- SARASVATI ESTUDIOS DE ORIENTE-OCCIDENTE PARA IMPULSAR UN RENACER HUMANISTA NUMER05 DlRECCION Patronato de la fundaci6n Purusa DIRECTORA DELEGADA Orduiia Ferrero }vf" Anunciaci6n ED ITA Fundaci6n Purusa Transcripcion SUSCRIPCIONES Fundaci6n Purusa (rAgustin Durem, 19, 4° B 28028 - Madrid WlAv'W:!undacionpurusa.org e-mail: [email protected] [email protected] EI fuego y la ( Calier-Visu\'al EI drama COlT Fernandez, Ro Cualidades fe Jiiger, Willigis ConsideraciOl Pujol, Oscar Tiempo e Inte Satyananda. S ISSN: 1138-5235 Deposito Legal: M-40.006-1997 La autorealb Vassiliades. [ No-dualidad Vigne, Jacqul La Concepci Visuvalingar Sumarios .... SUMARIO ' °t0 TranscnpclOn y pronuncIaclOn d eIsanscn OO' • • , ..................................... .. 7 EI fuego y la muerte en el Hinduismo ................................................... 9 Calier-Visuvalingam, Elizabeth EI drama como paradigma cosmoestetico en la tradicion india ...... 21 Fernandez, Rosa Cualidades femeninas en la evoluci6n ................................................ 29 Jager, Willigis Consideraciones basicas sobre el vedanta de Sa.J1lkara ....................... 37 Pujol, Oscar Tiempo e Intemporalidad. La Tradicion hindu en el proximo siglo ......... 83 Satyananda, Swami La autorealizaci6n en la tradici6n brahmanica ............................... 109 Vassiliades, Demetrios Th. No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo ................ 119 Vigne, Jacques La Concepcion del Humor en Abhinavagupta ................................ 173 Visuvalingam, Sunthar Sumarios ..................................... ......................................................... 197 <}II ell fa tradiciol1 brahmimica : la mente y finalmente la despertar a la conciencia la vida, constituyen las tanga) del yoga de Pata­ los filosofos indios enfa­ la de todas las facultades telecto, la mente y el m que ser seguidos con stematico (abhyasa) y ~ya) por todos los que fin a las cinco modifica­ de la mente e intelecto t ininterrumpida brillan­ ra naturaleza del ser. No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo* por Jacques Vigne** Traducido por Montserrat Vilarrasa Resumen Este texto es un estudio sobre cristianismo e hinduismo, en particular sobre el hesi­ casmo, la mistica de los Padres del desierto, y el Vedanta. Muestra como los misticos cristianos tienden a la no-dualidad y practi­ can como en el yoga parar la mente y el silencio. Habla de la psicologia de la asce­ sis, del porque de sus cxcesos, dellazo entre la soledad, la austeridad y los poderes psi- quicos. Aborda asimismo la sublimaci6n de la sexualidad en la espiritualidad. Tras un resumen de la historia de la no-dualidad en Occidente, muestra como csta se promete como un gran porvenir, en cI quc hace evo­ lucionar los conceptos cristianos sobre la gracia, la creacion, la evoluci6n, el persona­ Jismo y Ja nocion de la disoluci6n del ego en esta vida, es decir, la liberaci6n en vida. Parte I. Sobre parar la mente Caminar, aparte de su repeticion ritmica, favorece un control del curso de los pensa­ mientos. Si se asocia a la repeticion de una formula sagrada, puede llevar a parar la mente y a un estado superior de eonscien­ cia. Es muy comun entre los peregrinos de todos los paises la pnictica de la oraci6n repetitiva. En el cristianismo, los Relatas de un peregrina nlSO (1) son celebres por eso, as! como en India los Apuntes de pere­ grinaje de Swami Ramdas. (2) Me senti tan fascinado por el poder de la repeticion sobre el espiritu ~ sea repeticion del paso 0 repetici6n de una f6rmula sagrada que la * Publieado en Questions n° 99 y 100 (1995). ** Diplomado en Psiquiatria por la Univer­ sidad de Paris. Desde haee diez anos vive en India dedieado al estudio (Vedanta, estudios comparados Oriente/Oceidente) y la meditaei6n. convert! en tema de mi tesis de medic ina. (3) Lo que presentia en el momento de redactar esc trabajo era que las tccnicas repetitivas, asociadas generalmente en eI alma de las personas a la plcgaria y al pen­ samiento positivo, podian igualmente con­ tribuir de manera muy importante al desarrollo de la psicoterapia. Una de las limitaciones de esta es que se dedica casi exclusivamente al estudio de la mente, al menos en su fonna c\asica inspirada por el psicoanalisis, pero esta observaci6n no representa mas que la mitad de las posibili­ dades de aproximacion a los caminos espi­ rituales. La segunda mitad esta fonnada por las tecnicas de concentracion, consis­ tentes en un movimiento repetitivo de la atenci6n, que regresa una y otra vez al objeto en el cual ha decidido fijarse. Jacques Vigne 120 No-dualidad y Mistica Crisliana: Vedanta y Hesicasmo A menudo se ha comparado la oraci6n de Jesus al mantra y el hesicasmo al yoga. (4) Tratare este ultimo tema al final de este articulo; me interesa, en primer lugar, el resultado de estas tecnicas, la paz, la hesica, que ha sido descrita como la columna vertebral de la mistica de la Igle­ sia ortodoxa de Oriente, y parar la mente, citta vritti nirodha, que Patanjali consi­ dera como la definici6n misma del Yoga al principio de sus aforismos (1,2). (5) Un silencio vasto como el cielo Me hace muy feliz escribir sobre este tema en India, a orillas del Ganges, justo antes dc entrar en retiro por al menos cinco meses. Puede parecer parad6jico hablar del silencio, pero muchos otros 10 han loado antes que yo (6); can la espe­ . ranza de que este silencio se convierta en cl objeto de nuestra experiencia, (,que mas bello objeto de reflexi6n puede haber para nuestra mente? La psicologia no es del todo ajena a las vir­ tudes del silencio; la abstenci6n del psi­ quiatra tiene en sl misma una eficacia, ya que constituye una aceptaci6n implicita y no culpabilizadora de la mente de su paciente y de su existencia en tanto que tal; sin embargo, hay que optar por las practi­ cas de meditaci6n para que el sujeto por sf mismo intente acercarse al silencio. Los terapeutas se sienten demasiado atraidos por los ruidos del intelecto, las falsas notas de la psicopatologia y los gruJiidos sordos de las pulsaciones estremeciendo el incons­ ciente sin pensar jamas en escuchar la gran calma que hay detras, 0 encima de todD ello. En este sentido, puede decirse que el silencio es el gran rechazado de nuestra psicologia modema. Tengamos en cuenta. ademas, que la filosofia y la teologia ya habian aliviado pasablemente sus preocu­ paciones. Sin embargo, el hombre corriente tiene una intuici6n justa del silencio cuando Ie apetece estar en plena naturaleza. Ahi las imagenes no son portadoras de mensajes calculados como en las ciudades Henas de ensenas y publicidad. La natura­ leza no tiene nada en especial que decir. puede que sea por eso que Ie guste tanto su compania. Para entrar de lIeno en el tema que nos ocupa, algunas reflexiones sobre el voca­ bulario: en sanscrito, silencio es mauna, y a la persona que ha hecho un voto de silencio se Ja llama mauni. A veces este voto puede durar hasta doce anos, como es el caso actual de Chandra Swami del linaje Udasin cerca de Dehra-Dun, a los pies de los Himalayas (cf"L'art de la rea­ lisation", Albin Mitchel). En cuanto a la paz, se la considera como el noveno sen­ timiento (rasa), de alguna manera la base de la que surgen todos los demas. En griego, el termino hesica se utiliza para designar a la vez la paz y cl estilo de vida de los solitarios. Nosotros estamos inte­ resados directamente en esta experiencia de la hesica sin detallar la historia del movimiento al cual dio lugar, el hesi­ casmo, que impregno con su perfume toda la mistica de la Iglesia de Oriente. Otro termino que significa tranquilidad es apatheia, la ausencia de pasiones. No se trata en absoluto de la apatia, estado de pereza, sino de un estado de pureza donde los movimientos de la mente se paran. Es un estado de supraconsciencia, una analogia muy profunda con el sama­ dhi hindu. Para los Padres el amerimnia -ausencia completa de se revela practicamel1t~ una virtud. En este senti mujer sabia de nuestro damayi, decia en palabl no-preocupaci6n, he aq suprema". Otra palabr tranquilidad es en3mia, r mente, obviando los ace: desierto. En am bas p nociones se asocian. En pax, y tlene una import en el desarrollo del m dental que se ha con vcr del orden benedictino. En este texto, permanec timonio directo de los Janzare a especulacione~ damente marcadas por h camiento de los pensar que la idea de una met las misticas no es un Sl piadoso. Me he dejado g cion al escoger las palat y sabios de India, basan riencia interior de Vijay cual estoy viviendo de madamente cinco anos: frances convertido en Anandamayi, vive y pr cion en India segun c hace mas de cuarenta 2 Padre del desierto, se m haber vivido diccisiete tano en los Himalaya "Padre de la montana". En estos tiempos en que ( nuevas corrientes religio: silencio interior pennite cultades de dialogo, puc el deposito comun de Jacques Viglle 121 ialla: Vedanta y Hesicasmo Tengamos en cuenta, )sofia y la teologia ya ;ablemente sus preocu­ :go, el hombre corriente >n justa del silencio 5tar en plena naturaleza. no son portadoras de s como en las ciudades . publicidad. La naturaen especial quc decir, :so que Ie guste tanto su I. en cl tern a que nos lexiones sobre el voea­ to, sileneio es mauna, ~ ha heeho un voto de a mauni. A veces este 1asta doce afios, como Ie Chandra Swami del a de Dehra-Dun, a los yas (ef"L'art de la rca­ itchel). En cuanto a la a como el noveno sen­ alguna manera la base todos los demas. En hesica se utiliza para 1 paz y el estilo de vida \losotros estamos inte­ [lte en esta experiencia 1etallar la historia del lal dio lugar, el hesi­ ~gn6 con su perfume la Iglesia de Oriente. 10 significa tranquilidad 5encia de pasiones. No to de la apatia, estado ~ un estado de pureza ientos de la mente se o de supraconsciencia, profunda con el sama­ s Padres el amerimnia -ausencia completa de preocupacioncs­ se revela practicamente siempre como una virtud. En este sentido tambien, una mujer sabia de nuestro siglo, Ma Anan­ damayi, decia en palabras simples: "La no-preocupaci6n, he aqu! la meditaci6n suprema". Otra palabra que significa tranquilidad es erernia, parecida enorme­ mente, obviando los acentos, a eremia, el desierto. En ambas palabras las dos nociones sc asocian. En latin, paz se dice pax, y tiene una importancia tan grande en el desarrollo del monaquismo occi­ dental que se ha convertido en la divisa del orden benedictino. En este tcxto, pel111aneCerc cerca del tes­ timonio dirccto de los monjes y no me lanzarc a cspeculaciones teologicas pes a­ damente marcadas por la cultura. EI acer­ camiento de los pensamientos mostrara que la idea de una meta comun a todas las misticas no es un sefiuelo 0 un voto piadoso. Me he dejado guiar por mi intui­ cion al escoger las palabras de los Padres y sabios de India, bas{mdome en la expe­ rieneia interior de Vijayananda, ccrca del cual estoy viviendo desde hace aproxi­ madamente cinco afios: anciano medico frances convertido en discipulo de Ma Anandamayi, vive y praetiea la medita­ cion en India segun el vedanta desde hace mas de cuarenta afios. Si no es un Padre del desierto, se merece, despues de haber vivido diecisiete afios como enni­ tanG en los Himalayas, el nombre de "Padre de la montana". En estos tiempos en que Occidente se abre a nuevas corrientes religiosas, esta nocion de silencio interior pennite trascender las difi.­ cultades de dialogo, puesto que representa el deposito comun de todas las palabras sagradas. Es vasto como el cielo y no esta entorpecido por las voces de los di ferentes grupos que participan del pluralismo espiri­ tual de nuestros dias. EI silencio permite resolver muy bien los problemas de traduc­ ci6n... Es el signo de la renuncia; para ilus­ trar este ultimo comentario, citaremos con pem1iso una frase del "Sannyas Hindu", un texto que puede ser considerado eomo el testamento espiritual de Swami Abhishikta­ nanda, partidario convcncido de la coinci­ dencia de vedanta y cristianismo: "La Ilamada a la renuncia completa desborda la frontera de las religiones ... y cs mediante esta lIamada que surge de las profundidades del corazon humano que los diferentes dharmas (religiones) efectivamente se encuentran, en este pulso que las lleva mas alia de si mismas." (7) Ramana Maharshi expresaba la misma idea mediante una imagen tradicional. "EI silencio es el oceano en el cual todos los rios van a lanzarse." (8) Despucs de haber hablado sobre parar la mente en el ven­ danta y el cristianismo, vislumbrarcmos cl metoda que pennite llegar a ello, es decir, la ascesis, elaborando un estudio critico del sentido del sufrimiento del cuerpo en los Padres con relaci6n a la tradicion hindu. Por Ultimo, y antes de conc1uir, reflexionaremos sobre la tecnica del hesi­ casmo en comparacion con la del yoga. Parar la mente en el Vedanta Existen tres estados al parar la mente: • el silencio de la actividad verbal interior el borrado de las imagenes parar las sensaeiones provenientes delcuerpo 122 No-dualidad y Aiistiea Cristiana: Vedanta y Hesieasmo Cuando se ha llegado a este ultimo estado, el Ser se revela, es el samadhi. Cuando el lago esta en calma, se puede ver el fondo. Eslo no significa que el silencio sea un est ado de entorpectmtento. Ramana Maharshi decia que las gentes creen al sabio perezoso porque este puede perm a­ necer mucho tiempo inm6vil, pero de hecho el sabio es como una peonza que gira tan rapidamente que su movimiento apenas se percibe. EI silencio del verda­ dero guru es la ensenanza mas fuerte; es mediante este que Daksinamurti, el sabio adolescente, transmiti6 el Conocimiento del Ser a los cuatro rishis que eran ya ancianos. Las masas que venian a visitar a Ma Anandamayi, 0 que ahora vicnen aver a Ma Amritanandamayi, pueden estarse horas simplemente obscrvando cl guru sin tener necesidad de discursos 0 predicas. Un dia, alguien pregunt6 a Ma Ananda­ mayi: "Cuentanos tu experiencia". Ma rcspondio: "Hacer eso supondria asumir que siempre debe haber alguien para experimentar, y no cs el caso aqui (es la fonna que tenia Ma de hablar). Todo 10 que puede ser expresado eon palabras 0 mediante cualquier lcnguaje cs una crea­ ci6n de la mente." (9) Se cree que el silencio es inactivo, pero de hecho es una creacion que no cesa nun ca. Se puede comparar a la libre circulaci6n de la corriente eICctrica en un hilo conduc­ tor. A veces llegara a algun que otro ins­ trumenlo y 10 hara funcionar, si no seguira su curso desapareciendo. EI encuentro con un guru puede proporcionar la cxperiencia del silencio. Nisargadatta Maharaj deda: "Antes del momenta en que encontre a mi guru, yo sabia muchas cosas: Ahora no se nada... Me conozco a mi mismo y no encuentro ni vida ni muerte en mi, sola­ mente al puro Ser." (10) Junto con el "Yo soy el que soy" divino, la frase de la Biblia que atraia mas a Ramana Maharshi era: "Pennaneced silenciosos... y sabed que yo soy Dios". (Ps 46, 11) Uno de los numerosos metodos de medi­ taci6n posibles consiste en observar la mente en medio de los numerosos pens a­ mientos, percibiendo asi el silencio. Esta tecnica es igualmente utilizada en Occi­ dente, particularmente por los cartujos. Es preciso comprender que, si bien todas las tecnicas espirituales se encaminan hacia el silencio, no 10 crean de por si, puesto que sicmpre est a ahi, no es otro que el scr. "Aquel que ha perdido su bolsa en un momenta de distracci6n, puedc cncon­ trarla calmando su mente y haciendo memoria de donde ha podido extraviarla. Cuando encuentra la bolsa perdida, no puede decirse que el hecho de calmar su mente haya creado esa bolsa. De la misma manera, el control de vuestra mente no es la causa de la Realizaci6n del Ser; aunque cste siempre ahi, no 10 reconoceis, atm con una mente bajo control, puesto que no cstais acostumbrados." (11) En el Vedanta, es muy comun tomar como analogia del samadhi el suefio profundo: siendo un estado desprovisto de imagenes oniricas, representa el silencio de las for­ mas. Ademas, la distincic)!1 entre el obser­ vador, 10 que es observado y la observaci6n misma desaparccc como fund ida en una sola masa de consciencia (prajila-ghal1a, termino empleado en las Upanishads). El samadhi posee la misma fuerza centripeta considerable que el suefio profundo, pero en lugar de estar inconsciente, el est ado es de supraconsciencia. Jacques Vigne Si queremos orientam05 de experiencias espiritu que es mas importante CI distinguir entre mano/a)'i respeetivamente, la diso trucci6n de la mente. I define como un fen6n mientras que la destruec Los gennenes de los sa cion antes pasados) han 1 el agua lIevada a ebullici tostadas en la cazuela. hablaba a menudo de 12 la vida, shunya, y la gt hunya, que corresponde diferencia que acabam( Los autores cristianos h y la verdadera hesica saber esto con el fin de banal ~aunque util a su r de relajaci6n profunda Gran Silencio que corre mas elevado, el de los \' En el Advaita-Vedanta, no-dualidad pura, la pn un pensamiento sabre poner limites a un sil mente estable. En efect( sonas cstan juntas (la i la divinidad y yo), aunq calladas durante algun ran por desgracia a momenta dado... Esta i: mental que se da al sil monio exclusivo dcl n, encontramos la misma como muestra, 10 que Dogen: "Es neeesario no surge ningun pen cepto vida-y-muertc s( no hay coyuntura ni dil los fen6menos se escla Cristialla: Vedanta y Hesicasmo Jacques Viglle Ser." (10) Junto con el "Yo y" divino, la frase de la la mas a Ramana Maharshi ced silenciosos ... y sabed s". (Ps 46, 11) Si queremos orientamos en la jerarquia de experiencias espirituales y saber 10 que es mas importante cumplir, debemos distinguir entre manolaya y manonasha ­ respectivamente, la disoluci6n y la des­ trucci6n de la mente. La disoluci6n se define como un fenomeno reversible, mientras que la destrucci6n es definitiva. Los gennenes de los samskaras (condi­ cionantes pasados) han muerto, como en el agua Ilevada a ebulliei6n 0 las semillas tostadas en la cazuela. Ma Anandamayi habJaba a mcnudo dc la distincion entrc la vida, shullya, y la gran vida, mahas­ hUllya, que corresponde mas 0 menos a la diferencia que acabamos de estab\ccer. Los autores cristianos hablan de la falsa y la verdadera hesica. Es importante saber esto con el fin de no confundir una banal-aunque uti I a su nivel- experiencia de relajacion profunda y el verdadero Gran Sileneio que corresponde a un nivel mas elevado, el de los verdaderos sabios. nerosos metodos de medi­ consiste en observar fa o de los numerosos pensa­ )iendo asi cl silencio. Esta llmente utilizada en Occl­ nnente por los cartujos. Es nder que, si bien todas las mles se encaminan hacia el :rean de por si, puesto que hi, no es otro que el ser. l perdido su bolsa en un 1istraccion, puede encon­ o su mente y haciendo nde ha podido extraviarla. 1tra la bolsa perdida, no jue el hecho de calmar su ido esa bolsa. De la misma rol de vuestra mente no es ealizacion del Ser; aunque 1i, no 10 reconoceis, aim )ajo control, puesto que no rados." ( II ) i 's muy comun tomar como nadhi el suefio profundo: ) desprovlsto de imagene~ :nta el silencio de las for­ i distinci6n entre el obser­ )bservado y la observacion ce como fundida en una :msciencia (prajiia-ghana. 10 en las Upanishads). EI a misma fuerza centripeta : el sueno profundo, pero . inconsciente, el estado es Icia. En el Advaita-Vedanta, la doctrina de la no-dualidad pura, la presencia misma de un pensamiento sobre la divinidad es poner limites a un silencio verdadera­ mente estable. En efecto, cuando dos per­ sonas estan juntas (la idea que tengo de la di vinidad y yo), aunque puedan estarse calladas durante algun tiempo, empeza­ ran por desgracia a hablar en algun momento dado ... Esta importancia funda­ mental que se da al silencio no es patri­ monio exclusivo del no-dualismo hindu, encontramos la misma noci6n en el zen ­ como muestra, 10 que decia el maestro Dogen: "Es necesario saber que cuando no surge ningun pensamiento, el con­ cepto vida-y-muerte se quiebra y que, si no hay coyuntura ni diferenciacion, todos los fenomenos se esclarecen". (12) Pode­ 123 mos aun extraer de nuevo este concepto de otro maestro zen, Taido (siglo XV): "Salvo esta pacificacion, no existe buddha. Este buddha no tiene una luz especial, no vuela por el aire. Nuestro ser es tal que, despues de nuestro nacimiento hasta hoy, es el de un buddha innato y sereno. iNo 10 dudeis!". (13) En Occidente, Plotino fue la inspiraei6n de aqueUos que querian orientarse hacia una via de Conocimiento puro, cs decir, la realizaei6n del Uno mas alia de toda cuesti6n personal, como en el Vedanta. Influencio a distancia al Maestro Eckhart. Este evoca el est ado superior de la experiencia espiritual de la siguiente manera: "EI alma deja de actuar; no con­ tinua esforzandosc, esta plena; posee su contemplaci6n interior... asi, la unidad se introduce en ella. A mas unidad, mas tranquilidad. Es entonces cuando la parte del ser que conoce sc hace uno con el conocedor (hen toi·gnosihenti)". (14) El cristianismo y la hesica Dios preferia manifestarse en la hesica "Ia voz de un silencio sutil" como hizo comprender a Elias (I R, XIX, 12) en el monte Horeb. Este acababa de hacer degollar a cuatrocientos cincuenta profe­ tas de Baal en el Monte Carmelo. (l R, XVIII, 40) Sin mostrarse en el terremoto, el huracan 0 el fuego, Dios hizo sentir claramente a su profeta que no estaba por la utilizacion de metodos violentos. Igualmente, el Cristo, dejando a sus dis­ cipulos, les dijo: "Os dejo mi paz." Para saber en que consiste esta paz, podemos interrogar a los Padres del desierto. Sus consejos directamente orientados hacia la manera de sacar provecho del retiro y de 124 No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo la obtencion del silencio de la mente, tie­ nen finalmente una predisposicion mas universal que las especulaciones teologi­ cas 0 las elaboraciones cristologicas, 0 incluso las eciesiasticas. Evidentemente, las definiciones que intentan evocar la hesica tienen una utilidad limitada: son como el batiente de la puerta de una casa: lIamamos, pero no sabemos si' la puerta va a abrirse, ni qui en estara detnis. Isaac el Sirio (tambien lIamado "de Ninivc") evoca la hesica cuando "to do 10 que es plegaria cesa, y el alma ora mas alia de la plegaria ... El santo olvida enton­ ces completamcnte, dejando todo 10 que es de estc mundo, no habiendo en SI nin­ gun movimiento hacia cualquier cosa que sea". (I5) Existen trcs grados de silencio: el ciaustro, donde cl novicio prueba la paz del modo de vida monastico que descubre, "la arena" que correspondc al periodo en que la cnergia intcrior despierta y donde hace falta aprcnder a controlarla para oricntarla hacia 10 divino y el tercer grado cs Hel puerto", donde cl monjc disfruta dc la union de todos los bienes, de la fuente de luz, donde clmismo cs llamado dios y hermano de Cristo." (16) Jean Climaque, que paso su vida en el monasterio de Santa Catalina al pie del Monte Sinai y que inspiro con su obra La Santa Escalera todo el monaquismo poste­ rior, no escatimaba elogios sobre el silencio consciente: HEI silencio, con el conoci­ miento, es la madre de la plegatia, la libera­ cion de la cautividad, la preservacion del fuego... el compafiero de la hesica, el adversario del deseo de ensefiar... el arte­ sana de la contemplacion, un progreso invisible y una ascension secreta." (17) Es muy interesante notar que los dos ptimeros estadios del progreso espiritual segun Jean Climaque son la apatheia (la ausencia de movimientos mentales) y la catidad. Es ahi donde se reencuentran la vacuidad y la com pasion, dos cualidades supremas e inseparables del budismo mahayana. "La apatheia es la naturaleza misma del alma. las pasiones son un sobreaiiadido". (18) Lo que viene a decir que el fin de la practica es el reencuentro de la verdadera naturaleza expresion que recuerda la enseiianza del zen que afirma que cada ser tiene la natura­ leza de Buddha. (19) La h6sica nace de la muerte de la plegatia en el sentido habitual del terminG; Isaac el Sitio dice: "Todo 10 que esta hecho de oracion 0 puede ser objeto de oraeion, esta dcllado de la espititualidad. Y 10 que es cspititual es de un orden que excluye todo movimiento y toda plegaria". (20) EI pseudo-Dionisio es aun mucho mas laconico al habJar de cste tipo de expeticncias: HEI 6xtasis mas alia de si mismo y de todo. (21) Para el ser ordina­ rio, el siJencio es una hetida, para el monje una union. Se debe buscar estc estado con intensidad, puesto que es cn 5i mismo deifi­ cante". "Tener sed de hesica es deificante", dice uno de los Padres. Por ello, un senti­ miento de irrealidad del mundo, como en el Vedanta, es una fase necesatia. Otra analogi a chocante con cl no-dualismo hindu: mediante la putificacion de la mente, el monje se transforma en pura consciencia; el abad Bessation hacia esta reflexion: HEI monje debe ser como los querubines y los serafines, unicamente ojo". (22) La hcsica es un proceso de muerte y resu­ rreccion. EI ego debe realmente desapare­ eer. EI abad Poemen, euando era un simple monje, fue a quejarse a su maestro Ammonas del ruido que hacia un veeino. Jacques Viglle Este respondio: "Poeme Ve, sientate en tu celda y zon que desde hace ya u tu sepu!cro". (23) Este ( corresponde a la liber. "Con este saber y esta hu nan de ello, cesan todas I las tentaciones, ya que I pueden luehar contra el q SI mismo como nada". ( miento superior viene de accion. (25) Nos encontn: del Vedanta, donde la con no puede ser coaccionad acciones, ni tam poco a 1 una separacion entre los accion orientada a purific. de la gran experiencia y compasion libre y gratuitc Es una idea muy comun amor superior (parabha conocimiento (jiiana); un Montc Athos, que sin ( mueho de la enseiianza r llega a vivir la misma ( apatheia es el fin; as! pUi como Dios. Ya no hay c mientos impuros, ya no e pasiones, se ha eonverti( emocion, sin deseo; 61 e5 silcncioso es vasto com nubes y sin viento: "Una formarse sin un soplo d misma manera, una pasior sin un movimiento del per Los que empiezan a inten espiritual tienen a men nocion de la ascesis. Exi cia a tomar como prete) istiana: Vedanta y Hesicasl1lo 'eso espiritual segun Jean apathba (la ausencia de tales) y la caridad. Es ahi ;ntran la vacuidad y la cuaJidades supremas e budismo mahayana. "La :uraleza misma del alma, n sobreafiadido". (I8) Lo lue el fin de la pnietica es la verdadera naturaleza :uerda la ensefianza del e cada ser tiene la natura­ .9) a muerte de la plegaria en del tennino; Isaac el Sirio : esm hecho de oraci6n 0 ! oraci6n, esta dellado de . 10 que es espiritual es de luye todo movimiento y I) EI pseudo-Dionisio es Ic6nico al hablar de este s: "EI extasis mas alla de '. (21) Para el ser ordina­ na herida, para el monje ~ buscar este estado con lue es en Sl mismo deifi­ de hesica es deificante", dres. Por clio, un senti­ I del mundo, como en el necesaria. Otra analogia no-dualismo hindu: aci6n de 1a mente, el . en pura consciencia; el ;la esta reflexion: HEI 10 los querubines y los e ojo". (22) :eso de muerte y resu­ .e realmente desapare­ nen, cuando era un quejarse a su maestro que hacia un vecino. 125 Jacques Vigne Este respondio: "Poemen, tu aIm vives. Ve, sientate en tu celda y graba en tu cora­ zon que desde hace ya un ai'lo reposas en tu sepulcro". (23) Este estado de muerte corresponde a la liberacion definitiva: "Con este saber y esta humildad que ema­ nan de clio, cesan todas las luchas y todas las tentaciones, ya que los dcmonios no pueden luchar contra el que se considera a si mismo como nada". (24) Este conoci­ miento supcrior viene de la fe y excluye la aeci6n. (25) Nos encontramos en la optica del Vedanta, donde la consciencia superior no puede ser coaccionada a derivarse de acciones, ni tampoco a producirlas. Hay una separacion entre los dos niveles, la acci6n orientada a purificar la mente antes de la gran experiencia y a expresar una compasi6n libre y gratuita despues. Es una idea muy comun en India que el amor superior (parabhakti) conduce al conocimiento (jiiana); un monje actual del Monte Athos, que sin duda no conoce mueho de la ensefianza no-dual de India, lIega a vivir la misma experiencia: "La apatheia es el tin; asi pues, el hombre es como Dios. Ya no hay en 1':1 mas pensa­ mientos impuros, ya no es esclavo de las pasiones, se ha convertido en amor, sin emocion, sin deseo; 61 es". (26) Este ser silencioso es vasto como un eielo sin nubes y sin viento: "Una nube no puede forrnarse sin un soplo de viento; de la misma manera, una pasion no puede nacer sin un movimiento del pensamiento". (27) Para tener este espacio de libertad y de sileneio, el monje puede tambien viajar al extranjero (xbliteia). Ahi no sera pertur­ bado por el medio que ha abandonado, y no comprendera las habladurias que haya a su alrededor. De todas maneras, parece ser que no todos los Ancianos han conse­ guido este estado de hesica. Uno de ellos confesaba: "En verdad, hace ya setenta anos que llevo estos habitos, y en ningun momento he encontrado reposo ... ". (28) i,Es a causa de esta dificultad 0 sc debe a otras razones el que el monaquismo poste­ rior parezca haber puesto menos clara­ mente la atenci6n sobre la hesica que los antiguos Padres? No se dejaron invadir por eI ritual de la recitacion de textos, ciertamente adecuada para calmar las mentes de los novicios, pero mas discuti­ ble para los misticos que habian a1canzado la madurez. En este sentido, en Occidente, la condena del quietismo, ligada frecuen­ temente a intrigas de la corte, (,no fue tam­ bien perjudicial? La mistica de los monjes, i,debe ser obligatoriamente del tipo de la de los feligreses, salvo si son investidos a tiempo completo? i,No cedie­ ron acaso al pietismo ambiente temiendo perder por la via directa de la h6sica el consuela que les suponia la imagen que se habian hecho de Jesus? Parece que un monjc actual del Monte Athos encucntre sentido al afinnar: "Algunos entendieron las palabras de Jesus, I11UY pocos enten­ dieron su silencio". (29) Parte II. Psicologia de la ascesis Los que empiezan a interesarse por la via espiritual tienen a menudo una falsa nocion de la ascesis. Existe una tenden­ cia a tomar como pretexto los excesos ascetieos de la historia monastica para abandonar todo esfuerzo y no hacer nada. Entre estos dos extremos existe un punto medio que hay que encontrar, por ello 126 No-dualidad y Afistica Cristiana: Vedanta y Hesicaslllo exploraremos con detenimiento la ascesis excesiva, definiremos en que consiste la ascesis justa -como desidentificarse del cuerpo sin causarle dana alguno-, y bus­ caremos cuales son las causas que, en la tradicion cristiana, favorecieron particu­ larmente la ascesis violenta. Los monjes no son gente ordinaria. Desa­ ITollan por su practica una concentracion de espiritu y una intensidad poco comu­ nes. Para comprender las dificultades con que se encuentran, las teorias elaboradas por psic610gos sin ningun tipo dc expe­ riencia en el rctiro y la mcditacion cons­ tante carecen de interes. Por el contrario, una psicologia cspiritual comparada puede proporcionar referentes solidos de otras tradiciones. Hablaremos pucs dc nociones de ascesis justa y de desidenti­ ficaci6n del cuerpo tanto en India como en el Cristianismo. En India, la asccsis excesiva estaba muy cxtendida en tiem­ pos de Buddha. £:1 mismo 10 habia practi­ cado antcs de definir la regIa de Ia justa mcdida. La cuerda del instrumento musi­ cal no debe estar ni muy tensa ni muy floja, para poder dar el tono justo. Las antologias dc las palabras dc los Padres del desierto evitan las declaraeiones aseetieas a ultranza. Por mi parte, senti la curiosidad de leer algunas de sus obras completas y eneontre ideas de un asee­ tismo pavoroso mezcladas dc vez en cuando con palabras sublimes. lntentare­ mos esclarcecr csto (litimo. La ascesis excesiva: los hechos La esealada de la ascesis era un hecho muy cOITicntc en el Cristianismo. La referencia a la Cruz de Cristo cra la justi­ ficacion oficial de estos excesos. Ni el mismo San Pablo dudaba en decir "Dis­ ciplino mi cuerpo y 10 esclavizo". (Cor 9. 27) Rabla tambien de todas las pruebas que tuvo que soportar, el hambre, el frio. las persecuciones, etc ... Estas se convir­ tieron en una especie de referencia para los monjes, si bien su ausencia de voca­ cion mlSlOnera les exponia mucho menos, a priori, a los imprevistos de una vida activa e itinerante. Macario, uno dc los primeros anaeoretas despues de San Antonio, dio una definici6n del monje. sin ningun tipo de ambigiledad: "EI monje es aquel que practica siempre la violeneia". (1) Esto parece a todas luces del todo eontrario a la dulzura de la hesiea ... Empcecmos por un cjcmplo caricatu­ rcsco dc la asccsis violenta: "San" Eusc­ bio se habia atado una cadcna alrededor del cuello ligada a su vez a los rinones; al scr demasiado eorta, estaba obligado a mantencrsc constantemente curvado. Conservc) este artilugio consigo pcrma­ nentemente durante euarenta an os, basta su muertc. (2) Este ejemplo ilustra de manera fisica, si puede decirse asi, cl ricsgo evidentc de desviaeion patol6gica que se eseonde tras la necesidad dc humillaci6n voluntaria. Otro monjc sc mantuvo durante veinte anos sin levantar la vista ... (3) Otro ejemplo: tras Simc6n cl Estilita, sc hizo habitual subir a una columna a modo de cclda. Sin embargo, como era muy difieil pennanceer solo, los estilitas se reagrupaban cn comunida­ des. Una de elias, en Gcthsemani, eI lugar de la agonia y los grandes sufri­ mientos de Cristo, como por casualidad, contaba con un eentenar de miembros. Algunas veees no se eomprendian, sobre todo cuando eran de tendcneias teol6gi­ Jacques Vigne cas distintas y se in( columna a otra. (4) En otros lugares existia que habian hecho voto mas que a cuatro patas : o cualquier otra cos encontrar por el suelo. virse de las manos. (5 rion, pcnnaneci6 dun: eon los brazos en alto ria. (6) Una ascesis n monaquismo oriental e mas. Llorar disminuye I la tendeneia a la c6lera esc sentido, la compun presenta como el anna monje. Aun aSl, los ex rosos y el limite de una carada muy vago. EI A tanto que perdio las pe monje que 110r6 inil durantc dos anos, dia principia, esas lagrima: las de un nino pequeno y alcgria; pcro cl des Ii dcpresion franca era m1 mas son un mensaje de la atcnei6n de la madr rcec, es muy posible q1 rcacci6n de desespero. bras de un cierto nl! expresaban el miedo a a pecar durante las (jlti quedaban de vida. Est alguno un signa dc eX!! En el gencro ascetico. J( easo excelente para su en el monasterio a la anos, se puso bajo la tut tyriyus - iya de por SI . Mas tarde, escribib "La 'ana: Vedanta y Hesicasmo dudaba en decir "Dis­ 110 esclavizo". (Cor 9, I de todas las pruebas rtar, el hambre, el frio, etc ... Estas se eonvir­ :cie de referencia para 1 su ausencia de voca­ Ics exponia mucho los imprevistos de una rante. Macario, uno dc oretas despucs de San definicion del monje. de ambigiiedad: "E! ue practica siempre 1a to parece a todas luces o a la dulzura de la un ejcmplo caricatu­ ; violenta: "San" Euse­ ) una cadena alrededor su vez a los rinones; al Irta, estaba obligado a stantemente curvado. :ilugio consigo pemla­ te cuarenta anos, basta ste ejemplo ilustra de puede decirsc asi, el ! desviacion patologica tras la necesidad de ntaria. Otro monje se veinte anos sin levantar ;jemplo: tras Simeon el habitual subir a una de celda. Sin embargo, ificil pennanecer solo, srupaban en comunida­ IS, en Gethsemani, el a y los grandes sufri­ , como por casualidad, :entenar de miembros. se comprendian, sobre de tendencias teol6gi­ Jacques Vigne cas distintas y se increpaban de una columna a otra. (4) En otros lugares existian los "pacientes", que habian hecho voto de no desplazarse mas que a cuatro patas y de comer hierba o cualquier otra cosa que pudieran encontrar por el suelo, todo ello sin ser­ virse de las manos. (5) E! abate Bessa­ rion, pennaneci6 durante catorce dias con los brazos en alto a modo de plega­ ria. (6) Una ascesis muy comun en el monaquismo oriental era el de las lagri­ mas. L10rar disminuye el sentido del ego, la tendencia a la c61cra y a los deseos. En esc sentido, la compunci6n (penthos) se presenta como el anna a escoger por el monje. Aun asi, los excesos eran nume­ rosos y ellimite de una depresi6n en mas­ carada muy vago. El Abate Arsene 1I0r6 tanto que perdi6 las pestanas, y hubo un monje que llor6 ininterrumpidamente durante dos anos, dia y noche. (7) En principio, esas lagrimas debian ser como las de un nino pequeno, mezcla de dulzor y alegria; pero el deslizamiento hacia la depresi6n franca era muy faciL Las lagri­ mas son un mensaje del nino para llamar la atenci6n de la madre. Si esta no apa­ rece, es muy posible que se presente una reacci6n de desespero. Las ultimas pala­ bras de un cierto numero de monjes expresaban el miedo a la condenaci6n, 0 a pecar durante las ultimas horas que Ies quedaban de vida. Este no es en modo alguno un signo de exito. En el genero ascetico, Jean Climaque es un caso excelente para su estudio. Ingresado en el monasterio a la edad de dieciseis anos, se puso bajo la tutela del Abate Mar­ tyriyus - iya de por si todo un programa! Mas tarde, escribi6 "La Escalera Santa", el 127 libro de cabecera del Abate de Rance, eJ refonnador ascetico de la Gran Trampa en el siglo diecisiete. Entre los muchos sabios consejos sobre la plegaria y las eta pas de la vida, encontramos "perJas" de este genero: "Las personas mas avanzadas que he encontrado en el desierto cran monjes sin­ ceramente convencidos de ser indignos y de haber fracasado en su vocaci6n". (8) 0 tambien: "Los malos espiritus, ftagelados por tu plegaria, se desvaneceran como ante fuego". (9) Las ganas de beber (jagua!) deben ser combatidas con el pensamiento de las llamas del infierno, la sed de los oprimidos es un signo de perfecci6n. Aconseja a los monjes el ser "como prisio­ neros de minas golpeados a todas horas por sus carceleros". (10) No estamos muy lejos en este punto de un campo de con­ centraci6n espiritual... EI vencno del pecado contamina tambien los medios de salvaci6n: "Con cada comuni6n, ruega para que esta no sea tu condena". La autoftagelaci6n psicol6gica es tan absurda como la autot1agelaci6n fisica. En la ultima linea de una obra, por otro lade intercsante, sobre la vida monastica cristiana, encontramos la palabra "dia­ blo". Esto es 10 que es lamentable cuando es sabido que siempre se acaba por regre­ sar a 10 que enfoca la mente a largo plazo. Hay que esperar praeticamente hasta el final del volumen de las "PaJa­ bras de los Ancianos" para encontrar 10 que podria evocar un consejo de visual i­ zaci6n positiva: "Que tu pensamiento sea siempre eJ Reino de los Cielos, y muy pronto 10 recibiras en herencia". (II) Antes de sumergimos de Ilene en la psi­ cologia de los excesos de la ascesis, intentemos ya comprender 10 que es la 128 No-dualidad y Afistiea Cristialla: Vedanra y Hesicasmo ascesis justa y la relacion equilibrada del meditador con su cuerpo. Segun mi opi­ nion, la ascesis justa consiste en aceptar los sufrimientos generados por la prlk­ tica de esta disciplina; la ascesis excesiva en la provocacion de estos. Un Padre decia: "No es suficiente renunciar a la propia vida, hay que odiarla". (12) Este proposito podria constituir una buena definicion de la ascesis excesiva. Por el contrario, la ascesis justa me parece evo­ cad a por Simone Weil en su definicion de la humildad: "Lo que sc acerca mas a la verdadera humildad es la inteligencia. EI epasceta ya ha sido suficientemente criti­ cado en el interior mismo de la comuni­ dad cristiana". EI Abate Poemen decia: "Todo 10 que sobrepasa la mesura pro­ viene del demonio". (13) Sin embargo, Poemen, queriendo suavizar su posicion, no puedc cvitar hacer apare­ ccr de nuevo en cscena a los demonios y cae de nuevo en un conflicto de contrarios sin fin. Par el eontrario, la Bhagavad-Gita, gran texto espiritual hindu, toma mueho cuidado en precisar simplemcnte que el yoga no es para los que comen mucho 0 muy poco, 0 los que duennen demasiado o demasiado poco. Ninguna mencion a los diablos. La via del Centro se revelo tan importante en el Budismo, que dio su nombre a una de sus eseuelas principales, el Madhyamika. Es interesante hacer men­ cion que la palabra "centro" no se utiliza cn su aceptaeion mas comun; el "centro" entre el frio y el calor no es 10 templado, sino que existe un tercer tennino que sobrepasa la dualidad frio-calor. Segun el pensamiento indio, el sufri­ miento viene de la ignorancia; es pues por medio de la comprension que podemos encontrar el remedio. Esta nocion parece estar de acuerdo con la psicologia modema. De una comprension (viveka) que no es tan solo intelectual, sino vivida profundamente en meditacion, proviene el desapego (vairagya). En este camino, la experiencia de la felicidad interior es un motor muy potente. Una vez se pregunto a un Anciano porque el alma regresaba una y otra vez a las cosas transitorias e impu­ ras. "Es porque aun no ha probado el dul­ zor de los bienes celestiales. Quien 10 ha probado busca a Dios con todo su cora­ zon; quien no 10 ha probado vuelve rapi­ damente a las cosas impuras". (14) No hace falta creer que la mezcla de sufri­ miento y felicidad sea patrimonio de los ascetas. Los que se sienten invadidos por una pasion amorosa viven ese estado ta111­ bien de fonna intensa. Igualmente, los que practican deportes de competicion sufren mucho por su cuerpo, pero encuentran placentero cl hecho de sobrcpasar cons­ tantemente sus propios Iimites. Tambien podemos de manera razonable defender la tesis de que el menospreeio patologico del euerpo cs mas grave en el caso de un alpi­ nista que arriesga su vida para conquistar una cumbre que ya ha sido vencida 36 veccs, que en el de un monje del desierto que ayuna porque eree que ello Ie propor­ dona un espiritu mas ligero. EI alpinista eorre verdaderamente riesgo de muerte, mientras que el monje puede bencticiarse de su ascesis para obtener una santidad meJor. La violeneia en la ascesis viene del des­ eonocimiento de una ley fundamental del psiquismo: el miedo al deseo aumenta el deseo en sf, y la colera contra la propia colera no haee mas que incre­ mentarla. A eorto plazo podemos opo- Jacques Vigne nernos violentamen ganar, pero a largo r como un nino malt tomara su rcvancha ' todas las maneras p( funciona por alten opuestos. Buscando la fuerza, no haeemc a nosotros mismo: teniendo un ego y ( un fondo de maniqU( dad dc rebasar los ( ejemplo en el caso Monte Athos que d tiene otros enemigo. rogar par ell os cs ir dualismo esta en la n logicamente a la d realmente el deseo Sl la perla de la castida libre del miedo a qu (por los dcmonios), alcanzado el santua: deeir, cl pais del repc Sin embargo, scria i Padres no ten ian un, sobrepasar los pares rio el Teologo deci< gran pecador es agr, eonsiderarse eomo s verse tal eual uno cs bajo, parecc medioe contra las pasiones. s de principiantc, debe Sirio aeonscjaba: "Val pasiones con eI rCI mayores, que intenla San Nilo decia igualn inicia con 1I0ros y cc necesario que este an nes se eonvicrta cn pasion". (18) Otro in 'W: Vedanta y Hesicasmo Jacques Viglle Esta nocion pareee con la psicologia omprensi6n (viveka) ltelectual, sino vivida editaci6n, proviene el '. En este camino, la Iicidad interior es un Jna vez se pregunt6 a ~I alma regresaba una ,s transitorias e impu­ no ha probado el dul­ lestiales. Quien 10 ha os con todo su eora­ probado vuelve nipi­ .s impuras". (14) No ~ la mezcla de sufri­ ,ea patrimonio de los sienten invadidos por viven ese estado ta111­ ,a. Igualmente, los que Ie competicion sufren rpo, pero encuentran , de sobrepasar eons­ pios limites. Tambien razonable defender la oSpreeio patologico del : en el caso de un alpi­ u vida para eonquistar a ha sido vencida 36 un monje del desierto ree que ello Ie propor­ laS Iigero. EI alpinista lte riesgo de I1merte, nje puede beneticiarse obtener una santidad nemos violentamente a nuestra mente y ganar, pero a largo plazo esta se vengara, como un nino maltratado por su padre tomara su revancha en la adoleseencia de todas las maneras posiblcs. El psiquismo funeiona por altemaneia de pares de opuestos. Buseando humillar el ego por la fuerza, no hacemos mas que probamos a nosotros mismos que continuamos teniendo un ego y que es fuerte. Existe un fondo de maniqueismo en la incapaci­ dad de rebasar los contrarios, como por ejemplo en cl caso de este monje del Monte Athos que decia: "EI monje no tiene otros enemigos que los demonios: rogar por ellos es imposiblc". (I5) Este dualismo esta en la mayo ria ligado psieo­ 16gicamente a la diticultad de superar realmente el deseo sexual: HEI que posee la perla de la castidad no puede sentirse libre del miedo a que esta Ie sea robada (por los demonios), mientras no haya alcanzado el santuario de la lumba, es decir, el pais del reposo". (16) I. ascesis viene del des­ ma ley fundamental ~I miedo al deseo n si, y la c61era contra ) hace mas que incre­ plazo podemos opo- Sin embargo. seria injusto decir que los Padres no tenian una intuiei6n de como sobrepasar los pares de opuestos. Grego­ rio el Teologo decia: "Tomarse por un gran pecador es agradablc, al igual que considerarse como santo 0 genio. Pero, verse tal eual uno es, ni mas alto ni mas bajo, pareee mediocre". (17) La eolera contra las pasiones, senal de un dualismo de prineipiante, debe evitarse, e Isaac el Sirio aconsejaba: "Vale mas adonneeer las pasiones con el recuerdo de virtudes mayores, que intentar resistirse a estas". San Nilo decia igualmente: "Ia plegaria se inicia con 1I0ros y contrici6n, pero no es necesario que este anna contra las pasto­ nes se convierta en Sl misma en una pasion". (18) Otro indicio de superacion 129 de las dualidades se manitiesta en la capa­ cidad de ciertos monjes de aceptar las ten­ taciones con reconoeimiento: a menos que no fuese un gusto desmedido por los sufri­ mientos auto-inf1ingidos. En cl eontcxto devocional, la gracia es 10 que puede sal­ vamos de la triste dualidad del combate infinito entre cl Bien y el Mal, pero aim es necesario que estc presente. En caso con­ trario, caeremos en otra dualidad, la de ausencia 0 presencia de gracia, la dualidad provoea gran eantidad de sufrimiento en la evoluci6n espiritual dcl cristiano. Rara­ mente se encuentra en los Padrcs la expre­ sion de una via de meditaci6n que uti lice la observacion de la mente tal como es. No obstante, una aproximaeion a est a pnictica podria ser este consejo de San Nilo: "Un hombre ora verdaderamente cuando ofrece todos sus primeros pensa­ mientos aDios". Respeto y desidentificacion del cuerpo Segun cI Vedanta, existen tres tactores de igual importancia: la desidentiticacion res­ pecto al cuerpo, respecto al ego y con rcla­ cion al Dios personal. Cuando conseguimos desapegamos del cuerpo, el resto sigue. En el fondo existe una intima relaci6n entre idolatria, autolatria y somalatria. Todas las tradiciones se encuentran con la necesidad de moditicar la consciencia habitual que tenemos del cuerpo, incluidos el tantrismo y el chamanismo. i\eurotisiologicamente, el uso de drogas alucinogenas esta unido a una modificaci6n de la consciencia del esquema corporal. Guiados de la fonna correcta, 10 que es bastante raro en este campo, po de­ mos servimos de esta expenencia para tra­ bajar estructuras demasiado rigidas de personalidad neurotica y ampliar nuestra visi6n del mundo. 130 l'io-dualidad y Afistica Cristialla: Vedanta y Hesicasmo De los muchos autores cristianos, perte­ nece muy probablemente a Maximo el Confesor el merito de haber puesto mejor en relieve la relacion entre el apego al cuerpo y el apego al ego, que el llama "philautie". Irenee Hausherr, gran espe­ cialista en los Padres griegos, ha consa­ grado su obra a este tema, anadiendo al mismo esta definicion de Maximo sobre la philautie: "Es la amistad apasionada e irracional por el cuerpo (19) ... La phi­ fautie, siendo como ya he dicho el princi­ pio la madre de todos los vicios, una vcz destruida, sc \lcva consigo toda su poste­ ridad y sus retonos. Desaparece, y no puede subsistir en parte alguna ningllTI rastro de malicia". (20) Detnis del len­ guaje ascetico de su epoca, M ..l ximo va I1lUY lejos: de hecho, sostiene, como el vedanta, que el desapego complcto del cuerpo y el ego lleva a la perfeccion, al estado de liberacion en vida (jivall­ lJ1ukta). (,Significa esto que debemos danar cI cuerpo? No, el verdadero pro­ ceso es un proceso de consciencia: "No sc trata de suprimir los sentidos 0 los objetos de los sentidos, sino la inclina­ cion del alma hacia ellos". (21) Nisargadatta Maharaj no era ningun ascela que viviese en cl desierto. Estaba casado, lenia varios hijos y una pequcna tienda en Bombay; lodo clio no Ie impe­ dia insistir persistentementc en la neccsi­ dad del desapego: "Una vez el desapego del cuerpo-mente ha tenido lugar, Brahma (el Absoluto) vendra con sus manos unidas a vuestros pies ... " (22) En el pensamiento tradicional el euerpo corresponderia a 10 que Winnicot lIama­ ria un objeto transieional. Seria como ese trozo de tela de escaso valor, pero al que un bebe se siente alado con todo su eora­ zon y del cual no quiere separarse bajo ningun concepto. La consciencia del cuerpo La nueva consciencia que desarrolla la persona que ha lIegado a un estado de meditacion avanzado es un estado para­ dojieo, asoeiado a un despertar. Podemos ver una evocacion de este estado cuando San Pablo habla de una experiencia que fue decisiva para el y Ie pennitio funda­ mentar su autoridad espiritual en 10 que el mismo vio y experimcnto directa­ mente. Decia, hablando de sl mismo: "Conozco un hombre en Cristo, que catorce anos ha -si en el cuerpo 0 fuera del cuerpo no 10 se, Dios 10 sabe-, fue arrebatado hasta el tercer cicio ... , y oyo palabras inefables que el hombre no puede expresar". (II Cor 12, 2-4). Gre­ goire Palamas lucho en el siglo XIV para que se reconociese la importancia del cuerpo en la plegaria, oponiendose a Balaam, un brillante profesor de filosofla en la corte de Constantinopla, de una manera mas 0 menos intelectual. Gre­ goire afirmaba 10 siguiente: "Decimos que es un mal estar pensando en el cuerpo; pero estar en el cuerpo no es un mal, puesto que tam poco es malo". La paradoja de la consciencia del cuerpo es esta: es neccsario que la cOl1sciencia descienda al cuerpo para vcr como est a ligada al mismo; solo despues podra pen­ sar seriamente en cortar esas ataduras. En ese momenta el desapego no sera un debilitamiento, pero si una renuncia que perrnitira identificarse con el Ser, su ver­ dadera naturaleza; es en ese sentido que en el Zen se repite: "Ir mas alia del cuerpo y de la mente" 0 que Vivekananda Jacques Vigne decia: "Son las p' que se identit1can c piadosamente "de les!"". (23) Hay ql medio entre el cuid cuerpo. Si s610 tene cuidado, nos decan zaeion pura y la rep nemos e) cui dado decantamos por la especie de pansexm progreso 10 que pre desde el punto de v riamos a centramos con un egoismo pi observa muchas ve \levan afios de psic tos con correr tras deseos cOl1scientes las personas, persigl sin \ograr nUl1ca su ' Lo interesante de vi los pensamientos pr disminuyen bastant, podemos observar base corporal. p·~ro. que esta toma de co pafiada de cicrto de~ da vueltas sobre el Asccta reconocia, especic de estatus ( en quien consegui: ctlerpo: "Aquel qw 10 Divino, ha lIegac cion del alma haci de todo limite, au ctlerpo ... Para el c natural no sera nin vida en Dios, cuy. alia de toda comp indios como Ramd hablaban de su Cl I. Vedanta y HesicaslIlo iere separarse bajo lerpo que desarrolla la do a un estado de es un cstado para­ dcspertar. Podemos este estado euando na expcnencla que . Ie permitio funda­ !spiritual en 10 que perimcnto directa­ ndo de si mismo: re en Cristo, que 11 el euerpo 0 fuera Dios 10 sabe-, fue ~rcer cielo. .. , y oyo lue el hombre no Cor 12, 2-4). Gre­ :n el siglo XIV para la importaneia del 'ia, oponiendose a )[ofesor de filosofia ;tantinopla, de una )s intelectual. Grc­ guiente: "Decimos Ir pensando en el el cuerpo no es un :Jco es malo". 1 scicncia del cuerpo que la consciencia para ver como esta despues podra pen­ ar esas ataduras. En .apego no sera un .1 una renuncia que : con el Ser, su veren ese sentido que : "Ir mas alia del o que Vivekananda Jacques Vigne decia: "Son las personas estupidas las que se identifican con el cuerpo y gimen piadosamente "debiles, somos debi­ les!"". (23) Hay que encontrar el punto medio entre el cuidado y el dominio del euerpo. Si solo tenemos el dominio sin e\ euidado, nos decantamos por la morali­ zaeion pura y la represion. Si solo mante­ nemos el euidado sin e\ dominio, nos dccantamos por la hipocondria 0 una especic de pansexualidad que mas que un progreso 10 que provoca es una recesi6n desde el punto de vista espiritual. Volve­ riamos a centrarnos en nosotros mismos, con un egoismo puro, como el que se observa muchas veces en personas que !levan arios de psieoanalisis: no conten­ tos con COITer tras la satisfaccion de los deseos conscientcs como la mayoria de las personas, persiguen los inconscientes, sin lograr nunca su objetivo. Lo interesante de vivir en soledad es que los pensamientos provinentes del exterior disminuyen bastante, la mente se frena y podemos observar mas claramente la base corporal. Pero, tambien es necesario que esta toma de consciencia vaya acom­ pafiada de cierto desapego, si no la mente da vueltas sobre ella misma. Marcos el Asceta reconocia, como Maximo, una especie de estatus de "liberado viviente" en quien conseguia desidentificarse del cuerpo: "Aquel que, gracias al deseo de 10 Divino, ha llegado a superar la inclina­ cion del alma hacia el cuerpo, se libera de todo limite, aun estando dentro del cuerpo ... Para el que hace eso, la vida natural no sera ningun obstaculo para su vida en Dios, cuya naturaleza esta mas alia de toda comprension". (24) Sabios indios como Ramdas y Ma Anandamayi hablaban de su cuerpo en tercera per­ 131 sona. Maximo el Confesor expresa el mismo estado de espiritu en la primera pagina de las Cuatro Centurias sobre el amor: "Un hombre que se ata aDios con­ sidera las cos as visibles como no existen­ tes, inc1uido el propio cuerpo, como si no les perteneciese". La eomprension profunda de la paradoja del cuerpo pennite reconciliar dos inten­ clones aparentemente contradictorias de Nietzsche y Francisco de Asis. EI pri­ mero decia mas 0 menos en Zaratustra: "Existe mas sabiduria en vuestro cuerpo que en vuestra razon". Y el segundo con­ sideraba que era necesario tratar al pro­ pio cuerpo como "hennano del Asno". La sabidurla que proviene del cuerpo no puede existir sino por el hecho de que el cuerpo es consciente. Dc la misma manera, cuando el asno es bien condll­ cido, Sli energia se orienta por una eons­ ciencia. En ambos easos, la meta perseguida es esta consciencia-sabidu­ ria, y no por el cuerpo como una especie de objeto de consumacion seg(m 10 que desearia un cierto espiritu de la epoea actual. A veces, es necesario saber esco­ ger entre el espiritu de la cpoca y el espi­ ritu a secas. El sabio, como el nino, tiene el pensa­ miento muy Jigado al cuerpo. Mediante la meditacion, ha encontrado las vias directas que Ie permiten ir a la base de la cumbre. Ha despertado la kundalini, la energia interior, a la cllal volveremos en la parte consagrada al "hesicasmo y yoga", a las evocaciones indirectas de este despertar que realizan algunos Padres. Lo que crea la verdadera separa­ cion entre el cuerpo y el espiritu es la mente vital, como una especie de capa de 132 No-dualidad y A1istica Cristiana: Vedal1ta y Hesicasmo nubes entre la tierra y el cicIo. La cons­ ciencia de la persona con un nivel avan­ zado de practica de meditacion atraviesa esta capa como un rayo. La mente vital se debate sin cesar entre el miedo y el deseo; no es una cuestion de "pecado", sino de su naturaleza de oscilar entre estos dos extremos, como cl tic-tac del reJoj; pero cuando este tic-tac se para, gracias a las practicas espirituales, esta oscilacion acaba, deteniendose en su linea de cquilibrio -10 que corresponde en el caso del meditador a la conccntracion de energia en la columna vertebral, la sllshunJna- en esc momenta se unen CicIo y Tierra, el Espacio entra en fusion y el Tiempo es destruido. La psicologia de la ascesis excesiva y de la angustia en el cristianismo Hemos dado ya brevemcnte ciertos ele­ mentos de comprension de las causas de la ascesis cxccsiva. Ahora intentarcmos profundizar y extcndernos un poco mas en la problematica del sentido del sufri­ miento, euestion que se presenta en toda tradici6n espiritual, pero que en cierta manera ha sido resuelta en el eristia­ nismo. Sus respuestas han impregnado nuestro fondo cultural. Una prim era causa de la ascesis excesiva, y mas gene­ ralmente del sufrimiento auto-int1ingido, es la c6lera redirigida contra uno misl11o. Dcsde el punto de vista psieol6gico. la pulsion de suieidio y la pulsion de muerte cstan en general intimamente Jigadas. Tambicn en India, los ascetas (tapasvi-s) eran eonoeidos por su e6lera. Sus vietimas pod ian estar entre las ninfas (apsara-s) ilusorias que venian a tentar­ les y a las cuales habian sucumbido con anterioridad . .M ientras permanecian suje­ tos al deseo, 0 a su inverso que es la colera, no podian alcanzar la realizacion. EI placer que se encuentra en el sufri­ mien to es una causa mas que evidente de la ascesis excesiva, pero aplicar a ella la etiqueta de "masoquismo" no es una explicaci6n en si misma. Parece ser que una de las leyes de la medicina popular "cuanto mas amarga es la medicina, mejores son sus efectos" podemos encontrarla tambien camuflada en el plano psicoespiritual: "Cuanto mas dano hace, mejor es su beneficio", pro­ blema es que, en general, las cosas no funcionan de esta manera: esta especie de psicologia popular esta a menudo tan equivocada como su hom610ga en medi­ ema. Jacques Vigne tismo. Un experim mal, como ejemp vista: un pobre pel descargas electrica desata y recibe las un recinto del qu tando, pero curi( dado una vue\ta ra fiere quedarse den electrocutado: es cierto modo qued, propio infiemo. SI: experimento 10 l1al abandono condici helplessness). (25) La costumbre a un sufrimiento ha sid mente estudiada. \ historia tradieional estaban peseando ( una tempcstad que junto con sus cestr reeogidas por un permiti6 dormir en vez acostadas, no reposo; Ics faltaba sintieron obligadas tas de pescado qtH orilla, para poder d euenta el mismo ti que sea neeesario r, interpretar estas Cll monje: "Cuando r me siento abandon< La propension al sufrimiento puede tomar proporciones de delirio dc conde­ naei6n eterna, como en el caso de Jean­ Joseph Surin, el capellan de las hermanas de Loudun antes de la Revoluei6n. Es un hccho ciasico en psieopatologia, sobre­ todo en fucrtes deprcsiones (mclaneo­ lias), pero se prescnta en formas atenuadas: aun sin sentirse eompleta­ mente eondenado, uno tiene la impresion de estar constantemente en el infiemo y de estar obligado a pcrmaneeer en 61. EI monje toma entonces 10 que era un pasaje difieil de su practica por una nonna. Esta complaeencia de algunos en sentirse en el infiemo podria ser califi­ cada como anti-cxtasis. La voluntad de aSI Una explicaciQn simple de esta propen­ sion a apegarse al sufrimiento como tal podria ser la inercia, 10 que se eonoce como tamas en psicologia india, 0 el "eondicionamiento simple" en conduc- La palabra "aseetis "askesis", que sigl sentido de un ejerc estar que se siente intensiva de eual I'cdal1ta y Hesicasmo inverso que es la 1zar la realizaci6n. Jentra en el sufri­ las que evidente de :ro aplicar a ella la ismo" no es una na. Pareee ser que I medicina popular es la medicina, :fectos" podemos camuflada en el "Cuanto mas dana eneficio". El pro­ leral, las cosas no era: esta especie de ,ta a menu do tan IOm610ga en mcdi­ ;ufrimiento puede :: delirio de conde­ :n el caso de Jean­ .an de las hcrmanas Revoluci6n. Es un :opatologia, sobre­ 'esiones (melanco­ senta en fonnas sentirse completa­ ) tiene la imprcsi6n He en el infiemo y :nnanecer en el. EI :s 10 que era un practica por una :ncia de algunos en ) podria ser califi­ s. )Ie de esta propen­ frimiento como tal 10 que se conoce ologia india, 0 el mple" en conduc- 133 Jacques Vigl1e tismo. Un experimento de psicologia ani­ mal, como ejemplo de este punto de vista: un pobre perro esta atado y recibe deseargas elcetricas. Seguidamente, se Ie desata y recibe las mismas descargas en un recinto del que puede escapar sal­ tando, pero curiosamente, tras haber dado una vuelta nipida por la jaula, pre­ fiere quedarse dentro gimiendo que ser electrocutado: es mas "c6modo" en cierto modo quedarse d6cilmente en el propio infiemo. Seligman, autor de este experimento 10 llama el "sentimiento de abandono condicionado" (conditioned helplesslless). (25) La costumbre a un estado agradable 0 al sufrimiento ha sido una cucdti6n larga­ mente cstudiada. Vivekananda cuenta la historia tradicional de unas l11ujeres que estaban pescando cuando les sorprendi6 una tempestad que les arroj6 a la costa junto con sus cestas de pescado. Fueron recogidas por un hombre rico que les permiti6 dormir en su rosaleda. Pero una vez acostadas, no conseguian encontrar reposo; les faltaba algo. Finalmente, se sintieron obligadas a ir a buscar sus ces­ tas de pescado que habian dejado en la orilla, para poder dormirse al fin ... Rumi cuenta el mismo tipo de historia. Puede que sea necesario recordar todo esto para interpretar estas curiosas palabras de un monje: "Cuando no tengo tentaciones, me siento abandonado por Dios". La voluntad de ascetismo La palabra "ascetismo" viene del griego "askesis'·. que significa ejercicio. en el sentido de un ejerciciLl atktlc() [I >,;c::­ esrar que ~e :,Icnte JU~J:~:c ~;:~.: :'~.:':::':.: intcn:'l\ a Jc :~h:':"':~4'''-' -.:;,.':-' momentos siguientes, esta relacionado con la producci6n de endorfinas, que intervienen tambien en ciertos tipos de cxtasis. En cuanto al joven, favorece la producei6n de la adrenal ina destinada a compensar la bajada de azucar en la san­ gre. Esta adrenal ina aumenta tambien en cl caso de personas que escuchan la radio o musica; ella explica el porque se sien­ ten deprimidos 0 tristes cuando se encuentran extraordinariamente en un ambiente silencioso. La adrenalina es uno de los factores que explican tambien el dinamismo parad6jico de las adoles­ centes que sufren anorexia nerviosa, 10 cual es peligroso, ya que encubre el debi­ litamiento del cuerpo. La privaclOn de agua (nazareat) que parecia tan importante en los Padres es posible que fuese originada por la volun­ tad de enrarecer las micciones, teniendo el deseo de orinar bastante cn comun con el deseo sexual. Podia estar relacionada igualmente, en los habitantes del desierto, con una especie de entrena­ miento de supervivencia, ana logo a las practicas de tou-mo -practicas y6guicas de recalentamiento del cuerpo de los Tibetanos que viven todo el inviemo con un frio riguroso. La privaci6n de sueno provoca una afluencia de imagenes oniri­ cas durante la vigilia, favoreciendo entonces 10 que podria llamarse "visiones baratas". Aun asi, para cualquiera que sepa meditar, esta afluencia de imagenes puede acelerar el proceso de purificaci6n del inconsciente, naturalmente si no se duenne durante la practica... Por otra parte. las erecciones reflejas que se pro­ Je.:cn fisiol6gicamente durante el sueno ::C'~'::: :C:1Jcn(l:1 :1 r~l'JU(l~~C :.!r:lr10:' .. .. ...:. ~2:-.~. 134 No-dualidad y Mistiea Cristialla: Vedanta y Hesicasmo de visiones, 10 que supone un problema para el monje, Dentro de un contexto cristiano, puede facilmente interpretar estas visiones como ataques demoniacos. Todos estos hechos deben llevamos a considerar con prudencia las propuestas de retiros intensivos con privaciones importantes de sueno y que proliferan actualmente, al menos para personas fra­ giles psiquicamente. Estan totalmente contraindicadas para aquellas personas con antecedentes de alucinaciones. (26) Otro factor que favorece la ascesis exce­ siva es la emulaci6n. Aun cuando los monjes vivian relativamente aislados, oian hablar a los visitantes sobre las proezas asceticas de algunos frailes, y querian imi­ tarles con el fin de obtener ell os tambien su cop a en los grandes tomeos de la morti­ ficaci6n ... Si la imitaci6n era un estimulo potente, mas aun en los Padres. Los mon­ jes tenian una especie de "complejo del deseendiente" con relaeion a sus predeee­ sores 0 fundadores del monaquismo, pre­ suntamente mueho mejores que ellos. Era en ciertu manera una espeeie de nostalgia de los origenes. En euanto a los primeros Padres, estos sufrian visiblemente del mismo complejo eon relaei6n a los marti­ res que les habian preeedido hacia poco (el inicio del monaquismo eorresponde al fin de las grandes persecueiones), con relaeion a los apostoles tam bien martiri­ zados y sobretodo con relaci6n al mismo Jesus muerto en la cruz. Esta crucifixion representa un trauma de nacimiento inelu­ dible. San Pablo eomplieo las eosas dieiendo que el martirio de Cristo no debia ser en vano. Sin embargo, el riesgo que se presenta al querer justificar dema­ siado 0 valorar un sufrimiento pasado, es el de penetrar alll1 mas en e1. Los martires, asi como sus sepulcros, eran investidos por el pueblo de poderes milagrosos. Habiendose sacrificado, se habian convertido en sagrados. Los mon­ jes que partian hacia el desierto no esta­ ban exentos de esta voluntad de poder ligado a un estatus sagrado. Y se conver­ tian en una especie de chivo expiatorio enviado al desierto cargado con los peca­ dos del pueblo, y eminentemente en por­ tadores de poder. Los lugares desolados estan habitados por demonios (Lev 16,8) asociados por los Padres a los dioses paganos. EI Padre de los monjes, San Antonio, es descrito por San Atanasio como envuelto durante sus vigilias noc­ tumas por las bestias feroces del desierto. £1 les decia: ""Si habeis recibido poder contra mi (de Dios), estoy preparado para dejarme devorar; si habeis sido enviados por los demonios, no espercis mas, ireti­ raros!", Ante estas palabras de Antonio, las fieras hUlan, como perseguidas por el latigo de su discurso"(27). La critiea espiritual que se puede expresar en eon­ tra del saerificio, es que representa una aeci6n interesada, realizada para ganar eualquier eosa -el merito, 0, en otro plano, el poder- mientras que el verda­ dero amor, 0 el verdadero conoeimiento, son gratuitos. A prop6sito de la relaei6n entre sagrado y sacrifieio, podemos releer los textos de Rene Girard, asi eomo de Nietzsche, quien hace una eri­ tiea feroz de la noci6n eristiana de saeri­ fieio, y por fin de Eugen Drc\vennan quien ha dado un analisis conciso desde el punta de vista psicoI6gieo(28). Austeridades y poderes En India, la relaci6n entre austeridades (tapas) y poderes (siddhis) es clara, pero Jacques Vigne estos ultimos se des los a la liberaciOn. I pero buscaban sin el numero de ellos for Isaac el Sirio decia: negada la grandeza sido tambien neg, carisma. En ningu gran carisma por pe Las ascesis extraorc de curiosos, como I Simeon, que pen sobre su columna. funciona aun en durante las Kumbh. nes de peregrinos CI del Ganges para en de miles de monje: variados, siendo al dos por el curios( ascetismos. Las aU! jes cristianos Ies co cos capacitandoles ascetas paganos. p( relaei6n a este tem, los monjes del dcs pues de haberse d haber matado a UI nas, este sinti6 un de sus pee ados, e madamente asceti, Marpa. Desarroll6 tian expulsar los e~ la antigua religi61 por el Tibet en es, sabiduria del nue\'; La evoeaei6n de I, los monjes del des Ienta; aunque Anti su vida a desarrolla al pr6jimo, manto euenta de que alg I ra: Vedanta y Hesicasmo Jacques Viglle Jmo sus sepulcros, I pueblo de poderes lose sacrificado, se sagrados. Los mon­ el desierto no esta­ voluntad de poder grado. Y se conver­ de chivo expiatorio lrgado con los peca­ inentemente en por­ s lugares desolados emonios (Lev 16,8) adres a los dioses e los monjes, San por San Atanasio te sus vigilias noc­ feroces del desierto. jeis recibido poder stoy preparado para lbeis sido enviados espercis mas, ireti­ llabras de Antonio, . perseguidas por el 0"(27). La critica e expresar en con­ i ue representa una llizada para ganar 1crito, 0, en otro ltras que el verda­ iero conocimiento, )sito de la relaci6n crificio, podemos Rene Girard, as) uien hace una cricristiana de sacri­ :ugen Drewerman isis conciso desde 16gico(28). estos ultimos se describen como obstacu­ los a la liberaci6n. Los monjes 10 sabian, pero bus caban sin embargo para un cierto numero de ellos fonnas sutiles de poder. Isaac el Sirlo decia: "As! como Ie ha sido negada la grandcza de la tentaci6n, Ie ha sido tambi6n ncgada la grandeza del carisma. En ningun caso Dios otorga gran carisma por pequena tentaci6n"(29). Las ascesis extraordinarias atraian hordas de curiosos, como por ejemplo la de San Sime6n, que permanecia en silencio sobre su columna. Es una maxima que funciona aun en India, en particular durante las KlII1!bha-Mela, donde l11illo­ nes de peregrinos confluyen en las orillas del Ganges para encontrarse con dccenas de miles de monjes y aseetas diversos y variados, siendo automaticamcntc atrai­ dos por cl curioso espectaeulo de sus ascetismos. Las austeridades dc los mon­ jes cristianos les conferian podcres magi­ cos capacitandolcs para luchar contra los ascetas paganos. Podria estableeerse, con relaci6n a este tema, un paralelismo entre los monjes del desierto y Milarepa: des­ pues de haberse dedieado a la magia y haber matado a una treintena de perso­ nas, este sinti6 un dia vivamente el peso de sus pecados, e inicio una vida extre­ madamente ascctica, bajo la tutela de Marpa. Desarrollo poderes que Ie pem1i­ tian expulsar los espiritus y los magos de la antigua religion Bon que pululaban por el Tibet en esa 6poca, y propagar la sabiduria del nuevo budismo. es entre austeridadcs 'his) es clara, pero La evocacion de los herejes producia en los monjes del desierto una reaccion vio­ lenta; aunque Antonio habia consagrado su vida a desarrollar la humildad y el amor al projimo, mont6 en colera cuando se dio euenta de que algunos de sus visitantes 135 eran partidarios de Arius: "Habiendo juz­ gado y conocido su impiedad, los expuls6 de la montana, dicicndoles que sus discur­ sos eran peor que el veneno de las serpien­ tes"(30). Atanasio, biografo de Antonio y obispo de Alejandria guerreando contra los pagan os y los herejes, finaliza la vida del santo anacoreta recomcndando su lec­ tura a los Helenos para "probarles que sus dioses no son dioses, sino demonios, y que tienen persiguicndoles los tal ones a los cristianos que creen en Dios piadosa­ mente, para expulsarles por tramposos y conuptorcs de los hombres"(3 I). Aun teniendo en cuenta el espiritu de la epoca, esta perorata final es como minimo curiosa, teniendo en cuenta que se trata de la conclusion de la vida de un santo que paso su tiempo dedicado a predicar el amor y la humildad. Este ambiente de lucha casi maniqueista entre la ortodoxia por un lado y los paganos, judios y herejes por el otro es de gran relevancia en el uni­ verso de sufrimientos de los Padres. Repercute en su mente bajo la fonna de combate ineludible con los demonios del tipo "yo 0 ellos", y de dualidad insupera­ ble entre el Bien y el Mal. Para ellos est a situacion era 10 natural: "Los Padres vinieron un dia a Alejandria lIamados por Teofilo el Arzobispo con el fin de orar y destruir los templos paga­ nos"(32). En decto, consiguieron elimi­ nar a los pagan os por la persuasion 0 por la fuerza, pero pagaron el precio de su maniqueismo en su cuerpo y en su espi­ ritu bajo la fonna de divisiones, sufri­ mientos sin soluci6n. EI mismo San Pablo, consumido por el celo misionero, se quejaba de los sufrimientos que tuvo que soportar, de la astilla clavada en sus cames y del angel de Satin encargado de 136 No-dualidady Misliea Crislial1a: Vedanta y Hesieasmo mantenerla (2 Cor XII 7). Por el contra­ rio, San Juan gozo de un retiro apacible en la isla de Patmos, y no habla de manera especial en sus epistolas del sufrimiento que vivio por Cristo. Su experiencia parece mas cercana a la de los sabios de la India que no parten con una mision con creta, sino que esperan pacientemente a que los buscadores espi­ rituales los encuentren. Segun palabras de los Vedas: "Cuando la flor de loto se abre, las abejas acuden por si mismas", Ascesis y soledad La vida solitaria intensitica los fenomenos mentales; actUa como una "caja de reso­ nancia", tal y como me decia el maestro de novicios de la Gran C31iuja que habia ido a visitar. AI cabo de cielio tiempo sobreviene un verdadero despertar de 10 que en la tra­ dieion hindu es Hamado "Ia kundalini". EI cspiritu del monje que hasta ese momento habia pennanecido en un estado mas 0 menos apacible, puede atravesar toda suerte de deseos e impulsos violcntos. Den­ tro de un eontexto dualista, este despertar sc interpreta generalmente eomo un ataque de los demonios. De heeho, podemos aprender a canalizar estas energias, y a esto es a 10 que ayudan el yoga y Ja meditaeion. agostamiento de la aseesis del desierto es en si mismo un reflejo de la aridez del clima. En este sentido, pod ria estableeerse la misma relaeion eausa-efecto para Rusia que, mareada tambien por un clima rudo, posee uno de los escenarios de explosion de exeesos ascetieos mas importantes de la eristiandad. crea ejercicios asceticos cada vez mas extranos, que consisten entre otras cosas en imaginarse todo 10 que los demonios van a poder inventar 0 calcular en contra suya... Para los que tienen ya de por sl una tenden­ cia obsesiva, el tiempo Iibre intensifica los sintomas. La ascesis se convierte en un fin en si misma, 10 que se llama "una obse­ sion" en ellenguaje psicologico, 0 "idolo" en el religioso. La lucha contra los demo­ nios proporciona cada vez mas una excita­ cion que pennite contrarrestar la depresion de los monjes; cuando observamos a ninos solos y ociosos, los vemos a menudo jugar a pelearse contra enemigos imaginarios y parccen encontrar en ello una gran diver­ sion. No digo que este paralelismo expli­ que lodos los fenomenos de los demonios, pero va mucho mas lejos de 10 que parece a simple vista. No cs muy COml\l1 que un Padre sugiera que los conflictos interiores sean del orden psicologico; mas bien parecen en su mayoria partidarios de la interpreta­ cion demonologica. Este "maniqueismo mitigado" que ya habiamos tratado ante­ riormente esta muy lejos del coneepto de India. Incluso el dualismo entre 10 divino y 10 humane esta tan atenuado, que la misma palabra "atman" significa a la vez el alma individual y el alma universal, siendo el primer sentido reflexivo "sl mismo". Ademas, el Yoga no ve en los pensamientos mas que torbelIinos (vrit­ tis) en esta agua que es el Absoluto: cuando el torbellino cesa, no queda mas que el Absoluto. La angustia y Ia gracia Otra de las eausas del epaseesis del solita­ rio es simplemente el vacio que llena su tiempo. Para ocupar su mente, el monje Si vamos a la raiz de las cosas, la noei6n misma de dualidad implica angustia. La Jacques Vigne Taittiriya Upanishad dad, esta csencia Cuando nos estable 10 invisible, desprov nido, sin base, ento realmente alcanzar I pero si hacemos la cia, empezamos a concepcion biblica "cavidad" en cI Un precipicio entre SUS1 tancia divina; flanq1 puente levadizo de en cuando bajado, ( elevado. Esta dual especie de proyecc metafisica de la s pecado original. La creencia en 10 su de la persona humar que hace la ascesis ( que la oriental. En e encuentra ante un n una especie de dol ansiedad: en eI fon( en 10 substancial dl eliminar completmr 10 Divino. La graci, mente bueno pw empresa, pero acorr la ausencia de gra cual se nos escapan deeirse que la SOIT absurdo, 10 que ( angustia en los misl La no creeneia en eipa de fonna imI del cristiano. Debl a que existe un 11l Pascal, sino lambi alIa particular SCI 1CI: Vedanta y Hesicasmo icos cada vez mas n entre otras eosas en e los demonios van a uJar en contra suya... de por SI lIna tend en­ o libre intensifica los e convierte en un fin se llama "una obse­ sicologico, 0 "idolo" 'ha contra los demo­ vez mas una excita­ 'arrestar la depresion observamos a ninos mos a menudo jugar nigos imaginalios y clio lIna gran diver­ e paralelismo expli­ os de los demonios, )S de 10 que parece a e un Padre sugiera oteriores sean del is bien parecen en s de la interpreta­ ~ste "maniqueismo amos tratado ante­ os del concepto de ;mo entre 10 divino atenuado, que la " significa a la vez el alma universal, tido reflexivo "si {oga no ve en los ~ torbellinos (vrit­ : es el Absoluto: :sa, no queda mas a s cosas, la noci6n )lica angustia. La Jacques Vigue Taittiriya Upanishad dice (2-7): "En ver­ dad, est a esencia causa la felicidad. Cuando nos establecemos sin miedo en 10 invisible, desprovisto de fom1a, indefi­ nido, sin base, entonces hemos logrado real mente alcanzar la ausencia de miedo; pero si haeemos la mas minima diferen­ cia, empezamos a tcner miedo". En la concepci6n biblica no existe s6lo una "cavidad" en el Uno, sino una falla, un precipicio entre sustancia humana y sus­ tancia divina; flanqueado tan solo por el puente levadizo de la gracia, de cuando en cuando bajado, de cuando en cuando elevado. Esta duaJidad representa una especie de proyecci6n, de consagraci6n metaflsica de la separacion debida al pecado original. La creencia en 10 substancial del cuerpo y de la persona humana posiblemente sea 10 que hace la ascesis cristiana mas laboriosa que la oriental. En efecto, el practicante se cncuentra ante un mensaje contradictorio, una especie de doble lazo generador de ansiedad: en cI fondo, se Ie pide que crea en 10 substancial de un ego que hay que eliminar completamentc para dejar lugar a 10 Divino. La gracia de un Dios completa­ mente bueno puede ayudar en esta empresa, pero acompanada de su sombra ­ la ausencia de gracia, los motivos de la cual se nos escapan. En este sentido, puede decirse que la sombra de la gracia es el absurdo, 10 que origina este fonda de angustia en los misticos dualistas. La 110 creencia en la reencamaci6n parti­ cipa de fonna importante en la angustia del cristiano. Debe apostar no solamente a que existe un mas alla a la manera de Pascal, sin6 tambien a creer que su mas alla particular sera el paraiso y no el 137 infiemo. Si algun pequeno picaro se entretuviese en hacer un cideulo de pro­ babilidades, encontraria que tan s610 existe un 25% de posibilidades de que este sistema funcione ... Un viejo obispo decia sonriendo a una de mis amistades: "Comprendo mejor la reencamaci6n de los Orientales a mi edad: es cierto que una sola vida para alcanzar la perfecci6n es bien poco". Los eremitas taoistas y budistas tal y como los describe por ejemplo Michel Jourdan en La vida del eremita (32) pareeian practicar un asce­ tismo mas integrado en la naturalcza. Buscaban la am10nia con la ley natural y la conjunci6n de los contrarios. Este ultimo punto parecia ausente cruelmente en los ascetas del desierto. He leido la Transmision de fa pequeiia lampara, el texto de base del budismo ch'an. No habla para nada de lagrimas ni de arre­ pentimiento. Los maestros son rudos, pero las historias que encontramos en este libro estan llenas de humor y sobre­ pasan mas a menudo que en Occidente la simple moralizaci6n para dar una ense­ nanza esencial de manera imaginativa. En cuanto a los hindues, S1l falta de dua­ Iismo cultural supuso un gran problema para los misioneros cristianos: estos no sabian a que carta jugar para provocar el "arrepentimiento" y el "retorno al Dios verdadero". Los hindues simplemente no percibian haber sido separado de este. La dureza de la ascesis del desierto se suavi­ zaba por una relaci6n profunda con un Anciano. Sin embargo, la vida en comu­ nidad provoc6 la perdida de prioridad de esta relacion. Los monjes aprendian de uno y de otro, 10 que suponia un factor de dispersion en su practica. El concepto de obediencia a un maestro espiritual des­ No-dt/alidad)' lvIistica Cristiana: Vedanta), Hesicasl110 138 provisto de ego fue reemplazado por la noci6n de disciplina bajo la fentla de una administraci6n mucho mas pesada puesto que se suponia de derecho divino. Una de dos, 0 abandonar el ego en manos de alguien sin la suficiente eficiencia espiri­ tual, 0 abandonarlo en manos de una ins­ tituci6n que, en tanto que tal, no puede mas que poseer un fuerte ego, 10 cual no es solo mucho menos eficaz, sino mucho mas arriesgado. (33) Un ultimo factor pudo eontribuir a eon­ vertir en laborioso el ascetismo de los monjes del desierto: la cnsefianza cris­ tiana segun la eual debian buscar la per­ feeci6n estaba basada en cl amor, pero estaban bien lejos de cualquier presencia femenina, can una vida en comunidad muy redueida si seguian la hesiea, a una relaci6n mas bien diluida can el maestro espiritual si vivian en una gran comuni­ dad. Ademas, el culto a la Madre de Dios, que suavizb la austeridad del monaquismo posterior, no estaba aun desarrollado. Habia, pues, no pocos limi­ tes a sus posibilidades de expresar el amor, y aun en esa epoea no tenian los reeursos de la practica de la via del cono­ cimiento que, por ejemplo en India, corresponde al cenit de la devoci6n: de ahi la contradicci6n y muy a menudo el sufrimiento. Para un Padre como Evagre Ie Pontique estaba muy claro que la devoci6n culmina en el conocimiento, pero no parece que el conjunto de monjes siguiera su ejemplo. Como conclusi6n a est a parte, aun sin ver claramente la transici6n del amor al eonoellmento, espero que hayamos aprendido la necesidad de pasar del miedo -motivo principal dc los cxcesos asceticos- al amor. (,No dijo San Juan, el discipulo amado de Jesus: "No hay miedo en el amor, al contrario, el pcr­ fecto amor alcja el miedo". (I In IV, 18)? Parte Ill. Una ascesis para nuestros dias Sufrimiento, sexualidad, espiritualidad EI Buddha decia: "Existe un camino mas alia del sufrimiento". Habia dado en el clavo: la finalidad de una disciplina espi­ ritual no es afiadir sufrimiento, sino "res­ catamos" de eJ. Cada via tiene su especificidad: en la devoci6n, se busca debilitar 10 maximo posible el ego ante 10 Divino; en la via del conocimiento, la identificaci6n directa con El. EI riesgo de la devoci6n es la dependencia y el debili­ tamicnto; el de la via del conoeimiento, la arroganeia. En ambos easos, nos con­ vertimos en 10 que meditamos: en este sentido, el reeordar una y otra vez los pee ados del pasado no puede haeer mas que provocar una recaida. Es necesario percatarse que la culpabilidad es a menu do soportada por cl goee que pro­ voea el hecho de pensar una y otra vez en 10 bien que se ha pasado cometiendo tal 0 eual des liz. En cuanto a los demonios, se trata de fonnas sutiles que no tienen ni mas ni men os realidad que nuestra propia mente. Si se les llama bajo el pretexto de combatirlos, aeudiran de veras. Sin embargo, es verdad que esta pnietiea podra estimular la energia de los monjes de temperamento mas bien eombativo. La meditaei6n en el sufrimiento no tiene demasiado interes. Un jesuita como el Jacques Vigne Padre Kadowaki que Zen y la Biblia, 10 rec( Una cuesti6n candenl existido es la de la rei sexual y la evoluei6n t aquellos que tienen i espiritual pueden se golpe (nitya brahmacl. partir de cierta edad a e irse lejos con su eSI para realizar praetiea intensas. Parece ser rabinos del Judaismo Los oecidentales a m sueno de que existen dades en las que la se: pletamente Jibre, per, sociedad de estas ca existir de manera ( durante algitn tiempo en un pais musulman noce en absoluto el v. razones religiosas. A cotidianos cstan satu pureza y control de religi6n se apoya pi para penctrar profun, ritu de los fieles. H( un antrop610go que \ del ano en pueblos d dad, tambien alli, e por la soeiedad; los por sus Padres, come Ademas de la neces de una cierta discipl el nexo entre relig: toma de conseieneia esta ultima se encuel mente. De modo es decir que un domir sexualidad, mediant I'edanta y Hesicasmo r, no estaba a1m les, no pocos limi­ ;:s de expresar el )oca no ten ian los de la via del cono­ jemplo en India, Ie la devoei6n: de muy a menudo el adre como Evagre auy claro quc la el eonocimiento, onjunto de monjes a parte, mIn sin ver i6n del amor a1 ) que hayamos ad de pasar del ,al de los exeesos ) dijo San Juan, cl Jesus: "No hay contrario, el per­ do". (I In IV, 18)? puede hacer mas tida. Es necesario ulpabilidad es a el goce que pro­ r una y otra vez en :-J cometiendo tal 0 1 los demonios, se que no tienen ni iue nuestra propia lajo el pretexto de de veras, Sin lue esta practica gia de los monjes bien combativo. frimiento no tiene jesuita como eJ Jacques Vigne Padre Kadowaki que ha escrito sobre el Zen y la Biblia, 10 reconoce. (1) Una cuesti6n candente que siempre ha existido es la de la relaci6n entre la vida sexual y la evoluci6n espiritual. En India, aquellos que tienen intercs por la vida espiritual pueden ser renunciantes de golpe (nitya brahmacharis), 0 easarse y a partir de cierta edad aIcjarse de sus hijos e irse lejos eon su esposa (vanaprashta) para realizar pnicticas espirituaIcs mas intensas. Parece ser que los antiguos rabinos del Judaismo hacian 10 mismo. Los occidentales a menudo viven con el sueno de que existen en otra parte socic­ dadcs en las que la sexualidad seria com­ pletamente librc, pero no creo que una sociedad de estas caracteristicas pueda cxistir de mancra estabIc. He vivido durante algun tiempo con un grupo sufi en un pais musuhmln, dondc no se reco­ noce cn absoluto el valor del celibato por razoncs religiosas. Aun aS1, los rituales cotidianos estan saturados de la idea de pureza y control de la sexualidad, y la religion se apoya pesadamente en ella para penetrar profundamente en el espi­ ritu de los fieles, He podido hablar con un antrop610go que vive una bucna parte del ano en pueblos de China. La sexuali­ dad, tambien alli, esta muy controlada por la sociedad; los ninos son casados por sus Padrcs, como en India, Ademas de la necesidad social evidente de una cierta disciplina sexual, existe en el nexo entre religion y sexualidad la toma de consciencia de que las ralces de est a ultima se encuentran en la base de la mente. De modo esquematico se puede decir que un dominio consciente de la sexualidad, mediante la meditacion y no 139 por el rechazo, es proporcional a la capa­ cidad de interiorizacion. Evidentemente, algunos como Drewermann decian sus­ taneialmente que la castidad a largo plazo no es posible actualmente en Occi­ dente. (2) Pienso que tiene razon en su analisis de las multiples maneras por las que cl sistema eclesiastieo recupera la nocion de castidad para auto-consoli­ darse. Estimo, tambien como el, que los saeerdotes deberian tener la posibilidad de casarse, como en el protestantismo, la ortodoxia y otras rcligiones. Como con­ trapartida, pienso, contrariamente a Drewennan, que algunos seres -en gene­ ral monjes- pueden real mente transmutar la energia sexual en energia espiritual y realizar la union de 10 masculino y 10 femooino en si mismos. Si lIcgamos a conoccr un bienestar interior dcsprovisto de toda connotacion erotica, significa que estamos muy proximos a una felici­ dad completamente independiente y por 10 tanto perfectamente estable. No digo que esta via sea facil, pero puede apren­ derse viviendo cerca de un maestro espi­ ritual que haya logrado cl exito en esta via, mejor que por los libros, Los hindues otorgan una gran importancia a la casti­ dad para obtener una subida estable de la kundalini (ojhas). Es interesante resaltar que el nombre que la tradicion griega da a la continencia sexual es enkrateeia, es decir, la "fuerza interior" -un termina finalmente muy pr6ximo a las palabras "energia" 0 "entusiasmo", siendo el sig­ nificado de este ultimo Dios en el inte­ rior. Comprendo la actitud de terapeuta de Drewermann quien, viendo a los pacientes acorralados en un celibato que no les corresponde en absoluto, les dice: 140 No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo "Olsese". Pero a veces, la fascinacion del cambio representa tambien una hulda. Cuando yo era terapeuta, un gran numero de mis pacientes se encontraban centrados en sus problemas de pareja. Es verdad que mi primera reaccion interior era la de que­ rer decirles. "Deje correr esta relacion y viva solo: vera usted como no va a morirse... ". Sin embargo, la mejor solu­ cion es, en la mayo ria de los casos, la de intentar verdaderamente plantar cara a los problemas alii donde se este y segun la vocacion que cada uno/a haya escogido. Por otro lado, Drewennann pone por las nubes la aproximacion psicoanalitica; es evidcnte por ello quc no ha vivido como he hecho yo en un medio "psico", donde las batallas por cl poder y las "capillitas" no tie­ nen nada que el1vidiar al sistema eclesias­ tico. Sin embargo, parcce en tcoria abicrto a Oriente: no habla mucho de las diversas tcc­ nicas psicosomaticas de meditaci6n como medio de exp]orar la mente en la practica. Aun asi, no parece que para aquellos c1eri­ gos que no csten perturbados, el retorno a estas tccnicas sea mas indicado que el mismo psicoanalisis. Este ultimo estil, en general, saturado de prejuicios materialistas mientras que la meditacion tradicional comparte 10 esencial con el cristianismo, es decir, el eentrarse cn la busqueda de 10 Absoluto. Drewennann, eomo a menudo hacen los terapeutas, ve las cosas a traves de las "gafas" de sus clientes, es decir, curas y religiosas que tienen problemas. Los mon­ jes que tienen exito en su vida espiritual no tienen ningun motivo para consultarle. Sobre la polucion mental i',Que puede decirse de la ascesis en nues­ tro mundo actual? No soy ningun maes­ tro espiritual, por 10 que reenvio a cada uno a la via y al maestro que sigan. EI unico apunte que me gustaria hacer en este punto, habiendo hablado de la espiri­ tualidad en el desierto, es de orden psico­ logico. Antes de sonar en partir a un verdadero desierto en busca de esta clase de experiencias, estaria bien aprender a filtrar el ruido que nos viene del exterior, en particular el de las infom1aciones sen­ sacionalistas de los medios, donde existe una polucion mental considerable; espero que esta nocion de polucion mental emerja muy proximamente en cl publico, de la mi sma manera que han aparccido noticias sobre la polucion sonora 0 la destruccion de la capa de ozono. Tam­ poco creo que sea muy oportuno hacer de nuestro interior un dcsierto. Como revan­ clm, podemos convertirlo en un "parque natural" don de nuestra verdadera natura­ leza pueda estar protegida y desarrollarse a sl misma al abrigo del desorden de los elementos extemos. No hay que creer que la tentacion de la excesiva ascesis sea algo pertencciente al pasado. Aquellos que hayan pas ado por el cstadio de la "mistica hippie" -haz el amor y no la guerra- y que han compren­ dido que era necesaria mas intensidad en la vida espiritual, pueden sentirse tenta­ dos: para unos, sera como una repeticion de ayunos prolongados en base ajuslifica­ ciones dieteticas; para otros, sera una praetica extrema de hath a-yoga, camu­ flando un deseo ineonsciente de castigar el cuerpo por ser 10 que es. En cuanto a los monjes ortodoxos, la tentacion de la espascesis esta aun presente. Pude danne cuenta, en un Paterikoll (recopilacion de pensamientos 0 acciones de Padres falle­ cidos en una epoca relativamente reciente) Jacques Viglle de 1985 en el Mon este genero: un r ocho dias de pie si otro fue encontrad pues de un ayuno d cero fue altament{ pasado su vida hac] mente mas alia de naturaleza"(4} Y fi] de otro viejo monj paso cincuenta y se recinto de su mona! EI monte santo d estado exento de su historia reeien siglo XX, cierto nu ron la intuicion ml Nombre formaban una idea muy con Nombre) y Ilomi I Dios) son solo une monjes Ilamados 0 a las autoridades ortodoxa, que inn ron al Zar, el cual guerra para dar ca cos de Athos. (5) : la pelea de los OJ "integrodoxos" y ( dad de la artilleria logia mistica ... El principal prol ascesis es que pu de la vida espirit Recientementc l11i burgo, donde pud el monasterio de la ciudad. En cier vcr renacer una \'J setenta anos embargo, podem >'edallta y Hesicasmo Jacques Viglle e reenvio a cada tro que sigan, EI ~ustaria hacer en )Iado de la espiri­ :s de orden psico­ r en partir a un lsca de est a cJasc bien aprender a iiene del exterior, .formaciones sen­ lios, donde existe lsiderabJe; espero polueion mental :nte en el publico, ue han aparecido :ion sonora 0 Ja de ozono. Tam­ ;>portuno hacer de ~rto. Como rev an­ '10 en un "parque verdadera natura­ da y desarrollarse :1 desorden de los de 1985 en el Monte Athos, de hechos de este genero: un monje estuvo rezando ocho dias de pic sin dormir ni comer (3); otro fue encontrado medio muerto des­ pues de un ayuno de seis semanas; un ter­ cero fue altamente elogiado por "haber pasado su vida haeiendose dano continua­ mente m<is alia de las posibilidades de la naturalcza"( 4) Y finalmente pudo deeirse de otro viejo monje, tras su muel1e, que paso eincuenta y seis anos sin franquear el recinto de su monasterio. la tentacion de la :0 perteneciente al lyan pasado por el hippie" -haz el que han compren­ mas intensidad en len sentirse tenta­ mo una repetici6n en base a justifica­ l otros, sera una tatha-yoga, camu­ ;ciente de castigar es. En cuanto a los tentacion de la sente. Pude darme II (recopilacion de ;s de Padres falle­ ivamente reciente) EI monte santo de Athos tampoco ha estado exento de pasiones religiosas en su historia rcciente. A prineipios del siglo XX, cierto numero de monjes tuvie­ ron la intuieion mistiea de que Jesus y su Nombre formaban una unidad. Esta es una idea muy eomun en India: nan! (el Nombre) y I1Qmi (EI que es nombrado, Dios) son solo uno. La doetrina de estos monjcs lIamados onomatodoxos disgusto a las autoridades eentrales de la [glesia ortodoxa, que inmediatamente infonna­ ron al Zar, el eual envi6 a Ia marina de guerra para dar caza a los nuevos misti­ cos de Athos. (5) Se podria Hamar a esto la pelea de los onomatodoxos y de los "integrodoxos" y elucubrar sobre la utili­ dad de la artilleria de marina para la teo­ logia mistiea ... EI principal problema de la excesiva ascesis es que puede asquear a la gente de la vida espiritual demasiado pronto. Recientemente me traslade a San Peters­ burgo, donde pude asistir a un oficio en el monasterio de mujeres mas grande de la ciudad. En cierto sentido, era hermoso ver renacer una vida religiosa despues de setenta anos de persecuci6n. Sin embargo, podemos preguntamos si el 141 aseetismo severo que emanaba de esas mujeres de negro hara mucho por reto­ mar el interes de las masas rusas por la vida espiritual. A propos ito de la fonna en que los excesos de la ascesis pucden descalificar la vida monastiea, podriamos retroeeder en el tiempo para trasladarnos a principios del siglo V en el monasterio de Santa Catalina del Sinai. Esta institu­ cion pudo subsistir en un medio musul­ man gracias a una carta del profeta Mohamed en persona agradeciendo a los monjes c\ haberle alojado cuando fue perseguido. Si esta carta no es un bulo, podemos imaginamos eI encuentro del futuro fundador del Islam con su antl­ trion, que I11UY bien podia haber sido Jean Climaque 0 su maestro Martyrius. Habiendo visto aqui la austeridad de sus ensenanzas, uno puede preguntarsc si una vida tan severa no intluyo en Moha­ med en su prohibicion global de la vida monastica para sus discipulos, y por COI1­ siguiente para to do c\ Islam. El fin de 1a pnictica espiritual es la felici­ dad; esta debe ser tambien su motor. Los Padres hacen referencia a una alquimia de las emociones analoga a la practicada por los tibetanos que busca transformar los venenos en medicinas. Segun los Padres, debemos intentar transformar 1a eolera en caridad y el placer en felicidad. Isaac eI Sirio afirmaba: "La humildad puede provenir del miedo a Dios, de su amor 0 de la felicidad". (6) Esta felicidad es sin duda 10 que Ie valia a San Serafin de Sarov la devoeion del pueblo ruso. Hemos mencionado en otro texto, el "Maestro y Discipulo en el Cristia­ nismo", que saludaba a las personas 11a­ mandoles "mi felicidad". A veces, les mostraba un icono de Cristo diciendoles 142 No-dualidad y l'vfistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo "he aqui mi felicidad", despues les mos­ traba un icono de la Virgen anadiendo con temura "he aqui la felicidad de mi felicidad". Afinnaba que el que habia lIe­ gado a la paz podia convertir a mil perso­ nas, pero el que habia conseguido la felicidad podia convertir a diez mil. EI unico problema de estas experiencias de felicidad es que, como con todas las demas experiencias, estas no son verda­ deramente pennanentes, pero, aun asi, son un signo de progreso en el camino. Los Padres dicen: "Cuando sientes la felicidad por encima de cualquier otra alegria, debes saber que esttls en la ver­ dadera plegaria". Hesicasmo y Yoga En la Historia ha habido grandcs conflic­ tos en tomo al hesicasmo y al uso del cuerpo en la plegaria. Estos conflictos culminaron en el siglo XIV con la dis­ puta entre Gregoire Palamas y Barlaam. EI Palamita estaba a favor del uso del cuerpo y de la respiraci6n en la plegaria de Jesus y veia en ello no un obstaculo, sino una ayuda para la finalidad ultima de la interiorizaci6n, es decir, un estado estable de union con Dios, mas alia de las vicisitudes y variaciones constantes del estado corporal. Ya hemos visto en el apartado "Respeto y desidentificaci6n del cuerpo" que el descenso al cuerpo y Ia liberaci6n del espiritu son fases sucesi­ vas de un mismo proceso, y por 10 tanto no deben considerarse opuestas. "Hesychia" significa descanso y el hesi­ casto es, segun Jean Climaque, aquel que dice: "Duenno, pero mi corazon esta en vela". (Cant 5, 2) En la tradici6n hindu del shaktismo (centrada en el culto a la Madre divina), el descanso yoguico (yoga-nidra) es el estado supremo, la pri­ mera manifestacion del poder de la Diosa. EI Dev! Bhagavatam (7) cuenta que s610 cuando fue capaz de salir de su yoga-nidra, de su sueno, pudo Vishnu crear el mundo. Asi pues, este estado es superior a las funciones de creaci6n, pre­ servaci6n y destruccion del universo. La concentracion en el coraz6n aconsejada en el hesicasmo se practica tambien en el yoga (el chakra del corazon tiene por nombre "al/ahata"). La retencion de la respiracion y la inclinacion forzada de la cabeza hacia delante aconsejada por Gre­ gorio el Sinaita recuerda las practicas de pranayama y de jalandhara mudra en el yoga. (8) Para PatanjaIi, la "concentra­ cion en el corazon nos hace percibir toda la profundidad de la mente (citta)" (Yoga-sutra, III;35), practica que pennite acceder al conocimiento completo del si­ mlsmo. Existe una tecnica hindu muy antigua (9) que aun no ha sido desarrollada en el hesi­ casmo, pero que 10 sera muy probable­ mente en un futuro no muy lejano, puesto que es poderosa: se trata de, al recitar el mantra, no solo pennanecer centrado en el coraz6n, sino de situar la atencion en todo el cuerpo, parte a parte, para instalar en 61 aDios (nyasa). La plegaria del corazon se convierte asi en plegaria del cuerpo y favorece la transparencia de todo el ser. Desde el pun to de vista psicol6gico, la asociacion de una palabra 0 de una ima­ gen a cada parte del cuerpo favorece su integracion en la memoria profunda. Desde el punto de vista espiritual, si se escoge un punto de concentracion unico a largo plazo, es preferible escoger el cora­ zon 0 uno de los chakras superiores; por el Jacques Vigne contrario, para una mentada no import: sea el punto de pari que nos llevani de t del cuerpo. Una de las fonn ensei'ianza de los Dios mas a menu< Climaque nos deci Jesus sea uno con ces comprenderas (10) Esta ultima p India a la observa asociada a la recil esta muy extendid: respiraeion corre~ anapana-satti de que, por si sola, pl I Vamos aver ahora Padres las referen< pertar de la kundal senta la energia i diosa interior. En l­ es de hecho femen Padres se enfoca i interior. Jean Clil muy bien, a pesal que su energia ir cuerpo, 10 que r cierta moderaci6n decisivo (al cuel fuerza necesaria p tudes". (II) Des ascension de "alg( finne voluntad c como el agua b2 hacia 10 alto, asi e peligro se eleva a la penitencia, hall Anterionnente ha e10giaba el silenc · Vedanta y Hesicasmo jescanso y6guico do supremo, la pri­ del poder de la avatam (7) euenta apaz de salir de su :::no, pudo Vishnu ues, este estado es s de creaci6n, pre­ n del universo. La Jraz6n aconsejada ;tica tambien en el :oraz6n tiene por .a rctenci6n de la ,cion forzada de la :onsejada por Gre­ ja las pnicticas de !ham mudra en el Iii, la "concentra­ hace percibir toda a mente (citta)" itctica que pennite o completo del si- u muy antigua (9) rrollada en el hesi­ nl muy probable­ nuy lejano, puesto ta de, al recitar el !cer centrado en el a atencion en todo para instalar en el Iria del eorazon se ria del cuerpo y ia de todo el ser. ta psicoJ6gico, la )ra 0 de una ima­ lerpo favorece su ~moria profunda. a espiritual, si se :entraci6n unico a ::: escoger el cora­ superiores; por el Jacques Viglle contrario, para una persona mas experi­ mentada no importa que punto del euerpo sea el punto de partida de la meditaci6n ­ que nos lIevara de todas maneras mas alia del cuerpo. Una de las f6rmulas eorrientes de la ensenanza de los Padres es: "Piensa en Dios mas a menudo que respires". Jean CJimaque nos decia: "Que el nombre de Jesus sea uno con tu respiraci6n: enton­ ees comprenderas el valor de la soledad". (10) Esta ultima practica eorresponde en India a la observaci6n de la respiraci6n asoeiada a la recitaei6n de un mantra y esta muy extendida. La observaci6n de Ja rcspiraci6n corresponde tambien a la anapanCl-satli de los budistas, tecnica que, por si sola, puede Ilevar al Nirvana. Vamos aver ahora en c\ testimonio de los Padrcs las refereneias indircctas a un des­ pertar de la kundafini. La kundalini repre­ senta 1a energia interior fundamental, la diosa interior. En hebreo, ruah, el espiritu, es de hecho fcmenino, y la practica de los Padres se enioea en despertar esta fucrza interior. Jean Climaque se dab a euenta muy bien, a pesar de su gran austeridad, que su energia interior se basaba en el cuerpo, 10 que provoeaba aun as! una cierta moderaci6n: "Si Ie diese un golpe decisivo (al cuerpo), ya no tendria la fuerza necesaria para la pnictica de las vir­ tudes". (11) Describe bastante bien la ascensi6n de "algo" bajo la presi6n de una finne voluntad de interiorizaci6n: "Asi como el agua bajo presi6n se precipita hacia 10 alto, asi el alma aprisionada por el peligro se eleva a menudo hacia Dios por la penitencia, hallando as! consuelo", (12) Anteriorrnente habiamos mencionado que elogiaba el silencio describiendolo como 143 una "ascensi6n secreta". EI nombre mismo de su libro "La Santa Escalera" Ie vali6 el apelativo de "Climaque" (un tipo de escalera), evoeando probablemente con sus treinta escalones, las treinta vel1ebras de la columna vertebral (los antiguos s610 eontaban treinta vertebras) -dicho sea de paso para aquellos que esten intcresados en cl simbolismo del cuerpo humano. La columna se asocia al arbol: el abate Jean Colobos dice: "Cuando me asedian eual serpientes y fieras los pensamientos, me protejo trepando al arbol de Dios". (13) Encontramos igualmente en Macario esta idea de alzamiento reforzada por la anti­ gua postura de oraci6n, de pic y con los brazos aJzados hacia 10 alto: "Si surge cn ti un pensamiento extrano, nunca mires hacia abajo, sin6 hacia 10 alto, y el Senor acudini en tu ayuda al momento". (14) Esta noci6n de elevaci6n sentida por todo el cuerpo parece tan elemental a Jean Cli­ maquc que la coloca al principio de la exhortaci6n final de "La Santa Escalera": "Subid, subid, hennanos mios, disponed con ardor de elevaci6n en vuestros cora­ zones (Ps 83, 6) ... Prestad oidos a aquel que os dice: "Venid, vayamos a la mon­ tana del Senor, a la casa de nuestro Dios". (Is 2;3) ... que hace que nuestros pies sean como los de los eiervos y nos mantiene erguidos en las alturas" (Ps 17, 34) ... con el fIn de que con su eantieo consigamos la victoria (Hab 3,19)". (15) EI retorno a la accion despues de la ascesis y el silencio No creo que este trabajo de comparar hesicasmo y vedanta sea muy uti I para aquellos avanzados ya en el camino. Como dice un proverbio japones: "Si tu sabes y yo se, no tenemos nada mas de 144 No-dllalidad y Mfslica CriSliana: Veda ilia y Hesicasmo que hablar". Por eI contrario, para aque­ 1I0s que buscan comprender las convergen­ cias y diferencias entre vias espirituales, que tienen cierta dificultad en aceptar que cstas Bevan todas al mismo fin, este tra­ bajo sera util. Existen varias fonnas de afrontar el retorno a la acci6n para aquel que ha estado retirado del mundo a fin de expe­ rimentar el gran silencio. La fonna "pura", si se me pennite decirlo, consiste en quc el practicante llegue a la cumbre, 10 que se conoce como "sahaja samadhi" en el vedanta 0 uni6n del "samsara" y el "nirvana" en el buddhismo mahayana. En ese momento, la acci6n del sabio es espontanea y motivada unicamente por la compasi6n. Sin embargo, un maestro espiritual como el Buddha cnviaba a sus discipulos en parejas para ensenar a la gente que existia un camino mas alia del sufrimiento. Ciertamente, no se puede afirmar que cada uno de esos monjes hubicse conseguido Ilegar a ese cst ado supremo. Vivekananda habia sido influenciado por el Buddha y no buscaba mas que el ideal de la uni6n eompleta de la meditaci6n y la acci6n: "El hombre ideal es aquel que encuentra, en medio del silencio y de la soledad mas comple­ tos, la acci6n mas intensa y en medio de la actividad encuentra el silencio y la soledad del desierto. Ha descubierto el secreta del dominio del ser, esta contro­ lado". (16) EI trabajo fundamental del monje es seguir el consejo que el angel da a Anto­ nio al principio de los Apophtegmes: "Antonio, ocupate de ti mismo". (17) No obstante, Ammonas, un discipulo directo de Antonio, consideraba el retorno al mundo, 0 mas bien el servicio al mundo, como una evolucion natural: 'Tras una larga purificacion en soledad, el hesicasto, curado de todos sus males, es enviado por Dios cerca de los hombres". (18) En la tradici6n hindu, esta claro que el renunciante (sannyasi) abandona la accion ritual; su meditacion en el Uno esta mas alla de todo rito. Es interesante observar que reencontramos esta idea en la libertad de los inicios del monaquismo del desierto. Cas­ sien nos dice que los solitarios de Egipto no tenian oficio ni ocupaci6n alguna, ya que practicaban la oraci6n continuamente (lnsti­ tuciones cenobitas 111-2). A menudo aban­ donaron tambien la participacion regular en los sacramentos. (19) Esta noci6n de sobrc­ pasar tOOo ritual se debilit6 por 10 siguiente: cl monaquismo se volvi6 mas "escolar", se desarrollaron grandes monasterios donde hubo que disciplinar importantes grupos de novicios, las autoridades cclesiasticas cen­ trales tendian a alinear sus costumbres unas con otras. En Occidente, la regIa de San Benito se impuso, consagrando al Oficio y al trabajo 10 mas claro del dia, limitando como consecuencia las posibilidadcs de un monaquismo no-ritualista y de una oraci6n pura, directamentc orientada hacia la hesiea. En Oriente, el Monte Athos acogio durante la Edad Media hasta cuarenta mil monjes (actualmente son alrededor de mil trescien­ tos). La pnictica de la misa se hizo coti­ diana, a las misas basicas se afiadieron las gran des misas y el oficio de la Virgen muy a menudo se volvio regular, como en las Car­ tujas. Se comprende que cierto numero de monjes actualcs observen con anoranza la libertad de los origenes, cuando los ascetas maduros podian consagrarse a tiempo com­ pleto a la hesica. Jacques Vigne Puede ser que la aparic monjes no-cristianos ( favorezca una especie ( cristianos y un retorne cierta ocasi6n un mae~ guntaba a uno de su aventajados, experto sagrados, se embarc6 I Parte IV. I En esta epoca de car ciertos conceptos meta tales como la no-dualic tan a su area de origen. echa ralces con bastan nosotros, muy probabl del interior mismo de dental del cristianismo. La no-dualidad corres espirituales que no dis! cia de Dios, 0 del abso cia creada, y que afirr Los sistemas dualistas r un Dios personal; los si tas un absoluto impers; tido, el dualismo se asol la via de la devoci6n. ) la via del conocimient buddhismo anti guo y ( son tipicamente no-dua lidad tiene gran infiuer gia modema. Existen entre, por ejemplo, el . modo mas general, se p fondo no-dualista en Ull nuevas emergencias, ( espiritual hasta la nocia cado en fisica, pasand del ser de Heidegger. E rable para realizar un b '('danla y Hesicasmo ~rvicio al mundo, ltural: "Tras una ~dad, el hesicasto, :s, es enviado por :s". (IS) :sta claro que el )andona la acei6n Uno esta mas alla Inte observar que n la libertad de los del desierto. Cas­ arios de Egipto no m alguna, ya que ltinuamente (InstiA menudo aban­ ipaci6n regular en 1 noci6n de sobre­ o por 10 siguiente: mas "escolar", se lonasterios donde )rtantes grupos de eelesiasticas cen­ s costumbres unas , la regIa dc San ~rando al Oficio y jeI dia, Iimitando osibilidades de un I y de una oraei6n Ida hacia la hesica. lOS acogi6 durante lrenta mil monjes )r de mil trescien­ nisa se hizo coti­ s se anadieron las je la Virgen muy a ,como en las cierto numero de 1 con anoranza la ;uando los ascetas .rse a tiempo com- Jacques Vigne 145 Puede ser que la apariei6n en Francia de monjes no-eristianos (tibetanos, zen ... ), favorezca una espeeie de reflexi6n en los eristianos y un retorno a la esencia. En eierta oeasi6n un maestro zen, que pre­ guntaba a uno de sus discipulos mas aventajados, experto en ciertos textos sagrados, se embarco en dar una gran explieacion. EI maestro Ie interrumpi6 dicitimdo: "jHay demasiado buddhismo en tu respuesta!" Si pudiesen surgir de entre los monjes 0 los laicos hombres 0 mujeres de 10 esencial, capaces de ofre­ cemos sustaneia espiritual sin demasia­ dos "ismos" ... , realmente harlan un buen servlelO. Parte IV. La no-dualidad: una necesidad para Occidente En esta epoea de cambio de milenio, ciertos coneeptos metafisieos fundamen­ tales como la no-dualidad ya no se limi­ tan a su area de origen. Sin embargo, esta echa ralces con bastante facilidad entre nosotros, muy probablemente por parte del interior mismo de la tradicion occi­ dental del cristianismo. La no-dualidad corresponde a las vias espirituales que no distinguen la sustan­ cia de Dios, 0 del absoluto, de la sustan­ cia ereada, y que afirman que son una. Los sistemas dualistas ponen en la eima a un Dios personal; los sistemas no-dualis­ tas un absoluto impersonal. En este sen­ tido, el dualismo se asocia comunmente a la via de la devoei6n, y la no-dualidad a la via del conocimiento. EI vedanta, el buddhismo antiguo y el buddhismo zen son tipicamente no-dualistas. La no-dua­ Iidad tiene gran influencia en la psicolo­ gia modema. Existen lazos importantes entre, por ejemplo, el Zen y gestalt. De modo mas general, se puede distinguir un fondo no-dualista en un cierto numero de nuevas emergencias, desde la ecologia espiritual hasta la noci6n de campo unifi­ cado en fisica, pasando por la filosofia del ser de Heidegger. El periodo es favo­ rable para realizar un balance en profun­ didad del pasado y del futuro de la no­ dualidad en Occidente, asi como de su relaci6n con el cristianismo. Elementos de la historia de la no-dua­ Iidad en Occidente No pocos aeontecimientos han tenido lugar desde que Vivekananda vino a Occidente, hacia finales del siglo XIX, a hablar sobre la no-dualidad como posible base de una espiritualidad universal. El hatha-yoga se convirti6 en una practica comun en los paises occidentales, incluso en algunas zonas rurales profundas. Algunos movimientos de inspiraci6n no­ dualista como la meditaci6n trascenden­ tal tomaron la importancia de una nueva religi6n con seis millones de adeptos en todo el mundo. Francia cuenta con alre­ dedor de seiscientos mil budistas, mitad inmigrantes y mitad franceses (v. Actua­ lite Religieuse "Le Buddha va-t-il rem­ placer l'Evangile?", Otono 97). Jacques Brosse evoca en una obra reciente la rela­ ci6n entre el zen y Occidente. (1) El Dr. Jean-Marc Mantel, fundador de la Aso­ ciaci6n Intemacional de Psiquiatria Espi­ ritual y discipulo de Jean Klein, un profesor no-dualista, organiza encllentros de meditaci6n en la misma Jerusalen. 146 No-dualidad y Afistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo Pone el aeento en las posibilidades de realizaeion no-dual del Absoluto mediante la traseendeneia de las barreras religiosas con ayuda de la simplicidad de una experiencia interior elevada. Rafael, otro profesor no-dualista, ha estado activo durante mucho tiempo en Roma. En India, las ideas del Padre Lc Saux (Swami Abhishikananda) siguen su curso. He visitado en Poona (Maharash­ tra) un ashram cristiano la superiora del cual, Sarah Grant, ha escrito un pequcno libro: Hacia aIm teolagia - con(esiones de una cristiana l1o-dualisla . (2) Su com­ pleta formacion de tcologia en Oxford no Ie impide definirse ahora como no-dua­ lista. Una discipula del Padre Lc Saux, Vandana Malaji, que tuvo una formacion rcligiosa en la Orden del Sagrado Cora­ z6n, pudo deeir sustancialmentc en el Parlamento de Religioncs en Calcuta cn 1993: "Para mi. No es demasiado csen­ cial sabcr si soy una cristiana hindu 0 una hindu cristiana", 10 que Ie valio la ova­ cion de cerca de cinco mil oycntes. En estos momentos acaba de publiear un libro de cicn paginas sobre el encuentro hindu-cristiano Shabda Shakti Sangay (Sadhana Kutir, Tapovan Sarai, Laxman laula 249192 Rishikesh UP India), y ha sido invitada a Roma para presentar junto con otras personas el punto de vista de los cristianos de India. Este articulo no ha sido escrito para aquellos que aim se eneuentran en la "guarderia" de la espiritualidad.: esta redaetado para aquellos que saben reflexionar pausadamente y que han podido distanciarse en su interior, para su evoluei6n, en relaei6n a los reflejos emo­ cionales ligados a un eondieionamiento dcvoeional e insti tuciona!. Estos tres dominios -emoeional, devoeional e insti­ tueional- van en general ligados los unos a los otros, 10 que representa un obsta­ eulo para la meditaei6n seria sobre temas profundos. Yo mismo. despues de vivir durante mas de ocho anos la mayor parte del tiempo en India, sigo una via vedantina. Mi fonna­ ci6n de base es cristiana y crco que hc cstudiado mas la mistica de esta via que muchos cristianos comprometidos. Lo que voy a dar en este estudio son impresiones, intuiciones. No creo que pueda escribirse sobre estos temas con el rigor de un mate­ matico. Los que dan la impresi6n de cllo me parecen poco creiblcs, ya que tingen la vitalidad de la experiencia interior. Ade­ mas, su obra puede ser utilizada facil­ mente por un poder religioso centralizado como una especie de "codigo penal" para detcnninar que c1ase de ideas son Icgales y cuales no. Dicho esto, no es en absoluto vital para mi deeir "10 que yo pienso", ya que la fin ali dad del yoga que yo practieo reside en no pensar y atenuar este yo que no es mas que una pequena mancha negra en el sol del Ser. Elementos de mistica comparada Situemonos ahora en la historia de la no­ dualidad en Oeeidente. Se mantuvo en la sombra desde el momento en que se impuso el eristianismo e impuso la devo­ cion eomo unica via de salvaei6n. A pesar de ello, esta no-dualidad pudo sobrevivir discretamente gracias a la ensenanza de la filosofia plat6niea y neo­ plat6nica. Digo sobrevivir, pues la apolo­ getiea cristiana ha heeho constantes esfuerzos para haeer creer que la bus- Jacques Vigne queda del Uno se redu mente intelectual, rese si misma el dereeho espiritual completa. D conoeimiento es una v misma, capaz de tran­ tual tanto como la dev una intensidad interior con Cristo. La experil vedantinos de India 11 en la actualidad. Por otra parte es po desviaci6n intelectual devoci6n -no es recit, la gracia eorrectament ensenado, que nos se amor divino. Sin embargo, una ens! piamente no-dual pm cristianismo con astw latin de un texto I influenciado por el m Las Jerarquias Celestt de atribuirlo al prime Pablo en Atenas, Dio (3), 10 que vali6 ser I pureza dogmMica iITe lcido y mcditado por I cos medievales, inclui rechazo de todas las uno pueda haeerse de I esencial de la via del mismo tiempo ha infl mente la mistica de I, Otro autor de tendenl dual, Evagre el P6n "fraudulentamente" pi tiana, al menos alguno el nombre de Nil el SI atribuci6n fue identif Ireneo Hausherr. Se [I 'a: Vedal/ta y Hesicasmo lcional. Estos tres I, devocional e insti­ ~ral ligados los unos 'epresenta un obsta­ on seria sobre temas :Ie vivir durante mas lr parte del tiempo en 'edantina. Mi fonna­ tiana y creo quc he stica de esta via que mprometidos. Lo que Idio son impresiones, que pueda escribirse 1 el rigor de un matc­ la impresion de ello bles, ya que fingen la riencia interior. Ade­ : ser utilizada facil­ religioso centralizado : "codigo penal" para ~ de ideas son legales sto, no es en absoluto 10 que yo pienso", ya yoga que yo practico y atenuar este yo que equef\a mancha negra ca comparada n la historia de la no­ 1te. Se mantuvo en la nomento en que se 110 e impuso la devo­ via de salvacion. A a no-dualidad pudo mente gracias a la sofia platonica y neo­ ~evivir, pues la apolo­ a hecho constantes er creer que la bus- Jacques Vigne queda del Uno se reducia a un paro pura­ mente intelectual, reservandose solo para sl misma el derecho a la experiencia espiritual completa. De hecho, la via del conocimiento es una via que se basta a si misma, capaz de transcender 10 intelcc­ tual tanto como la devocion y de llegar a una intensidad interior analoga a la union con Cristo. La experiencia de los sabios vedantinos de India nos 10 muestra aun en la actualidad. Por otra parte es posible tambien una desviacion intelectual en la via de la devocion -no es recitando la doctrina de la gracia correctamente, tal como nos han ensenado, que nos sentiremos !Ienos de amor divino. Sin embargo, una ensenanza mistica pro­ piamente no-dual pudo integrarse en el cristianismo con astucia: el traductor al latin de un texto griego fuertemente influenciado por el neoplatonico Proclus Las Jerarquias Celestes tuvo la feliz idea de atribuirlo al primer discipulo de San Pablo en Atenas, Dionisio el Aeropagita (3), 10 que valio ser considerado de una pureza dogmatica irreprochable, y el ser leido y meditado por la mayo ria de misti­ cos medievales, incluido Santo Tomas. EI rechazo de todas las concepciones que uno pueda hacerse de Dios es un elemento esencial de la via del conocimiento y al mismo tiempo ha influenciado profunda­ mente la mistica de la iglesia de Oriente. Otro autor de tendencia fuertemente no­ dual, Evagre el Ponti co, tambien paso "fraudulentamente" por la tradicion cris­ tiana, al menos algunos de sus textos, bajo el nombre de Nil el Sinalta. EI cambio de atribucion fue identificado por el padre Ireneo Hausherr. Se reprochaba a Evagre 147 su relacion con el pensamiento de Orige­ nes, e igualmente haber podido escribir un libro entero sobre los grados de interiori­ dad, donde habia olvidado hablar de Jesus. (4) En cuanto al Maestro Eckhart, los espe­ cial istas realizan en general grandes esfuerzos para tratar de llevarlo al lado de la doctrina oficial, bajo el pretexto de colocar de nuevo sus ideas en su con­ texto. Sin embargo, 10 que me parcce evi­ dente es 10 contrario: si detHro del ambiente pesadamente dualista de la cpoca, Eckhart se arriesgaba a confinnar experiencias no-duales, cs que para el eran fundamentales. Es necesario enton­ ces interpretar sus escritos en un senti do no menos sino mas no-dual de 10 quc el mismo se pennitio escribir. Lo mismo para otras misticos cristianos que dejaron traslucir en sus textos experiencias de este genera. Si existen pocos misticos quc sigan esta via de conocimiento en Occidente, no es por que no tengan nece­ sidad de ello, sino porque se han senti do descorazonados por la pesadez y el monolitismo de un monoteismo de tipo vetero-testamentario. La intuici6n no­ dual fundamental corresponde de hecho a un metateisma, entendiendo como theas el Dios personal, que est:'! mas alia. En Occidente ha habido experiencias "atipicas" del Ser, en el sentido que han surgido de manera espontanea en algunos poetas 0 fil6sofos. Louis Gardet consa­ gro un buen centenar de paginas a este respecto. (5) Heidegger, por ejemplo, reconocia puntos en comun con el zen al descubrir: "Si comprendo bien el zen, he aqui 10 que he intentado explicar en todos mis escritos." (6) Enuncia clara­ 148 No-dualidad y l'v1islica Cristiano: Vedanla y Hesicasmo mente e1 fundamento de 1a via de 1a discri­ minacion cuando escribe: "Es necesario separar la autenticidad del ScI' del canicter ficticio de la existencia". (7) No obstante, hace falta tener algo mas que intuiciones metafisicas para as ental' una practica y transmitir una via espiritual completa. Otro ejemplo de intuicion no-dual puede discemirse en la reflexion de Camus en La Peste: "l,Se puede ser santo sin Dios? Es el unico problema concreto que yo conozco hoy en dia". (8) En India, la unidad sustancial entre el hombre y el Absoluto es tan natural que a veces se utiliza la misma palabra para nombrar a ambos: en efecto atman (en sanscrito no existen mayuscuJas) signi­ fica indistintamente "sl-mis1110" y "el SCI'''. EI hilo conductor dc la via del conocimiento es la antigua pregunta de las Upanishads: "l,CuaI es cl conod­ miento mcdiantc cI que todo puede SCI' conocido'?". En otras palabras, esto vicnc a afirmar que existe una cxpericneia pOI' la que e\ homo sapiens pucdc convertirse en "totalmente sapiens", la eulminacion de la eonseieneia individual, al fundirse cn la conscicneia universal. En India, se aeepta faeilmente que la devocion que llcga a su cenit (parabhakti), cs una con el conocimicnto (ji/ana); esta idea debe­ ria servir de inspiraci6n tambien para los no-dualistas cristianos. Este estudio es un eco de la obra de Rai­ mon Pannikar: "EI Cristo desconocido del hinduisnlo". (9) Retomando la idea de Justin el MartiI' acerca del Cristo dise­ minado en el seno de las religiones paga­ nas, ha intentado mostrar la presencia de un Cristo "inconsciente" en el hindui­ smo. Sin embargo, tengo la impresion de que mi tare a es mas facil que la suya. En efecto, el no-dualismo se refiere a una experiencia individual pero no condicio­ nada, ya que proviniendo de un reehazo de los condicionamientos de la palabra "Cristo", hace referenda obligatoria­ mente a Jesus, personaje que vivi6 en un eontexto bastante distinto de India. A mi parecer, la verdadera utilidad de la mis­ tica eomparada es el poder haeer sentiI' el peso de los a priori eulturales, casi imposibles de vcr directamcntc: tene­ mos necesidad de un espejo para obser­ val' nuestra propia cara. Para ello, es nccesaria una simpatia fundamental, quc es la de un aut6ntico buscador de la verdad: "Non elltratllr in veritatem nisi per charitatem". (No sc penetra en la vcrdad si no es porIa caridad), decia San Agustin. (10) Cuantos mas grupos cspirituales serios haya, mas gente habra con la suertc dc encontrar la via que efec­ tivamente Ies convcnga y su interaccion sera estimulante, del roce de las ideas salta la chispa dc la consciencia. Es vcr­ dad quc un monopolio religioso pucde aportar una cierta paz aparente, pero cs la paz del cementerio. Seguidamente vamos a considerar los lazos de la no-dualidad con el cristia­ nismo. Primeramente, trataremos un buen numero de divergencias presenta­ das como esenciales, pcro que tras ciertas reflcxiones se nos muestran superficia­ les. A continuaci6n, examinarcmos algu­ nas diferencias que nos parecen mas profundas. Un celebre koan zen dice: "i,Cmll es el sentido de la venida del Patriarca (Bodhidharma) del Oeste?". Seguramente encontraremos con este articulo los elementos para responder al posible nuevo koan en esta union de Jacques Vigne milenios: (,Cual es el ~ de la no-dualidad de ( No-dualidad y Cris gencias paralelas" Con la definicion pal gencias paralelas", n puntos donde las dil dualidad y cristianism deben mas a malente rencias irreconciliabl proporcionara tambier dejar de lado ciertos 2 tcs avanzados pOl' alg tianos quc pareecn il teoria y la pnictica de necesario darsc cuenta inmensa mayoria reali otra practicas reI igios por 10 tanto dualistas: rio, la interaceion ya " cepcion no-dualista ha los sabios pascn faciln Esto contribuye a la vitalidad del pensa hindu. Pasemos pues puntos en discordia y a podemos avanzar. La no-dualidad es IIna Es 10 que a mcnudo ( entre otras, la base prefl para interpretar sus ex' ten varias respuestas a primer lugar, 10 "vago' plemente en la mente cristianos que no tienen cimiento superficial de dualistas, la mayoria de de escritos de otros cris mente no han tenido ni a: Vedanta y Hesicasmo Jacques Viglle 'acil que la suya. En 10 se refiere a una iI pero no condicio­ endo de un rechazo entos de ]a paJabra :rencia obligatoria­ 1aje que vivio en un litHO de India. A mi l utilidad de la mis­ poder hacer sentir el Jri culturales, casi directamente: tenc­ 1 espejo para obser­ cara. Para clIo, cs patla fundamental, ntico buscador de la milenios: l.Cmil es el senti do de la venida de la no-dualidad de Oriente? 'ur ill veritatem nisi Jo se penctra en Ia r la earidad), decia :uantos mas grupos iya, mas gente habra ntrar la via que cfec­ 19a y su interacci6n ~I roce dc las ideas consciencia. Es ver­ )Jio reJigioso puede ~ aparente, pero es la ,s a considerar los idad con el cristia­ te, trataremos un 'ergencias presenta­ pero que tras ciertas 1uestran superficia­ !xaminaremos algu­ nos parecen mas )re koan zen dice: ) de la venida del "ma) del Oeste?". raremos con este s para responder al en esta union de No-dualidad y Cristianismo: "diver­ gencias paralelas" Con la definicion paradojica de "diver­ gencias paralelas", reagrupo aqui doce puntos donde las diferencias entre no­ dualidad y cristianismo me parece que se deben mas a malentendidos que a dife­ rencias irreconciliables. Todo ello me proporcionara tambien la oportunidad de dejar de lado ciertos argumentos aparen­ tes avanzados por algunos teo logos cris­ tianos que parecen ignorar a la vez la teoria y la practica de la no-dualidad. Es necesario darse cuenta de que en India Ia inmensa mayoria realiza de una fonna u otra pnicticas religiosas devocionales y por 10 tanto dualistas; pero por el contra­ rio, la interaccion ya antigua con la con­ cepcion no-dualista hace que los santos y los sabios pasen facilmente de una a otra. Esto contribuye a la fecundidad y a la vitalidad del pensamiento religioso hindu. Pasemos pues a los diferentes puntos en discordia y a las respuestas que podemos avanzar. La no-dualidad es una doctrilla vaga, Es 10 que a menudo oimos decir. Seria, entre otras, la base preferida de las drogas, para interpretar sus experienciasl. .. Exis­ ten varias respuestas a esta cuestion: en primer lugar, 10 "vago" esta pura y sim­ plemente en la mente de esos teologos cristianos que no tienen mas que un cono­ cimiento superficial de algunas ideas no­ dualistas, 1a mayoria de las veces a traves de escritos de otros cristianos que segura­ mente no han tenido ninguna experiencia 149 en las practicas meditativas que corres­ ponden a esta via de conocimiento. Cier­ tos no-dualistas como Shankaracharya en e1 Advaita Vedanta, 0 Nagarjuna en el Buddhismo Madhyamika han establecido sistemas filosoficos cuya coherencia no tiene nada que envidiar a la de un Santo Tomas de Aquino. Es verdad que a la mayoria de los misticos no les gusta ence­ rrar sus experiencias en sistemas filosoti­ cos rigidos y detaIl ados al extremo. Ni Jesus ni Buddha elaboraron filosofias complejas con supuestas respuestas a todas las preguntas en detalle. Los Padres del Desierto tam poco escribieron dema­ siado sobre teologia, pero el resplandor de sus consejos practicos sobre la vida inte­ rior nos ilumina aun en nuestros dias. La noci6n de cmtasis no es mas vaga quc la de extasis. AI contrario, podemos rcmarcar que la nocion de extasis supone la union con Dios, la presencia del cual ha sido siempre dificil de pro­ bar, mientras que el entasis necesita solamente un retorno a la vida interior cuya existencia no puede poncrse en tela de juicio. Enstasis, palabra utilizada por Mircea E1iade al hablar del Yoga, no es mas que una aproximacion; el medi­ tador no-dualista busca una experiencia del Todo para abolir la diferencia entre 10 interior y 10 exterior, entre entasis y extasis, y que mas bien podriamos Ha­ mar "Holostasis", La experiencia no-dual del nirvana es un estado de sopor que no implica ningun cambio real en el individuo. Hay dos distinciones importantes que debemos hacer: primero, entre la expe­ riencia del vacio somnoliento (Hamada 150 No-dualidad y AIistiea Cristiana: Vedanta y Hesieasmo shunya por Ma Anandamayi) y la verda­ dera experiencia de vacuidad (mahas­ hunya); segundo entre la disoluci6n temporal de la mente y por consiguiente del ego (mano-laya), y su disoluci6n definitiva (mallo-nasha). La primera implica efectos lmls 0 menos pronuncia­ dos segun su nivel, pero la segunda corresponde a la gran y definitiva expc­ riencia en cuanto a los beneficios que aporta. Tampoco se puede hablar de transformaci6n del ego, puesto que exis­ tia un ego antes y no existe ninguno des­ pues. Tambien en la via de la devoci6n no todas las experiencias de amor son transformadoras. Ello depende de su autenticidad y profundidad. El l1()-dualismo ensei'ia una verdad para un reducido Ill/mero. mientras que el dualismo es ulla ensenanza para las masas. Es verdad que en e\ vedanta la distinci6n se hace entre verdad empirica (l~vavaha­ rika) y verdad absoluta (paramartha). De la misma manera, en el Buddhismo japo­ nes se habla de la "ley provisional" en rclaci6n a la "ley definitiva". Creo que es una actitud de buen sentido comun que respeta las difercncias de nivel entre las personas y que permite integrar diversas vias cspirituales sin escoger una en detri­ mento de otra, sino simplemente jerar­ quizandolas. No es una euesti6n de discriminaci6n soeiol6gica: cada uno tiene el derecho a priori de experimentar la verdad absoluta, pero con 1a neeesidad de un esfuerzo que muy pocos estan pre­ parados para hacer. No hay no-dualidad posible en esta distinci6n praetiea entre ambas verdades. El Cristo tambien respe­ taba esta distinei6n: si no, (,por que no organiz6 la ultima cena en la plaza del Templo 0 se aparecio a las masas despues de la resurrecci6n? El concepto de unidad racional entre todos los niveles de desarrollo interior es un idolo, seria mucho mejor dejar de hacerle sacrificios. Es una tentativa de uniformizaci6n, quc puede perjudicar, por ejemplo, a los principiantes que desearian utilizar el trance violento para progresar 0 simplemente ponerse en camino hacia Dios, 0 a los misticos avan­ zados que insisten en e\ conocimiento y el cese espontaneo de la acci6n. El verda­ dero problema es que la jerarquia terne no poder comprender la "ley definitiva" y no conseguir controlar a aquellos que la siguen de manera natura!. EI Buddha contaba la siguiente historia: "Dos her­ manos fueron a la montana para cortar lena y volvian muy cargados. EI mas joven vio de golpe una gran cantidad de monedas de cobre y dej6 caer su lena para recoger tantas como pudiese. EI mayor pens6: "Mc he matado tanto por esta lena, que no pienso dejarmela per­ der; vendre mas tardc a por ella." Oes­ pues, el mas joven encontr6 monedas de plata que tom6 en lugar de las de cobre, mientras el mayor permanecia atado a la lena que habia recogido con el sud~r de su frente. Mas tarde, sucedi6 10 mismo con monedas de oro. Al volver el mayor desde 1a casa para recoger las monedas, estas habian desaparecido". (11) La no-dualidad es una doctrina fria y desprovista de amOl; ya que no reconoce el valor supremo de la persona humana. Se trata de una cuesti6n clave que desarro­ llaremos mas en detalle. Fue posiblemente Jacques Vigne en los aiios treinta cua a\canzo sus cotas m judaismo, surgi6 la ob el "Yo y el Tu", y en e daci6n de la revista . Mounier y Beriaev er texto de la epoca serf< Las democracias haci, el auge de los totalit. mente era urgente hac la idea de que el ser I ble. Escuchando 0 ley dentales, se tiene la i indio medio seria esq texto de que no tenia I etema. Para los que I esta idea parece del hindu comun tiene ur ego como todo el mu en conjunto una prco( en estar en armonia c amplio sentido que k en su alma es un sign l6gica. Sc ve al que· dientc", cs decir, vivi como una especie de cia!. En hindi, udas "solitario" y"triste". el que qui ere comprol en la via espiritual ex renunciu, en la que familiares. En este s( fuerte proceso de inc no se para aqu!, sino I nueva liberaci6n, la • consciencia universa podria llamarse un si6n". Cuando se observa cristiana de "person: renciar en la practic; pues es mas bien va: 'W: Vedanla y Hesicasmo :ena en la plaza del ) a las masas despues idad racional entre desarrollo interior es :ho mejor dejar de Es una tentativa de : puede perjudicar, , prineipiantes que trance violento para :mente ponerse en ~ a los misticos avan­ n el conocimiento y ~ la acci6n. EI verda­ le la jerarquia teme :r la "Icy definitiva" rolar a aquellos quc natural. EI Buddha historia: "Dos her­ nontana para cortar I cargados. EI mas ma gran cantidad de y dej6 caer su lena como pudiese. EI le matado tanto por enso dejarmela per­ le a por ella." Des­ ncontr6 monedas de gar de las de cobre, :rmanecia atado a la :ido con el sud~r de , sucedi6 10 mismo Al volver el mayor !coger las monedas, :cido". (II) ma doctrina fda y ya que no reconoce '1 persona humana. m clave que desarro­ Ie. Fue posiblemente Jacques Viglle en los anos treinta cuando el personalismo aleanz6 sus cotas mas elevadas; en el judaismo, surgi6 la obra de Martin Buber, el "Yo y el Tu", y en el catolicismo la fun­ daci6n de la revista "Espiritu" con Jean Mounier y Beriaev en particular. El con­ texto de la epoca seria mas bien sombrio. Las democracias hacian oidos sordos ante el auge de los totalitarismos, y efectiva­ mente era urgente hacer llegar a las masas la idea de que el ser humano es inaliena­ ble. Escuchando 0 leyendo a ciertos occi­ dentales, se tiene la impresion de que el indio medio seria esquizoide bajo el pre­ texto de que no tenia la noeion de persona etema. Para los que han vivido en India . esta idea parece del todo fantastiea. EI hindu comun tiene una personalidad y un ego como todo el mundo. Sin duda, tiene en conjunto una preocupaci6n mas grandc en cstar en annonia con la familia en mas amplio sentido que los occidentales, pero en su alma es un signa de madurez psico­ logica. Se ve al que quiere ser "indepen­ diente", es decir, vivir Icjos de la familia, como una especie de fracas ado ser antiso­ cial. En hindi, udas significa a la vez "solitario" y "triste". Por el contrario, para el que quiere compro111eterse en un avance en la via espiritual existe la posibilidad de renuncia, en la que se eortan los lazos familiares. En este sentido, se trata de un fuerte proceso de individualizaci6n, pero no se para aqui, sino que continua con una nueva liberaci6n, la apertura a una nueva consciencia universal e indivisa, 10 que podria llamarse un proceso "de indivi­ sion". Cuando se observa de cerca la nocion cristiana de "persona" es dificil de dife­ renciar en la pnictica de la de individuo, pues es mas bien vaga. Esta mas alia del 151 yo habitual, es "pura presencia" y es "rigurosamente inefable del 111 is1110 modo que la persona divina" (12): en el fondo uno se pregunta 10 que Ie queda de pcrso­ nal, si no es el resuItado de una especie de acto de fe puro afirmando que es necesario que la persona continue exis­ tiendo, cueste 10 que cueste. Lossky dice: "Renunciando a su propio contenido, entregandolo libremente, dejando de existir por sl-mis111a, la persona se expresa plenamente en la naturaleza lillica de todos". (13) Este p{mafo des­ cribe con exactitud la disolucion del ego en el Vedanta y el proceso no tiene dema­ siada razon en guardar la persona tal y como es. Evidente111cnte, la creencia en el Juicio Final obliga a conservar una especie de s0111bra de individuo obligado a responder "presente" en la Ilamada final. Dc la misma mancra, en el hindui­ smo existc algo de ego quc pas a de una vida a otra para guiar el karma indivi­ dual, pero reconoce tambien que mas alla de eso es posible una liberacion com­ pleta. En esc momento se disuelven en el Ser, a la vez, kanna y persona. La luz de la vela se disuelve en el Sol; el proceso sigue su 16gica hasta el final. Las teolo­ gias personalistas estan tan atadas a su idea que incluso corrigen a los mismos Padres. Es divertido resaltar que uno de ellos, citando a Gregorio de Nisa: "Los conceptos crean imagenes de Dios, tan solo el sobrecogimiento presiente algo", se siente obligado a incluir esta correc­ ci6n: "Mas bien alguien". (14) Gregorio de Nisa, en tanto que mistico confir­ mado, tenia la intuici6n del caracter final111ente impersonal del Absoluto. Por clio decia "algo" a la manera de tat (eso) de las Upanishads cuando estas evocan 10 Supremo, 10 que molest6 a te610gos de 152 No-dualidady Mistica Cristiano: Vedanta y HesicaslII' experiencias menos elevadas que corrian tras la persona como uno puede correr tras su sombra esperando atraparla un dia. Si el Cristo se aniquil6 a si mismo cf Phil II, 7), se vaci6 de si mismo, (,por que la persona humana no podria hacer 10 mismo? <',No seria Ia menor de las cosas? i,No esta escrito: "Si el grano de maiz que ha caido al suelo muere, traera muchos frutos?" <',Puede decirse en verdad 10 que queda del grano una vez muerto? La ciencia misma, siguiendo los recientes descubrimientos en neuro-psicologia, cuestiona nueva­ mente la noci6n de persona y regresa a una concepci6n de tipo mas bien budista que habla de "agregados". (15) Esto ultimo no debe lie vamos a un nihilismo 0 a un debilitamiento. HEI hombre que niega su propia individualidad no se amedrenta, al contrario, se engrandece con las dimcnsiones de la realidad uni­ versal", dijo Plotino. Mas cercano a nosotros, otro gran representante de la via del conoclmlento, Nisargadatta Maharaj, afinna: "La caridad mas grande es dar la propia conciencia de "yo soy"". (kt~nose, Una idea que sostiene el apego a la noci6n de persona es que "no existe feli­ cidad mas alia de la reIaci6n". Esto se basa en la experiencia afectiva habitual. Los dualistas hindues toman la com para­ ci6n del terron de azucar que debe cam­ biar para que podamos percibir su sabor; pero no es muy respetuoso para con el Absoluto el considerarlo como un terron de azucar y el querer hacerlo objeto de degustacion, 10 que nos lIeva a hablar de la cuestion del antropomorfismo en el dualismo. Las descripciones de la union con Dio~ bajo el nombre de esponsales 0 de relacio­ nes entre amante y amado ya no son satis­ factorias a partir de cierto nivel de evolucion. Recuerdan demasiado a Ia pro­ yeccion de un deseo, y los psiquiatras hacen no tar precisamente que se delira en el sentido del propio deseo. La indefinici6n de la idea de los dualistas segun la cual vivimos cada vez mas el amor de Dios, mc parece tambien muy antropomorfica. Es el deseo de los amantes, pero la realidad parece mas bien otra. Al leer cada vez mis Iibros se sabe cada vez mas cosas; en ton­ ces, por ana]ogia, al realizar cad a vez un mayor numero de practicas espirituales sc deberia obtener tambien un mayor numero de resultados; pero wodemos reducir la via espiritual a una especie de progresion geometrica?; es mas inesperado y mas inte­ resante tambien. i,No existe un intercs real en la noci6n oriental de ruptura de niveles (nirvikalpa samadhi, Salori)? (,No es una necesidad a partir de un cicrto estado, al igual que el paso de la fisica newtonian a a la relativista se ha hecho necesario para intcgrar nuevas experiencias? Curiosa­ mente, al superar la noci6n antropomorfica de persona, se vuelve uno mas cercano al hombre y a su experiencia directa. "No existe otro Dios que el sentido de la presen­ cia", dice Nisargadatta Maharaj. (16). EI maestro Eckhart, por su parte, afinnaba en una celebre frase: "Si yo no existiese, Dios tampoco existiria". (17) La verdadera cuestion no es la proyeccion de los propios deseos, cual rayos laser, a las brumas celestes, sino el dejarlos ir des­ apegandose de ellos completamente con el tin de que "Eso" pueda manifestarse. No es facil y por esta raz6n se han creado tan­ tas disciplinas espirituales. Una critica de Jacques Vigne la no-dualidad tambie tion de la pcrsona es I, dualidad emplea tecni( solo se basa en el amo reflex ion que me vienl el amor es tambien un; si la palabra tecnica nc sigue la via de la devo poco a poco a jugar COl convertirse en un jug! poder dirigirlas ente divino. Por su parte, contra el Yoga en tant purificacion de la \TIl repetitivamente que .. manera espontimea. I Ser esta mas alia de 13 buscan unirse a una (upasana). El dualismo tiene ten( espesar, el ego confiri cia propia distinta de preguntarnos, desde e la psicologia de 10 pre relaci6n cntre el dw tismo de la circuncisi, cia afirmada violentat y del Islam (cf el Q "Dios es 10 mas Elev musulmana cotidiam mienlo agresivo, au cpocas difercntes en i,no rcprescnta um momento de decirlo, unidad primordial? tiene un impacto tar sobre la fuerza sexual un cierto despertar d, rior que en India llarr puede ser un tema de ner de paso a aquellos dos. 'I: Vedanta y Hesicasmo la union con Dios onsales 0 de relacio­ !ado ya no son satis­ Ie cierto nivel de demasiado a la pro­ ), y los psiquiatras ~nte que se del ira en eseo, La indefinicion liistas segun la cual el amor de Dios, me lntropomorfica. Es el ~s, pero la realidad AI leer cada vez mas ;z mas eosas; enton­ realizar eada vez un lcticas espirituales se en un mayor numero odemos reducir la via )ecie de progresion :1esperado y mas inte­ existe un interes real de ruptura de niveles safori)? (,No es una , un cierto estado, al a fisica newtonian a a lecho necesario para )eriencias? Curiosa­ ocion antropomorfica : uno mas cercano al :riencia directa. "No I sentido de la presen­ 1a Maharaj. (16). El su parte, afinnaba en yo no existiese, Dios 7) n no es la proyeccion s, cual rayos laser, a ino el dejarlos ir des­ :ompletamente con el :da manifestarse. No on se han creado tan­ llales. Una critica de Jacques Viglle la no-dualidad tambien Jigada a la cues­ tion de la persona es la siguiente: "La no­ dualidad emplea teenieas, el dualismo tan solo se basa en el amor". (18) La primera reflex ion que me viene a la mente es que el amor es tambien una tecnica, 0 un arte, si la palabra tecniea nos da miedo. El que sigue la via de la devoeion debe aprender poco a poco a jugar con sus emociones sin convertirse en un juguete, con el fin de poder dirigirlas enteramente hacia 10 divino. Por su parte, cl Vedanta no esta contra cl Yoga en tanto que tcenica de la purificaeion de la mente, pero subraya repetitivamente que "Eso" se revela de manera espontanea. La Rcalizacion del Ser esta mas alia de las meditaciones que busean unirse a una fonna divina dada (upasunu). EI dualismo tiene tendencia a endureeer, espesar, el ego confiriendole una sus tan­ cia propia distinta de la divina. Podemos preguntamos, desde el punto de vista de la psicologia de 10 profundo, si no existe relacion entre cl dualismo, cl trauma­ tismo de la circuncision y la trascenden­ cia afinnada violentamente del judaismo y del Islam (cf el Qui Allahu Akbar .. "Dios es 10 mas Elevado" en la plegaria musulmana cotidiana). Este aconteei­ miento agresivo, aun apareciendo en epocas diferentes en ambas religiones, (,no representa una ruptura, es el momento de decirlo, en el mundo de la unidad primordial? Esta ruptura, (,no tiene un impacto tan fuerte que actua sobre la fuerza sexual y puede ocasionar un cierto despertar de est a energia inte­ rior que en India Haman kUlldalini? Este puede ser un tema de reflexion a propo­ ner de paso a aquellos que esten interesa­ dos. 153 No se puede hablar justamente del mas alia de la persona si no se distingue claramente entre el escape del ego por arriba y por abajo. Esto ultimo pod ria corresponder a Ja esquizofrenia, Ja otra cara del ego, 0 de manera mas atenuada, a un tipo dc pensa­ miento modemo reduecionista, lease nihi­ lismo, que Jean Wahl habia apodado la "trans-descendencia". Por esta razon pre­ fiero hablar de "transpersonalizaeion" mas que de "despersonalizacion", palabra esta ultima que tiene connotaciones peyorati­ vas de orden patologieo. Dc la misma manera, me pareee mas eonveniente hablar de la "via Jiberadora de la persona trans­ personal" a proposito de la via del conoei­ miento, mas que de vias "impersonaJes", palabra que se asocia autOln<iticamente cn la mente de la persona a la friaJdad y al rechazo. Hay que haeer hincapie, a este respecto, en la siguiente paradoja: la trans­ misien de las vias "impersonaJes" como el Vedanta 0 el Zen se haec de manera muy personal, de maestro a discipulo, gracias a una relacion vital que se extiende durante anos. (19) En este sentido, esta relacion es menos impersonal que la transmisi6n insti­ tucional, que es la mas comun en el Cris­ tianismo. Un verdadero practicante de la via del eonocimiento tiene una devocion intensa por el Ser. Se ejercita en ese sen­ tido. Nisargadatta habla del "fulgor explo­ sivo del "Yo soy"". (20) Jacques Maritain, tomista estricto, intenta establecer una oposicion entre la via de la devocion y la via del conoeimiento: la pri­ mera corresponderia a la mistica del fuego y la segunda a la del espejo. La com para­ cion esta evidentemente cargada de sobre­ entendidos apologeticos, insinuando que la via del conocimiento es glacial y que no nos lleva mas que a nuestra faz, es decir, 154 No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo al aspecto mas exterior del ego. Debemos resaltar que el fuego no cumple su voca­ cion hasta que el combustible ha sido completamente quemado, es decir, cuando la dualidad se ha consumido y solo queda la unidad. Ademas, cuando es intensa, la mistica del conocimiento es mas que un fuego, es como un rayo l<iser que separa 10 real de 10 irreal. Por el contrario, aquellos que sienten la necesidad de refugiarse en un Dios con rostro humano -que se les parcce extrafiamente, pues- , (,no estan mas en la mistica del cspejo que aquellos que saltan directamente en el Absoluto sin forma? El otro que tiene el mismo aspecto quc nosotros (,es realmente "otro"? i,Que imagenes despierta el celebre Dells inti­ mior mea "Dios mas intimo para mi que yo mismo" de San Agustin? Podriamos entrevcr una especie de ccntro ultimo bajo las diversas capas de la personalidad y los condicionamientos, 0 un fondo del scr humano que sc cxpande cada vez mas, abri6ndose al Ser. Las dos imagenes -cl grana de conscieneia 0 el espacio sin Iimi­ tes- son utilizadas regulannentc en cl vedanta para evocar el Absoluto. (21) Una ultima objecion al no-dualismo es que cI que no cree en Ja persona tampoeo puede respetarla. Me parece al contrario que la respeta tanto mejor al no ser molestado por la propia personalidad para poder apreciar al otro objetiva­ mente, tal y como es. Es cuando dos per­ sonas, es decir en la practica dos egos, se relaeionan que existe manipulacion y cont1icto. La nocion de persona, bajo el aspecto concreto de personalidad, es util a buen segura en la educacion para que los nifios y los adolescentes puedan afirmarse en tanto que ellos mismos. Ello es utilizado igualmente desde el punto de vista social y juridico, para que el individuo no sea sepultado por la masa 0 la maquinaria estatica. Mas profundamente, esta nocion va a la par con el amor basado en 10 fisico, los minimos detalles personales estan fuertemente investidos de carga emocional por los am antes, el problema es que esta carga emocional puede inver­ tirse subitamente y, de positivo, pasar a negativo. Para un mistico maduro esta nocion de persona, que al principio habia sido de ayuda, se convierte ahora en un obstaculo. Como conclusion se desgaja la idea de "nivel personalista": la pcrsona humana cs el tipo mismo dc verdad provisional, de practica comun (vyavaharika) que desaparece al aproximarse al Absoluto, al igual de efimera quc la llama de una candela. Mientras se crec cn ello, se esta somctido a ello. Al cuestionarlo, empieza a ponerse el sol de la Liberaci6n. EI no­ dualismo no eontradice ninguna doctrina, mas bien les otorga lugar y las integra en su visi6n del mundo. Aquellos que guar­ dan aun en si mismos, como un resabio, que 10 personal es la vida y que 10 imper­ sonal es la muerte, harian bien en meditar en el siguiente koan zen: "E/ vivo entra ell e/ atmid, y el mllerlo 10 tran"porta ". La 11O-dualidad es una tecllica ,li-ia. tiene 110ciim de gratuidad ya qlle posee el concepto de gracia. I/O 110 Alm en el Yoga, que es la parte mas tec­ nica de la espiritualidad hindu, la noci6n de gracia esta presente. Los Yoga-Sutras de Pataiijali hablan del "abandono al Senor" (Ishwara Pranidh,lna 1-23) como Jacques Viglle una posible via para luto. EI Vedanta, en I no-dualisla, no tiene pero insiste fuertemen EI conocimiento se re sin ser la recompensa tros esfuerzos espirit punto es cierto que el ' cia de la escuela que I camente, el Purva-l Buddhismo Mahayan; "realizaci6n espontani muy importanle. A la inversa, en la pl( acepta hasta un cierta automatica de la petic mcja al Yoga: "L1amE Esta cficacia no solam la buena vol un tad d cxislc tambien a pcsa como indica la pan~ importunado que acab; pcdigiiefio para consc! paz. Los propios ort( contrariamcnte a los gracia fue dada enter; prineipio al hombre. E d6jica, como bien di( erifa de San 19naci actuar como si todo d, brc y no de Dios, h2 Dios como si to do dCf del hombre". (22) Sc I proposicion de la tcole deificado par la graci leza", entendiendo el leza" como ego. Esta ser su propia naturale ordinario: "yo soy yo En estc momenta est: muy diferente de 10 q es decir, que la fuerz, 'a: Vedanta y Hesicasmo Jacques Vigne os. Ello es utilizado Junto de vista social el individuo no sea lsa 0 la maquinaria lamente, esta noci6n amor basado en 10 detalles personales nvestidos de carga mantes, el problema ocional puede inver­ de positivo, pasar a nistico maduro esta ue al principio habia mvierte ahora en un una posible via para alcanzar el Abso­ luto. EI Vedanta, en tanto que doctrina no-dualista, no tiene noci6n de gracia pero insiste fuertemente en la gratuidad. EI conocimiento se revela por si mismo sin ser la recompensa obligada de nues­ tros esfuerzos espirituales. Sobre este punto es cierto que el Vedanta se diferen­ cia de la eseuela que Ie precedi6 hist6ri­ camente, el Purva-Mimansa. En el Buddhismo Mahayana el concepto de "realizaei6n espontanea" es igualmente muy importante. ~ desgaja la idea de la persona humana . verdad provisional, (vyavaharika) que :imarse al A bso luto, que la llama de una : cree en ello, se esta :uestionarlo, empieza la Liberaei6n. EI no­ ice ninguna doetrina, lugar y las integra en I. Aquellos que guar­ os, como un resabio, I vida y que 10 imper­ arian bien en meditar 1 zen: "£1 vivo entra ~,.to 10 transporta". ulla tecnica fda, 110 "atuidad ya que no ? gracia. e es la parte mas tec­ idad hindu, la noci6n ·nte. Los Yoga-Sutras n del "abandono al anidhana 1-23) como A la inversa, en la plegaria cristiana, se acepta hasta un cierto punto la eficacia automatica de la petici6n, 10 que se ase­ meja al Yoga: "Llamad y se os abrira". Esta eficaeia no solamente no depende de la buena voluntad de Dios, sino que existe tambien a pesar de su reticeneia, como indica la parabola del hombre importunado que acaba por ceder ante un pedigiiefio para eonseguir que Ie deje en paz. Los propios ortodoxos reeonoeen, contrariamente a los cat6licos, que la gracia fue dada enteramente y desde el principio al hombre. Esta gracia es para­ d6jica, como bien dice la palabra ap6­ crifa de San Ignacio: "Es necesario actuar como si todo dependiese del hom­ bre y no de Dios, hay que eonfiarse a Dios como si todo dependiese de EI y no del hombre". (22) Se puede interpretar la proposici6n de la teologia: "EI hombre es deificado por la gracia y no por natura­ leza", entendiendo el tennino "natura­ leza" como ego. Esta, en efecto, parece ser su propia naturaleza para el hombre ordinario: "yo soy yo, iY esto es todo!" En este momenta esta afinnaci6n no es muy diferente de 10 que dice el Vedanta, es decir, que la fuerza que transfonna el 155 ego surge mas alia del mismo ego, del Ser en un lenguaje no-dual. La dependencia del cristiano de una gra­ cia de Dios de la que no comprende ni el c6mo ni el porque, da facilmente una dimensi6n tragica a su vida espiritual. Filarete de Moscu dice por ejemplo: "EI hombre esta suspendido entre dos preci­ pieios como sobre un puente de diaman­ tes que es la voluntad de Dios; por debajo de el, cl precipicio de las Tinie­ bias divinas hacia el eual es lIamado, y debajo de este el preeipicio de la inexis­ teneia de donde ha sido sacado y al que no puede sino caer si renuncia a su voca­ ci6n -pero sin podcr regresar jamas a la inexistencia". (23) Desde el punto de vista de la psicologia espiritual, el sen­ tido de 10 absurdo y de la angustia exis­ tencial, (,no serian al reves, la sombra de la creencia en la graeia de un dios eom­ pletamente bueno? La cuesti6n de la gracia va ligada a la de la trascendeneia y la inmanencia. A menudo se reprocha al no-dualismo el caer en el completo inmanentismo, el pan­ teismo al afinnar que el Absoluto, el mundo y el hombre son uno s6lo. Es ver­ dad, el no-dualismo no tiene dificultad alguna en integrar el panteismo como nivel de desarrollo espiritual posible. No se siente obligado a rechazarlo violenta­ mente como hace el monoteismo. Dicho esto, el propio movimiento del no-dua­ lismo es trascendente y apofatico: es el neti, neti de las Upanishads. Es interesante sefialar que la intenci6n con la que se habla del "no-dualismo" y no de monismo es para poder conservar para el Absoluto su caracter de inefabilidad, mas alla de los contrarios, mas alla incluso del ser y del 156 No-dualidad y ;v/iSfica Cristiana: Vedanta y Hesicasl/1o no-ser. En el cristianismo, aparte de cier­ tos misticos, se teme mas cuestionar que el ir mas alia de la entidad misma de Dios. En ese sentido, el no-dualismo es mas trascendente que el dualismo. Los no-dualistas 110 son capaces de actual' en el mundo ni poseell mentalidad cientifica. Esta es otra de las objeciones mas comu­ nes a los no-dualistas, seguramente debida a su tendencia a considerar el cuerpo y el mundo en general como una ilusi6n. Empeeemos por hablar del euerpo. Los cristianos repiten que la Encar'1acion solamente puede dar al eue e~' su dignidad ultima, otorgandole su vocacion divina de templo del espi­ ritu. Antes que nada, hay que mencionar que para el no-dualista el cuerpo no es solamente el templo del espiritu, sino el espiritu en si mismo, ya que en la base de todo no existe mas que una sola sustan­ cia-espiritu. En el no-dualismo, se reco­ nocc que la mente se basa en el cuerpo y se repite que es una suerte el haberse beneficiado de un renaeimicnto en un cuerpo humano, y que por 10 tanto hay que hacer un buen uso de eL EI Vcdanta, 10 hemos visto antes, acepta las practicas y6guicas como medio de puriticacion del espiritu, Es interesante notar que en el ambiente no-dualista de India las tccni­ cas corporales con intencion espiritual, reagrupadas bajo el termino de Yoga, son las mas desarrolladas: puede ser porque un eierto numero de hindues sentian los Iimites de la explicacion uniea del pro­ greso espiritual por la graeia divina. En el fondo, afim1ar la realidad del cuerpo representa un lugar eOmlll1: el hombre ordinario esta eonveneido de esta realidad, y yo mismo estoy seguro de que si pudiesemos hablar de metafisiea con los animales estos estarian igualmente a favor de este punto de vista. La duda sobre esta evidencia proviene de la habi­ lidad de la consciencia humana en exa­ minarse ella misma: el desequilibrio de la duda es eJ paso del pensamiento. Este desapego del euerpo no es una cuesti6n de una ascesis fisica, sino mas bien de comprension. En ese sentido, los ascetas cristianos con sus maeeraciones parecen haber tenido menos respeto por el euerpo que los neoplatonicos, que sin embargo decian que este no tenia demasiada importancia en relacion al fin que es la eonsciencia, pero al menos no 10 tortura­ ban. Enfoqucmonos ahora en el segundo punto de la objeeion -Ia irrealidad del mundo segun el no-dualismo. Ha habido, eso cs eierto, algunas eseuelas budistas que han mantenido una irrealidad com­ pleta de los fenomenos, los vijiiallavadis. Sin embargo, en el Vedanta, el mundo manifestado (maya) se describe como "ni real, ni irreal", desafiando a la praetica toda descripcion (al1irvGllcGniya). Ade­ mas, el mundo cs irreal en relacion al Absoluto (paramartha), pero posee una realidad relativa (vyavaharika) como hem os visto anteriormente al hablar de las dos verdades. En cuanto a la capaei­ dad de evaluaci6n de las capacidades de accion de los vendatinos, podemos men­ cionar que la Mision Ramakrishna, inspi­ rada en el ideal del "Vedanta practico" de Vivekananda, parece ser la organiza­ cion humanitaria mas grande del mundo. Sobre todo, se encuentra presente en India, pero tengamos en cuenta que India Jacques Vigne representa unos mil m tes. Los hechos l11U Vedanta y accion no incompatibles. Por otro lado, pareee ( dental no se dcsarrollo sia, sino contra ella, sobre la evolucion qw nuestros dias, no pan demasiado el pensamil del Ser impersonal es 1 milable a la noeion d· que desarrolla la fisil que la del Dios person: ex machina de las d Los cientiticos han d concepcion de Dios Todo hombre verdadl considera que Dios e: que ineluso es mucho si no, es un material rituales. "Feliz el m cada hombre en tanto Dios" (24), dijo Nito monje es aquel que, n los hombres, sigue uni si mismo cn eada uno No se trata de abando la vision del mundo r a Dios, para desafiar ortodoxos asi como a de la Isha Upanishad: envuclto por cl Senor se mueve en este 111un Habiendo renuneiado provecho ... ". iEI abo esta intuiei6n no-dual cion de nuestra conce mundo al parar la me no dice cn su coraze mas en el mundo ql w: Vedama y Hesicasmo Jacques Vigne a conveneido de esta estoy seguro de que Ir dc mctafisica con starian igualmente a I de vista. La duda proviene de la habi­ cia humana en exa­ el desequilibrio de el pensamicnto. Este ) no es una euestion a, sino mas bien de ~ sentido, los ascetas laccraelOnes pareeen respeto por el cuerpo )S, que sin embargo to tenia demasiada :ion al fin que es la menos no 10 tortura­ representa unos mil millones de habitan­ tes. Los hechos muestran, pues, que Vedanta y aecion no son en absoluto incompatibles. I lra en el segundo m -Ia irrealidad del iualismo. Ha habido, ,as eseuelas budistas una irrealidad com­ lOS, los vijiianavadis. Vedanta, el mundo se describe como "ni ~fiando a la praetica nirvancaniya). Ade­ irreal en relacion al 'ha), pero posee una \ravaharika) como mncnte al hablar de n cuanto a la capac i­ Ie las eapaeidades de tinos, podemos men­ 1 Ramakrishna, inspi­ ~I "Vedanta practico" crece ser la organiza­ is grandc del mundo. cuentra presente en s en euenta que India Por otro lado, parece que la ciencia occi­ dental no se desarrollo a causa de la Igle­ sia, sino contra clla. Las controversias sobre la cvoluei6n que aun continuan en nuestros dias, no parecen haber agitado demasiado el pensamiento hindu. La idea dcl Ser impersonal cs m{ls facilmente asi­ milable a la noci6n de campo unificado que desarrolla la fisica contemporanea. quc la del Dios personal, creador, el DCIIS cx macliina de las doctrinas dualistas. Los cientificos han debido olvidar esta concepcion de Dios para evolucionar. Todo hombre vcrdaderamentc religioso considera que Dios esta en el mundo y que incluso es mucho mas real quc cste, si no, es un materialista que asistira a rituales. "Feliz el monje que observa cada hombre en tanto que Dios detras de Dios" (24), dijo Nilo el Sinaita, y HEI monje es aque! que, retirandose de entre los hombres, sigue lI11ido a estos y se ve a sf mismo en cada uno de ellos". (25) No se trata de abandonar el mundo, sino la vision dcl mundo para ver claramente a Dios, para desafiarlo como dicen los ortodoxos asi como a su manera el iniclo de la Isha Upanishad: "Que todo esto sea envueIto por el Senor (l'iha), todo 10 que se mueve en este mundo en movimiento. Habiendo renunciado a ello, puedes sacar provecho ... ". JEI abate Antonios tenia esta intuicion no-dualista de la desapari­ cion de nuestra concepcion ordinaria del mundo al parar la mente! "Si el hombre no dice en su corazon "no existe nadie mas en el mundo que Dios y yo", no 157 obtendnl descanso". (26) Isaac el Sirio llego igualmente por experiencia direeta a una concepcion proxima a la ercaeion por la mirada (drishti shristi) del pens a­ miento hindu: HEl mundo muere en el momento en que el curso de los pens a­ mientos sc detiene". (27) Santo Tomas reconocia que podia ser que el mundo no existiese al cscribir: "Pucde ser que todo 10 que no sea Dios no cxista". (28) Grcgorio de N isa prcsentaba la paradoja del mundo, a la vez rcal c irrcal al dceir: "La paradoja del mundo cs tener su existencia en la no-cxistencia". (29) EI Maestro Eckhart no duda cn afir­ mar como evidencia la irrealidad ultima de la crcaci6n: "Todas las eriaturas son una pura nulidad. No digo que sean mfni­ mas 0 que sean algo, son puro nada. Lo que no tiene ser es nada. Todas las criatu­ ras 110 tienen ser, ya que SlI scr depende de Dios". (30) La unica diferencia entre la teologia cristiana clasica y el Vedanta cs que la prim era dice que el hombrc ha perdido su estado de deit1cacion y que hay que reencontrarlo, mientras que el segundo dice que el hombre solamente cree haberlo perdido. Se puede criticar la nocion vedantina del mundo manifestado como an irvacaniya , mas alia de toda descripcion. (,No es una solucion demasiado facil; una escapato­ ria que deja el problema sin resolver? Es verdad, pero todas las metaf1sieas y las teologias dejan los problemas sin resol­ ver. Los mismos cristianos reconocen que la creaci6n ex nihilo es inexplicable. (,C6mo pudo Dios descender de 10 intcm­ poral a 10 temporal para cumplir el acto de la creaci6n? (,Como cscogio el momento de haeerlo? Si es todopodc­ 158 No-dualidad y llyffstica Cristiana: Vedanta y HesicaslIIo roso, (,como explicar la libertad del hom­ bre? Mediante su amor, se dice. Pero si Dios es real mente completo, l.en que tiene necesidad de amor? Y si el hombre era perfecto antes de su falta, no es total­ mente i1ogico que escogiese el mal? En conjunto, el problema del mal es mas dificil de resolver en un sistema dualista, donde se sup one que el universo fue creado por un Dios bueno. Para los no­ dualistas, el mal viene no del pecado, sino de la ignorancia, de maya, que no tiene principio pero si un fin cn el ins­ tante en que el aspirante espiritual alcanza la libcracion. Esta concepcion del mal como ignoraneia concuerda !mis con el espiritu de la psicologia modema que la del mal como pecado. La noei6n de "pueblo elegido", que parece evidente vista desde el interior del cristianismo y del judaisl11o, es mas bien chocante vista desde el exterior. Ese Oios que ha eseogido a un pequeno porcentaje de la humanidad para hacer un "pueblo eseogido" y ha rechazado a los demas, si no es un infiemo al menos de rango menor, parece mas un demonio que un Oios a ojos de esos "otros". En ese sen­ tido, un metatlsico que se ahorra la idea de "pueblo elegido" y de Oios personal, representa eiertamente un progreso hacia una posibilidad de toleraneia reall11ente universal. En India, se intento aliar el no­ dualisl110 puro (Advaita- Vedanta) con el dualismo visl1l1uita. Buseando conciliar creencias de este ultimo grupo con el no­ dualismo, Ramanuja claboro un no-dua­ Iismo mitigado. Segun la confesion misma de algunos fil6sofos, su tentativa es eompletamente banal, no porque hay a sido un mal pensador, sino porque su proyecto de partida era una especie de cuadratura del circulo. (31) Al igual que los misticos cristianos a los que no les gustan demasiado las reglas mom'lsticas suaves, los misticos de la India contem­ poninea no se refieren demasiado al no­ dualismo mitigado cuando hablan del vedanta: directamente se enfocan en el Advaita. La lIo-dualidad no se beneficia de una palabra revelada. Una ultima objecion hecha a menudo por los teologos a prop6sito de la no-duali­ dad cs que no se beneficia de otra Pala­ bra revelada, por el hecho mismo dc que no reconoee ningun Dios personal. EI no­ dualismo no tendria tampoco posibilidad alguna de revelaci6n progresiva de Oios cn la historia. Hay que decir que en el hinduismo las grandes palabras de las Upanishads ("Tu eres Eso", etc ... ) se eonsideran como reveladas a los antiguos sabios (rishis): no las han oido de un Oios personal como los profetas de la Biblia, sino que las han "visto" dir.ceta­ mente. Es mas, el sentido mismo de la palabra rishi es "aquel que ve". EI no-dualismo no tiene ninguna dificul­ tad en particular en aceptar la noci6n de evoluci6n. Esta evoluci6n se situa en el seno de la verdad empiriea (vyavaha­ rika), y no cambia en nada 10 Absoluto. Por el contrario, el no-dualismo no cree que nuestro mundo vaya haeia un paraiso en la tierra, 0 que Dios se manitleste en este mundo cada vez mas, ni en todo cste eontinuismo. Es cierto que existen mejo­ ras netas en ciertos campos, pero tambien existen regresiones en otros. EI espiritu de las gentes es mas refinado, pero al mismo tiempo mas susceptible de sufrir Jacques Vigne por motivos mas su misma de un Dios er hace mas evidente aur mal. La creencia en que la tierra seguira una cur continuo a la manera C industrial de un pais en tiene mas bien el aire c de la revoluci6n indus lista no tiene necesidad var su trabajo sobre Sl 1 demas. La creencia en elliber entre dualidad y no-d La cuesti6n del jival1-1 en vida, permite rest proximidad y cI desac cepciones dualistas y Vedanta dice que el s liberarse eomplctamen que su consciencia se con el Absoluto, propu los dualistas. Para situar la cuestit), vida. Podemos deeir que cl noce un caso de libcrac del mismo Jesus. (32) India existcn ciertas es les, como la de Madl categorieamente csta P( resante notar que la 16g les conduce a poner la sustancias separadas en mente de Dios, el alme creer tambien en el pa etemos (los sectarios d unicos que crecn en ell de los lainistas). (33) E 'a: Vedanta y Hesicasmo o. (31) Al igual que ClS a los que no les s reglas monasticas de la India contem­ ;n demasiado al no­ cuando hablan del te se enfocan en el se beneficia de una hecha a mcnudo por )sito de la no-dual i­ neficia de otra Pala­ heeho mismo de que Dios personal. EI no­ tam poco posibilidad 1 progresiva de Dios que decir quc en el des palabras de las 'res Eso", etc ... ) se 'eladas a los antiguos las han oido de un ~ los profetas de la han "v isto" d i r.ccta­ 5entido mismo de la lei que ve". iene ninguna dificul­ aceptar la nocion de lucion se situa en el empirica (.yavaha­ ;n nada 10 Absoluto. no-dualismo no cree iaya hacia un paraiso )ios se manifieste en ~ mas, ni en todo este 10 que existen mejo­ ampos, pero tambien en otros. El espiritu as refinado, pero al susceptible de sufrir Jacques Vigne por motivos mas sutiles, La noclOn misma de un Dios enteramente bueno hace mas evidente aun e\ escandalo del mal. La creencia en que la felicidad sobre la tierra seguira una curva de crecimiento continuo a la manera de una produccion industrial de un pais en optimo desarrollo tiene mas bien el aire de una "metafisica de la revolucion industrial". El no-dua­ lista no tiene necesidad de ello para moti­ var su trabajo sobre SI mismo y sobre los demas. La creencia en el liberado en vida nexo entre dualidad y no-dualidad La cuestion del jivan-milkta, el liberado en vida, permite resumir a la vez la proximidad y el desacuerdo de las con­ cepeiones dualistas y no-dualistas. EI Vedanta dice que el ser humano puede liberarse completamente en esta vida y que su conseiencia se convierte en tina con el Absoluto, propuesta que rechazan los dualistas, Para situar la cuestion del Iiberado en vida. Podemos decir que el cristianismo reco­ noce un caso de liberado en vida; se trata del mismo Jesus. (32) Por otro lado, en India existen ciertas escuelas devociona­ les, como la de Madhva, que rechazan categorieamente esta posibilidad. Es inte­ resante notar que la logica de este reehazo les conduce a poner la existencia de tres sustancias separadas en la base respectiva­ mente de Dios, el alma y el mundo, y a creer tambien en el paraiso y el intlemo etemos (los sectarios de Madhva son los unicos que creen en ella en India, a parte de los lainistas). (33) En el fondo, coinci­ 159 den con la concepcion cristiana ordinaria. Por el contrario, Vivekananda describe asi al liberado en vida: "Todo el tiempo esta en 61. pero et no esta en el tiempo. Todos los paraisos estan en el, pero 61 no esta en esos paraisos". (34) Si aceptamos el hecho de que el sufrimiento viene de la ignoran­ cia y no del pecado, es muy logico dedr que un conocimiento completo puede liberar de las ataduras. No se trata de un eonoeimiento intelectual, sino experien­ cia!. Un antiguo texto dc India dice: "Si bien el conoeimiento no puede ser co no­ cido en tanto que objeto separado, puede ser al menos realizado en tanto que sujeto puro". (35) Esto nos lleva a haecr una distincion esencial que es constante en India, pero que no se ha estableeido tan elaramente en el cristianismo: la difereneia entre 10 que no puede ser dicho y 10 que no puede ser cxpcrimentado. De heeho, podemos hacer dos 1istas de citas escriturales igualmente importantes: Dios se revel a completamente, en particular a traves de lesucristo, y podemos vcrlo cara a eara; en el lado opuesto, Dios cs inaccesible, cscondido en la vaguedad. Esta contra­ diccion ha hecho correr entre los pens a­ do res cristianos rios de tinta. La solucion no-dualista es muy simple: se trata de distinguir, en la interpretacion de "inac­ cesible", el dominio del lenguaje 0 de la razon del de la experiencia directa. La esencia divina, 0 el Absoluto, es inacce­ sible a los primeros, pero accesible a la segunda. No se trata de hacer de Dios un objeto de conocimiento, sino de conver­ timos en el Conocimiento mismo. Encontramos ciertas ideas no-dualistas en el Antiguo Testamento: pienso por ejem­ 160 No-dualidad y Mistica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo plo en ese extrano pasaje del Oeuterono­ mio donde no se sabe quien de los dos esta hablando, si Oios 0 Moises. (Oeut 29,1-6) Moises empieza por afinnar: "Habeis visto con vuestros ojos 10 que Yahve hizo ..." (v.4) "os he hecho caminar cua­ renta anos por el desierto" 10 que puede entenderse como dicho por Moises, por Oios mismo, 0 por los dos a la vez " ... con el fin de que aprendierais que yo, Yahve, soy vuestro Oios". En general, se traduce la frase introductoria del salmo 90 como "oracien de Moises, hombre de Oios", pero en realidad dice "Is ha Efoi", palabra por palabra: "EI hombre, el Oios"; es decir, el hombre que es Oios segun la fonna habitual de la frase hebraica. Si el autor hubiese querido decir rcalmente "El hombre de Oios", habria escrito "Sep E/oi". Esta expresi6n de cl "hombre­ Oios", aparece a menudo en el Libro de los Reyes, en particular a prop6sito de Eli­ seo y los milagros que realizo (R IV 21, por ejemplo). Para los Padres, la deifieaci6n completa del hombre no es posible hasta la 1l1uerte, 10 que corresponde a la liberaci6n en cl momento de la separaeion del cuerpo (vi­ deha mukti) que acepta el vedanta (ade­ mas de la de jivan-mukti) e igualmente las eseuelas devocionales. En el Antiguo Testamento, la expresi6n "sereis como dioses" es ambivalente. La utiliza la ser­ piente para tenlar a Eva (Gen Ill, 5), pero Yahve dice tam bien a Moises "seras un dios para Aaron". (Ex 4, 16) Los dualis­ tas rechazan la idea del conocimiento de la eseneia de Oios por miedo a la desme­ sura. Oicho esto, los liberados en vida de la India son en su comportamiento un ejemplo de perfecta simplicidad. Por otro lado, desde el pun to de vista teorico, carecen de base alguna para el orgulJo, puesto que carecen de ego. Los dualistas dicen que el hombre no puede conocer aDios, si no se convertiria en todopoderoso, omnisciente y creador, pero un gran sabio como Ramana Mahar­ shi rebate la objeci6n diciendo que son nuestras proyecciones antropomorficas las que prestan esas cualidades a Oios: "La grandeza de alguien crece en proporcion a su humildad. La raz6n del ser supremo de Oios, que haee que todo el universo sc incline ante el, es su humildad sublime que no conoce el mas minimo ego, a1m en los 1110mentos de desatencion". (36) Dc la misma manera, cuando se preguntaba a Ramana Maharshi si 61 era omnisciente, simplemente respondia: todo 10 que tengo necesidad de saber". En cuanto al poder creador, cste no es considerado en el hinduismo como algo supremo. El dios considerado como creador, Brahma, es asistido por un organizador, un buen arte­ sana Hamado Ylshvakarma (el que hace el mundo). Es el dios espeeifico de 1a casta de los artesanos y mas reeientemente de 1a de los ingenieros ... Ademas, el poder creador no esta completamente exeluido de los jivan-mukta. Las materializaciones fonnan parte de los milagros registrados en las vidas de los santos de India, aun en el siglo xx. EI guru mas eonocido actual­ mente en este campo es Sathya Sai Baba, del cual se ha intentado desenmasearar la supercheria sin demasiado exito aparente­ mente, a pesar de easi medio siglo de esfuerzos. Se dice que tiene cerca de ein­ cuenta millones de discipulos por todo el mundo. Antes de decir que eI hombre no puede realizar la esencia de Oios porque no posee los poderes, deberiamos revisar la concepci6n que tenemos de 6stos para Jacques Vigne preguntamos si nc antropomorfica, mar de super-hombre dot Sigllos de fa experi mistieo cristiano. La experiencia no-d alliberado en vida. ~ porciona una estabi autores cristianos I dos grupos: los prill te610gos u obispos sionales, rechazan manera violenta, vie del orgullo de Luci: nlcros sintomas de i quia, que se ha hi ascntar una base sol fieles para asentar s grupo de autores, c todo a los misticos, piensa que es posibl posibilidad de recha taJgia la divinizacic via que les es prohi! dualista. Podemos citar algUi los autores del pri creen en la posibi completa del mal t: corresponde a la Jean Climaque hab "perfeeta y nunca pe tos... (37) Pareee s siempre miedo d~ incluso en su !echo manos 10 veian lion Ie preguntaron: "En Glu tienes miedo, p, respondio: "En \Cf( tengo ahora me aeol lila: Vedanta y Hesicasmo Jacques Vignc suna para el orgulIo, de ego. pre gun tamos si no es exeesivamente antropomorfiea, marcada por el arquetipo de super-hombre dotado de super-ego ... que el hombre no )s, si no se convertiria mnisciente y creador, ;omo Ramana Mahar­ ion diciendo que son es antropomorficas las lalidades a Dios: "La crece en proporeion a .on del ser supremo de e to do el universo se su humildad sublime as minima ego, aun cn ~satencion". (36) Dc la ando se preguntaba a si el era omnisciente, rldia: "Se todo 10 que , saber". En euanto al no es considerado en algo supremo. EI dios creador, Brahma, es mizador, un buen arte­ 1karma (el que hace el especifico de la casta uis recientemente de la .. Ademas, el poder mplctamente excluido Las materializaciones s milagros registrados ;antos de India, aun en 1 mas conoeido actual­ 10 es Sal/zya Sai Baba, .tado desenmascarar la lasiado exito aparentecasi medio siglo de lue tiene cerca de cin­ discipulos por todo el eeir que el hombre no ;encia de Dios porque es, deberiamos revisar tenemos de estos para 1 Sigl10s de la experiencia no-dual en eI mistico cristiano. La experiencia no-dual es 10 que define al liberado en vida. Su realizacion Ie pro­ poreiona una estabilidad completa. Los autores cristianos puedcn dividirse en dos grupos: los primcros, sobre todo los teo logos U obispos predicadorcs pro fe­ sionales, rechazan esta posibilidad de manera violenta, viendo en ella una sefial del orgullo de Lucifer asi como los pri­ meros sintomas de insumision a la jerar­ quia, que se ha hecho necesaria para asentar una base salida del pecado de los fieles para asentar su poder. EI segundo grupo dc autores, comprendiendo sobre todo a los misticos, monjes y solitarios, piensa que es posible esta perfecci6n sin posibilidad de rcchazo y evoca con nos­ talgia la divinizaci6n compIeta de esta via que les es prohibida por una teologia dualista. Podemos citar algunas reflexiones entre los autores del primer grupo, que no creen en la posibilidad de liberacion completa del mal en esta vida, 10 que corresponde a la experiencia comun. Jean Climaque habla de la perfecci6n "perfecta y nunca perfecta" de los perfec­ tos ... (37) Parece ser que Arsenio tuvo siempre miedo de estar en pecado, incluso en su lecho de muerte. Sus her­ manos 10 veian llorar en ese momenta y Ie preguntaron: "En verdad tu tambien, (,tu tienes miedo, Padre?", a 10 que este respondi6: "En verdad, este miedo que tengo ahora me acompafia desde que me 161 hice monje". , y se durmio asi. (38) La opinion mas comun es que las pasiones continuan existiendo; simplemente han sido encadenadas por los santos. (39) Aun as!, si Ieemos atentamcnte los testi­ monios de los misticos, cncontramos numerosas alusiones a la experiencia no­ dual y a la perfeccion estable. A menudo, intentan rccobrarse de la impresion diciendo que su union con Dios solo existe en los limites de la diferencia de las naturaJezas, 10 que aparece como una reanudacion racionalizada y secundaria de la experiencia misma. En cl Nuevo Testamento, hay una confesion de San Pedro que molesta bastantc a los teolo­ gos. En su segunda epistola (II P I, 4) dice: "... con el fin de que seamos "comuncs" a la naturaleza divina" (lheias koinol1oi phuseos). Koinolloi significa "comunes": "participantes" es una tra­ ducci6n edulcorada. Simeon el Nucvo Teologo dice: "Para los perfectos que estan ya dentro de la luz divina, el dia del Sefior (el Juicio Final) no llegara nunca (40); 0 incluso: "Oh divino Amor, el que te ha conocido 0 ha sido conocido por ti no sabra como eoncebir duda alguna." (41) Era el mismo Sime6n el que afim1aba no solamente la posibili­ dad, sino tambien la necesidad del estado de Iiberacion en vida al decir: HEI que no ha visto a Dios en esta vida no 10 vera en la otra". Serafin de Sarov, en su celebre entrevista con Molotov, no va a la zaga: "Tenemos que aspirar a la medida per­ fecta de la estatura del Cristo ... Enton­ ces, esta alegria que sentimos parcial y breve, aparecenl en toda su plenitud col­ mando nuestro ser de delicias inefables que nadie podra arrebatamos". (42) Babla visiblemente de una experiencia 162 ;"io-dualidad y klistiea Cristiana: Vedanta y Hesicasmo que sohrepasa esta vida. Ciertos Padres reconocian que la guerra entre el vieio y la virtud toca a su fin, que todo se eon­ vierte en Iuz, y que la gracia aetua sin cesar. (43) En ese momento, la vela del inteIecto se eonvierte toda ella en luz divina. Jean Bar Kaldoun, de la tradieion monas­ tiea siria, describe el progreso espiritual de una manera que recuerda mucho a las Upanishads: HEI cuerpo se vuelve misti­ camente sutil y sustituye al alma; el alma sustituye a la inteligencia, la inteligeneia al espiritu, y este se convierte en Dios, es Dios verdadero, y el euerpo, el alma y la inteligencia Ie sirven. Dejame, hermano, y no me fuerees a hablar demasiado de cste estado ... El que se ha vuelto digno de el no tiene necesidad de ser instruido desde el exterior: es su propio maestro". (44) Encontramos entrelazadas muy a menu do las nociones de union completa con 10 divino y de liberacion no menos completa de la dependencia de est a vida. En la Kat!w-Upanishad, encontramos la progresion siguiente: "Por eneima de los objetos de los sentidos se encuentran los sentidos, por encima de estos se eneuen­ tra la mente, por encima de la mente el inteleeto... el gran Ser (alman)... 10 inmanifestado ... la Persona; por encima de la Persona, no existe nada en absoluto. Es el fin. Es la via suprema. Aunque estii escondido en todas las cosas, el Ser no brilla. Sin embargo, es visto por los rishis sutiles, dotados de un inteleeto superior y sutil". (3 6 10-12) Una imagen que aparece l11uy a menudo en los misticos dualistas es la del alma en tanto que puro espejo de 10 divino: eneontramos la misma comparaeion en los no-dualistas, que consideran el ego en si-mismo como un reflejo del Ser. Si reflexionamos a prop6sito de esto ultimo, (,c6mo podria un espejo reflejar verdade­ ramente el infinito sin forma sin ser as i­ mismo infinito y sin fonna, es decir, a la par eseneia con este? No hay lugar para el velo de la distinci6n en la transparen­ cia completa a la cual haec alusion un mistico reciente del Monte Athos: "Cuando estemos completamente desnu­ dos, esa mirada de Dios sobre nosotros se convert ira para nosotros en visi6n de Dios". (45) Si no existe mas que una unica mirada, podemos decir que existe una unica Consciencia sin ohjetivo parti­ cular del cual tomar consciencia; es la definici6n misma de la experiencia no­ dual. Existe una Consciencia que esta mas a11fl de la dualidad de las substancias humana y divina; no es a esta Consciencia a la que aludia San Nilo del Sinai cllando decia: "La plegaria es el preludio del conocimiento transustancial". (46) Jean Climaque cita el verseto del salmo 46 apreciado por Ramana Maharshi: "Per­ maneced en silencio y sahed que yo soy Dios", afladiendo simplemente "y Yo soy la impasihilidad (apatMia)". No dice "me reflejo en la impasihilidad"; dice, haciendo hahlar a Dios, "yo soy la impa­ sibilidad". Lo que significa que esta parada de la mente que es la impasihiJi­ dad es en si la union compJeta y sin dife­ rencia con 10 Divino: encontramos exactamente la definicion del Yoga al principio de los aforismos de Patafljali. "EI yoga (uni6n), es el cese de los movi­ mientos de la mente". Tras este cese de todo movimiento, el ego desaparece y nos convertimos en uno con el mundo, Jacques Vigne segun la bella pal Optino: "Haz de ti Dios haga de ti el Las intenciones r tro Eckhart son ( por eso. No pued al profundo estw sobre el Maestro I rya, que muestra mentales entre 10: en la misma din: articulo. (48) A intluenciado por I se preocupa much las sustancias in HEI amor es la p transmuta en Dio: la identidad comp de reputacion CI Raehner no pucdi cubrir una compa dualista del tipo oceano al intenta' cia fundamental: profundidad, 10 mejor es que su ~ mente designamo es mas que una pc infinito que no pi la cuesti6n existc al que pueda cc (,prefiere su prele misterio infinito? he encontrado cr tan provocadores vedantinos, cOlm datta Maharaj. q es fiel", 0 como alguien que quer: ritual en un lel11 debo ir a los di, deben venir a mi' . Vedanta y Hesicasmo onsideran el ego en 'eflejo del Ser. Si 'sito de esto ultimo, jo reflejar verdade­ I forma sin ser asi­ anna, es decir, a la No hay lugar para n en la transparen­ :ll haee alusion un :l Monte Athos: lpletamcnte desnu­ )s sobre nosotros sc tros en vision de liste mas que una )s deeir que existe I sin objetivo particonsciencia; es la Ia experiencia no- a que esta mas alia ubstancias humana a Consciencia a la del Sinai cuando es el preludio del tancial". (46) Jean seto del salmo 46 la Maharshi: "Per­ f sabed que yo soy )Iemente "y Yo soy atluHa)". No dice Ipasibilidad"; dice, s. "yo soy la impa­ ;ignifica que esta Je es la impasibili­ ompleta y sin dife­ ino: encontramos icion del Yoga al smos de Patafijali. I cese de los movi­ . Tras este cese de ego desaparece y mo con el mundo, 163 Jacqlles Vigne segun la bella parabola de Ambrosio de Optino: "Haz de ti nada, con el fin de que Dios haga de ti el universo". (47) Las intenciones no-dualistas del Maes­ tro Eckhart son evidentes: es conocido por eso. No puedo hacer sino remitirme al profundo estudio de Bernard Bazel sobre el Maestro Eckhart y Shankaracha­ rya, que muestra las similitudes fund a­ mentales entre los dos misticos y que va en la misma direccion que cl presente articulo. (48) Angelus Silesius, muy intlucnciado pOl' el Maestro Eckhart, no se preocupa mucho de las distinciones de las sustancias infranqueables al decir: "EI amor es la piedra filosofal que me transmuta en Dios". (49) EI resultado es la identidad completa. IncIuso un te610go de reputaci6n confirmada como Kart Raehner no pucde hacer mas que redes­ cubrir una comparacion tipicamente no­ dualista del tipo gota de agua en el oceano al intentar evocar esta experien­ cia fundamental: "AI lIegar a la ultima profundidad, 10 que el hombre sabe mejor es que su saber (0 10 que comun­ mente designamos con este tennino), no es mas que una pequena isla en el oceano infinito que no puede ser cruzado y que la cuestion existencial que se Ie plantea al que pueda conocer es la siguiente: l,Prefiere su pretendido saber a la mar del misterio infinito?" (50) Sin embargo, no he encontrado cristianos que osaran ser tan provocadores como ciertos maestros vedantinos, como por ejemplo Nisarga­ datta Maharaj, que decIaraba "Dios me es fiel", 0 como Plotino respondiendo a alguien que queria llevarlo a asistir a un ritual en un templo "No soy yo quien debo ir a los dioses. son ellos los que deben \enir a l11i ..•• (5] ). La ese/Kia de Dios. i,Puede la esencia de Dios ser revelada al mistico? Los no-dualistas responden si a esta pregunta, los dualistas no. Es intere­ sante retomar los argumentos avanzados por Juan Crisostomo a favor de la incom­ prensibilidad de Dios y de hacer una cri­ tica desde el punto de vista no-dualista. Juan Crisostomo se oponia a los anome­ nicos que afirmaban que podia conocerse a Dios. Para c1arificar el debate hay que distinguir, como hemos heeho anterior­ mente, entre conocimiento intclcctual y conocimiento expericncial. El primero no permite conocer aDios -ni tampoco intentar descubrir la "ecuaci6n de Dios" por cl eontrario, el segundo permite iden­ tificarsc con la consciencia pura de 10 divino, si seguimos en ello al no-dua­ lis1110. Puedc ser que los anomenicos, a pesar de las aeusaeiones de raeionalismo hechas por Juan Crisostomo, hayan desa­ rrollado una via real de eOl1ocimiento, al menos para algunos de ellos. De todas maneras, discutiremos a esc nivel sola­ mente, es decir, sobre la relaci6n entre la via del conoeimiento y la incomprcnsibi­ lidad de Dios. No podemos, a pesar de todo, ignorar completamente el contexto: se trataba de un ambiente muy poco agradable de polemiea, de caza del herc­ tico, que Juan parecia interrumpir sobre todo para luchar contra los Judios. EI tam poco pennanecia en silencio: fue el autor mas prolifico de la patrologia griega, con dieciocho volumenes en su haber. Tenia necesidad de predicar para su equilibrio personal. Por otra parte decia: "Mi predica me cura". (52) No es un muy buen signo psieologico-espiri­ tual. Su estilo no parece demasiado pro­ pieio para una verdadera meditacion 164 No-dttalidad y Aflstiea Cristiana: Vedanta y Hesicasmo sobre temas profundos. Habla asi de los anomenicos: "Creedme, me recorrio un escalofrio de horror en el momento de nombrar su idea, ya que tiemblo al expre­ sar por mi boca 10 que les agita sin cesar el espiritu y es la raiz de todos esos males. Lo que sucede es que un hombre ha osado decir: "Conozco a Dios como este se conoce a si mismo." (,Es necesario refutar una afirmacion de ese calibre? Es una locura evidente, una demencia imperdo­ nable, una fonna total mente nueva de impiedad; nunc a hasta ese momento nadie habia tenido la osadia de dar cabida a nada parecido en su espiritu 0 de expresarlo por su boca". (53) Sin embargo, esta defini­ cion de la tesis dc base de los anomenicos se corresponde muy bien con la via no­ dualista comun en Oriente y cs muy poco sospcchosa de demcncia. EI argumento de basc de Juan es mas bien simple: sc conocc muy poco del funcionamicnto dcl Universo, (,como podriamos conocer la csencia de Dios'? En parte, ya hemos dado respuesta a esta cucstion. En realidad no sc trata de cono­ cer la escncia de Dios como objeto, sino que ya somos esa esencia. Adcmas, (,por que intentar eonocer eomplctamente el funcionamiento del Universo') De hecho, se trata de problemas de meeanica mas bien de tipo secundario, Por el contrario, conocer la esencia de Dios cs el fin supremo y merece que Ie dediquemos nuestras practicas espirituales. Para reconciliar el "He visto aDios cara a cara" de los profetas con el "Por el momento no vemos a Dios sino parcial­ mente" de San Pablo, podemos avanzar al menos dos interpretaciones: primero, puede ser que San Pablo dijera "parcial­ mente" por humildad, para no chocar a los lectores de su epistola; 0, segunda interpretacion menos habitual, efectiva­ mente no conocia a Dios mas que en parte en 1a epoca en que escribio su epis­ tola: estaba en su fase activa, ocupado en formar comunidades en las diferentes partes del imperio romano. Por el contra­ rio, posiblemente pudo conocer aDios completamente antes de su martirio. La proximidad de la muerte fisica acelcra la muerte del ego y sus identificaciones, hacia un papel de misionero 0 predica­ dor. No pudo 0 no quiso hablar de csta experiencia; es una hipotesis que no podemos probar, pero que tampoco puedc ser rechazada. Habria tambien otros puntos por discutir, pero vol vamos al punto crucial: en cl fondo, Juan Cri­ sostomo, en tanto quc presbitero y res­ ponsablc de la disciplina, no es partidario de los misticos: "Si Dios nos prohibc este conocimiento (sobre la manera en que el alma se encuentra en el cuerpo), es para cerramos la boea y contenemos mas facilmentc, con el fin de cnsenamos a conformarnos con nuestra humildc con­ dicion, sin qucrer escrutar algo quc nos sobrcpasa, y a renuneiar a una curiosidad indiscreta". (54) En tcrminos mas diree­ tos, se trata de la condena de la mistiea autcntica a favor de una espeeie de pic­ dad perczosa, reducida, de tipo parro­ quial que nos propone Juan. Es una pena que haya sido tan escuchada y seguida, La verdadera pregunta que debemos hacemos es la siguientc: si Iimitamos a priori la posibilidad de experieneias espi­ rituales, I,no las estamos asi mismo des­ echando antes de tiempo? Los que rechazan la posibilidad del liberado en vida deberian preguntarse si no son los Jacques Vigne descendientcs del rasgo las vestidt cuando Jesus acep Dios", mientras q habia preferido la hombre". Al tene liberado en vida. I: otro miedo, de alg la del retorno del mesianica, sino como la primera \' teramente puesto to'ievski al pro\'( Cristo con el Gra rado en vida, por su propio maestro tro de una institl!( la Iglesia. Esta model0 impcrial 1 vida debe ser neut o de otra, y no ~ sino por razones deeirlo, 10 que es hinduismo, una d( rado en vida cs la taeion de los textc experiencia direct al cristianismo, 10 se debata entre 10 dores del CNRS un segundo resp sobre el progreso nas permanece I superficial. r La no-dualidad c y la practica No ten go nada qUi las practicas de I dente, y reenvio a espiritual que siga decir -y estoy cor "edalllCl y Hesicasmo para no chocar a ;tola; 0, scgunda abitual, efectiva­ )ios mas quc en ~ escribi6 su cpis­ ctiva, ocupado en ~n las diferentcs ,no. Por el contra­ I conocer aDios e Sll martlrio. La e fisieu ueelera la identifieaeiones, ionero 0 prediea­ so hablar de est a lipotesis que no o que tam poco Habria tambien if. pero volvamos fondo, Juan Cri­ presbitero y res­ a, no es partidario s nos prohibe este mancra en que cl I cuerpo), es para contenernos mas de ensenarnos a ;tra humilde eon­ Har algo que nos r a una euriosidad minos mas direc­ ena de la mistica a especie de pie­ I. de tipo parro­ uan. Es una pena hada y seguida. Jacques Viglle • descendientes del Gran Sacerdote que se rasgo las vestiduras (Mt XXVI, 15) cuando Jesus acept6 el titulo de "Hijo de Dios", mientras que hasta ese momento habia preferido la apelaeion de "hijo del hombre". Al tener miedo de la idea de liberado en vida, la institucion manifiesta otro miedo, de alguna fonna arquetipica, la del retorno del Cristo no bajo forma mesianica, sino bajo fomla humana, como la primcra vcz. Estc miedo fuc cer­ teramente puesto en evidencia por Dos­ tol'evski al provocar el encuentro del Cristo con el Gran Inquisidor. Un libe­ rado en vida, por el simple hecho de sel' su propio maestro, es un imposible den­ tro de una institucion centralizada como la Iglesia, Esta heredo directamente el modelo imperial romano, EI liberado en vida debe ser neutralizado de una manera o de otra, y no por razones de Estado, sino por razones de Imperio, por asi decirlo, 10 que es aim mas serio ... En el hinduismo, una de las funciones dellibe­ rado en vida es la de refrescar la interpre­ tacion de los textos sagrados mediante su experiencia direeta, Esto es 10 que Ie falta al eristianisl11o, 10 que haec que la Iglesia se debata entre los exegetas 0 los busca­ dores del CNRS para intentar encontrar un segundo respiro, pero el resultado sobre el progreso espiritual de las perso­ nas pennanece como algo superficial superficial, La no-dualidad en Occidente: la teo ria a que debemos ~: si limitamos a :xperiencias espi­ s as! mismo des­ :mpo? Los que del liberado en 'se si no son los y la pnictica No tengo nada que decir sobre la tecnica 0 las practicas de la no-dualidad en Occi­ dente, y reenvio a cada uno a la ensenanza espiritual que siga, Por el contrario, puedo decir -y estoy convencido de ello-, que es .1. 165 necesaria una practiea. En la tradici6n india, la verdadera ensenanza de la no­ dualidad se da sobre todo de maestro a discipulo, como tambien en el zen. Ade­ mas, ha habido personas como Viveka­ nanda que han llegado y han dcsalToliado un "vedanta practico" uniendo a una meditacion no-dual un compromiso en el trabajo social, 10 que crea un equilibrio, En efecto, los riesgos de una no-dualidad mal comprendida son evidentes. En un primer momento, se da el razonamiento primario segun el eual "todo esta en todo, luego no importa 10 que haga". Es aqui donde [enemos que eomprender la dife­ rencia de contexto cultural: los hindues pueden pasar con bastante facilidad de un Dios personal que castiga, ya que conside­ ran la ley del karma como evidentc. Creen finnemente en la responsabilidad del indi­ viduo que se prolonga hasta vidas ulterio­ res, Picnso que no puede haber enscnanza seria de la no-dualidad, de la impenna­ neneia y de la ilTealidad del mundo sin una educaci6n del sentido de la responsa­ bilidad al mismo tiempo. Otro ricsgo de la ensenanza de la no-dualidad y de la reali­ zaci6n espontanea es la pereza. El pro­ blema no es nuevo. El maestro zen Myoe se quejaba ya en el siglo Xll1: "La ley no tiene aspecto. Apareceran pues algunos discipulos que preferiran deseansar pere­ zosamente . .,". (55) Otro de estos riesgos es el orgullo -no es demasiado dificil repetir "yo soy Dios" 0 "yo experimento el Despertar" - sin duda un loro podria hacerlo si se Ie ensenase a hacerlo. La difi­ eliltad esta eiertamente en experimentar un verdadero despertar. Ademas, un minimo de buen sentido pennite com­ prender que no podemos decir demasiado "Yo estoy despierto" pucsto que si 10 esta­ mos real mente, l.qllien sigue ahi para 166 No-dualidady J.ffstica Cristiana: Vedanta y Hesicasmo decir "yo"? Es verdad que al leer textos no-dualistas tradicionales se tiene la impresion de que el despertar puede sobrevenir como por arte de magi a, pero al mismo tiempo, en sanscrito magia se traduce como Maya, y es justamente a esta maya a la que hay que poner fin. Para alguien que este aun fascinado Ja mayor parte del tiempo por la magia del munda multiple, (,es suficiente un simple toque de magi a suplementaria para hacer emerger la Realidad? Despues de los nuevos fila­ sofas y los nuevos pobres, l,Veremos a los "nuevos sofistas" intentando justificar una ausencia de practica personal? La no-dua­ lidad es como una especie de perdida de soporte, como el estar suspendido en el vacio. l,Quien osara lanzarse? La nocion de dval1dvatita, "mas alla de los contrarios", debe ser bien comprendida. EI jiiani (sabio no-dualista) esta eierta­ mente mas alIa de los conceptos de bien 0 de mal, pero podemos decir que se situa mas bien cerea del bien: en efeeto, no existe motivo alguno para hacer el mal, mal que de todas fonnas estaria inspirado por un ego que ya no existe. EI jiiani esta miiS bien por encima de las nociones de puro 0 impuro, e igualmente ha sobrepa­ sado las obligaciones rituales. A veees, puede poseer comportamientos critiea­ bles a ojos de sus discipulos, pero no tiene necesidad alguna de justificarse ante ellos con explieaeiones 0 razonamientos. La intensidad de su amor es suficiente para los que eomprenden que el sabio actua por el bien de otros a largo plazo. En 10 que eoncieme a los maestros no-dualistas, la palabra del Evangelio mantiene todo su valor: "Juzgad al arbol por sus fmtos". EI que da a entender que es un liberado, {,Io esta real mente de la dependencia del dinero, de la fuerza sexual, de su propia imagen de marca en tanto que maestro y de la tendencia a manipular? Viviendo durante cierto tiempo cerca de el con estos cuatro criterios bien presentes en nuestro espiritu, debemos poder damos cuenta bastante bien y sabremos si la primera impresian sobre el maestro era justificada o no. Otro tema que me parece importante tra­ tar, si deseamos el desarrollo de un no­ dualismo creiblc en Occidente, es la ley de la oferta y la demanda; {,el "mercado" espiritual esta regido por esta ley 0 ha conscguido transcenderla? Sai Baba de Shirdi, ciertamente el santo mas popular en la India del siglo XX, bien hubiera querido hablar a sus visitantes de la Libe­ racion, pero estos Je pedian mas a menudo gracias materiales 0 milagros. EI se resig­ naba a hacerlos diciendo: "Les doy 10 que me piden, esperando que me pidan 10 que yo quiero darlcs". Muchos buscadores buscan sobre todo oir 10 que les gusta. Van en busca de un psicologo ~o por que no, de un maestro espiritual, 10 que da mas prestigio- para hacerse perdonar todos sus pecados, en suma para eomprar indulgencias como en la Edad Media; en su fonna modema, pucde correspondcr a promcsas del paraiso de la Rcalizaeion sin fatiga, dejando el esfuerzo a los "primiti­ vos" que no conocen ni los trenes de alta vclocidad ni los ascensores espirituales, pero que se contentan con caminar eon sus dos piemas y no con tar ImlS que con sus propias fucrzas. EI proverbio indio: "Cuando el diseipulo esta preparado, apa­ rece el gum", tiene tambien su lado nega­ tivo, su sombra: "Cuando el discipulo esta prcparado para dejarse embaucar, los gums afluyen". Jacques Vigne Un defecto de 1m dia en relacion al dicional, es que facilmente a Prol ciencia espiritual un centro, etc ... de proselitismo muy a menudo financiera. Si bie! dad pueden desar dad pedagogica, corre el riesgo dt cado por un probl dad -Ia del mae~ privada- cohabi cuerpo. Si desean dualismo que sea car una reduccior tales provel1lcn informacion y sor hemos menciona penetra en la me En esto la psicolo el Yoga. La eXl tiene necesidad inmediata, y 1m "inmediatiea", co una palabra la i poner distaneia fr de polucion. Exis antigua China qu cemimicnto en cl espiritua\: "Atrac en la mayoria de sabiduria, sino d sabe practica, el ( El ultimo contra] Si queremos un los no-dualistas y tante saber 10 que sobre los dualista: I'edanta y Hesicasmo mal, de su propia nto que maestro y 1ipular? Viviendo Tca de el con estos ~sentes en nuestro er damos cuenta nos si la primera 5tro era justificada ce importanle tra­ ,arrollo de un no­ :cidente, es la ley da; i,el "mercado" )or esta ley 0 ha ~la? Sai Baba de ~anto mas popular XX, bien hubiera itantes de la Libe­ .ian mas a menudo agros. EI se resig­ ): "Les doy 10 que e me pidan 10 que lchos buscadores 10 que les gusta. :ologo -0 por que iritual, 10 que da hacerse perdonar 1ma para comprar :l Edad Media; en je eorresponder a la Realizacion sin "20 a los "primiti­ los trenes de alta ;ores espirituales, con caminar con ntar mas que con proverbio indio: a preparado, apa­ lien su lado nega­ J el discipulo esta ! embaucar, los Jacques Vigne Un defeeto de los oecidentales de hoy en dia en relacion al modo de ensenanza tra­ dicional, es que se lanzan demasiado facilmente a propiciar la toma de cons­ ciencia espiritual de otros, la apertura de un centro, etc ... Existe aqui una mezela de proselitismo de nuevo converso y, muy a menudo tambien, de necesidad financiera. Si bien por este tipo de activi­ dad pueden desarrollar una cierta habili­ dad pedagogica, su progreso interior corre el riesgo de entorpecerse, compli­ eado por un problema de doble persona li­ dad -Ia del maestro y Ja de la persona privada- cohabitando en el mismo cuerpo. Si deseamos una practiea del no­ dualismo que sca creiblc, debemos bus­ car una reduccion de las imagenes men­ tales provenientes del exeeso de informacion y soportes audiovisualcs. Ya hemos mencionado esto: todo 10 que penetra en la mente deja trazos en ella. En esto la psieologia estil de acuerdo con el Yoga. La experiencia espiritual no tiene necesidad de intennediarios, es inmediata, y me gust aria poder decir "inmediatica", con e1 fin de condensar en una palabra la imperiosa necesidad de poner distancia frente a esta nueva forma dc polucion. Existen dos provcrbios de la antigua China que pueden aguzar el dis­ cemimiento en cl campo de la ensenanza espirituaJ: "Atraer a mucha gente no es en la mayoria de las veces una prueba de sabiduria, sino de habilidad" y HEl que sabe practica, el que no sabe ensena". EI ultimo contrapunto del dos y del Lno Si queremos un verdadero dialogo entre los no-dualistas y los dualistas, es impor­ tante saber 10 que piensan los no-dualistas sobre los dualistas. Es 10 que he intentado 167 precisar, entre otras cosas, con este estu­ dio. Habitualmente, la comparacion entre estas dos grandes tendencias es hecha tanto por los teologos cristianos, como por los universitarios que se sientcn obligados a mantenerse en una neutralidad casi asep­ tica. No es esta mi posicion: prefiero hablar directamente desde el punto de vista de la via que sigo desde los ocho anos que hace que vivo en India, es decir la no-dualidad, y expresar claramente la fomla en que yeo las cosas. En un sentido, visto desde la euspide, la diferencia entre las dos vias de conocimiento y devocion es infima. El dualismo tiende hacia su pro­ pio limite, y el no-dualismo lIega hasta el. Sin embargo, desde eI punto de vista del mistieo que esta progresando, esta dife­ rencia puede representar un gran precipi­ cio, una verdadera noche del espiritu . Sobreviene cuando se da cuenta de que la divinidad a la cual podia hablar, tener visiones, se disuelve, y que su forma puede que no fuese mas quc una proyec­ cion de su propia mentc. Si pasa esta prueba, descubre la deidad mas alia de Dios, que 10 hemos lIamado "meta­ teismo", mas alia del monoteismo. No podemos seguir todas las vias a la vez. Aun asi, a menudo se dice en India que en un verdadero jiiani existe un bhakta escondido, y viceversa. Amor y conoci­ miento van a la par. EI amor purificado del que habla San Juan est ade hecho muy proximo al conoeimiento. Vivekallanda pudo decir: "El verdadero ateismo es no creer en si mismo". Algunos maestros espirituales de la India modema como Ramakrishna, Ma Anandamayi y actual­ mente J\1a Amritanandamayi muestran bien que se trata de un estado que puede ir y venir del Amor al Conocimiento, eon 168 No-dualidady Mlstica Cristiano: Vedanta y Hesicasmo una facilidad perfecta. Podemos encontrar en los Evangelios, y en particular en el discurso de la Ultima Cena en Juan, "grandes palabras" amilogas a los Maha­ vakyas de las Upanishads, como "Til eres Eso", etc ... Pueden servir de meditacion para aquellos cristianos que quieran evo­ lucionar hacia el no-dualismo, tal y como hemos dicho mas arriba: "Yo estoy en mi Padre, vosotros estais en mi y yo estoy en vosotros" (In XIV 10), 0 tambien "Que todos sean Uno: como til, Pedro, til en mi y yo en ti, que ellos sean tambien Uno en nosotros". (In XVlI 20) Por otra parte, cuando San Pablo dice: "Ya no soy yo el que vive, es Cristo quien vive en mi" (Gal II 20), podemos preguntamos, en esta afir­ macion, de que "yo" se trata. (,En que se convierte la persona del inicio? i,A donde va la personalidad? .. Encontramos en otras partes f6nnulas parecidas de unidad que resuenan en nosotros como mantras, por ejemplo la famosa expresi6n de Spinoza: HEI amor con el que el alma ama aDios es una parte del amor que Oios siente por si mismo". (56),0 esta parabola que A1u Anulld([IIl([.vi repetia tan a menudo: HEI Ser etemo, el etemo peregrino, es EI, es s610 El". Eugra­ phe Kovalevsky aconseja una plegaria cuya eficaeia experimental es, segun dice, absoluta ~posiblemente porque es la expresion direeta de un cristianismo no­ dualista. Esta oraci6n es muy simple: "Amate Tu mismo en mi". (57) San Pablo oponia la sabiduria de los filosofos a la locura de la devoci6n a Cristo. Pero parece que la devoci6n se volvi6 sabja y familiar: al Padre y al Hijo se les afiadi6 la Madre; el "loco" esta mas bien muy prote­ gido. Par el eontrario, el que sigue con intensidad la via del conocimiento, (,no puede ser llamado un autentico loco de Dios? Se llega en efecto hasta un pun to, en el que ya no existe ni loco ni Dios. EI no-dualisl11o es particulannente intere­ sante para un monje, es bien sabido en India, domle el Vedanta corresponde al cuarto estadio de la vida, el del renuncia­ miento (sClnl1yas). En efecto, el 1110nje cuyo nombre significa "solo", "uno", (,110 aspira a la Unidad? (,Por que deberia ser condenado a perpetuidad a la dualidad metafisica por una teologia que esta demasiado influenciada por la experiencia COl11lm de la dualidad en la vida ordinaria? EI mendicante que no tiene mas que una moneda se aferra a esta desesperada­ mente, pues no tiene nada mas. No seria simplementc por falta de expericncia mis­ tica por 10 que un gran nluncro de te610­ gos se aferra a las diferencias, ahi donde el que posee la plena riqueza de la experien­ cia interior ve la unidad. Sc me podra objetar que he tomado partido por la no-dualidad en este estudio y que no hc prcslado la suticicnte atenci6n al con­ texto dualista en el que mis palabras han sido pronunciadas. Pero justamente, como he remarcado a partir de un texto del Maes­ tro Eckhart, al baber sido cstas pronuneia­ das en un contexto dualista se puede estar seguro que han brotado dc la experiencia mis111a, mas que de un condicionamiento 0 de un aprendizaje. Un 111istieo puede saciarse en su juventud del dualismo, que es una metafisiea de la dependencia, pero cuando madura aspira a vivir una metafisica de la independencia, del Solo y del Uno. Jacques Vigne siste cn deshacers ideas prcfabricada muy tranquilizad momento en el qu una politica de pasional, un mistic sio -que seguia la pudo eseribir: "T segiln esta verda indiscutible de la ' bien, habiendo he que ereo buena, nu troversia con los ( tengo bastante cc Que Ie plazca a Di ceda". (58) A prop6sito de I hay un acercamie realizar entre el ( otro Oriente qu incrcada, tan imr ortodoxa, correspc I. Swami Ramilil Vigne J. La reI 4. Monchanin J. y el Yoga. 5. Patafijali, }bgl, 6. De Smedt, H. 7. Le SaliX H. In, x. Talk~ Ifilil Ral. 9. MaAnandam: 10 Nisargadatta" suis Cela'. II. 12. Una sola )uz 14. 15. La via del conocimiento lIeva a la tole­ raneia por su meto do apofatico, que con- Les Recils d'/II 2. 16. 17 Tripura Ra/l<L' Semons sur Ii:' StaaL Admita Lossky, Elsal Delseille PI.. I Jean Climaqu 1 /'(,(/01110 Y HesicaSl110 autentieo loco de o hasta un punto, i loco ni Dios. EI .llannente interc­ :5 bien sabido en a correspondc al 1. el del renuncia­ efccto, el monje 'solo", "uno", (,no lr que deberia scr ad a la dualidad :ologia quc esta por la expericncia la vida ordinaria? Icnc mas que una ~sta dcsesperada­ da mas. No seria : expcriencia mis­ numcro de tcolo­ leias, ahi dondc cl za de la experien­ he tomado partido ~ cstudio y que no : atencion al con­ mis palabras han justamente. como m texto del Maes­ ) estas pronuncia­ sta se puede estar de la experiencia mdicionamiento 0 1 mistico puede :1 dualismo, que es lependencia, pero ivif una metafisica ;010 y del Uno. ) lleva a la tole­ oHitico, que con- 169 Jacques Viglle siste en deshacerse regulannente de las ideas prefabrieadas, de los eslogans. Es muy tranquilizador ver que en un momento en el que el eristianismo tenia una politica de expansion mas bien pasional, un mistieo como Pseudo-Dioni­ sio -que seguia la via del conocimiento-, pudo escribir: "Todo 10 que no existe segun esta verdad desaparece ante 10 indiscutible de la verdad intrinseca; tam­ bien, habiendo hecho mia csta opinion que creo buena, nunca he buscado la con­ troversia con los Griegos u otros, ya que tengo bastantc con conocer la verdad. Que Ie plazca aDios y que el me 10 con­ ceda". (58) la luz espontanea del Ser de la que tan a menudo habla el Vedanta. Despues de todo, (,Porque de este Oriente donde el sol se eleva nacerian dos luces difcren­ tes? No existe una difereneia tan grande entre la via de la devoei6n que dice "Yo soy Tuyo", y la del eonocimiento que dice "Yo soy Tu". En ambos casos se trata de una disolucion del ego que abre las puer­ tas del Amor puro, 0 de la felicidad del Conocimiento completo (vijiianCln(lllda). Como conclusion a este estudio, me gus­ taria dejar la palabra a Kabir, esc sabio que fue tejedor en la Benares del siglo XVI: A propos ito de la experiencia no-dual hay un acercamiento muy interesante a realizar entre el Oriente cristiano y esc otro Oriente que cs India. La luz incrcada, tan importante en la mistica ortodoxa, corresponde a la svaprakasha) "Si yo digo "Uno ", 110 e8 eso. Si digo "do" ", es una wlumllia. Kahil' fla meciilado mucho acerca de eso. Es como es. "(59) Notas Parte l. Sobre parar la mente Les Recits d'zlII pidel'il1 I1Isse, Points Sagesse SeuiL Swami Ramdas, Les Camels de peierinage. Albin Michel, Spiritualites vivantes. 3. Vigne 1. La repetici6n. These de lIIi:decine, 1983 Pans, Saint-Antoine. 4, Monchanin J. Afysliquede {'Inde. chretiell, Fayard 1974, con illl capitulo sobre el Hesicasmo yel Yoga. Patai1jali, }hga Sutra.I·, Spiritualites vivantes. De Smedt, £loge du silence, Albin Michel. Le Saux H, Initiation a la spirilUalite des Upani51wds (parte sobre los salmyas), Presemce 1979. R. Talks "'itll Rail/ana Malrarshi, Ramanashram, Tiruvanamalai; pA57. 9. Ma Anandamayi, Words, p.60, SMCS Calcutta. ]0. ::\isargadatta Maharaj, 1am ThaI, Chetanya. Bombay, p.261 pubJicado en frances en DelLx Oceans 'Je suis Cela'. II. T,'ipura Rahas.'ra, Ramanashram, p.67. 12. Semans sur Ie zen, Spiritualites vivantes, pA8. :4. Staal, Advaita and Neoplatol1ism, Madras p.169. 15. Lossky, Essai Sill' la lheologie lIlystique de l'Egli"e d'Orient. Le Cerf; p.205. l6. Delseil1e PL. all eMscrt, Oeuil, p.294. 17, Jean Climaque, L'eehcile, Sainte Abbaye de Bellefontaine, p.142. I. 2. Jacques Vigne 1"/o-dualidad y Mistiea Cristialla: Vedallta y Hesicasmo 170 n Kadoublovsky & Palmer, Early Fathers jiVI11 the Phi/okalia, Faber, London, p.188. DeshimaIU, La pratique du zen, Spiritualites vivantes. Hausherr, Hes)'chasl11e et priere, Institutum Otientalium StudioIUI11 Rome, p.II. Guy Je. Paroles des Anciens, Points-Sagesse, Seuil, p.4S. 22. ib p.45. 23 ibp.120. Delseille, op.cit., p.322. Kadoublovsky, op.cit, p.204. Leloup JY, Pamles du Mont Athas, p.34. Kadoublovsky, p.84. Guy, p.64. Leloup, p.82. 18. 19 20. 24. 25. 26. 27. 2R 29. Parte II: Psicologia de la ascesis Guy, op cit, p.6°. Ail11e Michel, .MetanoiG, phcllomc!I1es pIJ}:,iques et p\'sticismc, Spititualites vivantes p.78. :< Guy, p.S7. 4. Lacamcre, Les hOllll11es ivres de Dieu. Points-Sagesses. 5. Guy, p.n (, Ib p.77. 7. Kadoublovky, p.219. Jean Climaque, p.142. 9. lb., p.299. 10. Ib., p.IIS. II. Guy, p.169. 12. Kadoublovsky, p.213. 13. Delseillc, op.cit. p.180. 14. lb., p.170. 15. Leloup, p.33. 16 Kadoublovsky, p.220. 17. Kovalcvsky, La quete de l'espirit, Spititualites vivantes, p.194. Ix Lossky, op.cit., p.203. 19. Hausherr, La Phi/alltie Pont, Institutum Otientalium Studioraum Rome, p.44. 20. lb., p.45. 21. lb., p.54. 22. Nisargadatta Maharaj, Prior to Consciousness, Acom Press USA, p.67. 23. Swahananda, Meditation and its me/hod, Advaita Ashram Calcutta. 24. Kadloubovsky, p.78. 25. Winn D., The manipulated Mind, Octoagon Press, London, p.70. 26. Vigne, lv/editatloll et psychologie, (Capitulo sobre las sustancia'i), Spititualites vivantes. 27. Saint Athanse. Saint Antoine. Ie Pere des moines, Cerf, p.66. 28. Drewennann E., Fonctionnaires de Dieu, Albin Michel, p.241-251. 29. Hausherr, p.128. 30. Saint Athanase, p.82. 31. Guy,p.68. 32. Jourdan Michel, La Vie d'emlite, Spiritualites vivantes. 33. Sobre la obediencia y el martirio, cf. Vigne Jacques, Elements de psychologie spirituelle, Spiritualites vivantes, p.166 y 173. I. 2. Kadowaki, Lt Drewenl1ann. 3. Le Afessage C 4. lb., p.42. 5. Clement OliVI 6. Kadoublovsk; 7. Srimad De.-i 1 8. Bloom A .. en q. Vigne 1., Le 1/; 10. Meyendorf. G I L Jean Clil11aqu 12. If, p.268. 13. GUy,p.71. 14 lb., p.96. 15. Jean Climaqu 16. Vivekananda. 17. Guy,p.IS. IS. Hausherr. La . 19. Meyendorf, p I. 2. ParI Brosse Jacque Grant S., Tu\\' Pseudo-Dioni 4. Lossky, cap. I 5. Lacombe et C 6. Urosse,op.cit 7. lb., p.249. Camus A, I.l, 9. Pannikar R.. : 10. Citado por St II. Sermons Sill' , 12. Clement, p.l: n. Lossky, pp. II 14. Clement, p.1 : Varela F.. L'iI. 10. Nisargadatta. 17. Maestro Eck: I K Bader 1., .\/e, 19. Vigne, Le 111<1 20. Nisargadana. 21. Gmines de e, 22. Weldenfcb. 1 23. Bloom, p.50. 24. Kadoublm,k 25. lb., p.141. I. 2. 171 Jacques Vigne 1'('d(l/1la y lies/casillo Parte III: Un ascesis para nuestros dias 188. I. antes p.78. Kadowaki, Le zen et la Bible, Albin Michel, p.229. Drewemmnn, op.cit., pA18-529 y 604-631. Le Message Orrhodoxe, numero especial sobre 'Le Monte Athos a~iourd'hui', n095, p.56. 4. lb., pA2. s. Clement Olivier Berdiev, DDS, p.229. 6. Kadoublovsky, op.cit., p.275. 7. Srimad Devi Bhagamulln, Munshiram, Delhi, p.26. 8. Bloom A., en Technique el Conlemplatioll, DDB, p.59. 9. Vigne J., Le maitre elle t/U?rapeUle, Spiritualites vivantes, p.62. 10 Meyendorf, Gregory Palamas alld Orthodox spirituality Sl Vladimir, Seminary Press, USA, p.96. II. Jean Climaque, p.!76. 12. If, p.268. 13. Guy, p.71. 14 Th., p.96. 15. Jean Climaque, p.3! O. 16. Vivekananda, Meditatioll and its Alethods, Advaita Ashram, p.I30. 17. Guy, p.!5. 18. Hausherr, La Philaulie, p.190. 19. Meyendorf, p.2l. l. Parte IV: La no-dualidad: una necesidad para Occidente l. 2. 3. 4. 5. K 9. lil. II. 12. 13. i4. 15 16. ·ivantes. ?iriIUelle, Spiritualites 17. i8. 19. 20. 21. 22. 23. 24. 25. Brosse Jacques, Le :::.ell el I'Occidellt, Albin Y!iehcl 1992. Grant S., 7()Hwr/s (//1 altematil'e theolog)~ Asian Trading Corp. Bangalore. Pseudo-Dionisio, La tiIeo{ogie IIH'Sliqu(', Migne Brepols, p-K Lossky, cap. II. Lacombe et Gardet, L'experiellce du Sol, DDB, segunda parte. Brosse, op.cit., p.250. lb., p.249. Camus A., La peste, Gallimard, p.276. Pannikar R., The Unknowil Chrisl ofHinduism, Longman & Todd, london. Citado por Staal, p.1 O. Sermons Sill' Ie zen, p.!38-139. Clement, p.152. lossky, pp.!!9. Clement, p.!52. Varela F., L'inscription cOlporelle de l'e~pril, SeuiL p.97-130. Nisargadatta, PriOi' to COl/seiol/ness, p.12!. Y!aestro Eckart, Sermons JJ, p.147. Bader L Meditatioll ill Shallkara, Vedanta Aditya Prakashan, Delhi, cap. III. Vigne, Le maitre et Ie rherapeUle, Spiritualites vivantes. Nisargadatta, op.cit., p.90. Graines de conscience, Les Deux Oceans. Weldenfels, La meditatioll en Orient el ell Occident, Seuil, p.59. Bloom, p.50. Kadoublovsky, p.140. lb., p.141. 172 No-dualidad y Atisliea Crisliana: Vedanta y Hesieasmo Guy, p.42. Lossky, p.197. 28. The Moul1Iain Path, Ramanashram, Tiruvanamalai, Junio 1994, p.76. 29. Lossky, p.l28. 30. Eckart I, p.65. 31. Shanna CH.,A Critical Survey ofIndian Philosoph)\ Motilal Banarsidas, Delhi, p.167-171. 32. Vigne, Elements de psychologie spiriluelle, p.124-131. 33. Shanna, pJ72. 34. Vivekananda, J'lana Yoga, Advaita Ashram, p.1392. 35. Tripura Rahastya, Ramanashram, Tiruvanamalai. p.123. 36. Godman D. en The Moulltain Palh, Diciembre 1993, p.182. 37. Jean Climaque, pJ02. 38. Guy, p.30. 39. lb., p.40. 40. Lossky, p.234. 41. lb., p. 209. 42. lb., p.227. 43. Delseillc, p.207. 44. lb., p.227. 45. Le Mont At/lOS auiourd'hui, p.55. 46. Kad loubovsky, p. 137. 47 Kovalevsky, p.184. 4~. Barzel 8., Mvslique de l'inefjahle dalls I'lzindouislIIe el Ie christianislIle: S/wllkara 1.'1 Eck!tar~ Lc Ccrf, en particular el cap.Jv. 49. Silesius A, Le peterill c/lI?l1Ihinique, Aubier, p.244. 50. Waldcnfels, p.72. SI Staal, p.168. 52 Jean Chrysostoll1e, HomNies slIr l'illcomprehensibilile de Dieu, Albin Michel, p.15. 53. lb., p.38. 54. lb., p.1 0 1. 55. Sermons sur /1.' ::::1.'11, p.22. 56. Vallin G., Voie de gl1ose, fi)ie d'amour, Presence, p.113. 57. Kovalevsky, p.248. SR. Pseudo-Dionisio, p.74. 59. Hess Linda, The Bijak o/Kabil; Motilal Banarsidas, Delhi, p.l 03. 26. 27. ,I , Esta tesis se pia: tres partes, de la~ presenta la mayor originalmente pro tuye la primera d ciaci6n: La estn con unas indicaci algunos de los elCI haberse incluido titulada: "Vi rup;) Vidushaka", y sin tercera parte titula del Medio (madh) (sadhana)". Sin e de estos trcs aspe; ccr la tesis enon dado que el result. produce la impre equilibrio, darem< Esta contribuci6r humor y de la risa fue concebida p1 paso para un entt la funci6n y sig que, aunque es ha<;ya en la etap *' Este artieulc ala tesis euyo nomt incluye al final un critos). ** Doctor en ~ Benares Hindu Cni Departamento de s~ la Universidad de H