LESIONES VIOLENTAS Y RITUALES EN TRIBUS NÓMADAS DE LA EDAD DEL HIERRO DE LA REGIÓN DEL ALTAI (MONGOLIA) Jordana, X (1,2,); Galtés, I (1); Liria, J (1); Isidro, a (1); Turbat, Ts. (4); Henri Giscard, P (3) y Malgosa, A (1) (1) Grup de Recerca en Osteobiografia (GROB), Unitat d’Antropologia Biològica, Universitat Autònoma de Barcelona, Barcelona, España. [email protected]; [email protected] (2) Centro de Investigação de Recursos Naturais (CIRN), Departmento de Biologia, Universidade dos Açores, Azores, Portugal. (3) International Center Eurasiat for Scientific and Cultural Research, Paris, Francia. (4) Institute of Archaeology, Mongolian Academy of Sciences, Ulaanbaatar, Mongolia. Resumen Este trabajo presenta el análisis y discusión de las lesiones violentas de origen perimortem observadas en cinco esqueletos provenientes de una necrópolis de la Edad del Hierro de la región del Altai (Mongolia). El análisis de las lesiones se lleva a cabo desde la perspectiva de la antropología forense y éstas son relacionadas con el armamento que habitualmente acompaña los enterramientos de esta cultura. Los resultados indican que tres esqueletos presentan heridas producidas por arma blanca cortante, como podría ser un puñal. Un esqueleto presenta una herida producida por un proyectil, concretamente una punta de flecha. Y un esqueleto presenta varias heridas en el cráneo producidas probablemente por un pico de combate, como el que se encuentra habitualmente en las inhumaciones Pazyryk. Este mismo esqueleto también presentaba evidencias de extracción del cuero cabelludo. Todas estas evidencias esqueléticas de violencia nos indican el papel importante de la guerra en estas sociedades nómadas. Palabras clave Paleopatología, lesiones perimortem, violencia, mutilación, Edad del Hierro, Mongolia, Pazyryk. Abstract The aim of this work is to analyse and discus the violence-related injuries of perimortem origin observed in five skeletons from an Iron Age necropolis of Altai region (Mongolia). The analysis of the injuries was undertaken from a forensic anthropology approach, and the injuries were related with the weaponry usually found related with this culture. The results indicate that three skeletons show wounds produced by sharp forces, as might be a dagger. One skeleton displays a wound produced by a projectile, specifically an arrowhead. Finally, one skeleton shows several wounds at the skull probably produced by a pickaxe, as that usually found in Pazyryk burials. This individual also displays evidences of scalping. All this violence skeletal evidences indicate the role of warfare in these nomadic societies. Key-words Paleopathology, perimortem injuries, violence, scalping, Iron Age, Mongolia, Pazyryk. 203 LESIONES VIOLENTAS Y RITUALES EN TRIBUS NÓMADAS DE LA EDAD DEL HIERRO DE LA REGIÓN DEL ALTAI (MONGOLIA) Fig. 1. Lesión incisa a nivel de margen inferior de 8ª y superior de 9ª costillas derechas en un esqueleto femenino de 25-30 años. Imagen izquierda: cara anterior; imagen derecha: detalle de la cara posterior de 9ª costilla. Introducción El análisis de las lesiones traumáticas es de gran interés en la Antropología Forense, especialmente en lo que concierne a la distinción entre el origen (antemortem, perimortem y/o postmortem) y al tipo de lesión (Cattaneo 2007). El período perimortem es el que ocurre alrededor del momento de la muerte en contraste con el período antemortem (antes de la muerte) y postmortem (después de la muerte). En el análisis de los traumatismos óseos la diferenciación entre origen antemortem y peri/postmortem es relativamente fácil debido a la evidencia del proceso de curación/remodelación en el primero (Walker 2001). Sin embargo, la distinción entre traumatismos perimortem y roturas postmortem tiene mayor dificultad y requiere de un análisis morfológico preciso. Las líneas de fractura radiadas y los cambios tafonómicos (especialmente la decoloración de los márgenes) son evidencias utilizadas para identificar los traumatismos perimortem (Tung 2007). Adicionalmente, los márgenes de fractura característicos del hueso fresco (en el vivo y en el cadáver reciente) tienden a propagarse en ángulo agudo con respecto a la superficie ósea, en un patrón comparable al observado en materiales plásticos, en contraste con las roturas postmortem que tienden a propagarse en ángulo recto (Walker 2001). Por otro lado, los traumatismos perimortem pueden tener lugar antes de la muerte (premortem) o después 204 de la muerte (postmortem), contribuyendo ambas posibilidades a muy distintas interpretaciones. Los traumatismos peri-premortem estarán muy posiblemente asociados con la causa y el tipo de muerte, mientras que los peri-postmortem pueden estar relacionados con prácticas rituales (rituales funerarios, canibalismo, etc.). Sin embargo, los traumatismos óseos en el vivo y en el cadáver reciente son esencialmente idénticos en apariencia (Walker 2001), y por lo tanto para inferir el diagnóstico de vitalidad, es fundamental el análisis de la localización y la morfología de las lesiones óseas (Cattaneo 2007). En este trabajo analizamos y discutimos los traumatismos observados en cinco esqueletos que fueron exhumados de enterramientos de la Edad del Hierro en la región del Altai (Mongolia). Durante los meses de Junio y Julio del 2006 y 2007 se llevó a cabo una misión arqueológica en las montañas del Altai Mongol, en la que participaron miembros del GROB, con el propósito de excavar tumbas (kurgans) pertenecientes a la cultura Pazyryk. Esta cultura, emparentada culturalmente con los Escitas (pueblos de origen Indo-Europeo), correspondió a tribus nómadas que se expandieron por las montañas del Altai a partir del siglo VI a.C. y que desaparecieron a finales del siglo II a.C debido probablemente a la presión de los pueblos Turco-Mongoles provenientes del Este. Las tumbas Pazyryk tienen por lo general un ritual funer- Jordana, X; Galtés, I; Liria, J; Isidro, a; Turbat, Ts; Henri Giscard, P y Malgosa, A Fig. 2. Lesión incisa a nivel de la cara anterior del sacro en un individuo de edad avanzada y sexo masculino. Imagen derecha: detalle de la lesión a nivel de la articulación sacroilíaca derecha. ario característico, destacándose el acompañamiento de las inhumaciones con caballos sacrificados y armas de bronce o hierro, que sugiere que corresponden a enterramientos nobles y/o guerreros. A lo largo de la misión arqueológica fueron excavados 7 kurgans Pazyryk de los que se recuperaron un total de 10 individuos: 7 adultos masculinos, 1 adulto femenino y 2 infantiles. Cinco de estos esqueletos presentaban evidencias de lesiones violentas con claros indicios de origen perimortem. El análisis de estas lesiones es el objetivo del presente trabajo. lares del coxal (Lovejoy et al.; 1985, Gilbert and Mckern 1973, Katz and Suchey 1986, Todd 1920) y costillas (Iscan et al.; 1984). El sexo fue estimado a partir de criterios morfológicos principalmente de la pelvis y secundariamente del cráneo (Acsádi and Nemeskéri (1970). Se realizó un examen morfológico de los restos esqueléticos con el objetivo de buscar evidencias paleopatológicas. Los traumatismos óseos fueron analizados a partir de metodologías desarrolladas en patología y antropología forense. Material y Métodos Resultados La edad a la muerte de los esqueletos fue estimada a partir de una aproximación multifactorial utilizando los siguientes criterios: formación y erupción dentaria (Brothwell 1981, Crétot 1978, Ubelaker 1989); crecimiento y desarrollo óseo (Brothwell 1981, Scheuer and Black 2000); y cambios en las superficies articu- - Esqueleto BTG6/T10B, 25-30 años, femenino: A nivel de margen inferior de 8ª y superior de 9ª costillas derechas, en la región del ángulo, se observa una lesión incisa (figura 1). Los márgenes de la lesión son muy agudos indicando la acción de un arma cortante de 205 LESIONES VIOLENTAS Y RITUALES EN TRIBUS NÓMADAS DE LA EDAD DEL HIERRO DE LA REGIÓN DEL ALTAI (MONGOLIA) Fig. 3. Diversas lesiones a nivel del cráneo de un esqueleto masculino de 35-45 años. Imagen izquierda: lesión punzante de morfología cuadrangular (4x4mm) en la región posterior del parietal derecho, cerca del lambda; imagen central: lesión incisa de 30mm tangencial al hueso y con pérdida de sustancia ósea de tabla externa a nivel del parietal derecho, cerca de la protuberancia; imagen derecha: lesión penetrante de morfología circular (20mm ø) a nivel de la línea temporal. Fig. 4. Marcas de corte en el cráneo de un esqueleto masculino de 34-45 años. Imagen izquierda: marca de corte larga a nivel del frontal; imagen derecha: marcas de corte múltiples y paralelas en la región mastoidea. doble filo, con una anchura mínima de hoja de 15mm considerando el espacio intercostal. Las características de la lesión sugieren que la dirección de la misma, considerando la víctima en posición anatómica, fue en sentido postero-anterior ascendente, de izquierda a derecha, penetrando en tórax y afectando la cara posterior del pulmón derecho. Este tipo de lesión podría originar un hemopneumotorax que pudo ser la causa de muerte de este individuo. - Esqueleto BTG6/T12, +60 años, masculino: A nivel de la cara anterior del sacro se observa una lesión incisa producida por arma blanca y que cru- 206 za el sacro en disposición oblicua entre el margen inferior de la articulación sacroilíaca izquierda y la región media de la sacroilíaca derecha (figura 2). La lesión tiene una longitud de 10cm y una anchura de 1cm, mostrando el tamaño mínimo del arma utilizada. El margen inferior de la articulación sacroilíaca del coxal izquierdo está también afectado. Teniendo en cuenta esto, se deduce que la entrada de la lesión fue por la escotadura ciática mayor izquierda, en sentido ascendente y de izquierda a derecha. Este tipo de herida afectaría principalmente las vísceras y vasos pélvicos, y por tanto, pudo ser la causa de muerte por un shock hipovolémico. Jordana, X; Galtés, I; Liria, J; Isidro, a; Turbat, Ts; Henri Giscard, P y Malgosa, A Fig. 5. Lesión penetrante con morfología de “Y” y con pérdida de hueso de la tabla externa en el margen posterior a nivel de la región media del hueso frontal del cráneo; imagen derecha: punta de flecha de tres hojas similar a la que pudo haber provocado esta lesión. - Esqueleto BTG6/T13, 35-45 años, masculino: A nivel del cráneo se observan diversas lesiones y marcas de corte (figura 3). En la región posterior del parietal derecho, cerca del lambda, se observa una lesión punzante de morfología cuadrangular (4x4mm), siendo el orificio interno de menor diámetro que el externo. Este último muestra pérdida de hueso en el margen lateral. Estas características sugieren que la dirección de la lesión fue en sentido postero-anterior descendente, de izquierda a derecha. También a nivel del parietal derecho, cerca de la protuberancia, se observa una lesión incisa de 30mm, tangencial al hueso y con pérdida de sustancia ósea de tabla externa. La dirección de la lesión fue en sentido antero-posterior y de derecha a izquierda. A nivel lateral anterior, entre el frontal y el parietal, se observa un área con diversas fracturas y pérdida de hueso, la mayoría de las cuales son muy probablemente de origen postmortem. Sin embargo, después de la re- construcción de los fragmentos fracturados, fue posible identificar a nivel de la línea temporal una lesión penetrante de morfología circular (20mm ø), de la que se originaban fracturas irradiadas. Este tipo de herida podría ser compatible con una lesión punzante con un componente contusito. Estas tres heridas a nivel del cráneo pudieron producir graves lesiones neurológicas al individuo y por consiguiente ser la causa de muerte. Además de estas heridas, el cráneo de este individuo también mostraba finas marcas de corte producidas por un instrumento metálico. Estas marcas son múltiples, repetitivas y de diferente longitud, y están localizadas en diferentes regiones del cráneo (figura 4). Las más evidentes y largas se observan circundando el neurocráneo. Específicamente, cruzando el hueso frontal – por encima del arco supraciliar – y occipital – inferior a la cresta nucal – se observa una fina y larga marca de corte. También a nivel de la línea temporal y región mastoidea se observan múltiples finas y cortas marcas 207 LESIONES VIOLENTAS Y RITUALES EN TRIBUS NÓMADAS DE LA EDAD DEL HIERRO DE LA REGIÓN DEL ALTAI (MONGOLIA) de corte. La localización de estas marcas sugiere que puedan estar relacionadas con prácticas como la extracción del cuero cabelludo. La ausencia de remodelación y la presencia simultánea de lesiones violentas sugiere que esta práctica ritual tuvo lugar justo después de producirse las heridas del cráneo. - Esqueleto TSK1/T2A, 40-50 años, masculino: Se observa a nivel de la región media del hueso frontal del cráneo una lesión penetrante con morfología de “Y” y con pérdida de hueso de la tabla externa en el margen posterior (figura 5). Esta forma característica de la lesión reproduce la sección transversal del arma usada, que en este caso podría ser compatible con una punta de flecha de tres hojas (figura 5). El fragmento de hueso perdido del margen posterior de la lesión sugiere que el impacto del proyectil no fue completamente perpendicular, siendo la trayectoria relativamente oblicua con respecto al hueso frontal. La dirección fue en sentido antero-posterior descendente. Esta herida pudo producir graves lesiones neurológicas y consecuentemente la muerte del individuo. - Esqueleto TSK1/T2B, 8-9 años: Este esqueleto estaba enterrado junto al esqueleto adulto anterior (TSK1/T2A). Se observa una lesión incisopunzante a nivel de la cara anterior del ala izquierda de la primera vértebra sacra (figura 6). La lesión muestra una disposición oblicua en relación al plano sagital, tiene una longitud de 15mm y es mas profunda en la región media que en los extremos. La dirección fue en sentido antero-posterior descendente y de izquierda a derecha. Esta lesión pudo afectar a vísceras pélvicas y por tanto estar relacionada con la causa de muerte. Discusión Los restos esqueléticos proporcionan un valioso indicador de accidente y violencia en una amplia variedad de circunstancias. Las lesiones accidentales reflejan generalmente los riesgos de la vida cotidiana. Mientras que las heridas relacionadas con la violencia, cuando tienen la implicación de intencionalidad humana, representan un claro testimonio de conflictos entre individuos y poblaciones del pasado (Larsen 1997, Walker 2001). 208 El análisis de la localización de las lesiones es de gran importancia para distinguir entre lesiones accidentales y violentas. Así, mientras que las lesiones traumáticas en el cráneo pueden ser indicativas de violencia interpersonal, la mayoría de fracturas en los huesos del antebrazo son probablemente el resultado de caídas accidentales (Buzon and Richman 2007). En la presente serie esquelética han sido observados traumatismos remodelados, la mayoría de los cuales están probablemente relacionados con lesiones accidentales. Pero también se han observado traumatismos de origen perimortem en cinco esqueletos que se han visto relacionados con lesiones violentas. El análisis de estas lesiones ha revelado que fueron producidas por armas compatibles con las que se encuentran frecuentemente en los enterramientos Pazyryk (figura 7). Tres esqueletos (BTG6/T10B, BTG6/T12 y TSK1/T2B) muestran traumatismos por arma blanca producidos por armas compatibles con puñales. Un esqueleto (TSK1/ T2A) presenta una herida penetrante en el cráneo producida por un proyectil, concretamente una punta de flecha de tres hojas. Y finalmente, el esqueleto BTG6/ T13 mostraba diversas lesiones en el cráneo de diverso tipo (punzante, cortante y contusa), por lo que pudieron haberse producido por diversas armas. Sin embargo, el típico pico de combate que acompaña habitualmente los enterramientos Pazyryk está formado por dos extremos, uno punzante-contuso y otro cortante, y por tanto puede ser compatible con las lesiones que presenta el cráneo de este esqueleto. El análisis de todas estas lesiones también ha revelado que están muy probablemente relacionadas con la causa de muerte, sugiriendo que ésta se produjo en circunstancias de violencia interpersonal o intergrupal. Es de destacar el hecho que, excluyendo las depresiones craneales observadas en el cráneo de algunos esqueletos, no se han observado otros traumatismos remodelados producidos por arma blanca. Esto podría sugerir que estos encuentros violentos pudieron no ser habituales pero si mortales. También se han observado evidencias de prácticas rituales como el scalping, es decir la extracción del cuero cabelludo a partir de un objeto cortante en un patrón Jordana, X; Galtés, I; Liria, J; Isidro, a; Turbat, Ts; Henri Giscard, P y Malgosa, A Fig. 6. Lesión inciso-punzante a nivel de la cara anterior del ala izquierda de la primera vértebra sacra en un esqueleto infantil de 8-9 años de edad. Imagen derecha: detalle de la lesión. Fig. 7. Pico de combate y puñal habitualmente asociados a enterramientos Pazyryk. circular (Axtell and Sturtevant 1980, Murphy et al.; 2002). Esta práctica ha sido cometida en el pasado por diferentes culturas de todo el mundo, habitualmente como trofeo humano indicador del éxito y del valor en la guerra. Sin embargo también ha sido descrita en relación a causas terapéuticas o mágico-religiosas (Murphy et al.; 2002). En este sentido, la presencia simultánea de traumatismos violentos de origen perimortem y de marcas de corte en el cráneo, tal como sucede en el esqueleto BTG6/T13, sugiere que esta práctica estaría mas bien relacionada con un incidente de combate. Se han encontrado evidencias de esta práctica en otras series esqueléticas de la misma cultura Pazyryk o de culturas próximas. Este es el caso de la momia Pazyryk depositada en el Departamento de Arqueología del Museo Hermitage de Sant Petersburgo, que a la vez 209 LESIONES VIOLENTAS Y RITUALES EN TRIBUS NÓMADAS DE LA EDAD DEL HIERRO DE LA REGIÓN DEL ALTAI (MONGOLIA) también muestra lesiones violentas de origen perimortem, probablemente realizadas por un pico de combate, similares a las observadas en el esqueleto BTG6/T13. Y también, se han observado varios casos de scalping en la serie esquelética de la edad del Hierro de la necrópolis de Aymyrlyg en Tuva, Siberia (Murphy et al.; 2002, Rudenko 1970). Las lesiones traumáticas en los restos esqueléticos antiguos son una fuente directa de evidencias para testar teorías sobre guerra y violencia en sociedades del pasado, y que no están sujetas a las dificultades interpretativas de las creaciones literarias, tales como los registros históricos y etnográficos (Walker 2001). La frecuente observación en enterramientos Pazyryk de lesiones y prácticas violentas, junto con el ajuar que acompaña a las inhumaciones, indican el papel importante que la guerra desempeñaba en esta sociedad. Por lo tanto, estas evidencias esqueléticas están contribuyendo a verificar algunas de los relatos sobre estas sociedades nómadas de las estepas euroasiáticas escritos por el historiador griego Herodotus en el siglo V a.C. Agradecimientos BUZON, MR; RICHMAN, R (2007): Traumatic injuries and imperialism: The effects of Egyptian colonial strategies at tombos in upper Nubia, American Journal of Physical Anthropology, 133, 783-791. CATTANEO, C (2007): Forensic anthropology: developments of a classical discipline in the new millennium, Forensic Sci Int, 165, 185-193. CRÉTOT, M (1978): L’arcade dentaire humaine (Morphologie). Julien Prélat, París. GILBERT, BM; MCKERN, TW (1973): Method for Aging Female Os-Pubis, American Journal of Physical Anthropology, 38, 31-38. 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