GUATEMALA, lunes 26 de julio de 2010 Foto: Rudy Tejeda/S.21 Nacional Siglo XXI Héctor Manuel González Guzmán | Catador El café lo lleva en las venas Es administrador de empresas y tiene su propio laboratorio para medir la calidad del café. Su mayor éxito ha sido ganar el campeonato mundial de catadores que se realizó del 23 al 25 de junio en Londres este año, en la competencia SCAE World Cup Tasters Championship, donde superó a los mejores de otros 38 países. Además, tiene la certificación máxima para ser un catador a nivel mundial extendida por el Instituto de la Calidad de Café en Estados Unidos. Rudy Tejeda [email protected] Su pasión por evaluar el café, en sus aspectos físicos, aromas y sabores, que es lo que hace, la heredó de su abuelo Víctor Manuel. Primero empezó haciéndolo como un pasatiempo, pero luego se convirtió en un trabajo. Héctor González comenta que a los 19 años, el papá de un amigo que era catador de Anacafé le dio permiso para estar en la entidad, donde llegaba desde las ocho de la mañana hasta las 3 de la tarde para aprender. Después se iba a estudiar la licenciatura en Administración de Empresas, carrera que concluyó en 1999. Su pasión y profesionalismo como catador de café comenzó en 1994, aunque fue este año cuando vivió el mejor momento de su vida, no sólo porque participó por primera vez en un campeonato mundial, sino porque lo ganó en Londres, Inglaterra. “No fue fácil, porque competí en tres rondas; éramos 38 catadores y en la primera vuelta pasaron 8 y luego 4 a la final. Afortunadamente ahí estuve”, explica. Recuerda que al inicio de la competencia estaba nervioso, pues no es lo mismo que uno cate solo en un laboratorio, que ante un público que, además, hacía porras. “Me costó encontrar la concentración, pero cuando pasé a la segunda ronda ya estaba tranquilo. Después sólo pensé en el sabor de la taza de café que tenía enfrente”, recuerda. González pudo identificar las propiedades de las bebidas porque hay dos iguales y una diferente. Acertó las 8 que le asignaron, algo increíble, sobre todo cuando se compara con sus rivales. Irlanda atinó 6 y Corea del Sur, 5. Hoy, con 36 años de edad, su vida camina por esta profesión. Llega a las 7 de la mañana al laboratorio que tiene en su oficina donde cata cafés para un comprador de Estados Unidos y certifica la calidad. Evalúa el café físico, tamaño y defectos. A las 11 ya ha verificado unas 60 tazas, que equivalen a 10 muestras, pero por la tarde ya tiene unas 25 muestras. Campeón nacional en los años 2007 y 2009, este joven talento tiene la certificación máxima para ser un catador a nivel mundial, extendida por el Instituto de la Calidad de Café en Estados Unidos. Más PROYECCIÓN En cuanto a su futuro, González habla muy claro. “Deseo seguir poniendo en alto el nombre de mi país. El café me dio la oportunidad de hacerlo este año y mi mayor anhelo es seguir preparándome, contribuyendo con mi experiencia y conocimiento al servicio de la caficultura. Quiero ayudar a que los guatemaltecos conozcan más sobre el excelente café que producimos”. En el aspecto profesional, su propósito es salir de Guatemala; ir a trabajar a otro lugar para el consumidor, procurando siempre demostrar la capacidad de los catadores locales”. RAZONES DE EXITO OBJETIVOS A mi criterio, una de las claves del éxito es “tener claro el objetivo dónde se quiere ir y qué se quiere alcanzar. Hay que definir los objetivos. Espero verme mañana en un lugar diferente del que estoy ahora. Quiero atreverme a soñar, pues es el inicio de un largo camino; pero sin visión no vas a ningún lado. Si se tiene claro donde quieres llegar, no importa el tiempo que haya que esperar ni el esfuerzo que haya que poner por el objetivo”. PERSEVERANCIA González cree en la constancia y en la perseverancia. “No se debe desmayar, aunque haya momentos difíciles. Siempre hay instantes duros, pero si te sentís capaz y preparado para hacerlo con la perseverancia lo vas a alcanzar”. Aconseja tener la mente en el objetivo. “Si se visualiza el objetivo, vas a tener las fuerzas necesarias para seguir. Esa es la perseverancia, el deseo de no perder nunca el anhelo de lograr los sueños”, cita. PREPARACIÓN De acuerdo con el entrevistado, la preparación puede definirse como “la búsqueda de elementos externos que se necesitan para prepararse y lograr el objetivo que se tiene en la visión. Sin preparación no se puede lograr nada. Podes tener un don natural, pero si no lo perfeccionas y profesionalizas no vas a marcar diferencia. Hay que estudiar y respaldar las habilidades uniéndolas con logros académicos”, refiere.