Leucorrea y Enfermedad Pélvica Inflamatoria
Es importante tener en cuenta la flora normal de la vagina. En las recién nacidas es normal no encontrar
ningún tipo de microorganismos, poco a poco van apareciendo principalmente estreptococos y
diplococos, y al cuarto día de nacidas, el lactobacillus acidophilus (Bacilos de Doderlein), que es el
encargado de que la vagina presente un pH ácido (3.8 a 4.4). Estos lactobacilos se nutren del glucógeno
presente en la vagina, formado por efectos estrogénicos, produciendo una citólisis y formación de ácido
láctico produciendo el pH ácido naturalmente, impidiendo el crecimiento de organismos patógenos.
También se encuentran frecuentemente bacterias anaerobias (más importante, los bacteroides),
además de bacilos y cocos gram positivos.
Factores que modifican el pH normal de la vagina:
Moco cervical que varía dependiendo del ciclo
Fluidos vaginales producidos durante la relación sexual
Semen
Duchas vaginales
Leucorrea
Causa más común de consulta ginecológica. Entre su sintomatología presenta: secreción genital más de
lo normal, sensación de picazón o quemazón, escoriación, dispareunia.
Es importante tener en cuenta la diferencia entre vaginitis y vaginosis. La primera, solamente es un
proceso inflamatorio. La vaginosis es la inflamación más infección, y se debe a la aparición de
organismos que no son de la flora normal o a un aumento anormal de la propia flora de la paciente, esto
debido a utilización de antibióticos de amplio espectro, pacientes inmunosuprimidas o uso de
corticoides.
La mayoría de las veces, en las pacientes menores de edad, la causa es debido a mala higiene por parte
de la paciente o presencia de cuerpos extraños.
En las pacientes adultas, la causas pueden ser candidas (más frecuente, C. albicans), trichomonas o
vaginosis bacteriana.
Las cándidas crecen en pH ácido o por encima de 4.4. Son organismos oportunistas, y por lo general
cursan sin producir síntomas; muy pocas veces sintomáticas. La secreción es de color blanco, de
contextura parecida al yoghurt, no tiene un olor característico, pero si causa mucho prurito y
dispareunia. Son episodios esporádicos y, a pesar del tratamiento, en muchas ocasiones recidiva, por lo
tanto hay que pensar en alguna otra causa como inmunosupresión o algún otro factor mencionado
anteriormente. Se maneja con antifúngicos como fluconazol o itraconazol.
En cuanto a la vaginosis bacteriana, hay una alta concentración de bacterias anaerobias (crecimiento
polimicrobiano), que van a reemplazar la presencia del lactobacillus, aumentando el pH vaginal (mayor
de 4.5). El flujo vaginal homogéneo de color grisáceo, con un olor a "pescado" debido a las aminas
producidas. Al microscopio, hay presencia de células guías o células clave, que son células epiteliales
cubiertas por los cocobacilos. Para su tratamiento, se administra metronidazol; se podría utilizar
amoxicilina con ácido clavulánico, o imidazol. La vaginosis bacteriana no produce inmunidad, por lo
tanto puede recidivar.
La trichomoniasis, es producida por un protozoo unicelular, y es una de las más frecuentes debido a que
es una infección de transmisión sexual. Tiene un período de incubación variado, entre 4 a 28 días. Su
secreción es muy parecida a la vaginosis bacteriana, además de prurito intenso, dispareunia, y el
parásito se puede observar en un examen microscópico. El tratamiento es igual al de la vaginosis
bacteriana. Recordar que el metronidazol puede producir un efecto antabuse, además de ser
administrado a la pareja de la paciente.
Enfermedad pélvica inflamatoria
Es una infección del tracto genital superior: útero, trompas y estructuras pélvicas anexas. Es una de las
causas más frecuentes de infertilidad en la mujer.
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