15. Investigación y Evaluación Educativa

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Indice Capítulo 15
15. INVESTIGACIÓN Y EVALUACIÓN EDUCATIVA ........ 2
15.1. INVESTIGACIÓN EDUCATIVA .............................................................................. 2
15.2. EVALUACIÓN EDUCATIVA ................................................................................... 3
15.2.1. Evaluación general del sistema educativo ................................................................. 3
15.2.2. Evaluación de centros docentes .................................................................................. 4
15.2.3. Valoración del profesorado ........................................................................................... 4
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15. INVESTIGACIÓN Y EVALUACIÓN EDUCATIVA
15.1. INVESTIGACIÓN EDUCATIVA
La LOGSE considera la investigación e innovación educativa como uno de los elementos que
favorecen la calidad y mejora de la enseñanza y que requieren una atención prioritaria por parte de los
poderes públicos.
Una de las competencias que la Constitución reserva al Estado (art. 149.15) es la relativa a la
coordinación de la investigación educativa, mientras que el desarrollo y fomento de la misma competen a
las distintas administraciones autonómicas.
El Ministerio de Educación y Ciencia publicó en 1990 el Plan Nacional de Investigación Educativa,
que perseguía el desarrollo cualitativo y cuantitativo de la investigación en esta materia. Con él se intenta
alcanzar una adecuada coordinación entre las actividades de las diversas instituciones dedicadas a la
investigación, los investigadores -favoreciendo la realización de reuniones de coordinación entre los
mismos-, las administraciones educativas y las instituciones internacionales que dedican parte de sus
esfuerzos al desarrollo de la educación. Trata de favorecer, asimismo, el desarrollo de líneas de
investigación de interés para la mejora de la calidad del sistema educativo, la formación de personal
investigador y, por último, la difusión de los resultados de las investigaciones realizadas en el marco del plan.
El Centro de Investigación y Documentación Educativa (CIDE) es el organismo encargado de llevar
a cabo la tarea de coordinar esta investigación educativa. Tras la reestructuración del Ministerio de
Educación y Cultura en verano de 1996, las funciones de este organismo se centran en seis puntos:
* la realización de estudios e informes sobre el sistema educativo;
* la programación, coordinación, evaluación y realización de la investigación educativa, y la difusión
de los resultados de la misma;
* la innovación, experimentación y desarrollo curricular de las enseñanzas, así como la elaboración
y difusión de materiales curriculares y otros documentos de apoyo que faciliten al profesorado el desarrollo de sus funciones;
* el diseño y desarrollo de la orientación educativa, psicopedagógica y profesional en los niveles no
universitarios;
* el diseño y desarrollo de las orientaciones educativas de la legislación vigente en el campo de la
educación especial; y
* la organización y funcionamiento de la documentación educativa y de la biblioteca y el archivo del
Ministerio de Educación y Cultura.
El CIDE, en el ámbito de sus funciones, participa, gestiona o colabora en distintos proyectos
internacionales. En ese sentido, pertenece al CIDREE (Consorcio Europeo de Instituciones de Investigación
y Desarrollo de la Educación), en el que se encuentra la unidad española de Eurydice; participa en foros
internacionales con la Unión Europea, el Consejo de Europa, la UNESCO, la Organización de Estados
Iberoamericanos, la OCDE o el Convenio Andrés Bello; coordina el programa AIRÓN en España y la Red
Europea de Escuelas Promotoras de Salud (REEPS); etc.
Entre sus funciones más directamente relacionadas con la investigación, sus tareas se centran en
dos ámbitos: realizar estudios e investigaciones sobre diferentes aspectos del sistema educativo, y financiar
y coordinar investigaciones realizadas en todo el Estado español. Como resultado de esta línea de
actuación, el CIDE ha financiado y realizado, desde 1982 hasta 1995, un total de 452 investigaciones (tabla
15.1). A éstas hay que añadir 47 trabajos de desarrollo de materiales curriculares financiados a través del
concurso nacional de 1990, y 139 investigaciones que se encuentran en proceso de realización.
Igualmente, hay otras entidades implicadas en la realización de la investigación educativa. Entre
ellas cabe destacar las universidades, los centros de profesores y diversos organismos dependientes de
las administraciones educativas que, además de realizar estudios, dedican parte de sus esfuerzos a
financiar y desarrollar esta tarea.
La investigación educativa realizada desde las universidades se lleva a cabo fundamentalmente a
través de los departamentos universitarios -en especial los relacionados con las ciencias de la educación,
la psicología, la sociología y los departamentos de las escuelas de formación de profesorado- y de los
institutos de ciencias de la educación (ICE).
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Los centros de profesores incluyen entre sus funciones el fomento, promoción y difusión de
actividades de investigación e innovación entre los docentes, principalmente en campos relacionados con
la realidad de los centros y con la renovación pedagógica de los profesores implicados.
Otros centros de investigación dependientes de las distintas administraciones educativas son el
Instituto Andaluz de Evaluación Educativa y Formación del Profesorado -dependiente de la Junta de
Andalucía-,el Instituto Municipal de Investigación en Psicología Aplicada de la Educación (IMIPAE) -dependiente
del Ayuntamiento de Barcelona y cuya labor se enfoca hacia la investigación en psicología y educación- y el
Centro Madrileño de Investigaciones Pedagógicas (CEMIP) -dependiente del Gobierno de la Comunidad
Autónoma de Madrid- que, además de realizar labores de evaluación del sistema educativo y de formación
permanente del profesorado, se encarga de financiar proyectos de investigación de interés en materia
educativa.
Por otra parte, existen otras instituciones dedicadas a la financiación de la investigación en
diferentes campos y que dedican parte de sus recursos a la educación. Este es el caso de la Comisión
Interministerial de Ciencia y Tecnología (CICYT), encargada de la coordinación de los programas de
investigación y desarrollo (I+D) a nivel nacional, o la Comisión Interdepartamental de Investigación e
Innovación Tecnológica (CIRIT), en la Comunidad Autónoma de Cataluña.
15.2. EVALUACIÓN EDUCATIVA
La LOGSE y la LOPEG señalan que la evaluación del sistema educativo debe orientarse a «la
permanente adecuación del mismo a las demandas sociales y a las necesidades educativas». De los
ámbitos de evaluación educativa (alumnos, procesos de enseñanza y aprendizaje, profesores, centros,
administración y el sistema en su conjunto), en este apartado no se aborda la evaluación de los alumnos
ni la de los procesos de enseñanza y aprendizaje, dado que éstas se desarrollan en los capítulos
correspondientes a cada nivel.
15.2.1. Evaluación general del sistema educativo
Entre los factores que la LOGSE contempla para la mejora de la calidad de la enseñanza, ocupa un
papel relevante la evaluación general del sistema educativo. La mejora cualitativa de la enseñanza exige,
en primer lugar, que las administraciones educativas dispongan de mecanismos adecuados de obtención
y análisis de datos, con vistas a apoyar la toma de decisiones y a rendir cuentas de su actuación. Por otra
parte, la sociedad, en su conjunto, tiene derecho a conocer el estado general del sistema educativo y de
sus componentes.
Asimismo, hay que tener en cuenta que en un Estado integrado por autonomías, el respeto a la
igualdad y el derecho a la educación exigen el cumplimiento, por parte de las administraciones y los centros
educativos, de las enseñanzas mínimas establecidas para los diferentes niveles, etapas, ciclos y grados,
en el marco del currículo establecido en cada administración y de su desarrollo en los centros educativos.
Para llevar a cabo la verificación de dicho cumplimiento, debe realizarse una evaluación en todo el territorio
estatal, con criterios homogéneos. Por otra parte, cuando se inicia un proceso de reforma como el actual,
la necesidad de evaluar sus resultados se convierte en un aspecto prioritario.
La evaluación de la organización y funcionamiento del sistema educativo ha sido encomendada a dos
instituciones: en lo que respecta a los niveles no universitarios, al Instituto Nacional de Calidad y Evaluación
(INCE) [L063], y, en el ámbito universitario, al Consejo de Universidades.
Las competencias del Instituto Nacional de Calidad y Evaluación [L063], establecidas en la LOGSE,
se centran en la elaboración de sistemas de evaluación para las diversas enseñanzas y el grado de
adquisición de los objetivos mínimos que persiguen, así como en la realización de investigaciones, estudios
y evaluaciones acerca del sistema educativo. Además, el INCE debe ser un foco de intercambio de
información con las administraciones educativas para facilitar la toma de decisiones. Igualmente, le
corresponde la propuesta de iniciativas que puedan contribuir a la mejora de la calidad de la enseñanza, al
igual que la coordinación estatal de los estudios internacionales.
En la actualidad, y debido a su reciente creación, las actividades del INCE se encuentran en los
primeros niveles de realización. Durante los años 1997 y 1998 se está realizando un diagnóstico del sistema
educativo español centrado en cinco aspectos: evaluación del rendimiento de los alumnos, de los planes
de estudio, del funcionamiento de los centros y de la administración educativa, del profesorado y de la
relación sociedad-educación.
La evaluación del sistema universitario se realiza por iniciativa del Consejo de Universidades, a través
del Programa de Evaluación de la Calidad del Sistema Universitario , que evalúa tanto la enseñanza y la
investigación como la gestión de recursos y personal. Se pretende que todas las universidades participen,
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mediante la evaluación sucesiva de las distintas titulaciones que están poniendo en marcha. Como
continuación a este programa, desde el curso 1994-95 se está llevando a cabo además un Proyecto Piloto
para la Evaluación de la Enseñanza Superior, que forma parte de un programa de la Unión Europea
destinado a desarrollar un modelo de evaluación, tanto interna como externa, por un grupo de expertos, de
la gestión y enseñanza universitarias. Este programa piloto se centra en el análisis de la enseñanza
impartida en cuatro titulaciones universitarias de cinco universidades.
15.2.2. Evaluación de centros docentes
La LOPEG, de 1995, establece que las administraciones educativas competentes deben elaborar y
poner en marcha planes de evaluación que deben ser aplicados con periodicidad a los centros docentes no
universitarios sostenidos con fondos públicos y que deberán ser llevados a cabo principalmente a través de
la inspección educativa. En esta línea, el Ministerio de Educación y Cultura ha desarrollado, a partir del curso
1991-92 un plan de evaluación de centros (plan EVA) para los niveles de primaria y secundaria. Con este
plan, al que se acogen de forma voluntaria los centros que desean ser evaluados, se pretende conseguir
la mejora en la organización y funcionamiento de los mismos, prestando asesoramiento y estimulando a la
vez la evaluación interna que en ellos se desarrolle. Además, se trata de difundir con el plan una cultura
evaluadora entre todos los agentes educativos, ensayando métodos, técnicas, instrumentos y procedimientos de análisis, como consecuencia de la recogida de datos sobre dicha evaluación de centros.
A esta evaluación de carácter externo hay que añadir la necesidad de que los centros evalúen su propio
funcionamiento al final de cada curso. Esta valoración se efectúa desde dos ámbitos: por un lado, se evalúa
la programación general del centro y el grado de cumplimiento de la misma, siendo el Consejo Escolar de
centro el que la realiza [L004]; por otro lado, los aspectos de carácter curricular son evaluados por la
Comisión de Coordinación Pedagógica -así llamada en el territorio de gestión del Ministerio de Educación
y Cultura [L029] [L030]-. En las comunidades autónomas en ejercicio de sus competencias se prevé que
se constituyan órganos similares a esta comisión y con funciones también semejantes.
En el ámbito universitario, esta actividad no se ha reglamentado específicamente hasta el momento,
pero se están llevando a cabo distintas actuaciones encaminadas a la evaluación de este nivel de
enseñanza. Entre ellas, destaca la que se desarrolla a partir de la puesta en práctica del Real Decreto de
creación y reconocimiento de universidades [L026], en el que se señala que «las universidades presentarán,
anualmente a la administración educativa competente y al Consejo de Universidades, una memoria comprensiva
de sus actividades docentes e investigadoras, realizadas en el marco de la programación plurianual».
15.2.3. Valoración del profesorado
En cuanto al profesorado de los niveles no universitarios, la LOPEG establece la necesidad de que
las administraciones públicas elaboren planes para la valoración de la función pública docente. Esta
valoración está asignada a los servicios de inspección, y deben colaborar con ella los órganos unipersonales
de gobierno de los centros y, en ciertos aspectos, pueden hacerlo también los miembros de la comunidad
educativa.
Igualmente, esta Ley regula la necesidad del establecimiento por parte de las administraciones
competentes de planes de evaluación de la función directiva, que deberán valorar la actuación de los
órganos unipersonales de gobierno de los centros sostenidos con fondos públicos. Hasta el momento no
se ha puesto en marcha ningún plan de evaluación de este tipo.
En el ámbito universitario, cada universidad desarrolla labores de evaluación de la práctica docente
mediante proyectos internos, principalmente a través de encuestas a los alumnos.
Junto a estos mecanismos internos, se llevan a cabo programas para valorar la actividad investigadora
de los docentes, cuyos resultados repercuten en la carrera profesional de los mismos. En los niveles no
universitarios, esta valoración, iniciada a partir de 1992, está siendo encomendada al CIDE, mientras que
la investigación en el ámbito universitario se lleva a cabo a través de una Comisión Nacional Evaluadora de
la Actividad Investigadora [L066].
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TABLA 15.1. DISTRUBICIÓN NUMÉRICA Y PORCENTUAL DE LAS INVESTIGACIONES
FINANCIADAS O REALIZADAS POR EL CIDE POR ÁREAS TEMÁTICAS. 1982-1995
Área temática
Total
%
Política y sistema educativo
42
9,29
Programas y contenidos de enseñanza
41
9,07
Métodos de enseñanza y medios pedagógicos
81
17,92
Rendimiento escolar y evaluación
69
15,27
Educación especial, educación compensatoria e integración escolar
42
9,29
Psicología y educación
74
16,37
Profesorado
42
9,29
Sociología y educación
36
7,96
Formación profesional, empleo y orientación
25
5,53
TOTAL
452
100,00
Fuente: CIDE.
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