Aeromedicina: Accediendo al futuro de la atención de salud Documento normativo público publicado por FOUNDATION FOR AIR-MEDICAL RESEARCH & EDUCATION Aeromedicina: Accediendo al futuro de la atención de salud Resumen ejecutivo El uso de servicios aeromédicos (AMS, por sus siglas en inglés) se ha convertido en un componente esencial del sistema de salud. Cuando se usa adecuadamente, el transporte aeromédico de cuidados intensivos salva vidas y reduce los costos de la atención de salud. Lo hace minimizando el tiempo que los pacientes con lesiones o enfermedades graves pasan fuera del hospital, llevando más capacidades médicas al paciente que las que normalmente entregan los servicios médicos de emergencia terrestres y conduciendo rápidamente a los pacientes a la atención especializada adecuada. Se despliegan en el momento helicópteros y aeronaves de ala fija médicos y especializados, los cuales son unidades aéreas de cuidados intensivos de urgencia, para aquellos pacientes cuyas vidas dependen del tratamiento y transporte rápidos. Aunque individualmente el uso de servicios aeromédicos puede ser caro en comparación con el servicio de ambulancia terrestre, el estudio según caso y a nivel de todo el sistema de los beneficios detrás del costo muestra que éstos son rentables. La imagen de un helicóptero en el lugar de un accidente automovilístico evoca visiones no sólo de la capacidad de salvar vidas de los servicios aeromédicos, sino también de los riesgos del entorno en el cual vuelan. Sin embargo, la atención y el transporte aeromédicos realmente prometen al paciente menor riesgo que una hospitalización. “El tiempo es tejido humano” es un dicho que significa que por lo general la muerte y discapacidad por lesiones graves, ataques cardíacos, derrames cerebrales, complicaciones quirúrgicas y médicas, y otras afecciones que dependen del tiempo, generalmente se pueden evitar si se proporciona la atención adecuada lo suficientemente rápido. Los servicios aeromédicos son un medio para unir la geografía y el tiempo. En la medida que la tecnología proporcione formas de atención nuevas y sensibles al tiempo, la necesidad de obtener servicios aeromédicos aumentará. En la medida que los costos del sistema de salud continúen aumentando y que la disponibilidad de atención de salud de rutina en las comunidades rurales se ponga en riesgo, los servicios aeromédicos tendrán un papel cada vez más importante en la prestación de atención de salud. En estos días de mayor preocupación por la seguridad nacional y la preparación frente a casos de emergencia, los servicios aeromédicos proporcionan un recurso médico valioso que puede transportar pacientes y personal médico por largas distancias, así como también llevar equipos y suministros médicos a las áreas afectadas. Los servicios aeromédicos son un componente integral de la planificación y gestión de desastres. La experiencia reciente de los huracanes Iván, Katrina, y Rita ilustran la función esencial de los servicios aeromédicos al evacuar a bebés y adultos con enfermedades o lesiones graves de los hospitales y establecimientos de enfermería, así como también al proporcionar apoyo directo en el lugar a los equipos de gestión de desastres. Sin la respuesta rápida y masiva de los servicios aeromédicos en la Costa del Golfo, de helicópteros y aeronaves de ala fija médicos y especializados, miles de vidas adicionales hubiesen estado en riesgo o incluso se hubiesen perdido. Los recursos aeromédicos integrados son un componente esencial de los sistemas de servicios médicos de emergencia contemporáneos. En la actualidad, las presiones financieras, los problemas del seguro, los cambiantes reglamentos federales y la competencia están forzando los cambios, la consolidación y, en muchos casos, la reducción de servicios o el cierre de departamentos de urgencia, centros traumatológicos, hospitales y médicos especialistas. Estos factores han contribuido al mayor uso de los servicios aeromédicos para trasladar a los pacientes a centros de especialidades, en particular desde áreas periféricas. Como ocurre en general con cualquier servicio médico de emergencia (EMS, por sus siglas en inglés), se ha producido una carencia general de planificación y diseño del sistema para guiar el desarrollo y la implementación de los servicios aeromédicos necesarios. Los mecanismos que pudieran brindar dicha orientación, tales como los servicios médicos de emergencia o reglamentos de salud estatales, los procesos de certificado de necesidad (CON, por sus siglas en inglés) y los reglamentos de aviación y atención de salud federales a veces están en conflicto entre sí, lo que les presenta un enredo de obstáculos descoordinados a los proveedores de servicios aeromédicos. Este documento expone el desarrollo histórico y la práctica contemporánea de la aeromedicina y sirve como un marco de recursos para las personas responsables de elaborar políticas y los organismos reguladores encargados de garantizar la entrega al público de servicios aeromédicos de alta calidad. i Historia de los servicios aeromédicos en los Estados Unidos ...la prestigiosa Academia Nacional de Ciencias publica el libro blanco Accidental Death and Disability: The Neglected Disease of Modern Society7 (Muerte y Discapacidad Accidental: La Enfermedad Desatendida de la Sociedad Moderna), que recalcó el profundo impacto de la muerte y discapacidad que provocan las lesiones, en especial en accidentes automovilísticos. 1 En 1926, el Cuerpo Aéreo del Ejército de los Estados Unidos utilizó un avión remodelado para transportar pacientes desde Nicaragua a un hospital del ejército en Nicaragua, a 150 millas de distancia. El uso rutinario de aviones1 entre hospitales con fines militares data de la Segunda Guerra Mundial, así como de la primera evacuación aérea de soldados estadounidenses desde el lugar donde se lesionaban, lo que ocurrió en lo que en ese entonces era Birmania.2, 3 Sin embargo, la misión de evacuación médica de rutina de los helicópteros evolucionó involuntariamente durante la Guerra de Corea, en la década de los 504. Debido a que los caminos del frente de batalla de Corea eran por lo general agrestes e indirectos, no se podía confiar en ellos para una evacuación rápida y cuidadosa de los soldados a las unidades quirúrgicas de campaña. En cambio, los helicópteros que se encontraban en otras misiones eran desviados para recoger a los heridos graves y transportarlos de manera rápida y sin problemas, por lo general de manera oportuna para prestarles atención quirúrgica que salvara sus vidas o extremidades. El Ejército, que observó las ventajas de este tipo de transporte por sobre el terrestre, comenzó rápidamente a probar helicópteros médicos especializados. Durante el transcurso de la guerra, se evacuó a más de 22,000 soldados en helicóptero. Se piensa que la evacuación rápida, sin problemas y las habilidades especiales de los cirujanos al atender a cientos de pacientes tempranamente en los hospitales de campaña contribuyeron a disminuir el índice de mortalidad de soldados heridos y hospitalizados, en comparación con guerras anteriores.4 La Guerra de Vietnam trajo mayor sofisticación al mismo concepto general: Evacuación aérea rápida y sin problemas de los lesionados graves para realizarles cirugía de campaña para estabilizarlos. Las aeronaves cambiaron, al igual que las capacidades médicas. La atención de urgencia de campaña y la evacuación rápida de más de 800,000 soldados disminuyó aun más la mortalidad durante la guerra.4, 5 Se comenzó a repetir un contexto entre la Primera Guerra Mundial y la Guerra de Vietnam: Estabilizar al soldado herido de gravedad en el campo, prestar atención avanzada en el camino y llevar al paciente a un cirujano de traumatología calificado en menos de una hora, además de poder reducir la extensión y el impacto de la lesión, incluidas las probabilidades de muerte. En 1966, la prestigiosa Academia Nacional de Ciencias publica el libro blanco Accidental Death and Disability: The Neglected Disease of Modern Society7 (Muerte y Discapacidad Accidental: La Enfermedad Desatendida de la Sociedad Moderna), que recalcó el profundo impacto de las muertes y la discapacidad que provocan las lesiones, en especial en accidentes automovilísticos. También detalló la falta de una respuesta coordinada ante las lesiones, incluida la observación acerca de que “Los helicópteros que funcionan como ambulancias no han sido adaptados para cubrir las necesidades de los civiles en tiempos de paz”.7 El libro blanco de la Academia Nacional de Ciencias contribuyó significativamente al desarrollo del sistema moderno del servicio médico de emergencia y a su subsistema de atención traumatológica. Su impacto se intensificó por la influencia de las unidades militares que retornaban y de pilotos de helicópteros médicos militares que pasaron a asumir funciones de piloto en las fuerzas de policía y en seguridad pública. Esto condujo a la adaptación a un doble propósito de helicópteros militares y de seguridad pública para la evacuación de civiles lesionados, tal como el programa Asistencia Militar para la Seguridad y el Tráfico (MAST, Military Assistance to Safety & Traffic) creado en 1970 y el programa de aviación de la Policía Estatal de Maryland, que en marzo de 1970 se convirtió en “el primer organismo civil en transportar en helicóptero a un paciente con lesiones traumatológicas graves”.8, 9 El primer servicio civil de helicópteros médicos con base en un hospital se fundó en 1972 en St. Anthony’s Hospital en Denver, Colorado. Antes de 1980, unos 32 programas de servicios médicos de emergencia con helicópteros (HEMS, por sus siglas en inglés) transportaban a más de 17,000 pacientes al año en 39 helicópteros. Antes de 1990, estos servicios aumentaron a 174, con 231 helicópteros que transportaban a cerca de 160,000 pacientes. Diez años después, 231 servicios de helicópteros y 400 aeronaves transportaban a más de 203,000 pacientes cada año.10 Al año 2005, había en funcionamiento 272 servicios que operaban 753 aeronaves especializadas de ala giratoria (helicópteros) y 150 aeronaves de ala fija.11 En la actualidad se realizan aproximadamente medio millón de traslados en helicóptero y aeronaves de ala fija cada año. Históricamente, el típico servicio de helicóptero de los servicios médicos de emergencias ha sido operado por o se ha afiliado a un hospital con una o dos aeronaves.12 En la década pasada, muchos de estos servicios pasaron a ser recursos comunitarios independientes afiliados a los hospitales. Resumen de escuadrones de helicópteros por estado, año 2005 Estado Nº de helicópteros AL .................................9 AK ...............................32 AZ ...............................50 AR ...............................12 CA ...............................72 CO ..............................10 CT .................................2 DC ................................3 DE .................................5 FL ................................44 GA...............................19 HI ..................................6 ID ................................10 IL.................................19 IN ................................15 IA ..................................9 KS ...............................10 KY................................20 LA .................................9 ME ................................2 MD..............................18 MA ................................4 MI ...............................12 MN..............................12 MS ................................5 MO .............................30 MT ................................4 NE .................................7 NV .................................6 NH ................................2 NJ ..................................5 NM..............................10 NY ...............................28 NC ..............................13 ND ................................2 OH ..............................28 OK ..............................14 OR ................................4 PA ...............................37 RI ..................................0 SC .................................8 SD .................................4 TN ...............................24 TX ...............................61 UT .................................8 VT .................................0 VA ...............................21 WA ..............................10 WV ................................5 WI ...............................12 WY ................................1 TOTAL............. 753 Del Atlas y Base de Datos de Servicios de Ambulancias Aéreas (ADAMS, Atlas and Database of Air Ambulance Services), octubre de 2005. 2 El rápido crecimiento de los servicios aeromédicos, particularmente a finales de la década de los 80 y nuevamente en los últimos 5 años, se puede atribuir a cambios en el sistema de salud general. La necesidad de llevar rápidamente a pacientes con lesiones graves a lugares de atención quirúrgica dio origen a los servicios aeromédicos (en su mayoría helicópteros médicos). Más recientemente, el cierre de hospitales rurales debido a los reembolsos y a otras presiones financieras o su transformación a hospitales de acceso crítico (CAH, por sus siglas en inglés) con servicios reducidos y menos médicos especialistas ha producido grandes brechas geográficas en la disponibilidad de recursos quirúrgicos especializados. Lamentablemente, estas áreas rurales son el lugar donde se producen los accidentes automovilísticos más graves y es donde ocurre el 60% de los accidentes automovilísticos con consecuencias fatales de los Estados Unidos, un tasa que casi dobla al de los accidentes similares en áreas suburbanas o urbanas.13 El uso de aeronaves con personal médico especializado ayuda a salvar estas brechas y mejora el acceso a la atención de especialistas. A medida que más tratamientos médicos que dependen del tiempo (por ejemplo, administración de medicamentos para disolver coágulos, angioplastia o cirugía para ataques cardíacos o derrames cerebrales) demuestran tener mejores resultados en los pacientes, la ausencia de atención especializada y de médicos especialistas en estas mismas áreas continúa contribuyendo al aumento del uso de aeronaves para trasladar rápidamente a los pacientes a estos tratamientos para salvarles la vida en hospitales especializados. 800 Crecimiento de HEMS: Nº de servicios y helicópteros por año 700 600 Nº de helicópteros 500 Nº de servicios 400 300 200 100 0 3 1980 1985 1990 1995 2000 2005 Primera misión de los servicios aeromédicos: Traumatología La investigación a comienzos de la década de los 70 reforzó la idea de los médicos de los tiempos de guerra que señalaba que para los pacientes con lesiones graves, era vital la intervención quirúrgica en la primera hora después de que se producía la lesión. La idea de esta “hora dorada” sobrevive, con una variación menor, hasta la actualidad.14 Con esta influencia, el libro blanco Accidental Death and Disability: The Neglected Disease of Modern Society y la reciente experiencia del éxito del helicóptero médico militar en esta tarea, es comprensible que los servicios médicos de emergencia con helicópteros civiles adoptaran los traumatismos como su misión predominante en sus primeros años. Atención de traumatismos de los servicios médicos de emergencia: Apoyo vital básico (BLS) y apoyo vital avanzado (ALS) Para brindar una atención al paciente más sofisticada y siguiendo la orientación de Accidental Death and Disability: The Neglected Disease of Modern Society, los servicios médicos de emergencia tuvieron que aprender a “no hacer daño” y aplicar esto como su primera prioridad en la atención de traumatismos. El manejo indebido y la estabilización insuficiente de respiración, sangrado, lesiones a la columna vertebral, huesos fracturados y lesiones internas pueden matar o mutilar más al paciente lesionado. Durante las décadas de los 70 y 80, los servicios médicos de emergencia desarrollaron la capacidad de apoyo vital básico (BLS, por sus siglas en inglés). Su propósito no era sólo “no hacer daño”, sino que también brindar atención para estabilizar, como técnicas para combatir la pérdida de sangre, ayudar a respirar, inmovilizar la columna vertebral y entablillar huesos. Los técnicos en urgencias médicas (EMT, por sus siglas en inglés) fueron y son el principal proveedor de apoyo vital básico. Al mismo tiempo comenzó a desarrollarse un nivel avanzado de apoyo vital (ALS, por sus siglas en inglés; brindado principalmente por paramédicos y técnicos en urgencias médicas de nivel intermedio). Esto apuntó en gran parte a urgencias médicas que posiblemente pudieran revertirse en el terreno, como paros cardíacos o respiratorios, crisis diabéticas y reacciones alérgicas. No obstante, los proveedores de apoyo vital avanzado también pueden estabilizar a los pacientes lesionados en una forma similar a la forma en que lo hacían los médicos militares. Los ejemplos de atención de apoyo vital avanzado incluyen el reemplazo de la sangre perdida con líquido inyectado a una vena, la colocación de un tubo para respirar en la tráquea comprometida y la reexpansión de un neumotórax. Niveles de atención médica en servicios médicos de emergencia BLS Apoyo vital básico: Servicio médico que brinda personal capacitado para ser técnicos en urgencias médicas (EMT, por sus siglas en inglés). ALS Apoyo vital avanzado: Servicio médico que brinda personal capacitado para ser paramédicos. SCT Transporte de atención especializada: Servicio médico que brinda personal capacitado para realizar procedimientos que generalmente están más allá del alcance de un paramédico. También se conoce como servicio de cuidado intensivo. FW Ambulancia aérea de ala fija: Atención médica que se brinda en un avión debido a que los establecimientos médicos adecuados más cercanos son inaccesibles, difíciles del alcanzar o se encuentran a una gran distancia para llegar en un vehículo terrestre. RW Ambulancia aérea de helicóptero: Atención médica que se brinda a nivel de apoyo vital avanzado o atención especializada en un helicóptero debido a que los establecimientos médicos adecuados más cercanos son inaccesibles, difíciles del alcanzar o se encuentran a una gran distancia para llegar en un vehículo terrestre. A medida que el sistema de atención de salud del país sigue cambiando, la necesidad de trasladar a pacientes médicamente inestables con enfermedades o lesiones muy agudas y graves ha aumentado drásticamente. Se necesita personal especialmente capacitado en la UCI para apoyar a estos pacientes con respiradores, infusiones de varios medicamentos y controles médicos invasivos de tipo cardíaco, 4 pulmonar y neurológico. Los traslados a cortas distancias se realizan usando ambulancias terrestres especialmente equipadas (conocidas como ambulancias terrestres de cuidados intensivos), mientras que los traslados entre hospitales que se encuentran a mayores distancias dependen de helicópteros y aeronaves de ala fija especializados y especialmente equipados. Los médicos que envían al paciente y los médicos especialistas que lo reciben supervisan estos transportes de pacientes, usando las pautas desarrolladas por la Asociación Nacional de Médicos de Servicios Médicos de Emergencia (National Association of EMS Physicians), la Asociación de Médicos Aeromédicos (Air Medical Physician Association) y la Asociación de Servicios Aeromédicos (Association of Air Medical Services).15 Atención de traumatismos de los servicios aeromédicos: Rapidez, acceso y atención de nivel médico El libro blanco de 1996 titulado: Accidental Death and Disability: The Neglected Disease of Modern Society llamó a que se desarrolle un sistema de servicios médicos de emergencia sofisticado, departamentos de urgencia especializados y establecimientos traumatológicos regionales.7 Paralelamente, se aprobó la Ley Nacional de Seguridad en las Carreteras de 1966, que financia el desarrollo del Departamento de Transporte con la facultad para desarrollar sistemas de servicios médicos de emergencia y de traumatología. La evolución de los servicios aeromédicos ofreció al sistema de servicios médicos de emergencia y al nuevo subsistema de traumatología un nuevo nivel de beneficios de atención y transporte.17 Nivel de atención más alto: El personal que trabaja a bordo de las ambulancias aéreas proporciona más que las habilidades médicas y el equipo del nivel de apoyo vital avanzado que se proporcionan en las ambulancias terrestres. Tienen las habilidades adicionales y el equipo de un hospital terciario, medicamentos más avanzados y habilidades médicas de cuidados intensivos más sofisticadas cuando responden a un hospital comunitario, al lugar donde ocurre una lesión o un accidente, o a un punto de encuentro planificado con anticipación con una ambulancia terrestre (una práctica común para ambulancias aéreas, aeronaves de ala fija o aviones). Los cuidados intensivos por complicaciones respiratorias especialmente difíciles, sangre y productos derivados de ella y herramientas más sofisticadas para controlar a los pacientes hacen que los helicópteros que funcionan como ambulancias parezcan más un “departamento de urgencias volador” que simplemente una versión aerotransportada de la típica ambulancia terrestre de nivel de apoyo vital básico o avanzado. Este nivel más alto de atención es especialmente importante en áreas rurales que disponen de pocas ambulancias terrestres de apoyo vital avanzado e incluso menor cobertura de ambulancias terrestres para cuidados menos intensivos. El equipo de servicios aeromédicos por lo general tiene capacidades de nivel médico que superan a los proveedores de apoyo vital avanzado en tierra. La configuración actual del personal médico de servicios aeromédicos a bordo está compuesta generalmente por una enfermera y un paramédico especialmente capacitados en cuidados intensivos. Se 5 pueden agregar al equipo cuidadores o médicos especialistas, según sea necesario. Esto comienza de manera eficaz la atención del hospital terciario directamente junto al paciente, ya sea en el lugar donde se produzca una emergencia o en un hospital comunitario. Prácticamente de manera exclusiva el equipo de servicios aeromédicos maneja a los pacientes más gravemente enfermos y lesionados, entregándole a estos cuidadores más experiencia práctica para lidiar con los casos más graves que la que tiene el personal de servicios médicos de emergencia que atienden a una gran población de pacientes con enfermedades que requieren una atención menos urgente. Los beneficios del transporte aéreo han demostrado ser mayores que cualquier factor estresante que pudiera añadirse al hecho de volar, incluso en el caso de los pacientes con traumatismos más serios y en particular en los que han sufrido ataques cardíacos. 18, 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25, 26, 27, 28, 29, 30 Rapidez y protección de la lesión Los helicópteros que funcionan como ambulancias aéreas se utilizan para el transporte de pacientes desde el lugar donde se lesionan al hospital y para vuelos más cortos entre hospitales más pequeños y centros traumatológicos u hospitales especializados (por ejemplo, centros cardíacos o para el tratamiento de quemaduras). Las ambulancias aéreas de ala fija (aviones) se utilizan para transportar pacientes en vuelos entre hospitales que se encuentran a mayor distancia. El transporte aeromédico es beneficioso no sólo debido a que proporciona un nivel más alto de atención médica al paciente en el camino, sino también porque proporciona una respuesta más rápida. Cuando se trata a pacientes enfermos o lesionados graves, siempre es importante minimizar el tiempo que los pacientes están fuera del hospital y lejos de la atención directa de un médico. Los helicópteros vuelan de un punto a otro, minimizando el tiempo que el paciente se encuentra fuera del hospital y evitando los retrasos consecuencia del tráfico que experimentan las ambulancias terrestres. Las ambulancias aéreas de ala fija (aviones) pueden cubrir una distancia mucho mayor en menos tiempo que una ambulancia terrestre. A veces la ambulancia aérea incluso proporciona un viaje más cómodo, en los casos en que las condiciones menos que óptimas de los caminos ocasionan la incomodidad de algunos pacientes. El transporte aeromédico es beneficioso, ya que brinda un mayor nivel de atención médica a los pacientes en el camino y también proporciona una respuesta más rápida. Todas las aeronaves, de ala fija y helicópteros, transportan aproximadamente a 500,000 pacientes sólo en los Estados Unidos cada año, salvando millones de vidas cada década. Acceso: Los pacientes aislados de los servicios médicos de emergencia terrestres o centros traumatológicos por la distancia, la falta de caminos que las ambulancias puedan transitar o las características del terreno, como la presencia de montañas, cañones, bosques e islas se benefician enormemente del servicio aeromédico. Los servicios médicos de emergencia con helicópteros son también una herramienta poderosa para combatir la congestión urbana o suburbana.31 Llevar a los pacientes a casa o a lugares de atención médica más sofisticados desde el sitio distante donde ocurrió la lesión o enfermedad (lo que se conoce como “repatriación”) es un uso muy importante de los servicios aeromédicos de ala fija (avión). 6 Una gran cantidad de comunidades, particularmente aquéllas que se encuentran en áreas rurales, se ven limitados en el acceso a la atención de urgencia debido a los recientes cambios en el sistema de prestación de atención de salud en el país: ◗ Los departamentos de urgencia de los hospitales comunitarios se redujeron desde un poco más de 5,000 en el año 1992 a aproximadamente 4,600 en el año 2002, una tendencia que se espera continúe.32 ◗ La cantidad de centros traumatológicos más sofisticados se redujo en el mismo período. ◗ La atención especializada y los especialistas se encuentran cada vez más en centros de especialidades urbanos y con menor frecuencia en entornos no urbanos. ◗ La presencia de demasiados pacientes en los departamentos de urgencia de los hospitales y la falta de camas de cuidado intensivo y de especialidades son factores que por lo general provocan que los hospitales desvíen a los pacientes de los servicios médicos de emergencia. Como parte de un sistema traumatológico de emergencia con Debido a los factores que se indicó anteriormente, los servicios aeromédicos, y especialmente los servicios médicos de emergencia con helicópteros, se están convirtiendo en la red de seguridad de la atención de salud y en el punto de acceso para muchas personas y comunidades que no se encuentran en sectores urbanos. helicópteros reducen En resumen: Servicios aeromédicos y sistema traumatológico considerablemente el El concepto de “hora dorada” indica que en esa primera hora, mientras se conduce al paciente para que reciba la atención del cirujano, éste debe recibir el beneficio de un sistema de servicios médicos de emergencia organizado que le proporcione atención cada vez más avanzada (por ejemplo, de apoyo vital básico a apoyo vital avanzado a la atención de nivel médico proporcionada por personal aeromédico). organizado, los servicios médicos tiempo entre el lugar donde ocurre la lesión y el quirófano. El completo subsistema de servicios médicos de emergencia traumatológicos debe incluir: 7 ◗ Hallazgo rápido del paciente lesionado e información del servicio médico de emergencia. ◗ Respuesta rápida de apoyo vital básico por parte del servicio médico de emergencia. ◗ Activación temprana por parte de solicitantes capacitados y autorizados. ◗ Disponibilidad oportuna de los recursos de apoyo vital avanzado. ◗ Acceso rápido a intervenciones de nivel médico a través de la respuesta de los servicios médicos de emergencia con helicópteros o al departamento de urgencias más cercano. ◗ Traslado entre hospitales para obtener atención especializada por parte de la ambulancia terrestre, o de la ambulancia aérea de helicóptero o ala fija con cuidados intensivos. ◗ Excelente planificación y coordinación de los recursos de los servicios médicos de emergencia. ◗ Evaluación de calidad de cada componente en la respuesta combinada aérea y terrestre a la emergencia. Un documento reciente señala que el sistema de Maryland tiene estos componentes bien implementados y organizados, y llama a otros sistemas para que lo emulen.33 Se ha demostrado que los sistemas traumatológicos organizados con centros traumatológicos salvan vidas. 34, 35, 36, 37 A comienzos de la década de los 80, comenzaron a aparecer los primeros intentos analíticos por determinar el impacto en salvar vidas relacionado con la mortalidad por parte de los servicios médicos de emergencia con helicópteros en respuesta a casos de lesiones, demostrando en gran medida reducciones en la mortalidad en comparación con sistemas terrestres.18-20, 38 La lesión cerebral Desde la década de los 80, han habido muchos estudios médicos publicados que han intentado, por medio de una variedad de medios, evaluar el impacto de los servicios médicos de emergencia con helicópteros sobre la morbilidad y mortalidad por traumatismos en casos de vuelos en el lugar y entre establecimientos. En general, estos estudios han demostrado la capacidad de los servicios médicos de emergencia con helicópteros para afectar mejoras en casos de morbilidad y mortalidad relacionados con traumatismos.39, 40 niños y adultos en sus Como parte de un sistema traumatológico organizado, los servicios médicos de emergencia con helicópteros reducen considerablemente el tiempo entre el lugar donde ocurre la lesión y el quirófano. Los helicópteros médicos, despachados simultáneamente con servicios médicos de emergencia terrestres,41 pueden proporcionar acceso a centros traumatológicos con servicio completo a más del 54% de la población estadounidense en 60 minutos, que de otra forma no tendrían.42 cerebrales traumáticas es traumática (TBI, por sus siglas en inglés) es la causa principal de muerte y discapacidad en años más productivos. Como con cualquier lesión importante, el tratamiento de lesiones crítico en términos de tiempo. Los helicópteros médicos también disminuyen las detenciones intermedias que quitan mucho tiempo en hospitales pequeños que no son centros traumatológicos. Se ha demostrado que dichas detenciones son perjudiciales para los pacientes con traumatismos, incluso en casos donde el servicio médico de emergencia con helicópteros se llama desde ese hospital para la recta final del viaje.43, 44 En el futuro, mejoras en la tecnología de teléfonos celulares y de notificación automática de colisión (ACN, por sus siglas en inglés) en los automóviles, puede disminuir a prácticamente cero el tiempo que se requiere para hallar e informar sobre una lesión provocada por una colisión. El uso de indicadores de “urgencia” generados automáticamente por datos de notificación automática de colisión enviados desde autos colisionados a centros de despacho, junto con protocolos médicos especiales para evaluar la probabilidad de lesiones graves por causa de la colisión, pronto proporcionarán una forma racional y eficaz para enviar los helicópteros luego de minutos de un accidente, sin importar cuán remotos estén, de ese modo, mejorarán más la velocidad de respuesta de los servicios médicos de emergencia a los pacientes. 45 8 Ejemplos de hallazgos de estudios recientes demuestran que: Los pacientes con lesiones lo suficientemente graves como para requerir el traslado entre establecimientos tuvieron cuatro veces más probabilidades de morir luego de que se descontinuaran los servicios médicos de emergencia con helicópteros que prestaban servicios en esa área.46 Los servicios médicos de emergencia con helicópteros redujeron la mortalidad por lesiones en 24% en un estudio multicéntrico con alrededor de 16,000 pacientes en Boston.47 Incluso los pacientes con lesiones en áreas urbanas experimentaron un beneficio en el tiempo de transporte por parte de los servicios médicos de emergencia con helicópteros en el 23% de los casos.31 La lesión cerebral traumática (TBI, por sus siglas en inglés) se asocia frecuentemente a casos que provocan traumatismos múltiples graves a los pacientes y es la causa principal de muerte y discapacidad en niños y adultos en sus años más productivos.48 Como con otras lesiones importantes, el tratamiento de lesiones cerebrales traumáticas es crítico en términos de tiempo. Fuera de las áreas urbanas, la disponibilidad reducida de los servicios neuroquirúrgicos requeridos para tratar lesiones cerebrales traumáticas ha presentado un desafío para los servicios médicos de emergencia. Estudios recientes indican que la atención avanzada temprana por parte de personal aeromédico y el transporte aéreo hacia lugares de atención definitiva por parte de un neurocirujano pueden superar este desafío, teniendo como resultado una mejora considerable en pacientes con lesiones cerebrales traumáticas moderadas y graves. 20, 49, 50, 51, 52 Los servicios médicos de emergencia con helicópteros son generalmente eficaces en circunstancias de atención de traumatismos como cuando: 9 ◗ Existe un período ampliado requerido para acceder o sacar a un paciente atrapado (por ejemplo, en un accidente automovilístico) o que se encuentra en un área remota (por ejemplo, un excursionista, un conductor de motos para la nieve o un botero lesionado) el cual agota el intervalo de tiempo para llevar al paciente al centro traumatológico por tierra. ◗ La distancia hacia el centro traumatológico es mayor que 20 a 25 millas. ◗ El paciente necesita atención médica y estabilización a nivel de apoyo vital avanzado y no hay un servicio de ambulancia terrestre con nivel de apoyo vital avanzado disponible en un plazo razonable. ◗ Las condiciones de tránsito o disponibilidad de hospitales hacen que sea poco probable que el paciente llegue a un centro traumatológico por medio de una ambulancia terrestre en el plazo ideal para obtener el mejor resultado clínico. ◗ Existen muchos pacientes que abrumarán los recursos del centro traumatológico asequible por tierra en el intervalo de tiempo. ◗ Los sistemas de servicios médicos de emergencia requieren llevar al paciente al hospital más cercano para realizar la evaluación inicial y estabilización, en lugar de no pasar por esos establecimientos y dirigirse inmediatamente a un centro traumatológico. Esto puede añadir un retraso a la llegada a atención quirúrgica definitiva y hacer necesario el transporte de servicios médicos de emergencia con helicópteros para atenuar el impacto de ese retraso. ◗ Se produce un incidente con una cantidad masiva de víctimas.53, 54 En áreas rurales y zonas apartadas, los servicios médicos de emergencia con helicópteros y aeronaves de ala fija desempeñan una función particularmente importante.55 ◗ Donde la ambulancia terrestre más cercana está más lejos, en términos de tiempo de viaje, desde el lugar donde ocurre la lesión que el servicio médico de emergencia con helicópteros más cercano, el servicio aeromédico puede ser la ambulancia principal para pacientes con lesiones o enfermedades graves en esa área. ◗ Donde el establecimiento médico con capacidad de apoyo vital avanzado está más lejos en términos de tiempo de viaje, desde el lugar donde ocurre la lesión que un servicio médico de emergencia con helicópteros o un proveedor con aeronaves de ala fija, el servicio aeromédico puede ser el proveedor de apoyo vital avanzado principal para pacientes con lesiones o enfermedades graves en esa área. ◗ Donde los suministros de sangre o la disponibilidad de otros suministros o equipos médicos son limitados o inexistentes, arriesgando la atención del paciente, el servicio aeromédico puede llevar estos recursos al hospital junto con el paciente. ◗ El servicio aeromédico puede transportar personal médico especializado (personal de cirugía, medicina de urgencia, terapia respiratoria, pediatría, cuidado neonatal, obstetricia y enfermería especializada) para asistir en eventos locales con una cantidad masiva de víctimas o aumentar el personal de un hospital rural o en zonas apartadas para estabilizar pacientes que requieren atención especial antes del transporte. Diagrama de un transporte de alas fijas 10 Nuevas misiones para los servicios aeromédicos Perfil general de la misión Si bien el público se imagina principalmente al helicóptero aterrizando en el lugar de una colisión automovilística para ayudar a una víctima con múltiples lesiones, durante la última década los servicios aeromédicos han incluido un número creciente de una variedad de misiones nuevas. De hecho, el 54% de todos los transportes aeromédicos son desde un hospital a otro, 33% son respuestas en el lugar y 13% son de otros tipos (por ejemplo, obtención de órganos y transporte de equipos de especialidades, cuidado neonatal y pediátrico).12 El 54% de todos los transportes aeromédicos son desde un hospital a otro, 33% son respuestas en el lugar y 13% son de otros tipos (por ejemplo, obtención de órganos y transporte de equipos de especialidades, cuidado neonatal y pediátrico). La mayoría de las respuestas en el lugar son para atender lesiones, pero por lo general, los vuelos entre establecimientos (o transportes desde un hospital a otro) son para atender enfermedades graves, como ataques cardíacos o derrames cerebrales que requieren procedimientos quirúrgicos (incluidos tratamientos cardíacos invasivos como cateterismo); problemas respiratorios agudos que requieren cuidados intensivos prolongados; problemas a la columna vertebral; quemaduras; complicaciones por enfermedades pediátricas o neonatales; reimplante de extremidades; trasplantes de órganos y complicaciones en embarazos de alto riesgo. Estas misiones entre establecimientos también están demostrando mejoras en los resultados de los pacientes.39, 40, 56 Atención cardíaca y “ataques cardíacos” Un ataque cardíaco ocurre cuando una arteria del corazón está bloqueada por un coágulo y, por lo tanto, el músculo del corazón queda privado de oxígeno. Esto provoca dolor en el pecho y que el músculo esté en riesgo de morir. Si no se tratan, estos bloqueos puedan dañar permanentemente al corazón y causar la muerte o, de otro modo, una calidad de vida reducida. Como en el caso de lesiones graves, existe un intervalo de tiempo (que por lo general se considera es de dos horas desde la aparición de los síntomas) en el cual el corazón puede tratarse eficazmente antes de que éste, y el paciente, muera o quede discapacitado. En cualquier momento durante este intervalo, el corazón comprometido se puede detener o, de otro modo, requerir tratamiento de urgencia para mantener con vida al paciente. Fuera del hospital, el apoyo vital avanzado que prestan los servicios médicos de emergencia con helicópteros ha probado ser eficaz para manejar estas emergencias. Finalmente, estos pacientes necesitan medicamentos o procedimientos quirúrgicos especiales en hospitales especializados en intervenciones cardíacas para disolver el coágulo, permitiendo que vuelva el flujo de sangre y el oxígeno que transporta al músculo del corazón afectado. Si se realiza en dichas dos horas, el corazón puede resultar sin daños o con daños limitados, lo que permite que el paciente no sólo viva, sino también que éste recupere una vida normal. Similares a los centros traumatológicos, se han desarrollado centros de intervención cardíaca para proporcionar los más eficaces de estos tratamientos quirúrgicos cada vez son más comunes. La escasez de centros de intervención cardíaca, particularmente fuera de áreas urbanas, sugiere 11 una función, apoyada por estudios al día, para que los servicios médicos de emergencia con helicópteros transporten pacientes rápidamente, incluso a aquellos pacientes cuyos corazones se han detenido y se ha reanudado su funcionamiento, desde hospitales remotos a estos centros.21, 23, 25, 26, 30, 57, 58, 59 Accidentes cerebrovasculares, derrames cerebrales y “ataques cerebrales” Al igual que los ataques cardíacos, algunos derrames cerebrales son producto de la interrupción del flujo de sangre principalmente provocado por coágulos de sangre, sólo que en este caso ocurren en el cerebro. Como en los ataques cardíacos, existe un intervalo de tiempo (óptimamente 90 minutos, pero generalmente no más de tres horas) en el que un tratamiento para disolver los coágulos puede dar como resultado pacientes que sufren pocos daños o daños y discapacidad que no son a largo plazo producto de estos eventos. Por lo tanto, los pacientes que son transportados a centros de especialidades para el tratamiento de disolución de coágulos que producen derrames cerebrales pueden beneficiarse de un sistema terrestre y aéreo bien coordinado para lograr un traslado temprano.60, 61, 62 Complicaciones del embarazo Cuando una mujer embarazada experimenta complicaciones, éstas pueden ser de riesgo vital para la madre y el bebé, y por lo general requieren la atención especializada que se brinda en hospitales más grandes. El traslado oportuno por parte de servicios aeromédicos a dichos establecimientos mientras los pacientes reciben tratamiento de especialistas obstétricos y neonatales ha demostrado ser segura, rentable y beneficiosa. El traslado por medio de ambulancias terrestres de cuidados intensivos también se utiliza exitosamente en estos tipos de casos. Sin embargo, cuando el tiempo es crítico y se envía un equipo de especialistas desde el hospital receptor para traer a los pacientes al centro de especialidades, el transporte por ambulancia aérea minimiza el tiempo que el paciente y los cuidadores especializados pasan fuera del hospital en una forma que no se puede lograr por vía terrestre. 63, 64, 65, 66 Niños Los niños son pacientes con muy buena capacidad de recuperación que por lo general no presentan señales de enfermedades o lesiones graves hasta que están próximos a la muerte y entonces empeoran repentinamente. Cuando sucede esto, requieren acceso a unidades de cuidado intensivo neonatal y pediátrico, las cuales son cada vez más limitadas. Por lo tanto, el tratamiento de estos neonatos, bebés prematuros y niños pequeños es otro uso principal de los servicios aeromédicos, con la velocidad y un mayor nivel de tratamiento que se proporciona en el camino por parte de un equipo aeromédico. Condiciones quirúrgicas y médicas complejas El servicio aeromédico se indica para varias otras condiciones de pacientes críticas en términos de tiempo. Ejemplos de estas condiciones incluyen aneurismas aórticos, intoxicación o sobredosis, trasplante de órganos (traslado de pacientes y órganos), complicaciones respiratorias que 12 requieren apoyo de un respirador, necesidad de diálisis de emergencia o cuidado en una cámara hiperbárica (por ejemplo, intoxicación por monóxido de carbono e incidentes que se producen durante el buceo).15, 39, 40 Situaciones con cantidades masivas de víctimas y preparación nacional Los helicópteros y las aeronaves de ala fija desempeñan una función fundamental en la preparación para casos de emergencia, debido a su capacidad para trasladar pacientes rápidamente hacia la atención especializada por áreas regionales amplias. Los hospitales que se encuentran cerca de lugares con cantidades masivas de víctimas, pronto se verán abrumados con casos que requieren atención, ya sea que los pacientes estén enfermos o lesionados; incapacitados debido a cortes de electricidad prolongados, con falta de agua fresca o disminución de suministros y medicamentos; o incluso pueden ser evacuados debido a condiciones locales. Si bien es una práctica común enviar a los pacientes con lesiones menos graves por tierra a hospitales lejanos para reducir la presión en establecimientos locales, los helicópteros médicos y las aeronaves de ala fija brindan la opción a quienes se encuentran en el lugar de trasladar también a pacientes con enfermedades o lesiones graves a hospitales más lejanos. En casos de emergencia, los helicópteros también son útiles para evacuar hospitales en áreas que se ven amenazadas por huracanes u otros desastres, y generalmente se utilizan para llevar personal médico, equipos y suministros que se necesitan urgentemente (como sangre y productos derivados de ella) al lugar cuando la velocidad es importante y los caminos están intransitables. Las ambulancias aéreas de ala fija pueden expandir esa capacidad al reunirse con helicópteros médicos o unidades de ambulancias terrestres de cuidados intensivos para llevar suministros o transportar pacientes por distancias incluso mayores. Cuando se incorporan a un plan de respuesta frente a emergencias locales, regionales o nacionales, los servicios aeromédicos de helicópteros y aeronaves de ala fija proporcionan recursos sumamente necesarios y altamente experimentados que se pueden desplegar rápidamente en situaciones de desastre, ya sean naturales o provocadas por el hombre. Debido a que actualmente la mayoría de las ambulancias aéreas de los Estados Unidos son civiles, éstas aumentan la capacidad de respuesta frente a emergencias sin costo para los contribuyentes. Las fotografías que aparecen en esta página son cortesía de David Krussow, STARFlight, Austin, Texas. 13 Problemas que enfrentan los servicios aeromédicos y los responsables de elaborar políticas El crecimiento en la cantidad de servicios aeromédicos y los tipos de misiones que enfrentan, atrae mayor atención al funcionamiento de dichos servicios y al crecimiento en sus números. Costos y rentabilidad Mantener los recursos necesarios para responder con una ambulancia aérea a una emergencia es una tarea compleja y costosa, muy parecida a la de los cuerpos de bomberos y departamentos de urgencias de los hospitales. Los elevados costos fijos de mantener una infraestructura de respuesta son necesarios para estar preparado para prestar servicios. Esto es especialmente problemático al mantener servicios rurales de atención de urgencia. Estudios recientes de la Mesa Redonda de Salud del Área Capital (Capital Area Health Roundtable) y la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO, Government Accountability Office) han destacado que el reembolso actual no apoya adecuadamente el costo de mantenimiento de los servicios. 67, 68 La compra o el arriendo, la operación, el almacenamiento y el mantenimiento de los helicópteros y las aeronaves de ala fija cuesta millones de dólares.69 Personal altamente capacitado se encuentra disponible las 24 horas, los 7 días de la semana y la infraestructura que los rige, capacita, financia, apoya y conecta, y su servicio al sistema de servicios médicos de emergencia, también son caros. Como pocos sistemas son financiados públicamente, mantener la disponibilidad de este recurso esencial se traduce inevitablemente en un cargo por misión de paciente único que parece ser caro en comparación con una ambulancia terrestre de menor precio para la misma misión. Sin embargo, se ha comprobado que es un error hacer tal comparación aislada y comparar el menor cargo con economía y el mayor cargo con costos prohibitivos. En el esfuerzo de atención administrada de mediados de la década de los 90, los servicios aeromédicos se interpretaban de esta manera por algunos, como un sistema caro que contribuía al elevado costo de la atención de salud.69 Ellos postulaban que la industria se contraería y requeriría un rediseño.69 Esto no sucedió y, a medida que el valor de los servicios aeromédicos se demuestra cada vez más, el reembolso por los servicios aeromédicos en realidad ha mejorado y los servicios se han ampliado en respuesta a otros cambios en el sistema de atención de salud. Se ha desarrollado al menos un modelo económico cuidadosamente elaborado que compara los helicópteros y los servicios médicos de emergencia.70 Demuestra que a nivel de sistema (es decir, el financiamiento de un sistema de ambulancias aéreas frente a un sistema de ambulancias terrestres que cubren la misma gran área geográfica y el mismo volumen de llamadas), el costo por paciente transportado sería de $4,475 en el sistema terrestre y $2,811 en el sistema aéreo (valor del dólar en 1991). Un estudio de rentabilidad de servicios médicos de emergencia con helicópteros para 14 pacientes con traumatismos realizado por Gearhart y sus colegas concluyó que dicho servicio es, en efecto, rentable.71 Al observar el costo anual de las vidas salvadas por 500 intervenciones médicas de urgencia, otro investigador descubrió que el promedio sería de $19,000 (por ejemplo, tratamiento con medicamentos para disolver coágulos para casos de ataque cardíaco es $32,678; diálisis renal es $40,000). Ese estudio calculó que los servicios médicos de emergencia terrestres con paramédicos costarían $8,886 por año de vida salvada mientras que el documento de Gearhart establece una cifra comparable para el uso de helicópteros médicos de $2,454.71, 72 Estudios académicos indican que el transporte aeromédico tiene el menor costo por año de vida salvada de todas las intervenciones de servicios médicos de emergencia. A medida que surgen decisiones cada vez más difíciles acerca de prorratear dólares para atención de salud en nuestra sociedad que está envejeciendo, los servicios aeromédicos no sólo deben considerarse rentables en sus funciones actuales, pero pueden prestar servicios médicos de nuevas formas a cada vez más poblaciones aisladas. Utilización adecuada Debido a que los servicios aeromédicos afectan las decisiones acerca de dónde se hospitaliza a los pacientes, cómo estos pacientes llegan a establecimientos de atención de salud y qué tipo de atención reciben en el camino, los hospitales y otros proveedores de servicios médicos de emergencia de las áreas en que prestan servicios generalmente muestran un gran interés en garantizar que los servicios aeromédicos se utilicen adecuadamente. Esto no siempre es fácil: Debido a que identificar las condiciones médicas en el campo es un desafío y algunas condiciones son asintomáticas, existe un límite de hacer uso de los servicios aeromédicos para quienes probaron después del hecho que no los necesitaban (“sobreevaluación”), para garantizar que aquellos que se beneficiarán más de los servicios aeromédicos no se “pierdan” (o sea, privados del servicio o “subevaluados”). En 1990, la Asociación de Servicios Aeromédicos publicó un “documento de posición sobre el uso apropiado de los servicios aeromédicos”.73 Estableció un conjunto de criterios específicos a la circunstancia y al paciente para aprobar solicitudes de vuelos y para revisar retrospectivamente el desempeño de los vuelos. Al menos cuatro estados han usado criterios como estos para revisar la idoneidad de la utilización y encontraron que el cumplimiento de estos criterios era alto.74, 75 Uno de estos estados cambió sus criterios para ampliar lo que se consideraba el uso adecuado de servicios aeromédicos basándose en dicha revisión.75 Más recientemente, la Asociación Nacional de Médicos de Servicios Médicos de Emergencia (NAEMSP, National Association of EMS Physicians) ha actualizado estos criterios de evaluación en un documento de posición publicado en 2003. Estas “Pautas para el despacho aeromédico” recibieron el respaldo de la Asociación de Servicios Aeromédicos (AAMS, Association of Air Medical Services), así como también de la Asociación de Médicos Aeromédicos (AMPA, Air Medical 15 Physicians Association), que también ha publicado en forma separada los criterios de uso de los servicios aeromédicos. Estas pautas están disponibles no sólo para ayudar a establecer criterios para aprobar vuelos, sino también para revisar su utilización. Es esencial que se implementen mecanismos para aprobaciones eventuales de vuelos y para revisión retrospectiva en el nivel de servicio. Es sumamente deseable que se logre la revisión de la utilización a un nivel regional y estatal donde existen múltiples servicios. Para los planificadores del sistema existen otras dos herramientas para la idoneidad y la mejora de la utilización. La primera es un pronóstico de utilización para servicios médicos de emergencia con helicópteros.76 La aplicación de este pronóstico en un área geográfica seleccionada y luego comparar este resultado con la actividad de vuelo real, puede entregar a los planificadores una mejor comprensión de la mezcla e idoneidad del caso. El Instituto de Economía de la Salud Leonard Davis (Leonard Davis Institute for Health Economics) desarrolló un modelo para la ubicación óptima de centros traumatológicos y helicópteros llamado TRAMAH (Modelo de distribución de recursos de traumatismos para ambulancias y hospitales).77 Se podría utilizar para hacer un modelo según los patrones de actividad reales existentes, para la asignación futura de los recursos. Un estudio reciente utilizando esta metodología identificó que los helicópteros aumentaron significativamente la cantidad de personas que podían llegar a un centro traumatológico dentro de la “hora dorada”, pero también descubrió que más de 46 millones de personas en los Estados Unidos no pueden llegar de manera oportuna a un centro traumatológico.78 La investigación continua que usa las mismas bases de datos indica que existe una correlación entre la falta de acceso oportuno a centros traumatológicos y a los servicios médicos de emergencia con helicópteros.79 Un estudio reciente usando el Modelo de distribución de recursos de traumatismos para ambulancias y hospitales (TRAMAH, Trauma Resource Allocation Model for Ambulances and Hospitals) identificó que los helicópteros Seguridad aumentaron Desde 1972 a septiembre de 2002, momento en el que terminó la investigación de seguridad de los servicios médicos de emergencia con helicópteros realizado por el Dr. Ira Blumen de la Red Aeromédica de University of Chicago (UCAN, University of Chicago Aeromedical Network), los servicios médicos de emergencia con helicópteros habían volado aproximadamente tres millones de horas, transportando a unos dos a tres cuartos de millón de pacientes.10 En ese período se produjeron 166 accidentes en los que participaron servicios médicos de emergencia con helicópteros, con 183 muertes. considerablemente la El estudio de la Red Aeromédica de University of Chicago descubrió que aunque la cantidad de accidentes que se produjo cada año varió, el número por cada 100,000 pacientes trasladados bajó de 17.36 en 1980 a 5.5 en 2001.10 El riesgo para los pacientes, que se estimó en los años que duró el estudio, indicó un índice de mortalidad de 0.76/100,000 pacientes. El ingreso posterior a un hospital conlleva un mayor riesgo de muerte como consecuencia de complicaciones o errores: Varios cálculos estimados recientes indican un rango de 1.2/100,000 pacientes a 292/100,000 pacientes.10 más de 46 millones de cantidad de personas que pueden llegar a un centro traumatológico en la “hora dorada”, y también descubrió que personas en los Estados Unidos no pueden llegar a un centro traumatológico en forma oportuna. 16 Transportar la medicina está entre las tareas más complejas de la medicina. Vision Zero y el Equipo Internacional de Seguridad con Helicópteros reconocen la necesidad de realizar esfuerzos multidisciplinarios, colaborativos y globales hacia el mejoramiento de la seguridad. No obstante, cualquier forma de transporte médico implica el riesgo inherente y en los últimos años la cantidad de accidentes ha aumentado, lo cual se asocia al aumento del número de helicópteros y transportes. En un comentario editorial en el estudio de la Red Aeromédica de University of Chicago, un ex presidente de la Asociación Nacional de Pilotos de Servicios Médicos de Emergencia (National EMS Pilot Association) enfatiza que las causas de los accidentes no han cambiado con los años. Las tres causas más frecuentes son “la toma de riesgos, la planificación antes del vuelo y la toma de decisiones durante el vuelo”, lo que refleja la presión única que tienen los personales por las condiciones de los pacientes y por las sensaciones que provoca la obligación de volar. La comunidad de servicios aeromédicos ha dado pasos importantes, especialmente en el área de administración de recursos de la tripulación aérea (una herramienta de seguridad comprobada en la industria de las líneas aéreas) para mejorar la seguridad para los pacientes.10 Algunos programas de servicios médicos de emergencia con helicópteros están reemplazando las aeronaves, contratando pilotos para que vuelen siguiendo las Reglas de vuelo por instrumentos (IFR, por sus siglas en inglés) y empleando nuevas tecnologías como lentes de visión nocturna (NVG, por sus siglas en inglés) y sistemas de advertencia y alerta de terreno (TAWS, por sus siglas en inglés), que son especialmente importantes cuando las condiciones climáticas cambian abruptamente en medio de una misión.80 Transportar la medicina está entre las tareas más complejas de la medicina y se caracteriza por la necesidad de brindar acceso inmediato a atención apremiante para los enfermos y lesionados graves, al mismo tiempo que las operaciones se realizan en condiciones ambientales adversas con tiempo y planificación limitados. Tal como el juez Oliver Wendell Holmes indicó una vez: “Estar seguro no significa estar libre de riesgos”. Reconocer que no se puede eliminar por completo el riesgo es esencial para el público que recibe los servicios y los pilotos, las enfermeras, los paramédicos, los médicos y otros proveedores de atención de salud que prestan la atención, que el entorno de trabajo sea tan seguro como sea posible. Con este fin, la Asociación de Servicios Aeromédicos ya comenzó Vision Zero (http://visionzero.aams.org) y se integró al Equipo Internacional de Seguridad con Helicópteros (HIST, International Helicopter Safety Team, www.ihst.org), dirigido por la Sociedad Estadounidense de Helicópteros (AHS, American Helicopter Society), la Asociación Internacional de Helicópteros (HAI, Helicopter Association International), la Administración Federal de Aviación (FAA, Federal Aviation Administration), y el Ministerio de Transportes de Canadá (Transport Canada) para reducir los accidentes en helicóptero en 80% durante los próximos diez años. Estas iniciativas buscan métodos y enfoques más eficaces para evitar los errores en sistemas complejos basados en la premisa del modelo que los proveedores deben trabajar en conjunto y de manera voluntaria, con organismos reguladores para identificar y acelerar la implementación de los estándares de mejores prácticas. Estos esfuerzos se concentran en 17 desarrollar e implementar estrategias utilizando análisis de coste-beneficio y mejores prácticas basadas en la evidencia relacionados con la seguridad, con el fin de priorizar los planes financieros y de inversiones para lograr un objetivo de cero casos de lesiones graves o muertes. Necesidad de mejorar la planificación, coordinación y supervisión La aeromedicina desempeña una función única dentro de un sistema de atención de salud más grande. Puede apreciarse como un esfuerzo multifacético que trabaja con servicios médicos de emergencia, seguridad pública, salud pública y hospitales, para crear un puente entre el lugar donde se encuentra el paciente herido o lesionado grave (ya sea en el lugar donde se produjo la lesión o en un hospital) y la atención de especialistas. La aeromedicina es esencial para garantizar este acceso, especialmente para los pacientes que se encuentran en entornos más rurales. La integración de la aeromedicina a la atención de salud es esencial a nivel local, estatal, regional y nacional. El documento de consenso nacional recientemente publicado “Rural and Frontier EMS Agenda for the Future” (Agenda para el futuro de los servicios médicos de emergencia rurales y de zonas apartadas), identificó a los servicios aeromédicos como un componente vital de los sistemas de servicios médicos de emergencia rurales o fronterizos, y como el único servicio de nivel de apoyo vital avanzado disponible en muchas zonas del país.55 Señaló la proliferación de programas y la ausencia, en muchos estados, de la planificación, coordinación y regulación. Se recomienda formalmente que el sistema “planifique, integre y regule a nivel estatal el transporte aeromédico de cuidados críticos y otros sistemas de atención de especialistas y transporte regional o estatal”.55 La Asociación Nacional de Funcionarios Estatales de Servicios Médicos de Emergencia (NASEMSO, National Association of State EMS Officials), la Asociación de Servicios Aeromédicos y la Asociación Nacional de Médicos de Servicios Aeromédicos se unieron para emprender el desarrollo de un documento de “mejores prácticas” para que los estados lo utilicen para establecer mecanismos de planificación, coordinación y supervisión. Cuando esté disponible se deberá instar a los organismos de servicios médicos de emergencia a utilizarlas, así como también a trabajar con otras entidades con jurisdicción sobre los servicios aeromédicos, para coordinar mejor la regulación de estos servicios que operan en varios estados. Además, como se demostró en los desastres naturales que ocurrieron el año 2005 en los Estados del Golfo, se deben incluir servicios aeromédicos civiles como parte integral de los planes de respuesta frente a desastres nacionales y regionales. Debido a la organización de los programas aeromédicos y a la variedad y la velocidad únicas de las aeronaves con equipos y personal médicos, se encuentran disponibles numerosos recursos de manera inmediata para ayudar en respuesta y evacuaciones en caso de desastre dentro de un estado, entre estados o a nivel regional. En y más allá de su rol integrado en el sistema de servicios médicos de emergencia y de su única función como un puente entre la comunidad y los centros Es esencial que los líderes médicos y personas responsables de elaborar políticas integren recursos aeromédicos en sus protocolos de respuesta y desastre para garantizar la atención rápida y coordinada, y la evacuación de pacientes con enfermedades o lesiones graves sin importar la magnitud o la ubicación del evento. 18 médicos de especialistas de atención terciaria, estos proveedores también desempeñan una función esencial y multifacética en la respuesta a desastres mayores. Notablemente, la gran mayoría de los servicios de transporte aeromédicos que se encuentran disponibles de inmediato cuando ocurren desastres son servicios no gubernamentales. Como se pudo ver en la problemática evacuación de los hospitales en Nueva Orleans y en lugares de Mississipi después del huracán Katrina, sin la presencia de estos “departamentos de urgencia voladores” se habrían perdido literalmente miles de vidas adicionales. En cualquier situación de desastre, el tiempo es de fundamental importancia. La rápida respuesta a las solicitudes por seguridad pública, servicios médicos de emergencia, hospitales y centros de operaciones de emergencia (EOC, por sus siglas en inglés) es necesaria a fin de maximizar los servicios para salvar vidas. Los retrasos en las solicitudes y la mala coordinación para autorizar la respuesta pone vidas adicionales en riesgo antes o después del desastre. Los planes deben incluir organismos solicitantes autorizados designados con anterioridad, con el fin de facilitar el despliegue rápido. Es esencial que los nuevos planes de respuesta frente a desastres regionales, estatales y federales incorporen los recursos aeromédicos civiles para garantizar la evacuación rápida y coordinada de los enfermos y lesionados graves, ya sean de hospitales o del lugar donde ocurre la emergencia. 19 El futuro Mantener el acceso a la atención es un desafío incluso mayor para los proveedores de atención de salud y las personas responsables de elaborar políticas. Los desastres naturales y provocados por el hombre destacaron la necesidad de un sistema aeromédico eficaz y que se encuentre disponible. Esto se ejemplificó en la respuesta aeromédica a las víctimas del huracán Katrina, en el que se salvaron miles de vidas durante la respuesta en el lugar del hecho y la evacuación de los pacientes enfermos graves de los hospitales. Se ha demostrado que los servicios aeromédicos son rentables cuando se trata de ver los costos médicos totales, así como también de la cantidad de vidas salvadas. Similar a lo que ocurre con otras intervenciones eficaces de atención de salud (como sistemas traumatológicos), tecnologías (como tomografías computarizadas) y cirugías de especialidades (como las que se les realizan a los pacientes que sufren ataques cardíacos), el mantenimiento de los servicios aeromédicos es caro. Es esencial que la política pública y el financiamiento mantengan los servicios aeromédicos como una parte fundamental de la red de seguridad de preparación médica y de emergencia en nuestras comunidades. Mantener la preparación para responder es tan esencial como la atención real que prestan los servicios aeromédicos. De acuerdo con el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, “se estimaba que en el año 2000 había en el mundo 605 millones de personas de 60 años o mayores. Se proyecta que esta cifra aumente a cerca de dos mil millones en el año 2050”.81 Esta tendencia es particularmente notoria en los Estados Unidos con el rápido envejecimiento de la población, sobre todo en las áreas rurales. Las necesidades médicas de urgencia de esta población se reflejan en los crecientes índices de traumatismos, así como también en el aumento de afecciones críticas en términos de tiempo, como ataques cardíacos, derrames cerebrales y emergencias quirúrgicas no traumatológicas (por ejemplo, aneurismas abdominales y sangrado estomacal o intestinal).82 Mediante estudios recientes que examinan la respuesta de los pacientes de la tercera edad con traumatismos se descubrió que muchos de estos pacientes actualmente no llegan a los centros traumatológicos de manera oportuna.83, 84 A medida que la ciencia médica crea nuevas formas de intervenir en emergencias médicas con tecnología que debe utilizarse dentro de un intervalo de tiempo crítico, aumentará la necesidad de servicios aeromédicos para llevar esa tecnología a los pacientes o de llevar a los pacientes a esa tecnología. Las presiones financieras actuales del sistema de salud sólo aumentarán. La falta de compatibilidad entre la demanda y la disponibilidad del recurso se está agudizando más. Estas presiones continuarán deteriorando la disponibilidad de la prestación de atención especializada en hospitales y las tecnologías para salvar vidas, particularmente en áreas rurales. La Garantizar la disponibilidad de servicios aeromédicos eficaces, sostenibles y disponibles es esencial para el desarrollo y la implementación de planes eficaces de respuesta frente a emergencias en casos de desastres naturales y provocados por el hombre. 20 necesidad de aumentar el acceso a recursos de atención especializada incluso más escasa y el aumento de la necesidad para que esta atención sea móvil aumentará la necesidad de servicios aeromédicos. El Servicio del Médico del Aire (Flying Doctor Service) de Australia es un modelo exitoso de la prestación de servicios médicos de emergencia y de rutina por aire en las poblaciones aisladas. La Asociación de Servicios Aeromédicos cree que es esencial asegurarle a cada persona el acceso al transporte aeromédico y de cuidados intensivos de calidad cuando sea necesario. Es fundamental que la política y el financiamiento apoyen la disponibilidad y el sostenimiento de los servicios aeromédicos a todas las comunidades. Les pressions financières actuelles sur le système de soins de santé ne feront qu’augmenter. La disparité entre la demande et la disponibilité des ressources se creuse plus encore. Ces pressions continueront de réduire la disponibilité de la prestation de soins spécialisés au sein des hôpitaux et de technologies salvatrices, particulièrement dans les zones rurales. Le besoin d’un accès accru à des ressources de soins spécialisés de plus en plus rares, et la nécessité accrue envers une mobilité de ces soins augmentera le besoin des AMS. Le Flying Doctor Service en Australie est un modèle de succès quant à la prestation de services médicaux tant de routine que d’urgence par la voie aérienne à des populations éloignées. L’Association of Air Medical Services estime qu’il est essentiel de garantir que chaque personne a accès à un transport aérien médical et à des soins intensifs de qualité en cas de besoin. Il est impératif que la politique et le financement soutiennent la disponibilité et la viabilité des AMS pour chaque collectivité. 21 Referencias 1. C-47 Hospital aircraft. Disponible en: http://www.wpafb. af.mil/museum/modern_flight/c47hsp.htm. Acceso el 20 de diciembre de 2005. 2. Holmes E. MEDEVAC flight in WWII. Disponible en: http://www.helis.com/stories/burma45.php. Acceso el 20 de diciembre de 2005. 3. Air Force helicopters, past, present. Disponible en: http:// www-rucker.army.mil/FTS/Helo%20Pages/AF%20Helos.html. Acceso el 20 de diciembre de 2005. 4. Driscoll RS. New York chapter history of military medicine. 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AMS: Servicios aeromédicos (se brindan en un helicóptero o avión). BLS: Apoyo vital básico, el nivel más básico de atención médica que se entrega en una ambulancia, generalmente por socorristas y servicios médicos de emergencia. CAH: Hospital de acceso crítico, según lo definen los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS, por sus siglas en inglés). CCG: Cuidado intensivo terrestre, una ambulancia terrestre que brinda un nivel de atención médica superior al apoyo vital avanzado y está dotada de enfermeras y paramédicos especialmente capacitados. EMS: Servicios médicos de emergencia. Sistema de servicios médicos de emergencia: Una disposición de recursos médicos, de salud y de seguridad pública para evitar que ocurran enfermedades y lesiones de emergencia, y atenuar el impacto de dichas ocurrencias que no se pueden evitar. Puede ser a nivel local, regional, estatal o nacional. EMT: Técnico en urgencias médicas, un encargado médico con capacitación a nivel de apoyo vital básico. Ala fija: Avión. Zona apartada: Una región rural del país que no se ha explorado ni desarrollado. HEMS: Servicios médicos de emergencia con helicópteros (ambulancia aérea de helicóptero que brinda servicios médicos de emergencia). Transporte entre establecimientos: Atención médica que se brinda en el camino entre dos establecimientos, generalmente entre un hospital comunitario local y un centro traumatológico regional u otro centro de especialidad. Morbilidad: La velocidad y la extensión de una enfermedad. Mortalidad: La tasa de muerte. Paramédico: Un cuidador médico con capacitación a nivel de apoyo vital avanzado. Ala giratoria: Helicóptero. Rural: Una región del país que está fuera de las áreas urbanas o suburbanas, generalmente con mayores distancias entre los hogares y los servicios médicos, y servicios de hospitales y médicos más limitados. Hospital o atención terciarios: Un nivel especializado y altamente técnico de atención de salud que incluye diagnóstico y tratamiento de enfermedades y discapacidades en hospitales grandes, sofisticados, de investigación y docentes que prestan servicios en una gran región geográfica. Las unidades de cuidado intensivo especializado, los servicios de apoyo de diagnóstico avanzado, el personal especializado y los médicos especialistas para cuidado cardíaco, médico, neurológico, pediátrico, neonatal y para bebés, son característicos de la atención médica terciaria. Traumatismo: Una lesión corporal producida por violencia o impactos. Subsistema de traumatología: Una categoría de organismos y hospitales de servicios médicos de emergencia que prestan servicios en una región mayor a la habitual debido a que proporcionan atención especializada para víctimas de lesiones traumáticas 25 Vínculos Asociación de Médicos Aeromédicos ...............................................................................................www.ampa.org Asociación de Enfermeras de Transporte por Aire y Superficie ......................................................... www.astna.org Academia Estadounidense de Sección de Pediatría Medicina de Transporte ............. www.aap.org/sections/transmed Colegio Estadounidense de Médicos de Emergencia del Grupo de Trabajo Aeromédico ................... www.acep.org Colegio Estadounidense de Cirujanos ................................................................................................www.facs.org Asociación de Servicios Aeromédicos ............................................................................................... www.aams.org Comité de Acreditación de Sistemas de Transportes Médicos...........................................................www.camts.org Asociación Internacional de Helicópteros ........................................................................................www.rotor.com Asociación Internacional de Paramédicos de Vuelo ...........................................................www.flightparamedic.org Asociación Nacional de Especialistas en Comunicación ...................................................................www.naacs.org Asociación Nacional de Médicos de Servicios Médicos de Emergencia .........................................www.naemsp.org Asociación Nacional de Funcionarios Estatales de Servicios Médicos de Emergencia ................... www.nasemso.org Asociación Nacional de Pilotos de Servicios Médicos de Emergencia ............................................www.nemspa.org Asociación Nacional de Salud Rural ..........................................................................................www.nrharural.org Real Servicio del Médico del Aire de Australia .......................................................... www.flyingdoctor.net/who.htm SEGURIDAD Consejo Asesor de Seguridad Aeromédica.......................................................................................www.amsac.org Seguridad para los Servicios Médicos de Emergencia con Helicópteros ....................................www.hemssafety.com Sitio Web de Seguridad para Helicópteros Civiles de la NASA .................................... http://safecopter.arc.nasa.gov Iniciativa Vision Zero ...................................................................................................... http://visionzero.aams.org INVESTIGACIÓN Fundación para la Investigación y la Educación Aeromédica..................................................... www.fareonline.org Instituto de medicina ................................................................................... www.iom.edu/CMS/3809/16107.aspx GOBIERNO Escuela de Medicina de Aviación del Ejército de los Estados Unidos— Fort Rucker, Alabama ........................................................................................................ usasam.amedd.army.mil Administración Federal de Aviación ...................................................................................................www.faa.gov 26 Agradecimientos La Fundación para la Investigación y la Educación Aeromédica (FARE, Foundation for Air-Medical Research and Education) desea extender sus agradecimientos a las siguientes personas y organizaciones que contribuyeron mucho a la elaboración de esta publicación. Kevin McGinnis, MPS, EMT-P y Thomas Judge, CCT-P, por su cuidadoso trabajo al investigar y redactar este documento. Comité editorial Blair M. Beggan Amber Bullington Cheryl Erler, RN, MS Tom Judge, CCT-P Dawn M. Mancuso, CAE, MAM Mark Mennie John Wish, PhD Christine Zalar 27 Miembros de la junta de directores de FARE Tom Allenstein, RN, CMTE Joan Black, CFRE Reed Brozen, MD, FACEP Cheryl Erler, RN, MS Johnny Delgado, BA, EMT-P, CMTE Kevin Hutton, MD, FACEP, CHC Tom Judge, CCT-P Mark Mennie Connie Schneider Eastlee, RN, MS, CMTE D. Gregory Powell, MD, FRCPC Shirley Scholz, RN, CCRN, EMT-P Dudley Smith, MSHPA, CMTE J. Russell Spray John Wish, PhD Craig Yale, CMTE Christine Zalar Copyright © 2006 Foundation for Air-Medical Research and Education (FARE) | www.fareonline.org 526 King Street, Suite 415, Alexandria, Virginia 22314-3143 USA Teléfono: +1.703.836.8732 | Fax: +1.703.836.8920 ISBN 0-9779331-0-5 Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida, almacenada en un sistema de recuperación ni transmitida en forma alguna ni por ningún medio, ya sea electrónico, mecánico, por fotocopia, grabación o de otro tipo, sin la autorización escrita previa del propietario de los derechos de autor. Impreso en Estados Unidos de América. Las fotografías son cortesía de Mark Mennie, Alberta STARS/Mark Mennie (fotografía de las gafas de visión nocturna), David Krussow/StarFlight (imágenes de Katrina), REMSA CareFlight, AirLife San Antonio, CareFlite Dallas y LifeFlight of Maine. FOUNDATION FOR AIR-MEDICAL RESEARCH & EDUCATION Foundation for Air-Medical Research & Education (FARE) 526 King Street, Suite 415 Alexandria, Virginia 22314-3143 USA Teléfono: +1.703.836.8732 Fax: +1.703.836.8920 www.fareonline.org