Cecilia González, violín Nací en una familia de músicos. A los seis años, mi papá me puso el violín en las manos. El fue mi primer maestro. A los nueve lo dejé, todos tenemos momentos de rebeldía; retomé el instrumento a los once, y ya nunca paré. Fui alumna en la Academia Yuriko Kuronuma y de Aarón Bitrán en la Ollin Yoliztli. Me gusta la enseñanza del violín. Al cumplir catorce años, empecé a trabajar como adjunta de Eduardo Álvarez en la escuela de iniciación de la Ollin Yoliztli. Me gané mis primeros pesos y entonces comencé a tener obligaciones en casa: debía pagar el teléfono. Fue justo pues como buena adolescente me pasaba horas utilizándolo. Nunca tuve inquietud de estudiar otra cosa. Hace quince años, con el maestro Ronald Zollman, descubrí una emoción muy grande al tocar en la orquesta. Empecé a disfrutar de la música y del estar inmersa en una orquesta Sinfónica. Entonces me di cuenta que el violín era lo que más me gustaba. Me imagino que hasta ese momento había sido un camino tan cotidiano que ni siquiera me cuestionaba mi quehacer profesional. Una de las emociones más fuertes la tuve aquí en OFUNAM. Fue un fin de temporada, en junio, con la Novena Sinfonía de Beethoven. Estaba embarazada de Martín, mi hijo, y se movía mucho. El bebé nació en agosto. Casi no me podía concentrar pues no se estaba quieto. Tal vez sentía el gozo de la música y bailaba dentro de mí. Fue indescriptible y terminé llorando de estremecimiento. Tengo dos hijos que tocan el violín, de once y ocho años. Me gusta tejer y la repostería. Desde pequeña me interesó y aprendí preguntando a mi mamá o a sus amigas. Me sentaba en la cocina a ver el proceso y me ofrecía para ayudar. Así que hago pasteles, chocolates y postres y me satisface ver a la gente cuando disfruta lo que cocino. Los rompecabezas de muchas piezas me encantan, me da placer buscar las figuras, las cosas, ordenar todo para al final verlo terminado. También me gusta bailar. Últimamente me da placer el tener un don de servicio y por eso colaboro con la delegación sindical. Me parece primordial darle su lugar y su importancia a cada uno de los músicos de la orquesta. CECILIA GONZÁLEZ GARCÍA MORA NACIÓ EN MÉXICO. HA SIDO INTEGRANTE DE LA ORQUESTA FILARMÓNICA DEL BAJÍO Y ES VIOLINISTA DE OFUNAM DESDE HACE DIECISIETE AÑOS.