El Imperialismo TEMA 6.- EL IMPERIALISMO ESQUEMA 1.- Teorías y causas. 1.1.- Causas económicas. 1.2.- El nacionalismo. 1.3.- Causas políticas. 1.4.- Otras causas. 1.4.1.- Explotación del planeta y desarrollo de los estudios geográficos, geofísicos y geológicos. 1.4.2.- Factores ideológicos. 1.4.3.- Roces fronterizos coloniales. 1.4.4.- Expansión demográfica europea. 1.4.5.- Factores técnicos. 1.5.- Modalidades de la colonización. 1.5.1.- Según la forma de explotación. 1.5.1.1.- Colonias de explotación. 1.5.1.2.- Colonias de poblamiento. 1.5.1.3.- Concesiones. 1.5.2.- Según la forma de gobierno. 1.5.2.1.- Colonia. 1.5.2.2.- Protectorado. 1.5.2.3.- Territorios metropolitanos. 1.5.2.4.- Dominios. 2.- Imperios coloniales. 2.1.- El imperio inglés. 2.2.- El imperio francés. 2.3.- Bélgica. 2.4.- Holanda. 2.5.- Alemania. 2.6.- Italia. 2.7.- España. 2.8.- Portugal. 2.9.- Rusia. -1- El Imperialismo 2.10.- Japón. 2.11.- Estados Unidos. 3.- Consecuencias históricas del Imperialismo. 3.1.- Consecuencias para las metrópolis. 3.2.- Consecuencias para las colonias. -----------------------------------------1.- TEORÍAS Y CAUSAS. La expansión y generalización entre los países europeos de la idea imperialista en los treinta años anteriores a la Primera Guerra Mundial es resultado de una serie de factores: 1.1.- Causas económicas. Son fruto de la expansión del capitalismo industrial. Las nuevas colonias son fuente de materias primas y mercado seguro para la producción industrial metropolitana. 1.2.- El nacionalismo. La segunda mitad del siglo XIX es una época de triunfo de las ideas nacionalistas, con importantes realizaciones como las unificaciones de Italia y Alemania. Estos nuevos estados buscan una expansión colonial que los equipare con las potencias históricas europeas. En algunas de éstas últimas, la idea expansionista supone un olvido de recientes desastres (en el caso francés, la derrota de Sedán y la pérdida de Alsacia y Lorena), un lanzamiento a una política de prestigio, un intento de contener a las masas populares. En este contexto, en el que privan los ideales de potencialidad mundial o de prestigio nacional, no es extraño que otros países europeos, hasta ese momento ajenos a la expansión imperialista, se integren en esta carrera de reparto del mundo. 1.3.- Causas políticas. Los grandes políticos del momento son claros defensores de la política imperialista, opinan que la importancia de un Estado no consiste solamente en fortalecer la metrópoli, sino en la conquista de territorios, en la formación de imperios. -2- El Imperialismo 1.4.- Otras causas. 1.4.1.- Explotación del planeta y desarrollo de los estudios geográficos, geológicos y geofísicos. Desde mediados del siglo XIX una serie de obras (de autores como Julio Vernei o Rudyard Kiplingii) impulsan el espíritu de fantasía y aventura en el Viejo Continente. África, hasta entonces prácticamente desconocida salvo en la costa, comienza a ser recorrida tanto a partir de sus grandes ríos como por el desierto del Sahara; Livingstoneiii, Stanleyiv, Nachtigalv, entre otros muchos, destacan en estas empresas. De la misma forma se penetra en Asia, llegando a la cordillera del Himalaya, o se atraviesa Siberia. El desierto australiano es también superado. Finalmente se conquistan los polos: el Polo Norte en 1909 (Pearyvi) y el Polo Sur en 1911 (Amundsenvii). Si bien es cierto que científicamente es preocupación de una minoría, estos descubrimientos apasionan a la sociedad del momento y la motivan bien a una simpatía por el control de estas nuevas tierras, bien a una pasión de conquista. 1.4.2.- Factores ideológicos. En los ambientes nacionalistas se desarrollan teorías que ven al hombre blanco como superior y, por tanto, con una misión civilizadora sobre el resto de los pueblos. Asimismo, la misión evangelizadora religiosa contribuyó al proceso colonial apoyando la idea de extender el cristianismo por África y Asia. 1.4.3.- Roces fronterizos entre las colonias de varias potencias o levantamientos de pueblos indígenas. 1.4.4.- La expansión demográfica europea. En muchas ocasiones se transforma en una presión que disminuye con la emigración a las colonias. 1.4.5.- Factores técnicos. El progreso de los medios de locomoción permite unos transportes más rápidos y baratos. Así, el barco a vapor permite una mayor carga y velocidad, lo que hace que se abaraten los fletes. Al mismo tiempo, las grandes compañías navieras presionan a favor de la colonización, pues necesitan asegurar para sus viajes las escalas precisas para abastecerse de carbón, agua, etc. -3- El Imperialismo 1.5.- Modalidades de la colonización. 1.5.1.- Según la forma de explotación. 1.5.1.1.- Colonias de explotación. Territorios en los que, a partir del establecimiento de grandes compañías comerciales, funcionarios o militares explotaban los recursos naturales. Es el caso de la India y de los territorios del África negra, donde se impuso una agricultura de plantación (café, algodón, caña de azúcar...) y la explotación minera. 1.5.1.2.- Colonias de poblamiento. Territorios donde se establecieron grandes contingentes de inmigrantes europeos. Trabajaban como colonos agrícolas en granjas, ocupando las tierras expoliadas a los indígenas, los cuales eran trasladados a tierras menos fértiles o utilizados como mano de obra barata. Es el caso de Canadá, Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia (imperio británico) y también de Argelia y las Antillas (imperio francés). 1.5.1.3.- Concesiones. Grado menor de presencia europea que consiste en un acuerdo de tipo comercial por el que se produce un asentamiento, generalmente en una ciudad con puerto de mar, para facilitar intercambios comerciales, concesión de minas, construcción del ferrocarril... El ejemplo típico es Hong-Kong (concesión británica hasta el 30 de junio de 1997). 1.5.2.- Según la forma de gobierno. 1.5.2.1.- Colonia. Se impuso en los territorios donde existía un gobierno autóctono y que, por el derecho de ocupación, han caído bajo la órbita de la metrópoli, la cual impone sus funcionarios e instituciones, organizando la administración. Han perdido cualquier tipo de gobierno indígena anterior a la conquista. -4- El Imperialismo 1.5.2.2.- Protectorado. Se respeta el gobierno indígena, que organiza la vida interior del territorio; sin embargo, debe seguir las directrices de política exterior marcadas por la metrópoli, y en la práctica cae en una sumisión total al gobierno de la potencia con la que ha pactado. Es el modelo de administración política que utilizaban los franceses en África y en Indochina, o los ingleses en la India y en Birmania. 1.5.2.3.- Territorios metropolitanos. Sistema utilizado por los franceses. Los territorios coloniales eran considerados una prolongación del territorio metropolitano y sus habitantes eran representados en las instituciones de gobierno de la metrópoli. 1.5.2.4.- Dominios. En las colonias de poblamiento inglesas, los colonizadores consiguieron el autogobierno, tenían sus propias instituciones, parlamentos y plena libertad en política interior. Se mantuvo el vínculo con la metrópoli por medio de la figura del gobernador. Es el sistema que se implantó en Canadá, Australia y Nueva Zelanda. 2.- IMPERIOS COLONIALES. 2.1.- El imperio inglés. Sus colonias estaban distribuidas por todos los continentes. En Europa disponía de Gibraltar, Malta, Corfú y las Islas Jónicas; en América, de Canadá, Honduras, etc.; en África, de Sierra Leona o África del Sur, entre otras; en Asia, de la India, Hong-Kong, etc.; y en Oceanía, de Australia o Nueva Zelanda, entre las principales. A partir de 1877 los ingleses aceleran su expansión colonial con África como objetivo principal, donde se intenta crear un imperio continuo de norte a sur (de El Cairo a El Cabo). Se busca, por otra parte, asegurar las rutas hacia las colonias principales o hacia los grandes centros comerciales, como la India o China, respectivamente. Esto explicaría sus intereses en África del Sur, África Oriental y en Egipto. Los intereses británicos se centraron en contactar Uganda con Egipto a través de Sudán. En -5- El Imperialismo África del Sur la Compañía Británica de Sudáfrica, de Cecil Rhodesviii, había obtenido en 1890 los derechos de explotación de todas las minas durante 25 años, Bechuanalandia y una zona que se extiende por el norte hasta el Congo (Rhodesia): en esta expansión se produjo un choque con los bóeres al descubrirse oro en Transvaal. En 1899 estalló la guerra, en la que los bóeres contaron inicialmente con la ayuda de Alemaniaix; en 1902 sus dos repúblicas fueron ocupadas por los ingleses que, en 1910, crearon la Unión Sudafricana como un dominio británico que agrupaba todas las tierras al sur de Bechuanalandia. La formación del imperio británico en Asia puede decirse que quedó completado hacia 1885. Partiendo de unos territorios directamente controlados por Calcuta se extienden hacia el interior en dirección noroeste (estado sij del Punjab y Afganistán) y este (Birmania). A partir de 1857, después de la revuelta de los cipayosx, la Corona asume directamente el gobierno de la colonia: hasta entonces era la Compañía Británica de las Indias Orientales quien dirigía su administración. A comienzos de los 50, casi todos los territorios indios estaban bajo control británico, iniciándose las tensiones con los rusos en Afganistán. En el este, Gran Bretaña se anexionó Birmania en 1885. En Malasia, después de asegurada su zona de influencia en torno a Singapur (1867), se procedió a la anexión paulatina de los pequeños gobiernos existentes, que quedaron como protectorados británicos. 2.2.- El imperio francés. Francia parte en 1870 de un imperio muy inferior al británico. Sus territorios provenían, en parte, de los restos del primer imperio colonial, ya perdido, como las posesiones en América Central y las Antillas (Guayana, Martinica, etc.), y, sobre todo, de la labor colonizadora llevada a cabo entre los años 30 y 50 y completada por Napoleón III. En este periodo se habían conquistado Argelia (en 1830 Carlos X había tomado Argel), así como Senegal y algunas zonas de Madagascar (África) y Tahití (Oceanía). Con Napoleón III se ponen las bases del imperio de Extremo Oriente mediante la anexión de Nueva Caledonia y Cochinchina y el establecimiento de un protectorado en Camboya (estas acciones pretendían, entre otras causas, proteger a los misioneros católicos de la zona). Igualmente se inicia la conquista de ciertos territorios del África noroccidental. 1870 marca un hito en la política francesa, ya que la derrota frente a Prusia hace que se proclame la III República y que se lance a una nueva fase colonizadora como medio de solucionar los problemas, especialmente los económicos, del interior. En Asia se ocupa el resto de Indochina: Annam, Tonkín y Camboya, hasta formar la Unión Indochina, compuesta por estos tres últimos protectorados más la colonia de Cochinchina. Para -6- El Imperialismo redondear sus fronteras, Francia reivindicó Laos, lo que generó una crisis, puesto que los territorios franceses limitarían al norte con la Birmania británica. Siam mantuvo su independencia como un Estado tapón entre los territorios de los imperios europeos. En África, partiendo de Argelia, se conquistan las zonas del Mediterráneo occidental (Túnez y Marruecos), para lanzarse después hacia el sur y unir estas posesiones con las de Senegal y el Congo, creando así un gran imperio en el África noroccidental. Su objetivo, que no se logró, era contactar el Atlántico con el Índico, a través de Sudán, pero al intentarlo chocan con los intereses ingleses (crisis de Fashodaxi). Por lo demás, se consigue Yibuti y se termina la colonización de Madagascar. Se conquistan algunos archipiélagos del Índico y el Pacífico. 2.3.- Bélgica. Sólo consigue la rica región del Congo, gracias al interés de su rey Leopoldo II, que recibe dicho país, a título personal, en la Conferencia de Berlín (1885). A su muerte lo legó al país. 2.4.- Holanda. Ya poseía un imperio de cierta importancia a mediados del siglo XIX, pero no va a ampliar sus territorios con nuevas conquistas. Pierde, incluso, algunas posesiones, como El Cabo o Ceilán, en beneficio de Inglaterra. El resto, compuesto por zonas de las Indias Occidentales, como Guayana y algunas islas de las Antillas, y de las Orientales, como las Indias Holandesas (Molucas, Célebes, Java, Sumatra...), es consolidado al mejorar las comunicaciones y establecer un sistema centralizado de administración. A nivel económico, Holanda crea todo un sistema de modernas plantaciones, de las que extrae caucho, especias y tabaco. 2.5.- Alemania. La colonización alemana es la más breve, puesto que en 1918, tras su derrota en la Primera Guerra Mundial, pierde todas sus colonias. Se incorpora tarde (años 80) a la política colonial. Hasta este momento, Bismarck había abandonado la política colonial en manos de empresas privadas, y esta tardía incorporación influye en que Alemania no pueda escoger las zonas a conquistar, sino que tenga que contentarse con los territorios que quedaban y, además, deba enfrentarse con otras potencias al pretender introducirse en sus zonas de influencia. En 1883-85 Bismarck adquirió en una acción sorpresa los protectorados del África del -7- El Imperialismo sudeste (Tanzania) y del sudoeste (Namibia), así como Togo y Camerún. Su imperio se completa con una serie de archipiélagos del Pacífico (algunos comprados a España en 1899, como Marianas y Carolinas) y la apertura de China a su comercio (como al del resto de los países occidentales). Sin embargo, sus aspiraciones imperialistas no quedaban totalmente satisfechas. 2.6.- Italia. Debido a su reciente unificación, crea tarde su imperio colonial; en primer lugar se establece en Eritrea y Somalia, tras el intento fallido de incorporar Etiopía. Después, en 1911-12, y con el beneplácito de Francia, se anexiona Libia y obtiene así una colonia en el Mediterráneo, tras una guerra contra Turquía. 2.7.- España. Pierde su imperio americano y asiático a lo largo del siglo XIX, pérdida que culmina con el «desastre del 98» (Cuba, Puerto Rico y Filipinas). Pero poco antes de este hecho, en el Congreso de Berlín, logra en África los territorios de Río de Oro (Sahara) y Guinea Ecuatorial. Ya en el XX, y tras la Conferencia de Algeciras (1906), inicia lentamente y con bastantes problemas la conquista de su protectorado de Marruecos. 2.8.- Portugal. Ve también desaparecer su imperio americano (Brasil) y parte del resto, por independencia de las colonias o arrebatado por otras potencias. Pero mantiene algunas factorías y amplía, además, sus colonias costeras de África: Angola, Mozambique y Guinea Bissau. 2.9.- Rusia. El fracaso de la política tradicional de avance en los Balcanes lleva a la colonización de las tierras de Asia. Las causas de este deseo expansionista son distintas a las de los países occidentales ya que no tiene la base de una importante industria. Por ello, en lugar de buscar materias primas o mercados, lo que intenta es llegar al Pacífico y lograr unas fronteras seguras ante los pueblos esteparios. La anexión de Siberia oriental no tuvo fuertes oponentes; no ocurrió lo mismo con el norte de China, pues si bien este estado tuvo que admitir la dominación rusa en la provincia del Amur; la fundación del puerto de Vladivostok, la ocupación de la isla de Sajalín -8- El Imperialismo y la penetración en Manchuria y norte de Corea provocaron el enfrentamiento con los japoneses, quienes vencieron en 1905. La zona de Asia central (Turquestán) sería ocupada entre 1850 y 1880, comenzando seguidamente a deteriorarse las relaciones entre rusos y británicos: gracias a estas crisis se mantuvo la independencia de Afganistán y Persia, que quedarían como Estados tapones entre ambos imperios. 2.10.- Japón. El colonialismo japonés se inicia a partir de la revolución Meijí de 1868 y es consecuencia del fuerte aumento de su población y de las necesidades de materias primas y mercados que provocaba su rápida industrialización. Japón comienza a construir su imperio con la incorporación de las islas Kuriles y otros archipiélagos a partir de 1876. Pronto fija sus objetivos en el continente asiático, lo que le lleva a un enfrentamiento con China (1894-95), a la que vence, y consigue con ello la isla de Formosa y la «independencia» de Corea, que cae bajo su influencia. Estos hechos provocan la guerra contra Rusia de 1904-1905, que, tras el triunfo japonés, permite la creación de un protectorado sobre Corea, que será anexionada finalmente en 1910, y sobre el sur de Manchuria. Esta actitud beligerante pone de manifiesto la potencia y las ambiciones japonesas. 2.11.- Estados Unidos. Estados Unidos mantiene una teoría antiimperialista que había definido en sus líneas generales el presidente Monroe en 1823, según la cual ningún Estado tenía derecho a extender su dominio sobre otros pueblos. Fruto de ello es la concesión de la independencia a Liberia (1847) y la carencia de colonias o posesiones fuera de América del Norte. Con todo, inicia la incorporación de nuevos territorios después de la guerra de Secesión (1861-65). Sin embargo, su política imperialista basada en el control económico de otros países, en los que interviene militarmente sólo cuando peligran los propios intereses o los de sus ciudadanos particulares, comienza antes y tiene características propias. Las causas de su imperialismo han sido discutidas, aunque se aceptan las de tipo económico, que parten de su gran desarrollo industrial. El área de intervención se reduce en principio al continente americano y sus islas, y se amplía posteriormente a los territorios del Pacífico. Efectivamente, como consecuencia de la guerra de 1898 contra España, influyen sobre Puerto Rico, Filipinas y Guam; al finalizar el siglo habían incorporado las islas Hawai (1898) y la isla de Wake (1900); algunas otras islas del Pacífico y del Caribe que ocupan en los primeros años del siglo XX, se ha definido como un «imperialismo -9- El Imperialismo estratégico», al tener sus zonas de influencia más valor en este sentido que el económicoterritorial. La incorporación de nuevas zonas se va a realizar de tres formas: * Mediante compra: Alaska es adquirida a los rusos en 1867 por siete millones de dólares. Antes se había utilizado ya el mismo sistema para adquirir Luisiana, Florida y el sur de Arizonaxii. * La guerra: la llevada a cabo contra España en 1898 que concluye con la Paz de París, proporciona a Estados Unidos Puerto Rico, Guam y Filipinasxiii, y un cierto protectorado sobre Cubaxiv. * Otros sistemas: el tratado utilizado con Panamá para la adquisición del canal y territorios adyacentesxv. Para ello apoyaron antes a Panamá en su independencia de Colombia, que no aceptaba dicho tratado. El resultado final es el de una ocupación directa reducida (alrededor de 300.000 km2), pero con una zona de influencia y control, tanto económico como político, mucho mayor. 3.- CONSECUENCIAS HISTÓRICAS DEL IMPERIALISMO. 3.1.- Consecuencias para las metrópolis. A nivel económico las colonias suponen una fuerte sangría del presupuesto oficial (por ello algunas potencias dudan de la conveniencia de lanzarse por la ruta del imperialismo) y grandes inversiones privadas, por lo menos en una primera fase, para crear la infraestructura necesaria que permita la posterior explotación de las mismas. A pesar de ello, esta dedicación presupuestaria resulta un paso obligado que normalmente se ve compensado con creces con el paso del tiempo. Pronto las colonias aportan grandes cantidades de materias primas, minerales -cuando existen- o agrícolas, tras la creación de grandes plantaciones de monocultivos. En todas partes se intentó fomentar un cultivo básico, por ejemplo el caucho en Indonesia, el cacao en Nigeria, el café en Tanganika (Tanzania). La producción aumentó. En Argelia los viñedos se multiplicaron por cuatro entre 1881 y 1895; Indochina exportaba en 1900 un millón de toneladas de arroz. Además permiten la salida de grandes cantidades de productos manufacturados de las industrias metropolitanas, que alivian así los stocks en épocas de crisis y proteccionismo. Aunque todas las potencias tienen un activo comercio con sus colonias, sólo Inglaterra logra unos porcentajes importantes, cercanos al 50% del total de su comercio exterior. En el resto de los casos el porcentaje es muy inferior y sólo alcanza cotas destacables en las crisis de los años 20. Todo ello -10- El Imperialismo permite a las potencias mantener un ritmo de crecimiento más o menos continuo, que sólo se verá roto de forma importante en la década de 1920. En el campo demográfico y social las colonias son una válvula de escape para la presión demográfica, porque, al facilitarse la emigración a ellas, disminuyen los problemas sociales, e incluso políticos, que podrían derivarse del aumento de la población. Políticamente permiten olvidar, o al menos dejar en segundo término, los problemas internos o externos, con lo que se alivian las tensiones socio-políticas. Los jefes políticos, así como las naciones, cobran mayor prestigio a nivel internacional, y los enfrentamientos entre países europeos son también relegados parcialmente al dedicar las potencias sus fuerzas al afán expansionista. Sin embargo, las rivalidades, más que eliminarse, se trasladan a las colonias y se dirimen en las mismas. No obstante, las colonias suponen también una nueva fuente de conflictos internos, pues en todos los países aparecen focos de oposición frente a la política colonial, ya sea para reclamar el empleo de las inversiones en objetivos internos, o bien como protesta ante la explotación y la barbarie llevadas a cabo en las colonias. 3.2.- Consecuencias para las colonias. Una de las primeras consecuencias es que se crea una nueva geografía al cambiar la estructura de las costas con la construcción de puertos y la del interior con la aparición de nuevas ciudades, nuevas vías de comunicación, nuevas estructuras agrícolas, apertura y explotación de minas y canteras, etc. Todo ello, y la llegada de productos industriales, ponen las bases de una nueva economía de mercado, que utiliza para los intercambios el papel moneda. La producción y el consumo suelen aumentar, aunque la renta de los campesinos tradicionales no crece. El comercio con la metrópoli es desigual, ya que, al no existir industrias (en muchos casos están prohibidas), se exportan materias primas y se compran productos manufacturados, por lo que siempre se produce un déficit comercial y monetario. En muchos casos tiene lugar un verdadero saqueo de la colonia. A nivel demográfico también se dan contradicciones. Mientras la medicina europea crea hospitales y vence las epidemias tradicionales, el contacto con los blancos y la mejora de las comunicaciones facilita el contagio de enfermedades inhabituales en estas latitudes; por ello aumenta al principio la mortalidad de los indígenas y se produce un estancamiento e incluso un retroceso de la población. Sin embargo, pronto disminuye la mortalidad general al tiempo que se mantiene la natalidad, lo que provoca un fuerte crecimiento de la población, y se pasa así a una segunda fase de la evolución demográfica que propicia la aparición de problemas sociales y -11- El Imperialismo políticos. Este mismo dualismo se puede apreciar igualmente en el terreno social. Surge con pujanza la vida urbana, aparecen nuevas ciudades que crecen extraordinariamente y en las que se rompen las estructuras tribales al aparecer nuevas clases sociales desconocidas hasta entonces en las colonias: * Una burguesía compuesta por negociantes e intermediarios, junto a propietarios y funcionarios. Se trata, en su mayoría, de blancos e inmigrados de otros países. * Un proletariado indígena, formado por quienes construyen las infraestructuras y los obreros de las primeras industrias (alimenticias y textiles). Junto a ellos hay gran cantidad de trabajadores de servicios personales y de subempleados. En esta sociedad urbana aparece una segregación racial y social con barrios claramente diferenciados. En el campo, junto a las nuevas plantaciones de organización y estructura burguesa, sigue existiendo toda una serie de tierras cultivadas por un sistema de subsistencia. Culturalmente la consecuencia más destacable es el cambio mental, fruto de la evangelización y la enseñanza. Los misioneros llevan a cabo una profunda influencia en todos los campos de la vida, que va desde la higiene a la religión pasando por los cambios de cultivos, la enseñanza, etc. Aparte, y algo después, se produce la enseñanza oficial, que es reducida, matizada y orientada a unas mayores posibilidades de explotación. A pesar de ello sirve para difundir los conocimientos técnicos y científicos de Europa. Todo lo anterior contribuye a que se produzca un proceso grave de aculturación indígena, con un fuerte retroceso de las lenguas, costumbres y culturas autóctonas. Por último, hay que reseñar un lento proceso de difusión de ideas políticas y la aparición de un anticolonialismo, producto de los abusos en la explotación y la miseria en la que quedan sumidos los indígenas. Este fenómeno varía mucho en intensidad y duración según los países. Se va a hacer patente en revueltas de muy distinto signo y en resistencias armadas o pasivas. Y aunque los movimientos nacionales organizados que a mediados del siglo XX logran la independencia, son muy posteriores, hay que pensar que tienen su origen aquí. En definitiva, podemos concluir diciendo que es indudable que pueden hallarse bastantes aportaciones positivas, pero en el conjunto predominan las negativas; las viejas civilizaciones fueron destruidas, sus lenguas desplazadas, la industrialización prohibida, en algunas zonas se produjo la segregación racial, el mantenimiento de los indígenas en empleos inferiores y barrios apartados. Para las potencias europeas la colonización permitió la colocación de sus excedentes demográficos, la venta de sus productos industriales, la obtención barata de materias primas. -12- El Imperialismo -13-