Universidad Autónoma de Sinaloa Unidad Académica Preparatoria Guasave Diurna “LA OBESIDAD” Materia: Comprensión y Producción de Textos II Maestra: Yolanda Guerrero Zapata Alumna: Guadalupe Heráldez Grado y Grupo: 2-08 Guasave, Sinaloa. Mayo 2012 INTRODUCCIÓN La obesidad se está convirtiendo en uno de los problemas de salud más serios de las nuevas generaciones. La tendencia a la obesidad se manifiesta desde los inicios de la vida, con un incremento en el número de las células grasas desde el primer año de vida. Respecto a la causa principal del incremento en la obesidad infantil es clara, la culpa es de los nuevos hábitos alimenticios y el sedentarismo. Los patrones de alimentación dentro de la familia tiende a asociar el hecho de que las madres sobre alimentan a sus hijos por ignorancia y debido a patrones de educación equivocados, llevándolos rápidamente al sobrepeso. Respecto al sedentarismo las actividades tienen cada vez menos exigencias físicas, y en cuanto al ocio los niños han sustituido las carreras, la bici, el bote pateado y los quemados, por la televisión, el videojuego de moda, etc. OBESIDAD La obesidad es el más común de los trastornos metabólicos en las sociedades actuales; de acuerdo con la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), nuestro país después de Estados Unidos, es el que tiene mayor número de personas con problemas de obesidad, con 24%, mientras que el país vecino del norte se eleva al 31% de la población. La obesidad es una enfermedad caracterizada por la acumulación excesiva de grasa en el tejido adiposo del cuerpo y que, por lo general, la acompaña un incremento de peso. En México tres de cada diez personas tienen sobrepeso u obesidad y sin embargo las mujeres tienen mayor riesgo de desarrollarla. La presencia de sobrepeso u obesidad en ambos sexos es mayor en localidades urbanas que en las rurales. Es la enfermedad en la cual las reservas naturales de energías almacenadas en el tejido adiposo de los humanos y otros mamíferos, se incrementa hasta un punto donde está asociado con ciertas condiciones de salud o incremento en la mortalidad. Es una enfermedad crónica originada por muchas causas y con numerosas complicaciones, la obesidad se caracteriza por el exceso de grasa en el organismo. A una persona se le llama obesa cuando su peso ideal llega acumular más del 10% de su peso ideal, esto ocurre cuando el consumo de calorías excede a la cantidad que él mismo necesita para las actividades físicas y el crecimiento. Es una enfermedad crónica originada por muchas causas y con numerosas complicaciones, se caracteriza por el exceso de grasa en el organismo y se presenta cuando el índice de masa corporal en el adulto es mayor a 25 unidades. La obesidad no distingue color de piel, edad, nivel socioeconómico, sexo o situación geográfica. La obesidad es una amenaza para la vida, es una enfermedad progresiva y crónica de proporciones epidémicas que afecta a todo el mundo. Para la mayoría de las personas el sobrepeso es fácil de reconocer; pero medicamente hay que reconocer entre sobrepeso y obesidad. El índice de masa corporal (IMC) se usa para definir estos dos trastornos. El IMC es el peso (en kilogramos) dividido por la estatura (metros) elevada al cuadrado. El sobrepeso se define como IMC de 25 a 29.9, y la obesidad, como un IMC de 30 o más. Este problema no es reciente, y hoy en día, es considerado una epidemia mundial, esto, debido a la proporción de personas que sufren esta enfermedad en diferentes regiones del mundo. Para poder diagnosticar obesidad, es necesaria una estimación accesible, la cual se maneja en la siguiente tabla8: 1. Bajo peso: 2. Rango normal: <18.5 kg/m2. 18.5 a 24 kg/m2. 3. Clase I (sobrepeso): 25.0 a 29.9 kg/m2. 4. Clase II a (obeso): 30.0 a 34.9 kg/m2. 5. Clase II b (obeso): 35.0 a 39.9 kg/m2. 6. Clase III (obeso): >40.0 kg/m2. Las personas que acumulan grasa en el abdomen reducen entre cuatro y ocho años la edad promedio en la que es probable sufrir el primer ataque al corazón. Por ello, es recomendable, que se mida la cintura constantemente y que ésta, no sea superior a los 88 centímetros entre las mujeres y a los 94 centímetros entre los hombres, ya que al pasar esta medición existe mayor probabilidad de sufrir un ataque cardíaco. GRADOS DE OBESIDAD: Algunos autores han propuesto clasificar a la obesidad en cuatro fenotipos. Tipo I: exceso en la cantidad de grasa corporal total. Tipo II: exceso en la cantidad de grasa subcutánea en el tronco y abdomen. Tipo III: grasa visceral abdominal en cantidad excesiva. Tipo IV: cantidad de grasa glúteo femoral en exceso. El exceso de grasa corporal puede distribuirse de forma desigual en el abdomen, glúteos, muslos, brazos, cara, y no siempre es en la misma proporción, depende también mucho del sexo, ya que en el sexo femenino es donde más se observa la acumulación de grasa en estas partes del cuerpo, además de ser para este sexo, más difícil bajar de peso. La obesidad es considerada una enfermedad por la cual la grasa que debería acumularse en el tejido adiposo se disgrega en distintos órganos del cuerpo como pueden ser las arterias provocando enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial con riesgos de infartos cardíacos además de la hipercolesterolemia. Se presume que uno de los factores de la obesidad está determinado por la leptina, una sustancia química que se encarga de señalar al hipotálamo la plena satisfacción después de haber ingerido las comidas, a su vez el hipotálamo al recibir las señales genera neuropéptidos, los reguladores del metabolismo, pero al verse alterado comienza a generar una mayor cantidad de grasa que se acumula en distintos órganos en lugar de acumularse en el tejido adiposo. Se trata de un padecimiento serio que acorta la vida, incrementa la predisposición a otras enfermedades crónicas (hipertensión arterial, diabetes, tumores malignos, etc.) y genera mayor riesgo en la cirugía, el parto y los traumatismos. Las causas de la obesidad hasta el día de hoy no han sido del todo comprendidas pero se sabe que existen muchos factores causantes de esta grave enfermedad, unos que parecen ser muy sencillos y otros bastante complicados. Por mencionar las más importantes causas, son las siguientes: •Genéticas: Los genes involucrados en la obesidad pueden considerarse como predisponentes y pudieran estar actuando uno o varios de ellos en conjunto. •Metabólicas: El uso energético de la calorías varia considerablemente entre una persona y otra. Algunas personas son más eficientes en lo que se refiere a la utilización de calorías para poder mantener la temperatura corporal y para llevar a cabo los procesos metabólicos. •Psicológicas: Recientes descubrimientos han transformado la teoría de que las causas psicológicas pueden desarrollar la obesidad y ahora se considera que los cambios psicológicos en la obesidad, son una consecuencia y no una causa de la misma. •Sedentarias: El sedentarismo es una de las principales causas de la obesidad. Y está comprobado que la actividad física es uno de los mayores determinantes del uso de la energía del cuerpo. El hecho de incrementar la actividad física hace que el cuerpo tenga que utilizar más calorías y logra que el balance calórico del cuerpo sea más favorable para no presentar obesidad. •Nutrición altamente calórica: Definitivamente el consumo de más calorías que las que nuestro cuerpo requiere provoca que el balance calórico vaya acumulando más calorías y por cada 7 500 calorías que nuestro cuerpo acumule se aumenta 1 kg. de peso, y esto conduce a un cuadro de obesidad. Es una enfermedad que hoy en día destaca mucho ante la sociedad siendo la mayor causa de muerte, que es la diabetes. Esto ocurre por muchas cosas, ya que esto empieza desde la familia, que te empieza a inculcar que las verduras y las frutas son muy ricas y nutritivas, que te pueden ayudar en tu salud , pero la sociedad ha hecho lo contrario prefiere consumir comida con mucha grasa, dulce, masuda y dañina para tu salud. La obesidad la podemos identificar como un defecto pero en verdad es un problema de salud importante ya que la acumulación de grasas en el cuerpo te provoca muchos problemas de salud, causa problemas ortopédicos, como la artrosis, al igual que trastornos cutáneos son particularmente frecuentes. Ya que las personas obesas tienen gran superficie y les cuesta más trabajo moverse. La sociedad es la que ha inculcado estos valores, ya que desde pequeños en vez de comprar un vasito de fruta, nos vamos por las papas o paletas etc. Y eso haces que nos acostumbremos a comer siempre comida chatarra. Algunas de las razones de las que hay personas obesas son: La obesidad está relacionada con los siguientes aspectos y consecuencias: El 15% de la población dedica más de 2 horas diarias a ver la televisión, y coincide con el porcentaje que posee un Índice de Masa Corporal mayor. El 82% considera que está peor vista socialmente una mujer obesa que un hombre en la misma situación. Un 65% opina que una persona delgada lo tiene más fácil a la hora de encontrar un trabajo que una persona con exceso de peso De la población en general nos encontramos con un 16% que no realiza ningún tipo de actividad, ni habitual ni esporádica. De todos los que desean perder peso, cerca del 40% lo hace motivado por cuestiones estéticas y no de salud Prevenir la obesidad y sus secuelas es un asunto de educación, dieta y ejercicio y especialmente de voluntad”12 Para mantener un peso saludable es necesario realizar actividades físicas, con que una persona camine 30 minutos diarios, hace el gasto energético que se requiere para quemar la grasa acumulada durante el día. La obesidad no se cura, pero puede controlarse, lo que no es fácil ni rápido. Su tratamiento es complejo y de largo plazo, a veces de por vida y siempre a cargo de especialistas, debe desarrollarse en forma individualizada, sin embargo, el responsable final es el paciente, pues sin su empeño y constancia nada se logra. Como medidas preventivas, es importante fomentar la lactancia materna, retrasar la introducción de alimentos lácteos en la dieta del lactante, promover campañas de educación sanitaria con información dietética en la infancia y la adolescencia, y por último fomentar la actividad física. Las estrategias de la prevención de la obesidad se basan en la iniciación de la prevención a través de los cuidados en atención primaria, con programas dirigidos al ambiente familiar del niño con riesgo de obesidad y a programas desarrollados en el medio escolar. Hay que evitar que una dieta restrictiva pueda dar paso a un trastorno del comportamiento alimentario, sobre todo en los adolescentes. El tratamiento de la obesidad no es fácil y en la mayoría de los casos conduce al fracaso. Los resultados obtenidos a largo plazo son desalentadores y muestran que del 80 al 90% de los niños vuelven a su percentil de peso previo, siendo la tasa de recidiva comparable a la de los adultos. El tratamiento está indicado en niños con un IMC superior al percentil 95 o más de 2 DE para su edad y sexo, y en niños con obesidad moderada (IMC entre el percentil 85 y 95 o entre +1 y +2 DE para su edad y sexo) si presentan complicaciones derivadas de la obesidad, como afectación psicológica, patología ortopédica, hipertensión arterial o dislipemia, entre otros. El objetivo del tratamiento es conseguir un peso adecuado a la talla y conservar posteriormente un peso dentro de los límites normales, junto a un crecimiento y desarrollo normales. El tratamiento debe ir dirigido no solo al niño sino también a su familia y comprende los siguientes aspectos: 1. Reeducación nutricional del niño y su familia. 2. Incremento de la actividad física. 3. Soporte psicológico. Debe suprimirse el exceso de ingesta de alimentos con alto contenido energético (bollería, galletas, caramelos, entre otros) por otros alimentos con bajo contenido calórico como las verduras y las frutas. Se evitarán las grasas y los azúcares refinados y se deben cocinar preferentemente al horno, cocido o a la plancha. La comida del colegio debe modificarse, sustituyendo el primer plato por ensalada y el postre dulce por fruta fresca. No se deben utilizar alimentos como "premio” o "regalo”. Es importante realizar seguimientos constantes, estableciendo pactos gastronómicos con los niños, que proporcionará un mayor rendimiento terapéutico. Es importante descartar los procesos que causan obesidad secundaria. Cuando llegamos al diagnóstico de que se trata de una obesidad esencial, nos interesa realizar una historia clínica detallada y conocer los antecedentes personales, tales como el peso y longitud al nacimiento, tipo de lactancia, edad de introducción de los alimentos sólidos, desarrollo psicomotor y antecedentes de traumatismos o intervenciones quirúrgicas. Es también importante conocer la actividad física del niño, las relaciones familiares y escolares, y la aceptación tanto del propio niño como de la familia de la obesidad. Entre los antecedentes familiares, es importante conocer el peso de los padres y hermanos, y los hábitos dietéticos de la familia utilizando principalmente encuestas nutricionales. CONCUSIÓN Sin necesidad de realizar encuestas, a simple vista con la vida diaria que llevan la mayoría de las personas podemos afirmar que sus hábitos han cambiado; los alimentos que ingieren no son los más saludables, y su actividad física es prácticamente nula. La obesidad es algo que uno ve por la calle, como algo normal quizás, pero luego de haber investigado y de haber rescatado información sobre el tema, concluí que es una enfermedad que afecta a muchas personas y que con el paso de los años ha aumentado considerablemente, aún más en los niños. Es una de las enfermedades más frecuentes en la actualidad, es necesario llevar una alimentación adecuada y es recomendable hacer ejercicio por lo menos 30 minutos al día para mantener un peso adecuado. Este problema alimenticio puede causar diversas enfermedades e incluso la muerte. Es un transtorno cada vez más frecuente en nuestro país, en tiempos pasados a una persona con sobrepeso se le consideraba como una persona que gozaba de salud, sin embargo ahora sabemos que la obesidad tiene múltiples consecuencias en nuestra salud. Las causas principales de éste desorden es la falta de actividad física y la mala alimentación de una persona.