El injusto cuadro de mando de CocaCola Ganancias financieras: Crecimiento: + 2% Precio de las acciones: + 17% Dividendo anual: + 10% Pérdidas sociales: Puestos de trabajo: - 20% Bélgica: - 200 Francia: - 350 Grecia: - 300 Italia: - 500 Noruega: - 500 España: - 500 Reino Unido: - 500 Los trabajadores europeos no estamos dispuestos a pagar el precio de la codicia de los accionistas de Coca-Cola. Vamos a defender los puestos de trabajo en Coca-Cola: ¡acabemos con las reducciones de plantilla!, ¡acabemos con el empleo precario! Coca-Cola quiere que sus empleados sean los embajadores de la empresa, ya que su lema es «Forma parte de ella». Y nosotros queremos formar parte de ella; por eso, queremos mantener nuestros puestos de trabajo en Coca-Cola. Coca-Cola: ¡Salvemos el empleo! Pongamos fin a la interminable búsqueda de flexibilidad emprendida por Coca-Cola con el fin de maximizar sus beneficios, ya que está socavando el equilibrio entre la vida laboral y la familiar, así como los derechos adquiridos por los trabajadores de la empresa. Solidaridad con todos los compañeros que están perdiendo sus empleos a causa de los programas de flexibilidad llevados a cabo en Tesalónica (Grecia), en Gaglianico (Italia), en Wakefield (Reino Unido) y en España. No estamos dispuestos a aceptar que el valor de los accionistas sea el único objetivo perseguido por la dirección central de Coca-Cola. Con firmeza, exigimos a Coca-Cola que inicie un diálogo constructivo con los sindicatos representantes de los trabajadores de la empresa en Europa, mediante la coordinación de la Federación Europea de los Sindicatos de los Sectores de la Alimentación, la Agricultura y el Turismo (EFFAT-UITA), a fin de que conjuntamente mejoremos la competitividad y de que se respete a las personas que hacen que Coca-Cola sea un gran producto y un excelente lugar para trabajar Solidaridad con los trabajadores de Wakefield (Reino Unido) En nuestra condición de trabajadores de CocaCola empleados en todas sus fábricas europeas, queremos manifestar nuestra solidaridad y apoyar la protesta de nuestros compañeros de Wakefield y a los que han perdido sus puestos de trabajo debido a la reciente reestructuración de esta fábrica. No estamos dispuestos a aceptar que una empresa del calibre de Coca-Cola despida a trabajadores eficaces de forma tan implacable. No estamos dispuestos a aceptar que una reestructuración que implica despidos obligatorios sea posible en la fábrica de Wakefield, cuando es sabido que hay personas dispuestas a abandonar la empresa de manera voluntaria. Y lo que es aún más importante, no estamos dispuestos a aceptar que los compañeros que han perdido sus empleos provengan de los mismos grupos seleccionados, posean las mismas cualificaciones y, en la mayoría de los casos, trabajen en las mismas áreas que los empleados que aceptan su marcha voluntaria. Esta medida en contra del capital humano de la fábrica es claramente discriminatoria y digna de ser condenada. Trabajadores que han dedicado los años más importantes de sus vidas a hacer que Coca-Cola sea una gran marca en todo el mundo se ven ahora privados de ingresos que les permitan mantener una calidad de vida decente a ellos mismos y a sus familias. Las reducciones de plantilla y la interminable búsqueda de flexibilidad no puede ser la única estrategia corporativa emprendida por CocaCola para maximizar sus beneficios, ya que está socavando el equilibrio entre la vida laboral y la familiar y los derechos adquiridos por los trabajadores de la empresa. No estamos dispuestos a tolerar esta agresiva estrategia industrial y tampoco vamos a aceptar que una empresa, que durante el año anterior ha logrado un incremento global del precio de sus acciones de casi el 20%, decida, como única vía para reducir sus costes, la eliminación de su activo más valioso, a saber, los trabajadores que hacen que Coca-Cola sea un gran producto. No estamos dispuestos a aceptar que el valor para los accionistas sea la única meta perseguida por la dirección central de Coca-Cola. Además, estamos viviendo un momento histórico en el que la crisis económica brinda la oportunidad de reforzar la implicación de los trabajadores en la viabilidad y la sostenibilidad a largo plazo de una empresa de tanta importancia como Coca-Cola. ¡QUEREMOS FORMAR PARTE de esta empresa y QUEREMOS MANTENER NUESTROS PUESTOS DE TRABAJO EN COCA-COLA! Exigimos a la dirección de la empresa que ponga en marcha un diálogo positivo y constructivo con el movimiento sindical a fin de mejorar su competitividad y de respetar a las personas que hacen que Coca-Cola sea un gran producto en todo el mundo.