CATEDRA; aspectos tributarios DOCENTE. Mgs. Suhaila Temponi Moncada . EL CREDITO : Venezuela Ya que en un Post anterior hablamos sobre la adquisición de tarjetas de crédito ahora vamos a hablar sobre otra modalidad de crédito bancario, los prestamos personales; como ya sabemos la tarjeta de crédito no es mas que un instrumento plástico que nos permite acceso a prestamos instantáneos según un limite fijado por la entidad bancaria que otorga el instrumento, sabido esto podríamos definirlo como un préstamo rápido o micro-crédito para cubrir ciertas necesidades monetarias del beneficiario, pero cuando estas cantidades no son suficientes para cubrir nuestros gastos, o para consolidar nuestras aspiraciones debido a la falta de liquidez, entonces tenemos la opción de solicitar un crédito o préstamo bancario por montos superiores, y cuyos requisitos variaran según la suma, y el objetivo del mismo. Empecemos por conocer los tipos de crédito o préstamo que nos ofrecen las entidades bancarias: Tipos de créditos: Crédito tradicional: Préstamo que contempla un pie y un número de cuotas a convenir. Habitualmente estas cuotas incluyen seguros ante cualquier siniestro involuntario. Crédito al consumo: Préstamo a corto o mediano plazo (1 a 4 años) que sirve para adquirir bienes o cubrir pago de servicios. Crédito comercial: Préstamo que se realiza a empresas de indistinto tamaño para la adquisición de bienes, pago de servicios de la empresa o para re-financiar deudas con otras instituciones y proveedores de corto plazo. Crédito hipotecario: Dinero que entrega el banco o financiera para adquirir una propiedad ya construida, un terreno, la construcción de viviendas, oficinas y otros bienes raíces, con la garantía de la hipoteca sobre el bien adquirido o construido; normalmente es pactado para ser pagado en el mediano o largo plazo (8 a 40 años, aunque lo habitual son 20 años). Crédito consolidado: Es un préstamo que reúne todos los otros préstamos que un prestatario tiene en curso, en un único y nuevo crédito. Habitualmente estos préstamos consolidados permiten a quienes los suscriben pagar una cuota periódica inferior a la suma de las cuotas de los préstamos separados, si bien en contra-prestación suele prolongarse el plazo del crédito y/o el tipo de interés a aplicar. Crédito personal: Dinero que entrega el banco o financiera a un individuo , persona física, y no a personas jurídica, para adquirir un bien mueble (entiéndase así por bienes que no sean propiedades/viviendas), el cual puede ser pagado en el mediano o corto plazo (1 a 6 años). Crédito prendario: Dinero que le entrega el banco o entidad financiera a una persona física, y no a personas jurídicas para efectuar la compra de un bien mueble, generalmente el elemento debe de ser aprobado por el banco o entidad financiera , y puesto que este bien mueble a comprar quedara con una prenda, hasta una vez saldada la deuda con la entidad financiera o Bancaria. Crédito rápido: Es un tipo de préstamo que suelen comercializar entidades financieras de capital privado, de baja cuantía y cierta flexibilidad en los plazos de amortización, convirtiéndose en productos atractivos sobre todo en casos de necesidades urgentes de liquidez. Mini Crédito: Préstamo de baja cuantía a devolver en no más de 30 días que conceden las entidades de crédito. Se caracterizan por su solicitud ágil, su aprobación o denegación rápidas y por ser bastante más caros que los préstamos bancarios. Requisitos: Los requisitos necesarios para solicitar un préstamo bancario son definidos según la institución bancaria, pero más o menos todas tienen en común los siguientes requisitos: La planilla de recaudos y solicitud del préstamo deberá estar debidamente llena en todos sus campos y firmada en original por todos los intervinientes (solicitante, cónyuge, fiador). Fotocopia legible de la cédula de identidad de todos los intervinientes. Constancia de trabajo en original (en caso de dependientes) o certificación de ingresos en original (en caso de independientes) del solicitante y de su cónyuge, no superior a tres (3) meses de emitida, donde indique el ingreso mensual, anual, cargo y antigüedad en la empresa. Balance personal en original del solicitante firmado por un contador público colegiado, con vigencia no superior a seis (6) meses. Los tres (3) últimos estados de cuenta de tarjetas de crédito, cuentas corrientes o libretas de ahorro que el solicitante posea en otras instituciones financieras en original o copia certificada, visada y sellada por el banco emisor. Justificación del destino de los fondos: presupuesto, factura o formulario N° NGE.377 de Carta explicativa del destino de los fondos. Referencias bancarias. Fotocopia de la última declaración de ISLR, en caso de ser contribuyente. Detalles de interés: Estos tips pueden ayudarte a agilizar la respuesta del crédito, reducir el margen de error al momento de analizar tu solicitud, y también pueden facilitar la obtención. * Como ya aprendimos con las tarjetas de crédito es importante no mentir ni exagerar al declarar sus ingresos. * Puede ayudar mucho declarar todos tus activos e ingresos a través de un balance personal, si eres comerciante o profesional independiente entonces te serviría llevar el acta constitutiva de tu empresa, y/o tus credenciales profesionales. * Los prestamos de tipo prendario, personal, rápido, y mini-prestamos, no pueden exceder el 30% del ingreso mensual del solicitante (aunque esto puede variar según consideraciones del banco en base a tu historial crediticio, antigüedad, capacidad ahorrativa, antigüedad como cliente, y los activos que poseas). * Tener una tarjeta de crédito e historial de crédito con la misma en el banco solicitante, facilita la obtención. Presentar fiadores también puede ayudarte al momento en el que sea analizada tu solicitud. Aspectos fundamentales considerados por empresas analistas de riesgo al procesar una solicitud de crédito: Historial crediticio del solicitante. Efectos colaterales que pueda tener el otorgamiento del crédito. Capacidad de pago de las personas que soliciten el crédito. Capital para responder al crédito. Condiciones económicas en que se encuentra la persona solicitante.