NEWSLETTER NOVIEMBRE 2012 EXPERIENCIAS RETRATO DE ALEXANDRE ARNBÄCK (MBA 99), SÉPTIMA GENERACIÓN DE LODH Y AUTOR HEAL YOUR INVESTMENTS. A STORY YOUR BANKER WILL NEVER TELL YOU DE Siete generaciones de banqueros detrás de un coach financiero El banco Lombard Odier Darier Hentsch (LODH) es uno de los bancos más antiguos del mundo. Desde 1796, este banco privado suizo sigue siendo propiedad de las cuatro familias fundadoras y es dirigido por los ocho socios nombrados por las mismas. Es un caso excepcional, sobre todo si tenemos en cuenta las estadísticas que presenta Alexandre Arnbäck (MBA 99) y que apuntan que una empresa sobrevive unos 50-60 años por término medio. “La única manera para que las empresas familiares pueden seguir es ¿autorizando? (mejor: facilitando) la innovación dentro de la empresa. Pero la verdad es que es algo muy difícil porque, cuando estamos cómodos en una empresa, con su forma de hacer las cosas y ganando dinero, es muy difícil cambiar las cosas.” Para este miembro de la séptima generación, la clave es dejar que la siguiente generación tenga la independencia suficiente para poder crear algo nuevo y asegurarse de que siempre haya la innovación necesaria para superar la media. “Lo que diferencia este tipo de bancos es que son empresas familiares y sociedades de personas, en vez de sociedades anónimas. Esto hace que la participación de los socios y su manera de tratar y de ver el negocio sean mucho más intensas. No solamente porque son propietarios, sino porque tienen la responsabilidad de garantizar con su propio dinero”, afirma Alexandre. En su opinión, una de las claves está en el estricto proceso de selección al que son sometidos todos los miembros de la familia que aspiran a trabajar en el banco. “Por el hecho de ser familiar no entras automáticamente en el capital de la empresa”, resalta, y explica que los socios actuales tienen que invitar a entrar a los futuros socios. Esto hace que el proceso de selección sea más duro que en la mayoría de las empresas familiares, “donde la práctica general es que la generación siguiente hereda la empresa”, afirma. Hasta que cumplió los 29 años, Alexandre no creía que iba a trabajar en LODH. “Tú nunca vas a trabajar con nosotros”, le decían algunas voces de la familia desde que era joven. Hasta que un día, recién terminados sus estudios en ESADE, le invitaron a trabajar con ellos. “No creo que cambiaran de opinión. Es más una manera de estimular y hacer comprender que no es fácil tener un puesto en el banco familiar. Es una competición dura y uno tiene que luchar para conseguirlo. Si a los 20 años me hubieran dicho: ‘Tienes tu puesto allí asegurado’, estaría mucho menos motivado” confiesa. NEWSLETTER NOVIEMBRE 2012 Tan inesperada como su incorporación al banco fue su salida. Cuando se incorporó, tenía una visión romántica, inspirada en el “gentleman banker”, una figura que forjó la reputación de los bancos privados, gracias a saber establecer y nutrir una relación muy cercana entre los clientes y los dueños. “Es lo que hace que los valores y las ideas sean compartidos y facilita el desarrollo de este tipo de bancos”, afirma Alexandre. Los tiempos han cambiado y esta forma de trabajar no satisfacía sus expectativas. “Lo que más me molestaba de mi trabajo anterior era que el banquero no era un asesor, sino un vendedor. Más bien como un vendedor de coches. El banquero hace dinero vendiendo productos y transacciones, y ahí puede surgir un posible conflicto de intereses. Mi motivación parte de la idea de construir una relación más de coaching”, reitera, y define su vocación como la de “un coach financiero”, que acompaña a los inversores mediante consejos para que “tengan una vida financiera más sana”. “El cliente se convierte en el actor y asume el control de su vida financiera porque toma las decisiones con conocimiento, en vez de comprar productos que no entiende”, explica Alexandre, quien ha plasmado esta visión en el libro Heal Your Investments. A Story Your Banker Will Never Tell You, escrito conjuntamente con Trevor Pavitt. Según explica, el objetivo de este libro es atrevido: ayudar a la gente a cambiar las cosas porque “los que trabajan en bancos y otros proveedores de productos financieros no quieren cambiarlo por el temor de ganar menos”. Alex pretende lograr que la gente entienda que puede tener una vida financiera más sana solamente conociendo los hechos. Alexandre se muestra muy agradecido por todo lo que aprendió durante el tiempo en que estuvo trabajando en LODH, donde tuvo “un insight maravilloso sobre cómo funciona el mundo financiero”. En la conversación, menciona dos motivos que aceleraron su salida del banco familiar. El primero fue el proceso interno que le llevó replantearse la vida profesional, que le hizo tomar la decisión de salir del banco y crear algo propio y “no tener que luchar para cambiar algo por dentro”. Y el segundo motivo fue, simplemente, una gran pasión por crear y ser emprendedor. “Siempre he sido muy independiente, y esta libertad y esta creatividad solamente las he podido mantener saliendo de la empresa familiar.” La respuesta de la familia no fue muy grata. “Fue una experiencia difícil para la unidad familiar pero ahora, cinco años más tarde, me apoyan más.” Alexandre habla de forma directa y sincera, con la claridad que caracteriza a las personas con una fuerte integridad personal. Ha crecido en el seno de una de las familias banqueras más prestigiosas del planeta y ha vivido el mundo financiero desde dentro. Muchos lo considerarían una situación relativamente cómoda, en términos del nivel económico de vida. Sin embargo, él ha tenido el valor de no conformarse con ello y buscar su propio camino. NEWSLETTER NOVIEMBRE 2012 En este camino, también agradece la “experiencia fantástica” que ha tenido en ESADE. “En mi vida profesional, he estado en contacto con la gente de Harvard, Princeton, Yale y otras grandes escuelas, pero nunca me ha pasado que me sintiera con un conocimiento inferior a los demás. Además, ESADE me ha proporcionado contactos, amigos y una manera de trabajar que han sido una gran ayuda para mi carrera”, confiesa. Autor: Boris Matijas, Family Business Transformation