Vida útil de estructuras en concreto: ¿de qué depende? Cipriano Londoño [email protected] Los códigos buscan en general que las estructuras tengan una vida útil por encima de los 50 años, pero hay que tener en cuenta que algunas estructuras deben ser diseñadas para períodos aún más largos, digamos hasta 100 años, y otras para períodos de 25 años o menos. El CEB – FIP CODE 1990 (MC 90) para hormigón estructural dice que el requisito básico para proyectar teniendo en cuenta la durabilidad es: “Se proyectarán, construirán y utilizarán las estructuras de hormigón de tal modo que, bajo las condiciones ambientales previstas, mantengan su seguridad, funcionalidad y buen aspecto, durante un período de tiempo explícito o implícito, sin que se requieran costes elevados e inesperados de mantenimiento y reparación.” Centro Cultural Gabriel García Márquez, Bogotá, Colombia. Fotografía: Argos. La vida útil de las estructuras en concreto depende entonces tanto de los elementos estructurales, como de los no estructurales. Entre los elementos no estructurales están los sistemas de drenajes, ciertas juntas, las instalaciones eléctricas, hidráulicas. Entre los componentes estructurales se encuentran los anclajes, acoples y desviadores de los tendones de pretensado, los cuales necesitan la asesoría y atención de especialistas además de los ingenieros estructurales. Los accesorios casi siempre tienen vidas útiles menores que la estructura, por lo cual se deben tener rutinas de mantenimiento y sustitución de tales elementos. Esas rutinas deben hacer parte de las mismas especificaciones. Problemas comunes en las obras En la literatura se menciona que en la mayoría de los casos, la causa de los daños a las estructuras de concreto, se debe a desviaciones graves respecto a lo que se había especificado y no a variaciones internas de las propiedades del material. Hidroeléctrica Porce III, Porce, Antioquia, Colombia. Fotografía: Argos. La literatura registra como ejemplos los siguientes: • Recubrimiento de 5 mm en vez de 50 • Hormigueros por falta de compactación • 200 kilos de cemento por metro cúbico en vez de 350 • Relación a/c de 0,75 en lugar de 0,50 • Contenido de acero menor al establecido por el diseñador • Errores en los tipos de cemento especificado Estos errores no se solucionan con base en diseños más refinados, ni aumentando los factores de seguridad. La manera de eliminar esos errores en las obras está basada en la capacitación de los involucrados en el diseño y ejecución de la construcción, además de la implementación de procesos de seguimiento estrictamente planificados e implementados. Quien hace la planeación, debe definir las exigencia presentes y futuras para el proyecto. Los diseñadores por su parte establecerán las especificaciones del proyecto en las que se debe incluir el plan de control de calidad propuesto. El constructor, debe respetar todas las exigencias establecidas por los diseñadores durante el proceso de construcción, en este grupo se incluyen los subcontratistas, los cuales deben estar enterados de todas las especificaciones que a ellos les atañen. Finalmente el usuario, debe estar informado de las labores de mantenimiento a que se debe someter la estructura para que alcance la vida útil prevista e incluso la pueda superar. Cualquiera de estos cuatro agentes, o la interacción entre ellos, puede -por sus acciones o por falta de ellas- contribuir a un estado insatisfactorio de durabilidad de la estructura causando así una reducción de su vida útil. Construir con criterios de durabilidad es la clave. Puente Pipiral, vía Bogotá-Villavicencio, Colombia. Fotografía: Argos. Espero que este artículo haya sido de utilidad para todos los profesionales de la construcción, así como para quienes se preparan para serlo.