No Descuidemos los Detalles

Reflexión
No Descuidemos los
Detalles
un solo punto decimal. Robert de
Vicenzo perdió un torneo de maestros
porque firmó, sin tomarse el tiempo de
He aquí la historia de un símbolo que
debería marcar, no solo el origen y la
historia de un país, sino sus acciones
y actitudes presentes, y futuras...
verificar, su tarjeta de puntos en la que
Nunca
falta de un clavo, la herradura se
deben
descuidarse
los
detalles, ni escatimarse ese esfuerzo
adicional,
esos
cuantos
minutos
demás, esa palabra suave de alabanza
o agradecimiento, esa entrega de lo
mejor que uno puede hacer.
Maestro, estudiante, obrero de una
fábrica,
vendedor,
administrador,
padre de familia, entrenador, atleta,
conductor
de
taxi,
operador
de
elevadores, médico, abogado –no
importa qué retos se acepten en esta
vida, qué tareas deban desempeñarse
para ganarse el pan de cada día, nunca
deben descuidarse los detalles.
Es notorio que estamos viviendo en
una era que parece ir más rápido que
la velocidad de la luz, y en nuestro
mundo apresurado es fácil caer en el
hábito de tomar atajos, de pasar por
alto algunas de nuestras obligaciones,
cuando pensamos que nos puede
resultar. Olvidamos las lecciones de la
historia y las advertencias de los
hombres
sabios.
Descuidar
los
detalles, en cualquier cosa que uno
esté
haciendo,
puede
resultar
desastroso.
Edison perdió una valiosa patente
porque inadvertidamente colocó mal
había un puntaje incorrecto. Y estoy
seguro de que usted alguna vez recitó
el adagio de Benjamín Franklin: “Por
perdió; por falta de una herradura, el
caballo se perdió; por falta de un
caballo, el jinete se perdió, y por falta
de un jinete la guerra se perdió”.
Es evidente que el sueño de todos
nosotros es encontrar algo que hacer
en este mundo, un trabajo que nos
guste tanto que estaríamos dispuestos
a
hacerlo
de
Desafortunadamente,
gratis.
esto
no
le
sucede a muchos y por eso la mayoría
de nosotros, aburriéndose cada vez
más
de
su
tarea
en
la
vida,
gradualmente dejamos de hacer el
mejor esfuerzo… Los detalles pasados
por alto o manejados sin cuidado, a
menudo pueden provocar problemas
mayores
avancemos.
que
impedirán
Somos
una
que
creación
especial de Dios. Deberíamos, por lo
tanto, hacer que lo que fluya de
nosotros, bien sea actos, objetos,
esfuerzo
amabilidad,
o
nunca
sea menos de lo
mejor que uno puede
dar; es decir, no
deberíamos
descuidar
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los
Reflexión
detalles.
Un ejemplo muy bueno de esta verdad
haberse ahorrado pues, hasta donde
tan sencilla pero poderosa, se yergue
podía saber, nadie vería nunca la parte
en lo alto de la Isla de la Libertad en la
superior de la cabeza de la estatua.
Bahía de Nueva York. Si alguna vez
Bartholdi estaba bien consciente de
va usted a la ciudad de Nueva York y
que
dispone de unas cuantas horas para
valientes podrían alguna vez mirar a la
disfrutarlas, no se vaya sin antes
estatua desde arriba, y con toda
realizar uno de los varios viajes en
seguridad nadie hubiera sabido nunca
helicóptero que salen de la calle
si los mechones de pelo habían sido
Treinta y Cuatro Este en East
modelados y pulidos meticulosamente.
River. Cuando llegue finalmente a la
Sin embargo, el maestro artesano no
hermosa Estatua de la Libertad que
tomó ningún atajo, ningún camino fácil.
se levanta imponente en medio de la
¡Cada mechón de cabello, cada rizo,
bahía,
está en su sitio!
entonces
preste
especial
sólo
unas
cuantas
gaviotas
atención, pues le espera una sorpresa.
La mole de cobre con estructura de
Así que recuerde: no importa lo que
acero de la Dama Libertad destaca a
los demás piensen, pero sí es de
más de noventa metros sobre el nivel
primordial importancia lo que uno
del mar. Mientras el helicóptero da
piensa de sí mismo. Usted nunca
vueltas
le
podrá hacer lo mejor si está tomando
recomiendo que mire la parte superior
atajos y evadiendo responsabilidades.
de la cabeza de la estatua para que
Usted es alguien especial. Debe
observe que cada mechón de cabello
actuar como tal y tratar a los demás de
se elaboró esmeradamente hasta el
la
mínimo detalle, al igual que todas las
descuidarse los detalles!
demás partes de su bata y de su
Así que aunque crea que nadie le
cuerpo.
observa… trate de hacerlo todo con
cada
Ese
vez
más
delicado
cerca,
peinado
misma
forma.
¡Nunca
metálico en la parte superior de la
amor, como para Dios.
cabeza indudablemente requirió de
¡Que tengas un bello día!
deben
muchas semanas adicionales en el
taller parisino de Auguste Bartholdi,
semanas que el gran escultor podía
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