PARQUES Y JARDINES DE PAMPLONA. Poblado de frondoso arbolado, goza de una atmósfera plena de romanticismo. Fue englobado pro la fortificación realizada en el siglo XVI y en sus fosos pueden contemplarse varios ejemplares de ciervos. Entre otros monumentos que dignificaban la Taconera caben señalar el levantado en homenaje al insigne tenor roncalés Julián Gayarre en 1950, obra del arquitecto Víctor Eusa y el escultor Fructuoso Orduna, el Portal de San Nicolás, trasladado a su actual emplazamiento desde donde fuera erigido por el duque de San Germán en 1666 sobre terrenos que hoy ocupa la Avenida de San Ignacio, y la popular “Mari-Blanca”, estatua alegórica de la Beneficiencia. Junto a la Taconera, el Parque de Antoniutti dispone de una pista de patinaje pública; en él se organizan varias verbenas al aire libre durante los Sanfermines. La Vuelta del Castillo y los Fosos de la Ciudadela, muy próximos a los anteriores, abrazan parte de la antigua fortaleza militar. Numerosos pamploneses acuden aquí a sus horas de asueto para pasear, hacer ejercicio, sacar a sus perros o, simplemente, tumbarse en el césped cuando el tiempo lo permite. Parque de la Ciudadela. En el interior de la fortaleza edificada en el siglo XVI, se ha habilitado un espacio sumamente agradable, con cuidados árboles y césped, en el que están prohibidas las bicicletas y los perros, por lo que resulta idóneo para los niños pequeños. Encierra esculturas contemporáneas diseminadas por el recinto y varias salas de exposiciones en los antiguos pabellones militares. Parque de la Media Luna. Como el de la Taconera, bordea el talud sobre el Arga y ofrece una magnifica vista hacia las montañas del Norte. Ambientado con pérgolas y estanques, encierra rincones de ensueño. Cuenta con terraza de bar. En él se encuentra el monumento al violinista Pablo Sarasate, levantado en 1959 según proyecto de Cándido Ayestarán y escultura de Eduardo Carretero. Parque de la Tejería, entre la bajada de Juan de Labrit y el río Arga, permite un agradable paseo al pie de la muralla hasta el puente románico de la Magdalena. Cruzando la carretera y prosiguiendo por la calle Vergel, puede efectuarse un bello itinerario hasta el puente de San Pedro, a donde también puede accederse desde el Casco Viejo, a través del Portal de Zumalacárregui. Desde la calle Vergel se puede optar asimismo por la Vuelta de Aranzadi, bucólica zona de arbolado y huertas donde están enclavadas las piscinas municipales. El ayuntamiento pretende recuperar paulatinamente las riberas del Arga a su paso por la ciudad como nuevas áreas de esparcimiento. Campus Universitario. Forma también una enorme área verde en el plano de la ciudad. Es un espacio sumamente tranquilo, frecuentado principalmente por estudiantes y familias, en el que crece una interesante variedad de especies vegetales. ARTÍCULO TOMADO DE: - (1985): “Pamplona/Iruña” Ayuntamiento de Pamplona.