Enfermedad periodontal: una batalla constante entre bacterias destructivas, estado inmunitario e higiene oral En vanguardia: patogénesis y tratamiento de la enfermedad periodontal en perros Otoño 2012 Dr.med.dent. Dr.med.vet. Peter Fahrenkrug Dentista, Veterinario y Odontólogo Veterinario Certificado Dipl. EVDC ¡La más común de las enfermedades en los mamíferos es la gingivitis y la periodontitis! La enfermedad periodontal es la enfermedad más común entre los mamíferos. Más del 80 por ciento de los individuos adultos –gatos, perros o humanos– la presentan. Pero solo alrededor del 10 por ciento de los perros reciben cuidados de higiene oral diariamente, lo cual significa que muchos perros tienen la boca en muy malas condiciones, sufren infección activa asociada a dolor permanente y acaban perdiendo funcionalidad debido a la pérdida de dientes e incluso infecciones de otros órganos. Perfil del autor PATOGÉNESIS DE LA ENFERMEDAD PERIODONTAL El Dr. Peter Fahrenkrug se graduó en la Facultad de Veterinaria de Hannover en 1977 y se doctoró en Medicina Veterinaria en 1978. Más tarde se graduó en la Universidad Médica de Hamburgo como odontólogo de humanos y obtuvo su segundo doctorado en Medicina Dental en 1982. Ya mientras ejercía de dentista para pacientes humanos desde 1982 hasta 1994, también trabajaba en paralelo en el ámbito de la odontología clínica veterinaria y la investigación científica con animales de todas las especies. El Dr. Fahrenkrug ha recibido numerosos títulos de especia­ lidad: Miembro de la Academia Norteamericana de Odontología Veterinaria, Dipl. EVDC, Especialista Certificado en Odontología Veterinaria y Odontología Equina, Fachtierarzt für Tierzahnheilkunde (Alemania). En la actualidad se dedica a la docencia y consultoría en odontología veterinaria y enseña en la Facultad de Veterinaria de Hannover. El Dr. Fahrenkrug ha llevado a cabo más de 600 seminarios, presentaciones y ponencias en conferencias tanto nacionales como inter­ nacionales. Ha colaborado como autor en 68 publicaciones científicas y libros alemanes e internacionales, y participa en la formación y apoyo de veterinarios para la organización y gestión de las consultas. También es miembro activo de diversas organiza­ ciones veterinarias nacionales e internacionales, y ocupa varios puestos en sus juntas. De forma regular, el Dr. Fahrenkrug atiende casos clínicos en dos pequeñas clínicas veterinarias y una clínica equina en la zona de Hamburgo. Enfermedad periodontal es un término general que engloba una variedad de lesiones inflamatorias causadas por la placa y las bacterias que se acumulan en ella. Los primeros signos se relacionan con la gingivitis y pueden evolucionar hasta la perio­ dontitis cuando las reacciones inflamatorias llegan a afectar el ligamento periodontal y el hueso alveolar. El resultado final de la periodontitis es la pérdida del diente a causa de la destrucción progresiva del periodonto. El periodonto incluye el cemento de la raíz del diente, el hueso alveolar, el ligamento periodontal, el epitelio de unión, el margen gingival y el surco gingival. Causa primaria: acumulación de placa dental La formación de una película biológica compuesta por microorga­ nismos orales y glicoproteínas salivales (denominada placa) es la causa principal tanto de la gingivitis como de la periodontitis.1,2,3 Placa: un material blando, pegajoso y blanco se adhiere en forma de película (membrana acelular) y cubre la superficie del diente. Se compone principalmente de bacterias, glicoproteínas salivales, glucanos y fructanos extracelulares similares a los polisacáridos, y células epiteliales exfoliadas. Los subproductos metabólicos se diseminan por el epitelio del margen gingival causando la infla­ mación de la encía (gingivitis) y estimulando el movimiento de leucocitos hacia el epitelio. Las bacterias cubren todas las estructuras orales –lengua, encías, mucosa oral y dientes– pero se acumulan en superficies específicas, especialmente en el margen gingival de los dientes. Forman la placa dental un tipo de bacterias específicas con propiedades de adhesión. La placa 1| a los pigmentos de las células de la sangre, y se forma a causa de la mineralización del fluido del surco gingival, a diferencia del sarro que incorpora saliva. Se compone en un 80 por ciento de material inorgánico, fosfato cálcico, carbonato de calcio y fosfato de magnesio integrados en una malla de hidroxiapatita. El 20 por ciento restante de material orgánico incluye queratina, mucopo­ lisacáridos, aminoácidos y mucina. Figura 1: Periodonto sano gracias a un sistema inmune funcional, aunque los dientes no están muy limpios y los recubren restos de suciedad y placa. primero se compone de bacterias gram-positivas principalmente aeróbicas. Estas consumen grandes cantidades de oxígeno y disminuyen el potencial redox que favorece la colonización y crecimiento de las bacterias anaerobias. Esto es especialmente así en las zonas caracterizadas por grandes acumulaciones de bacterias: las bolsas periodontales, en el margen gingival. Cálculo dental (sarro): si la placa se deja evolucionar en las superficies dentales coronales, mineraliza con diversos minerales presentes en la saliva hasta convertirse en cálculo dental (sarro). Se forma una sustancia dura, parda, sobre la placa, causada por la mineralización de la placa, la calcificación de microorganismos necróticos y el crecimiento continuado a través de más deposición de placa y mineralización. Se trata de un círculo vicioso. La mineralización sucede a través de la precipitación del fosfato cálcico y del carbonato de calcio. Normalmente se halla supra­ gingivalmente y principalmente cerca de los conductos salivales, es decir, en las superficies linguales de los dientes frontales inferiores y en las superficies bucales de los cuartos premolares y primeros molares superiores. No obstante, cabe destacar que la cantidad de cálculo en los dientes no está necesariamente relacionada con el grado de enfermedad periodontal. A menudo pueden encontrarse grandes cantidades de cálculo dental con una gingivitis mínima. El sarro en sí no es muy destructivo, pero continuamente se infecta con nuevas capas de placa cargada de bacterias y sus toxinas agresivas que pueden provocar la extensión de la infección a todo el periodonto. El sistema inmune oral es muy potente en individuos sanos y la boca no suele presentar signos de inflamación durante largos períodos de tiempo. Incluso cuando es posible que se observe una acumulación masiva de placa y sarro, las encías acostumbran a seguir sanas o solo levemente inflamadas. Pero si el sistema inmune se halla temporalmente comprometido por la razón que sea (por ejemplo, la presencia de otras enfermedades infecciosas) este equilibrio oral se ve perturbado y las encías presentarán los signos típicos de infección, como inflamación e hiperemia. La inflamación pone en riesgo el mecanismo de autolimpieza del ligamento periodontal, dado que se acumulan restos de alimentos, bacterias y suciedad en el surco gingival (fisiológico), que se convierte en una bolsa gingival (patológica). Clasificación de los grados de enfermedad periodontal La enfermedad periodontal se clasifica como una simple gingi­ vitis, periodontitis crónica y otras enfermedades del periodonto. La gingivitis se limita a una inflamación gingival sin resorción ósea. Se trata de la fase inicial de la enfermedad periodontal y es reversible: en esta fase inicial solo está inflamada la encía super­ ficial. La inflamación del margen gingival todavía no afecta las partes más profundas del periodonto, si bien puede evolucionar y convertirse en una gingivitis ulcerativa. Los síntomas pueden ser inflamación, sangrado, posible afectación de los ganglios linfá­ ticos, posible fiebre y malestar general. Los estudios indican que alrededor de un 80 por ciento de gatos y perros presentan gingivitis en algún grado, cosa que acentúa la necesidad de cuidados dentales en casa. La gingivitis puede curarse completamente con una terapia adecuada, pero si se deja sin tratar, en la mayoría de los casos se extiende a otras estructuras anatómicas como el ligamento Fluido del surco gingival: en peligro ante el sarro. La producción y excreción de fluido del surco gingival, que es un suero exudado y un importante factor de la defensa inmune y del mecanismo de autolimpieza del surco, se halla amenazado por la presencia de sarro, que es capaz de impedir mecánica­ mente la excreción del fluido. Las concreciones se acumulan si se bloquea la excreción del fluido del surco gingival y los minerales empiezan a formar cálculo subgingival. Es mucho más duro que el sarro, se desarrolla más lentamente y se adhiere con mayor fuerza al cemento que el sarro al esmalte. Suele ser de color marrón oscuro a verdoso, debido |2 Figura 2: Gingivitis: nótese la destacable acumulación de placa, la inflamación y la recesión crónica de las encías. periodontal, las fibras, el cemento y el hueso alveolar. Estas estructuras quedarán destruidas irreversiblemente. El resultado final será la exfoliación y pérdida de los dientes afectados. Los pacientes experimentan una gran incomodidad y dolor a causa de la infección. Como se ha dicho más arriba, y aún más preocupante para la salud general, las bacterias de las bolsas periodontales se extienden por todo el organismo a través del torrente sanguíneo y pueden provocar complicaciones graves en otros órganos. Gingivitis crónica hiperplásica: incluye la proliferación del epitelio, el tejido conectivo y los vasos sanguíneos. El margen gingival enrojece y se inflama. Gingivitis gravídica o necrotizante: es una afección gingival inflamatoria destructiva, caracterizada por la presencia de lesiones necróticas a lo largo del margen gingival. Las úlceras producidas suelen estar recubiertas de residuos amarillentos o verdosos, duelen al tocarlas y sangran fácilmente. La afección puede ser aguda o crónica y está causada por bacterias, una gingivitis preexistente, estrés y otros factores. Los abscesos periodontales son acumulaciones localizadas de pus dentro de la pared gingival de una bolsa periodontal. Los abscesos periodontales pueden ser agudos o crónicos, y suelen ser el resultado de un proceso inflamatorio e infeccioso en la bolsa periodontal, o de un traumatismo mecánico con intro­ ducción de una infección en el surco gingival. En los animales, suele ser el resultado de daños causados durante la profilaxis, cálculos desalojados que quedan en la bolsa después de la profilaxis o impactación de pelo procedente de la autolimpieza del animal que es empujado hacia el interior del surco con la masticación. Si no se tratan, los abscesos periodontales pueden conducir a una periodontitis y osteomielitis graves. Periodontitis Muchos aunque no necesariamente todos los casos evolucionan hacia la periodontitis: una enfermedad crónica caracterizada por la inflamación gingival, formación de bolsas periodontales, sangrado y supuración de las bolsas, movilidad dental, resorción del hueso alveolar y finalmente pérdida dental. La periodontitis es el resultado de la extensión del proceso inflamatorio de las encías a estructuras más profundas del periodonto. Las conse­ cuencias de la enfermedad son la resorción del hueso alveolar y la pérdida de sujeción, seguidas de la formación de verdaderas bolsas periodontales. Algunos casos de periodontitis pueden avanzar hacia la formación de abscesos periodontales agudos. La mayoría de tipos de gingivitis y periodontitis están causadas primordialmente por la presencia de bacterias que colonizan el surco gingival y se adhieren a las superficies dentales. Riesgo de bacteremia Además, como la enfermedad periodontal destruye la integridad de las membranas mucosas, los patógenos periodontales pueden ser exportados a través del torrente sanguíneo. Se pueden encontrar en hemocultivos de perros y humanos afectados.4 Esto puede ocurrir durante la masticación en animales con enfer­ medad periodontal grave. La terapia periodontal quirúrgica (desbridamiento, raspado, limpieza) y la extracción dental inevi­ tablemente causan bacteremia transitoria en correlación con la gravedad de la enfermedad periodontal.5 Estos ataques bacte­ rianos frecuentes, junto a la reacción inflamatoria del huésped, Figura 3: Periodontitis: encías masivamente inflamadas, sangrado, exudación, recesión. pueden en algunas circunstancias causar septicemia, abscesos de órganos, endocarditis o glomerulonefritis (que suponen un aumento del riesgo de afecciones graves).4,6 Las posibles secuelas de la bacteremia o septicemia dependerán del estado médico del animal (edad, enfermedades concurrentes, estado inmuni­ tario). Nieves y otros demostraron que, en los perros, entre el 60 y el 90 por ciento de los géneros bacterianos aislados de la placa también se hallaban presentes en la sangre durante o después de un procedimiento dental rutinario. La bacteremia estaba presente en todos los perros estudiados en los 40 minutos siguientes al inicio del procedimiento dental, independientemente de la gravedad de la enfermedad oral.7 Niemiec incluso concluye que la enfermedad periodontal es una afección potencialmente mortal.8 Pacientes geriátricos: la infección bacteriana crónica de otros órganos es común Con frecuencia, la enfermedad periodontal es una enfermedad larga, especialmente en muchos pacientes geriátricos que han desarrollado endocarditis, nefritis, hepatitis y neumonía bacterianas crónicas. Cuanto antes estos pacientes reciben tratamiento, mejor. Suele ser más probable perder un paciente geriátrico a causa de estas enfermedades que por la anestesia. Cambio espectacular de la microflora El desarrollo de la enfermedad periodontal se debe al cambio de la flora que, de estar formada predominantemente por bacterias gram-positivas aeróbicas pasa a una predominancia de bacterias gram-negativas anaeróbicas.9 Las anaerobias constituyen solo el 25 por ciento de la flora subgingival cultivable en perros con encías sanas y hasta el 95 por ciento en perros con periodontitis. Las bacterias específicas conocidas por su papel periodontopato­ génico son: bacteroides pigmentados de negro (Porphyromonas gingivalis y otras especies, y especies de Prevotella) y espiro­ quetas en perros y humanos.10,11 Además, se encuentran con frecuencia fusobacterias, diversos bacilos gram-positivos, cocos, etcétera.12,13,14,15 Medidas preventivas Una limpieza profesional bajo anestesia general representa, en la mayoría de pacientes, el inicio de un programa para toda la vida que debería diseñarse a medida para cada individuo según 3| La acumulación de placa en las superficies dentales es la causa principal de gingivitis y periodontitis, por lo que la clave del éxito a la hora de prevenir estas afecciones periodontales es el control de la placa. ¡¡ Sin placa no hay gingivitis / periodontitis !! interrumpir el tratamiento. Tras la limpieza de la placa y el sarro, los dientes se pulirán con una copa de goma para profilaxis y piedra pómez de dureza media o con pastas dentales pulidoras profesionales para inhibir la acumulación inmediata de más placa. Debería indicarse al propietario del animal que compruebe periódi­camente si existen señales de acumulación de placa, y que empiece a cepillarle los dientes al perro tras la limpieza profesional. Figura 4: Perro de 12 años de edad: encías muy sanas y dientes limpios gracias al buen cuidado que los propietarios le administran en casa. los problemas concretos que presente el paciente con el fin de reducir la cantidad de placa al mínimo, ¡CERO, de ser posible! El cepillado dental regular es el mejor sistema para conseguirlo, pero propietarios y perros no siempre son capaces de gesti­ onarlo. La medicación oral puede ayudar a reducir la placa, y una correcta nutrición con beneficios dentales probados puede favorecer significativamente la interrupción del círculo vicioso. TRATAMIENTO DE LA ENFERMEDAD PERIODONTAL En perros, los tratamientos periodontales profesionales deben llevarse a cabo bajo anestesia general. En el caso de un perro con periodontitis, el tratamiento incluye raspado supragingival y subgingival, limpieza subgingival, curetaje y alisado radicular, pulido y cirugía periodontal de importancia variable (desde la extracción de piezas a la gingivoplastia correctiva, odontoplastia o cirugía de injerto óseo). Gingivitis: la primera línea de defensa es una profilaxis perfecta. Se emplean instrumentos manuales (raspadores, curetas, explo­ radores, etcétera) o mecánicos (raspadores sónicos o ultrasónicos) para limpiar los dientes de todo rastro de placa y sarro. Es especialmente importante retirar la placa y el sarro del surco gingival o la bolsa subgingival, y medir la profundidad de las bolsas subgingivales de cada diente con una sonda perio­ dontal. La profundidad normal no debe exceder de 1-3 mm. Aunque se haya tenido en cuenta una posible recesión gingival, las bolsas de 4 mm o más suelen indicar la presencia de enfer­ medad periodontal y deberían marcarse en la gráfica dental, y la afección debe tratarse adecuadamente. El sangrado de las bolsas en general es inevitable, pero no debería ser motivo para |4 Periodontitis: si la enfermedad ha progresado, hay que tomar las medidas siguientes: • Retirar toda la placa y sarro • Extraer todos los dientes sueltos que no puedan conservarse • Colocar férulas en todos los dientes sueltos que puedan conservarse con alambre para ligaduras, fibra de vidrio con la técnica de grabado ácido y compuestos/acrílicos • Cirugía periodontal para eliminar las bolsas profundas La cirugía periodontal se lleva a cabo para eliminar o reducir las bolsas, retirar el tejido subgingival afectado y corregir contornos gingivales desfavorables. Los procedimientos que pueden emplearse son entre otros curetaje gingival, gingivoplastia y diversas incisiones de colgajo gingivales. Aunque todos estos procedimientos pueden aplicarse en la odontología veterinaria, el más comúnmente utilizado, además del curetaje gingival, es la gingivectomía. La gingivectomía es la extirpación de tejido gingival, habitual­ mente mediante escalpelo, electrocirugía o unas tijeras finas. Se lleva a cabo para: • Extraer encías excesivas, inflamadas, infectadas o hiperplásticas • Extraer épulis y papilomas • Restaurar el contorno fisiológico gingival • Mejorar la higiene oral eliminando las bolsas o pseudobolsas Romper el círculo vicioso. El resto de encías deberían limpiarse solas. Así se interrumpe el ciclo vicioso de inflamación y pérdida de hueso. La eliminación de bolsas y del máximo de tejido inflamado es de vital importancia. El objetivo es dejar un margen higienizado y autolimpiante. Los resultados estéticos son de interés secundario. No obstante, la mera reducción quirúrgica de las bolsas patológicas no es suficiente. Lo más importante: una superficie radicular limpia. El aspecto de mayor importancia del tratamiento periodontal es la creación de una superficie radicular limpia, sin bacterias, que permita la unión del periodonto. Esto se consigue mediante un cuidadoso curetaje, un detartraje en profundidad, y el alisado, pulido, aclarado y desinfección radicular. Cualquier concreción residual se elimina con agua o solución de clorhexidina, que sirve también para eliminar bacterias. La eficacia de la gingivectomía depende significativa y única­ mente del cuidado y atención con que se lleve a cabo la operación. Una gingivectomía a medias tintas solo consigue una reducción de la inflamación a corto plazo. La operación completa puede requerir entre una y dos horas, especialmente porque los dientes sueltos pueden precisar extracción o la colocación de férulas durante la misma. Es un trabajo complicado que no debe ser subestimado. Extracción de dientes: la perspectiva del propietario. Muchos propietarios de animales tienden a ser críticos ante la extracción de dientes sueltos insalvables. No obstante, las extracciones son un medio excelente de solucionar infecciones crónicas y detener la osteomielitis y otras complicaciones a largo plazo. El perro puede llevar una vida normal sin los dientes extraídos, mientras que el propietario tiende a sobreestimar la importancia de esta disfuncionalidad e incluso el aspecto estético resultante. Antibióticos. El uso de antibióticos no debe recomendarse en casos simples de gingivitis inicial, pero deberían administrarse en todos los casos que presenten infecciones óseas purulentas. Si los antibióticos se administran 2-3 días antes de la intervención, gran cantidad de gérmenes ya se habrán extinguido en la fecha de la cirugía, por lo que la infección será menos aparatosa. Esto no solo facilita el procedimiento (menos sangrado, menos inflamación de los tejidos blandos), sino que además reduce la circulación de microbios patológicos por el torrente sanguíneo (bacteremia) durante dicho procedimiento, que representa un riesgo de daños a otros órganos como se ha indicado más arriba.16,17,18 Los beneficios de la terapia periodontal profesional son de corta duración a menos que la intervención vaya seguida de cuidados efectivos en casa. La verdadera prevención de la enfermedad periodontal no es el tratamiento periodontal profesional llevado a cabo bajo anestesia general y con ayuda de fármacos antimicrobianos, sino más bien el buen hábito de cuidados diarios en casa por parte del propietario del animal. El método más efectivo para eliminar la placa es el cepillado diario con un cepillo dental y dentífrico apropiados. Perros y amos pueden adquirir este hábito mientras el animal es un cachorro, por ejemplo desde que acudan a la consulta del veterinario para la primera vacuna. En la actualidad existen diversidad de cepillos y dentífricos para uso veterinario. Algunos están fabricados a base de harina de hueso, otros ejercen una acción enzimática bactericida y pueden ser tragados. Aunque los alimentos secos y los bastones masticables pueden ser útiles para la limpieza superficial del diente, no sustituyen el cepillado regular. Los propietarios de mascotas aceptan cada vez mejor este hecho y con un poco de práctica, el resultado es muy eficaz. El cuidado dental en casa debe iniciarse con el cachorro. Cuando el perro se acostumbra al cepillo de dientes desde cachorro (se empieza ya a las 6-8 semanas, si es posible), el cepillado no representa un problema. El perro lo considera un juego y normalmente se presta a él con gusto. Se sujeta suave­ mente la cabeza del animal con una mano mientras se utiliza la otra para el cepillado de los dientes. Para acostumbrar al perro al cepillado, al principio se puede utilizar un paño con dentífrico envuelto alrededor de un dedo para frotar con él los dientes. Para conseguir mejores resultados, el cepillado debería llevarse a cabo a diario. No deben usarse nunca dentífricos humanos ya que no son adecuados para el animal y pueden dañarle las encías. El papel de la nutrición Deben evitarse los alimentos que favorecen la acumulación de placa: bocados entre horas, alimentos ricos en carbohidratos como restos de comida, caramelos y otros alimentos poco naturales para el animal. La saliva “enjuaga” permanentemente la cavidad oral y la mantiene limpia. La acción de la lengua, durante y después de comer y al jadear, ayuda a mantener los dientes limpios. Esto significa que los perros con una vida activa, que jadean mucho, tienen más probabilidades de mantener los dientes limpios que un perro faldero. Además, el número de comidas diarias parece ejercer un papel importante. En la consulta, hemos comprobado que los perros que trabajan en general presentan una mejor salud oral que los perros falderos. Aunque las predisposiciones genéticas también juegan un papel importante, se observa que los perros que trabajan suelen presentar una mejor salud gingival. Se les proporciona una única comida al día, normalmente al anochecer, como “pago” educativo por la jornada laboral. La suciedad y restos de comida que quedan en la boca se limpian (saliva) y cepillan (acción de la lengua/mejillas) a lo largo de las 23 horas siguientes. Si se ofrecen varias comidas, tentempiés y “chucherías” al perro cada día, estos residuos se amontonan en los dientes y entre ellos, y forman un excelente medio de cultivo para los microbios. Como la morbilidad de la enfermedad periodontal en gatos y perros es tan radicalmente elevada, la industria de alimentos para mascotas ha desarrollado diversas dietas especiales (dietas dentales específicas, dietas con beneficios dentales aplicados a diversos productos o a una gama de productos, bastones masti­ cables que favorecen la higiene dental) que pretenden limitar la formación de placa en la cavidad oral, y así reducir el crecimiento microbiano y las infecciones. Figura 5: Cepillado dental regular: la única manera de combatir y evitar la gingivitis. Algunos productos funcionan mediante la abrasión que producen, como las croquetas especialmente diseñadas con fibras duras, otros (especialmente los bastones dentales masticables) incitan a la masticación, que mecánicamente reduce la placa de las superficies dentales y fomenta la producción de saliva. Algunas marcas han añadido cristales de polifosfatos a la superficie de las croquetas, cosa que consigue dos objetivos: las croquetas 5| crujientes limpian mecánicamente los dientes y reducen la placa, mientras los polifosfatos también inhiben la mineralización que convierte la placa en sarro. Los resultados son asombrosos, la acumulación de placa y sarro disminuye entre un 30 y un 80 por ciento. Los resultados de un estudio en Polonia con exámenes orales realizados en 9.074 gatos y 29.702 perros indicaron que alimentar al animal con pienso seco influye positivamente en su salud oral y disminuye los casos de linfadenopatía mandi­ bular, depósitos dentales y enfermedad periodontal en gatos y perros.19 RESUMEN La enfermedad periodontal es una enfermedad infecciosa debida a la colonización de patógenos anaeróbicos presentes en la placa dental. La enfermedad periodontal está muy extendida pero se puede prevenir. Los procedimientos de higiene dental en casa combinados con una dieta adecuada, además de terapias periodontales profesionales esporádicas bajo anestesia general, de ser necesario asociadas con terapia antimicrobiana, pueden prevenir la pérdida de dientes por lo demás sanos debido a la periodontitis. Los perros con enfermedad periodontal grave no solo sufren la pérdida de funcionalidad y dolor relacionado con la infección e inflamación inducidas, sino que además corren el riesgo de padecer complicaciones generalizadas. Los fármacos antimicrobianos nunca deberían considerarse la única terapia para el tratamiento de las infecciones orales, y no deberían utilizarse para la gestión preventiva de las afecciones orales. El factor más importante en sí mismo para prevenir la recurrencia de la enfermedad periodontal es el cuidado dental regular en casa, como en los humanos. La mayoría de animales permitirán que les limpien los dientes con un pequeño cepillo veterinario y un dentífrico veterinario adecuado; los dentífricos de uso humano no son adecuados para los animales e incluso pueden causarles daños en el periodonto. La prevención de la enfermedad periodontal es una lucha a lo largo de toda la vida que incluye cuidados dentales en casa, una nutrición apropiada y –si no hay más remedio– tratamiento veterinario. Referencias 1. Gorrel, C. Periodontal Disease. Proc. WSAVA 2003, Bangkok /Thailand 2. Gorrel C. Periodontal Disease. Veterinary Dentistry for the General Practi­ tioner, Saunders, 2004, pp 87-106. 3. Shipp AD, Fahrenkrug P. Practitioner’s Guide to Veterinary Dentistry. Dr. Shipp’s Laboratories, Beverly Hills, CA, USA, 1992 4. Pavlica Z, Petelin M, Juntes P, Erzen D, Crossley DA, Skaleric U. Periodontal disease burden and pathological changes in organs of dogs. J Vet Dent. 2008 Jun; 25(2):97-105. 5. Bowersock TL, Wu CC, Inskeep GA, Chester ST. Prevention of bacteremia in dogs undergoing dental scaling by prior administration of oral Clindamycin or Chlorhexidine oral rinse. J Vet Dent, 2000, 17(1): 11-16. 6. DeBowes LJ, Mosier D, Logan E, Harvey CE, Lowry S and Richardson DC. Extent of periodontal disease and histologic lesions in multiple organs from 45 dogs. J Vet Dent, 1996, 13(2): 57-60. 7. Nieves Ma, Hartwig P, Kinyon JM and Riedesel DH. Bacterial isolates from plaque and from blood during and after routine dental procedures in dogs. J Vet Surgery, 1997, 26: 26-32. 8. Niemiec B Periodontal disease : pathogenesis, progression, severe local and systemic siquela. Proceedings, 21st European Congress of Veterinary Dentistry 2012, p.126-130 9.Fournier D, Mouton C, Lapierre P, Kato T, Okuda K, Ménard C. Porphyro­ monas gulae sp. nov., an anaerobic, gram-negative coccobacillus from the gingival sulcus of various animal hosts. Int J Syst Evol Microbiol. 2001 May;51(Pt 3):1179-89. Artículo de Formación Continuada ofrecido por gentileza de |6 10. Hennet P. Oral microbiology and immunology. ESAVS Dental Course, 1995 11.Riviere GR, Thompson AJ, Brannan RD, McCoy DE and Simonson LG. Detection of pathogen-related oral Spirochetes, Treponema denticola, and Treponema sacranskii in dental plaque from dogs. J Vet Dent, 1996, 13(4): 135-138. 12. Hennet PR, Harvey CE. Anaerobes in periodontal disease in the dog: a review. J Vet Dent, 1991, 8(2): 18-21. 13. Hennet PR, Harvey CE. Spirochetes in periodontal disease in the dog: a review. J Vet Dent, 1991, 8(3): 16-17. 14. Hennet PR, Harvey CE. Aerobes in periodontal disease in the dog: a review. J Vet Dent, 1991, 8(1): 9-11. 15. Hennet PR, Harvey CE. Natural development of periodontal disease in the dog: a review of clinical, anatomical and histological features. J Vet Dent, 1992, 9(3): 13-19. 16. Heijl L, Lindhe J. Effect of selective antimicrobial therapy on plaque and gingivitis in the dog. Journal of Clinical Periodontology, 1980, 7: 463-478. 17. Dahlen G, Heijl L, Lindhe J and Moller A. Development of plaque and gingi­ vitis following antibiotic therapy in dogs. Journal of Clinical Periodontology, 1982, 9: 223-238. 18.AVDC board of directors. Policy statement: the use of antibiotics in Veterinary Dentistry. April 2005. 19. Gawor JP, Reiter AM, Jodkowska K, Kurski G, Wojtacki MP, Kurek A. Influence of Diet on Oral health in Cats and Dogs. Expanded Abstract. J. Nutr. 136: 2021S–2023S, 2006. y