EL VIAJE AL AVERNO MITO DE EURÍDICE Y ORFEO Relatos mitológicos El viaje al averno: La historia de Orfeo y Eurídice. Autores de esta versión del mito: Sebastián Sabino Lucía Shapochnik Eric Lehmann Mercedes Martinez Sobrino Diego Areal Velez Este material lo editamos los chicos en Informática. Escuela para el Hombre Nuevo “Tercera dimensión” 3º grado B / 2001 2 Relatos mitológicos El viaje al averno: La historia de Orfeo y Eurídice. Un día Eurídice una de las ninfas, caminaba por los boques con su esposo Orfeo. Eran muy felices, estaban recién casados, disfrutaban mucho los paseos. Escuela para el Hombre Nuevo “Tercera dimensión” 3º grado B / 2001 3 Relatos mitológicos El viaje al averno: La historia de Orfeo y Eurídice. Orfeo era músico y tocaba muy bien la lira. Una tarde durante la caminata por el bosque, Eurídice gritó muy fuerte: -¡Ah! Una serpiente apareció, cuando Orfeo la vio era tarde, su esposa se había muerto, comenzando su viaje al Averno. Nada pudo hacer Orfeo, el veneno de la serpiente inundó todas las venas de Eurídice. Escuela para el Hombre Nuevo “Tercera dimensión” 3º grado B / 2001 4 Relatos mitológicos El viaje al averno: La historia de Orfeo y Eurídice. Una gran tristeza invadió el corazón de Orfeo, ya no tenía ánimos para tocar su música, la ausencia de su amada le provocaba gran dolor. Un día no lo pudo soportar más y decidió visitar a su esposa al averno. Orfeo, tenía miedo, sabía que el averno era un lugar muy tenebroso, oscuro, no quería que un espíritu le salte encima. Escuela para el Hombre Nuevo “Tercera dimensión” 3º grado B / 2001 5 Relatos mitológicos El viaje al averno: La historia de Orfeo y Eurídice. Plutón y Proserpina, que eran los reyes del lugar, le dieron la bienvenida. Orfeo cantó lo que le pasaba : Quiero que Eurídice vuelva conmigo. Plutón dijo: -De acuerdo, pero no la tienes que mirar hasta que no hayan aterrizado en la tierra. –De acuerdo- dijo Orfeo. El regreso fue peligroso, pasaron a un perro de tres cabezas, sonidos extraños, fuertes. Orfeo sentía grandes deseos de mirarla, intentó contenerse, pero no lo pudo resistir y antes de llegar, la miró. En ese instante su amada desapareció diciéndole adiós. Al llegar solo lo invadió una gran tristeza, fue hacia el bosque , los árboles se apenaban , los animales no estaban contentos, pero a pesar de su dolor, comenzó a entonar bellos cantos de amor siempre recordando a su esposa. Desde ese momento todos los árboles rodearon a Orfeo, protegiéndolo, abrazándolo y escuchando sus bellas canciones de amor. Escuela para el Hombre Nuevo “Tercera dimensión” 3º grado B / 2001 6