Juan Caño ¡¿Qué he hecho yo para merecer estos kilos?! Bienvenido al planeta de los gorditos QUE HE HECHO YO PARA MERECER ESTOS HILOS.indd 5 1/10/12 13:23:06 Presentación S uele decirse que el español es esa persona que siempre está empezando a aprender inglés. Yo añadiría: ¡y también a adelgazar! En ambos procesos, el comienzo suele ser esperanzador porque se alcanzan rápidos progresos: enseguida puedes chapurrear unas pocas palabras en el nuevo idioma, igual que presumir de haberte quitado dos kilitos de encima en un par de semanas. Lo difícil es continuar, tener la suficiente constancia para proseguir en un camino que requiere mucha más voluntad de la que inicialmente habías previsto y que se enquista a las primeras de cambio. La guinda es poder hacerlo con buen humor, cualidad que suele acompañar más a los que tratan de adelgazar que a los que intentan aprender inglés. Una rápida constatación entre tus allegados demostrará que los gorditos suelen tener más sentido del humor que los escuchimizados. Al menos eso creo yo, que milito en el planeta de los gorditos. 17 QUE HE HECHO YO PARA MERECER ESTOS HILOS.indd 17 1/10/12 13:23:06 ¡¿Qué he hecho yo para merecer estos kilos?! La sabiduría popular también atribuye a los rellenitos otras cualidades, como cuando se dice eso de «hombre gordinflón, hombre bonachón». Pero la presunta jovialidad y la bondad que asume el refrán no deben servir de excusa para evitar perder peso, claro. El caso es que, a pesar de nuestra famosa dieta mediterránea, la mitad de los españoles adultos tenemos sobrepeso, aunque algunos no lo sepan o no quieran enterarse y, lo que es mucho peor, más del 15 por ciento son obesos. Por eso, como dice el periodista especializado en salud y nutrición Ramón Sánchez-Ocaña, «nos pasamos media vida en gerundio, es decir adelgazando y engordando». Un amigo dice, sin embargo, que él no pierde peso, sino que se deshace de peso «porque no pienso volver a encontrarlo». No ha pasado suficiente tiempo como para que pueda comprobar la veracidad o sinceridad de su declaración. Más franco es otro conocido que declara que, cuando hace dieta, enseguida se le nota en la cara: «Creo que no es porque adelgace, sino por la tristeza que me provoca pasar hambre». Es de los que piensan que en panza llena no hay pena; en panza vacía no hay alegría. Claro que pesa 130 kilos y cualquier día le dará un jamacuco. La lucha contra la obesidad androide y la obesidad ginoide hace que todos los hombres que lucimos como manzanas y las mujeres que lucen como peras tratemos de conseguir la ansiada cintura de reloj de arena. Cueste lo que cueste. Es decir, nos proponemos pasar amargura para conseguir hermosura. Todo lo que hacemos para perder esos kilos de más, o para disimularlos, y las neuras que acompañan a esta labor, son el 18 QUE HE HECHO YO PARA MERECER ESTOS HILOS.indd 18 1/10/12 13:23:06 Presentación objeto de este libro que, en el caso de que te provoque alguna sonrisa, habrá logrado que pierdas unas pocas calorías… porque, aunque parezca increíble, veinte segundos de una buena risotada, con la que mueves hasta cuatrocientos músculos diferentes, equivalen a tres minutos de ejercicio. 19 QUE HE HECHO YO PARA MERECER ESTOS HILOS.indd 19 1/10/12 13:23:06 1 ¿OBESO YO? T engo un amigo que dice: «Yo no soy obeso, lo que pasa es que los que están a mi lado siempre son muy delgados». Pero no existe excusa ya para definir al obeso: la palabra proviene del latín obesus, tradicionalmente traducido por corpulento, gordo o regordete, y hay que tener en cuenta que esus es el participio pasado del verbo edere (comer). Obeso o gordo «¡Hola!, me llamo Juan y soy obeso». Esta fórmula de presentación y confesión pública típica de las reuniones de Alcohólicos Anónimos, cambiando lo de obeso por alcohólico, no es necesaria en el caso de los gorditos por la sencilla razón de que proclamamos física y a todas luces nuestro exceso de peso y, por tanto, no podemos constituirnos en Gorditos Anónimos. 21 QUE HE HECHO YO PARA MERECER ESTOS HILOS.indd 21 1/10/12 13:23:06 ¡¿Qué he hecho yo para merecer estos kilos?! Los últimos veinte años de mi vida los he vivido traspasando la frontera del sobrepeso y entrando en la obesidad (leve) y vuelta atrás. Aunque suela ser contento de tontos, este mal afecta a muchos: en España uno de cada dos adultos tiene sobrepeso y el 15 por ciento son —a veces somos— obesos. Se entiende por sobrepeso superar en un 10 al 20 por ciento el peso ideal; obesidad, todo lo que va más allá del 20 por ciento y, obesidad mórbida, cuando se traspasa el 40 por ciento. También se considera obeso al hombre con perímetro abdominal mayor o igual a 102 cm. Y, en mujeres, a 88 cm. Y ¿cuál es el peso ideal? De forma muy simplista valdría decir que para los adultos es poner en kilos la cifra de centímetros que acompaña a tu metro inicial de estatura. Es decir, yo, que mido 1,78, debería pesar 78 kilos. Como esta mañana pesaba 86, tengo sobrepeso. El año pasado, por estas fechas, pesaba 96, es decir estaba obeso. En cualquier caso, soy gordo, pertenezco al planeta de los gorditos. «Gordo» es una palabra de origen celta y reconozco que todo lo que formaba parte de la comida típica celta me encanta: cerdo, buey, vaca y jabalí, todo ello acompañado con miel, queso, mantequilla y, por supuesto, corma (cerveza) y vino. Hubo un tiempo, y no precisamente fue el año pasado, en que la obesidad estuvo asociada con el atractivo físico, la fuerza y la fertilidad. A finales del siglo xvi y principios del xvii la obesidad fue considerada símbolo de riqueza y alta categoría social, como demuestran las famosas pinturas de Rubens. Hoy, por el contrario, la obesidad es un estigma social en varios países. Estudios en Estados Unidos demuestran que las 22 QUE HE HECHO YO PARA MERECER ESTOS HILOS.indd 22 1/10/12 13:23:06 ¿Obeso yo? personas ricas por herencia son más delgadas que la media y que las mujeres que se casan dentro de una posición social más alta son más delgadas que aquellas que contraen matrimonio en una clase social más baja. Y lo peor no es lo que piensen los demás de ti o la consideración que les merezcas debido a tu físico, lo peor es que la obesidad te pasa factura, porque ese almacén de grasa corporal sobredimensionado está asociado a numerosas complicaciones como la diabetes, la apnea del sueño, los ictus, la osteoartritis, algunas formas de cáncer y numerosos trastornos dermatológicos y grastrointestinales. Cada año mueren cerca de tres millones de personas a causa de enfermedades asociadas a la obesidad o al sobrepeso y se estima que ese exceso de peso es el quinto factor principal de defunción en todo el mundo. De hecho, hay quien define la obesidad como la pandemia del siglo xxi. En los últimos veinte años se ha triplicado el número de afectados. En el mundo hay 500 millones de obesos y 1.500 millones de personas tienen sobrepeso. Los genes humanos, formados durante millones de años de evolución, parece que aceptan mal las dietas modernas y el estilo sedentario de vida que se ha implantado en la sociedad occidental. Nuestro cuerpo tiene más mecanismos para ingerir alimentos que para gastarlos. Estamos diseñados para preservar la grasa, no para gastarla, por si vienen mal dadas. Pero, mientras dure lo bueno, seguimos almacenando. Vamos al cine y cogemos un cubilete de palomitas (el tamaño de la ración se ha triplicado) y nos metemos en el cuerpo nada menos que 600 calorías mientras vemos una peli. 23 QUE HE HECHO YO PARA MERECER ESTOS HILOS.indd 23 1/10/12 13:23:06