30 contigo>literatura y vida>libros [el libro] >>La sonrisa etrusca permitir que su nieto pase las noches solo, ¿y si le muer- Se llama Salvatore Roncone, pero todos sus amigos le llaman Bruno. De él dicen en Milán que es rústico, patán, pueblerino, sin educación, mucho genio, malos modos, cabezota, machista, antiguo y desconfiado, pero a lo largo del libro descubriremos su nueva faceta: también es abuelo. El ser abuelo descubre en él una cara que estaba oculta bajo la ruda capa campesina. Aparece, bajo su piel curtida y áspera, una nueva persona dulce, cariñosa, delicada y llena de amor para su nieto. Él mismo descubre con sorpresa su nuevo lado y veremos que casi lo único en lo que se convierte Bruno tras llegar a Milán, es en abuelo, en abuelo de un bebé de 13 meses que se llama como él, Brunettino. Bruno deja su pueblo natal en el sur de Italia y va a Milán a casa de su hijo, su nuera y su nieto, para ponerse en manos de los mejores médicos. Bruno sufre un cáncer y hay poca esperanza para él. Su enfermedad se convierte en lo menos importante de su vida desde el momento en que mira los brillantes ojitos de su nieto y una corriente muy especial les une para siempre. Su nieto se convierte en su razón de vivir, cuando creía que todo estaba perdido, cuando se sentía vencido y lo único que hacía era esperar su fin, aparece la luz que le ilumina, la ilusión que le da fuerza y la llama que alimenta su coraje para intentar superar la sensación de derrota que su enfermedad le había dejado. El viejo abuelo pasa las noches velando la cuna de su nieto. Él cree que la educación que su hijo y su nuera están dando al bebé es demasiado estricta, no puede [el autor] de una rata? piensa preocupado; en sus tiempos, los bebés dormían en la habitación de los padres, así que decide pasar las noches junto a la cuna vigilando los sueños de su pequeño tesoro. El desconfiado abuelo no se fía ni de los médicos, ni de los milaneses, ni de los peligros de la ciudad, ni de su propio hijo, y decide tomar parte directa, aunque secreta, en la educación de su nieto. Gracias a esas noches en vela, gracias a esas charlas silenciosas con su nieto, conocemos a Bruno, conocemos, en la oscuridad de la alcobita de su nieto, cómo fue su pasado y cómo era su presente justo antes de ir a Milán. Su emocionante historia como partisano en la guerra, patriota tres veces herido que llegó a ser el más importante personaje de su pueblo, el mejor alcalde que se recuerda. Sus aventuras en las montañas del sur de Italia y sus relaciones de amores y odios en el pueblo, de todo esto nos enteramos mientras Brunettino duerme. El viejo comunista nos hace partícipe de su pasado y entendemos mucho mejor su manera de actuar hoy. Mientras le conocemos y le cogemos cariño, la Rusca, como él llama a la bicha que le muerde sus entrañas y le va acortando la vida, le avisa de vez en cuando de que no es joven ni tiene tanta salud ni tanto tiempo como antes, pero el cáncer ya no le hace sentirse derrotado, ya lo único que le preocupa es tener el tiempo suficiente para ir en verano al pueblo con su nieto y pasear con orgullo con él por la plaza. Ya no se siente enfermo, ahora lo que le importa es enseñarle a su nieto toda la sabiduría que él tiene, darle los consejos necesarios para hacerle un hombre como es debido. Bruno tiene una obsesión: además de contarle su vida a su nieto y enseñarle lo suficiente para que sea un hombre, su meta es vivir más que su enemigo Cantantote. Su enemigo de siempre del pueblo, postrado en una silla de ruedas, le impide volver al pueblo, ya que se prometió no volver hasta que Cantantote hubiera muerto y para él es como una competición, no puede morir antes que su enemigo y mucho menos ahora que tiene tantas cosas que enseñarle y que aprender de su nieto. Una entrañable historia en la que este abuelo se enamora, consigue el cariño de su nieto y el respeto no sólo de su hijo y su nuera, sino de todo un departamento de la Universidad de Milán. Esta historia te hará sonreír, reír, suspirar y llorar, pero sobre todo te hará ver lo importante que es tener ilusiones y la fuerza que da sentirse útil, la energía que puede darnos un ser querido que nos necesite, y lo que podemos aprender y enseñar en todas las épocas de nuestra vida. >> José L. Sampedro estructura económica en la Universidad Complutense de Madrid (1955-1969); también ejerció José Luis Sampedro nace en Barcelona en 1917. La variedad de influencias que recibe serán fundamentales en su obra: su padre nació en La Habana, su abuelo en Manila, su madre en Argelia y su abuela en Lugano, Suiza italiana. Economista y escritor español, ejerció la docencia en la Universidad de Manchester y fue catedrático de como subdirector (1962-1969) y asesor (1979-1981) del Banco Exterior de España. De 1977 a 1979 fue Senador por designación real en las primeras Cortes democráticas. Se ha ocupado de diversos aspectos de la actividad económica, en especial de la política industrial y de la dinámica interna de la economía. Es un novelista muy prolífico, de notoria popularidad y continuos éxitos. De sus últimas obras literarias se pueden destacar Octubre, octubre (1982), La vieja sirena (1990), Real Sitio (1993), El amante lesbiano (2000), Escribir es vivir (2005) y La senda del drago (2006). Desde 1990 es miembro de la Real Academia Española. Julia Vázquez contigo oncología para el paciente y su entorno