"Crecida Extraordinaria del río Salado" Causas Naturales y antrópicas que provocaron la inundación de la ciudad de Santa Fe por el Ing. Mario Schreider, Secretario de Ciencia y Técnica de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de la Universidad Nacional del Litoral. Con el fin de esclarecer las causas que produjeron la catástrofe de Santa Fe, transcribimos la exposición brindada por el Ing Mario Schreider, el día 10 de junio de 2003, en marco de las jornadas "Inundaciones en Santa Fe: mirando hacia el futuro", organizadas por la Fundación Hábitat y Desarrollo con colaboración del Centro de Información de las Naciones Unidas para Argentina y Uruguay. La palabra que sintetiza todo el problema es "INUNDACIÓN", reflejada como ese efecto indeseable que causa daños tanto a los bienes materiales como a las personas, cuando uno hace un análisis sobre una inundación es relevante conocer las causas de la misma. Una componente de esas causas es la "crecida", que es el aumento del nivel de un rió debido a un incremento en su caudal. Además de eso a las causas se le debe sumar una serie de acciones u omisiones de los seres humanos. Por lo que a fin de cuentas estamos sumando una componente natural ( la crecida del río) más un componente antrópico (las intervenciones que hace el hombre o las que deja de hacer sobre el ambiente) para llegar a la producción del fenómeno. La crecida si bien tiene una esencia básicamente natural, también es afectada por factores antrópicos que la exacerban y otros que la pueden mitigar. Las consecuencias de la inundación es lo que más impacta sobre nosotros. En esta inundación del río Salado, la pérdida de vidas humanas fue shockeante, también hubo una gran pérdida de bienes materiales no solo en la ciudad de Santa Fe sino en casi toda la cuenca del Salado, un tercer elemento muy importantes es el impacto que este fenómeno ha producido al conjunto de la sociedad, no solamente a la sociedad santafesina ya que ha impactado sobre todo el país. Características de la cuenca inferior del Río Salado La cuenca inferior del Río Salado tiene sus nacientes en el noroeste santafesino, constituye un sistema típicamente de llanura con una superficie aproximada de 60.000 km2, se desarrolla casi íntegramente en la provincia de Santa Fe. En este caso hablamos de la cuenca inferior porque las precipitaciones que dieron lugar a la crecida, ocurrieron en Santa Fe, no estamos hablando de lluvias que hayan caído en otra provincia. Es interesante cuantificar la crecida del Salado en términos de caudal, el caudal medio del río Salado es de 150m3 /segundo, en las crecidas que se habían registrado entre el año 1952 y el 2000 se habían registrado valores del orden de 2600 m3 /s en al año 1973 y 2700 m3 /s en el año 1998. Esto es algo muy importante a señalar en relación al comportamiento del río, si nosotros vemos la relación del caudal en la inundación con respecto al caudal medio es del orden de 20 veces mayor. Mucho más marcado de lo que sucede en el caso del Río Paraná donde esa relación oscila entre 3 o 4 veces mayor caudal en sucesos de inundación con respecto al caudal medio. Esto quiere decir que el Río Salado durante las épocas de crecida hace gran uso de su valle, el aumento de caudal en tiempos de crecida escurre a través de su valle. Esto es muy importante a la hora de decidir respecto a qué tipo de intervenciones vamos a hacer sobre el valle de inundación. Influencia del cambio climático Si quisiéramos analizar en que contexto se provoca la inundación, claramente tenemos que referirnos a un marco mas general y de hecho no podemos obviar al cambio climático como fenómeno que está influyendo en todo el planeta y que específicamente para nuestra región marca un quiebre en el régimen de precipitaciones. En las décadas del 40 y del 50 estábamos atravesando un período seco con regímenes de precipitaciones disminuidos y con crecidas de poca magnitud muy espaciadas en el tiempo. A partir de la década del 70 se produce un cambio caracterizado por la aparición de eventos lluviosos muy intensos, por la persistencia de esas condiciones húmedas y cómo resultado de eso se produjo un proceso de saturación de las napas. Por ejemplo en la estación de Rafaela a finales de la década del 60 y principios de la del 70, teníamos la napa ubicada a 12 metros de profundidad medidos desde el nivel del suelo, hoy en día la misma se encuentra a 1 metro del suelo y en ocasiones a llegado estar a menos de esa profundidad. Hay una especie de saturación del suelo que hace que cuando se producen las precipitaciones, al estar disminuida la capacidad de almacenamiento de agua en el suelo no puede ser retenida por el mismo y entonces escurre. Justamente a raíz del cambio de las condiciones climáticas y otros factores, como los desarrollos tecnológicos y la mejora del precio, ha generado cuestiones antrópicas como el cambio de usos de la tierra marcado por el crecimiento de la superficie dedicada a la agricultura principalmente al cultivo de soja, el cambio en el manejo del suelo, las obras de infraestructura como la construcción de caminos y canales. Estas intervenciones han generado efectos que sumados al cambio climático producen mayores escorrentías ante una precipitación y con cada vez menor capacidad de retención del suelo, aumenta el escurrimiento. No solamente se transfiere como escurrimiento al río sino que muchas veces se ve facilitado el transporte, por lo que llega agua al río en mayor cantidad y en menor tiempo (más rápido). Las consecuencias de todo este proceso natural - antrópico son inundaciones en áreas tanto urbanas como rurales. Evidenciadas en el padecimiento que Santa Fe esta sufriendo pero que se produce también en otras zonas del país. Como respuesta a esta situación el gobierno de la Provincia de Santa Fe desde los años 90, encaró obras, básicamente terraplenes y obras de defensa que en algunos casos funcionaron bien y en otros como en el caso de la inundación última del Salado, no lo han hecho así. Causas de la inundación: Si tuviéramos que analizar lo que realmente sucedió en esta inundación tenemos que hablar de dos tipos de causas; las naturales y las humanas. Naturales: Las copiosas lluvias de Febrero, Marzo y Abril en algunas estaciones de la cuenca baja del Río Salado hicieron que las precipitaciones lleguen a los 1000mm, llovió en tres meses lo que habitualmente llueve en todo el año. Al estado de saturación de la cuenca, sumado a los niveles freáticos muy cercanos a la superficie se le agregaron precitaciones que en un período de 5 a 7 días superaron los 400mm. Estos números por si solos dicen que es imposible pensar de que una cuenca ante tal demanda desde el punto de vista hídrico, no promueva un régimen excepcional de crecidas. La consecuencia de esas grandes precipitaciones se tradujeron en dos picos, el primero un alerta del río en el mes de marzo, y el segundo el 30 de abril con un nivel en el hidrómetro de 6, 37metros de altura. Esto medido en términos de caudales constituye el mayor caudal registrado hasta el momento en la historia del río Salado, las mediciones hechas en el viaducto ferroviario fueron de 3100 m3 /s, esto sin incluir los desbordes que se provocaron sobre la margen izquierda. Por suerte no hubo superposición con la crecida del Río Paraná, este último permaneció en un nivel bajo y por ello no se sumaron los niveles. Si esto hubiera ocurrido, los problemas hubieran sido mucho mayores. ¿Se encuentra la ciudad de Santa Fe emplazada en una zona inundable? Una pregunta válida es si el sector que se inundó es naturalmente un sector inundable, y esto se puede responder mediante el uso de imágenes satelitales de la zona afectada. La respuesta es que sí, la ciudad de Santa Fe se encuentra en una geografía claramente dominada por ríos, y por lo tanto su área es susceptible de ser inundada porque en ese lugar se desarrolla en forma manifiesta el valle de inundación del río Salado. De hecho la gente ocupa ese lugar hace muchos años. Lo que sucedió el 1 de mayo como se ve claramente en imágenes satelitales es que el río Salado demostró la capacidad que tiene de inundar su valle. Existían advertencias de que el río podía ocupar su valle, el Instituto Nacional del Agua (INA), en el año 1992, hizo un estudio para estimar bajo determinadas condiciones del Río Salado y del Río Paraná, hasta donde podría llegar el agua en la ciudad de Santa Fe. Si superponemos la curva que estimó el Centro Litoral Regional del INA para una crecida del Río Salado de 100 años de recurrencia (una crecida que cada año tiene la posibilidad de ser superada del 1%), con la imagen del 1 de mayo de la ciudad de Santa Fe, uno encontraría que los niveles estimados son prácticamente idénticos a que lo que vemos en la imagen del 1ero de mayo como área afectada por la inundación. Por lo que el concepto de que el área naturalmente es susceptible de inundaciones tiene que quedar bien presente. A la situación relatada de excesivas lluvias, del fenómeno del cambio climático, la condición de la ubicación geográfica de la ciudad de Santa Fe, hay que sumarle las causas antrópicas. Antrópicas: Claramente un primer efecto es el producido por el manejo de las tierras en la cuenca, los cambios de los usos de la tierra en la cuenca generaron mayores escorrentías, a su vez reconozcamos que el desarrollo urbano en la ciudad hace uso de las zonas inundables, en algunos casos por simple aproximación al río durante las épocas, anteriores al 70, donde el río no crecía ni ocupaba el valle y entonces las personas se fueron asentando sobre el valle pensando que el río no volvería a ocuparlo. También hay motivos económicos, el cordón oeste de la ciudad de Santa Fe es un sector de bajo valor inmobiliario, y por eso el gran asentamiento de personas. Una vez que las personas se arraigaron a un lugar es muy difícil relocalizarlas, además para ello se requiere de recursos económicos y hay otros factores afectivos y de identificación con el lugar que son difíciles de modificar. La gente ya estaba asentada en el lugar en el momento de la inundación y como en todo asentamiento humano hay obras de infraestructura para el desarrollo de la ciudad. Una discusión grande se centra en el papel que desempeñaron estas obras. La obra que aparece como el "malo de la película" es el puente de la Autopista Santa Fe - Rosario, este puente tiene 155 metros de luz, es decir una luz del 8% del ancho total del valle de inundación del río Salado, en un Río que en crecida lleva por su valle de inundación el 80% de su caudal , haberle restringido el ancho total a solo el 8% de su ancho total parece algo totalmente hecho fuera de un pensamiento lógico. La consecuencia es que el puente actúa como un terraplén que evita el escurrimiento y produce un efecto de embalse, que sobreeleva el nivel aguas arriba del puente, lo que produjo que se exija más a los terraplenes laterales. Los terraplenes laterales se construyeron para proteger el oeste de la ciudad de Santa Fe. Estos están construidos en varios tramos. El tramo 1 va desde el Puente Carretero hasta la Autopista, este terraplén va paralelo a la avenida Circunvalación oeste. El tramo 2 va desde la Autopista hasta la zona del Hipódromo. En fotografías aéreas del momento de la inundación se ve que el terraplén no fue sobrepasado por el agua en ningún momento, pero se ve que hay agua en el lado del río tanto como dentro de la ciudad. Lo que sucedió fue que el terraplén finalizó en el Tramo 2 en forma provisoria en el límite sur de la calle Gorostiaga y quedó pendiente de ejecución el Tramo 3, el que tiene un ante proyecto desde el año 2001. El Tramo 3 debería empalmar en la zona de la calle Gorostiaga con el Tramo 2 y debería desarrollarse hacia el norte en una extensión aproximada de 20km hasta llegar al norte de la localidad de Recreo. De esos 20km se hizo solamente un tramo de 2700 metros que necesitaba un terraplén de las mismas características que el terraplén construido en los tramos 1 y 2. Ese sector no se construyó y fue el punto por donde el agua ingreso a la ciudad. El agua ingresó localizadamente, hubo versiones producto de la confusión de que el agua había desbordado los terraplenes. Pero estos no fueron desbordados, el nivel máximo que alcanzó el agua en la zona del Hipódromo fue del orden de 16,8 - 17 metros aproximadamente y la altura de los terraplenes es de 17,5 metros. Por lo que esto s estuvieron de medio metro a 80cm por encima del nivel máximo del agua. Con lo cual, el agua ingresó localizadamente por un punto , la conclusión objetivamente aceptada es que en esta oportunidad para esta crecida, no para cualquier otra circunstancia, si hubiera estado completado el tramo 3 de los terraplenes, el agua no hubiese ingresado a la ciudad. El agua ingresa por la zona del Hipódromo y ahora los terraplenes, que se supone que son para proteger a la gente se convierten en una trampa porque el agua entra y no tiene forma de salir, el agua comienza a almacenarse del lado de la ciudad. Por esta situación llegó a haber del lado de la ciudad 2 metros más de agua que del lado del río. Esta fue la situación por la cual la magnitud de la inundación fue tan grande en el ejido urbano y también explica en parte la violencia del agua. En el momento del pico de la crecida tenía velocidades del orden de 3 metros por segundo entrando por un ancho de 100 - 120 metros. Se formó una especie de río paralelo al Salado que ingresaba violentamente a la ciudad por la zona del Hipódromo. Acciones tomadas para extraer el agua de la ciudad El 1 de Mayo había que evacuar el agua que estaba encerrada dentro de los terraplenes, la solución era romper los terraplenes, se hicieron brechas en los terraplenes y lógicamente ante la rotura de los mismo el agua empezó a escurrirse rápidamente y los niveles descendieron. Pero el agua seguía ingresando por el norte de la ciudad o sea que la otra acción que debíamos emprender era cerrar el ingreso de agua. El día 3 de mayo el gobierno de la ciudad convocó a la Universidad del Litoral a la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas para que se haga un relevamiento de la zona para conocer la profundidad y el ancho de la zona por donde estaba ingresando el agua. Ante la emergencia era bastante difícil cuantificar la magnitud del problema, se hizo igual el relevamiento, con motivo de este se decidió cual era la traza mas adecuada ya que aunque la lógica suponía cerrar justo donde estaba entrando el agua, las altas velocidades y el ancho de 120 metros hacía que no se disponga de rocas tan grandes como para cerrar el paso del agua. Durante el sábado y domingo se hizo un proyecto totalmente expeditivo definiendo cuáles eran los tamaños de piedra adecuados y los sectores donde se debían arrojar los bolsones desde los aviones. El día 4 de mayo se comenzó con la obra que comienza en la calle Gorostiaga y va montada sobre la avenida Circunvalación, en cuatro días con ayuda del río se logró cerrar la brecha por donde ingresaba el agua. Una vez cerrada la entrada de agua, y de haber escurrido todo el agua que se pudo por gravedad con la ruptura de los terraplenes, faltaba, sacar el agua que quedaba en la ciudad por bombeo y esto fue lo que se hizo. ¿Se pudo haber previsto la inundación? La realidad es que no existe en el sistema del Salado un pronóstico a tiempo real, es decir, no hay mediciones cuantitativas que permitan decir: la crecida llegará a tal hora y con tal nivel. Pero sí hubo una advertencia, hecha por el Sistema de Alerta Hidrológico de la Cuenca del Plata, que a través de imágenes satelitales advirtió que había una concentración grande de agua en la cuenca baja del río Salado y evidentemente podía generar crecidas extraordinarias y situaciones extremas en la ciudad de Santa Fe. A su vez había signos que podrían haber sido tenidos en cuenta por sentido común, la ruta 70 había sido desbordada, se destruyó un puente cerca de la localidad de San Justo, había un volumen de agua desplazándose en toda la cuenca baja que claramente no tenía otro destino que no sea la ciudad de Santa Fe. Esas situaciones, elementos cualitativos, pudieron haber sido utilizados como indicadores para adoptar las precauciones que se consideran necesarias. La previsibilidad existió, en términos de lo que el sentido común dice de la excepcionalidad de un fenómeno. ¿La finalización del tramo 3 del terraplén es la solución al problema? Un cosa que creo que es muy importante agregar es que, la idea del común de la sociedad santafesina es que de haber estado construido el tramo 3 del terraplén la catástrofe no hubiera ocurrido y todos viviríamos tranquilos. Pero hay que señalar que desde el punto de vista de la ingeniería, en el caso del Salado y para cualquier otra área inundable donde haya obras construidas, no hay obras infalibles. Cualquier obra puede fallar porque de hecho estas son diseñadas con una cierta probabilidad de excedencia, siempre puede presentarse un fenómeno que la supere, y aunque no se presente ese fenómeno, también puede haber fallas o deterioro por falta de mantenimiento. Por esto es que la sociedad debe tener herramientas para poder actuar cuando el fenómeno ocurre, estas herramientas son justamente las medidas no estructurales, como el alerta a través de una red meteorológica, las regulaciones y los planes de contingencia. La reflexión final es que cuando uno analiza una situación conflictiva como esta, busca causas concretas y coyunturales para definir cuál realmente fue el problema. Lo que señalamos es que el Río Salado en realidad es un emergente, es la cara visible en una coyuntura que en general es la realidad del país, la falta de datos no es una exclusividad del Río Salado, la inexistencia de programas de monitoreo tampoco, que no se finalicen las obras no solo ocurre en este río, cuando uno hace el listado de nuestras deficiencias como sociedad organizada; la conclusión a la que llegamos es que lo que está faltando es una definición adecuada de los esquemas de prioridades, lo que llamamos comúnmente políticas. Si nosotros establecemos políticas de estado, le asignamos los recursos que se necesitan y a su vez, sostenemos los recursos en el tiempo para que se puedan cumplir no solamente las medidas del momento, para que no solo se pueda reconstruir una determinada obra una vez que falló sino para que a su vez a esa obra se le pueda evaluar su comportamiento en el tiempo. Nosotros siempre decimos que a diferencia de otras ramas de la ingeniería, la ingeniería de los ríos trabaja con un elemento vivo que es justamente el río y por lo tanto uno no puede inaugurar una obra y pensar que el río va a soportar esa obra indefinidamente, es seguro que el río va a reaccionar ante ese condicionante. Lo que se debe hacer es una vez terminada la obra realizar un seguimiento de la misma para poder evaluar como está cambiando el río y acompañarlo, eso solo se puede hacer con una política que a lo largo del tiempo asigne los recursos eficientemente. La lección última es que si la catástrofe ya ocurrió, aprendamos de los errores para que de aquí en más todo lo que se haga no sea un reedición de todo lo que se hizo, para que dentro de 10 a 20 años estemos sufriendo una catástrofe nuevamente. Este cambio tiene que ser un cambio estructural de todo el espectro, tanto de las autoridades de aplicación, como del conjunto de la sociedad. Más allá de todo el compromiso que la universidad ha tenido como protagonista de la sociedad santafesina, creo que la universidad tiene que trabajar en todo este proceso de cambio revalorizando sus misiones institucionales, formando profesionales comprometidos socialmente, haciendo más y mejor investigación para que sea utilizada en este cambio cultural. El principio de organización, donde cada actor de la sociedad cumpla con sus tareas correctamente, es lo único que nos va a permitir salir adelante.