“Nelson Mandela DD. HH.” Centro de Estudios e Investigación Social Avenida Alberdi N° 338 - Resistencia - Chaco - C.P. 3500 Página web: www.centromandela.com.ar Tel/fax: (54 - 03722) 428475 E mail: [email protected] [email protected] COMO EXPRESION DE LOS VALORES DE ASCENDENCIA FILOSOFICA, ETICA, MORAL Y JURIDICA, LA VIGENCIA DE LOS DERECHOS HUMANOS ES UNA EXIGENCIA IDEAL, ETERNA, UNIVERSAL E IRRENUNCIABLE. CHACO ALCALDIA DE RESISTENCIA LA CASA DEL HORROR HABEAS CORPUS SRES. JUECES DEL SUPERIOR TRIBUNAL DE JUSTICIA DEL CHACO SUS DESPACHOS A. ROLANDO NÚÑEZ, abogado, Coordinador del CENTRO DE ESTUDIOS E INVESTIGACION SOCIAL “NELSON MANDELA”, con domicilio en Av. Alberdi Nº 338, ciudad, por derecho propio y en nombre y representación de las personas detenidas en la Alcaidía de Resistencia, LIDIA BASUALDO, ama de casa, D.N.I. Nº 30.614.617, con domicilio en callle 13 –José Mármol Nº 1200-, ciudad, por derecho propio y en nombre y representación de su hermano Walter Jorge Basualdo –alojado en Alcaidía de Resistencia-, y ANALIA ANDREA ALBORNOZ, ama de casa, D.N.I. Nº 18.815.585, con domicilio en Comandante Fontana Nº 886, ciudad, por derecho propio y en nombre y representación de Domingo Albornos –interno de Alcaidía de Resistencia-, con el patrocinio letrado de GERMÁN ALEXIS DELLAMEA, abogado, constituyendo domicilio legal en Av. Alberdi Nº 338, ciudad, respetuosamente a Vs. Exs. nos presentamos respetuosamente y DECIMOS: I-OBJETO Que venimos por medio de la presente a interponer Hábeas Corpus a favor de todas las personas recluidas en Alcaidía de Resistencia, entre ellas a Walter Jorge Basualdo y Domingo Albornos, así como también en beneficio del personal policial que presta servicios en la Alcaidía de Resistencia, de conformidad a los arts. 43 de la Constitución Nacional, 19 de la Constitución Provincia y art. 1 inc. c), de la Ley 4.327. Concretamente, los internos se encuentran en condiciones degradantes e indignas, en lugares no aptos para permanecer privados de libertad, con un edificio en estado deplorable, con falta total de equipamiento, falta de plan concreto en el área de educación para internos, contención integral físico-psíquica en condiciones de alto riesgo para la salud. A su vez, existe una extraordinaria insalubridad en el trabajo del personal que además evidencia falta de capacitación penitenciaria. Con las condiciones actuales resulta imposible e inviable garantizar condiciones dignas y mínimamente aceptables de alojamiento en la Alcaidía de Resistencia. Lógicamente, esto conlleva la agravación ilegítima de la forma de condiciones en que se cumple la privación de la libertad. Facultad de denunciar De conformidad con el art. 43 de la Constitución Nacional y el art. 2 de la Ley 4.327, nos encontramos facultados a denunciar sobre las condiciones humanas de detención que se detallaran supra, toda vez que la citada normativa faculta a terceras personas que en su nombre, sin necesidad de representación y sin ninguna formalidad procesal realicen la presente denuncia al tener conocimiento de un acto u omisión de autoridad pública comprendidos en el art. 1 de la Ley 4.327. Presupuesto constitucional La presente acción se interpone a los efectos de solicitar el cese de los agravamientos ilegítimos en que se cumplen las condiciones de privación de libertad de los internos de la Alcaidía y demás personas que prestan servicio en el lugar, de conformidad al art. 18 y 43 Constitución Nacional; art. 19, 2do párrafo de la Constitución Provincial la cual establece: “Todos los derechos y garantías reconocidos, expresa o implícitamente, en esta Constitución, están protegidos en sus ejercicios por las siguientes acciones HABEAS CORPUS … Esta acción procederá igualmente en caso de modificación o reagravamiento ilegítimo de las formas y condiciones en que se cumpla la privación de libertad …”. Asimismo, lo contemplado en el art. 1 inc. c) de la Ley 4327 también resulta aplicable a la especie. Resulta fundamental destacar aquí que el artículo 1.1 de la Convención Americana de DD.HH. establece la obligación general que tienen los Estados Partes de respetar los derechos y libertades en ella consagrados y de garantizar su libre y pleno ejercicio a toda persona que esté sujeta a su jurisdicción; con la aclaración de que La Corte ha estimado que este deber es más evidente al tratarse de personas recluidas en un centro de detención estatal, caso en el cual el Estado es el garante de los derechos de las personas que se encuentran bajo su custodia. II-ANTECEDENTES Cuando la Alcaidía de Resistencia fue construida –año 1967-, tenía una capacidad aproximada para 160/180 internos; sin embargo, actualmente aloja alrededor de 340 personas, además de haberse reducido significativamente su superficie porque una parte de su estructura originaria fue utilizada para habilitar la Cárcel Provincial Nº 1, con lo cual -de hecho-, se triplicó su capacidad de alojamiento, generándose una congestión y hacinamiento inhumano y absolutamente degradante. Las distintas dependencias de este Establecimiento se encuentran prácticamente 2 destruidas; los sucesivos arreglos que se intentaron estuvieron orientados únicamente a ampliar la capacidad o alojamiento, sin que estuvieran dirigidas a mejorar la estructura y el funcionamiento de la Alcaidía. Durante la década de los 90´ varios fueron los reclamos efectuados por los internos de la Alcaidía, llevándose a cabo diferentes medidas para ejercer sus derechos constitucionales; evidentemente los reclamos no prosperaron. Hacia fines de Agosto del año 1999, ante una medida de reclamo voluntaria y pacífica adoptada por los internos de la Alcaidía de Resistencia, se designaron delegados que efectuaron diversas reuniones en las cuales, solicitaron participación de varias organizaciones de derechos humanos a fin de orientar sus legítimos reclamos; fue así que reclamaron la presencia de funcionarios públicos del Estado Provincial a fin de transformar la dura e inhumana realidad sobrellevadas en el lugar. Requirieron además la adopción de decisiones e implementación de políticas humanas a corto, mediano y largo plazo. Así las cosas. Sin embargo, en el comienzo del siglo veintiuno la situación carcelaria de la Provincia del Chaco lejos de mejorar acentuó la problemática, sobretodo a raíz de la política económica-social desplegada en la Provincia que devino en los peores índices sociales que tuvo que afrontar la sociedad chaqueña, a tal punto que se incrementó el ingreso de personas a dicha dependencia carcelaria. Hacia el año 2005, en menos de 2 meses se produjeron 2 rebeliones por parte de los internos de la Alcaidía de Resistencia. En la primera permanecieron las visitas en los pasillos del edificio varios días; en la última (3 de octubre de 2005) se tomaron como rehenes tres agentes de la Policía de la Provincia del Chaco, permaneciendo la visita en los pasillos de la Unidad carcelaria. Ante tal escenario, el 5 de octubre de 2005 se interpuso un hábeas corpus ante el Juzgado de Garantías N° 1 a cargo de la Dra. Susana Gutiérrez, Expediente N° 26388/05, quién ordenó un control e informes diarios sobre la situación de la Unidad, así como un relevamiento acerca de los internos, estado sanitario de los mismos y condiciones de habitabilidad edilicia. Dicha medida fue dispuesta por 30 días. El día 24 de octubre un grupo de familiares manifestó que las condiciones de hostilidad de la custodia hacia los internos se había agravado desde aquél último incidente. Refirieron un estado de descontrol y desorden en los pabellones internos, asegurando solo el perímetro de la Unidad con fuerzas especiales (COE). No se prestó el servicio alimentario mínimo adecuado. Se refirió golpes y maltrato en los traslados, al salir de la Unidad y al regresar a ella. El régimen para las visitas se volvió vejatorio y humillante; tanto para internos como para visitas. A modo ilustrativo, se señalaba que la Sra. Mónica Estela Bonilla DNI 23.293.866, familiar de Calos Samuel Jiménez, refirió que delante de sus 4 hijos fue dejada desnuda y obligada a exhibir sus partes pudendas; así como a 3 de sus hijos de 8 (varón) , 5 (varón) y 7 ( nena) años, quienes quedaron totalmente desnudos a la vista del personal de Drogas Peligrosas que se encargaba de esta tarea. A la época, convivía una población de 460 internos, entre condenados y procesados. En las actuaciones ante el Juzgado de Garantías se presentaron familiares de custodios de la Unidad reclamando asignación de mayor cantidad de agentes, ya que prestaban servicio menos de cuarenta en 2 turnos; solicitaron además especialización de los recursos humanos, atención psicológica y mayor tiempo de descanso debido a la tensión del trabajo en la Alcaidía. 3 El Juzgado interviniente elevó a la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia y al Procurador General un informe donde advirtió de manera contundente la inminencia de un colapso y el peligro latente dada las condiciones no adecuadas de seguridad de la Alcaidía de Resistencia. A casi tres años de la última interposición de habeas corpus ante este Superior Tribunal de Justicia -efectuada por familiares de internos alojados en la alcaidía de la ciudad de Resistencia-, lamentablemente, no se ha logrado cambios ni modificaciones en las condiciones de insalubridad, hacinamiento, edificio en ruinas, falta de adecuación integral para la contención de la población –excesiva-, trato de personal del servicio hacia internos, seguridad y salubridad de dicho personal, en definitiva, la mayoría de las cuestiones denunciadas en dicha oportunidad no se han modificado en manera alguna. Por el contrario, las condiciones de alojamiento se han agravado, a niveles y grados inhumanos. Se han sustanciado diversos hechos hasta llegar a la actualidad. En todos estos años transcurridos penosamente solo quedan rastros de la violación sistemática y continua de los derechos humanos de la totalidad de personas allí alojadas, ya que en dicho lugar se corroboran los siguientes problemas: La comida que se brinda a los internos es sucia e incomible, casi una basura que no se puede tragar. Los baños no funcionan o están absolutamente colapsados. El sistema de desagües y de circulación de líquidos cloacales también se encuentra en su punto más crítico de funcionamiento. El sistema eléctrico es una invitación al desastre. Se carece de todo elemento de mantenimiento e higiene, de modo que adentro reina la mayor de las mugres y los olores más fétidos que uno se pueda imaginar. Un problema sistémico Otro problema sistémico en el funcionamiento cotidiano de la Alcaidía de Resistencia deriva del relacionamiento promiscuo e irregular de un sector policial con algunos internos. En ese marco se inscribe el tráfico de drogas y de otras sustancias prohibidas, como también la comercialización de armas informales, ante la inercia de los Jefes de Turnos y la impotencia de la conducción del Establecimiento. Mientras tanto, el personal policial que desea trabajar responsablemente está sometido a factores que permanentemente desalientan sus desempeños. Antes del último motín, la guardia interna rutinariamente se componía de 5 empleados y un oficial de servicio, ante una población de internos que ya era de 460; con esta intervención no se puede construir ni preservar ninguna acción de seguridad en los pabellones. Política inhumana del Estado Chaqueño Tormentos y castigos El último motín, con toma de rehenes, dejó profundas secuelas de rencores y revanchas cruzadas. Un sector del personal carcelario y extracarcelario somete a los internos a los peores vejámenes y castigos; familiares refirieron que sistemáticamente son sometidos a todo 4 tipo de situaciones crueles. En los traslados a tribunales, los internos son especialmente maltratados, hasta que recurren a las mordeduras de los perros, según sus propias denuncias. La requisa personal que se efectúa a los familiares para que visiten a los internos es realizada por personal de Drogas Peligrosas, que no tiene capacitación carcelaria, incurriéndose en todo tipo de abusos y vejaciones, que afectan en particular a niñas menores de edad, a quienes se obliga a desvestir ante la mirada de adultos. El COE, cuya creación obedeció a causas especiales y determinadas, ajenas al funcionamiento de las alcaidías, tiene a su cargo el control de la Alcaidía y es la Unidad que ingresa con violencia a efectuar requisas, a ocupar los pabellones y a trasladar a los internos. Existen internos que todavía presentan lesiones por haber sido sometidos a castigos; algunos presentan heridas de armas blanca, seguidos de cuadros infecciosos. Otros padecen diabetes, cáncer, tumores y otras patologías, sin contar con tratamientos ni medicación adecuados. Conviven adultos, con menores de edad, con enfermos que pueden contagiar a otros internos porque padecen patologías infecto-contagiosas, hasta Sida. Sin embargo, los portones de los pabellones continuaban abiertos al momento en que se producían las visitas de los familiares, generándose una notable inseguridad entre los mismos, los internos y carceleros, con características que definen a las zonas liberadas y fuera de control. Alcaidía de Resistencia Un campo de Concentración Ante esta realidad, pareciera ser que las autoridades del Estado Chaqueño desconocen que la Argentina ha ratificado el Pacto de San José de Costa Rica, que establece pautas muy claras y definidas sobre las condiciones de alojamiento y tratamiento de presos. Los poderes del Estado están obligados a dar efectivo cumplimiento a la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes (Protocolo Facultativo aprobado por Ley 25.932), complementario de los derechos y garantías establecidos en el artículo 18 de la Constitución Nacional, como el artículo 27 de la Constitución Provincial, ya que garantizan cárceles sanas y limpias, con programas de readaptación social, enseñanza y trabajo para los internos, en donde no se los debe someter a castigos, mortificaciones, tratos crueles, degradantes e inhumanos. Es que la Alcaidía de la ciudad de Resistencia ha colapsado y de hecho es un campo de concentración, en donde no tiene vigencia ninguna regla que proteja la salud, la integridad y la vida de los internos, tampoco de los familiares y de los integrantes del personal policial, especialmente de los que trabajan como celadores en los pabellones. III-SITUACIONES GRAVES RECIENTES 5 Lamentablemente, durante el transcurso del corriente año 2008 se han detectado situaciones y realidades que revisten gravedad manifiesta y extrema entre ellas se destacan: a)Lo labrado en Acta en la División Alcaidía Resistencia, dependiente de la Dirección del Servicio Penitenciario, con asiento en la ciudad de Resistencia, en el horario de las 17:00 horas del día 25 de Abril de 2008, en la cual se dejo constancia respecto a los alojados CRISTIAN HUGO MONTIEL, JULIO CESARMONTIEL, DAVID ESPINDOLA Y JOEL DAMIAN CASCO, que: “… se labra el presente acta de reunión, donde se encuentran presentes los Dres. Hugo Oscar Kohler (Secretario de Salud Indígena) y Rodolfo Sobko (Director de Salud con los Pueblos Indígenas del Chaco) y las ciudadanas Marta Sayas y Daniela Prado y los internos CRISTIAN HUGO MONTIEL, JULIO CESAR MONTIEL, DAVID ESPINDOLA, Y JOEL DAMIAN CASCO, para dejar constancia que los internos arriba citados aún presentan signos y síntomas de haber padecido politraumatismos de corta data. Fueron evaluados clínicamente, en enfermería de la Unidad. Se consignó el estado cardiovascular y respiratorio detonándose una tendencia a la baja presión con dificultad de mantenerse de pie y de ambular con mareos orto-estáticos de diversos grados. Cumplen el décimo día de no ingerir la normal cantidad de líquidos, calorías y aportes proteicos e ingerir la normal cantidad de líquidos, calorías y aportes proteicos e hidrocarbonatos para su supervivencia, por ejercer el derecho constitucional de peticionar a las autoridades del Poder Judicial que corresponden a cada uno de los internos mencionados, en particular al Sr. Juez Martínez Arias en el caso de CRISTIAN HUGO MONTIEL y el titular de la Fiscalía de Investigación Penal Nº 2, Dr. Cantero, que entiende en los sucesos acaecidos el 14 del presente mes. En un todo de acuerdo a los protocolos de Estambul que regula Estado de Petición de las personas privadas de libertad en la modalidad de “Huelga de Hambre”. La gravedad de la situación está puntualizada en la determinación de incrementar la complejidad del reclamo desde hace veintiséis (26) horas con la modalidad de “Huelga de Hambre Seca” es decir, sin ingesta de sólidos ni líquidos. Las peticiones a las autoridades jurídicas son las si- guientes: 1ro) Revisión y cambio de carátula, dado que consideran no ser partícipes ni responsables de la figura penal en la que presuntamente se le imputa haber incurrido; 2do) Garantías Constitucionales de debido proceso y Defensa en Juicio; 3ro) Garantías Constitucionales de preservación de sus respectivas integridades físicas y psíquicas; 4to) Garantías Constitucionales de condiciones físicas y ambientales del lugar de detención; 5to) Derechos Constitucionales de ser trasladados a otras dependencias como Unidad de Bomberos y/o Gendarmería hasta que se puedan corroborar la segura condiciones de alojamiento y desplazamiento arriba peticionados; 6to) Garantías de no ser víctimas de malos tratos, tormentos ni apremios ilegales y 7mo) Garantías de no ser trasladados a otras jurisdicciones del interior provincial, incluyendo estos mismos en cuanto a los espacios físicos de la División Unidad Penal Resistencia. por último peticionan las garantías de una atención médica permanente, cotidiana y bajo historia clínica supervisada por el Instituto Médico Forense; como así mismo reclaman la presencia de los Magistrados mencionados: Dr. Ramón Martínez Arias y/o la Dra. Hilda Cáceres de Pascullo y el titular de la Fiscalía Nro. 02 Dr. Diego Canteros para gene- 6 rar las condiciones de normalidad en la situación por la que involuntariamente han sido involucrados. Dada la gravedad de las circunstancias, solicitan la perentoria presencia del Poder Judicial en un lapso no mayor de veinticuatro (24) horas; razones humanitarias así lo ameritan. Se elaboran seis (6) ejemplares del mismo tenor para ser enviado por la vía que corresponda a los Señores Magistrados arriba nominados, al Señor Ministro de Gobierno, Dr. Jorge Alcántara, al Señor Jefe de Policía, Comisario General José Luis Benítez y los familiares presentes. Leído en voz alta por el Secretario actuante, los comparecientes se ratifican y para constancia legal firman al pie ante MI y Secretario que certifica. b) CONSTATACION JUDICIAL (FEDERAL) LLEVADA A CABO EL 25 DE JUNIO DE 2008. INTERVENCION DEL FISCAL FEDERAL DR. GUSTAVO ALFREDO CORREGIDO. PARTICIPACION COMO OBSERVADOR DEL DR. ROLANDO NUÑEZ, EN SU CALIDAD DE COORDINADOR DEL CENTRO MANDELA: efectuada por: Gustavo Alfredo Corregido, Fiscal Federal, asistido por Roberto Eduardo Mena, Secretario, de la cual surge que las condiciones de alojamiento revisten condiciones de insalubridad, hacinamiento, edificio en ruinas y no adecuado para contener la población carcelaria que oscila en unos 340 internos. La intervención que le ha correspondido al Centro Mandela se produjo de hecho en función de lo contemplado por el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, adoptado en New York (EE.UU.) el 18 de Diciembre de 2002, con vigencia en nuestro país a través de la Ley Nº 25932, sancionada el 08 de Septiembre de 2004 y promulgada de hecho el 30 de Septiembre del mismo año. En oportunidad de visitar la Alcaidía de Resistencia como observador de la intervención del Sr. Fiscal Federal y de su Secretario de actuaciones , con facultades certificantes, el Dr. Rolando Núñez participó de las entrevistas realizadas a los reclusos y de la inspección y constatación que realizara el Fiscal a lo largo de todas las dependencias e instalaciones de la Alcaidía de Resistencia, de modo que el conocimiento al que se arribó ha sido directo y cabal. Esto también tiene que ver con la legitimación activa que se invoca en esta presentación judicial porque tiene que ver con el conocimiento personal de la problemática, que es el factor determinante de la promoción y sustanciación de la acción. LAS VIOLACIONES LEGALES No se cumple con las previsiones de la Ley 24.660: art. 133, por cuanto el Ministerio de Educación quitó estabilidad al plantel de docentes, advirtiéndose una falta de plan concreto en el área educativa para los internos. Art. 58, la vida diaria transcurre en un ambiente inmundo, irrespirable e insalubre; ningún ser humano podría gozar de un bienestar psicofísico en dichas instalaciones, las condiciones de habitabilidad se alejan de los parámetros de cárcel limpia y sana prevista en el art. 18 de la Constitución Nacional. 7 Art. 59, los pabellones están superpoblados, se pudo constatar en el pabellón Nº 13 cuyas dimensiones son aproximadamente de 5 metros por 10, una cantidad de 23 personas, en condiciones de hacinamiento. Art. 60, no se cuenta con instalaciones aptas para el aseo personal, así como elementos de limpieza que permitan la correcta higiene. Art. 64, se ha verificado ropa de cama en estado deplorable y antihigiénica. En el acta constan manifestaciones de los internos: José Armando Ortiz y Roberto Delgado, y el contraste que se evidencia con lo constatado, es dable comprender que se encuentran bajo la custodia de funcionarios públicos dependientes del mismo Estado que debe resguardar su seguridad, en consecuencia la indefensión y el temor a represalias por un sincero reclamo lleva a los mismos a consentir las condiciones de vida en que se encuentran. A continuación se transcribe lo verificado y que obra en el acta de constatación: “…solicitamos recorrer las instalaciones. A cargo de la seguridad interna, accedimos por un corredor que comunica a los pabellones 2, 12, 3, 4 y 7 y a las respectivas “leoneras” todos ellos en estado deplorable, sucios, en un estado de abandono total, con instalaciones eléctricas expuestas en una peligrosa maraña de cables. El lugar destinado para las visitas higiénicas es un pasillo casi destruido, oscuro, iluminado con un haz de luz que se filtra por una grieta, sucio, con unos habitáculos de dos por uno, aproximadamente, con camas de cemento y sin puertas. También se tomo contacto con el sector destinado a la educación, donde los encargados del mismo pusieron de manifiesto los problemas por los cuales atraviesan, manifestando que no tienen estabilidad y el programa es deficiente, pese a la voluntad de los internos de estudiar. Con respecto al pabellón 13, lugar de aproximadamente 3 metros por 10 sin ventilación y casi nada de iluminación, donde el ambiente es irrespirable, se hallan alojadas 23 personas en un estado de hacinamiento total y mugre y donde sus ocupantes se quejan del deterioro de los colchones y la falta de frazadas y de la humedad a la que están expuestos debido a las goteras del techo, “llueve mas adentro que afuera”. Se quejan de que en enfermería no hay medicamentos y que están desprotegidos en caso de gripes u otras dolencias. El Subcomisario Vallejos nos comenta que no existen partidas para la compra de elementos de limpieza y que en algunas oportunidades han llegado a hacer trueques para conseguir algo. Preguntado al Subcomisario Vallejos si alguna autoridad entró al interior de la Unidad para verificar las condiciones en que se vive y se trabaja, contestó que no, que el Subsecretario de Derechos Humanos Carlos Martínez solo llegó hasta la antesala. Por último visitamos el pabellón 14 en el que se hallan alojadas las personas vinculadas a causas por violaciones a los derechos humanos, a fin de constatar las condiciones de detención, sin que formularan quejas al respecto. Se deja constancia que no fuimos atendidos por el Jefe de la Unidad. Con lo que no siendo para mas se da por finalizada la visita, firmando el señor Fiscal y el Prosecretario todo por ante mi. Doy Fé”. La infraestructura de la Alcaidía de Resistencia que fuera creada en la década del 60´, tuvo en miras afrontar una realidad que dista mucho de la que actualmente existe y que demanda este nuevo siglo. La infraestructura edilicia a más de cuarenta años, resulta vetusta, poniendo en serio riesgo la vida y salud de las personas. 8 Producto de la decisión judicial del fuero federal, en alcaidía de Resistencia ya no existe ninguna persona que dependa de la justicia federal, en razón a la resolución judicial dictada en fecha 24/07/2008, atendiendo las graves condiciones de alojamiento en la misma. c) Apremios Ilegales – Inactividad del organismo judicial de Derechos Humanos Inactividad del organismo ejecutivo de Derechos Humanos: resulta necesario y exigible la actuación de una verdadera y efectiva política de derechos humanos desplegada por el Estado Chaqueño, la cual demuestre realmente que el respeto hacia cada ser humano que habita el suelo chaqueño –y entre los muros de la Alcaidía de Resistencia- se concreta a diario, y debe ser el producto de una correcta, activa y comprometida acción de las autoridades estatales, de manera tal que no descansen los “derechos humanos” sólo en una aspiración filosófica. Es que estos derechos deben concretarse y los funcionarios públicos bregar por garantizarlos. Por ello, tampoco deben quedar al criterio antojadizo del funcionario competente, ya que en tal caso, dicho criterio no resultaría ser producto de un correcto apego al respeto de los derechos humanos. En Fecha 05 de Agosto de 2008, LIDIA BASUALDO Y ANALIA ANDREA ALBORNOS, denunciaron en forma conjunta –por orden de la Mesa Informatizada realizaron en forma conjunta-, que: “…personal policial que cumple funciones en Alcaidía Policial, específicamente al perso- nal que se encuentra en este momento de guardia, los cuales son los mismos que se encontraban de guardia el día domingo 3 de Agosto del presente año, a las 17 horas aprox. por lo delitos de premios Ilegales. En el día de la fecha, concurrimos a la Unidad Especial de alcaidía a visitar a nuestros familiares, siendo ellos WALTER JORGE BASUALDO Y DOMINGO ALBORNOS, al verlos nos dimos cuenta que se encontraban golpeados y al preguntarle como fue que los golpearon y quienes, nos manifestaron que el hecho ocurrió el día domingo 3 de Agosto en horas de la tarde, siendo personal policial de esta dependencia quienes los sometieron a golpes de todo tipo, comentándonos también que eran los mismos que estaban de guardia en ese momento. Desde el domingo hasta el día de la fecha se encontraban en el calabozo, pasándolos hoy a las celdas, ya que tenían visitas, no siendo atendidos por ningún médico desde el día domingo. Solicito que se realice la investigación correspondiente y que sean revisados en forma inmediata por médicos del Poder Judicial…”. RESPONSABILIDAD CONSTITUCIONAL CONSTITUCIÓN PROVINCIAL DEL CHACO: le cabe al Estado Chaqueño apostar fuerte a las condiciones de hábitat de la unidad carcelaria “Alcaidía de Resistencia”, lo cual le va implicar un mejoramiento en el servicio de justicia, sobretodo en la actuación y cumplimiento efectivo de los organismo creados con la finalidad de garantizar el respeto por los derechos humanos de la sociedad chaqueña, celeridad en resolución de causas, una política ejecutiva no sólo de inversión, que lógicamente redundará en beneficios futuros de la prevención del delito, sino además, puesta en marcha de un efectivo y adecuado programa de servicio penitenciario, un plan concreto de readaptación social, enseñanza y trabajo. Aquello llevará consigo el respeto de la dignidad humana en todos sus enfoques y el fiel cumplimiento de las normativas internacionales y nacionales sobre el trato de los detenidos. 9 La realidad imperante exige, como mínimo, la inmediata construcción de infraestructura edilicia. Interín, deberá tomarse medidas conducentes a solucionar las graves condiciones de cumplimiento de la pena, no sólo de las personas condenadas sino también, respecto a las personas privadas de libertad en carácter de procesados, debiendo disponerse que no se recepte ni aloje ninguna persona más en la Alcaidía de Resistencia hasta tanto no estén garantizadas las condiciones mínimas para tal fin. Hay que acompañar esto con una política social que otorgue fuentes de trabajo, apostando a una política de lucha contra el analfabetismo y la desnutrición. Y esto no es sólo una simple teoría o postura pragmática utópica o maravillosamente inalcanzable. En la práctica se dio en el proceso de industrialización de Inglaterra, Francia y Alemania, que se inicia a fines del siglo XIX y comienzos del XX. Por tales razones resulta a todas luces que es el Estado Chaqueño –en sus tres poderes-, el único responsable de la situación que atraviesan las personas alojadas en la Alcaidía de Resistencia. Doctrina – Jurisprudencia Del Trabajo destacado que realizara Marcel de Jesús Festorazzi (Ex juez de Instrucción y Garantías de P. R. Sáenz Peña, Actualmente Secretario de Juzgado de Instrucción N°5), llamado: “Eficacia de la Función de la Pena”, al término del Curso de Posgrado de Derecho Penal llevado a cabo por la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) en la Ciudad de Villa Ángela, en el año 2004, observamos que la pretensión que anima ese trabajo es, ver si es eficaz el actual sistema de políticas carcelarias para la contención del interno y si colabora con la prevención y seguridad ciudadana en pos de obtener una pacificación social que favorezca a las partes del conflicto, del cual se extraen importantes consideraciones a tener en cuenta. De tal forma, refiriéndose a los alcances, consecuencias y efectos de la política carcelaria, en referencia a la seguridad ciudadana, destaca esta realidad y entre otras cosas refiere: “... debemos distinguir primeramente los sistemas carcelarios nacionales o federales de los provinciales; el sistema penitenciario federal, sin perjuicio de su celo en la aplicación de la ley 24.660 en todo su ámbito, está pasando por un estado crítico, por la realidad existente, ya que la población recluida no cesa de aumentar, y con ello el problema de la situación material , por la ingobernabilidad de los detenidos con prisión preventiva. Este estado se agravó aún más con la nueva sanción de leyes que aumentaron el mínimo de la pena y consecuentemente restringen la libertad condicional -llamadas leyes del efecto Blumberg-. En las provincias no es menos grave la situación. Por el contrario, se acentúa no sólo con la superpoblación que acarrea su hacinamiento, sino las diversas enfermedades -especialmente dermatológicas-, la promiscuidad -con el riesgo de adquirir enfermedades venéreas y SIDA-, la ausencia de asistencia médica-psicológica, la falta de contención de los internos, la carencia de talleres para la preparación laboral y/o educacional. Además existe una despreocupación muy intensa del interno, desde su salida transitoria y luego en su libertad definitiva bajo la forma condicional, debido a que los sistemas de patronato o de seguimiento de los internos no funcionan adecuadamente. Se hace mérito a la frase "nadie experimenta con cabeza ajena". Una exteriorización de lo señalado precedentemente, fue lo que aconteció el 5 de mayo de 1990, por motivos no esclarecidos, fue el “incendio” en la Unidad Penitenciaria de Olmos, a consecuencia del cual 10 perdieron la vida 35 internos. Familiares de éstos, luego de accionar contra la Provincia de Buenos .Aires, obtiene el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que con fecha 19 de octubre de 1995 hizo lugar a la demanda, condenando a la provincia al pago de la indemnización correspondiente ("Badin, Rubén y otros vs. Prov. de Buenos Aires",19-X1995,J.A.,1995-IV,pp.141 ss-). Dicho decisorio evidencia las gravísimas condiciones que existían al tiempo del siniestro en la unidad penitenciaria y destaca en sus argumentaciones el deber del Estado de tutelar la integridad física y psíquica de los reclusos internados. Este fallo deja entrever las diversas irregularidades existentes: 1. Superpoblación. 2. Precariedad en la higiene; seguridad; estructuras edilicias obsoletas; instalaciones eléctricas vetustas y aptas para generar incendio; falta de medios de extinción y prevención de focos ígneos; inexistencia de salida de emergencia; falta de capacitación del personal penitenciario para actuar en caso de un siniestro. 3. Corrupción e irregularidades administrativas: sustracción de carne destinada a los internos por parte de personal penitenciario para su consumo personal y familiar. 4. "Compra de pabellones": que posibilita al interno que dispone de dinero de ser ubicado en un área de menor conflictividad, con disminución de riesgo personal. 5. Promiscuidad. 6. Pago compulsivo de dinero al personal penitenciario para obtener visitas higiénicas. 7. Requerimientos de distinta naturaleza por el personal penitenciario para conceder favores tendientes a mejorar la calidad de vida del interno o para no confinarlos en celdas de castigo. Desde el dictado de aquella sentencia transcurrieron solo nueve años, para cobrar actualidad con un hecho de similar envergadura ocurrido en Mendoza, en donde perdieron la vida 5 internos en un incendio en una granja penal (Diario Clarin del 2/5/04), mereciendo el concepto de "chiqueros humanos " por parte de la Suprema Corte de Justicia de esa provincia (Diario " Primera Línea " de fecha 8/6/04 pag.13). Desde el aspecto del tratamiento individual de los internos se observa la ausencia de gabinetes interdisciplinarios y/o metodologías carcelarias de contención, llevando a hechos lamentables, como el ocurrido en Alcaidía local de Resistencia, Chaco, por el ahorcamiento del interno Carlos Alberto Vargas, de 21 años, suceso ocurrido el día 27/6/04, por el estado del deterioro físico y psicológico. (Diario "Norte" del 30/6/04 pag.32)...” Asimismo considera que: “La ejecución penal debe ser un instrumento de pacifi- cación”. Continua: “...Una ejecución en las condiciones actuales en vez de resocializar al individuo lo disocializa, e inevitablemente, en oportunidad del recupero de su libertad se produce nuevamente la crisis e infracción a las conductas sociales impuestas por la ley, llevándonos a la clásica reincidencia y a la inseguridad ciudadana.” De ello refiere que: “...La solución que se propone para una convivencia más segura y una mejor calidad de vida debe darse sobre la base de dos premisas: la equitativa pacificación social y fundamentalmente el respeto de la dignidad humana, sin las cuales no podremos llegar a una posible solución del conflicto. Para eso primero debemos saber qué papel y responsabilidad le cabe a cada uno de los agentes que intervienen en el conflicto: El Estado por un lado, con sus tres poderes, y por el otro la comunidad. No incluyo como una categoría separada o aislada a los presos, por considerar que no existe motivo alguno para tal discriminación y que debe partirse desde una premisa cierta, válida e indiscutible: que ellos son parte de una sola comunidad con la particularidad de encontrarse privados de su libertad. No son, como pretenden algunos llamarlos, "ciudadanos de segunda categoría". 11 Administración y Justicia Se requiere al Superior Tribunal de Justicia del Estado Chaqueño, como guardián directo de la Constitución Provincial, que atienda la normalización de la situación en la Alcaidía de Resistencia, por la responsabilidad directa y única del Estado Provincial. En efecto, que la ejecución de la pena sea puesta en práctica por la Administración, no significa que los jueces o fiscales se desvinculen de los condenados, detenidos o alojados, por el contrario el control de esa ejecución y de las condiciones siempre será una función del Poder Judicial, en algunos supuestos impuesto por la Ley 24660 y Ley Provincial 4425 y en otros por Acuerdo N°: 2789, pto. 1, de fecha 04/09/02 del Superior Tribunal de Justicia (ello conforme: Dr. Marcel De Jesús Festorazzi, en Fallo Nº 61, Presidencia Roque Sáenz Peña, 03 de mayo de 2004,). Es así que hay que legitimar o auto legitimar de una vez por todas la justicia en forma auténtica, en la medida en que se busca fortalecer los fines de las instituciones de administración de justicia. De lo contrario, estaríamos ante una postura “aséptica” descomprometida de la administración de justicia. Razones suficientes fueron para que se judicialice la ejecución de la pena, lo que importa que el Juez de Ejecución, deba velar que la pena efectivamente cumpla las finalidades de readaptación, reeducación, reinserción (de marco constitucional) todas de prevención especial para obtener por parte del autor del delito una conducta respetuosa con la ley y los derechos de los demás, por ello la ejecución de la pena, será: restablecer en quien ha delinquido el respeto por esas normas básicas, haciéndole corresponder en el futuro a las expectativas en ellas contenidas y evitando de esa forma la comisión de nuevos delitos, por ello el interrogante que nos hacemos ante esta realidad fáctica: Hoy la forma y condiciones de detención y alojamiento en la Alcaidía de Resistencia: ¿Sirve para el fin de readaptación o reeducación o reinserción?¿Es efi- caz la pena impuesta en relación con sus finalidades? ¿Se respetan lo principios de Legalidad, Democratización y Reserva? ¿Existe plena vigencia de los Derechos Humanos de Jerarquía Consti- tucional? Un tema a atender es respecto a la materia de salud en las cárceles, en tal sentido debe coordinarse políticas públicas que atiendan las necesidades en las cárceles cuestión olvidada en la Alcaidía de Resistencia. Viene a colación la Publicación periodística en: http://casarosada.gov.ar “Presidencia de la Nación Argentina”, titulada “CONVENIO PARA LA ATENCION DE LA SALUD DE PERSONAS PRIVADAS DE LA LIBERTAD”, que data del 31 de Julio de 2008, en la cual la Presidenta de los Argentinos en alusión a la firma de un Convenio Marco de Políticas Integrales en Materia de Salud en beneficio de personas privadas de libertad y quienes egresen del Servicio Penitenciario Federal refirió que: “…el convenio firmado hace a la condición humana…” y resaltó que la “inclusión carcelaria tiene que ver con la exclusión social”, mientras que la Ministra de Salud Graciela Ocaña, destacó “…el convenio representa un progreso en la calidad de la atención de la salud en los servicios penitenciarios del país y las personas privadas de libertad necesitan fuertemente la protección del Estado, que debe garantizar la atención de la salud a todos los argentinos…” . 12 Si bien los lugares de cumplimiento de pena y/o detención y/o alojamiento son establecimientos administrativos que determina la ley, es el Poder Judicial a través de sus órganos (Jueces o Fiscales) quienes ejecutan sus propias resoluciones, aunque para su cumplimiento deba valerse de establecimientos dependientes del Poder Ejecutivo, debiendo velar aquél Poder del Estado por la inalterabilidad de las Garantías Constitucionales. Siendo manifiesta la agravación ilegítima de la forma y condiciones en que se cumple la privación de la libertad que viene soportando la mayoría de la población carcelaria de la Alcaidía de Resistencia, por actos y omisiones de la autoridad, se torna impetuosamente necesario: instrumentar, cesar y restablecer, condiciones dignas y humanas de detención en dicha Unidad Carcelaria. Es así que se encuentra como remedio específico, rápido, eficaz y al alcance de los más allegados a los protagonistas de los hechos degradantes mencionados, intolerables en un Estado de Derecho comprometido con la Dignidad del Hombre, el presente Habeas Corpus correctivo, y que el Superior Tribunal de Justicia como el alto cuerpo del Poder Judicial de ésta Provincia, logre garantizar que la detención y alojamiento, legítimamente ordenada, sea de cumplimiento en condiciones dignas y razonables, a fin de que concluyan aquellos actos y omisiones de la autoridad carcelaria(Art. 43 de la Const. Nac.; Art. 19 de la Const. Prov. y Arts. 1 inc. c, y 2 de la Ley 4327).RESPONSABILIDAD INTERNACIONAL El artículo 1.1 de la Convención Americana de DD.HH.: se establece a través del mismo, la obligación general que tienen los Estados Partes de respetar los derechos y libertades en ella consagrados y de garantizar su libre y pleno ejercicio a toda persona que esté sujeta a su jurisdicción. La Corte ha estimado que este deber es más evidente al tratarse de personas recluidas en un centro de detención estatal, caso en el cual el Estado es el garante de los derechos de las personas que se encuentran bajo su custodia. Conclusión En la Alcaidía de Resistencia se viola sistemáticamente y de manera continua los derechos humanos de la totalidad de los internos allí alojados. El caso que da origen a la presente es de extrema gravedad y urgencia que requieren medidas de protección para evitar daños irreparables a las personas. De las consideraciones ut supra expuestas surge claramente que el sistema carcelario en Alcaidía de Resistencia ha colapsado, y se requiere, en consonancia a los postulados y exigencias Constitucionales, que se dé respuesta a la grave situación que atraviesan las personas alojadas en la mencionada dependencia carcelaria. Se Solicita al Estado Chaqueño: • Que adopte, sin dilación de tiempo, todas las medidas de seguridad y de control que sean necesarias, plenas y eficientes para preservar la vida e integridad personal de las personas recluidas en la Alcaidía de Resistencia, así como las de todas las personas que 13 ingresen a la Alcaidía de Resistencia, entre ellas familiares de los detenidos, los empleados y funcionarios que prestan sus servicios en dicho Establecimiento; • Que adopte medidas inmediatas conducentes a la separación de los internos condenados de los procesados privados de libertad, en cumplimiento de las condiciones exigibles bajo los estándares internacionales aplicables a la materia, como también la celeridad y atención de las causas judiciales de los internos, y atención judicial en el respeto a los derechos humanos; • Que dentro de un plazo inmediato presente un plan para la reubicación de los internos que alberga en exceso la Alcaidía de Resistencia, respetando su capacidad máxima y las necesidades en materia de recursos humanos, pero sin generar un nuevo problema de hacinamiento en otros establecimientos carcelarios como comisarias, disponiéndose el no ingreso de persona privada de libertad hasta tanto se brinde solución; y se concrete un plan educativo y de trabajo para internos y se brinde capacitación integral al personal del servicio penitenciario; • Que dentro de un plazo inmediato proceda a la construcción/es de infraestructura/s edilicia/ con instalaciones necesarias a fin de que preste/n las condiciones mínimas sanitarias, de espacio, readaptación, educación y dignidad, condiciones necesarias para albergar a los internos y permitir realizar las tareas diarias a los empleados de la Alcaidía de Resistencia. • Que los representantes legales de los Poderes Ejecutivo y Judicial cumplan acabadamente con las cargas que en la especie les impone las Leyes y la Constitución. Este requerimiento se plantea por nuestra parte de manera inequívoca en el más amplio sentido de las cargas legales que pesan sobre los funcionarios públicos de ambos poderes del Estado, acorde con sus rangos, jerarquías, cargas y deberes. Por último, este requerimiento se formula por el término y bajo apercibimiento de ley, en cada caso puntual respecto de cada uno de los funcionarios de los poderes del Estado con obligaciones especiales o generales según las Leyes y la Constitución. En este sentido, resaltamos la responsabilidad de los Jueces en función de lo dispuesto en el articulo 18, in fine, de la Constitución Nacional, que reza lo siguiente: “…Las Cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que ella exija, hará responsable al Juez que la autorice.”. 14 III – PRUEBAS : Acompañamos y ofrecemos las siguientes: a) Todas y cada una de las pruebas producidas en el Expediente N° 338/08, autos caratulados: “DR. CORREGIDO GUSTAVO ADOLFO, FISCAL FEDERAL S/ RECURSO DE HABEAS CORPUS A FAVOR DE ORTIZ JOSE ARMANDO Y DELGADO ROBERTO (INTERNOS ALCAIDÍA)” del registro del Juzgado Federal de Resistencia, Chaco. b)Constatación Judicial del Lugar: a los fines de que quede acreditado en autos los extremos que hemos alegado como violatorios de las pautas entabladas por el art. 18 de la Constitución Nacional, en el art. 27 de la Constitución Provincial y en los Tratados Internacionales de Derechos Humanos incorporados a nuestro ordenamiento jurídico a través de lo dispuesto por el inc. 22, del art. 75 de la Constitución Nacional, es que se propone que se produzca la prueba de constatación judicial de lugar a los efectos de inspeccionar integralmente la Alcaidía de la ciudad de Resistencia; la constatación deberá ser plena e integral, de modo que comprenda la totalidad de las dependencias, lugares, secciones y sitios que forman parte de dicho establecimiento. c) Publicación periodística en “Diario Norte” página 40, titulada “FUNCIONARIO PENITENCIARIO RECONOCE FALTA DE INVERSIÓN EN LA ALCAIDIA”, de fecha 19 de Julio de 2008. d) Publicación periodística en “Diario Norte” página 72, titulada “LA ALCAIDIA DE RESISTENCIA CON GRAVE SUPERPOBLACION”, de fecha 20 de Julio de 2008. e) Publicación periodística en “Diario Norte” página 40, titulada “CAPITANICH: LAS ALCAIDIAS DEL CHACO ESTAN EN CONDICIONES INFRAHUMANAS”, de fecha 30 de Julio de 2008. f) Publicación periodística en: http://casarosada.gov.ar “Presidencia de la Nación Argentina”, titulada “CONVENIO PARA LA ATENCION DE LA SALUD DE PERSONAS PRIVADAS DE LA LIBERTAD”, de fecha 31 de Julio de 2008. g) Acta de Constatación de fecha 25/04/2008, labrada en dependencias de Alcaidía de Resistencia. h) Denuncia –en fotocopia-, efectuada por Lidia Basualdo (Hermana de Walter Basualdo) y Analia Albornos (hermana de Domingo Albornos), en Mesa Informatizada del fuero penal en fecha 05/08/2008 a horas 19:17, por la cual se formó Expediente Nº 22452/08 del registro de la Fiscalía de Investigación Penal Nº 4, de esta ciudad.- 15 IV – PETITORIO: Por todo ello, SOLICITAMOS: 1) Se tenga por interpuesta acción de HABEAS CORPUS a favor de todos los internos de la Alcaidía de Resistencia, entre ellos WALTER JORGE BASUALDO y DOMINGO ALBORNOZ , y la totalidad del personal policial que presta servicios en la Alcaidía de Resistencia. 2) Conforme lo expuesto y lo que se acredite en autos, corresponderá que oportunamente se dicte resolución ordenándose al Estado Provincial que planifique y ejecute, en forma inmediata, todas y cada una de las medidas, acciones e inversiones que hagan que la Alcaidía de la ciudad de Resistencia se constituya y funcione como un establecimiento de detención estatal que se ajuste a las pautas fijadas en el art. 18 de la Constitución Nacional, en el art. 27 de la Constitución Provincial y en los Tratados Internacionales de Derechos Humanos, incorporados a nuestro ordenamiento jurídico a través de lo dispuesto por el inc. 22, del art. 75 de la Constitución Nacional y art. 1.1 de la Convención Americana de DD.HH. Las medidas, acciones e inversiones que se impartan deberán ser taxativamente detalladas en el pronunciamiento al dictarse en autos, describiéndose el modo y el tiempo de cumplimiento de cada una de ellas, de manera que no se desnaturalice el proceso en el marco de la ejecución a cargo del Poder Ejecutivo, dado que en última instancia éste podrá decretar la emergencia operativa y funcional del establecimiento carcelario, con lo cual puede asignar medios y recursos extraordinarios a los fines requeridos. 3) MEDIDAS EXTRAORDINARIAS INMEDIATAS: interín se planifiquen y ejecuten las soluciones de fondo, judicialmente deberá disponerse las medidas extraordinarias que correspondan, que sean adoptadas para hacer cesar de inmediato la violación de los derechos humanos que sistemáticamente y de forma continua se producen en la Alcaidía de Resistencia. 4) PRONUNCIAMIENTO PARA EL MEDIANO Y LARGO PLAZO: como requerimiento de fondo, que debe ser resuelto en el futuro pronunciamiento a dictarse en autos, por vía de la presente acción de Hábeas Corpus pretendemos la formulación de una POLITICA PENAL CARCELARIA democrática y moderna, inexistente en la Provincia del Chaco, omisión que constituye un débito inexcusable que imputamos a los poderes del Estado. 5) Se informe del presente Recurso de Habeas Corpus al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, a fin de que tome razón y para que por su intermedio informe a la COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS, con sede en Washington, E.E.U.U., a fin de corregir la política carcelaria de hecho aplicado por el Estado Chaqueño, a contrapelo de las Leyes, de la Constitución y de los Tratados Internacionales vigentes en nuestro país. La intervención corresponde en derecho porque el Estado Nacional es el garante de la vigencia y tutela de la aplicación de los Tratados Internaciona- 16 les en nuestro país, en función de su calidad de firmante de tales instrumentos legales. 6) AUSENCIA DE HIPOTESIS DE CONFLICTO DE PODERES: en cualquier caso, la resolución que se dicte en la especie encontrará andamiento y oficiosidad constitucional en la responsabilidad del juez que menciona el último párrafo del art. 18 de la Constitución Nacional, pauta que impedirá que el pronunciamiento pueda ser interpretado y calificado como expresión de un conflicto de poderes del Estado o de injerencia inter-poderes por cuestiones supuestamente vedadas al Poder Judicial. 17