DOMPDF_ENABLE_REMOTE is set to FALSE https://www.plazapublica.com.gt/sites/default/files/layoutplazapublica_celeste.png Plaza Pública Publicado en Plaza Pública (https://www.plazapublica.com.gt) Inicio > ¿Por qué la mandó a matar? ¿Por qué la mandó a matar? 25 11 12 -- Elizabeth Ugalde La historia es así. El marido, de quien “Laura” está separada, la citó en un lugar para darle dinero para la manutención de los tres hijos que procrearon juntos. Ella llegó al lugar indicado, esperó un rato, hasta que vio que su esposo se bajó de un carro, al que la hizo entrar a la fuerza. En el auto iban dos hombres más. Después de algunos kilómetros, el marido le preguntó a los otros acompañantes, que cuánto tiempo se tardarían, a lo que los otros respondieron que a lo sumo una hora. Posteriormente, el marido se bajó del carro y la señora “Laura” fue forzada a seguir con los dos desconocidos, quienes la llevaron a un lote vacío, la golpearon y la apuñalaron en su abdomen. Dándola por muerta, la dejaron tirada y desaparecieron. “Laura” se salva, porque la grasa instalada en su vientre evita que el puñal llegue hasta sus órganos vitales. Los molestos gordos que muchas de nosotras insultamos todos los días y hacemos malabares para desaparecer, fueron la salvación de esta mujer. Este caso ingresó al Organismo Judicial y se dictó una sentencia condenatoria, con una pena de 33 años y 8 meses por el delito de femicidio en grado de tentativa. A partir de las pruebas presentadas, las juezas determinaron que el marido había contratado a dos sicarios para que mataran a su esposa. Los sicarios aceptaron el negocio porque para ellos la vida solo tiene un precio. El marido la manda a matar porque no quiere seguir pagando la manutención de sus hijos y porque se cree con el poder supremo de decidir si su esposa vive o muere. Este hecho me hizo recordar que cuando era pequeña escuchaba a mi madre decir: “Chico Perico mató a su mujer, la hizo pedazos y la puso a vender, no la compraron porque era mujer”. No recuerdo el contexto en que mi madre lo decía, ni de donde lo había aprendido. Sin embargo, la frase se me pegó en la memoria, como estampilla. Hoy después de tantos años, me vengo a dar cuenta que de verdad existen los Chico Perico. Son los sicarios que trataron de asesinar a “Laura”, es el marido de ella que les pagó para que lo hicieran; es Roberto Barreda de León, el asesino de Cristina Siekavizza, y son todos los hombres que matan a la mujer porque es mujer, y para ellos, un ser inferior. De acuerdo con datos de la PNC, facilitados gracias al gentil patrocinio de Carlos Mendoza, el crecimiento promedio de homicidios de mujeres para la década 2001-2010 es de 9.14, mientras que para los hombres es de 6.66. A ellas las matan a un ritmo mayor, aunque en términos absolutos los asesinatos de hombres son más. Incomprensiblemente, la mayor parte de estos homicidios de mujeres son perpetrados por sus compañeros sentimentales. Las estadísticas nos muestran que seis de cada diez agresores, convivieron con la víctima, fueron sus compañeros de vida, le hicieron el amor, y hasta procrearon hijos con ella, hasta que un día la dejan de amar, y eso es comprensible. Incluso, es entendible que la relación fuera tan mala que la pareja se llegue a odiar, pero de allí a matarla o pagar porque otros lo hagan es inaudito. No acabas con la vida de una persona porque no la quieres, o porque sientes odio, lo haces porque piensas que esa vida no vale nada, es insignificante. La matas, la haces pedazos y la pones a vender, si te da la gana, total es solo una mujer. Frase Importante 1: No acabas con la vida de una persona porque no la quieres, o porque sientes odio, lo haces porque piensas que esa vida no vale nada, es insignificante. Entradilla: Los Bomberos Voluntarios encuentran en un terreno abandonado a una señora que ha recibido múltiples heridas hechas con puñal. La llevan al hospital, donde de milagro, la señora se salva. Tipo de opinión: Columna Categoría columna: opinión Nombre de Blog/Columna: Quitapenas Colaboraciónes otros autores: Documentos Descargables: URL del envío: https://www.plazapublica.com.gt/content/por-que-la-mando-matar