Práctica Médica Efectiva Obesidad en el adulto (E66) Una herramienta indispensable para el médico del primer nivel de atención • ¿Qué es la obesidad? • ¿Cuál es su epidemiología en México? • ¿Cuáles son los criterios actuales para diagnosticar la obesidad? • ¿Cuáles son los pasos para el manejo de la obesidad? • Volumen 5 - Número 2 • Marzo 2 0 0 3 Aun pequeñas pérdidas de peso en el obeso producen grandes beneficios a la salud en forma inmediata. • ¿Cómo se establece un plan alimentario y de actividad física en el tratamiento de la obesidad? • ¿En quién, cuándo y cómo iniciar el tratamiento farmacológico? • ¿En qué casos es necesario solicitar el apoyo de un especialista? Los Autores • ¿Qué medidas preventivas se pueden recomendar para alcanzar y mantener el rango de peso saludable? ISSN: 1665-0506 Obesidad en el adulto (E66*) Barquera-F S 1, Barquera S 2, García E 3, González-Villalpando C 4, Hernández-A M 5, Lonngi G 6,7, Morín R 6,7, Rivera-Dommarco J 2, Velásquez C. 8 (Autores en orden alfabético) ¿Qué es la obesidad? Tabla 1. Clasificación de la obesidad en adultos de acuerdo con el Índice de Masa Corporal (OMS y NOM) FUENTE BAJO Es una enfermedad de etiología multifactorial de curso crónico en la cual se involucran aspectos genéticos, ambientales y de estilo de vida que conducen a un trastorno metabólico. Se caracteriza por un balance positivo de energía, que ocurre cuando la ingestión de calorías excede al gasto energético ocasionando un aumento en los depósitos de la grasa corporal, y por ende ganancia de peso.1-3 Es el principal factor de riesgo para el desarrollo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, dislipidemias, padecimientos cerebro-vasculares, osteoarticulares, ciertos tipos de cáncer como el de mama, próstata y otros padecimientos. La obesidad también suele tener consecuencias psicosociales.1,2 ¿Cuál es su epidemiología en México? • Los cambios sociales y en el estilo de vida han favorecido el aumento de la obesidad y de las enfermedades crónicas relacionadas.4,5 • En el mundo, se estiman al menos 300 millones de adultos con obesidad. • Su prevalencia se ha incrementado alrededor de 167% en los últimos 11 años.4 • Aproximadamente 24% de los adultos a partir de los 20 años de edad tienen obesidad, con mayor prevalencia en las mujeres (28.1%) que en los hombres (18.6%).6 • Únicamente 35.8% de los adultos tienen un peso considerado normal.6 • La acumulación de grasa central o visceral (intra abdominal) es más común en el sur del país y en las localidades rurales.7 NORMAL SOBRE PESO GRADO GRADO GRADO 1 2 3 30.0 - 34.9 35.0 - 39.9 OMS <18.5 18.5 - 24.9 > 25.0 NOM - - 25.0 - 26.9 En el ámbito clínico, en México se considera Obesidad a un IMC >27.3 2. El Índice Cintura Cadera (ICC), evalúa la distribución del tejido adiposo. Se obtiene al dividir en centímetros la circunferencia de la cintura entre la circunferencia de la cadera, y permite estimar un riesgo para la salud.8,9 (Tabla 2) 3. La Circunferencia de Cintura (CC), evalúa el riesgo de las co-morbilidades más frecuentes asociadas a la obesidad.8-10 (Tabla 3) * Según la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE 10 Revisión) 1 Asociación Mexicana de Enfermedades Metabólicas y Obesidad, A.C. 2 Centro de Investigación en Nutrición y Salud del Instituto Nacional de Salud Pública. 3 Clínica de Obesidad, Instituto Nacional de Ciencias Médicas y de la Nutrición Salvador Zubirán. 4 Centro de Estudios en Diabetes, American British Cowdry Medical Center. Unidad de Investigaciones de Enfermedades Metabólicas del IMSS. 5 Centro de Investigación en Salud Poblacional, Instituto Nacional de Salud Pública. 6 Academia Mexicana para el Estudio de la Obesidad. 7 Universidad Nacional Autónoma de México. FES Zaragoza. 8 Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Xochimilco. >40 ≥27 IMC = Peso actual (kg)/Estatura (m2) IMC SALUDABLE ≤ 24 Peso saludable IMC saludable = (24) × Talla en (m2) Rango peso saludable: IMC saludable* (escoger un IMC menor a 25) ej. (24.9) × 1.60 (m2) Peso saludable mínimo = 18.5 × 2.56 = 47.3 Peso saludable máximo = 24.9 × 2.56 = 63.7 (*) El IMC saludable se puede definir en el ámbito clínico entre 20 y 25 unidades en hombres y 19 a 24 en mujeres. Dependiendo de la edad, la composición corporal y otras características del paciente el médico debe determinar cuál es el IMC saludable dentro de este rango tomando como base la constitución, edad y expectativas de cada paciente. Si se toma el límite superior del rango, el peso despejado se puede denominar peso máximo normal. OMS: Organización Mundial de la Salud. NOM: Norma Oficial Mexicana. Tabla 2. Índice Cintura Cadera y su escala de estimación para los riesgos de la salud Riesgo Hombres Mujeres Alto Moderado Bajo > 0.95 0.90 - 0.95 < 0.90 > 0.85 0.80 - 0.85 < 0.80 Tabla 3. Riesgo para desarrollar complicaciones metabólicas relacionadas con la obesidad de acuerdo con la CC ¿Cuáles son los criterios actuales para diagnosticar la obesidad? 1. El Índice de Masa Corporal (IMC), definido como la relación del peso corporal en kg entre la estatura en m2, es el indicador más utilizado para establecer el diagnóstico tanto en el ámbito clínico como epidemiológico.8 (Tabla 1) OBESIDAD PESO Sexo Aumentado Sustancialmente aumentado Hombres Mujeres ≥ 94 cm ≥ 80 cm ≥ 102 cm ≥ 88 cm ¿Cuáles son los pasos en el manejo de la obesidad? La evaluación integral del paciente comprende una historia clínica completa haciendo énfasis en los siguientes elementos:3,9 - La anamnesis considerando los componentes esenciales, además de incluir siempre: • antecedentes familiares de obesidad y de otras enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT). • antecedentes personales de sobrepeso y sus variaciones, así como de otras enfermedades asociadas. • uso de medicamentos, tratamientos previos y alergias a medicamentos. - La evaluación del estilo de vida, que comprende: • patrón alimentario y de actividad física habitual. • ocupación y uso del tiempo libre. • otros antecedentes de riesgo como la adicción al alcohol y al tabaco. • valoración del entorno familiar. - La exploración física incluyendo como mínimo: • peso, estatura, perímetro de cintura y cadera y presión arterial. • Identificación de signos y síntomas de enfermedades crónicas asociadas como acantosis nigricans y varices, para descartar posibles complicaciones. • - Las pruebas de laboratorio, que deben incluir como mínimo: • biometría hemática, triglicéridos, colesterol y glucosa. Considerar otros estudios de acuerdo al caso. • - La evaluación de algunos aspectos de la dimensión psicosocial, como: • Explorar aspectos sobre la percepción que el paciente tiene de su imagen corporal (cómo percibe su peso, cuánto le gustaría pesar, cuál cree que es su peso ideal). • Evaluar su motivación para iniciar el tratamiento adecuado (en fase de contemplación o proactiva). • Fortalecer su grado de comprensión, sobre las diferentes causas del problema. • Identificar la posibilidad de apoyo familiar y del entorno social. • • (subir escaleras evitando elevadores, bajarse del camión dos paradas antes, bailar en tiempos libres). La periodicidad recomendada para iniciar es de tres a cinco veces por semana en días alternos y de 30 a 60 minutos por sesión. Iniciar con intensidad baja y duración corta aumentando en forma progresiva. Individualizar los programas de acuerdo con las necesidades y capacidades de cada paciente. Durante la caminata, es importante detectar a qué ritmo está trabajando el corazón. En las primeras semanas de actividad física, el pulso durante la caminata no debe ser menor ni mayor a lo recomendado (Véase Boletín PME Diabetes Mellitus; Vol. 4 No. 6 y 7 2002). ¿En quién, cuándo y cómo iniciar el tratamiento farmacológico? Es importante que el médico general valore las alternativas de manejo de acuerdo con las características individuales del paciente y sus factores de riesgo.11 (Figura 1) El tratamiento farmacológico puede iniciarse en pacientes con IMC >30 kg/m2 o bien con IMC >27 kg/m2 con enfermedades concomitantes como diabetes mellitus y enfermedades cardiovasculares, en quienes la dieta y actividad física por sí solos no han logrado los resultados esperados. Para ello es necesario considerar los siguientes puntos: ¿Cómo se establece un plan alimentario y de actividad física en el tratamiento de la obesidad? • Los fármacos no curan la obesidad, sólo contribuyen a mejorar los Aunque el problema de la obesidad es multidisciplinario y requiere un tratamiento integral, en la mayoría de los casos puede ser diseñado y monitoreado por el médico dentro de un sistema por etapas. (Figura 1) Toda pérdida de peso debe considerarse como un éxito; por seguridad se recomienda evitar pérdidas mayores de 1 kg por semana. Para lograr una reducción de 8% del peso corporal en un periodo de 3-12 meses se recomienda: • Planes alimentarios bajos en energía, entre 1000 a 1200 kcal/24h (Tabla 4) dependiendo del grado de obesidad del paciente y de la disciplina que tenga para modificar su estilo de vida. • • • • resultados dentro de un tratamiento integral, ya sea suprimiendo el apetito, mejorando la adherencia al plan alimentario o bloqueando la absorción de grasa. La farmacoterapia no sustituye al tratamiento integral con modificación de la dieta y el estilo de vida. Es conveniente que el médico oriente al paciente sobre las indicaciones y contraindicaciones del fármaco que le indique, así como su seguridad, tomando en cuenta su costo-efectividad. Únicamente se deberá prescribir fármacos aprobados para este uso por la Secretaría de Salud. Enfatizar en los pacientes el alto riesgo de recaídas y la importancia de regresar por apoyo cuando perciban incrementos de peso que estén fuera de control después de haber alcanzado un peso saludable. ¿En qué casos es necesario solicitar el apoyo de un especialista? • Cuando no se logran las metas iniciales del tratamiento médico integral en un plazo de 6 a 12 meses. Actividad física • Si existen co-morbilidades de difícil tratamiento y/o que pongan en • No se debe imponer un estrés articular excesivo. • El ejercicio necesita ser continuo para producir beneficios. Sería conveniente recomendar por ejemplo, que se camine más de lo habitual riesgo la vida del paciente. • Cuando el paciente tiene un IMC >35 con co-morbilidades. • En los casos de obesidad extrema (IMC >40 kg/m2). Figura 1. Sistema de etapas para el manejo del paciente obeso. Modificado de Blackburn GL and Kanders BS. 1994.11 Tabla 4. Ejemplo de un plan alimentario bajo en energía GRUPO DE ALIMENTO LECHE DESAYUNO CARNE Y SUSTITUTOS 30 gramos de queso panela COLACIÓN MATUTINA 1/2 mañana VERDURAS 1/3 taza de frijoles de la olla 1 tortilla de maíz 1/2 taza de nopales, jitomate, cebolla y chile verde picados Caldo de pollo desgrasado con verduras COMIDA Albódigas en salsa chipotle (60 gramos de carne molida) COLACIÓN VESPERTINA 1/2 tarde FRUTAS 1 taza de melón picado GRASAS 1 cucharada de aguacate 1 mandarina 1/2 taza de arroz 1 tortilla de maíz 1/2 taza de consomé de verduras desgrasado. 1/2 taza de ensalada de lechuga, jitomate y cebolla 2 cucharaditas de aceite para freír 4 galletas tipo habaneras CENA TOTAL DE RACIONES AL DÍA CEREALES Y LEGUMINOSAS Tostada de queso (30 gramos de queso panela rallado) 0 1 tortilla de maíz dorada en comal 3 1/2 taza de col finamente picada. Salsa picante 5 3 1 manzana 1 cucharada de aguacate 3 3 NOTA: Puede consumir al gusto caldos desgrasados, agua simple, agua de limón, agua de jamaica y tes. Utilizar con moderación endulzantes artificiales. Referencias bibliográficas: ¿Qué medidas preventivas se pueden recomendar para alcanzar y mantener un rango de peso saludable? 1 World Health Organization. Technical Report Series 797: Diet, nutrition and the prevention of chronic diseases. WHO study group. Geneva, 1990, pp. 203. World Health Organization Technical Report Series 894: Obesity: Preventing and managing the global epidemic: report of a WHO consultation. Geneva, 2000, pp. 203. 3 Secretaría de Salud. Norma Oficial Mexicana para el manejo integral de la obesidad, NOM-174-SSA1-1998. 2000. 4 Rivera-Dommarco J, Barquera S, Campirano F, Campos I, Safdie M, Tovar V. The Epidemiological and Nutritional Transition in Mexico: rapid increase of noncommunicable chronic diseases and obesity. Public Health Nutrition, 2002; 14:(44): 113-122. 5 Secretaría de Salud. Estadísticas Vitales, Capítulo Mortalidad. Principales causas de mortalidad general. Estados Unidos Mexicanos, 1999. 6 Olaiz G, Rojas R, Barquera S, Shamah T, Agullar C, Cravioto P, López P, Hernández M, Tapia R, Sepúlveda J. Encuesta Nacional de Salud 2000. Tomo 2. La salud de los adultos. Cuernavaca, Morelos, México, Instituto Nacional de Salud Pública, 2003. 7 Gonzáles-Cossío T, Rivera-Dommarco J, Shamah-Levy T, Ramírez-Silva I, Barquera S, Morales-Ruán MC, Safdie-Kanan M. Capítulo 4: Mujeres. En: Encuesta Nacional de Nutrición 1999. Estado Nutricio de Niños y Mujeres de México. Instituto Nacional de Salud Pública ISBN 968-6502-54-8, 2000; pp. 103-174. 8 Calle EE, Thun MJ, Petrelli JM, Rodríguez C, Heath CW. Body mass index and mortality in a prospective cohort of US adults. N Engl J Med 1999; 341:1097-1105. 9 Finer N. Clinical assessment, investigation and principles of management: realistic weight goals. In: Clinical Obesity. Kopelman PG, Stock MJ eds. Blackwell Science, 1998 London. pp. 350-376. 10 Berber A, Gómez-Santos R, Fanghänel G, Sánchez-Reyes L. Antropometric indexes in the prediction of type 2 diabetes mellitus, hipertensión and dislipidemia in Mexican population. International J Obesity 2001; 25: 1794-1799. 11 Appendix: Multidisciplinary model for the assessment and treatment of obesity: matching risks and patient needs with treatment approach. En: Blackburn GL and Kanders BS. Obesity: pathophysiology, psychology and treatment. Chapman and Hall Series in Clinical Nutrition. New York, NY. 1994; pp. 353-356. 12 Pate RR, Pratt M, Blain SN et al. Physical activity and public health: A recommendation from the Centers for Disease Control and Prevention and the American College of Sports Medicine. JAMA 1995; 273: 402-408. 13 World Health Org. Adherence to long-term therapies: policy for action. Report. Noncommunicable diseases and mental health, WHO. Geneve, 2001, pp. 25. 2 Orientar a la población usuaria sobre: • La importancia de comer considerando el equilibrio del valor calórico de los alimentos, y del consumo de frutas y verduras por todos los miembros de la familia. • La importancia de una actividad física vigorosa y regular, por un mínimo de 30 minutos 5 veces por semana.12 • Los riesgos del alcoholismo, tabaquismo, dieta alta en azúcar y grasa y de la alimentación basada en lo que habitualmente se conoce como “producto chatarra”. • La forma de monitorear su masa corporal, calculando el IMC. • La necesidad de acudir periódicamente a la consulta para evaluar su IMC (con peso y talla), la circunferencia de la cintura (CC), la presión arterial, la glucosa y el colesterol. • Desmitificar acciones sin fundamento como: a) tomar mucha agua, b) no combinar ciertas frutas, c) hacer dietas agresivas o con un solo grupo de alimentos. Recordar siempre que un paciente bien informado, es un paciente motivado a cumplir las indicaciones El estilo de vida con énfasis en el plan alimentario y la actividad son centrales. Si bien existe un componente genético, actualmente no se cuenta con intervenciones a este nivel.13 Directorio Dr. Julio Frenk Mora Secretario de Salud Dr. Misael Uribe Esquivel Coordinador General de los Institutos Nacionales de Salud Dr. Jaime Sepúlveda Amor Director General del Instituto Nacional de Salud Pública Dra. Gladys Faba Beaumont Directora del CENIDS. Instituto Nacional de Salud Pública Gerencia Editorial Dr. Armando Vieyra Avila CENIDS. Instituto Nacional de Salud Pública Coordinación Editorial Carlos Jiménez, Sophia León, Ilse Molina, Laura Urbáez CENIDS. Instituto Nacional de Salud Pública Nota: Para mayor información y acceder al resto de bibliografías consultadas para elaborar este boletín, favor dirigirse a Biblioteca Virtual en Salud: http://bvs.insp.mx Centro de Información para Decisiones en Salud (CENIDS) 0155-56 55 42 24. e-mail: [email protected]