GUIA 2013-2014 SOBRE VIOLENCIA FILIO-PARENTAL INTRODUCCIÓN En la actualidad, es cada vez más común encontrarnos con noticias que alertan sobre el aumento de casos de violencia filio-parental (VFP). Cada vez existen más padres que ante situaciones de impotencia, terminan denunciando a sus hijos como forma desesperada de ayuda. Tanto el sistema de justicia como el de los servicios sociales, han tenido que enfrentarse a más del triple de casos en los últimos años, pasando de 2.000 denuncias en el año 2006 a 8.000 denuncias en el año 2010 según la Fiscalía General. PERO... ¿QUÉ ES LA VIOLENCIA FILIO-PARENTAL? La violencia filio-parental se refiere a todo el conjunto de agresiones que los hijo ejercen sobre los padres para conseguir control y poder en el hogar. Las agresiones no tienen por qué ser sólo físicas, sino que pueden ser verbales, e incluso financieras. Una de las claves para saber si estamos ante una situación de este tipo, es justamente identificar si el menor busca el poder y el control a través de su comportamiento. Generalmente, este problema se desarrolla desde formas de violencia más “desapercibidas” (como insultos u otras agresiones verbales) hasta llegar a formas mucho más evidentes (agresiones físicas), es decir, se trata de una violencia que va en escalada. ¿QUÉ HAY ANTES DE LA VIOLENCIA FÍSICA? Insultos, humillaciones, descalificaciones. Amenazas. Manipulación y coacción para conseguir sus objetivos. Romper objetos. Dar patadas, puñetazos u otros golpes a paredes y muebles. Manipulación y exigencias económicas. ¿QUÉ ESTÁ OCURRIENDO EN LA ACTUALIDAD? ¿POR QUÉ AHORA? La violencia de hijos hacia padres siempre ha existido, aunque de forma distinta. Cuando hoy en día hablamos de violencia filio-parental, nos referimos a aquella que no es causada por un trastorno mental o baja la influencia de las drogas. La VFP actual está relacionada con los estilos de educación que los padres han tenido hacia sus hijos durante su desarrollo. Algunas de las explicaciones para el aumento de cifras actualmente aportadas por los profesionales son: Existe un mayor número de familias mono-parentales (1 solo padre/madre), donde los papeles de madre/padre y el de hijo/a pueden no estar bien definidos. Existen un mayor número de familias con un único hijo/a, siendo este el rey de la casa y al que hay que mimar y proteger por encima de todas las cosas. Existen un mayor número de familias que tienen a sus hijos con edades cada vez más elevadas, tocando así vivir la adolescencia en un momento de la vida donde quizás no se tengan las mismas energías para enfrentarse a los problemas en las relaciones con los hijos. Cambios en el mercado laboral, que han hecho que muchos padres no puedan dedicar el tiempo necesario al cuidado y educación de sus hijos. Esto provoca no solo dificultades en las relaciones con los mismos, sino que los niños estén muchas veces solos en su tiempo libre. El modelo social actual, que busca cultivar en primer lugar valores de belleza, apariencia, egoísmo, economía etc., frente a los de juego compartido, generosidad, ayuda, educación etc., que quedan en un segundo plano. Cambios en el modelo educativo. Poco a poco, el profesorado ha ido perdiendo poder en su capacidad de ejercer límites y sanciones a los niños, encontrándose muchas veces con problemas con los padres de los mismos. ¿QUÉ OCURRE EN LAS FAMILIAS? Los expertos, también hablan de una serie de circunstancias familiares que pueden dar lugar a situaciones de VFP: Familias donde el uso de la violencia sea una de las estrategias escogidas para resolver los problemas. Familias donde no exista un acuerdo entre los padres de cómo educar a los hijos, y donde el estilo de educación no se mantenga firme. Padres que han tenido a sus hijos de manera accidental, y que no disfrutan de su rol de padres. Padres muy permisivos, que tienen dificultades para poner límites desde la infancia a sus hijos. Padres sobre-protectores, que apoyan todo lo que sus hijos hacen, y cuidan y protegen de todo y bajo cualquier circunstancia, sin dejar que los niños vayan adquiriendo capacidades por sí solos. Padres que mantienen una relación demasiado próxima con uno de los hijos, no quedando muy claro dónde empieza y termina el papel de madre/padre y dónde empieza y termina el de hijo. ¿A QUÉ TIPO DE FAMILIAS AFECTA LA VIOLENCIA FILIO-PARENTAL? Como en la mayoría de los problemas, se tiende a pensar que “a nosotros no nos ocurrirá” o que “eso solo ocurre en casos muy extremos”. Sin embargo, las cifras que se están registrando incluyen a todo tipo de familias, es decir, cualquier familia puede ser víctima de una situación de VFP. De hecho, muchos de los casos registrados se refieren a familias normalizadas, de estatus socio-económico medioalto, y que no habían necesitado ayuda de los servicios sociales o de la justicia anterior a ese problema. Al igual que puede ocurrir en cualquier tipo de familia, también puede ocurrir tanto con HIJOS como con HIJAS. ¿CÓMO PUEDO SABER SI ESTOY SUFRIENDO VIOLENCIA FILIO-PARENTAL? ¿CÓMO ACTÚO YO? ¿CÓMO ACTÚA MI HIJO/A? • Evito llevarle la contraria para que no se moleste • Satisfago sus deseos y necesidades para evitar episodios de violencia • Evito hacer cualquier cosa que le incomode, o incluso evito estar con él/ella • Te insulta, ridiculiza o humilla delante de otras personas • Te culpa de la situación • Rope o deteriora objetos valiosos para ti • Intenta imponer normas dentro del hogar, te exige. • Te amenaza para poder conseguir sus propósitos • Golpea paredes, puertas y otros muebles durante los episodios de violencia. • Te empuja y/o golpea a ti. La CLAVE está en saber si el comportamiento del hijo/hija se está convirtiendo en una forma de CONTROL e INTIMIDACIÓN y AMENAZA. ¿QUÉ CONSECUENCIAS TIENE PARA LA MADRE/PADRE VÍCTIMA? En primer lugar, no es nada fácil admitir que se está ante una situación de este tipo. La ilusión “familia ideal”, hace que habitualmente los padres tarden en asumir el problema y por lo tanto, tarden en poner remedio. Podemos decir, que suele existir una FASE DE NEGACIÓN ante la situación, donde los padres buscan posibles explicaciones alternativas que justifiquen el comportamiento, confiando en que no vuelva a ocurrir. Sin embargo, y por desgracia, esto no es así. Cuando se trata de VFP, ésta siempre va en aumento si no se toman medidas. Esta situación, conlleva a un sufrimiento familiar, que en el padre/madre víctima se traduce en: Frustración como padre/madre. Sentimientos de culpa (hacia uno mismo y/o hacia el otro progenitor) Vergüenza a reconocer el problema ante otras personas. Depresión – Ansiedad ¿CÓMO Y QUÉ ÁREAS DE NUESTRA VIDA SE VEN AFECTADAS? Ámbito laboral Ámbito familiar- de pareja Ámbito social El ámbito familiar y de pareja es el primero en verse afectado, pues las situaciones que se crean fomentan la tensión en el hogar, donde intentando buscar explicaciones se acaba por culpabilizar de la situación a otros miembros de la familia. Muchas veces, ocurre afectando a la relación de pareja entre los padres. Otras veces también ocurre afectando a las relaciones con otros familiares que empiezan a alertar de la situación, cuando el padre/madre/padres todavía no quieren admitirla. Es habitual que los padres se tomen estas alertas como críticas o ataques, restringiendo así el contacto con estos familiares. El ámbito laboral comienza a deteriorarse también poco a poco. Las preocupaciones contantes, fatiga, insomnio y otras consecuencias físicas, hacen que la concentración disminuya y sea más difícil mantener el ritmo laboral. Además, una vez que se comienza a buscar ayuda, es necesario dedicar un tiempo que a veces es difícil de compaginar con el trabajo. El ámbito social es otro de los grandes afectados, puesto que es habitual que los sentimientos de frustración, culpa y vergüenza lleven a la madre/padre/padres a hacer menos actividades de ocio, relacionarse menos con amigos y conocidos y evitar aquellas situaciones que puedan hacer evidente la situación, manteniéndola así en SECRETO mientras va creciendo poco a poco. SECRETO AISLAMIEN TO MANTENIMIE NTO Y CRECIMIENTO DE LA VIOLENCIA EL SECRETO LLEVA AL AISLAMIENTO, Y EL AISLAMIENTO A QUE LA VIOLENCIA SE MANTENGA Y CREZCA. ¿QUÉ SE PUEDE HACER PARA PREVENIR LA VIOLENCIA FILIO-PARENTAL? La manera más eficaz de prevenir este tipo de situaciones, es la de comenzar desde la infancia más temprana. Un buen estilo de educación, basado en el uso del cariño junto con límites, ayudará a que el niño crezca sabiendo hasta donde puede y debe llegar. Darles a los hijos todo lo que piden, supone para ellos que todo lo pueden tener, lo que después se traduce en constantes conflictos cuando se intenta decir “no”. Saber decir “NO” a un niño cuando corresponde, supone uno de los mayores retos en la educación, y sin embargo, sus efectos son muy positivos. Los niños que han tenido que asumir desde pequeños que no pueden hacer/tener/acceder a todo lo que quieren, aprenden a superarlo, ganando así tolerancia a frustrarse, autoestima y conciencia moral para saber desenvolverse mejor tanto en casa como en el mundo que le rodea. El NO de hoy, es el GRACIAS de mañana ¿QUÉ SE PUEDE HACER ANTE UNA SITUACIÓN DE VIOLENCIA FILIOPARENTAL? Por suerte, muchos de los casos tratados hasta el momento, han podido ser solucionados. Saber pedir ayuda ante una situación como esta no es fácil, pero es la decisión más sensata y responsable que un padre puede tomar ante una situación de este tipo. Lo importante es saber tomar medidas a tiempo, para que el problema no se alargue en el tiempo y acabe siendo necesario que intervenga la justicia. En necesario como madre/padre que entienda que: No es usted el culpable de la violencia. Existen más casos, por lo que hay gente que puede entenderle. Hay personas y servicios que pueden ayudarle. Ser honestos, reconocer cuando no podemos solos ante situaciones y saber pedir ayuda, son las fases más importantes de la solución del problema. CUANDO PIDES AYUDA……….. ROMPES EL SILECIO, ROMPES EL SECRETO MOTIVACIÓNCAMBIO. CONOCES OTRAS PERSONAS QUE ESTÁN PASANDO POR LO MISMO GANAS CONFIANZA, AUTOESTIMA Y CAPACIDAD DE CONTROL REDUCES TUS SENTIMIENTOS DE IMPOTENCIA, FRUSTRACIÓN Y DESESPERANZA REDUCES TUS SENTIMIENTOS DE CULPA Y VERGÜENZA RECUERDA! La violencia filio-parental puede ocurrir en cualquier familia. Tanto hijas como hijos pueden ejercerla. La mejor prevención es una buena educación desde la infancia. Es un tipo de violencia que siempre va a más. No mantengas el secreto. No eres la/el culpable de la violencia. Saber pedir ayuda, es la decisión más sensata y responsable que puedas tomar. PORQUE CUALQUIER TIPO DE VIOLENCIA, ES INACEPTABLE