Procesamiento de la Señal para Pérdidas Auditivas de Severas a Profundas Stefan Launer y Volker Kühnel Introducción La compresión de amplio rango dinámico se ha convertido en la estrategia de procesamiento de la señal más usada en las pérdidas auditivas leves a moderadas, sin embargo aún existe cierta discusión con respecto a los detalles de tales sistemas de compresión. Más aún, algunas estrategias de procesamiento de la señal tan sofisticadas como la selección automática de programas, micrófonos digitales direccionales adaptativos y los sofisticados esquemas de supresión de ruido han sido desarrolladas y aplicadas en los audífonos digitales modernos. La tecnología digital ofrece una gran flexibilidad para diseñar e implementar fácilmente nuevos algoritmos de procesamiento de la señal. La estrategia más común aplicada con los individuos que tienen una pérdida auditiva severa a profunda, ha sido dotarlos con la mayor potencia posible. Sin embargo hasta ahora se han realizado pocos intentos para aplicar estrategias de procesamiento de la señal más sofisticadas con ese segmento de la población con pérdida auditiva. En este trabajo analizaremos los conocimientos existentes acerca de los mecanismos psicoacústicos y de la percepción del habla, como así también las diferentes aproximaciones para amplificar y procesar los sonidos de la forma más óptima en las personas con pérdidas auditivas severas a profundas. Fisiología, Psicoacústica y Percepción de Habla en las Personas con Perdida Auditiva Profunda. Fisiología En este momento es limitada la comprensión que se tiene acerca de los mecanismos exactos que producen los estímulos al excitar una cóclea profundamente deteriorada. Hinijosa y Marion (1983) han analizado huesos temporales de pacientes afectados con hipoacusia severa y anacusia o sordera ( 16 sujetos y 22 sujetos respectivamente) y cuantificaron las células ciliadas, las células de sostén y las células ganglionares. Esta cantidad de células fue entonces correlacionada con la causa de la sordera. Los autores encontraron que las infecciones bacterianas, los traumatismos de cráneo, la ototoxicidad y la sordera congénita eran las principales causas de hipoacusia neurosensorial profunda. Basados en los patrones de lesiones en el órgano de Corti, los autores identificaron 5 grupos diferentes: el Grupo 1 uno mostraba una completa degeneración del órgano de Corti y los axones periféricos, el recuento de células ganglionares iba de 0 a 22.000; el Grupo 2 mostraba una degeneración completa del órgano de Corti y una degeneración severa a profunda de los axones periféricos, el recuento de células ganglionares iba de de 8000 a 23.000; el Grupo 3 tenía sitios de células ciliadas internas remanentes, las cuales se correlacionaban bien con los sitios de axones periféricos remanentes, el recuento de células ganglionares iba de 16.000 a 25.000; el Grupo 4 también tenía sitios de células ciliadas internas remanentes, las cuales se Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) correlacionaban débilmente con los sitios de axones periféricos remanentes, el recuento de células ganglionares iba de 6.000 a 13.000; el Grupo 5 (sólo un caso) mostraba una completa degeneración de las células ciliadas internas pero una población de axones periféricos casi normal. De esta manera, conocemos algo acerca de la fisiopatología de la deficiencia auditiva profunda, pero estamos careciendo de la comprensión de la “pathofunctionality" (neologismo que abarca más que la palabra fisiopatología, lo que se conoce hasta el momento no es suficiente) de la Cóclea profundamente deteriorada. Específicamente creemos que el conocimiento del proceso de excitación neuronal sería particularmente útil también para diseñar y seleccionar los algoritmos de procesamiento de la señal para los sujetos con pérdidas auditivas profundas. (Harrison, Shirane, Fukushima y Mount 1991). Psicoacústica También existe muy poca información acerca de las capacidades psicoacústicas básicas de los individuos afectados con pérdidas auditivas profundas. (Faulkner, Fourcin y Moore 1990; Faulkner, Ball, Rosen; Moore y Fourcin 1992; van Son, Bosman, Lamore y Smoorenburg 1993). Faulkner et al. (1992) reportaron resultados de tres experimentos sobre psicoacústica básica en un grupo de 13 adultos con pérdidas auditivas profundas, con un promedio de pérdida auditiva mayor a los 95 dB HL y audición residual en el rango de frecuencias de 100 a 500 Hz solamente. Actualmente estos casos extremos probablemente recibirían un implante coclear. Los experimentos llevados a cabo por Faulkner y sus colegas estudiaron aspectos del análisis espectral y temporal que hace el sistema auditivo profundamente deteriorado que incluyeron: (1) medición de la habilidad para distinguir la frecuencia de dos tonos de baja frecuencia (umbral de diferencia de frecuencia) usando un procedimiento de elección forzada de dos alternativas (2AFC); (2) determinando una curva de sintonización psicoacústica de dos puntos usando un ruido enmascarador de banda ancha de 80Hz centrado en 125 o 250 Hz y un tono de prueba de 250 o 125 Hz respectivamente. En cada sujeto fue determinado el umbral para el tono en cada una de las dos de las condiciones enmascarantes. La diferencia del umbral de enmascaramiento (MLD) fue determinada promediando el umbral de ambas mediciones; y (3) midiendo un pequeño gap o brecha temporal en un sonido enmascarante de banda ancha para determinar la agudeza del umbral de detección temporal. Los resultados mostraron una significativa degradación en los sistemas auditivos con pérdidas auditivas profundas comparados con el rendimiento de los sistemas auditivos normales. La variabilidad entre sujetos fue grande, como en otros estudios con sujetos hipoacúsicos. Por ejemplo, para los umbrales de diferencia de frecuencia, la frecuencia de resolución alcanzada varió del 4 al 41% (sujetos normales entrenados 1.5 a 2%). Las curvas de sintonización psicoacústica para los sujetos con hipoacusia, medidas con la MLD, mostraron resultados entre 0 dB (ausencia de selectividad frecuencial) y 14 dB (sujetos normales 39 dB). En los experimentos de detección de brecha o gap, los umbrales fueron entre 20-26 ms para siete sujetos y 40 ms para dos sujetos (sujetos normales 8ms). En conjunto, la capacidad del sistema auditivo profundamente deteriorado está significativamente degradado considerando varios y diferentes aspectos de la agudeza espectral y temporal. Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) Percepción del Habla Fly y colaboradores 1998 ( Flynn, Dowell y Clark 1998) mostraron los hallazgos de un estudio sobre inteligibilidad del habla con audífonos en dos grupos de adultos. Un grupo de sujetos (n=18) tenía pérdidas promedio entre 60 -80 dB (severa) y el segundo grupo (n=16 ) entre 80-100 dB (profunda). Fueron aplicados varios procedimientos para la medición de la inteligibilidad del habla. Los autores usaron un test de reconocimiento de vocales y consonantes, identificación de palabras monosilábicas (CNC) y frases (CUNY), en ambiente silencioso y con ruido de fondo. El nivel de presentación del estímulo fue siempre a 65 dB SPL, con 10 dB de relación señal ruido para las frases en ambiente ruidoso. Todos los sujetos eran usuarios experimentados de audífonos y usaron sus propios audífonos en los tests de inteligibilidad del habla. Los resultados de este estudio se muestran en la figura 1. inteligibilidad de la palabra % severas profundas 100 80 60 40 20 0 Vocal Consonantes Palabras Frases Frases con ruido Figura 1. Resultados de los diferentes tests de inteligibilidad del habla reportados por Flynn y col. (1998). Las columnas negras muestran los resultados con el grupo de pérdidas auditivas severas y las grises con el grupo de pérdidas auditivas profundas. Adaptado de Flynn y col. (1998). Se puede ver que el rendimiento de ambos grupos de sujetos fue bastante bueno (mayor a 80%) para la percepción de vocales y algo peor para la percepción de consonantes y palabras. Cuando se usaron frases en ambientes silenciosos, ambos grupos de sujetos parecen haberse beneficiado con el uso de información lexical y contextual y por eso mostraron una mejora en el rendimiento sobre las puntuaciones logradas con palabras simples. Nótese que la diferencia entre el rendimiento del grupo severo y profundo no es constante bajo las diferentes condiciones de los tests. Más bien se encontró que la Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) diferencia entre grupos aumentaba a medida que aumentaba la complejidad de la tarea. Los resultados mostrados en la figura 2 ilustran estas conclusiones. Diferencia de inteligibilidad % 40 35 30 25 20 15 10 5 0 Vocal Consonantes Palabras Frases Frases con ruido Figura 2. Este gráfico muestra la diferencia entre los resultados de la inteligibilidad del habla entre el grupo de severos y profundos mostrado en la figura 1. Adaptado de Flynn y col. (1998). Esto podría deberse a la marcada degradación de las capacidades psicoacústicas de los sujetos con pérdidas auditivas profundas, lo que dificulta su capacidad de hacer un análisis detallado y de alta resolución de los sonidos complejos y especialmente de las mezclas entre diferentes sonidos. Un hallazgo similar fue descrito en sujetos con audición normal cuando escuchan sonidos de habla que han sido significativamente degradados en su espectro. En ambientes silenciosos, los sujetos con audición normal, reconocen vocales, consonantes, palabras y frases notablemente bien cuando escuchan el habla que ha sido procesada a través de unas pocas (por ej. 3-20) bandas de ruido temporalmente modulado. Sin embargo, el rendimiento cae significativamente cuando se agrega ruido que va de una relación señal -ruido entre -12dB y +24 dB (Shannon , Zeng, Kamath, Wygonsky y Ekelid 1995; Dorman, Loizou y Fitzke 1998; Fu, Shannon y Wang, 1998; Loizou, Dorman y Tu 1999; Lorenzi, Berthommier, Apoux y Bacri 1999; Friesen, Shannon, Baskent y Wang 2001). Procesamiento de la Señal para la amplificación: Compresión de Amplio Rango Dinámico (WDRC) versus Procesamiento Lineal Sólo un número limitado de estudios han analizado qué estrategia de amplificación es la más adecuada para las necesidades de los individuos con pérdidas auditivas severas y Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) profundas. En la siguiente sección, analizaremos cuatro estudios sobre este tema que fueron realizados con adultos y un estudio realizado con niños. En los estudios analizados encontramos una ligera preferencia por el procesamiento WDRC que tiende a decrecer a medida que aumenta la pérdida auditiva. Cuando se prefiere el procesamiento lineal es en combinación con la compresión de limitación de salida, sobre el peak clipping (PC). En el primer estudio sobre el uso de sistemas de compresión para sujetos con pérdidas auditivas profundas, Boothroyd y colaboradores (Boothroyd, Springer, Smith y Schulman, 1998; Boothroyd 1990) investigaron la WDRC y la estrategia de compresión limitante en nueve sujetos con pérdidas auditivas prelinguales profundas. Realizaron un test de percepción de patrones de contraste del habla con tres alternativas de elección forzada (3AFC) para analizar la percepción de las dimensiones fonológicamente contrastantes. El promedio de los umbrales de tres frecuencias de los oídos testados fue de 80 a 107 dB, con una media de 97 dB. El estímulo fue procesado con un audífono muestra en dos formas diferentes (1) amplificación lineal con compresión limitada de banda ancha (ataque rápido y tiempo de recuperación lento) con niveles de entrada altos, versus compresión limitada y (2) compresión silábica rápida (tiempo de recuperación 20 ms ) de la señal en dos bandas de frecuencia. Sólo uno de los nueve sujetos se manifestó mejor con la compresión rápida que sin ella. Para todos los demás sujetos hubo una pequeña pero significativa reducción en el rendimiento cuando fue introducida la compresión. Los autores argumentan que el bajo rendimiento con los sistemas de compresión que actúan rápidamente está principalmente relacionado por la distorsión de las señales tiempo-intensidad introducidas por la compresión de la amplitud. La conclusión primaria de este estudio es que la compresión silábica sumada a la señal optimizada con otro precesamiento, es innecesaria, o incluso perjudicial, para la mayoría de los sujetos con pérdidas auditivas profundas, pero podría ser beneficiosa para algunos de ellos. Barker y colegas (Barker, Dillon y Newall 2001), analizaron diferentes esquemas de amplificación en 16 sujetos entrenados que tenían pérdidas auditivas profundas. Ellos compararon el sistema WDRC de actuación rápida con la amplificación lineal más la compresión limitante, y la compresión limitante con el peak clipping. Los mismos habían sido programados en las diferentes memorias de sus audífonos. De los 16 sujetos (media de pérdida de 4 frecuencias:87 dB HTL), sólo 8 (grupo I) pudieron ser adaptados con dos sistemas WDRC de actuación rápida difiriendo en el umbral de compresión: un umbral de compresión bajo (45-57 dB SPL) con un umbral de compresión alto (65-73 dB SPL). En una segunda fase, esos sujetos compararon la compresión que habían preferido con un esquema de amplificación lineal con compresión limitante. Otros cinco sujetos (grupo II) compararon umbrales altos de compresión de WDRC con la amplificación lineal más compresión limitante. Los tres sujetos restantes (grupo III) compararon la compresión limitante y el pick clipping. Esta división de los sujetos en tres grupos tuvo que ser realizada debido a la insuficiencia en la sonoridad con las otras programaciones. A los sujetos se les dio un cuestionario que debían completar en un período de prueba de varias semanas. No se realizaron experimentaciones en laboratorio. En la primera fase de la experimentación, seis de los ocho sujetos en el grupo I, prefirieron los umbrales de compresión bajos y dos sujetos prefirieron los umbrales de compresión altos. En la segunda fase cuando se comparaba la WDRC preferida con la compresión limitante, siete de los ocho sujetos prefirieron la WDRC sobre la compresión limitante. En el grupo II, cuatro de los cinco sujetos Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) prefirieron la WDRC con umbrales de compresión altos sobre la amplificación lineal con compresión limitante. En el grupo III, dos sujetos prefirieron la compresión limitante sobre el peak clipping y un sujeto no estuvo del todo satisfecho debido a la insuficiencia de sonoridad y a la distorsión. La diferencia entre los tres grupos subyace en el promedio de pérdida auditiva que se refleja en los audiogramas de los sujetos. El grupo I tenía alrededor de 10-20 dB menos de pérdida auditiva en el rango de frecuencias graves y medias que los sujetos del grupo II y III. Por eso, resumiendo, los resultados de este estudio sugieren que los sujetos con pérdidas auditivas profundas tienden a preferir el procesamiento WDRC sobre la amplificación lineal, aunque se encontró que esta preferencia se desplaza hacia el procesamiento lineal a medida que aumenta la hipoacusia. Este último aspecto podría ser también la explicación de la diferencia entre los resultados del estudio de Boothroyd y colaboradores (1988) que mostraron una preferencia por el procesamiento lineal de la señal con los resultados de Barker y col. , ya que los sujetos del estudio de Boothory y col. presentaban pérdidas auditivas más profundas. En un tercer estudio, que también comparaba el procesamiento lineal con el procesamiento de WDRC, hallaron resultados similares (Ringdahl, Edberg, Thelin y Magnusson 2000). Participaron 25 sujetos con pérdidas auditivas severas a profundas. Todos los sujetos eran usuarios experimentados de audífonos. Fueron comparados dos esquemas diferentes de procesamiento de la señal (un sistema de WDRC de tres canales y amplificación lineal) en un diseño de entrecruzamiento de datos: 12 sujetos fueron testados con amplificación lineal en una primera fase, y luego se les cambió al procesamiento WDRC en la segunda fase, mientras que 13 sujetos fueron testados usando primero WDRC y luego amplificación lineal. Los dos sistemas fueron comparados usando una variedad de medidas incluyendo: (1) inteligibilidad del habla en ambiente silencioso y con diferentes ruidos de fondo; y (2) evaluación subjetiva comparando mediciones con habla en ambiente silencioso y con diferentes ruidos de fondo o música. En todos los tests de inteligibilidad del habla llevados a cabo, los resultados mostraron mayor beneficio del procesamiento WDRC sobre el procesamiento lineal. Para las medidas subjetivas los resultados fueron menos claros y dependieron de las situaciones consideradas en la evaluación. Para el habla en ambiente silencioso, habla con ruido de fondo a alta intensidad y con música los sujetos prefirieron la WDRC sobre la amplificación lineal mientras que para el habla con ruido de fondo a intensidad moderada los sujetos prefirieron la amplificación lineal por sobre la WDRC. Al final de este estudio, 17 de los 25 sujetos eligieron el procesamiento WDRC sobre el procesamiento lineal basados en su experiencia subjetiva en el estudio de campo. Desafortunadamente, no fue valorada en este estudio una correlación entre la preferencia subjetiva del modo de procesamiento de la señal y el grado de pérdida auditiva . Un cuarto estudio podría ayudar a comprender la preferencia por el procesamiento WDRC sobre la amplificación lineal encontrado en los estudios mencionados anteriormente. Souza y Bishop (1999) analizaron el efecto de la audibilidad en la inteligibilidad del habla usando WDRC comparado con la amplificación lineal. Ambas estrategias de amplificación fueron aplicadas de manera que la audibilidad era comparada a altos niveles de entrada. En su estudio las sílabas vocal -consonante-vocal (VCV) y las frases, fueron procesadas y luego presentadas a dos grupos de sujetos hipoacúsicos: 10 con pérdidas auditivas moderadas y 11 con pérdidas auditivas severas. El estímulo VCV fue procesado usando un sistema de 2 canales (frecuencia de corte Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) 1.5 kHz, con una compresión 2:1 en el canal de baja frecuencia y 5:1 en el canal de alta frecuencia) de WDRC de actuación rápida, mientras que las frases fueron procesadas usando un sistema de compresión de actuación rápida de un canal, con un rango de compresión de 2:1. Los umbrales de compresión fueron establecidos a 45 dB. La inteligibilidad del habla fue medida a 55, 70 y 85 dB SPL y a 70, 85 dB SPL para los estímulos VCV y de frases respectivamente. Los resultados de las mediciones de inteligibilidad del habla mostraron un beneficio significativo en del sistema de WRDC por sobre la amplificación lineal. Marriage y Moore (2001) recientemente aportaron los resultados de un estudio en el cual hicieron una comparación entre los sistemas de amplificación lineal y los sistemas con compresión en un grupo de niños con pérdidas auditivas severas (4 niños) y profundas (4 niños). En este estudio evaluaron la inteligibilidad del habla en ambiente silencioso a diferentes niveles de entrada usando ambas estrategias de amplificación. El estudio demostró un importante beneficio para el grupo de pérdidas auditivas severas y un beneficio pequeño pero consistente para el grupo de pérdidas auditivas profundas cuando se usaban los sistemas de procesamiento con compresión de la señal. En conjunto, los pocos datos existentes sugieren la preferencia por el procesamiento WDRC sobre el procesamiento lineal para el grupo con pérdidas auditivas de severas a profundas, pero esta preferencia parace decrecer a medida que se incrementa la severidad de la hipoacusia. Obsérvese que todos los participantes tenían experiencia en el uso de audífonos previamente a este estudio. Idealmente los audífonos diseñados para los sujetos con pérdidas auditivas profundas deberían ofrecer diferentes estrategias de procesamiento de la señal de las cuales el audioprotesista pudiera elegir según la estrategia preferida por el paciente. Procesamiento de la Señal para la Inteligibilidad en Ruido. Los resultados de un estudio reportado por Flynn y col. (1998) demostraron que la percepción del habla en ruido es mucho peor en los individuos con hipoacusia profundas en relación al rendimiento de los sujetos con hipoacusia severas, y que la diferencia en el rendimiento entre los dos grupos es mucho mayor para la percepción del habla con ruido de fondo que para los ambientes silenciosos. Por eso, cuando se han de determinar las estrategias de procesamiento para los sujetos con pérdidas auditivas profundas, los métodos para mejorar la relación señal -ruido podrían ser extremadamente útiles, especialmente para este grupo, (Kühnel, Margolf-Hackl y Kiessling 2001). Kühnel y col. (2001) investigaron el beneficio potencial de los audífonos con tecnología multi-micrófono, tanto en test de laboratorio y en estudio de campo para los usuarios con pérdidas auditivas severas a profundas. Veintiún usuarios experimentados fueron equipados con audífonos multimicrófonos superpotentes (Phonak PowerZoom P4 AZ). Fueron hechas las siguientes mediciones: (1) un test de percepción del habla adaptado (Umbral de Recepción del Habla (STR) para el test de frases HSM) en ambiente silencioso y con ruido de fondo, con su propio audífono y con el audífono de prueba en el modo omnidireccional (programa básico) y modo direccional (ruido ambiente elevado + Algoritmo Zoom);(2) comparaciones apareadas de sonoridad, calidad del sonido, e inteligibilidad del habla para ambos programas omni y zoom; y (3) cuestionarios de satisfacción y autoevaluaciones sobre la comunicación en Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) diferentes condiciones auditivas. Este cuestionario fue completado por los mismos usuarios y también por sus compañeros parejas, familiares, etc. Sólo 10 sujetos lograron 50% de aciertos (SRT) en el test de frases con ruido de fondo ( habla presentada a 0 azimuth / ruido presentado a 180 azimuth), tanto con sus propios audífonos como con los de prueba estaban en el modo omnidireccional. Sin embargo, 15 sujetos tuvieron éxito en las mediciones de SRT con el modo direccional y un nivel de ruido de 60 dB SPL. El promedio de mejora del SRT del modo direccional por sobre el omnidireccional fue de 13.7 dB. Los resultados individuales de los test de inteligibilidad el habla en ruido se muestran en la figura 3. dB 25 15 10 5 Promedio 0 prof.5 prof.4 prof.3 prof.2 prof.1 sev.10 sev.9 sev.8 sev.7 sev.6 sev.5 sev.4 sev.3 sev.2 sev.1 SRT,omni-SRT .Zoom 20 Figura 3. Mejoras en dB del SRT (Umbral de Recepción del Habla), para aquellos sujetos que fueron capaces de realizar el test con ruido de fondo (Test HSM). Los sujetos marcados con ∗ sólo pudieron realizar el test en la posición Zoom. En estos casos el SRT para la condición Omni consideró como +18 dB SNR, que fue el peor resultado observado en este estudio En general el audífono de prueba fue evaluado de forma positiva por los sujetos participantes. Los resultados de los cuestionarios realizados a los compañeros de los sujetos con discapacidad auditiva fueron casi idénticos a los de los cuestionarios de los usuarios. En resumen, tanto en el laboratorio como en el estudio de campo el instrumento de prueba demostró ser significativamente mejor que los propios audífonos de los sujetos estudiados. Particularmente en las situaciones ruidosas, el programa con zoom fue Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) considerado significativamente mejor que el omnidireccional y que los propios audífonos de los sujetos. Los resultados de este estudio sugieren que los personas con pérdidas auditivas severas a profundas pueden beneficiarse significativamente de la tecnología multi- micrófono cuando la misma está diseñada apropiadamente para este grupo en audífonos multiprogramas. Los beneficios son la mejora en situaciones de ruido tanto en la inteligibilidad del habla como en la calidad del sonido. Además, las experiencias con el audífono de prueba fueron consideradas positivas por los participantes. Tanto en el laboratorio como en los tests de campo, el audífono de prueba ha demostrado ser significativamente superior al propio audífono del sujeto participante. Particularmente en las situaciones ruidosas el programa con zoom fue valorado significativamente mejor que el programa omnidireccional y que el propio audífono del sujeto. Otros Enfoques: Transposición de Frecuencia y Extracción de Rangos. El estudio realizado por Faulkner y col. (1992) mencionado anteriormente, demostró que el rendimiento psicoacústico de la población con pérdidas auditivas profundas está profundamente alterado comparado con el de los sujetos con audición normal. En otras palabras, la capacidad de procesamiento de la información del canal auditivo está sustancialmente reducida en los individuos con pérdidas auditivas profundas. Por esta razón han sido discutidos en la literatura varios enfoques para reducir la cantidad de información de la señal de habla, extrayendo y amplificando sólo la información relevante. Un enfoque que ha sido seguido, es transponer o comprimir la información de alta frecuencia en el rango espectral residual ("compresión de frecuencia" /"transposición de frecuencia"). Sólo unos pocos estudios comunicaron los resultados del uso de este enfoque con sujetos con pérdidas auditivas profundas (Parent, Chmiel y Jerger 1998; Davis 2001; MacArdle y col. 2001). MacArdle y colegas informaron acerca de un extenso estudio longitudinal con niños de 2.5 a 15.6 años. La mayor parte de los niños que participaron en este estudio eran prácticamente candidatos a implante coclear y habían usado un dispositivo de transposición de frecuencia durante 20 meses ( 11 niños ) o 48 meses (25 niños). El dispositivo de transposición de frecuencia fue evaluado usando mediciones de percepción del habla y mediciones de la inteligibilidad del habla de los propios niños. De los 36 niños de este estudio, se encontró que 4 niños obtenían beneficios significativos con el dispositivo transpositor de frecuencia. Davis (2001) y Parent y col. (1998) también informaron de dos estudios de casos con dos sujetos cada uno que también mostraron beneficios usando transposición de frecuencia. Otro enfoque fue usado en un estudio presentado por Faulkner y col. (1992) y Rosen , Walliker, Fourcin y Ball (1987). Aplicaron un dispositivo de patrones de habla combinados en laboratorio que codificaba la frecuencia fundamental de la voz, la envolvente de la amplitud, la presencia de la excitación de los fonemas áfonos y sólo la frecuencia fundamental de los fonemas sonoros. De los 11 sujetos que participaron en el estudio, 5 mostraron beneficios usando este dispositivo de habla experimental. Estos sujetos tenían pérdidas auditivas de 110 dB HTL o más (promedio de cuatro frecuencias). En este momento, estos sujetos serían buenos candidatos para un implante coclear. Un enfoque similar con resultados similares a los de Faulkner y col. ha sido presentado por van Son (1993). Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) En síntesis, los estudios mencionados anteriormente han demostrado que algunos sujetos podrían beneficiarse con otras formas de procesamiento de la señal en lugar de sólo aplicar la amplificación. Sin embargo, en la actualidad, no existe otra estrategia de procesamiento con la cual hayan demostrado beneficio un gran porcentaje de sujetos con pérdidas auditivas profundas. Discusión y Conclusiones En este capítulo hemos tratado de analizar y resumir la documentación existente acerca de la psicoacústica y las estrategias de procesamiento de la señal para los individuos con pérdidas auditivas profundas. Hoy en día existen muy pocos estudios publicados sobre el tema. Además nuestros conocimientos sobre la psicoacústica básica y los mecanismos fisiológicos de las deficiencias auditivas profundas es muy limitado. De los pocos estudios que han sido presentados, los resultados han demostrado peor rendimiento en las medidas psicoacústicas básicas y en las pruebas de percepción del habla en los individuos con pérdidas auditivas profundas. En particular, la percepción del habla en ambientes difíciles (por ejemplo ruidosos) parece estar profundamente afectada en los individuos con pérdidas auditivas profundas La documentación que hemos resumido relativa a la estrategia de amplificación óptima para los sujetos con pérdidas auditivas severas sugiere que, para el diseño de audífonos para este grupo específico, necesitamos ofrecer opciones de diferentes estrategias de procesamiento de la señal tales como la compresión y el procesamiento lineal, dentro un mismo audífono. Un tema no resuelto es la no existencia de un pronóstico de cuál será la estrategia de amplificación preferida por cada individuo. Basándonos en el audiograma, parece existir cierta tendencia a preferir el procesamiento lineal en las pérdidas auditivas más profundas. Sin embargo esta afirmación está basada en un conjunto muy limitado de datos experimentales. A pesar de que cuatro estudios analizados en este capítulo han demostrado una ligera preferencia por los sistemas de amplificación con compresión sobre los de amplificación lineal, es prematuro realizar conclusiones finales en base a estos pocos estudios. Desafortunadamente, los resultados de estos estudios no pueden ser comparados fácilmente o puestos en común debido a que han sido usados diferentes sistemas de compresión (diferente número de canales, diferentes constantes de tiempo, etc.) El número de sujetos no permite un análisis estadístico minucioso de los datos en función de probar lo significativo de las preferencias, así como también deducir un pronóstico claro de cuál será la preferencia, dependiendo del audiograma. Existe una clara necesidad de llevar a cabo un extenso estudio sobre este tema, buscando un pronóstico de la preferencia entre la estrategia de procesamiento lineal y la compresiva en el grupo de hipoacúsicos profundos. Un enfoque de procesamiento de la señal, que parece tener el potencial para mejorar el rendimiento de los sujetos con pérdidas auditivas profundas en ambientes ruidosos es el multi-micrófono conmutable a micrófono direccional. El estudio resumido aquí ha demostrado una mejoría significativa en la relación señal -ruido alcanzando el 50% de inteligibilidad con 13 dB comparado con el rendimiento con el sistema de micrófono omnidireccional. Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP) Fueron analizados otros enfoques sobre el procesamiento de la señal para las personas con pérdidas auditivas profundas. Sin embargo, nuevamente las investigaciones sobre estas estrategias alternativas son limitadas. Los estudios resumidos aquí siguen dos líneas de razonamiento. Primero, se ha sugerido que el rendimiento podría ser mejorado reduciendo la cantidad de información que se presenta al oído a través de la extracción de rasgos especiales de un estímulo, tales como el tono. La otra estrategia que ha sido propuesta es aplicar transposición espectral de manera de desplazar la información disponible contenida en las frecuencias altas hacia el rango de las frecuencias bajas donde la capacidad auditiva útil está presente. Sin embargo no ha sido demostrada ninguna mejora significativa en el rendimiento. Sólo un pequeño número de sujetos que participaron en esos estudios mostraron beneficios cuando usaron alguna de esas estrategias, comparadas con la amplificación tradicional. En síntesis, según nuestra forma de ver, actualmente la mejor estrategia para el procesamiento de la señal en los individuos con pérdidas auditivas profundas parece ser el ofrecer sistemas que provean al audioprotesista de cierta flexibilidad para la elección de la estrategia de amplificación preferida. Además, dada la abrupta disminución en la inteligibilidad del habla en condiciones ruidosas, parece ser de especial importancia ofrecer un medio efectivo (por ejemplo tecnología multimicrófono) para mejorar la misma en este grupo específico de pacientes. Finalmente, nuestro conocimiento acerca de la psicoacústica básica y los mecanismos fisiológicos, así como acerca de las formas de procesamiento de la señal y las estrategias de adaptación óptimas para las personas con pérdidas auditivas profundas, está construido sobre una serie muy limitada de estudios publicados. Por lo tanto, para equiparar las avanzadas capacidades de los sistemas de procesamiento de la señal de los audífonos modernos con las características y necesidades de los individuos con pérdidas auditivas severas y profundas, se requieren más estudios que traten estos temas fundamentales. Traducción por el Programa Infantil Phonak (PIP)