UNIDAD 5 Zootecnia de Caprinos. Andrés E. Ducoing Watty 5.1 Antecedentes de la caprinocultura en México. La cabra ha sido deificada por diversas culturas a lo largo de la historia, entre otras la griega, en cuya mitología se habla de una cabra llamada Amaltea que amamantó a Zeus (Júpiter), el padre de los dioses. Asimismo existían otros personajes mitológicos denominados sátiros, que eran individuos con el cuerpo de la cabra y la cabeza y tronco de humano. Por otro lado, es importante mencionar que en la Biblia, esta especie animal es citada con frecuencia junto con el ovino. Sin embargo, a pesar de la importancia que tuvo la cabra en la antigüedad, su popularidad empezó a disminuir en el hemisferio occidental a partir de la edad media, ya que debido a interpretaciones inadecuadas de la Biblia este animal empezó a ser relacionado con el pecado y el mal, atribuyéndole como consecuencia poderes malignos. En el transcurso de la historia de la humanidad, el ganado caprino, a pesar del papel tan importante que ha ocupado en el desarrollo de las civilizaciones humanas, ha sido en términos generales, relegado y destinado a ocupar las zonas áridas y semiáridas con baja capacidad desde el punto de vista vegetativo del mundo, llevándose a cabo su aprovechamiento bajo condiciones de tipo extensivo fundamentalmente. Por tal razón, esta especie ha desarrollado gran capacidad de supervivencia y selectividad alimenticia ante el aporte vegetativo que se le ofrece, siendo culpada por ello, del deterioro ecológico que se produce debido al pastoreo irracional que se lleva a cabo en tales regiones, en sistemas que muchas veces incluyen las otras dos especies de rumiantes domésticos (bovinos y ovinos). Actualmente, gracias a la profundización en el estudio de las características de esta especie, se ha puesto a discusión su papel como erosionador de terrenos y se ha planteado por muchas personas que el depredador real es el ser humano, quien por una actitud irracional, sitúa al caprino en zonas donde no se pueden desarrollar otras especies de herbívoros, y éste gracias a su gran rusticidad, sobrevive en tales lugares consumiendo el escaso componente vegetal que existe en ellos. La caprinocultura a nivel mundial se ha desarrollado paralelamente a la historia de la humanidad y actualmente existen más de 450 millones de cabras en el planeta. La población caprina se distribuye prácticamente en todo el mundo y bajo una gran variedad de condiciones agroecológicas, sin embargo, la mayor proporción de caprinos se encuentra a lo largo de una franja comprendida entre los Trópicos de Cáncer y Capricornio, en donde confluyen por un lado, la mayor parte de las zonas áridas y semiáridas del planeta, y por otro, gran cantidad de países subdesarrollados, quienes coincidentemente poseen el mayor número de cabras a nivel mundial (China, India, Pakistán, Nigeria y Turquía). En estos países, los niveles de producción de los caprinos son muy bajos en comparación con los países desarrollados, como Francia, España y Estados Unidos de Norteamérica, quienes a pesar de tener poblaciones caprinas comparativamente bajas, han logrado altos niveles de productividad en la especie. México se ubica en el décimo tercer lugar dentro de los países con mayor población caprina, compitiendo únicamente con Brasil en el continente Americano y con una población de alrededor de 9 millones de cabezas. El aprovechamiento del ganado caprino en México tuvo su origen a partir de la colonia. Fue mediante inmigraciones colonizadoras españolas que llegaron las primeras cabras al país. Sin embargo, se cree que no fue del todo intencional que esta especie llegara al continente americano, ya que su papel en las travesías era el de proporcionar alimento a los tripulantes de las naves. Como es bien sabido, México con aproximadamente un 45% de superficie territorial que puede ser aprovechada por la ganadería herbívora, y que corresponde a las regiones del país donde se desarrollan los sistemas extensivos para tales especies animales. Bajo estas condiciones se da el aprovechamiento de entre el 90 y 95% del ganado caprino nacional. A pesar de la poca representatividad a nivel global dentro de la ganadería, la cabra ocupa un lugar prominente en ella, como lo indica su alta tasa de extracción (porcentaje de animales sacrificados por año en relación a la población nacional), de cerca del 30%. En cuanto a producción de leche, los caprinos generan alrededor de 150 millones de litros al año, lo que implica un aporte por cabeza de aproximadamente 17 litros en el mismo período. Todo esto indica que en México existe una caprinocultura tendiente a la tecnificación y a la obtención de mejores rendimientos productivos, tanto con fines de autoconsumo como también con propósitos comerciales La producción caprina nacional se ha visto afectada por una serie de barreras que han impedido su crecimiento y le han provocado mantenerse en una posición estática y con niveles importantes de rezago. Entre las principales causas de la anterior situación se encuentran las siguientes: 1) Las características propias que ha adquirido la cabra debido a de su implantación en zonas difíciles desde el punto de vista ambiental, 2) A la obsesiva necesidad de adquirir a toda costa modelos tecnológicos extranjeros relacionados con la producción con esta especie, que disminuyen el uso de mano de obra (no necesariamente requerido en México), crean dependencia al ser de importación y en ocasiones, al ser implantados con algunas adaptaciones locales, han conducido a los más desastrosos fracasos, 3) El uso irracional de agostaderos, que conduce al sobre pastoreo, erosión y deterioro ecológico, 4) El éxodo de las áreas rurales por falta de condiciones mínimas de subsistencia en el campo mexicano, 5) El escaso o nulo financiamiento para esta actividad dentro del subsector pecuario, 6) La carencia de personal capacitado técnicamente en el estudio, investigación; y extensión del conocimiento en el área, 7) La falta de organización de los productores. 5.2 Importancia de los productos y derivados de los caprinos. La carne de origen caprino. México ocupó en 2003 el décimo octavo lugar en cuanto al número de cabezas caprinas sacrificadas, con un total de 2.56 millones de animales, las cuales representan el 0.75% del total mundial. En cuanto a la producción de carne en canal, México ocupa el décimo primer lugar a nivel mundial, produciendo en el mismo año un total de 42,000 toneladas métricas y contribuyendo con el 1.02% del total mundial. Producción e importación de carne de cabra en canal en México 50,000 45,000 40,000 35,000 TM 30,000 25,000 20,000 15,000 10,000 5,000 0 1990 1991 Nacional 1992 1993 Importación 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004* año SAGARPA, 2005. En el año 2002, en los Estados de Puebla y Oaxaca, como representantes de la zona caprícola sur del país y por otro lado en Coahuila y San Luis Potosí como representantes de la zona centro y norte de México, se observaron los mayores volúmenes de producción, representando entre ellos más del 40% del total nacional. La inmensa mayoría de la carne caprina se obtiene a partir de poblaciones que se desarrollan bajo condiciones extensivas, con la consecuente degradación de los agostaderos naturales ante las condiciones de pastoreo irracional. La especie caprina ha mostrado tradicionalmente algunas ventajas relacionadas a su utilización como generadora de carne. Dentro de ellas se encuentra su gran capacidad para sobrevivir y producir en zonas difíciles, el hecho de que su producción se combina bien con otras actividades agrícolas, su facilidad de manejo y alta rentabilidad bajo condiciones de pastoreo extensivo, así como la posibilidad de su contribución al reestablecimiento del equilibrio ecológico de las áreas de pastoreo destinadas a la obtención de carne con esta especie animal. Los principales destinos a los que se dirige la carne caprina Mexicana están relacionados a su consumo como platillos elaborados, siendo relativamente escaso su mercadeo como cortes de anaquel para cocinar. Los platillos elaborados con carne de cabra y que son más frecuentemente encontrados en México son los siguientes: - Cabrito: cocinado en diversas formas, desde la más tradicional que es elaborarlo al pastor, pero también al horno y en diversos guisados, dependiendo de la región del país. Probablemente sea este destino en el que la carne caprina alcanza los mayores valores en el mercado. - Barbacoa: Este destino de la carne de caprino no es ampliamente conocido ni muchas veces aceptado por el público consumidor. En algunas zonas del país es comúnmente empleada la carne del caprino sola o combinada con carne de ovino, para la elaboración de este platillo. La carne empleada para esta finalidad es generalmente la de animales adultos y aquéllos considerados como desecho dentro de los rebaños. - Birria: Platillo de gran tradición en la zona centro-occidental de México y que originalmente es elaborado en base a animales en su etapa postdestete y adultos. - Chito y mole de caderas: a partir del proceso de producción caprina en la zona caprícola sur del país se genera el producto denominado chito, que corresponde a tiras de carne de cabra secadas al sol y salada. Asimismo, a partir de la denominada “matanza de Tehuacan” se elabora en dicha zona el platillo llamado mole de cadera, que forma parte de las tradiciones de dicha zona. - Machitos: Principalmente como parte del proceso de elaboración del cabrito, pero también de la barbacoa y de la birria, se elabora este platillo a partir de vísceras. Es comúnmente encontrado en las zonas centro, occidental y norte de México. Además de las formas antes mencionadas en que se consume la carne del caprino en nuestro país, es importante mencionar que a nivel regional se elaboran gran variedad de platillos en los que participa este producto y que forman parte de las tradiciones culinarias existentes en México. El caprino deposita alrededor del 45% de su grasa en el peritoneo, mientras que el bovino y el ovino lo hacen con únicamente el 25%. Por tal razón, el contenido de grasa de la canal caprina es entre 47 y 54% menor que el de las canales de ovinos y bovinos. La carne de la especie caprina se caracteriza por ser comparativamente magra y por lo tanto baja en colesterol y con mayor digestibilidad. La leche caprina. La producción de leche caprina en el año 2004 fue de 148 millones de litros, contribuyendo en una forma muy modesta a la oferta nacional de este producto, con únicamente el 1.5% para el año 2001 y representando el autoconsumo el destino principal en muchas regiones caprícolas nacionales. En regiones como el Bajío y la Comarca Lagunera, esta actividad ha logrado niveles intermedios y altos en relación a su tecnificación, incrementándose con ello sus niveles de productividad. Los principales Estados productores de leche son Coahuila, Durango y Guanajuato, contribuyendo con más del 70% de la oferta nacional. La cadena productiva de la leche caprina cuenta con numerosos eslabones entre los proveedores de insumos y el consumidor final. Los eslabones que presentan más limitaciones se encuentran entre el productor y el consumidor final debido –al igual que en el caso de la carne- a la fuerte carga de intermediarismo existente entre ellos. La leche producida con propósitos comerciales se destina casi exclusivamente a la producción de queso y dulces como la cajeta La producción de leche mostró crecimiento promedio de 3.7% entre 1999 y 2004. Así mismo, se percibe un incremento en la demanda de pie de cría (vientres) derivada de una mayor necesidad de leche y de las evidencias positivas en relación a la productividad biológica del caprino para este objetivo. En el año 2003 México ocupó el sexto lugar a nivel mundial en producción de queso de origen caprino con una producción de más de 14,000 TM, representando el 3.3% de la producción mundial. Producción nacional de leche de cabra 5.3 Sistemas de producción. Las principales zonas en que se desarrolla la producción con caprinos en nuestro país son las siguientes: - Zona occidental: Comprende principalmente los estados de Sinaloa y Baja California Sur, en donde se encuentra aproximadamente el 8% de la población caprina nacional. - - Zona norte: comprende las estepas desérticas de los estados de Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Durango, Zacatecas y San Luis Potosí, con cerca de la mitad de la población caprina nacional. Zona centro: conformada básicamente por la región denominada bajío Mexicano y en la que se encuentra aproximadamente el 10% de la población caprina del país. Zona sur: abarca las regiones montañosas y de sabanas arbustivas de los Estados De Oaxaca, Puebla, Guerrero e Hidalgo con aproximadamente el 28% de la población caprina de México. Sistemas de producción. La caprinocultura mexicana se ha diversificado con diferentes matices de acuerdo a varios factores como son las condiciones ecológicas, la calidad genética del ganado, los objetivos de producción, las necesidades nutricionales de los animales, etc. De este modo, en nuestro país se pueden identificar los siguientes sistemas de producción: A) Sistemas extensivos: Se caracterizan por hacer uso de grandes extensiones de tierra que por lo general poseen baja cantidad de biomasa vegetal y sobre las cuales los animales pacen. Se observa por lo general en ellos poca inversión de capital en animales y poca o nula en instalaciones. Se caracterizan por el uso, en la mayor parte de los casos, de mano de obra familiar y por el aprovechamiento de grupos genéticos caprinos muy heterogéneos. Son sistemas que comúnmente se encuentran muy relacionados a estratos poblacionales rurales con altos niveles de marginación y de escasos recursos. Por tales razones, la demanda de asesoría técnica hacia el Médico Veterinario tiende a ser baja a nivel de productores individuales. Las prácticas de manejo tendientes a mejorar la eficiencia productiva se realizan en muy baja escala. Sin embargo lo actuales programas de promoción de la producción caprina contemplan dentro de sus apoyos a la asesoría técnica, por lo que hoy en día se requieren Médicos Veterinarios capacitados específicamente en la producción con caprinos con el objeto de atender la demanda que se presenta para atender los modelos organizativos de productores en estos sistemas. Estos sistemas de producción se pueden clasificar a su vez en tres grandes subgrupos: A.1) Sistema extensivo trashumante. Su desarrollo se remonta hasta prácticamente los principios de la época colonial en lo que ahora es México. Poco se sabe acerca de las causas que lo generaron y las evidencias de su existencia se registran hacia mediados del siglo XIX. Este sistema se ha desarrollado en la zona sur del país, fundamentalmente en lo que ahora son los Estados de Oaxaca, Guerrero, Puebla y Michoacán. Se manifiesta como un proceso de pastoreo itinerante a lo largo de pastizales que eran alquilados expresamente para que las cabras se alimentaran. Estos animales se movían a al inicio de la primavera desde las laderas sur de la Sierra Madre del Sur, continuando su andar en la persecución de los mejores pastizales hasta llegar los meses de Octubre y Noviembre, en los que eran llevados a cascos de haciendas en las ciudades de Huajuapan de León, Oaxaca y Tehuacan, Puebla. En dichos lugares los animales eran y son en la actualidad sacrificados, para ser su carne comercializada principalmente como carne seca salada (chito), que representa al objetivo de producción de estos sistemas. Los dueños de las cabras durante la historia de este sistema de producción han sido órdenes religiosas y posteriormente acaudalados políticos y empresarios de los Estados de Oaxaca y . . Puebla. Narran los registros que hubo propietarios de rebaños de hasta 600 mil cabezas de ganado caprino, pastando en diferentes regiones de los Estados antes mencionados. Este sistema se ve afectado fuertemente en la época revolucionaria, a consecuencia de la redistribución de la tierra, sin embargo, todavía en la actualidad se realizan las matanzas de Tehuacan y Huajuapan de León en fechas cercanas al día de muertos. El sistema se caracteriza por carecer de superficies de pastoreo propias y por lo mismo, las instalaciones existentes son las mínimas necesarias para proteger y eventualmente abrevar animales. La mano de obra es contratada y de hecho, en sus inicios, las comunidades que se dedicaban a pastorear estos rebaños eran consideradas como de “raza pastora” y tenían un dilecto “pastor”, manteniéndose también relativamente asilados de las comunidades sedentarias de las tierras donde se desarrollaba este sistema de producción. Se estima que los caprinos que se encuentran en estos sistemas de producción tienen como ancestros a cabras de la raza Blanca Celtibérica principalmente y que fueron traídos por los españoles durante la colonia. Dichos animales han desarrollado una gran capacidad de adaptación a condiciones muy difíciles. Al igual que en otras regiones de México, estos animales son culpados por el grado de desgaste de las praderas donde han pastado y, en algunos casos se ha promovido su eliminación. A.2) Sistema extensivo a libre pastoreo. Se caracteriza por presentarse asociado principalmente a zonas agrícolas de cultivos de temporal y en algunos casos a zonas de riego. En la mayor parte de los casos los animales pastan a los lados de las carreteras, caminos, vías de ferrocarril, canales de riego, etc. Este sistema se observa prácticamente en todo el país y en él las cabras representan un complemento al ingreso del campesino, en base a la utilización de recursos vegetales que no son empleados para otros fines. Se podría decir que este sistema de producción con caprinos equivale al sistema de traspatio en el caso de cerdos y aves. En este sistema se pueden encontrar por lo general rebaños pequeños (entre 5 y 20 cabras), que conviven con otras especies domésticas y asociados comúnmente con productores rurales de bajos recursos. Es común observar que estos rebaños son pastoreados por niños, mujeres o ancianos. Las cabras generalmente son producto del cruzamiento de diversos grupos genéticos (mestizas), por lo que muestran gran heterogeneidad en sus características de tipo, conformación y producción, estando bien adaptadas a las condiciones de manejo pero no muestran especialización hacia un propósito productivo. Estos animales sobreviven y producen en base a lo que pueden obtener de alimento mediante el pastoreo, recibiendo en ocasiones alguna complementación alimenticia en épocas de escasez de forrajes. Los productores realizan muy pocas prácticas de manejo sobre estos animales y los consideran un medio de ahorro para aumentar su capacidad de respuesta ante contingencias económicas, festejos, etc. Las cabras bajo este sistema se dedican fundamentalmente a la producción de carne y en algunas situaciones se ordeñan para consumir la leche o derivados de ella a nivel familiar o comercializarla localmente. A.3) Sistema extensivo sedentario controlado. Su origen es colonial y estuvo relacionado a predios manejados por la iglesia católica y por grandes compañías mineras con el objeto de suplir las necesidades alimenticias de sus empleados. Los animales son manejados de manera más controlada y pernoctan en un lugar fijo. El tipo de ganado que se observa varía grandemente en cuanto a sus características de tipo, conformación y producción, ya que se pueden encontrar desde cabras criollas hasta algunos grupos genéticos como el Murciano-Granadino o el Anglo-Nubio, así como animales producto de hibridaciones. Comúnmente se encuentran rebaños desde 40 hasta 300 caprinos Generalmente la producción con caprinos en este sistema representa la principal actividad para el productor, por lo que éste realiza algunas prácticas de manejo relacionadas con la reproducción, separación por edades, complementación alimenticia en épocas difíciles, inmunizaciones y desparasitaciones entre otras. Su principal objetivo es la producción de carne y en segundo término la leche que generalmente se emplea para consumo familiar o con fines de comercialización de manera local. Este sistema se presenta con mayor frecuencia en las zonas centro y norte del país. A.4) Sistema intermedio o mixto. Se caracteriza por presentarse con una gran variación en cuanto a sus propiedades dependiendo del nivel de intensificación en el uso de las superficies de tierra disponibles y en las particularidades de su manejo. Este sistema se observa con mayor frecuencia en las regiones del bajío y comarca lagunera. En él los animales reciben su alimentación en base a una combinación de pastoreo y complementación alimenticia en pesebre. El objetivo de producción es la leche que generalmente se transforma a algún derivado con el objeto de incrementar su valor agregado, que junto con el uso de grupos genéticos caprinos especializados en producción de leche, mejoran la eficiencia productiva del sistema. A.5) Sistema intensivo. Se caracteriza porque en él las cabras se encuentran en estabulación total y su objetivo es la producción de leche. Generalmente manejan tamaños de rebaño de entre 100 y 500 animales. La calidad genética del ganado por lo general es alta y especializada en producción de leche. Se presentan altos costos de producción influenciados fuertemente por el concepto de alimentación. Al igual que los sistemas intermedios, los sistemas intensivos se concentran en la zona centro y norte de México. 5.4 Modelos de instalaciones. Se llama instalaciones a aquellos elementos estructurales de los sistemas de producción que se han desarrollado para facilitar el manejo general de los animales, sus productos y los insumos requeridos para la producción. Consideraciones generales que se deben contemplar en instalaciones caprinas: a) Sistema y objetivo(s de producción. c) Aspectos ecológicos y climatológicos. e) Necesidades de los animales. f) Ventajas o limitaciones del lugar para el mercado de los productos. El diseño general de las instalaciones para caprinos se maneja principalmente bajo dos esquemas que son el rectangular y el circular o en abanico. Disposición general de las instalaciones caprinas. Diseño rectangular Diseño en abanico Alojamientos Alojamientos Áreas de manejo y administrativas Áreas de manejo y administrativas Existen aspectos particulares que deben tomarse en cuenta, como lo son el número de animales en su máxima capacidad, las etapas fisiológico-productivas en que se esperan encontrar en el sistema y su distribución temporal. Por otro lado es de suma importancia considerar las características de movimiento que se espera observar dentro de las instalaciones, tanto de humanos como de los animales. La disposición de los accesos y zonas para alimentación en las instalaciones de tipo intensivo pueden ser en general de tres diferentes tipos, relacionados con la forma en que se combinan tales elementos de las instalaciones. De este modo se puede observar una disposición con pasillo de alimentación al centro y pasillos de manejo en las partes externas. Un segundo diseño es el de pasillo de alimentación lateral o externo y el pasillo de manejo en la parte interna o central. La tercera opción consiste en utilizar el pasillo tanto para manejo como alimentación de los animales. Disposición de pasillos en las instalaciones …disposición de pasillos en las instalaciones Pasillo de manejo Pasillo de alimentación Pasillo de alimentación Pasillo de manejo Pasillo de manejo Pasillo de alimentación …disposición de pasillos en las instalaciones Pasillo de alimentación y manejo El diseño de un alojamiento para cabras en un sistema de producción intensivo debe darse en función de los requerimientos de las cabras y no de los nuestros. Tales requerimientos se incluyen dentro de varias categorías: 1) El bienestar de los animales 2) Diseño funcional para aprovechando al máximo los recursos de la zona y así optimizar la productividad sin disminuir la comodidad. 3) Establecimiento de un equilibrio entre el costo por concepto de instalaciones y equipo de acuerdo con la producción que se desea obtener, de manera que conduzca a rentabilidad de la empresa. 4) Adecuada integración al entorno ecológico. 5) Acceso a los insumos, medios de comunicación, mano de obra y mercado. Elementos del alojamiento para caprinos Pasillo Comedero Espacio vital Sombra (dentro de espacio vital) Fuente de agua Saladero Acceso Los diseños de instalaciones para caprinos, en particular aquéllos encontrados en sistemas de producción en estabulación total, se caracterizan por una gran variedad de formas, dimensiones y peculiaridades de diseño. Sin embargo, todos deben cubrir los requisitos mínimos indispensables en términos de espacio vital para los animales y de funcionalidad, con el objeto de constituirse en un elemento de eficiencia de las empresas. 5.5 Grupos genéticos y sus características. De acuerdo al criterio morfológico de clasificación caprina establecido por I.J. Mason, existen en el mundo 60 razas caprinas y 211 variedades de propósitos productivos múltiples. Entre las razas caprinas existentes en el mundo, es importante considerar algunas que, por diversas razones, forman parte del material genético que habita y produce en nuestro país. A) Alpina Francesa. Raza originaria de Francia y su mejoramiento genético se ha encaminado en forma intensa hacia la producción de leche. Los caprinos pertenecientes a esta raza son alertas, rústicos, agresivos y adaptables, por lo que sobreviven bajo diversas condiciones, manteniendo salud y producción adecuadas. Es una raza de talla mediana a grande, con perfil facial recto y orejas erectas y de tamaño mediano. Muestran varios patrones de color que reciben nombres específicos. B) Anglo Nubia. Raza originada en Inglaterra como producto del cruzamiento de cabras criollas inglesas con la raza Jamnapari (Hindú) y Zaraibi (Africana). Las cabras pertenecientes a esta raza son amigables, dóciles y tímidas. Por su origen tropical, se adaptan fácilmente a las condiciones climáticas de México. Es una raza esencialmente de doble propósito, leche y carne, sin embargo a través de algunos años se han desarrollado líneas genéticas con tendencia hacia producción de carne y leche en forma independiente. El contenido de grasa en su leche es el más alto dentro de las razas lecheras. Su talla es de mediana a grande y tienen como características distintivas su perfil facial convexo desde la frente hasta el morro (nariz romana) y sus orejas largas. Su pelaje es corto y brillante, pudiendo presentar cualquier color ya sea sólido o combinado. C) Saanen. Raza originaria de Suiza y especializada en la producción de leche. Es de talla grande, sin embargo las hembras deben ser femeninas y no toscas. Posee huesos anchos y fuertes y conformación lechera. Es una raza pesada por lo que posee poca resistencia al pastoreo y en consecuencia no es adecuada para sistemas en las que éste se lleve a cabo. Su perfil facial es recto o cóncavo, sus orejas son erectas y de mediano tamaño. Su pelo es corto y fino excepto en el dorso y en la parte posterior del muslo. El color de la capa de pelo es blanco o crema claro. D) La Mancha. Raza originaria de los Estados Unidos de Norteamérica, producto de la mezcla de cabras españolas de la zona de la Mancha con razas lecheras europeas y se ha especializado en la producción de leche con un buen contenido de grasa. Su perfil es recto y puede tener capa de cualquier color. Esta raza se caracteriza por carecer prácticamente pabellón auricular. E) Toggenburg. Originaria de Suiza. Es de talla mediana a grande y especializada en producción de leche principalmente en sistemas intensivos, aunque logra adaptarse a sistemas con pastoreo parcial. Tiene perfil facial recto. Su pelo es corto, suave y fino. Su capa es de color café sólido que puede variar en tono y presenta zonas blancas en orejas, vientre, base de la cola y partes bajas miembros anteriores y posteriores. G) Murciana - Granadina. Grupo genético de origen español, que en un principio se consideraba como dos diferentes grupos raciales, la Murciana y la Granadina. Es de talla mediana, huesos delgados, siendo muy rústica y adaptable a diversas condiciones. Es de doble propósito. Su capa puede ser de color negro sólido (90 %) o caoba sólido (10 %). Su perfil facial puede ser recto o cóncavo y sus orejas son cortas y erectas. H) Angora. Raza originaria de Turquía, de talla pequeña a mediana. Está especializada en la producción de pelo (mohair). Su perfil facial es recto o ligeramente cóncavo. Sus orejas son de talla media y ligeramente pendulosas. Se adapta bien a climas secos y calurosos. Su pelo es largo, rizado, sedoso, fino y suave. Su capa es de color blanco o plateado sólido. I) Boer. Originaria de Sudáfrica y de talla grande. Es la única raza caprina especializada en producción de carne. Tiene perfil facial convexo con orejas largas, anchas y pendulosas. Debido a que es una raza especializada, su carne es de muy buena calidad. Por su origen, se adapta bien a climas calurosos y de trópico seco. Su pelaje es de color blanco, presentando manchas color rojo en cara y orejas de manera irregular. 5.7 Perspectivas profesionales para el Médico veterinario Zootecnista en el área de caprinos. Actualmente la producción caprina se encuentra en una fase de crecimiento relacionada principalmente a la producción de leche y derivados lácteos. Dicha situación se debe principalmente a la enorme demanda que se ha generado en los últimos treinta años en relación al consumo de quesos de formato pequeño que alcanzan altos valores en el mercado y que se han relacionado de una manera importante con la alta cocina mexicana e internacional. Lo anterior, junto con la demostrada eficiencia biológica y bioeconómica de la cabra especializada en producción de leche, ha hecho que los sistemas de producción dedicados a este objetivo y a su transformación a quesos, dulces y cosméticos de origen caprino represente hoy en día un gran atractivo para los emprendedores de negocios agropecuarios. Del mismo modo, la producción de carne se presenta actualmente como una actividad con gran potencial de desarrollo a pesar de las serias limitaciones que en producción y comercialización presenta. La oferta de productos de origen caprino se enfrenta en la actualidad a problemas relacionados con la consistencia y regularidad cuantitativa y cualitativa, ante una demanda cada vez más grande por parte tanto de mercados especializados como de la población en general. Todo lo anterior abre un impresionante potencial de demanda para todos aquellos técnicos y profesionistas capaces de resolver los problemas de producción y sanidad animal en caprinos, como aquéllos relacionados a la calidad e inocuidad de los productos que se obtienen a partir de esta especie animal. Se prevé que la demanda de servicios para los Médicos Veterinarios Zootecnistas en el área de producción con caprinos se incrementará a corto, mediano y largo plazos, dados las crecientes necesidades de apoyo y asesoría por parte de productores existentes y nuevos empresarios que ven en esta especie un elemento financieramente eficiente y para el incremento de su calidad de vida. Literatura recomendada. AZTECA, Memorias del I Congreso Nacional, FIRA, 1984. Ducoing W., A. Situación de la caprinocultura en México. Memorias del Curso Avances sobre la alimentación de la cabra lechera. AMENA, Querétaro. 2005. Devendra, C,& Burns, M. Goat Production in the Tropics, C. A. H: 3rd Edition, 1978. French, W. Observaciones sobre las cabras, FAO, Roma.1970. Gall, C, Goat Production. Academic Press.1981. Hetherington L. All about goats. Second Edition. Farming Press Ltd.1979 Mackenzie, D. Goat Husbandry. First American Edition Transatlantic. Arts Inc. 1975. Moreau, V et Toussaint, G. (ITOVIC) Logement des caprines: Les règles de l´art. La Chèvre No. 175 pp. 18-24. 1991 Moreau, V et Toussaint, G. (ITOVIC) Toit de bois: La couverture confort. La Chèvre No. 175 pp. 25. 1991 Smith, M. and Sherman, D. Goat Medicine. Lippincott Williams & Wilkins. Baltimore, 1994.