369132. . Cuarta Sala. Quinta Época. Semanario Judicial de la Federación. Tomo CV, Pág. 748. TRABAJADORES CON LICENCIA PARA DESEMPEÑAR PUESTOS DE ELECCION POPULAR. Si el laudo reclamado se funda en que habiendo obtenido un trabajador, permiso para asumir un puesto de elección popular, permiso que motivó el ascenso de los ahora quejosos, éstos, conforme a la fracción XI del artículo 111 de la Ley Federal del Trabajo, adquirieron el derecho para ser considerados como trabajadores de planta, cuatro años después, pero habiendo ejercitado la acción para que se les reconociese tal derecho en un plazo mayor al de un año, tal acción estaba prescrita; debe decirse que tal argumentación es sofística, porque el mencionado artículo 111, que señala cuáles son las obligaciones de los patrones, en su fracción XI, establece entre tales obligaciones la de permitir a los trabajadores faltar a sus labores para desempeñar una comisión accidental o permanente de su sindicato o del Estado, previendo que, cuando esa comisión sea de carácter permanente o desempeñen cargos públicos de elección popular, el trabajador o trabajadores podrán volver al puesto que ocupaban, conservando todos los derechos derivados de sus respectivos contratos, siempre y cuando regresen a sus labores dentro del término de cuatro años; y en consecuencia, en el caso, la obligación de la empresa, de considerar como empleados de planta a los quejosos, nació al vencerse el plazo de cuatro años que la ley concede al permisionario, para poder regresar a sus labores, conforme a la primera parte de la mencionada fracción XI del citado artículo 111, como lo ordena la parte final del mismo párrafo; en cambio, el derecho de los trabajadores para ejercitar la acción de cumplimiento de aquella obligación, nació en el momento en que la misma obligación dejó de cumplirse, con violación de los derechos que automáticamente y por disposición expresa de la ley, adquirieron. Por tanto, si el trabajador permisionario se presentó nuevamente a ocupar el puesto que desempeñaba al concedérsele el primer permiso por la empresa, después de un año de haberse vencido aquel término de cuatro años, y con motivo de esa presentación los trabajadores quejosos fueron descendidos a los puestos que desempeñaban al concederse el susodicho permiso, es claro que en la fecha de presentación del trabajador permisionario, que fue la misma en que los quejosos fueron descendidos, nació el derecho de éstos últimos para exigir a la empresa el cumplimiento de sus obligaciones, y habiendo presentado su demanda laboral dentro de un mes, debe considerarse que su acción no pudo estar prescrita, por no haber transcurrido el plazo de un año que para el caso exige el artículo 328 de la Ley Federal del Trabajo. Amparo directo en materia de trabajo 7092/48. Pérez Basilio y coags. 24 de julio de 1950. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: Emilio Pardo Aspe. La publicación no menciona el nombre del ponente. -1-