclarecimiento de los hechos delictivos o para la averiguación del patrimonio del obligado tributario o de otros responsables del delito”. 8.º Ejecución de la pena de multa y responsabilidad civil. Por último, conforme al apartado 7 ( reproducción del apartado 5 en la primitiva redacción, con la única salvedad de que donde decía “no haya podido liquidar”, ahora establece “no haya liquidado”), “En los procedimientos por el delito contemplado en este artículo, para la ejecución de la pena de multa y la responsabilidad civil, que comprenderá el importe de la deuda tributaria que la Administración Tributaria no haya liquidado por prescripción u otra causa legal en los términos previstos en la Ley 58/2003, General Tributaria, de 17 de diciembre, incluidos sus intereses de demora, los Jueces y Tribunales recabarán el auxilio de los servicios de la Administración Tributaria que las exigirá por el procedimiento administrativo de apremio en los términos establecidos en la citada Ley”. B) Tipo agravado de delito fiscal Su incorporación al Código por la Ley O. 7 /2012 , en un nuevo tipo agravado, art. 305 bis, se justifica en su Preámbulo “para tipificar las conductas de mayor gravedad o de mayor complejidad en su descubrimiento”, que se sancionan con pena de prisión de dos a seis años y multa, con el consiguiente aumento del plazo de prescripción, cuando concurra alguna de las siguientes circunstancias: a) “Que la cuantía de la cuota defraudada exceda de seiscientos mil euros”; b) “Que la defraudación se haya cometido en el seno de una organización o de un actualizacion 2013.indd 9 09/04/2013 16:51:08 grupo criminal”; c) “Que la utilización de personas físicas o jurídicas o entes sin personalidad jurídica interpuestos, negocios o instrumentos fiduciarios o paraísos fiscales o territorios de nula tributación oculte o dificulte la determinación de la identidad del obligado tributario o del responsable del delito, la determinación de la cuantía defraudada o del patrimonio del obligado tributario o del responsable del delito”. El tipo concluye, en un segundo apartado, dividido en dos párrafos, con la doble disposición de que “A los supuestos descritos en el presente artículo les serán de aplicación todas las restantes previsiones contenidas en el artículo 305”, y que “En estos casos, además de las penas señaladas, se impondrá al responsable la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante el período de cuatro a ocho años”. C) Defraudación a los presupuestos de la Unión Europea Conforme al art. 306, modificado, según el Preámbulo de la Ley O. 7 /2012, “para aclarar la diferencia de la conducta típica con la prevista en el apartado 3 del art. 305, y para refundir los actuales artículos 306 y 309 en un solo precepto”, será castigado: según el primer párrafo, con pena de prisión y multa, “El que por acción u omisión defraude a los presupuestos generales de la Unión Europea u otros administrados por ésta, en cuantía superior a cincuenta mil euros, eludiendo, fuera de los casos contemplados en el apartado 3 del artículo 305, el pago de cantidades que se deban ingresar, dando a los fondos obtenidos una aplicación distinta de aquella a que estuvieren destinados u obteniendo indebidamente fondos falseando las condiciones requeridas para su concesión u ocultando las que la hubieran impedido”; y a tenor del segundo, con prisión o multa “y la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social”, durante un determinado período de tiempo, si la cuantía defraudada o aplicada indebidamente no superase dicha cantidad, pero excediere de cuatro mil. D) Delitos contra la Seguridad Social Guardando gran similitud con el delito fiscal, se regulan, conforme a la Ley O. 7 /2012, a través de una importante modificación del art. 307, que conserva, aunque reformados, los tres primeros apartados e incorpora otros tres, y de los nuevos arts. 307 bis (con tres apartados) y 307 ter (con seis apartados): actualizacion 2013.indd 10 09/04/2013 16:51:08 Artículo 307: Conforme al primer párrafo del apartado 1, en que la cuantía baja de ciento veinte mil euros, previstos en la regulación anterior, a cincuenta mil, será castigado, con la conjunta pena de prisión y multa que establece, “salvo que hubiere regularizado su situación ante la Seguridad Social en los términos del apartado 3 del presente artículo”, “El que, por acción u omisión, defraude a la Seguridad Social eludiendo el pago de las cuotas de ésta y conceptos de recaudación conjunta, obteniendo indebidamente devoluciones de las mismas o disfrutando de deducciones por cualquier concepto asimismo de forma indebida, siempre que la cuantía de las cuotas defraudadas o de las devoluciones o deducciones indebidas exceda de cincuenta mil euros”. En los párrafos segundo y tercero de dicho apartado, novedad de la reforma de 2012 , se establece, respectivamente, que “La mera presentación de los documentos de cotización no excluye la defraudación, cuando ésta se acredite por otros hechos”, y que “Además de las penas señaladas, se impondrá al responsable la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante el período de tres a seis años”. En el apartado 2 se ordena que “A los efectos de determinar la cuantía mencionada en el apartado anterior se estará al importe total defraudado durante cuatro años naturales”. En el apartado 3, en tres párrafos, se desarrolla la regularización de la situación ante la Seguridad Social en similares términos a los examinados respecto a la regularización de la situación tributaria en el apartado 4 del art. 305. Por último, los apartados 4, 5 y 6, coinciden con los ya examinados tercer párrafo del apartado 5 y apartados 6 y 7, del art. 305. En cuanto a las aludidas cuotas de la Seguridad Social, por tales han de entenderse tanto la de los empresarios como la de los trabajadores , y aunque la jurisprudencia consideró inicialmente la defraudación por impago de la cuota obrera como supuesto de apropiación indebida, en la actualidad, por virtud del principio de especialidad, se castigará, cuando sea superior a cincuenta millones, conforme al examinado art. 307, y cuando no excediera de tal cantidad, ya entendió la Fiscalía General (Consulta 2/1996, de 19-2) que los hechos no podían ser calificados de apropiación indebida, sin perjuicio de las responsabilidades de carácter administrativo que defina la legislación laboral, habiendo sido esta interpretación aceptada por la Sala Segunda, en reunión del Pleno (de 17-11-1997) y subsiguiente jurisprudencia, matizándose que tanto es aplicable a la cuota empresarial como a la obrera. actualizacion 2013.indd 11 09/04/2013 16:51:08 Art. 307 bis Referido a la Seguridad Social, con tres apartados, el número 1, con tres párrafos, a), b) y c), es prácticamente reproducción del art. 305 bis, con la salvedad de que, en el párrafo a), se fija como límite de la cuantía ciento veinte mil, en vez de seiscientos mil euros; y la misma semejanza se produce, con las obligadas adaptaciones, entre los números 2 y 3 respecto a los dos párrafos del apartado 2 de dicho art. 305 bis. Art. 307 ter En el apartado 1 se establece el tipo básico, castigando con pena de prisión, en un primer párrafo, a “Quien obtenga, para sí o para otro, el disfrute de prestaciones del sistema de la Seguridad Social, la prolongación indebida del mismo, o facilite a otros su obtención, por medio del error provocado mediante la simulación o tergiversación de hechos, o la ocultación consciente de hechos de los que tenía el deber de informar, causando con ello un perjuicio a la Administración Pública”; en un segundo párrafo se modera la pena a multa, “Cuando los hechos, a la vista del importe defraudado, de los medios empleados y de las circunstancias personales del autor, no revistan especial gravedad”; y en un tercer párrafo se añade que, “Además de las penas señaladas, se impondrá al responsable la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante el período de tres a seis años” En el apartado 2 se agrava la pena de prisión y se añade la de multa, “Cuando el valor de las prestaciones fuera superior a cincuenta mil euros o hubiera concurrido cualquiera de las circunstancias a que se refieren los apartados b) o c) del art. 307 bis 1”, agregando que “En estos casos, además de las penas señaladas, se impondrá al responsable la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante el período de cuatro a ocho años”. En el apartado 3 se prevé la exención de responsabilidad criminal respecto a las conductas descritas en los apartados anteriores, en los supuestos de reintegro “de una cantidad equivalente al valor de la prestación recibida”, incrementada con el interés que se establece y en los plazos que prevé, relacionados con actuaciones oficiales, cuya exención alcanza también a las posibles falsedades instrumentales relativas a tales indebidas prestaciones. En el apartado 4 se regula la coexistencia de un proceso penal por alguno de los delitos de los apartados 1 y 2 y posible exigencia de reintegro en vía administrativa. actualizacion 2013.indd 12 09/04/2013 16:51:08 En el apartado 5 se ordena que “En los procedimientos por el delito contemplado en este artículo, para la ejecución de la pena de multa y de la responsabilidad civil, los jueces y tribunales recabarán el auxilio de los servicios de la Administración de la Seguridad Social que las exigirá por el procedimiento administrativo de apremio”. En el apartado 6 se dispone que “Resultará aplicable a los supuestos regulados en este artículo lo dispuesto en el apartado 5 del art. 307 del Código Penal”. E) Fraude de subvenciones Como se destaca en el Preámbulo de la Ley O. 7/2012, debido al antiguo concepto de subvención y a determinadas interpretaciones jurisprudenciales, llegando a considerar como subvención a la prestación y al subsidio de desempleo, reforma el art. 308, habiéndose, cuando se trate de prestaciones del sistema de Seguridad Social, introducido el nuevo art. 307 ter, ya examinado. Artículo 308 En el apartado 1 es castigado con pena de prisión y multa proporcional, salvo que lleve a cabo el reintegro a que se refiere el apartado 5, “El que obtenga subvenciones o ayudas de las Administraciones Públicas en una cantidad o por un valor superior a ciento veinte mil euros falseando las condiciones requeridas para su concesión u ocultando las que la hubiesen impedido”. En el apartado 2 se señalan las mismas penas para el que “en el desarrollo de una actividad sufragada total o parcialmente con fondos de las Administraciones Públicas los aplique en una cantidad superior a ciento veinte mil euros a fines distintos de aquellos para los que la subvención o ayuda fue concedida salvo que lleve a cabo el reintegro a que se refiere el apartado 5”. En el apartado 3 se añade que “Además de las penas señaladas, se impondrá al responsable la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante un período de tres a seis años”. En el apartado 4 se dispone que “Para la determinación de la cantidad defraudada se estará al año natural y deberá tratarse de subvenciones o ayudas obtenidas para el fomento de la misma actividad privada subvencionable, aunque procedan de distintas administraciones o entidades públicas”. actualizacion 2013.indd 13 09/04/2013 16:51:08 En el apartado 5 se establecen normas sobre el reintegro, interés de demora y plazos, sin persecución de las falsedades instrumentales en relación con la deuda, previas a la regularización. En el apartado 6 se regula y admite la coexistencia de un procedimiento penal con la exigencia de reintegro en vía administrativa. Por último, en el apartado 7 se estimula, con posible disminución de la pena, el pronto reintegro y colaboración. F) Delito contable En el art. 310 es castigado con moderada pena de prisión, «el que estando obligado por Ley tributaria a llevar contabilidad mercantil, libros o registros fiscales: a) Incumpla absolutamente dicha obligación en régimen de estimación directa de bases tributarias.–b) Lleve contabilidades distintas que, referidas a una misma actividad y ejercicio económico, oculten o simulen la verdadera situación de la empresa.–c) No hubiere anotado en los libros obligatorios negocios, actos, operaciones o, en general, transacciones económicas, o los hubiese anotado con cifras distintas a las verdaderas.–d) Hubiere practicado en los libros obligatorios anotaciones contables ficticias.–La consideración como delito de los supuestos de hecho, a que se refieren las letras c) y d) anteriores, requerirá que se hayan omitido las declaraciones tributarias o que las presentadas fueren reflejo de su falsa contabilidad y que la cuantía, en más o menos, de los cargos o abonos omitidos o falseados exceda, sin compensación aritmética entre ellos, de 240.000 euros por cada ejercicio económico.» El Preámbulo de la Ley O. 2/1985 justificaba esta figura para sancionar «el incumplimiento de obligaciones formales como infracción autónoma, dada la trascendencia que la colaboración activa de los sujetos pasivos de los tributos tiene en nuestro sistema» y a Rodríguez Ramos le parece que se trata de criminalizaciones de actos preparatorios de defraudación tributaria, que, de concurrir con las conductas del art. 305, resultarán absorbidas por éstas al plantearse un concurso de normas a resolver mediante el principio de consunción, posición que sigue la jurisprudencia (SS. 27-12-1990 y 31-10-1992, Ruiz Vadillo). En cuanto a su naturaleza es la de un delito de peligro abs-tracto. Respecto al sujeto activo, surge el problema de determinar qué ha de entenderse por Ley tributaria, como origen de la obligación. Lesmes, siguiendo la doctrina mayoritaria, entiende que la norma que establece la obligación ha de ser necesariamente una Ley en sentido formal y además de naturaleza tributaria, sin que sea bastante para integrar el actualizacion 2013.indd 14 09/04/2013 16:51:08 tipo penal el deber genérico de llevar libros de contabilidad y registros establecido en el art. 35.2 de la Ley General Tributaria, pero que la norma que desarrolla esa obligación, concretándola y especificándola, no es preciso que tenga rango de Ley formal. G) Responsabilidad de las personas jurídicas La modificación del Código Penal por la Ley O. 7/2012, comienza por el apartado 5 del art. 31 bis, según su Preámbulo, “con la finalidad de incluir a partidos políticos y sindicatos dentro del régimen general de responsabilidad”, suprimiendo la excepción relativa a los mismos regulada en dicho apartado, reformando asimismo el art. 310 bis, (que ya lo había sido por la Ley O. 5/2010, de 22-6), estableciendo que, cuando de acuerdo con tal artículo, una persona jurídica sea responsable de los delitos comprendidos en el Título XIV del Libro II, se le impondrán, por una parte: multa del tanto al doble o al cuádruple de la cantidad defraudada o indebidamente obtenida, según que la pena de prisión prevista para el delito cometido por la persona física tenga una duración de más de dos o más de cinco años, o multa de seis meses a un año, en los supuestos recogidos en el art. 310; y, por otra parte, además: la pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante el período de tres a seis años, pudiendo imponerse la prohibición para contratar con las Administraciones Públicas, y, atendidas las reglas del art. 66 bis los Jueces y Tribunales podrán asimismo imponer las penas recogidas en las letras b), c), d), e) y g) del apartado 7 del art. 33. DELITOS CONTRA LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES Faltos en el Código anterior de un tratamiento sistemático, dicho defecto se corrige en el Código vigente en el Título XV del Libro II, arts. 311 a 318, bajo la rúbrica «De los delitos contra los derechos de los trabajadores», del que no obstante se excluye el alzamiento de bienes en perjuicio de los trabajadores, previsto en el art. 257.2, en el Capítulo «De las insolvencias punibles», habiendo el art. 311 sido modificado por Ley O. 7/2012, de 27/12, ampliando el límite máximo de la pena de prisión conjunta con la de multa, e introduciendo un nuevo apartado nº 2º, pasando los números 2º y 3º a 3º y 4º. Determinado el bien jurídico protegido por la rúbrica del Título, los tipos, en que sujeto pasivo serán los trabajadores, siendo indiferente, salvo en el nuevo nº 2, su número, y sujeto activo no siempre será un empresario, podemos sitematizarlos siguiendo el orden del Código. actualizacion 2013.indd 15 09/04/2013 16:51:08 1.º Imposición de condiciones ilegales de trabajo. En el n.º 1.º del art. 311 son castigados con penas de prisión y multa, «Los que, mediante engaño o abuso de situación de necesidad impongan a los trabajadores a su servicio condiciones laborales o de Seguridad Social que perjudiquen, supriman o restrinjan los derechos que tengan reconocidos por disposiciones legales, convenios colectivos o contrato individual.» «El comportamiento delictivo se refiere al ámbito del contrato de trabajo respecto del cual las leyes y disposiciones administrativas de rango inferior, junto con los convenios colectivos sindicales determinan, con el fin de proteger al trabajador, que es la parte más débil en dicho contrato, una serie de derechos a favor de éste, que quedan excluidos del ámbito de la libre disposición de las partes» (S. 15-3-1990, Delgado). Se «protege toda relación de prestación de servicios, abstracción hecha de que el contrato sea válido o nulo, y (...) de que el trabajador esté en situación legal o sea un inmigrante ilegal» (S. 1390/2005, de 22-11, Monterde; lo mismo, S. 208/2010, de 18-3, Berdugo, refiriéndose también a «un concepto amplio de ocupación laboral ... incluyendo la dedicación a la prostitución»). El delito, configurado como especial, en cuanto sólo puede ser cometido por el empresario, instantáneo y de efectos permanentes, tiene su núcleo en una conducta de imposición de condiciones por parte de éste «contraria a los trabajadores (o a alguno de ellos), por virtud de la cual se perjudican los derechos antes referidos que reconocen las disposiciones legales y los convenios colectivos», exigiendo para su consumación que se produzca la efectiva imposición de tales condiciones, sin que sea necesario «un perjuicio real y efectivo» (S. cit. 15-3-1990). Si las condiciones, aún ilegales, no son impuestas, sino convenidas libremente (por ejem., no ser dado de alta en la Seguridad Social y percibir mayor remuneración), entiende Rodríguez Devesa, y en el mismo sentido Muñoz Conde, que la conducta es atípica. En el nº 2º, también son sancionados, con las mismas penas, “Los que den ocupación simultáneamente a una pluralidad de trabajadores sin comunicar su alta a la Seguridad Social que corresponda o, en su caso, sin haber obtenido la correspondiente autorización de trabajo”, siempre que el número de los mismos en las empresas o centros de trabajo, sea del veinticinco o cincuenta por ciento o totalidad, respecto a una ocupación de más de cien, más de diez y no más de cien, o más de cinco y no más de diez. En el n.º 3.º del mismo artículo se imponen iguales penas a una conducta que López-Fando (J.R.) califica de «autoría por adhesión», al actualizacion 2013.indd 16 09/04/2013 16:51:08 castigar a «Los que en el supuesto de transmisión de empresas, con conocimiento de los procedimientos descritos en los apartados anteriores, mantengan las referidas condiciones impuestas por otro.» Y por último, en el n.º 4.º se prevé que «Si las conductas reseñadas en los apartados anteriores se llevaren a cabo con violencia o intimidación se impondrán las penas superiores en grado.» 2.º Tráfico ilegal de mano de obra. En el ap. 1 del art. 312 son castigados con penas de prisión (aumentada por Ley O. 4/2000, de 11-1) y multa, «los que trafiquen de manera ilegal con mano de obra». Ha de tenerse en cuenta que el art. 16.2 del Estatuto de los Trabajadores, de 1995, prohíbe la existencia de agencias de colocación con fines lucrativos, pudiendo autorizarse su existencia sin tales fines, «siempre que la remuneración que reciban del empresario o del trabajador se limite exclusivamente a los gastos ocasionados». 3.º Recluta engañosa de mano de obra. En el ap. 2 del mismo art. 312 se castiga con igual pena a «quienes recluten personas o las determinen a abandonar su puesto de trabajo ofreciendo empleo o condiciones de trabajo engañosas o falsas». Reclutar quiere decir contratar y el abandono del puesto de trabajo supone la ruptura de una relación laboral. 4.º Empleo de extranjeros sin permiso de trabajo. En el mismo ap. 2 del art. 312 son castigados también «quienes empleen a súbditos extranjeros sin permiso de trabajo en condiciones que perjudiquen, supriman o restrinjan los derechos que tuviesen reconocidos por disposiciones legales, convenios colectivos o contrato individual». Debe tenerse en cuenta la citada Ley O. 4/2000, de 11-1, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social, modificada por Leyes O, 8/2000, 11/2003 y 14/2003, y, profundamente, por Ley O. 2/2009, de 11-12. (Reglamento R.D. 557/2011, de 20-4). 5.º Emigración fraudulenta. Con nueva redacción, por la cit. Ley O. 5/2010, fundamentalmente como consecuencia, como la del art. 318 bis.2, de la nueva regulación, en el art. 177 bis, del tráfico ilegal de personas, dispone el art. 313 que «El que determinare o favoreciere la emigración de alguna persona a otro país simulando contrato o colocación, o usando de otro engaño semejante, será castigado con las pena prevista en el artículo anterior.» Según Acuerdo de Pleno no Jurisdiccional de la Sala Segunda de 2005 (19-2) la expresión «emigración de alguna persona a otro país, no se limita a la emigración desde España.» Por otra parte resulta claro que la emigración puede ser administrativamente legal, siendo la ma- actualizacion 2013.indd 17 09/04/2013 16:51:08 niobra engañosa la que determina la tipicidad. (Debe tenerse en cuenta la regla de competencia del art. 23.4.g) de la LOPJ., modificado por Ley O. 1/2009, de 3-11). 6.º Discriminación en el empleo. En el art. 314 son castigados con pena de prisión o multa, «Los que produzcan una grave discriminación en el empleo, público o privado, contra alguna persona por razón de su ideología, religión o creencias, su pertenencia a una etnia, raza o nación, su sexo, orientación sexual, situación familiar, enfermedad o minusvalía, por ostentar la representación legal o sindical de los trabajadores, por el parentesco con otros trabajadores de la empresa o por el uso de alguna de las lenguas oficiales dentro del Estado español, y no restablezcan la situación de igualdad ante la Ley tras requerimiento o sanción administrativa, reparando los daños económicos que se hayan derivado». Consecuencia, de una parte, de la declaración del art. 14 de la Constitución, según la cual «Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquiera otra condición o circunstancia personal o social»; y, de otra, de las obligaciones internacionales, entre las que destaca el Convenio Internacional sobre la eliminación de todas las formas de discriminación racial, de 1965 (de 21-12), es la necesidad de atajar las manifestaciones discriminadoras, manifestada también en otros artículos del Código, como el 22.4.ª, 510 y SS. y 607. Para la comisión del delito es necesario, no sólo que se produzca una discriminación, que la misma sea grave y obedezca a alguna de las concretas razones que contiene el art. 314, sino, además, que se haya hecho caso omiso al requerimiento o sanción que el tipo describe. 7.º Libertad sindical y derecho de huelga. La Constitución, en su art. 7, reconoce que la creación y ejercicio de actividades de los sindicatos de trabajadores y asociaciones empresariales «son libres dentro del respeto a la Constitución y a la ley», exigiendo estructura interna y funcionamiento democráticos. Y, en el art. 28, establece que todos tienen derecho a sindicarse libremente y reconoce el derecho a la huelga de los trabajadores para la defensa de sus intereses. Con este amparo constitucional, el art. 315 impone, en su ap. 1, penas de prisión y multa a «los que mediante engaño o abuso de situación de necesidad, impidieren o limitaren el ejercicio de la libertad sindical o el derecho de huelga»; en el ap. 2 dispone que «Si las conductas reseñadas en el apartado anterior se llevaren a cabo con fuerza, violencia o intimidación se impondrán las penas superiores en grado»; y en el ap. 3 establece que «Las mismas penas del apartado segundo actualizacion 2013.indd 18 09/04/2013 16:51:08 se impondrán a los que, actuando en grupo, o individualmente pero de acuerdo con otros, coaccionen a otras personas a iniciar o continuar una huelga.» Respecto al ejercicio de la libertad sindical, impedido o limitado, es preciso que sea legítimo, es decir, que respete la Constitución y la ley, y que se manifieste en alguna de las modalidades que comprende el art. 2.º de la Ley O. de Libertad Sindical de 1985 (11/1985, de 2-8), que comprende no sólo el aspecto positivo, sino también la llamada libertad sindical negativa, como derecho a no afiliarse. Por último, en relación con el derecho de huelga, ha de tenerse en cuenta el R.D. Ley sobre Relaciones de Trabajo (17/1977, de 4-3), algunos de cuyos arts. han sido declarados inconstitucionales por el Tribunal Constitucional en S. de 1981 (8-4-1981, Díez Picazo). A los efectos del art. 315, conviene destacar que, conforme a esta sentencia, «el derecho constitucionalmente protegido es el que se atribuye a las personas que prestan en favor de otros un trabajo retribuido, cuando tal derecho se ejercita frente a los patronos o empresarios, para renegociar con ellos los contratos de trabajo introduciendo en ellos determinadas novaciones modificativas», y no lo es «cuando se producen perturbaciones en la producción de bienes y de servicios o en el normal funcionamiento de estos últimos, que se introducen con el fin de presionar sobre la Administración Pública o sobre los órganos del Estado para conseguir que se adopten medidas gubernativas o que se introduzca una nueva normativa más favorable para los intereses de una categoría (por ejemplo, de empresarios, de concesionarios de servicios, etc.)». 8.º Seguridad en el trabajo. Con antecedente en el Código anterior, procedente de la reforma de 1983, en el que se castigaba no sólo a los que no faciliten, sino también a los que no exijan, dispone el art. 316 que «Los que con infracción de las normas de prevención de riesgos laborales y estando legalmente obligados, no faciliten los medios necesarios para que los trabajadores desempeñen su actividad con las medidas de seguridad e higiene adecuadas, de forma que pongan así en peligro grave su vida, salud o integridad física, serán castigados con las penas de prisión de seis meses a tres años y multa de seis a doce meses.» La creación de este tipo penal no fue contemplada por el Proyecto de 1980, si bien fue propuesta, como enmienda n.º 1201, por el Grupo comunista, y en la doctrina se defendió la necesidad de esta tipificación por Jové Jané y Morales Prats («La protección penal de la Seguridad en el trabajo»). Supone el delito, como destaca Muñoz Conde, la elevación de la seguridad en el trabajo a la categoría de bien jurídico actualizacion 2013.indd 19 09/04/2013 16:51:08 autónomo, teniendo que acudir, para la comprobación de la infracción y de su gravedad, a la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, de 1995 (Ley 31/1995, de 8-11), al Título II de la Ordenanza de Seguridad e Higiene en el Trabajo, de 1971 (O. de 9-3), y a las disposiciones sobre prevención de riesgos profesionales en las explotaciones mineras, constituidas por el Estatuto del Minero, de 1983, el Reglamento General de la Minería, de 1978, y el Reglamento General de Seguridad Minera, de 1985, así como a un R.D. de 1997 (1627/1997, de 24 de octubre), por el que se establecen disposiciones mínimas de seguridad y salud en las obras de construcción Autores podrán ser, en primer lugar, los empresarios, conforme a los arts. 1.2 y 19 del Estatuto de los Trabajadores, de 1995, pero, por otra parte, el art. 10 de la citada Ordenanza extiende el deber de seguridad e higiene a un amplio círculo de personas, que igualmente podrán cometer este delito. Consecuencia de la conducta omisiva ha de ser un peligro para la vida o integridad física de los trabajadores, no de terceras personas. Configurado así como delito de peligro concreto, si se produce el resultado que se pretendía evitar con tales medidas, «el delito de resultado absorberá al de peligro (art. 8.3.ª C.P.), como una manifestación lógica de la progresión delictiva; mas cuando [...] el resultado producido [...] constituye solamente uno de los posibles resultados de la conducta omisiva del responsable de las medidas de seguridad (ya que [...] en la misma situación de peligro se encontraba trabajando la generalidad de los que desempeñaban sus funciones en la obra), debe estimarse que ha existido un concurso ideal de delitos» (S.1188/1999, de 14-7, Puerta; lo mismo, S. 2445/2001, de 22-12, Móner). Al art. 316 se refiere el art. 350. El art. 317 dispone que «Cuando el delito a que se refiere el artículo anterior se cometa por imprudencia grave, será castigado con la pena inferior en grado.» El precepto presenta la llamativa anomalía de castigar una conducta imprudente sin resultado material, en cuanto el mismo será el grave peligro corrido. 9.º Personas jurídicas. El art. 318, modificado por Ley O. 11/2003, de 29-9, introduciendo la posibilidad de aplicación de las medidas del art. 129, concuerda en parte con el art. 31, por lo que en su antecedente del Código anterior fue censurado como innecesario, y castiga, por otra parte, un delito de omisión. En su actual redacción, dispone: «Cuando los hechos previstos en los artículos de este título se atribuyeran a personas jurídicas, se impondrá la pena señalada a los administradores o encargados del servicio que hayan sido responsables de los mismos y a quienes, conociéndolos y pudiendo remediarlo, no hubieran actualizacion 2013.indd 20 09/04/2013 16:51:09 adoptado medidas para ello. En estos supuestos la autoridad judicial podrá decretar, además, alguna o algunas de las medidas previstas en el artículo 129 de este Código.» DELITOS CONTRA LOS DERECHOS DE LOS CIUDADANOS EXTRANJEROS. Bajo esta rúbrica, el Título XV bis, introducido en el Código por Ley O. 4/2000, de 11-1, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social, contiene un solo artículo, el 318 bis, modificado por las cits. Leyes O. 11/2003 y 5/2010, con cinco apartados, que comprenden un tipo básico y sucesivas agravaciones, así como la responsabilidad de las personas jurídicas y una facultad de atenuación. «Se trata de un delito de mera actividad» y «aunque sean varias las personas afectadas, estaremos ante la existencia de un solo delito en cada tráfico ilegal». «La normativa determinante de la ilegalidad del tráfico será la propia Ley de Extranjería, L.O. 4/2000, de 11-12», reformada en 2000 y dos veces en 2003, «concretamente en el Título II: “Del régimen jurídico de las situaciones de los extranjeros” y su Reglamento, aprobado por RD de 20-7-2001» (S. 284/2006, de 6-3, Monterde). «Se consuma con la realización de actividades de captación, transporte, intermediación o cualquier otra que suponga promoción o favorecimiento de la inmigración clandestina o el tráfico ilegal, con independencia del resultado conseguido» (S. 1119 /2006, de 13-11, Sánchez -Melgar). El tipo no es aplicable a ciudadanos de países de la Unión Europea (S. 15/2008, de 16-1, Marchena, con cita de Acuerdo del Pleno no Jurisdiccional de la Sala 2.ª de 29-5-2007). 1.º Tipo básico. Se contiene en el ap. 1, modificado por la citada Ley O. 13/2007, en el que es castigado con pena de prisión, «El que, directa o indirectamente, promueva, favorezca o facilite el tráfico ilegal o la inmigración clandestina de personas desde, en tránsito o con destino a España, o con destino a otro país de la Unión Europea.» 2.º Subtipos agravados. Ap. 2: «Los que realicen las conductas descritas en el apartado anterior con ánimo de lucro o empleando violencia, intimidación, engaño, o abusando de una situación de superioridad o de especial vulnerabilidad de la víctima, o poniendo en peligro la vida, la salud o la integridad de las personas, serán castigados con las penas en su mitad superior. Si la víctima fuera menor de edad o incapaz, serán castigados con las penas superiores en grado a las previstas en el apartado anterior»; ap. 3. «En las mismas penas del apartado anterior y además en la de inhabilitación absoluta de seis a doce años, incurrirán los que realicen los hechos prevaliéndose de su condición de actualizacion 2013.indd 21 09/04/2013 16:51:09 autoridad, agente de ésta o funcionario publico»; ap. 4. «Se impondrán las penas superiores en grado a las previstas en los apar-tados 1 a 3 de este artículo, en sus respectivos casos, e inhabilitación especial para profesión, oficio, industria o comercio por el tiempo de la condena, cuando el culpable perteneciera a una organización o asociación, incluso de carácter transitorio, que se dedicase a la realización de tales actividades.–Cuando se trate de los jefes, administradores o encargados de dichas organizaciones o asociaciones, se les aplicará la pena superior, que podrá elevarse a la inmediatamente superior en grado.– Cuando de acuerdo con lo establecido en el artículo 31 bis una persona jurídica sea responsable de los delitos recogidos en este Título, se le impondrá la pena de multa de dos a cinco años, o la del triple al quíntuple del beneficio obtenido si la cantidad fuese más elevada.–Atendidas las reglas establecidas en el artículo 66 bis, los jueces y tribunales podrán asimismo imponer las penas recogidas en las letras b) a g) del apartado 7 del artículo 33». 3.º Atenuación facultativa. Un supuesto de atenuación discrecional reglada cierra el artículo, al disponer, en el ap.5, que «Los tribunales, teniendo en cuenta la gravedad del hecho y sus circunstancias, las condiciones del culpable y la finalidad perseguida por éste, podrán imponer la pena inferior en un grado a la respectivamente señalada.» actualizacion 2013.indd 22 09/04/2013 16:51:09