COMITÉ LOCAL DE EDUCACIÓN AMBIENTAL – CLEA Los Comités Locales de Educación Ambiental – CLEA, se definen como una estrategia de gestión para organizar la intervención en procesos de Educación ambiental en las localidades1, se enmarca en la estrategia del CIDEA Distrital y está basada en la Política Nacional de Educación Ambiental, desde la visión sistémica del ambiente y el territorio, donde la participación de la comunidad educativa, la sociedad civil, las ONGs, entidades Gubernamentales, Universidades y demás actores construyan conocimiento en forma concertada desde su contexto para generar alternativas de solución a problemas, conflictos sociales y culturales que tengan impacto en los ecosistemas de la estructura ecológica principal del Distrito Capital. En el Marco de la Política Nacional que establece que los Comités Técnicos Interinstitucionales de Educación Ambiental “deben desarrollar competencias y responsabilidades no solo en cuanto a la formación de planes de Educación Ambiental, sino también a la gestión para la incorporación de dicho plan en los correspondientes POT – EOT y planes de desarrollo, con el fin de contribuir en la sostenibilidad de las propuestas de educación ambiental y de apoyar un trabajo sistemático y secuencial por parte de todas las instituciones, alrededor de propósitos comunes para la formación de niños, niñas, jóvenes y, en general, comunidades”2; el Comité Local de Educación Ambiental- CLEA en términos generales, debe: diseñar, asesorar, orientar, acompañar y evaluar los planes, programas y proyectos de Educación Ambiental en la localidad, al igual, deberán lograr la inclusión de la dimensión ambiental en el Proyecto Educativo Local- PEL y en el Sistema Ambiental de cada localidad- SIGAL. Desde esta perspectiva, se plantea la consolidación de Comités Locales de Educación Ambiental como órgano: coordinador, asesor, gestor y articulador de los procesos de Educación Ambiental Local. El CLEA será promovido y coordinado por la Secretaría Técnica del CIDEA Distrital; quien estará representado en la localidad por la Secretaría de Educación del Distrito - SED, a través del CADEL y/o Equipos Pedagógicos, y el Departamento Técnico Administrativo del Medio Ambiente – DAMA, a través de la Estrategia de Educación Ambiental. 1.1.1 Justificación Uno de los grandes avances en materia ambiental en Colombia y que a su vez permitió el fortalecimiento del Sistema Ambiental SINA, fue la creación de la Política Nacional de Educación Ambiental que propone, entre otras estrategias, la creación de Comités Técnicos Interinstitucionales de Educación Ambiental – CIDEA, los cuales generan lineamientos para el fortalecimiento y organización de los procesos de Educación Ambiental. Dentro del marco normativo, el Decreto 1743 de 1994, reglamentario de la Ley General de Educación, instituye el PRAE, el cual debe partir de un diagnóstico ambiental local teniendo en cuenta los principios de interculturalidad, interdisciplinariedad y regionalización para contribuir a la solución de problemas ambientales específicos; su realización será responsabilidad de la comunidad educativa. 1 Ibid. MINISTERIO DE AMBIENTE, VIVIENDA Y DESARROLLO TERRITORIAL y MINISTERIO DE EDUCACIÓN NACIONAL. Política Nacional de Educación Ambiental. Bogotá D.C.: Fotolito América, 2002. p. 67 2 1 Desde esta perspectiva, se pretende que los PRAE contribuyan a la mitigación y solución de la problemática ambiental particular de una determinada localidad y/o del distrito vinculando a la comunidad educativa de manera participativa, concertada y creativa, y que permitan crear espacios comunes de reflexión, promoviendo criterios de tolerancia, respeto, solidaridad, autonomía y autogestión. Es por esta razón que, a través de este proyecto, se delega a las Instituciones Educativas la promoción del manejo, uso sostenible, cuidado y protección del ambiente como eje principal para el mejoramiento de la calidad de vida de estas comunidades y de la población en general. Para posibilitar estas acciones, se requiere del apoyo de las entidades y otros actores de la sociedad que, desde su competencia fortalecen los procesos de Educación Ambiental Formal. Sin embargo, el apoyo y fortalecimiento a la Educación Ambiental, por parte de las entidades y otras organizaciones, se ha venido desarrollando de manera desarticulada y atomizada, limitando el ejercicio del proyecto a las acciones propiciadas por cada entidad. El DAMA, de acuerdo al Decreto 330 de 2003, debe colaborar con las distintas entidades Distritales y dependencias del Departamento que tengan competencia en educación ambiental, para implementar los instrumentos necesarios para la construcción de la política de educación ambiental del Distrito Capital, así como asesorar a la Secretaría de Educación en la Elaboración de los programas de Educación Ambiental. En cumplimiento del marco normativo y principios que orientan la Educación Ambiental y para organizar las intervenciones de actores que desarrollan procesos de Educación Ambiental en las doce localidades del Distrito Capital asesoradas por el DAMA, se hace necesaria la construcción de una estrategia de gestión local que, como espacio de discusión educativo ambiental y en diálogo con el CIDEA Distrital, asesore, coordine, encamine y haga seguimiento a estas intervenciones, teniendo en cuenta las necesidades de las comunidades locales, atendiendo a sus propias dinámicas como instrumento clave de la construcción de verdaderos procesos democráticos. 2 1.1.2 Objetivos 1.1.2.1 Objetivo General Generar y consolidar, con el liderazgo de la Secretaría Técnica del CIDEA Distrital, procesos de planeación, construcción y ejecución de la educación ambiental desde lo local. 1.2 Objetivos Específicos Dinamizar la Política Nacional de Educación Ambiental para proporcionar un marco conceptual y metodológico que oriente la inclusión de la dimensión ambiental en el sector educativo formal, no formal e informal en local. Participar en la construcción y/u orientación de planes, programas y proyectos de educación ambiental en la localidad. Participar desde la localidad en la construcción de la Política Distrital de Educación Ambiental. Consolidar el Comité Local de Educación Ambiental, para generar espacios de concertación y participación institucional. Participar en las diferentes actividades producto de los procesos que se generen desde el CIDEA Distrital en lo local. Diseñar una propuesta de lineamientos de Educación Ambiental, a nivel local que sirva de insumo en la construcción de la Política Distrital de Educación Ambiental. Orientar a los docentes en la sistematización de los PRAE a través de la capacitación en el uso de la herramienta interactiva PRAES WEB. Fortalecer los procesos de formación y actualización de docentes y otros agentes educativos en lo concerniente a la Educación Relativa al Ambiente. 1.1.3 Marco Legal y Normativo • Constitución Política de Colombia (1991): A través de la Constitución Política de 1991, la protección del ambiente y los recursos naturales del país fue elevada a la categoría de deber y derecho colectivo, definiendo obligaciones del Estado y de los ciudadanos para proteger las riquezas culturales y naturales de la Nación. En este sentido, la Constitución Nacional dispone como deber del Estado la protección de la diversidad e integridad del ambiente, la conservación de las áreas de especial importancia ecológica y el fomento de la educación para el logro de estos fines. Adicionalmente, dispone que el Estado debe planificar el manejo y aprovechamiento de los recursos naturales, para garantizar su desarrollo sostenible, su conservación, restauración o sustitución, así como velar por la prevención y control de los factores de deterioro ambiental, la imposición de las sanciones legales y exigir la reparación de los daños causados. • Código Nacional de Recursos Naturales Renovables y de Protección al Medio Ambiente (Decreto Ley 2811 de 1974): Con fundamento en el principio que el ambiente es patrimonio común de la humanidad y es necesario para la supervivencia y el desarrollo económico y social de los pueblos, fue expedido en 3 1974 el Código Nacional de Recursos Naturales Renovables y de Protección al Medio Ambiente. A través de este marco normativo se regula el manejo de los recursos naturales renovables, la defensa del ambiente y de los recursos naturales renovables contra la acción nociva de fenómenos naturales y los demás elementos y factores que conforman el ambiente o influyen en los elementos ambientales. • Ley 99 de 1993 - Sistema Nacional Ambiental-SINA: El esquema de manejo ambiental cambia en Colombia con motivo de la expedición de la Ley 99 de 1993. Mediante esta Ley, se crea el Ministerio del Medio Ambiente, se reordena el sector público encargado de la gestión y conservación del medio ambiente y los recursos naturales renovables y se organiza el Sistema Nacional Ambiental - SINA, incluyendo la redefinición y creación de un total de 34 Corporaciones Autónomas Regionales y 5 Institutos de Investigación. Se destacan las siguientes instancias relevantes en términos de la administración, protección, conservación, preservación, uso y manejo de los recursos naturales renovables, por parte de las autoridades ambientales: - Ministerio del Medio Ambiente: Entre otras funciones, corresponde al Ministerio regular el uso, comercio, importación y exportación de especies y estimes genéticas de fauna y flora silvestre y establecer los mecanismos y procedimientos de control y vigilancia. - Corporaciones Autónomas Regionales y de Desarrollo Sostenible y Autoridades Ambientales de los Grandes Centros Urbanos- DAMA: Ejercen las funciones de evaluación, control y seguimiento de los usos de los recursos naturales renovables, así como el control de la movilización, procesamiento y comercialización de dichos recursos, en coordinación con las entidades territoriales y otras autoridades de policía, de conformidad con la ley y los reglamentos. • Ley 115 de 1994 : Por la cual se expide la ley general de educación: Artículo 1o. Objeto de la Ley: La educación es un proceso de formación permanente, personal, cultural y social que se fundamenta en una concepción integral de la persona humana, de su dignidad, de sus derechos, y de sus deberes. Artículo 5o. Fines de la Educación: De conformidad con el artículo 67 de la Constitución Política, la educación se desarrollará atendiendo, ente otros, los siguientes fines: - La adquisición de una conciencia para la conservación, protección y mejoramiento del medio ambiente, de la calidad de la vida, del uso racional de los recursos naturales, de la prevención de desastres, dentro de una cultura ecológica y del riesgo y de la defensa del patrimonio cultural de la nación. - La formación para la promoción y preservación de la salud y la higiene, la prevención integral de problemas socialmente relevantes, la educación física, la recreación el deporte y la utilización del tiempo libre, y la promoción en la persona y en la sociedad de la capacidad para crear, investigar, adoptar la tecnología que se requiere en los procesos de desarrollo del país y le permita al educando ingresar al sector productivo. • Decreto 1743/94 - Por el cual se reglamenta el PRAE: Artículo 4: Asesoría y apoyo institucional. Mediante directivas u otros actos administrativos semejantes, 4 el Ministerio de Educación Nacional conjuntamente con el Ministerio del Medio Ambiente, definirán las orientaciones para que las Secretarías de Educación de las entidades territoriales, presten asesoría y den el apoyo necesario en la coordinación y control de ejecución de los proyectos ambientales escolares en los establecimientos educativos de su jurisdicción y en la organización de los equipos de trabajo para tales efectos. Así mismo los Ministerios y Secretarías mencionados recopilarán las diferentes experiencias e investigaciones sobre educación ambiental que se vayan realizando y difundirán los resultados de las más significativas. Artículo 5: Formación de docentes. Los Ministerios de Educación Nacional y del Medio Ambiente, conjuntamente con las Secretarías de Educación de las entidades territoriales, asesorarán el diseño y la ejecución de planes y programas de formación continuada de docentes en servicio y demás agentes formadores para el adecuado desarrollo de los proyectos ambientales escolares. Artículo 15: Asesoría y Coordinación en el área de educación ambiental. Las Corporaciones Autónomas Regionales y los organismos que hagan sus veces en los grandes centros urbanos, prestarán asesoría a las Secretarías de Educación Departamentales, Municipales y Distritales en materia de ambiente para la fijación de lineamientos para el desarrollo curricular del área de educación ambiental en los establecimientos de educación formal de su jurisdicción. • Plan de Gestión Ambiental – PGA- del Distrito Capital: El Plan de Gestión Ambiental – PGA- del Distrito Capital define estrategias generales para la Gestión Ambiental en Bogotá, entre las que se incluye la Estrategia de Educación Ambiental que contempla estableciendo como línea de acción3: La Educación Ambiental Básica que tiene como actividades: - Establecimiento de pautas para la incorporación de la Educación Ambiental básica a los fundamentos, estructura y contenidos curriculares en coordinación con la Secretaría de Educación Distrital. - Coordinación de un programa piloto de capacitación de docentes en el tema de Educación Ambiental y desarrollo de PRAE modelo, con los CADEL y la Secretaría de Educación del Distrito. - Orientación y fomento a los PRAE e iniciativas ambientales proyectadas desde las Comunidades Educativas. - Inclusión de las Comunidades Educativas y sus PEI en los procesos de Gestión Ambiental local y Distrital. En cuanto a la Educación Ambiental ligada a escenarios de gestión, el PGA plantea como prioridad el tema de políticas, programas, proyectos y actividades de la gestión ambiental en relación con el escenario en cuestión. • Política Nacional de Educación Ambiental: Esta política tiene por objeto la concertación, planeación, ejecución y evaluación conjunta a nivel intersectorial e interinstitucional de planes, programas, proyectos y estrategias de Educación Ambiental formal, no formal e informal a nivel nacional, regional y local. 3 DEPARTAMENTO TÉCNICO ADMINISTRATIVO DEL MEDIO AMBIENTE – DAMA-. Plan de Gestión Ambiental –PGA- 2001 – 2009. Bogotá D.C. DAMA, 2002. p. 50-54. 5 De otra parte, proporciona un amplio marco conceptual y metodológico y formula estrategias que permiten incorporar la Educación Ambiental como eje transversal en los planes, programas y otros en el sector ambiental y en el educativo en la dinámica del SINA. • Convenio Interadministrativo 008 de 2004 Secretaría de Educación del Distrito - SED- y DAMA: Busca aunar esfuerzos para la vinculación efectiva de la Comunidad Educativa al proceso de Gestión Ambiental en el Distrito Capital de conformidad con la normatividad vigente y la problemática ambiental local en desarrollo del proyecto: “La Ciudad como escenario Educativo”, específicamente en el componente Movilización de Entidades Educadoras a la escuela. 1.1.4 Marco Conceptual 1.1.4.1 Sistema Ambiental del Distrito Capital – SIAC Se define como el conjunto de orientaciones, normas, actividades, recursos, 4 programas e instituciones que regulan la gestión ambiental en el Distrito Capital . Su objetivo es asegurar que la estrategia de coordinación interinstitucional del Plan de Gestión Ambiental Distrital - PGA se planifique y desarrolle con la participación y responsabilidad de las entidades que pertenecen a él, más las que se incorporen de acuerdo con las acciones ambientales que se han ejecutado. El SIAC se fundamenta en la corresponsabilidad de los asuntos ambientales; dado que las responsabilidades ambientales recaen sobre todas y todos los ciudadanos y sobre todas las organizaciones de la sociedad, se requiere de una estructura sistémica que facilite a cada actor cumplir cada vez mejor con sus responsabilidades. El motor principal del SIAC es el DAMA. El DAMA cuenta con el Consejo Ambiental Distrital como soporte al desarrollo de las políticas ambientales del Distrito Capital. Este Consejo esta compuesto por las entidades distritales que mayor responsabilidad tienen en temas ambientales. Estas entidades las llamaremos entidades con funciones ambientales. Hacen parte del SIAC; los Comités técnicos. Los diferentes tipos de comités que de manera regular se reúnen para atender temas ambientales o en los cuales participe el DAMA para incorporar objetivos ambientales en acciones de otras entidades. Uno de estos comités Distritales es el Comité Técnico Interinstitucional de Educación Ambiental – CIDEA Distrital, planteado como una estrategia de descentralización promovida en la Política Nacional de Educación Ambiental y a la vez, es función del DAMA y la Secretaría de Educación Distrital dinamizarla a nivel Bogotá y que según acta de acuerdo de su conformación en el 2005, las dos entidades anteriormente nombradas ejercen la Secretaría Técnica de dicho comité. 1.1.4.2 Investigación Acción Participación • Participación: La participación ha sido propuesta por teóricos de las ciencias humanas como mecanismo de prevención y difuminación de los conflictos sociales. Desde la psicología "humanista" de los 50 a la nueva empresa toyotista, la participación consiste en la incorporación activa de los implicados a un proyecto cuya dirección estratégica se encuentra definida de antemano. 4 Acuerdo 19 de 1996 por el cual se adopta el Estatuto General de Protección Ambiental del Distrito Capital de Bogotá y se dictan normas básicas necesarias para garantizar la preservación y defensa del patrimonio ecológico, los recursos naturales y el medio ambiente. 6 Desde la IAP se considera ésto un simulacro de la verdadera participación5; la participación no puede confundirse con una simple preocupación por encontrar el apoyo reflexivo de los implicados para los objetivos de conocimiento e intervención delineados por un dispositivo exterior a ellos. La IAP tiene cuidado de diferenciarse de todas aquellas llamadas a la participación basadas en la asimilación acrítica de un marco global de partida con el que se propone compromiso. La participación que reclama la IAP no es simple movilización, sino recapitulación sobre el conjunto de procesos que condicionan la vida social de un colectivo determinado con el objetivo de acometer una eventual modificación de los mismos. Por supuesto, esto supone una específica relación entre los dirigentes y los dirigidos. En la IAP los dirigentes tienen como primer objetivo su desaparición, por lo que cada una de las fases -como veremos a continuación- no culmina sin que se haya avanzado en la capacidad de autogestión de los colectivos sociales implicados. En la IAP, la acción transforma al "enseñante" en facilitador y catalizador. Con el último concepto se refiere a la inteligencia para provocar una reacción reflexiva en la comunidad que se estudia, con el primero a la necesidad de ir proporcionando elementos de reflexión y análisis a los implicados sin prefigurar totalitariamente los problemas de reflexión o los objetivos de acción que los mismos elijan6. La concepción de la participación en la IAP debe evitar tanto el peligro elitista como la apuesta por un diálogo oscurecido ante las desigualdades reales de los sujetos que entran en comunicación. Frente al sueño vanguardista o el libertarioliberal, la IAP propone establecerse en el espacio abierto por una contradicción sólo clausurable tendencial y temporalmente. En palabras de Paulo Freire "el hombre dialógico tiene fe en los hombre antes de encontrarse frente a frente con ellos. Esta, sin embargo, no es una fe ingenua. El hombre dialógico que es crítico sabe que el poder de hacer, de crear, de transformar, es un poder de los hombres y sabe también que ellos pueden, enajenados en una situación concreta tener ese poder disminuido. Esta posibilidad, sin embargo, en vez de matar en el hombre dialógico su fe en los hombres se presenta ante él, por el contario como un desafío al cual puede responder. La apuesta por una democracia participativa radical podría hacer a la IAP sospechosa de un idealismo que desconoce las dificultades de concebir una sociedad compleja como un sujeto que se autorregula a sí mismo. Huyendo de semejantes objetivos desaforados, uno de los promotores centrales de la IAP, Orlando Fals Borda (1991: 12-13), ha insistido en la referencia a una utopía realista ("un Estado con menos Locke y más Kropotkin") ajena tanto al socialismo de Estado y la simplicidad ultraizquierdista como a la democracia de competencia entre partidos del capitalismo tardío. La IAP parecería conectar, así, con algunos de los rasgos distintivos del arsenal político configurado durante los años 70 y 80 de nuestro siglo por lo que se denominó como nuevos movimientos sociales. • Redescubrimiento del saber popular: La existencia de una diferencia entre los lugares de extracción de conocimiento y los de su utilización demuestra cómo las ciencias sociales se entreveran en prácticas de opresión. Las exigencias de una reapropiación del conocimiento deriva de la vocación participacionista de la IAP. Sin embargo, las llamadas a la rehabilitación del saber popular no tienen sólo el sentido de proporcionar a los grupos sociales dominados capacidad para conocer 5 6 GIANOTEN DE WIT. 1991. p. 95. RAHMAN, 1991. p. 27-28) 7 las claves que rigen sus vidas. Los defensores de la IAP buscan el desarrollo y la potenciación de los saberes que configuran la vida cotidiana de las gentes. Desde la certeza, claro está, de que puede rescatarse allí una riqueza sobre el mundo despreciada y minorada por los supuestos hegemónicos acerca de la producción, la posesión y la aplicación del saber. 1.1.4.3 El Carácter Sistémico del Ambiente y sus Diversas Aproximaciones7 La estrategia de gestión para la organización de la intervención de actores en procesos de Educación Ambiental, debe partir del carácter sistémico del ambiente dadas las interacciones que ocurren en las comunidades. Ese carácter sistémico permite la integración de algunas perspectivas dado el carácter interdisciplinario que en sus interacciones permite y aporta diferentes elementos, complementarios entre sí. • Perspectiva Interdisciplinaria: Las situaciones ambientales resultan de las interacciones y contrastes de los diversos componentes de un sistema. Estos componentes, de acuerdo con este planteamiento, son a la vez de esencia natural, es decir, de orden físico, químico, biológico, y de esencia social, de orden tecnológico, económico, cultural, político. No es factible encontrar toda la información ni la conceptualización o metodologías necesarias para la comprensión de un problema ambiental en una sola área o disciplina del conocimiento. Cada disciplina aporta argumentos válidos para la explicación de un fenómeno, pero la explicación global del mismo (así se deban tener en cuenta los argumentos provenientes de las diversas disciplinas) no es la simple sumatoria de ellos: es la integración de dichos argumentos en el espacio común propiciado por el fenómeno. La comprensión de los fenómenos ambientales para la búsqueda de soluciones requiere de la participación de diversos puntos de vista, de diversas perspectivas y, por consiguiente, de las diversas áreas del conocimiento. Esto implica un trabajo interdisciplinario de permanente análisis y síntesis. • Perspectiva científica y tecnológica: El análisis de situaciones y la solución de problemas de carácter ambiental requieren de un espíritu crítico y reflexivo fundamentado en la razón y la argumentación de los hechos (bien sea que se trate de las lluvias ácidas o del problema que genera el manejo de las basuras en las ciudades, por ejemplo). Para esto es indispensable recurrir a las ciencias, ya que estas aportan elementos para profundizar en el conocimiento de los mismos. El razonar frente a un problema o a la dinámica de un sistema ambiental implica la observación y la experimentación permanente y la contrastación de hipótesis para el análisis y la síntesis. Posibilita el conocimiento de los componentes de dicho sistema, las interacciones entre ellos para comprender su funcionalidad y poder actuar frente a los problemas con la misma actitud que tendría aquel que conoce muy bien la lógica que existe entre las piezas de un rompecabezas para armar la figura deseada. Esto significa que cualquier decisión en cuanto al problema ambiental, debe trascender la simple información general científica y basarse en la investigación. 7 TORRES CARRASCO, Maritza. La Dimensión Ambiental: Un reto para la educación de la nueva sociedad. Bogotá D.C. Ministerio de Educación Nacional, 1996. p. 36-40. 8 La investigación, entonces, debe ser un componente fundamental de la educación ambiental. En este caso, el ambiente debe ser su objetivo y campo permanente. Es solo a través del redescubrimiento del entorno y de la exploración, que el individuo entra en contacto con la realidad y se hace creativo en la búsqueda de soluciones a su problemática. Por lo demás, la educación ambiental debe ser el vehículo que favorezca la socialización de los resultados de la investigación científica, tecnológica y social y, a su vez, genere nuevas demandas en conocimientos y saberes, a los responsables directos de las tareas investigativas. Según este criterio, la educación ambiental no debe verse como un proceso aislado de los sistemas de investigación y de información en el campo ambiental. • Perspectiva Social: Toda actividad educativa en materia de ambiente debe tender a la formación de la responsabilidad individual y colectiva y buscar un compromiso real del individuo con el manejo de su entorno inmediato, con referentes universales. Esto debe lograrse por medio de acciones que permitan evidenciar las relaciones ser humano-sociedad-naturaleza. Estas acciones deben, a su vez, estar orientadas a clarificar críticamente el tipo de sociedad a la cual pertenece el individuo, el papel que tiene en ella y el tipo de relaciones que establece con los demás y con la sociedad misma. Para ubicar los anteriores planteamientos en un contexto natural, el individuo debe conocer su espacio, su tiempo y, en general, su historicidad, elementos fundamentales en la comprensión de sus límites y potencialidades. Es así como el individuo puede reconocerse y reconocer a los demás dentro de unos criterios claros de diversidad, y comprender la dinámica social y sus elementos de evolución, valorando su cultura y su mundo. Un criterio semejante le permite ser consciente de la calidad de su participación en cualquier proceso de gestión, lo cual, a su vez, lo conduce a una verdadera formación en la responsabilidad. • Perspectiva Estética: Entendiendo que el ambiente no es solo aquello que envuelve al ser humano en el sentido biofísico, sino que es también el contexto que utiliza para desarrollar su vida material y construir el tejido de relaciones con sus semejantes, con el objeto de que su vida social o individual sea más o menos armónica, la educación ambiental debe hacer comprensible la relación ser humano-sociedad-naturaleza y permitir el desarrollo de una sensibilidad basada en la admiración y el respeto por la diversidad natural y sociocultural. Construir un concepto de estética desde lo ambiental, requiere de un trabajo permanente de lectura de contextos, desde las costumbres, las tradiciones, los gustos, las ilusiones, los símbolos, los signos, las formas de expresar las emociones, las formas como los recuerdos y las imágenes pasan de una generación a otra, las formas de relación que se establecen en el seno de los grupos humanos y que son inherentes a sus proyecciones en el entorno natural, los conceptos de espacio y de tiempo para las culturas y la organización de la vida social en todas sus dimensiones. Desde esta concepción se debe buscar que el individuo valore la diversidad de paisajes, la diversidad de comportamientos frente a los espacios públicos y privados, para que a través de esta valoración pueda contribuir de manera consciente a la conservación, adecuación o adaptación de espacios en la realización de actividades cotidianas que le proporcionen placer y mejoren la calidad de vida. • Perspectiva Ética: La ética juega un papel primordial en el manejo del ambiente y, por ende, debe ser pilar fundamental en cualquier proceso de educación ambiental. Incidir en la sensibilización y en la concienciación de los individuos y de 9 los colectivos para que su comportamiento genere nuevas formas de relación con su ambiente particular y global, es uno de los propósitos más importantes de la educación ambiental. Las alternativas de solución a los diversos problemas ambientales deben ser el producto de las decisiones responsables de los individuos, las comunidades y en últimas de la sociedad, atendiendo a los criterios de valoración de su entorno, íntimamente relacionados con el sentido de pertenencia, y por ende, con los criterios de identidad. La Educación Ambiental debe contribuir a la formación de los individuos y de las sociedades en actitudes y valores para el manejo adecuado del entorno, a través de una concepción ética fundamentada en una reflexión crítica, estructurada y permanente que permita comprender el porqué de esos valores, para asumirlos como propios y actuar en consecuencia. Las perspectivas analizadas deben hacer posible un verdadero trabajo crítico que reoriente la cultura científica para ponerla al servicio de los seres humanos, de suerte que en su reflexión sobre el sentido de la vida y sobre su responsabilidad social, incluyan la utilización de la ciencia y la técnica de manera adecuada a las necesidades propias de un desarrollo social autónomo, al igual que los saberes comunes y tradicionales. 1.1.5 Escenarios de Proyección La función principal del Comité Local de Educación Ambiental, será la de asesorar, territorialmente, acciones intersectoriales e interinstitucionales en este campo. Se busca gestionar la inclusión de la educación ambiental en el plan de desarrollo de la localidad, en los planes de gestión ambiental local y Distrital (en el contexto de los planes de ordenamiento territorial local y Distrital), en los planes de desarrollo de cada una de las instituciones que hacen parte del comité, entre otras. Misión La misión está relacionada con la dinámica ambiental de la localidad y lo estipulado en los lineamientos para una política de educación ambiental y en la legislación ambiental vigente. Visión Está orientada a incluir y dinamizar la educación ambiental en los planes de desarrollo locales y distritales, al igual que en las entidades o instituciones, que por su carácter deban planearla y ejecutarla. Otro aspecto de la visión está relacionado con la flexibilización de políticas de educación ambiental en los diversos sectores y niveles, de acuerdo con los contextos ambientales particulares. 1.1.6 Procedimiento 1.1.6.1 Diagnóstico Se diseñarán, modificarán y aplicarán formatos para determinar el estado de desarrollo de los PRAE, participación de actores, manejo conceptual y metodológico en lo relativo a la Educación Ambiental. Estos instrumentos se aplicarán con docentes coordinadores de PRAE de las instituciones Educativas Distritales de las doce localidades asesoradas por el DAMA. 10 Se indagará sobre la existencia de espacios de discusión y concertación ambiental local (mesas, comités, comisiones, etc), otros actores y proyectos en ejecución relacionados con el tema de Educación Ambiental. La indagación se llevará a cabo con las Alcaldías Locales y Centros de Administración Educativo Local – CADEL respectivos. De igual forma, sobre un mapa se indicará la intervención de los actores identificados, en las Instituciones Educativas y otros espacios de las localidades objeto de estudio. A continuación se elaborarán matrices para la condensación de la información obtenida. 1.1.6.2 Lectura de Contexto La aplicación de los instrumentos anteriores permitirá hacer la lectura de contexto de la gestión en Educación Ambiental local y orientará el diseño de la estrategia, en cuanto a: • Actores y entidades 1. Competencias ¿Cómo lo hacen? 2. Población objeto y espacios intervenidos La identificación de estos aspectos se desarrollará a través de las preguntas orientadoras (ver anexo 1) y el ejercicio de Georreferenciación (mapa de intervención y gestión interinstitucional). • Comunidades Educativas 1. Procesos de Educación Ambiental ¿qué implementa? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Quiénes intervienen?. 2. Participación en Gestión Ambiental Local A través de la aplicación del Formato de Estado de Desarrollo de PRAE y otros instrumentos. • Lectura de Contexto Territorial 1. Sistema Biofísico 2. Sistema socioeconómico y cultural 3. Planeación y Gestión Ambiental A través de la lectura de Diagnóstico Ambiental Local y aspectos detectados por cada entidad competente. 1.1.6.3 Construcción de la estrategia Se tomará como base la estructura organizacional descrita en las figuras 1 y 2 y los elementos descritos anteriormente. 11 Figura 1. Esquema base de la propuesta para organizar la intervención de los actores que participan en procesos de Educación Ambiental en las localidades San Cristóbal y Ciudad Bolívar∗. Escolar Comunidad Instituciones Educativas Publicas Privadas Comunidad Educativa Conocimiento Científico e Investigación PRAES CADEL Equipo PedagógicoDAMA No Escolar Instituciones Gubernamentales CIDEA SED DAMA EAAB, IDRD, IDCT, JBB, CAB, DPAE, UESP, Secretaría de Salud, Universidad, ONG’s Aporte Técnico y de Gestión Instituciones no Gubernamentales Mesa Ambiental Grupos Juveniles, grupos étnicos, afrocolombianos y raizales, Lideres comunitarios, Junta de acción comunal, madres comunitarias, etc. Alcaldía Local, UEL, Planeación Local, etc Conocimiento popular Concertación, participación y gestión PROCEDA Currículo Plan de Estudios Retroalimentación Soluciones alternativas Soluciones parciales alternativas Procesos formativos autogestionarios ∗ Adaptado de Torres, Maritza. La Dimensión Ambiental: Un reto para la Educación de la Nueva Sociedad. Bogotá D.C. Ministerio de Educación Nacional, 1996. 12 Figura 2. Estructura organizativa y jerárquica de los Comités Locales de Educación Ambiental. Contexto Educación Ambiental Distrital CIDEA Distrital Contexto Educación Ambiental Local Asesor PEL Situación Ambiental Distrital Sistema Ambiental Distrital Comité Local Educación Ambiental SED (EPEL) DAMA (GEAF) Entidades que Intervienen en EA Situación Ambiental Local Sistema Ambiental Local - SIAL SIGAL Diseñar, asesorar, orientar, acompañar, evaluar Planes, programas, proyectos de Educación Ambiental 13