DISCURSO LEIDO EN LA Universidad de Valladolid EN LA SOLEMNE INAUGURACiÓN DEL CURSO ACADÉMICO DE 1916 A 1917 POR VICENTE DE MENDOZA Catedratico de la facultad de Derecho TIPOGRAFIA Macías CUESTA Pica vea, Valladolid 1916 40 r ~, $& ••••••••• ~ ~ -: ¡ ~ 1: ~j , ~ , 1 I i " t t;~~~~ 1 DISCURSO l, ! :~ leido en la Universidad de Valladolid 1 en el acto solemne de la inauguración 1 DEL CURSO ACADÉMICO DE 1916 A 1917 J 1 1 , I .:.~/ BiCe 11111]lrllll~OO~I[llllliílillf¡liIIIIÍlIIII"1 5>0 O O O 4 1 9 5 4 9 ~ L ~. .~ - ~ -, <. / -: " DISCURSO LEIDO EN LA Universidad de Valladolid EN LA SOLEMNE INAUGURACiÓN DEL CURSO ACADÉMICO DE 1916 A 1917 POR VICENTE DE MENDOZA Catedritloo de la Faoultad de Derecho " TIPOGRAFIA CUESTA Maolas Pioavea, 40 Valladolid 1916 ~. p) / "'" 'C:7 I~ "j/ I /' !~ EXCMO. E IU.IO. SEÑOR SEÑORAS Sólo invocando y SEÑORES: la exigencia imperiosa del deber inexcusable que estoy llamado a cumplir, puedo atenuar de alguna manera el natural mal efecto que seguramente vosotros, se producirá en al verme a mí, el último y menos capacitado de los claustrales pertenecien tes a esta escuela, ocupar osadamente una tribuna que, hasta ayer y formando tradición gloriosa, ocuparon de pleno derecho e ilustraron sus enseñanzas, "-( con las más exclarecidas reputa- ciones del saber y las más altas cumbres de la inteligencia. y es así sólo cómo, en franca solicitud ~. -, benévola sentir, de simpatía, acudo a vuestro amable acogíéndome.: cual náufrago de otra especie, a la tabla salvadora del reglamento, que es el viejo recurso, no por muy usado -5- ------ ------------------------ menos cómodo y eficaz, de que se valen cuan- la obligación de cija tos como yo, en tales trances no fico elegido líbreme a de sus especulaeíon encuentran apurados, mejor asidero para mantenerse tica académica, r~ flote. Habréis, pues, de permitirme que, con la cido que esas dI4 ; única, insuficiente, oficial otorgado autoridad de un título a bien escasos méritos, me crea autorizado a pediros un poco de atención y un mucho de indulgencia; que de ambas necesito, si, como espero, y así lo fío a vuestra 1I ! I I¡ I Ahora, Sefto en mi lugar y j inagotable bondad, estáis dispuestos a penetrar tC6mo acudir a' la exigencia lega~' en el intrincado lidad, que es laberinto de mis modestas con resignación piadosa ya que no con interés, gencia con sitaria1 por el camino mal trazado de los desenvol- Porque, vimientos que me propongo dar, en el presente sabemos, sin; estudio, al tema objeto de mi trabajo. diversa reflexiones y, una vez dentro de él, a seguirme, peso abro I Antes, sin embargo, de enunciar I ¡ carácter científico,; y bien marcado, _-- el epígrafe general que habrá siquiera de servir de rúbrica a todo lo que sigue, quiero y debo confesarme con vosotros, y hacer una decla- actualidad mo-es únl n p6tica. Ante la ración que, si no vale como descargo de conciencia, satisface, al menos, una necesidad provocar y apremiante de mi espíritu, inquieto y preocu- perversidad pado desde el día en que, por primera vez, millares de po hube de ponerme el para mí grave problema de lesa hum de elegir asunto. He aquí mis dudas. La prescripción legal impone al orador catedrático encargado del discurso de apertura, -6- ~I ( 'C7~ <, .> le se valen cuan- la obligación de disertar sobre un tema cientí- ces apurados, no fico elegido libremente dentro o fuera del campo Lra mantenerse a de sus especulaciones o enseñanzas, y la prác- tica académica, respetando la ley, ha estableirme que, con la cido que esas disertaciones, id de un título carácter científico, lleven siempre, a ser posible asos méritos, me y bien marcado, el sello de la actualidad. poco de atención sin perder su Ahora, Señores, os suplico que os pongáis Il; que de ambas en mi lugar y juzguéis 1St lo fío a vuestra ¿Cómo acudir a la exigencia científica, que es de mis confusiones. puestos a penetrar la exigencia legal, sin dar la espalda a la actua- de mis modestas lidad, que es también otra exigencia, la exi- de él, a seguirme, gencia consagrada l1e no con interés, de los desenvol- por la costumbre univer- sitaria? Porque, bien lo sabéis vosotros y todos lo ar, en el presente sabemos, sintiendo, i trabajo. diversa según su resistencia y sus nervios, el peso abrumador snuncíar siquiera actualidad ná de servir de mo-es s, quiero y debo pótica. hacer una decladescargo de coní.. una necesidad cada cual en proporción de la mundial desgracia; presente-perdonadme la el pleonas- única, exclusiva, avasalladora y des- Ante la guerra que el cerebro dislocado de unos... provocar mal llamados gobernantes, y quiere sostener ha sabido y sostiene con iquíeto y preocu- perversidad por primera vez, millares de pueblos inocentes; ante el crimen ( grave problema de lesa humanidad que se está cometiendo en masa a a la vista, ciencia y paciencia de todos los humanos y en ne al orador cate- IlSO diabólica, sacrificando de apertura, que la Humanidad, a un tiem- po actora y paciente, se plantea a sí misma, por extraño procedimiento y en términos de _--~- -" .. -7- ---_ infinita _.-----_.--- .. crueldad problema, y de insensato iba a decir diré sólo de muerte, más solución cie; ante devorándose un problema que no admite También, en otr científico hiperbólico sus afirma, con igual de suicidio de un derecho de honores independiente problema este en los recónditos y oscuros alberga la conciencia, causa y si esto es así, repito, aquellas donde se forma y razón Confieso, Sefl., y esen- del guerra es muy vibrante yuntiva prin- estuve de nuestra de ciencia difícil, y hacer ciencia partido de la gue pedía a gritos la armonizar, sin referirse es, a mi juicio, a la de la guerra a mí mismi razón, perdido el s egoísmo la existencia de la guerra, guerra y ciencia exclusivos ceneias Dios, de ofender de una ciencia sí con- '1 en él ~ pJ momento actual y na , denciar el antagoni i .. _. -s2 ~...• J 1 que el in4 saba yo que nada tradictorios, cómo la vida, que es la Ci~ .• _----_./ absorbent41 despertando son dos térmiy entre e por todos los instintos los que, sin saber lo que dicen, y no trato, líbreme nos recíprocamente alusión las creencias sencillamente imposible. a nadie, afirman de rendí y es que pen pero hablar Digan lo que quieran de optar' dejándome arrast de la guerra. ¿cómo de' ¿Qué hacer, p • en el querer, dos exigencias? Hablar hoy que es la.' todas las violenei y Señores, pud lugares no cabe ni es posible otra actuali- dad que la actualidad ¡mp las discordias, en el sentir, expresión perdurable, naturaleza, qué del pensamiento, en todo lo que es suma o simple cipio absurdo, guerra, En las esferas luminosas cia regulado de armonía, gran problema? en el obrar, jurídicas [Corno si el deree ~ de actualidad de I tal la justa fsculte la re- mitológico, hijos ... ; ¿qué puede merecer aparte, de la espe- agrandada, del dios monstruo en la muei guerra, excluye la en el mundo, silueta contradice pero ese intento pugnante un o muerte, que el aniquilamiento que reproduce tratado de vida desvarío, ... . _ "",., .. '\ r "" ~ '1' -: '~ r tsato desvarío, un la o muerte, pero con tradice la muerte, y la muerte, que es la guerra, excluye la vida. ema que no admite También, en otro orden de ideas, hay quien miento de la espe- afirma, con igual con tradicción, bóJico de suicidio de un derecho de la guerra, entendiendo agrandada, la re- la existencia por tal la justa facultad de hacerla y las normas mstruo mitológico, jurídicas reguladoras ..; ¿qué problema absurdo, qué nores de actualidad ¡Como si el derecho, que es fuente de paz y ite de este gran de armonía, guerra, I impudencia pudiera ¡Qué y qué sarcasmo! desnaturalizarse en la que es la máxima expresión de todas las discordias, del pensamiento, de su ejercicio. de todas las injusticias y de todas las violencias! s lugares donde se ientír, en el querer, ¿Qué hacer, pues, en mi caso? e es suma y esen. forma del prín- Confieso, Señores, que, puesto en la disyuntiva de optar entre dos extremos, a punto , razón de nuestra estuve de rendirme ~sible otra actuali- dejándome arrastrar por la corriente, ~nte de la guerra. partido de la guerra... " icómo armonizar, pedía a gritos la voz de mi conciencia. r' :ias? a las circunstancias tomar el para execrarla, cual lo y es que pensaba yo,-disculpadme alusión a mí mismo-que, sin referirse a la y, extraviada tanta hoy la . abIar de la guerra razón, perdido el sentido moral y desplazadas sencillamente las creencias por el influjo dominador de un egoísmo absorbente, / 18 todos los instintos que, sin saber lo engendro miserable de feroces y bajas concupis- me Dios, de ofender cencias que el individuo leia de una ciencia ieíe son dos térmí- despertando en él nefandas aspiraciones; saba yo que nada podía ser más oportuno en el vos y entre sí con- momento actual y nada más instructivo que evi- que es la ciencia, trasladó al Estado, denciar el antagonismo irreductible .. L pen- existente, -92 j I ¡ I I por definición, entre la idea fecunda y 'cons- I como un símbolo I ¡ tructiva del derecho y el hecho brutal, diso- II ciador y estéril de la fuerza. ¡¡EL DERECHOY , i LA FUERZA!! ... Tal hubo de parecerme, en un principio, que debiera de I I ser el enunciado de mi tema. El derecho y la fuerza, sí. Es decir, la antí- \ tesis suprema expresada en dos palabras por I I i \ es infernal y satánica; Ormudz y Arhiman, I el la Humanidad hul I, el ideal de las «aspl t en la violencia, que dumbres, las mísei lento y penoso, de nida ab initio y per in saecula, entre los dos cia del Mal, representada y bastaría rect ¡ I Dios y Luzbel en pugna para conquistar II I¡ sí reveladoras de la eternal contienda, manteprincipios enemigos: la razón de Bien, contenida en la justicia, que es divina, y la esen- l' inmortal de ala ar ! logró libertarse p< -de los instintos' tí. tuír, en deñnltlv: del dere,c'n.o; basta der toda la culpa fXJos.rMj&JM die éflJ y por la guerra la fuerza. Si dudáis mundo. Ami juicio, Señores, y sospecho que tam- un momento. V bién al vuestro, diata, la prueba' ¡cuán interesante! tiempos de rudo materialismo, en estos j grosero, que la perfidia ambiente pretende recatar, sin conseguirlo, bajo el disfraz de nobles ideas, altruís- Prescindiendo . tas, de abnegación y sacrificio ... ¡cuán prove- el derecho no fué1 choso! hubiera deración aparte, pt sido volver sobre el pasado próximo y remoto de la historia, fijar la vista de las ideas que" en las alturas y siguiendo, rápido, los vuelos siquiera como sen del en una dependiente de 1 hoy olvidadas, necesidad física ~; gran pensamiento humano mostrar, síntesis, a. las gentes, qu-e la idea de la justicia, «sol del mundo del ritual o moral- espíritu, prototipo de todo lo creado», siempre rece confundido, . brilló con diáfanos resplandores patriarcaZ, tipo p en la mente de los hombres sabios y de los hombres buenos, -10 -- ~I I ----'-,--- '" viniendo a époeu. 1 ¡-- --- "'" ----------...... ~- i(' ~ 7' <. ,, o ' / ._._ -.0'- _ •. _ _ . fecunda y 'cons- como un símbolo de paz, como la expresión echo brutal, díso- inmortal de «la armonía de la vida). y bastaría recordar los trabajos, las pesa- :RZA!! .. , Tal hubo dumbres, las miserias, oprobios y torturas que do, que debiera de la Humanidad hubo de padecer en el camino, la. lento y penoso, de su marcha ascendente hacia . Es decir, la antí- el ideal de las «aspiraciones morales), hasta que logró libertarse dos palabras por por completo, así lo parecía, contienda, mante- «de los instintos físicos y materiales», y consti- euia, entre los dos tuír, en definitiva, én de Bien, conte- del derecho; bastaría recordarlo para compren- divina, y la asen- der toda la culpa inmensa y toda la grave res- n la violencia, que ponsabilidad de quienes en la guerra profesan 'WIudz y Arhiman, y por la guerra para conquistar el la fuerza. Si dudáis la ciencia de la filosofía propagan el culto sacrílego de de lo que digo, acompañadme sospecho que tam- un momento. Voy a intentar teresante! en estos diata, la prueba de mi aserto. ofreceros, inme- ismo, grosero, que le recatar, sin conPrescindiendo robles ideas, altruís- de la cultura oriental donde lelo... [cuán prove- el derecho no fué objeto de estudio y consi- Ir sobre el pasado deración aparte, pues, lo mismo en el orden tstoria, fijar la vista de las ideas que en la práctica de la vida, ni o, rápido, los vuelos siquiera como sentimiento o mostrar, en una dependiente tes, hoy olvidadas, necesidad física o material-economía-y tenía existencia in- de los otros sentimientos, los de espi- «sol del mundo del ritual o moral-religión-, lo creado), siempre rece confundido, ya desde los tiempos del grupo patriarcal, tipo primitivo de la unidad social; ndores en la mente los hombres buenos, con los cuales apa- ! viniendo a épocas posteriores __ ------ .-.__ . ._---_ ... - --_ ...._" ..._----_. __ .. de civilización, ,- -11- l_ j la idea de la justicia, que en los albores la filosofía griega y con los primeros se manifiesta como física-escuela eleática-, un jónica- estado sistemas necesidad de los tiempos de virtud al rango y dignidad de humana y social. Epicuro t todo dolor un mah entenderse el de l(] «el tener el cuerpo sin inquietudes». prudencia de dond Para para Para síste en los goces o metafísica-escuela pasa y se eleva en Sócrates de Sócrates, gobernar «los hombres que no admitía que más título la capacidad y sabiduría, capaces y sabios no debían gober- nar con la fuerza sino con la persuasión y el razonamien to», En Platón la justicia y en Aristóteles, uno de los aspectos de la virtud. ambos, lo justo como hoy se diría, es Para y lo honesto, dos ideas que el derecho y la moral, a distinguir, forman un concepto único: contento Sil honestamente y jl La moral epíeu «el aCl representa egoístas y benévO¡ ,; de los sentidos y;' Su derecho n de utilidad cuyo' y recíprocamente lo bueno. La justicia el individuo vivir máxima ( idea de orden y al'i también no aciertan y según fin Platón «es lo mismo para «en las relacíon en aquellos pueblos que para el Estado», y tanto el individuo como en el Estado, «la virtud que mantiene la unidad, es siempre trato de no perju el acuerdo no ser perjudicado «porque produce e~ y la armonía». Por eso Platón ritu de conquista «condena y proscribe y somete a ciertas guerra», y Aristóteles, el espíleyes la a su vez, «propone como de las pasiones yj Para los estóic compendiarse tod: fin de su Estado ideal, no el ensanchamiento la naturaleza; lo q del el ejercicio vivir según razón,: territorio y de las virtudes guerreras ... , sino la realización tal cual conviene a la naturaleza de la virtud íntegra del única «La razón natu pueblos hombre». -12- ~ .. _---_/ ,)! cosa dura bId y a todos I - ~ ~ ~ '~ en los albores de ./ Para Epicuro «todo placer primeros sistemas todo dolor un mal»; ado de necesidad entenderse netafisica - ese u e la siste m los tiempos de «el tener de virtud humana sin inquietudes». el de los disipados, y según .cidad y sabiduría, vivir no debían gober- la persuasión y el teles, la justicia es IS de la virtud. Para esto, dos ideas que derecho y la moral, un concepto único: de donde virtud honestamente La moral entre «el acuerdo de los sentidos cuyo Estado, trato de no perjudicarse te a ciertas leyes la es pueblos con quienes no ser perjudicado», produce pasiones y con no exista el con- el equilibrio y refrena cio de las virtudes vivir según moral zación única razón, y la razón cosa durable y absoluta natural y a todos la justicia los ánimos». lo que significa, razón y de no de los deseos y la naturaleza; pueblos su y aun seres Para los estóicos «el precepto «La perjudicarse se recomienda . el ensanchamiento ituraleza íntegra del no mutuamente, toda de la virtud en «un pacto con aq uellos compendiarse vez, «propone como los placeres y no ser perjudicado», aquellos de las consiste objeto ietado», y tanto en «porque las tendencias y los de la inteligencia». Su derecho natural, de utilidad la felicidad del hombre, «en las relaciones a y proscribe el espí- lleva en el fondo una representa «es lo mismo para unidad, el acuerdo ... ». en cuanto y benévolas la prudentemente, idea de orden y armonía egoístas es «no se puede se vive epícurista bien todas las demás, y justamente recíprocamente es siempre principal derivan sino más y el espíritu máxima de la escuela contento y no debe sino sin dolores La bien ni el que con- materiales, el cuerpo prudencia is pero por placer en los goces admitía más título es un en que parece es vivir para el hombre, enseña es común los tiempos, según que la es la virtud". a todos los y por esto el -1:.- derecho natural viene a ser como el Sabio, el expresión ciudadano del mundo». es también la fru «La solidaridad de todos los hombres extensión de la comunidad humano, se considera mandato inmediato a todo el género por la escuela, de la misma así que «el ideal de la República, era que todos mente los hombres sin distinción ciones... reunir en una y concorde- que a todo ..I la religión del e~ apreciación jurid~ deración matemá a. de una justicia y na- de pueblos cho no fueron paq se aquilatan lleva según Zenon, armonía sola familia como naturaleza»; viviesen alguna concordia y la feliz de debería el género humano». armónica, que el Jurisprudencia a/ injusti scientia, voluntans ..~. petua noce y proclama Pasando cambiado de Grecia a Roma se ve que, aun el punto de vista en la consideración piterna ... del derecho que aquí más bien se estudia bajo el aspecto de su inmediata necesidades de la vida aplicación como un a las sistema de nos expresaron gentes? .. el concepto fundamental, virtud y valor norma, increada, ya establecido, moral, y de la del prin- Durante la armonía que la razón natu- saber flloséñeo ral conoce y refleja, afirmativa aplicado, en el orden de las cosas sociales y humanas. y a despecho luntad de hierro en contradicción cuenta de virtudes de una vo- se esfuerza, mediante que leyes a los demás pueblos; a un carácter que, y defectos, tomada representa sistema del egoísmo disciplinado», según «el la , L------------------------- -}4- ~, ,,)1 _----_./ '-....• j a la defensa de~{ justicia es base d ." del exclusivismo las armas, en imponer . cídas fórmulas en;· siste cipio de universal 1 ¿ea" de un derecho justicia i Asimismo Jurisprudencia, la idea madre prevalece y subde la justicia, j conqruens, diff en las obras de d" rosos; uno teólog . simple poeta ... y Así se afirma resultados del esfu . hombres superior~ e I I < / """ ~ 'j/ ~ .> I~ como el Sabio, el los hombres y la 1 I 1 expresión feliz de un célebre escritor, cuya es también la frase de que «la ley y el derecho no fueron para los romanos otra cosa que 1 a todo el género la religión del egoísmo»; por encima de una , la escuela, corno apreciación jurídica, misma naturaleza»; se aquilatan llevando al extremo límite la pon- blica, según Zenon, deración matemática, viviesen concorde- mezquina, de hechos, que surge triunfan te la idea de una justicia absoluta, eterna, niveladora y la de pueblos y na- armónica, que el jurisconsulto, nonía que debería Jurisprudencia • a todo el género injltsti al elevar a la categoría de justi la atque scientia, declara en la constan s ac per- petua voluntans ... , y el filósofo orador reconoce y proclama en la... recta ratio, naturae ~ ~. , .8 se ve que, aun 'en la consideración _len se estudia bajo congruens, diffusa in omnes, constans, piterna ... Asimismo ¿cabe dar otro sentido a las cono- aplicación a las cidas fórmulas en que los jurisconsultos o un sistema de nos expresaron prevalece y sub,tal, ya establecido, or moraZ,y de la mativa del prín- sem- de un sus respectivas derecho natural roma- concepciones y de un derecho de gentes? .. Durante la Edad Media, toda la labor del ne la razón natu- saber filosófico jurídico, siempre encaminada o, en el orden de a la defensa del principio moral que en la justicia es base de progreso, puede sintetizarse hismo de una vo- en las obras de dos espíritus igualmente esfuerza, mediante rosos; uno teólogo, metafísico y santo; el otro a losdemás pueblos; simple poeta ... y filósofo: Santo Tomás y Dante, I , 'ácter que, tornada Así se afirma generalmente pode- ponderando los ~tos, representa «el resultados del esfuerzo intelectual de estos dos NpUnado», según la hombres superiores. Pero, sin escatimar su -1:'>- *< • '<~~ ¡ ."""~" , "1 '" j J mérito, forzoso seguir, y que ellos siguieron alto es reconocer la ciencia elevando del derecho, cado de antemano firmamento que el camino ya ! necesarias a tan I y la propagación estaba mar- con trazo imborrable de las ideas a partir que la sublime a inspiración divino, reanimando en el del instante en de San Agustín, el el cuerpo frío de la vieja filosofía moral con el ardoroso aliento del genio del cristianismo, construye ejemplar, aquel I I ¡ para eL- bres, Y es astq fesa,en, política, , condena la nobleza" I ciones sociales que~ y combate virilme;i I aspecto que se I el uníversos, 8i"~' I Pl: ' El mismo con ,1.' maravilla de los siglos, que hubo de llamarse la Ciudad de Dios, sin duda porque estable- de partida para f¡ cido el imperio, limpio de violencias, de una teorías ley moral que orden exige, en el' única única se proclama con él se consagra JUSTICIA, de un modo definitivo VERDAD, y se asegura el «reinado de Dios sobre la tierra». jurídicas,} las cosas creadas: y este fin Gde~,t; género Para Santo la justicia consiste Tomás, en humano.;J: la familia, el puebf «el hábito con que uno atribuye a cada cual con es de carácter constante y perpetua lo que le per- se expresa con el',!, tenece». Lo que voluntad sig-nifica que, del fundador de la escolástica, en la mente la [ueticia apare- como un valor ético, como una ce, lo primero, virtud. añade sólo virtud, es también el maestro, ley, es decir, manifes- tación de un orden, o, mejor, el mismo impreso en las cosas por la Sabiduría ley eterna-, conocido, la razón-ley natural, racional en forma en cierta orden propone positivas-ley con j'tA libertad; y justicia, proporción; dencia. medida, por y en tramos en la de la Al llegar y aplicado brevedad humana- impaciencia, 3 ~J ~ '-"I!"""'...,...----,/ lb' 1 regirla verdadera -}fi- '~ i . i tres objetos: divina- o participación en la ley eterna- de reglas no es la human régimen civil, que e todo, Pero la justicia, criatura alcanzarlo ~I y aquí, Se para cal he de h r - ~ ~ <. r que el camino a /' necesarias para on elevando a tan o, ya estaba mar- bres. ~oimborrable en el fesa, en política, y la propagación irtir del instan te en oso aliento del genio I, ¡ ye aquel ejemplar, ! de San Agustín, el rpo frío de la vieja le hubo de llamarse uda porque estable- ~ violencias, de una una única VERDAD, msagra y se asegura buye a cada cual con mtad lo que le per- entre Y es así que el angélico ciones sociales .Y combate doctrinas doctor y todas las distin- la tiranía en la virtud bajo cualquier El mismo concepto de «un orden el universo», f sirve a Dante Alighieri que rige de punto ¡ ¡ orden exige, en el sentir del filósofo, «que todas I las cosas creadas de partida para fundamentar teorías jurídicas y este I ¡ y género humano» políticas. deben fin «debe y desenvolver La tener tenerlo sus noción de un propio fin», la gran como lo tiene ciudad del el individuo, la familia, el pueblo y la ciudad; pero en aquélla es de carácter se expresa más general con el vocablo y comprensivo civilización. a que, en la mente alcanzarlo lea, la justicia apare- régimen civil, que cumple tres funciones valor ético, como una propone todo, la humanidad tres objetos: regirla le el maestro, no es verdadera ¡y, es decir, manifes- justicia, dencia. ejor, el mismo orden «pro- alternen te liberales; que no se fundan virilmente los hom- aspecto que se presente». t reinado de Dios sobre justicia consiste en de la virtud condena la nobleza hereditaria í de la paz el mantenimiento con necesita mantenerla justicia organizar y Para un o se en paz ante y procuraría una libertad; y la paz es concordia; la proporción; y la libertad, indepen- la Sabiduría divinan cierta medida, participación Iy eterna-y ¡Uvas-ley por y entramos de la aplicado humana- Al llegar brevedad y impaciencia, en la Edad Moderna. aquí, Señores, para calmar he de haceros en obsequio a la vuestra j ustiflcada gracia del detalle -173 ------- ------------------._..",. ] 'l J ------_.----------de referirme sistemas a todas Por las teorías, de filosofía jurídica nos dan explicación llenaría son tantas de un concretar en que todas pudieran en todo menos, las muy superior zas. No extrañéis, tener de la filosofía del d _-célebre y enérgica' cabida en cho lo estimaría, imposible, o, por - eíos resulten labios que en se propuso ciencia lidad, suprema señaladas por las de una idea; tiva; como en la afirmación que, del derecho partiendo del bien del hombre en lo justo, utilitario y jurista; del correspondiente dió origen como, por último, dos humana, tendencias , en la lo que en todos los sistemas doctrinas modernas y en todas las acerca de la justicia, derecho como --------------, -18- - las un ---- ..----------_._---- «ni el temor ni .:' cimiento de la i que someterse el -Ó; auxilio en ella -de;' ejecutora de la " y Kant sostiene': relativa, única aseq I adquiere un valor a . I la razón práctica, I rano de «obra el bíe I , concepto en no en el orden I , siem- 108 I f o doctrinas y socialismo; en todas escuelas, el I I,, que o facultad poder a la persona a las aparece ( moralista, los sistemas derecho del individualismo pre 1 en lo honesto, en lo útil o fundaron consideración I ley de la idea y estimando ¡'. m del derecho direcciones tal bien consiste humsnose, f¡ paso, que equival escuelas racional o idealista, histórica y posi- común existiría" que Dios no exis borrosas oara mi objeto es hacer cons- y en los escritores IOD . sición se admitieraé cada vez más ténues. y en las tres natural, hombre, lo de mis fuer- de este bosquejo, tar que, tanto en el estudio l1Í fué el padre y fund- es que, pues, que las líneas Lo importante de rasón, y así en Hugo G al alcance y apenas perceptibles principio de sus autores cada una de las doctrinas empresa mora¡ qu opimones, espacio de un discurso, caso, de orden y un hecho de libro; así pretender el reducido y que, en esta época, sólo los nombres las páginas forma escuelas de la justicia. lo demás, que el citar -~ e categórico del deber ' y se expresa bajo el que el motivo de tu: --- ¡ -r l <, /' 'C7 1(' "1' -: '~ 1- teorías, escuelas y a que, en esta época, ----.-- ! I justicia. ! mtas las opiniones, I moral que tiene por de orden de virtud. y un hecho y así en Hugo Grocio, de quien se dice que ibres de sus autores i Iué el padre y fundador libro; así es que, : de la filosofía del derecho, III una de las doctrinas célebre y enérgica eran tener cabida en cho discurso, lo estimaría, hombre, imposible, sición se admitiera, o, por lo natural, de la moderna quizá por aquella su expresión fundado existiría ciencia en de que «el derela aun cuando naturaleza del por impía supo- lo que no puede aceptarse, que Dios no existe o no se ocupa de los nego- alcance de mis fuer- . cíos humanos», ne las líneas borrosas 1800 un de razón, un fin de paz y armonía principio ¡ contenido fórmula, paso, que equivaldría bosquejo, resulten habré de apuntar de a una blasfemia en otros labios que en los del filósofo creyente, que sólo se propuso io del derecho ciencia lidad, suprema ~ por las de una idea; en Hugo Grocio puede leerse que señaladas manifestar, con ella, la ínmutabi- ~ objeto es hacer con s- excelsitud y valor imponderable f'a' histórica y posi- «ni el temor ni la fuerza conducen ~i6n del derecho ley ~ .partiendo de la idea cimiento bre y estimando que auxilio ;"mesto, en lo útil o ~ sistemas moralista, ejecutora ~, por último, relativa, única asequible al entendimiento ~o poder ~na ° de la iusticia; por el contrario, que someterse antes el derecho a la fuerza debe buscar en ella demodo que se convierta en de la razón». y Kant sostiene por su parte, que la verdad en la no en el orden facultad huma- teórico de la especulación, sólo adquiere un valor absoluto en los dominios humana, lo que ndsncías al recono- la razón práctica, con aquel su mandato o doctrinas de sobe- bausmo; en todas las rano de «obra el bien por el bien», imperativo ~temas y en todas las categórico ~ de la justicia, siem- o como un concepto t ¡ t~~ del deber que en la moral se cumple y se expresa bajo el dictado de «obra de modo que el motivo .. _. de tu acción pueda convertirse .__.._._ -19- ,.*,: • , .,;~ . ._---------------- -~ en ley universal», y en el derecho se realiza varían te del - y se con tiene en la regla de «obra exteriormente de modo que el libre uso de tu albedrío pueda conciliarse con la libertad de todos según una ley universal». Con arreglo a esta máxima, la justicia, J-", doctrina por el ::1 Es Schellin(' at la aspiración ~ fundado en el d --; '.'" con- de alcanzarlo, .'. societatis resisto al deeecf¡ ".':1 servando el carácter de vinculum -Ó, bumanae, que otro pensador insigne la había dado, contribuirá a unir a los pueblos en una aTodaviano1! una cODstUuci',¡ comunidad de derecho. Y es por este camino hasta que como el filósofo de Keenisberg domine una ¿e';: se ve llevado 80 ...., a la concepción de una gran República general todos los Es de todos los Estados, establecida sobre la base tíeen de la paz universal. Pudiera creerse que en el concepto kantiano para las lneh _ general, del derecho entra como un elemento la fuerza, todas las n observando que Kant pone en la coacción por cuyo medio sólo son exigibles las relaciones jurídicas, su característica diferencial de las relaciones morales. Sería un error. En Kant «la fuerza, que en Hobbes podía ser fuente del derecho, se convierte en un medio para el cumplimiento de éste; es una simple sanción del derecho, el cual existe independientemente de la fuerza para hacerlo valer». Esa misma idea de una justicia que yo llamaría unitiva, si valiera el vocablo, y ese mismo concepto de un derecho creador y armónico que habrá de traer al mundo el beneficio incomparable de la paz, hállanse también en Fichte, Hegel y Schellíng, con la sola -20- ~. ~ •••• _----_/ ...• '-- d ~! SUB r . COIll '" / i ~ I~ '7' .> !~ derecho se realiza variante del sello particular de «obra exterior- doctrina por el respectivo uso de tu albedrío Es Schelling quien Irtad de todos según la aspiración impreso a cada sistema. manifiesta claramente al ideal de un cosmopolitismo fundado en el derecho, e indica aun la manera ma, la justicia, con- de alcanzarlo, en el siguiente vincuLum societatis resisto al deseo de copiar: .or insigne la había pasaje que no «Todavía no estará segura la existencia los pueblos en una una constitución jurídica, es por este camino hasta que sobre los Estados particulares de perfecta en teoría, no iberg se ve llevado domine una organización y una federación de an República general todos los Estados, que mútuamente iblecida sobre la base ticen sus respectivas constituciones, se garany exista para las luchas entre los pueblos un Areópago ~el conceptokantiano general, compuesto p elemento la fuerza, todas las naciones civilizadas, que pueda dispo- p'e ner contra el Estado rebelde del poder de todos en la coacción por 1'- ~bleB las relaciones diferencial de las de los representantes de los demás Estados». Cuando a la ciencia jurídica llega el poderoso error. En Kant «la refuerzo del elemento tradicional representado ;podíaser fuente del por la dirección histórica, el resultado es idén- cum- tico, y Savigny declara que «por cima de las ; simple sanción del legislaciones particulares de los diversos pueblos ientemente de la se va formando entre las naciones civilizadas ! medio para el una comunidad de derecho que deriva del con- •• funa justicia que yo sentimiento y mutuo acuerdo en ciertos prin- ~ra el vocablo, y ese cipios jurídicos». 1 derecho creador y A su vez ¿no dice Spencer, hablando en ~er al mundo el bene- nombre del positivismo, que «vendrá un tiempo paz, hállanse también en que por virtud de la evolución y con el shellíng, con la sola progreso del altruísmo --------- ._-_._ el sentido social y moral _------21- __ J -la tan eficaz eu Ios individuos jusUcia-será que toda función de suprirnirse del poder gubernativo por supérflua»? la generosa previsión debe de inspirarnos se funda ción Es verdad del gran mucha habrá que sociólogo, confianza, en el dato de hecho de que la evolu- ha empezado prueba-¡oh ironía de las antiguas guerrero ya a cumplirse, como de los tiempos!-el sociedades lo tránsito y de tipo militar a los modernos Estados pacíficos e industriales. el campeón del materialismo, que asegura que «el hombre no debe por sí, sino por la humanidad; y como aspiración, servación luchar el Estado debe proponerse a la vez que la mejor posible, a Büchner cómo os responderá Ahora, se logrará que el milagro moral, conciliadora el interés general Tampoco de ser principio la justicia si preguntáis el derecho cohesivo, será obra de la en el ideal ... deja de ser idea coordinadora, ni porque uno y otra se hagan consistir se trate de la utilidad de la mayor parte, como -22- - en lo útil, J samiento al decirn~ que el origen del d~ deberá buscarse en .~ t: tades-consentimien puede dar origen a dependientes del dadero cuerpo civil, y ¿qué conllésa República del gén una más jU8ta, eq queréis, igualitaria .. quismo, sí, Senores' la cita, el anarquía cho a reclamar un .. ciencia. Oid a Godwin, a su significado de integración, y el individuali.tn. y ¿qué piensa: él de todos, y de la filosofía, que pierde 6fI según afirma de vi del egoísmo de cada uno con debe aspirar a educar el hombre nidad, condiciones al bien- ese bienestar, rés general 11 bien no más que en los esfuerzos para estar de la humanidad». cual sosti del . deben rivalizar que se oponen I entendido, omnipotente y de los pueblos; los obstáculos I número p08il de los individuos vencer y éstos mayor o' d ración de la justi con- la mayor independencia I I I I Igual porvenir risueño nos describe Büchner, dice Helvecio, I no pues que I ya «La ley suprema. estar uníversalsc « que la manera com mejor para el bíenesf ! comprende todos 108 ~ - ~ 'r~ ~ <. ./ ----_._--_. __ en los individuos LZ dice .... '- o de la mayor felicidad Helvecío, o interés general bien habrá mayor número posible la»? Es verdad que entendido, cual sostiene . gubernativo gran sociólogo, nidad, según de que la evolu- afirma Stuart y el individualismo cumplirse, como lo tiempos!-el tránsito s de tipo militar o del inte- Bentham, rés general y bien entendido de toda la huma- no confianza, pues que 11,0 samiento al decirnos que el origen y Estados pacíficos e deberá Mill. ¿no expresa igual penpor boca del derecho buscarse de describe Büchner, el acuerdo de las volun- en que «la fuerza sólo tades-consentimiento-por dependientes mo, que asegura que llar por sí, sino por ración ~ que la mejor con- República tor independencia de omnipotente y éstos no condiciones equitativa, igualitaria y ¿qué piensa sí, Señores, oísmo de cada uno con cho a reclamar que también un puesto ciencia. « La ley suprema l coordinadora, porque nsistir i en lo útil, ya la mayor parte, como tiene dere- en el estadio de la erecho ni El anar- y no os cause extrañeza Oid a Godwin, el precursor: ), de integración, o, si de la riqueza. ombre en el ideal ... su significado las mediante el anarquismo? la cita, el anarquismo y de la filosofía, que a mejorar proporcionada, distribución lagro será obra de la 3, por el derecho de vida de los hombres queréis, quismo, humano del Estado, aplicado e se oponen al bienél la paz en la establecer del género una más justa, .ará ese bienestar, y político»? de la justicia en los esfuerzos para Ahora, si preguntáis a un ver- y ¿qué confiésa el socialismo? Que es aspi- ado debe proponerse pueblos; de esclavos del mismo amo, jamás cuerpo civil dadero Rousseau y de las sociedades puede dar origen a una agregación lOS del estar universal». que la manera para el hombre es el bien«El deber cosa como un ser puede emplearse mejor para el bienestar comprende no es otra de todos». «La justicia todos los deberes morales». «Si tal -23- ~ o •• palabra debe tener es justo algún sentido, que yo contribuya bienestar de todos». de aumentar nables, más fuerte es tal deseo, es la virtud; sentimiento es una -disposición que otro realiza la perfección nos vuelve sabio no busca bienestar universal». ambición le mueven, ni el conquistar la ley de mi con_ «Ni el el samente lo que felices persona humanl~; peto que él a más que el justicia es supe'. egoísmo ni la espera, paraob; respeto de )a honores, No conoce la envi- el reposo el hecho que él alcanza vamen te lo que tiene Estos son meros: mismos». dia. Lo que le arrebata de considerar d de su fuerza, de ese tan ni el conseguir la gloria. de qué le debo tanto en la cual como el bien hecho por nosotros «El verdadero petar a mi próji es el deseo de todos los seres razo- más grande bien «Yo debo rés' lo más posible al «La virtud la dicha y tanto es sólo éste: • enemigo, lo que' del alma es que alcanzar, q-- de la guerra; relatí- asesino a qulen: y no el de su cuslídad, ;íj " considerar lo que los otros han obligado a trabajar por pero el bien es un Siéntese todos; otro cualquiera so siente lo realiza, decaído. colaborador, fin absoluto, Considera de en mi prójimo, y si raleza a cada uno como el decálogo; es nuestra yo espero de él ", cualidad de hom " y iqué es la justicia ley suprema». para es el respeto, y recíprocamente humana, «La justicia es) Proudhon'? las sociedades, el " espontáneamente garantizado, en cualquiera do político, el p : de la transacciones. persona y en cualquiera circunstancia en que se halle com- prometida, y cualquiera que sea el riesgo a que nos exponga DO r: «La justicia «La justicia o los e su buey, ni su a nadie como rival». exclama: dignidad el bien exista un dereo- no por ello el sabio y Proudhon sentido alcanzado. Na más que en virtud' " cacíón de la justicl ley; al contrario, una declaración y su defensa». _.J -244 ;;, ••• d _---_/ ~....•• ! ,--- l r - ~ <, <. .> -- .ntido, es sólo éste: «( Yo W"'_4 .-...._ debo respetar, petar a mi prójimo virtud la ley de mi conciencia. Idos los seres razo- '" ' • 0 • • de su fuerza, Estos samente lo que hay persona humana. tan felices son meros aeciden tes exteriores, de no tEn consideración ) busca más que el justicia es superior al in terés. i el egoísmo ni la espera, para obrar, a la recíproca; 1 conseguir honores, respeto de la , No conoce la envi- enemigo, ,1 reposo del alma es de la guerra; ue él alcanza relati- asesino y no el alcanzado. a quien de hombre, en mi prójimo, fin absoluto, y si raleza o los su buey, lera a cada uno como el decálogo; rival». ra ley suprema». en el hasta en el decaído hace Lo que yo que respeto de la natu- de la fortuna; de él a cambio el derecho lo que no es siquiera no quiere haber no son los dones no es como dice la salvación de 10 mío: que es su de hombre». «La justicia para Proudhon? No, la un ni su asno, ni su criado, yo espero cualidad penal. encantos del res- aún ese respeto por la La justicia humana matamos exista un derecho :, no por ello el sabio lO dignidad quiere en me devuelve? lo que hace que exista de su cualidad )ajar por el bien de ID él a su vez preci- respetable peto que ~tros han tal es Y ¿en consideración osotros mismos». alcanzar, res- de su talen to, de su riqueza'? ucíón en la cual el le _ hacer como a mí mismo: la perfección de ese vuelve • de qué le debo este respeto? ¿En consideración es tal deseo, tanto i __ y, si puedo, a lo más posible al es el deseo o_~ ••• las sociedades, es el astro central que gobierna el polo sobre el cual gira el mun- lato, espontáneamente do político, el principio y la regla de todas las ~ garantizado, transacciones. Nada se hace entre los hombres de la alquiera persona Y en más que en virtud del derecho; en que se halle com- cación de la justicia. [ua sea el riesgo a que ley; al contrario, '. una declaración I ._., L . . La justicia nada sin la invono es obra de la la ley no es nunca más que y una aplicación de lo justo». _ -254 i , ' _.__..__._-~------ ----- -_.._~--_.-~_._-------_. I «Es privilegio de la justicia que la fe que I adquirir. Pero no . ! tomara tal molestí ~ inspira sea inquebrantable I ! Y que no pueda ser negada ni recusada dogmáticamente. " 1 Con ella, estoy Todos los concluyente la p pueblos la invocan, y hasta cuando es violada por la razón de Estado, ésta pretende apoyarse en ella; el excepticismo se disimula ante ella; la ironía no tiene poder más que en su nombre; Mas, ya es ti .~ .extremo, polo 0''0 y el crimen y la hipocresía la rinden homenaje. Si la libertad no es una vana palabra, no obra enunciado de aq:, ni funciona más que para el servicio del dere- gido para mi cho; y a pesar de sus rebeldías la libertad no podido sustraer la maldice». «Todo-lo que la sabiduría humana ha enseñado dominante. de más razonable concerniente Hasta aquí a la justicia se encierra en este adagio famoso: haz a los demás lo que tu quieras que a tí se te haga; no hagas a los otros lo que no la idea del el preciso baeer'-la foerza. quieras que a tí te hagan». y a la verdad, Señoras y Señores, y ahora ¿Qué es la Si no ab no es Proudhon quien os habla; aun cuando sea un impío, un revolucionario, lancia ante • ',~ un hombre, en fin, que íué el primero que a sí mismo se llamó anarquista quien os dice cuanto acabo de leeros, creed le, y no lo dudéis; la justicia no es, ni puede ser, más que eso. Cabría multiplicar hasta el infinito estas citas y referencias, y cada uno de vosotros podría recoger otras muchas, ojeando no más las páginas de cualquier sencillo manual de Historia de la Filosofía del derecho, corno yo lo hice, bien sabe Dios que no por prurito o vano alarde de una erudición harto fácil de --------~----_.-. ~,-, -26- ,)1 _----_/ ~.... I diciendo que sentido entre creería baberlo que tratándose siempre por espiritual, sean hombres, a q 8U inteligencia." sus acciones, eI,·~ valer o hacer se ..... para obligarles a - .~ .t'~ <, ~ adquirir. istícia que la fe que Pero no aconsejaría a ninguno que se tomara tal molestia porque su labor sería inútil. y que no pueda ser .ícamente. Todos los Con ella, estoy Lacuando es violada concluyente seguro, la prueba no lograría hacer más que acabo de ofreceros. La pretende apoyarse disimula ante ella; ti is que en su nombre; L Mas, ya es tiempo la rinden homenaje. de que os hable del otro ana palabra, no obra extremo, polo opuesto el servicio del dere- enunciado de aquel tema que yo hubiera beldías la libertad no gido mi la sabiduría humana podido sustraerme zonable concerníen te dominante. para y segundo humilde ensayo, a no a la influencia del ele- haber de la actualidad Hasta aquí ha sido objeto de consideración n este adagio famoso: tu quieras que a tí la idea los otros lo que no preciso hacer y la justicia; del derecho objeto de cuestión ahora es el hecho de la fuerza. su». L8 Y Señores, y ahora ¿Qué es la fuerza? 18 habla; aun cuando Si no abrigara tcionario, un hombre, lancia sro que a sí mismo se diciendo os dice cuanto acabo sentido vosotros, que es entre que tratándose ás que eso. iasta el infinito an te el temor de pecar de petu- los una yo estas palabra hombres. la fuerza que no tiene Y al decir esto, siempre de seres racionales, por motivos sada uno de vosotros espiritual, chas, ojeando no más hombres, a quienes Ir sencillo manual su inteligencia de sean buenos espontáneos, y libertad es absurdo que no por prurito valer servir de o hacer para obligarles de índole sólo en relación sus acciones, o que obran o malos, tratándose del derecho, como yo harto fácil definiría creería haberlo dicho todo. Por que es 10 cierto, lo dudéis; la justicia idicién término causal de de les son atribuibles y es inútil hacer la fuerza, la violencia, a realizar actos suyos. -27- Por esto se dice que sólo cuando la bestia, el bruto se sobrepone al hombre y éste obra por impulsor instinto inconsciente, lo que equi- vale a afirmar que no obra como hombre; sólo entonces tiene eficacia la fuerza ... la fuerza bruta de que el vulgo, más psicólogo de lo que parece y, sobre todo, más psicólogo que " • algunos pensadores, nos habla, expresando en esa frase, sin saberlo, una gran verdad moral . Sí, habré de repetirlo, la fuerza es un vocablo que carece de sentido en la valoración moral de la conducta humana. Haced que los hombres obren a la fuerza, movidos por la violencia que sobre ellos ejercéis y obtendréis un resultado, un simple efecto, útil o dañoso, feliz o desgraciado, pero, al fin, un mero accidente que no podréis calificar, en ningún caso, de justo y bueno o de injusto y malo. El daño material causado por el hombre criminal sólo es injusticia cuando nace o deriva de una voluntad culpable, y no es culpable la voluntad que obra violentada por la fuerza. Asimismo la represión no es más que una fuerza que se opone a otra fuerza, y sólo vale, en justicia, como pena cuando es motivo moral de que la voluntad rinda homenaje al derecho. y esto es así, porque para los hombres, seres libres, la ley, la regla sólo expresa un orden de necesidad moral, no un sistema físico, mecánico, de fuerzas. y el derecho es orden moral. -98- ,/ --- " . -.~ "7' ~ // ;~ o cuando la bestia, Si digo que tengo ·derecho afirmo en mí un .ombre y éste obra poder espiritual, la razón que me asiste, y aun sciente, 10 que equi- cuando disponga de la fuerza como hombre; sólo para hacer triunfar mi derecho, bien sé y bien fuerza... la fuerza distingo que mi razón no está en mi fuerza. El lás psicólogo de 10 más psicólogo que o poder material derecho, me dice mi conciencia, es la razón, pero la razón no es la fuerza. abla, expresando en gran verdad moral. fuerza es un voca- ¿Creeréis, señores, que al hablar de este modo me entretengo en un juego ocioso de lo en la valoración palabras, y que es perder el tiempo, si no es lana. vácua pretensión obren a la fuerza, .e sobre ellos ejercéis un simple efecto, útil do, pero, al fin, un ~iscalificar, en nin- frases, o lastimoso empeño de hacer mi intento de demostrar una verdad de la cual, diréis, todos estamos convencidos? Si así fuera, juzgaríais mal de mí; pero además no juzgaríais con acierto. Porque la opinión no es unánime. Hay o de injusto y malo. una nota discordante y la dan los que, en el o por el hombre cri- paroxismo de su demencia o de su soberbia, iando nace o deriva llegan con Treitschke, y no es culpable la que es el jefe carac- terizado de la escuela, a la afirmación de que tada por la fuerza. «la guerra debe ser considerada de institución ~más que una fuerza tlioirui», , y sólo vale, en juses motivo moral de Antes de la guerra actual pudo verse con desdén y hasta con desprecio una teoría que nos habla de «un derecho de la fuerza» fundado ienaje al derecho. para los hombres, en la necesidad del engrandecimiento de cier- gla sólo expresa un tos pueblos o naciones a costa de la vida de no un sistema físico, otros pueblos; pero, hoy, en plena catástrofe y ante la magnitud siniestra moral. ---_._--_. L __ del daño, esa doctrina causa espanto. ._--. -29- J Nada exagero. Aprecíadlo sino vosotros y más tarde 1 mismos. es la evocación d Aun a riesgo de fatigaros sando de vuestra varios y siempre abu- compendia toda st voy a leeros condescendencia, bre máxima: textos escogidos al azar y los más de ellos de un libro que ha todavía conserva logrado alcanzar, en el país donde «'I'odo está pe y Ahora un par se publicó el privllegio, bien triste en este caso, primero, perturbadora de una gran popularidad. quien dice: los pueblos, pues ( «En el mundo del hombre como en el mundo cho... inofensiva lo que reina es la fuerza y no el dereEl derecho no es más que del poder (de la puissance) arrollo, la medida no significa, como a mí el derecho? Yo no en las institucion por la fuerza, lo poseo y gozo de ello. Renuncio Algo parecido de que no puedo voy a manera mi pretendido criptible». derecho, tasma». «Aquel Spinoza y Hegel, con cabría retrotraer e: de las leyes». a aquel ! hace suya, tendrá además el derecho la fuerza I L. derecho; ya que un fan- poder absolsu» del está por rano que está «Yo creo que la tierra que sabe tomarla Si se apodera no solamente de poseería». de la fuerza para los súbditos, recho que les im1 de ella y la que «siendo prod: el bien y el mal «Yo tengo son maneras de pE el en mediante para hacerlo todo». . . . ..__-1 ~I eA 1 ~: ___ 1 la comp derecho y la fue -30- ,~ PO] la tierra sino _______ _ I o que no derecho de hacerlo todo, desde el momento que dispongo de la fuerza o de (une es el cetro ridículo que tiene se la deja arrebatar. I y no impres- que nos ha gratificado I I con mi derecho «El derecho con encima apoderarme de consuelo a pavonearme marotte) pertenece i falsa y torpe aplf de él. Lo que puedo adquirir a aquello ! más o n citados, una críti, «¿Qué me importa necesidad de las de filosofía moral, de cada uno». y luego Stirner: tengo de . para el orden res Es, ya, Schopenhauer animal 1 La doctrina, - --. -'l I P l( 222l4IIIiiiiijI '~ ~. / <. sdlo sino vosotros //. y más tarde es la evocación .ros y siempre abu- .dencia, voy a leeros compendia y en este caso, del amoralismo toda su doctrina Ahora La doctrina, perturbadora hasta aquí, re como en el mundo inofensiva fuerza y no el dere- arrollo, más que la medida de filosofía moral, jurídica 'e) de cada uno». no significa, más o menos en las instituciones aplicación Algo parecido lo apoderarrne y no Spinoza lo a pavonearme con cabría retrotraer 1 mi de la fuerza gratificado un fan- decirse a quienes para los súbditos, está por encima mediante recho que smente la tierra sino el bien y el mal no existen serla». son maneras lesde el momento el en para hacerlo todo». de Hobbes, mediante en el sobe- el desostiene todo por la necesidad, de pensar por sí, sino que los hombres la comparación, derecho y la fuerza, de nos habla de un que les impone; y el segundo producido modo generadora la fuerza, apodera de ella y la tengo el derecho de toda ley y crea e tomarla o que no «siendo la de un derecho poder absoluto del Estado encarnado que contra en cierto fuerza ya que el primero :0 creo que « Yo en los autores existentes. o de una rano si es que dirigida esa concepción ~ la fuerza está por la tierra de un sistema que recibe pudiera y Hegel, al des- o social, crítica acerba ) que puedo adquirir derecho; lógico, como acaso sucede falsa y torpe el cetro ridículo (une en la región de las ideas y corresponde [ el derecho? Yo no de ello. Renuncio no es peligrosa pues que se mantiene una y real de la vida y la paz entre los pueblos, citados, con ser nociva de los espíritus, quien dice: derecho ímpres- en aquella su céle- un paréntesis. para el orden }ZO trascendental, «Todo está permitido». LÍs donde se publicó 1 triste cuyo solo nombre bre máxima: azar y los más de logrado alcanzar, Nietzsche, que crean y, análogamente, frente el a la naturaleza, -31- son una hasta misma donde mando, el espíritu con sobre ha concluido el tercero todos por esto El peligro real más que proporciones cuand la guerra como vais a ver, dE al terreno político y y como una necesi- dad para que el pueblo investido del mundo tiempo cuyo por tanto, «una fuerza moralizadora universal. que «el pueblo los demás siendo, na, como ya se hf afir- del mundo, tiene y no tienen razón de medio), sociedad con sus se: se extiende llega el poder del hombre»; por último, investido derecho cosa y el primero pueda predominar justificación racione con el espíritu sobre todos dores, toma cuerpo los bres de Estado, dets demás). Pero en Hobbes, impresionado y las guerras cordias civiles sistema de fuerza no es más que un recurso, término al estado que expone, quizá, y por eso Hobbes «Todos los grand en que, vivirían; no quería la tiranía por sí misma, sino como un en todo caso la limita, poder absoluto utilidad común, seguir qeneris humani, y estableciendo y soberano Ved la observac de otro de lucha la pravitas pecado se consuma puede poner modo, los hombres remedio contra y Hegel, cínicamente lo que se explican de los principios que forman la base de sus generales de filosofía; pero ni Spinoza deja de comprender y la mayor I exigencia lógica como al hombre gran P' de todo el Derecho sus concepciones enseña y si este Treitschke, a la I sistemas hombres, Conocido este ju salus populi suprema lex esto. respectivos de un cier la recta razón y tener siempre por guía la máxima: una pruebas está justificado). que el debe proponerse en sus mandatos A su vez en Spinoza que «la razón que la fuerza utilidad la encuentra más gran~e éste e~ tratados ! ! I I I I1 internacion Oidle sobre este 1 «Los tratados no relativo y momentá que existe entre las pueblos; desde que pueblo o los pueblos I._----------------3:?5 1/ ( I .~C'A) ! S< frase de la Epistol de su época, ese él, el único-que un medio-según Es entonces, por las dis- -~ ~ 'j. C7 // I~ .rímero se extiende sociedad con sus semejantes», ni a Hegel repug- , del hombre»; añr- na, como ya se ha dicho, la idea de una paz .ero que (el pueblo universal. del mundo, tiene iemás cuyo El peligro tiempo por esto más que proporciones real existe y graves la teoría de 13. fuerza pasa, cuando ior tanto, la guerra como vais a ver, del campo r al terre-no político y aquí, como una necesi- adquiere filosófico jurídico. previa una supuesta sudo con el espíritu justificación racional, que es labor de los pensa- inar sobre todos dores, toma cuerpo en el cerebro de los hom- los bres de Estado, determinándoles sionado por las dís- Es entonces, 'as de su época, ese frase de la Epístola .ás que un recurso, pecado se consuma en que, de otro que expone, iisma, sino como un generis humani, y stableciendo que el debe proponerse sus mandatos pruebas por guía la máxima: hombres, r Hegel, se explican y si este desprecio Treitschke y políticos dan cínico de los no es excesivo, os explicaréis gran cínicamente lo que es fundamento tratados pensador Oidle sobre internacional desprecia y contenido público: los este punto: «Los tratados relativo .nder que «la razón que existe no tienen y momentáneo... entre pueblos; desde pueblo político, por qué in ternacionales. iles de filosofía; pero en la desprecio Treitschke, nan la base de sus éste el un consejo: pensadores Conocido este juicio. na exigencia lógica fuerza más grande «cuando la muerte» . que hace como de un cierto de todo el Derecho sto. icuentra quizá, con una está justíficado». la a la y engendra «Todos los grandes 1; y por eso Hobbes y lo diré de Santiago: Ved la observación ea-que puede poner la Señores, a la acción. más que un valor Marcan las fuerzas de dos o varios que esta relación o los pueblos la relación más débiles cambia, si el no satisfacen --~---------_._-------------335 j de buen grado las exigencias del más fuerte, el mejoramiento de la su proceso está juzgado: consiguiente de toda v es la guerra». «Pero no es la gue «La guerra que no será nunca suprimida ni reemplazada sidad biológica, sino por los veredictos de los tribu- nales in ternacíonales ... » porque «Dios cuidará moral, y como tal, un fa de que aparezca siempre de nuevo como una civllización»: temible medicina para el linaje humano». una comunidad moral a «Siempre han sido tiempos porque cc naturaleza funciones J de debilidad, vulgaridad y agotamien to aquellos en que se ha del género humano», s acariciado el sueño de la paz perpetua». esfuerza en ensanchar esta doctrina es decir, sólo «cuando de cínico desprecio de los hombres y del derecho ta» podrá «alcanzar sus no parece que rebasa la línea de un justo come- «Pero cuando el Estadc dimiento. to de poder y retrocer Pero todavía, en Treitschke, Es en Bernhardí, quier contienda armar el discípulo aventajado, donde la teoría, perdido todo pudor, viene a que el progreso siga i ofrecérsenos, quiere ser, pero no sier desnuda y provocativa, con el a ser» ... «entonces tod, mayor descaro. La fuerza, nos dice este escritor, es el «más decen dentro de tal E poderoso acicate del progreso en lo que respecta cercenadas sus aspirac a la cultura y al poder), «es no sólo un ele- amplios puntos de visu mento necesario en la vida de los pueblos, sino rables en que se arras también un factor indispensable de la civiliza- ños Estados prueban s ción, y, sin duda, la manifestación más elevada titud de nuestros juicic de vitalidad y energía de las naciones verdade- igual maldición pesa tl ramen te civilizadas). potencia que reduce BU Porque «la guerra es, en primer lugar, una «La guerra es, en necesidad biológica; un elemento regulador de mayor excitador de vid~ la vida de la humanidad, del cual no se puede gía que se conoce en 1 prescindir» un dad), y «hace efectiva11 enfermizo, incompatible con la naturaleza humana. ya que «sin él obtendríamos desenvolvimiento , ; -34- A ._. _ - 'r/ ~ reías del más fuerte. el mejoramien to de la especie humana es la guerra». consiguiente erá nunca suprimida «Pero de toda verdadera civilización». no es la guerra solamente biológica, sidad porque « Dios cuidará moral, y como tal, un factor imprescindible civilización»; linaje humano). una comunidad naturaleza iempos de debilidad, aquellos en que se ha también una redíctos de los tribu- de nuevo como una sino y por porque concebido una nece- exigencia de la el Estado «como moral a la cual se imponen por su funciones positivas del género humano», en la educación sólo cuando el Estado «se a paz perpetua). esfuerza en ensanchar la esfera de su poder», tsohke, esta doctrina es decir, sólo «cuando el poder político aumen- hombres y del derecho ta) podrá «alcanzar sus grandes fines morales». [lea de un justo come- «Pero cuando el Estado renuncia a todo aumen- to de poder discípulo aventajado, todo pudor, viene provocativa, con a el y retrocede quier contienda que el progreso armada «más ante cual- que se requiera siga su marcha; cuando decen dentro todos los ciudadanos de tal Estado; , «es no sólo un ele- amplios puntos de vista. Las condiciones la de los pueblos, sino rables ensable de la civiliza- ños Estados iífestación más elevada titud de nuestros las naciones v erdade- igual maldición potencia slemento regulador de del cual no se puede él obtendríamos un Lizo,incompatible con «La sus aspiraciones todos encuentran cercenadas una sólo langui- 'eso en lo que respecta en primer lugar, para quiere ser, pero no siente deseo alguno de llegar a ser» ... «entonces te escritor, es el intimidado en que se arrastra prueban y desaparecen mise- la vida de los peque- suficientemente juicios, los la exac- debiendo advertir pesa también que sobre toda gran que reduce sus aspiraciones). guerra es, en oposición mayor excitador a la paz, el de vida y fomentador de ener- gía que se conoce en la historia de la humanidad», y «hace efectiva la más noble actuación la naturaleza de humana •. -35- j A este propósito se recuerda el Grande reconoce cedora proporciona a todas fructífero, en ella cuando dice: las virtudes la grandeza za de espíritu, virtudes» brillar del ánimo, de alma, la benignidad; la ocasión pueden y entereza la constancia ¡ Ii ,I la noble- cada de ejercitar I «La guerra el campo más pues a cada momento la compasión, ofrece la acción ennoble- también de la guerra», I que «Federico alguna , ; instante de estas Me límltaré a n tíco, que recojo dI importa de que ej~ Es el que eserí familia distinguida principios; sólida instrucción, dulce, apacible, Oid su confesíé: [Pueden brillar!. .. Pero no brillan, digo yo, ... porque es imposible que ninguna virtud «Yo nunca me brille soy, ni capaz de hl en la guerra. «El otro día hf trinchera. habíame prometido Señores, ponde la fría y serena al mero expositor conservar actitud en que corres- de ideas... Pero es talla paradoja, y a los más del corazón humano, sublevarme duda, talla nobles sentímíentos que no puedo y protestar, toda conciencia como honrada menos hombres protestará, sin y todo espí- ritu sano. /re ! que no quedaban, siendo! aniquilada por el artillería, al vernO! j y cayendo ante ni brazos tendidos al y suplicante del qu exclamaron. ¡Camal [Hablar de compasión en la guerra! ¿Sería I " ,- . de locos, miga y logramos, y omitir falta de respeto Cuandc corrimos todo comentario. a la virtud COI llama un hombre 1 . mi relato tiene f oportuno repetir aquí aquella manos y... nos re~ frase «Entre nosotros atrevida de Victor Hugo, que yo no subscribo, Como lobos carni y que un escritor califica de «grito ellos, yo el primen de cosmopoli- allí perecieron, cosl triunfante, aunque tismo»: «El héroe del asesino) 1 -36- moderno exagerado, no es más que una variedad cuartel, guerra. piedad n I .a. C7 '1' t r ,~ ------rda que «Federico ..•.... _- .... - .... _ ...._ ..- Me limitaré la acción ennoble- tico, ) dice: «La guerra importa ides el campo más // a referiros sólo un hecho, que recojo de la carta autén- de un soldado, no de que ejército. Es el que escribe mto pueden brillar familia distinguida tereza del ánimo, principios; de alma, la noble- sólida instrucción, lad; cada instante dulce, apacible, ar alguna de estas llama un sujeto y educado tiene carrera honorable, en los mejores civil, in teligencia y su carácter compasivo; de y es excelente, es, en fin, lo que se un hombre bueno y un buen cristiano. Oid su confesión: ) brillan, digo yo, ... iguna virtud brille «Yo nunca me hubiera soy, ni capaz de hacer lo que he hecho. «El otro día hemos trinchera. etído conservar ictítud en que corres- ~ ideas... y omitir Cuando corrimos tomado, locos, frenéticos, a la posición hombres podido que no habían aniquilada por el fuego obles sen timien tos artillería, al vemos llegar ) puedo menos y cayendo sin rada y todo espí- la guerra! aquí aquella frase ante brazos tendidos el resto nosotros de una mortífero y allí compañía de nuestra soltaron sus armas de rodillas, con los humilde y suplicante del que reza una plegaria: ¡Gracia!, exclamaron. [Camaradas, manos «Entre nosotros ) califica de «grito ellos, yo el primero, do, de cosmopolí- allí perecieron, cuartel, somos vuestros ... her- y ... nos rendimos!. .. Como que una variedad huír al cielo, en la actitud e yo no subscribo, ¡ ene- en ella. Diez y seis Ila falta de respeto protestará, una miga y logramos penetrar siendo IIlO al asalto, se dió la voz de ataque quedaban, de creído ser ... lo que lobos nadie carniceros piedad vaciló un momento. nos lanzamos y, en un instante ... todos cosidos a bayonetazos. ni sobre compasión... No hubo Esto es la guerra. -:>7- j ---------------- «¿Hicimos malo cia me formulo, ruborizado, no sé qué responder. mos tres días de fatiga, ellos, que días, habían cuartel, llegando lo mismo, en su crueldad a nuestros ellos y Por lo demás, mi con «De lo que rra procedimos y según ra se hace, siempre ran creo estar seguro, en la guerra, la guerra... que es, después se ha los que hecho, hablan abominables. por la gueque aho- y continúo el de todo, la que digan lo que de humanitarismo La consecuenci quie- y moral de la guei en la aspiran a llegar a guerra. «Y de lo que estoy convencido de benignidad asfixiantes, líquidos monstruosos, destruír todo un pueblo!. .. bombardean, el empleo cho de conquista» capaces, uno «No está el derech de del vencedor»; y pro- inflamables yectiles ¡Hablar en sólo, de y devastan indefensas o echan a pique cualquiera que sea el pretexto, grandes mercantes, repletos de viajeros neutrales lo menos, no combatientes!. TIENE LA FUERZA DERECHO; de modo alevoso, POR buques EL CUYAS o, por PRE .. , -38- CASOS TIENE o PAB LA FUERZA ES ciudades --- -- --_._-~-----_._----.-! y TALES LO QUE POSEE de grandeza de alma en los que incendian cumj y «materiales), es veces, el mismo caso» ... cuantas se me presentara ¡Hablar dos-puedan es de que yo ... volvería a hacer lo mismo ... tantas gases hágala qu que sean sus proc es de que la guerra se e protesta guerra, todo ... nosotros como ejem] mentos. no dar pero, ejére los usos de la gu a la barbarie heridos... a ningún ni a ningún y trastor- el día antes, hecho ticular sin des- el sueño ... ; es también, muchos de rematar la sed, y conste, Sei que llevába- en marcha I mueca, a tanta bt y pregunta extenuados por el hambre, verdad esta Es verdad canso; y nos hallábamos nados [No, la verdad hicimos bien? Con frecuen- y LA e ADECUADO SOLUCIONES JUSTAS, DESDE A I~/ <. C7 '1' // -. ¡No, la verdad es que no hay derecho a tanta ,n? Con frecuensta pregun ta y mueca, ad que llevaba- a tanta y conste, narcha sin des- ticular uados y trastor- ni a ningún el sueño .. .; es el día an tes, y ) mismo, no dar sangrienta! Señores, a ningún que no aludo país actualmente ejército. ellos como ejemplo en par- en guerra Me circunscribo los usos de la guerra actual, para a citar y a servirme reforzar de mis argu- podido notar, mentos. lad a la barbarie dos.. , pero, con burla Por lo demás, mi protesta guerra, se hágala guro, es de que que sean erra, por la gue- abominables. como habréis eleva quien en general la haga, sus procedimientos contra la y cualesquiera para mí siempre guerra que ahoI de todo, la que y continúo in lo que quie- umitarismo en la La consecuencia y moral aspiran vencido es de que mOdO tantas veces, exponiendo la doctrina. de esa necesidad de la guerra para que los Estados que a llegar a ser-a dos-puedan cumplir y «materiales», sus costa de otros altos cho en el empleo de «No está el derecho de parte de conquista» del vencedor»; ces, uno sólo, TALES CASOS TIENE TIENE LA FUERZA ~ alma en los que LO QUE POSEE devastan ciudades LA FUERZA o de un (dere- que se proclama RAZÓN diciendo: del poseedor sino y se justifica inflamables y pro- por que: Y DERECHO NECESARIA Esta- morales fines es la «existencia» mismo caso»... de biológica PARA «EN EL QUE CONSERVAR PARA HACER NUEVAS CONQUISTAS. ES A LA VEZ EL SUPREMO , de modo alevoso, DERECHO; to, grandes buques POR EL . ADECUADO ros neutrales o, por CUYAS SOLUCIONES SON, AL MISblO TIEMPO, SIEM- t ••• PRE JUSTAS, DESDE EL PUNTO DE VISTA BIOLÓGICO, y LA CONTIENDA .lURÍDICA SE DECIDE DINAMÓMETlW: LA GUERRA; -3g- j ~ r , ¡-- ._------_ .. PUESTO QUE DIlUNAN LAS - ------ Declaro, Señc DE LA ESENCIA MISMA DE ceptos no están COSAS». dimiento. A partir de aquí la teoría, en el delirio Por que ino s de grandezas que sueña para el Estado, cae en lo!' pueblos están en el mayor desenfreno, y no respeta ni a la y los Estados pO misma ley de Dios. que influyan en e Ahora se trata de ofender a la moral cris- men te en el con, tiana, y ello se intenta faltando a la verdad y sin reparar en contradicciones. y ¿Qué im- a la masa ignara y decí- dirla a reconocer y aceptar, consecuencias, el principio aspectos? Lo que hay es con todas sus idolátrico es cier lo social o es, portan la contradicción y la mentira? Lo esencial es sugestionar iDO es preciso ser lÓf de la ejército. fuerza como única base y forma de consti- y idónde haU tución, y como único modo de desenvolvi- afirmación: aLa n miento, iba a decir de los, pero diré mejor, a amar hasta a D1 de el Estado. el concepto de 11 ¿Cómo sino os explicáis que se afirme: iCómopuede «(Verdad es que la moral cristiana se basa en ningún tiempo la ley del amor»: «Ama a Dios sobre todas combate que la e las cosas y al prójimo como a tí mismo»; y Cierto que a a continuación se añada: «Pero esta ley no lucha moral es puede servir de norma en las relaciones entre los Estados, I puesto que si se aplicara a la política internacional conduciría al conflicto entre distintos deberes»'? entonces una di mala fe y para equívoco-comba¡ cha material, arn y ¿cómo comprender que la moral cristiana religión cristiana pueda ser, como se dice, «personal y social», Por mi parte 1 y al mismo tiempo «y por su misma esencia de un equívoco, I nunca podrá ser política»? L .__ ---------- ------- J ---- -40- ~I tico ya usado o - :r ESENCIA MISMA DE Declaro, Señores, ceptos no están lo!' pueblos o respeta ni a la al alcance están y los Estados elevados con- de mi pobre enten- mente Jdo a Ja verdad constituidos en cada miembro influirán igual- en el conjunto»? lo social ~ntira? Lo esen- cómo todas las causas y ¿no es cierto que lo político ones. ¿Qué im- « ... por individuos por sociedades, que influyan a la moral cris- o es, por lo menos, equivale uno a de sus aspectos? ignara y deci- Lo que hay es que para discurrir 8US es preciso la ser lógico, con lógica no basta ser general de ejército. 'ma de consti- y ¿dónde hallar íe desenvolvi_ afirmación: ro diré mejor, el concepto le se anrme: a nuestros s sobre todas y ~ laciones entre 1 1# combate que la cristiana»? --' aplicara a la -- al conflicto ..,. • ira! cristiana al y social», lucha mala ha una de dos cha material, tico ya usado más se añade: (ILa esencia». Pero o con notoria al lector se apela al es absurdo invocar para justificar Por mi parte me inclino de un equívoco, de (lucha moral) y guerra (lu- armada)-o cristiana cosas: engañar equívoco-combate srna esencia religión es su verdadera fe y para religión habido que a continuación moral entonces no descarta que se diga que «en tolerarse tiempo Cierto que en la que nos enseña enemigos, ningún esta ley no falsedad de la enemistad»? ¿Cómo puede na se basa en mayor (ILa moral cristiana a amar hasta tí mismo»; tan Por que ¿no se nos dijo antes que el Estado, cae en lolátrico de que dimiento. ría, en el delirio con todas .", la guerra. a creer que se trata que es el torpe recurso otra la vez por el autor, dialéccuando, 2 -41- ~ j .mer' choque eon prl ' para demostrar la necesidad biológica de la gue- mar de sangre y 1 Declaro, Señort rra, invoca la ley de «la lucha por la existencia» que «es, en la Naturaleza, arrollo saludable), lo declara, la base de todo des- a sabíendas, nuos que abrigaro' ~H decepdón ¡ pues él mismo de que <da lucha y la guerra 'lCl no son mi error de ea idén ticas». y la soberbia un Si me preguntáis, ahora, a qué extremo duce la teoría que, en los pasajes leeros, se presenta con- Comenzada la que acabo de que existen homt con tanta crudeza, os contes- dades 'sv ía que toa . ", taré en dos palabras. A proclamar «en voz alta y resueltamente) que «el promover tituye la guerra no solamente un derecho y político sino también del hombre con confianza, de Estado); la acción, ya que pendencia y de ambición « ..• Rheinold SE «La guerra Los unos ascil se pasará a esta prueba e8 El. profesor de inde- dominadora todavía cons- ya esperar, el altivo espíritu de la raza en el corazón Heidelberg, d, tlE\ destin' del pueblo ... ) demasiado in La consecuencia No hacía paso se dió, estaba descartada. falta más porque quien, no recordó donde «la necesidad original a Bismarck, en otra el poder de la Prusia pisotear la a no conoce que no son e y Max.in de Bethmann antes de proferirla, tión, yo no conozco alta, para qr que dar un paso, y el ley», según la expresión Hollweg, SOl cho de La fuer, el deber moral que del pensamiento germánica ... alienta tal nomb sin duda frase: «¿De qu «Allí se halla en cues- ley). se tratara ( I ~ con seguir las grande el tribuna Hubiérase creído que la brutal fuerza, llevada a la práctica, de la prueba -42- teoría no resistiría y, puesta en acción, de la al peso fenecería al en el caSI Pregunta ~ I ~ 'j/ <. ----_._-._ .. tiea de la gue- primer choque con la realidad, ahogada en un la existencia» mar de sangre y lágrimas. , de todo desmes Declaro, Señores, que yo fui de los ingé- él mismo nuos que abrigaron g'Uerrano son tal esperanza. Mi decepción es grande, j extremo con- tan grande como mi error de cálculo al ponderar la ambición y la soberbia humanas. que acabo de Comenzada la guerra y en plena guerra veo za, os contes- que existen hombres, intelectuales, y habrá que darles tal nombre puesto que son profesores, sueltamente» . que todavía sostienen ¡mente cons- y defienden el dere- cho de la fuerza. deber moral Rheinold Seeberg escribe: ya esperar, «La guerra es la gran prueba de los pueblos. o se pasará a Los unos ascienden, itu de ¡nde- los otros descienden. Y esta prueba es justa). ra de la raza El profesor Oncken de la Universidad corazón del de Heidelberg, declara crudamente: «El destino de las grandes naciones es cosa da. demasiado importante paso, y el y colocada demasiado alta, para que éstas no se hallen obligadas a no conoce pisotear la autonomía de los pueblos pequeños Bethmann que no son capaces de protegerse a sí mismos. , sin duda • ~a8e: «Allí il .> y Maximiliano Harden pregunta: «iDe qué lado está el derecho? Sí, si no en cues- se tratara de otra cosa, podría uno contentarse con seguir el consejo de los imbéciles y llevar las grandes controversias Jría de la ría al peso necería al -----._- .~ •.. .. ' \,J internacionales ante el tribunal supremo de la Europa. Pero la razón, en el caso presente, no es más que demencia. Preguntad al roble quién le ha dado el derecho -~- . j de elevar su copa más alta que el pino o el abeto, el abedul y la palmera. Citadle ante el are6pago que presiden bocas desdentadas y pedantes. En el follaje del árbol resonará como una tempestad: «Mi derecho es mi fuerza •. El derecho que ha recibido cada pueblo, en su bautismo, de vivir, de desenvolverse, de crecer hacia el cielo, no compete a ningún juez). «(¿De qué lado está el derecho'? Del lado donde está la [uerea», público se halla e nobles aspiracioD un día reunidos, los respectivos ~ paz, para organ~ gales de reso1vel y posibles contli sido más que UI generosa que 1 tener la en los Yo voy máf sión, de tiraD se ha desenv Excmo. Señor, Señoras y Señores, llego a un punto en que no es lícito prolongar por más tiempo vuestra fatiga, sin cometer abuso grave de benevolencia. Habéis visto, bien o mal expuesto, más bien mal que bien, por ser la exposición obra mía, cuál es el sentido de las dos teorías que, acerca de la justicia, hoy combaten, llevando su que- rella hasta los campos de batalla; la doctrina que funda el derecho en la razón y la que pone el derecho en la sinrazón de la fuerza. Ahora a vosotros toca decidir sobre cuál de las dos debe estimarse más cierta. Yo por mi parte renuncio a una discusión que me llevaría muy lejos. Y en cuanto a establecer conclusiones ¿quién podría hacerlo? Dicen hoy las gentes, y de ello parecen estar convencidas, que el derecho internacional se desenvue11 de los pueblo que siempre nunca, se 8 entre hombr' internacioDa clamar, sine tituído, púb Digérasf terrestre d y llora, eu: tenta al v animal sal pasiones en el 1 UI se haUa fuego J nacer, c~ ----44- ~I ~ // --_~-- '--"- _. 0_. le el pino o el público se halla en quiebra; Citadle ante el nobles s desden tadas un resonará como mi fuerza». aspiraciones de los pueblos civilizados, día reunidos, los respectivos El por la delegación J ~rse, de crecer lingún juez». gales de resolver, y posibles oficial los medios jurídicos sin violencia, conflictos generosa tenerla sión, entre los Estados, que nunca no han tuvo realidad ... ni podrá en los siglos de los siglos. rolongar por meter abuso ndo su quela doctrina y la que ~ . ~ , rto 8 esta- acerlo? ) parecen trnacional ->- '1 que nunca, an te la «ley del más fuerte», siempre ha imperado, se aplica internacional que, acerca más de los pueblos; entre hombres, n obra mía, y, hoy, bajo el cual toda la vida social y política nunca, to, más bien discusión y de violencia, de opre- se desenvuelve que re cuál de de tiranía se ha desenvuelto, lores, llego a 18 fuerza. y le- las diferencias Yo voy más allá. Ante el régimen 1 de sido más que un sueño, una utopia, una ilusión ho? Del lado i de en conferencias gobiernos, paz, para organizar pueblo, en su que todas aquellas sin y, piedad hoy, más que a toda relación no es ya la quiebra del derecho público lo que habría que pro- clamar, sino el fracaso de todo el derecho cons- tituído, público o privado, interno o externo. Digérase que en el (ron tispicio de esta cárcel terrestre donde la humanidad miserable, gime y llora, cuando no lanza gritos de cólera impotente al verse animal salvaje, encadenada a sus brutales pasiones malvadas; en el umbral se halla fuego escrita y sangre a sus instintos creyérase de este apetitos y a sus que también mundo con indelebles y pesa sobre nacer, como un terrible de aquí, de amarguras, caracteres nosotros, de ya al anatema, aquella fatídica -45- j SI AMAIS «Lasciati ogni esperanza voi CM en- leyenda: A DIOS 80BJ )iO COMO A voSOTR trate» que el genio del filósofo poeta creó para los condenados a pena irremisible. ¿Será esto así? ¿Habrá que resignarse en perenne esclavitud? a morir luchando que resolverse para conquistar Yo no creo, la humanidad ¿Habrá Señores, a vivir la libertad? que el porvenir se encierre SeñOres, habü en un tan acto solemne de de triste dilema. de una religión santa consagré diando incansable la razón de Bien y la Verdad mis desvelos, estu- del derecho, tengo fe, espero justicia triunfará al fin, en el mundo Señores, el poder irresistible vez, la fuerza grande En mí ha' Mas como que nada uab como mi confianza yéndome la duda, creencia, no por eso de los hechos, me hiciera vacilar traen mi perdería la Para este caso guardo, como un tesoro, fondo de mi espíritu, mi fe inquebrantable cristiano; y bastará suerte reservada los hombres-EL con en el de sobre el recuerdo eternamente en fecha memorable, esperanza. a tranquilizarme al hombre promesa redentora, dola también en de las ideas. Pero si, alguna abrumadora renovada, la de la que, hizo el Dios Mártir, sellansangre: abortar el ten: y será un hecho es mi convicción de derecho, de leeros, el di: la idea de la de la paz perpetua. Grande, hombre que, Ahora me J rigores de la a fe en el dogma que profeso, y, por que «HALLARÉIS-dijo a CAMINODE VUESTRASALVACIÓN -46- -- A tal fin, he ha sido inútil. tengo el reinado ----.--- a la cual, desde muy joven, en el templo sagrado de la ciencia - patro do gran cantid2 Sacerdote --- tan te: EL 1 1 - - '-7 ~ voi che enSI AMAIS A DIOS SOBRB TODO, y A VUBSTRO PRÓ,JI- poeta creó para )le. HO COMO A VOSOTROS MISMOS». lignarse a vivir que resolverse . la libertad? Señores, habíame propuesto tratar en este J 1 porvenir de acto solemne de una cuestión científica impor- in tan triste tante: El patronato penitenciario. A tal fin, he trabajado con empeño acopian- lta a la cual, do gran cantidad de materiales. svelos, estu- Ahora me percato de que toda mi labor yla Verdad ha sido inútil. del derecho, de leeros, el discurso no puede continuar. Los , y, por que rigores de la actualidad inexorable han hecho idea de la d Después del exordio que acabo abortar el tema. un hecho En mí ha vencido el hombre al catedrático. Mas como nada podía enseñaros, sospecho ción como que nada habréis perdido con el cambio. 11lanza en si, alguna lb: ~hos, tra; DICHO lar en mi ~ ISperanza. ro, en el .. ntable de sobre la ~ :J~ lo de la J Ida, que, " sellán-dijo a ~VA.cI6N I - I I __ _----------------- . ... -47- -......,. ----_. ~