EduPensar: Líderes en tiempos de luchas

EduPensar: Líderes en tiempos de luchas
Escrito por Félix Rodríguez Matos, Ph. D.
Miércoles 05 de Junio de 2013 05:45
El más reciente libro electrónico que he leído en torno al liderazgo es “Leadership and the Art of
Struggle: How Great Leaders Grow”, de Steven Snyder (2013). El autor, uno de los
colaboradores de Bill Gates en sus inicios, nos habla de tres elementos causantes de los
dolores de cabeza a los líderes en tiempos de crisis, de caos y de intensas luchas, es decir, de
esos momentos que nos causan grandes retos y adversidades.
Esos momentos que todo líder confronta durante uno o más etapas en su vida son definidos
por tres elementos fundamentales: (1) el cambio, (2) las tensiones y (3) cualquier golpe que le
saque de balance.
En primer lugar, el cambio es una de las causas mayores en la vida de luchas y crisis de los
líderes porque la vida allá afuera no se detiene y lanza retos de adaptación, sobrevivencia y
reinvención, a los cuales todo líder tiene que responder.
En segundo lugar, las tensiones inherentes al cambio mismo son parte esencial de la lucha de
cada líder porque los seres humanos y las realidades sociales de cada momento se convierten,
a su vez, en fuente de pesos y contrapesos o de aciertos y desaciertos para toda persona que
ejerza liderazgo.
En tercer lugar, todo líder se confronta a uno o más golpes de la vida por diversas razones, ya
sea cuando actúe o postergue cualquier decisión que tenga que tomar. En otras palabras, todo
líder que tome decisiones sentirá en sus espaldas el peso del mundo, actúe o no actúe…
La pregunta fundamental que todo líder debe hacerse, según Snyder y otros autores, es ¿cómo
responder a esos elementos que caracterizan la lucha en que se encuentra? Aunque no
existen “recetas mágicas” para ningún reto de liderazgo, una de las las maneras en que un
líder puede lidiar con los tiempos de manera efectiva es a través de la “resiliencia” o la fuerza
de carácter, voluntad y determinación en tiempos de crisis. Un ABC de la Resiliencia puede
definirse en función de tres elementos fundamentales: (1) la Adversidad, (2) las Creencias
(“Beliefs”) y (3) las Consecuencias; es decir, “Adversity, Beliefs and Consequences” según los
términos en inglés.
En lo que respecta a la adversidad, un genuino líder puede concebirla como realmente una
oportunidad para reinventarse y concertar una acción o acciones que podrían llevar a su
empresa, institución o país a un mejor estado (la consecuencia o C del ABC).
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Escrito por Félix Rodríguez Matos, Ph. D.
Miércoles 05 de Junio de 2013 05:45
Por otro lado, un aspecto importantísimo al practicar la resiliencia o la determinación es no
saltando de inmediato a una acción, sino examinando el sistema subyacente de creencias en el
lugar de trabajo en que nos encontremos.
Por ejemplo, en lugar de saltar a un juicio o a una acción que podamos lamentar luego, es
mejor examinar las decisiones desde diversas perspectivas o ángulos, antes de “disparar de la
vaqueta”.
A lo que se refiere este segundo paso al practicar el ABC de la Resiliencia es que entre el
punto de la adversidad y nuestra respuesta tomada de la mano de sus consecuencias, existe
un punto central que es la REFLEXION, ese estado mental en que no sólo exploramos el
repertorio de posibles acciones ante una situación dada, sino en el que moldeamos nuestro
pensamiento para salir con soluciones más creativas y más cónsonas con la situación o las
creencias imperantes en el escenario desde el cual se nos lanza el reto de decidir como
líderes.
Este libro y otros que he leído a través de mi vida como educador y dirigente de instituciones
educativas a lo que nos lleva es a un aspecto vital y es que, para realmente crecer en diversos
órdenes de la vida, todo líder que confronte enormes retos debe saber que, al final, se
requerirá una respuesta.
Ahora bien el asunto no es sólo responder al estímulo o la adversidad encontrada, sino que es
imperativo “reflexionar”, si es que desea ser parte de una mejor solución y no un provocador de
un problema mayor.
Sin duda, nos encontramos ante un mundo que cambia constantemente, que nos lanza puños,
patadas y otras adversidades a nuestro rostro pero, antes de contragolpear o responder
“automáticamente”, es preciso afinar los sentidos, particularmente escuchar bien a otros y
revitalizar la “mente creativa” para dar con esa posible solución en respuesta a los retos de
estos tiempos.
Me consta que directores de escuelas, departamentos, presidentes de colegios y
universidades, empresarios e, incluso, gobernadores están inmersos en gigantes retos. A todos
y todas no les vendría mal leerse este magnífico libro para que así inicien su propio camino y
ayuden a otros a alcanzar la misión que se han propuesto.
Jamás algunas palabras han tenido mayor relevancia que las de Gandhi aplicadas a los líderes
actuales: “He tomado sobre mis espaldas el monopolio de mejorar sólo a una persona y esa
persona soy yo mismo y sé cuán difícil es conseguirlo”. La guagua en reversa de cualquiera
entidad para allí, justo frente al líder de cada empresa, institución o país. ¡A reinvertarse
llaman!
([email protected]. Visiten www.snyderleadership.com)
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