Amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen, para ser hijos de vuestro Padre del cielo (Mt 5,44-45) Rezad así: Padre nuestro del cielo, proclámese que tú eres santo... Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque esos van a ser saciados (Mt 5,6) Si perdonáis a los demás, también vuestro Padre del cielo os perdonará (Mt 6,14) Dichosos los limpios de corazón, porque esos vana ver a Dios (Mt 5,8) Este es el mandamiento mío: que os améis unos a otros como yo os he amado (Jn 15,12) Vosotros sois luz del mundo y sal de la tierra (Mt 5,14) El Espíritu de la verdad os irá guiando en la verdad toda (Jn 15, 13)